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EL MODELO DEL SISTEMA DE EDUCACIÓN EN FINLANDIA

ALUMNO Y PROFESOR

1. Finlandia quieren que los alumnos accedan al conocimiento con entusiasmo y eso,
sólo, se logra si llegan a ser, plenamente, protagonistas de su aprendizaje: “El
profesor no está allí para hacerlo todo: él organiza y ayuda a los alumnos a aprender”.
2. Al profesor se la pide aún más: crear situaciones de aprendizaje variadas y
estimulantes, en vez de imponer, con autoridad omnipotente, un conocimiento.

LIBERTAD DE ELECCIÓN DELIMITADA

1. A los alumnos se les concede una gran libertad de elección para organizar sus
estudios. En realidad esta libertad es progresiva, y está en relación con el grado de
madurez de los alumnos. A lo largo de la educación del “ciclo fundamental” (entre 7 y
13 años) los estudios son iguales para todos. Los alumnos comienzan el aprendizaje del
inglés a los nueve años, a los once años pueden elegir otro idioma; entre el alemán, el
francés, el sueco y el ruso.
2. A partir de los trece años, se introducen en algunas materias opcionales,
diferentes según los colegios, que definen sus propuestas de acuerdo con las
municipalidades. Cada colegio puede elegir la opción en la que hará hincapié o la
opción que le dará especificad. La elección puede hacerse entre Educación Física,
Arte, Educación Tecnológica, Música y Lenguas Extranjeras. El alumnado mínimo para
abrir y realizar una opción es de dieciséis alumnos. En el Liceo los alumnos pueden
componer enteramente su programa inscribiéndose en cursos cuya relación está
disponible en la red informática de su establecimiento y accesible por Internet.
3. Todo concepto de repetición global, que implique pasar de nuevo materias, inclusive las
ya aprobadas, está eliminado definitivamente. Por el contrario, los alumnos pueden
seguir un programa intensivo en las asignaturas que ya aprobaron, como, por
ejemplo, en Música o Ciencias.
4. El nivel alcanzado por los alumnos en Música es notable, ya que en el Liceo
consiguen presentar espectáculos de gran calidad, no muy lejos del estándar
profesional.
5. La amplia autonomía de la que se benefician los alumnos de secundaria
constituye, indudablemente, en una excelente preparación para los estudios
superiores.

UNA EVALUACIÓN MOTIVADORA: ¿SE PUEDE COMPATIBILIZAR EVALUACIÓN


CON MOTIVACIÓN?

1. Hasta los nueve años los alumnos no son evaluados con notas. A esa edad, los
alumnos son evaluados por primera vez, pero sin emplear cifras numéricas.
Después no hay nada nuevo hasta los once años.
2. Las notas expresadas en cifras numéricas aparecen recién en el sexto año,
cuando los niños alcanzan la edad de 13 años. Están proscritos el infamante 2 y
las notas muy bajas, pues ¿qué interés puede haber en construir una escala de la
ignorancia? En cambio, se pueden distinguir niveles de perfección, en la cual un
conocimiento puede ser adquirido en diferentes niveles de logro; por consiguiente, eso
es lo que, en definitiva, significa la escala de notas entre 5 y 9.
3. Lo importante es que los alumnos tengan la sensación de que son buenos en
algún campo o en alguna área específica. Guiado por este principio, la evaluación
pierde su carácter competitivo y angustiante y, por el contrario, puede convertirse
en un medio que los estimula y motiva para ubicarse en una gradiente de progreso
adaptada a su gusto y ritmo, a condición eso sí, de que los alumnos lo hagan de
forma comprometida y responsable, a la vez.

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