Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
También llamado fenecimiento normal. Cabe recalcar que por el hecho de existir un
matrimonio se constituye la sociedad de gananciales es lógico que esta termine cuando
el matrimonio fenezca. Este fenecimiento ocurre regularmente por la muerte de uno de
los cónyuges (art. 318, inc. 5).
Según la doctrina, la extinción del vínculo conyugal puede también ocurrir por otras
causales: la invalidez o divorcio. En estos dos casos es obvio que la sociedad de
gananciales no puede seguir subsistiendo, desde que el vínculo que le dio origen quedó
inexistente o se disolvió. El fenecimiento regular abarca a todos aquellos supuestos de
extinción del vínculo conyugal. Así pues, tenemos los siguientes supuestos: (Varsi
Rospigliosi, 2011)
Según el artículo 284 del Código: “El matrimonio invalidado produce efectos civiles
respecto de los cónyuges e hijos si se contrajo de buena fe, como si fuese un
matrimonio válido disuelto por divorcio”. Una interpretación lógica nos lleva a
determinar que el cónyuge de mala fe pierde los gananciales, sin embargo no se
precisa el destino de estos ni a quien le serán entregados. Se precisa hacer una
distinción sobre la situación del cónyuge de buena fe de la del malicioso.
2.2.2.- DIVORCIO:
2.2.3.- MUERTE:
Pues ya sea por causal o mutuo acuerdo. Así mismo se suspende la vida en
común, durante la cual estuvo en vigencia el régimen de gananciales, es así que
este no puede continuar, no obstante mantenerse el vínculo matrimonial. La
separación de cuerpos extingue la sociedad de gananciales más no el vínculo
conyugal, sino que supone un decaimiento de este.
CONCLUSIONES:
Bibliografía
Arias Schreiber, M. (2002). Exégesis del Código Civil Peruano. Lima: Gsceta jurídica.