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CASO FORD PINTO

INTEGRANTES:

 HUAMANI QUIO OSCAR EMILIO


 LLERENA VILLENA JOSE CARLOS
 SUYO MARIN PATRICK GUSTABO
 CHOQUE PACSI ERICK ANTHONY
 HUILQUA QUISPE MIGUEL

INTRODUCCION
Los grandes tropiezos en la industria del automóvil son muy variados, pero sin duda alguna, uno
de los casos más sonados es que le ocurrió al gigante norteamericano Ford con su modelo Pinto.
Un coche que llegó al mercado en 1971 para reflotar a la firma del óvalo en un contexto en el
que las marcas japonesas (especialmente Toyota con el nacimiento del Corolla) u otras europeas
como Volkswagen estaban haciéndose con una amplia cuota de mercado en el segmento de los
compactos.

Y es cierto que Ford lo consiguió, pues hizo del Pinto un superventas alcanzando las 400.000
unidades vendidas -cifras propias de icónicos modelos como el Mustang o el Falcon- en su primer
año de comercialización, aunque lo lograron pagando un precio altísimo: tasando la vida de sus
clientes.

Lee Iacocca, director general de Ford por aquel entonces, decidió que la mejor manera de
contrarrestar el auge de sus rivales era construir un coche con un peso bajísimo (no debía
superar las 2.000 libras, unos 907 kg), que no costase más de 2.000 dólares y cuya producción
se llevase a cabo en 25 meses, cuando por aquel el periodo de fabricación se estimaba en unos
43 meses.

El resultado fue un coche que salió de producción con dos graves defectos de serie: por un lado,
el depósito, situado en el eje trasero - una práctica habitual en aquellos años por más fabricantes
de automóviles- hacía explotar con suma facilidad los coches puesto que el depósito de gasolina
se rompía cuando el coche sufría un pequeño impacto por detrás dado que sus débiles
estructuras no impedían que los tornillos del diferencial terminasen clavándose en el depósito
al desplazarse. Así el combustible acababa derramándose y provocando un gran incendio al
saltar la más mínima chispa tras el impacto; por otra parte, un choque por detrás a unos 40 km/h
dejaba el vehículo como un acordeón y bloqueaba las puertas. Una combinación que hacía del
Ford Pinto una terrible trampa mortal.
Al principio de 1968 cuando se tomó la decisión de combatir la competencia extranjera en el
mercado de los autos pequeños, específicamente los alemanes, pero también después de dos
años de lucha interna entre el entonces presidente Semon "Bunky" Knudsen y Lee Iacocca quién
había ascendido rápidamente dentro de la compañía por su éxito con el Mustang. Lacocca jugó
fuerte la lucha competitiva según su propio juego mientras Knudsen argumentaba que había
que dejarles tener el mercado de autos pequeños y que Ford debía concentrarse en el mercado
más rentable de modelos grandes y medianos.

La decisión final estuvo en las manos del entonces CEO Henry Ford III, quién no solo estuvo de
acuerdo con Iacocca sino que lo promovió a presidente luego de la subsecuente renuncia
forzada de Knudsen.

DESARROLLO:
Lacocca quería el Pinto en los showrooms para la presentación de los modelos 1971 lo que
requeriría el período de planeamiento de producción más corto en la historia automotriz hasta
el momento. El típico "time span" desde la concepción a la producción de un auto nuevo era
más de 3 años y medio. Lacocca sin embargo quería lanzar el Pinto en sólo 2 años. Bajo
condiciones normales, diseño de chassis, estilo, planeamiento de producto, ingeniería avanzada,
testeo de componentes, etc. todo fueron completados o casi completado antes del
equipamiento o tooling de las fábricas de producción. Sin embargo, debido a que el tooling tenía
un marco de tiempo fijado de alrededor de 18 meses, algunos de estos otros procesos fueron
hechos más o menos competentemente. Como una consecuencia, cuando fue descubierto a
través de un crash testing que el tanque de nafta del Pinto a menudo se quebraba durante el
impacto en la parte trasera, fue demasiado tarde (en otras palabras, demasiado costoso) para
hacer algo acerca de eso en términos de rediseño.

