La administración del tiempo: es uno de los recursos más apreciados.

Sin embargo, se trata de un

bien que no se puede ahorrar, sino que pasa, no retrocede y es imposible de recuperar.

Optimización del tiempo: para optimizar el tiempo se debe tener en cuenta lo siguiente:

Planificación: Una lista de "tareas" ayuda a mantener centrado en tus

responsabilidades así que no hay tiempo muerto ni improductivo

Priorización: Organizar el día según las prioridades te permite realizar las actividades
más importantes.

Organización: es una de las mejores maneras de evitar perder el tiempo