La cromatografía líquida de alta resolución (HPLC) es la técnica analítica de separación más
utilizada, con ventas millonarias cada año tanto de equipos como de consumibles. A comienzos del año 1903, el botánico ruso Mijaíl Tsweet usó columnas de adsorción de líquidos para separar pigmentos vegetales (por ejemplo, clorofilas). Las disoluciones se hacían pasar a través de una columna de vidrio rellena de carbonato de calcio, que finamente dividido de un material poroso que interacciona de forma diferente con los componentes de la mezcla, de forma que éstos se separaban en distintas bandas coloreadas a lo largo de la columna. Los primeros equipos de cromatografía de gases aparecieron en el mercado a mediados del siglo XX. A su vez, la cromatografía líquida de alta resolución (HPLC: High pressure liquid chromatography) comenzó a desarrollarse en los años 1960, aumentando su importancia en las décadas siguientes, hasta convertirse en la técnica cromatográfica más empleada. Sin embargo, esto se irá modificando con el paso de los años
OBJETIVOS
Identificación de las partes de un HPLC
Reconocimiento de la funcionalidad de las diferentes partes de un HPLC