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Articulos La quiralidad y el origen de la vida E. Aguilar-Ovando y A. Negron-Mendoza Instituto de Ciencias Nucleares, Universidad Nacional Autonoma de México El origen de la vida en nuestro planeta y su evolu- cién constituyen un enigma que ha ocupado al hombre desde el comienzo de su historia Se ha propuesto que el surgimiento de la vida re- quirié de tres etapas: Evolucién Quimica o Sintesis Abi6tica, Evolucién Prebiolégica y Evolucién Biol6. sica (Negrén-Mendoza y Albarran, 1993}. Un tema estrechamente relacionado con el enig- ma del origen de la vida es la homoquiralidad, es decir, la presencia de un tipo particular de mc las como los aminoécidos que tienen propiedades 6pticas especificas y que forman parte de las molé- alas presentes en los seres vivos La quiralidad es la propiedad geométrica de un objeto {en este caso, una molécula) de no ser superponible con su imagen especular, por lo que carece de ejes de rotacién. impropios. En estereoquimica {la parte de la quimica que estudia los compuestos con la misma férmula molecular pero di- ferentes férmulas estructurales, por lo que se concentra en la disposicién espacial de los étomos en las moléculas 'y c6mo esta disposicién afecta sus propiedades y reactivi- dad], se les llaman estereoisémeros, Cuando los estereoi- sémeros son quirales se les denomina enantiémeros 0 is6meros dpticos. Los enantiémeros poscen las mismas propiedades fisicoquimicas y sélo se comportan de mane- 4 | ea HEE Tsémeros ih : ie Hom Hn [edonsuan fia ol udtdr lest want (stereoisneroe] eae eae Nee) \ ead [ares Troe] [caters] f \ HC 4 ferentes pos de isimeros, nchuyendoenantiémeos, Sociedad Mexicana de Fisica 17 Articulos H H € BE oe espelo x ie Var wo 1a diferente frente a un entorno quiral, como la presencia de luz polarizada {cuyo plano los hace rotar en sentidos ‘opuestos) ¥ de otros compuestos quirales (enzimas meta- bélicas, por ejemplo}. Poseen un centro estereogénico (0 varios) constituido por un stomo asimétrico (tipicamen- te, el Atomo central -un carbono- con cuatro sustituyen- tes dif Asiun compuesto aquiral es el que no presenta quirali- dad y un compuesto homoguiral es cl que presenta una sola quiralidad (es enantiopuro} Se afirma que todos los seres vivos son homoguirales porque se ha obscrvado esta condicién constante en cier- tas moléculas orgénicas fundamentales en todos los siste- mas biolégicos conocidos {incluyendo a los virus y a los priones}. En particular, aminoacids y azticares, que son bloques de construceién de protefnas y material genético de los organismos vivos y siempre se encuentran en con- figuraciones especificas: L- para los aminodcidos y D-para los azticares, en donde Ly D denotan tipos de moléculas de-un tipo de quiralidad especifico. El cusndo, cémo y por qué de esta homoguiralidad de los seres vivos, sigue estando entre los misterios sin resol- ver relacionados con el origen de la vida, pero hace evi- dente que ésta es més que una consecuencia de la mera coleccién de elementos biogénicos en un sistema y parece entes en una molécula tetraédrica) 18 ser mas bien producto de la organizacién y del di- namismo en la interaccién de dichos elementos. Por lo anterior, la biisqueda del origen de esta cuali- dad quimica en estudios de evolucién es funda mental, Se han considerado hipotesis biéticas y abidticas del origen de la homoquiralidad. Las primeras se refieren a la posibilidad de que la homoquiralidad fuese adquirida después del surgimiento de la vida: podrfan haber existido primero organismos tanto D- como L- y unos se habrian extinto por algiin motivo particular (como la existencia de una enzi- ‘ma que apareciera en el desarrollo de la evolucién y eliminara sélo los organismos de su propia quirali- dad, por lo que sobrevivirian tinicamente los ‘opuestos, por ejemplo}. Sin embargo, estas hipéte- sis han perdido fucrza al no hallarse evidencia de ningiin organismo primitivo que conserve restos de ‘un metabolismo que incluyese los bloques de cons. truccién de quiralidad opuesta a la actual. En este mismo grupo cabe la hipétesis de la Panspermia, segtin la cual organismos vivos forma- dos ya por moléculas homoguirales fueron trans- portados desde otro sistema solar hasta la Tierra, idea originariamente propuesta por Arrhenius (1908} y actualizada por Crick y Orgel {1973}, quie~ nes basaron sus argumentos en la anémala abun- dancia de molibdeno que presentan los organismos terrestres, lo que s6lo seria explicable por