Se estima que al menos 60 personas murieron entre llamas causadas por accidentes en los que
intervinieron los Pintos, y que un número por lo menos dos veces mayor sufrió quemaduras
graves.

Entre 1971 y 1976, Ford pinto fue responsable de un número de muertes relacionadas con
incendios por lo que recibió alrededor de 50 demandas en relación a accidentes como resultado
en 1978, Ford fue obligado a retirar todos los Pintos que fueron producidos entre 1971 y 1976,
para modificaciones en los tanques. Esto, porque los automóviles fabricados a partir del año
‘77 estaban regidos por una nueva normativa de seguridad.

La gerencia de Ford decidió , que esperar los accidentes y demandas de los afectados era mucho
más barato que llamar a los usuarios para corregir el error del diseño, ya que esta opción
costaba el triple que la otra alternativa. Es así, que decidieron asumir la responsabilidad ante
cualquier demanda que pudiera surgir al respecto.

En 1978 un caso particular fue el del 10 de agosto de 1978, cuyas víctimas fueron tres jóvenes.
Sufrieron un accidente donde 1 de ellas falleció, Ford fue llevado a juicio y Durante el proceso
judicial por el accidente de las tres jóvenes, se revelaron los resultados de los ensayos de
choque realizados al Ford Pinto. De los once automóviles analizados, ocho habían fallado en el
test de impacto trasero a una velocidad promedio de 45 km/h. Estos ocho vehículos poseían el
estanque de bencina estándar. Los otros tres que habían pasado la prueba, tenían un dispositivo
adicional que impedía que el estanque se rompiera. Este dispositivo costaba 11 dólares. Pese a
los resultados del estudio, Ford construyó el Ford Pinto con el estanque sin el dispositivo El
momento más tenso del juicio fue cuando apareció un memorándum interno de Ford, el cual
indicaba que si no utilizaban el dispositivo se estimaba que morirían 180 personas, quedarían
180 con heridas graves y 2,100 vehículos quemados. El costo de un muerto era de 180 mil
dólares, el de un herido grave, 67 mil dólares y el de reparar un auto quemado, 700 dólares.

Multiplicando estos costos, el total asciende a 49.5 millones de dólares, cifra muy inferior a los
137.5 millones que costaba agregar el dispositivo de seguridad al estanque.

El tipo de análisis que los gerentes de Ford utilizaron en su estudio de costo - beneficio es una
versión de lo que se conoce tradicionalmente como utilitarismo. Este es un término general
para cualquier perspectiva desde la cual las acciones y políticas han de evaluarse con base en
los beneficios y costos que impondrán a la sociedad. En cualquier situación, la acción o política
“correcta” es la que produce el mayor beneficio neto o el menor costo neto (cuando todas las
alternativas tienen únicamente costos netos).
Dilema Etico
Desde el punto de vista ético el lanzamiento del Ford pinto al mercado, sabiendo de sus
defectos en la carrocería que ocasionaba el bloqueo de las puertas al recibir un impacto en la
parte trasera del modelo pinto provocando la explosión del auto por el mal posicionamiento del
tanque, únicamente por tomar ventaja sobre su competencia en cuanto al tiempo de
lanzamiento del nuevo modelo , fue una decisión incorrecta desde el punto de vista ético.

Alternativas de solución al dilema ético


 Retirar del mercado la unidades vendidas.
 Hacer publico los defectos del Ford pinto y corregirlos.
 Asumir únicamente la responsabilidad de los accidentes causador por los defectos.
 Devolver el dinero a los compradores del Ford pinto.
BIBLIOGRAFIA

Enlaces de páginas que ayudaron como fuente de información para el informe.

 https://www.eleconomista.es/ecomotor/reportajes/noticias/7896433/10/16/Ford-
Pinto-el-coche-que-explotaba-con-un-leve-impacto-por-detras.html.
 http://fordpintoeticacorporativa.blogspot.com/p/descripcion-del-tema.html
 https://www.diariomotor.com/noticia/ford-pinto-historia/
 http://eticafordpinto.blogspot.com/
 http://eticaparalosnegoci2013.blogspot.com/2013/04/caso-ford-pinto.html

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