Este problema no se soluciona de la noche a la mañana pero hay
maneras de acabar con esta situación. El Ministerio de Salud y las entidades están trabajando en varios frentes: acelerar la venta de saludcoop y sus activos; hacer un préstamo a fosyga que inicialmente lo pondrían a tono con los nuevos criterios de habilitación de las eps ; darles confianza a los prestadores y salirse de unos 200 municipios –pequeños y medianos y entregarles los afiliados a otras EPS que operan mejor. Como dicen varios expertos, es necesario adelgazar la empresa y llevarla a 4 o 5 millones de afiliados. Y asi la participación del Estado en el sector salud dejaría de ser desastrosa y aunque no es un buen negocio vender si se le daría una solución al problema.