su pre- sunta procedencia extraterrestre, Sin embargo, esta hhipotesis no resuelve el origen de la bioquiralidad, sino que solamente sitda el problema fuera de nuestro planeta. Por estas razones se han formulado més hipéte- sis para describir el posible origen prebistico de la homoquiralidad biolégica. Las teorias abidticas postulan, por su parte, que la aparicién de la selec- cin y homogeneidad quiral es anterior al origen de la vida, Es decir: cuando la vida comenzé, ya slo existia en el medio ambiente un enantiémero qui- ral, seleccionado previamente por algtin mecanis- mo abiético. Algunos trabajos te6ricos [como los de Goldanskii y Kuzmin, 1988} y otros experimen- tales (como el de Joyce et a., 1984, quienes a partir Bol. Soc, Mex. Fis. 29-1, 2015 Articulos de experimentos sobre oligomerizacién de nucles- tidos concluyen que la presencia de moléculas Ly D al mismo tiempo en un sistema impide la forma- cin de polinuclestidos bases de un sistema auto- rreplicativo-, lo que hace necesaria la existencia previa de moléculas de una sola quiralidad para que éstos se ensamblen} refuerzan la verosimilitud de esta linea de pensamiento. Los estudios de origen de la vida y evolucién qui- mica relacionados con el desarrollo de quiralidad en moléculas orgénicas datan de hace aproximada- mente 80 afos. En este tiempo se han dado miilti- ples hipétesis sobre los mecanismos que pudieron permitir la aparicién de un sistema homoquiral, pero los procesos fisicoquimicos exactos atin si- ‘guen siendo polémicos, Esas hipétesis se pueden agrupar en dos tipos de enfoque: casuistico y deterministico. La diferencia entre uno y otro estriba en considerar la existencia ono de una causa especifica de rompimiento de la simetria de un sistema racémico de moléculas qui- rales (aquel que esté compuesto por proporciones iguales de los enantiémeros, que constituye un sis- tema en equilibrio y se obtiene tras cualquier sinte- sis a partir de elementos aquirales). En el primero se considera a la casualidad como responsable de este inicio de homoquiralidad, seguido de procesos diversos de amplificacién; mientras que en el se- gundo se consideran causas locales espacial o tem- poralmente hablando} 0 universales (constantes} del rompimiento de la simetria. De este modo, algunas de las principales hipotesis, que se han planteado son: — Variaciones estadisticas: basada en el hecho de que una mezela racémica no es un sistema esté tico en el que no en todo momento existe exacta ‘mente un 50% de enantiémeros Lo Dy un 50% del cnantiémero contrario, esta hipétesis plantea que una ruptura espontanea de la simetria debi- daa las fluctuaciones estadisticas a favor de un enantiémero, reforzada por la amplificacién au- tocatalitica, podria ser la base para el origen de la homoguiralidad en un sistema. Sociedad Mexicana de Fisica = Liz a cularmente polarizada: propone a a fotdlisis, enantioselectiva como la causante inicial de un exceso enantiomérico. Se basa en los resultados obtenidos en. los diversos estudios, como el de Kuhn y Braun en 1929, quienes mostraron que es posible una fotdlisis parcial de una mezcla racémica al irradiarla con luz ul- travioleta citcularmente polarizada, originando asi un exceso enantiomérico en el residuo de la mezcla irradia da, Otros trabajos, como los de Balavoine et al., (1974] Nordén (1977) y Flores et al, (1977, han mostrado que los aminodcidos pueden ser sometidos a fotodestruc- ign enantiosclectiva si se les irradia con luz ultraviole- ta circularmente polarizada, debido a las diferencias, cexistentes en los coeficientes de extincién entre las for- ‘mas enantioméricas, Ademés de la fotdlisis enantiose- lectiva, la Iuz circularmente polarizada puede también ser empleada para efectuar una sintesis enantioselecti- va contando con reactantes aquirales, donde la luz cir- cularmente polarizada es el tinico elemento quiral. = Superficies minerales: Propone que la adsorcién pref rente de enantimeros en las superficies cristalinas de minerales presentes en épocas primitivas, como cuarzo, caleitas (CaCO, arcillas, etc., pudiera haber iniciado la acumulacién enantioselectiva de compuestos quirales, En el caso del cuarzo y la calcita (ambos minerales con estructuras cristalinas quirales|, la capacidad de estos para separar o resolver disoluciones racémicas ha sido bien comprobada (desde los trabajos de Tsuchida et al 1935, quien logré la resolucién de sales de cobalto racé- micas; pasando por Karagounis y Coumoulos en 1938, quienes sugirieron que la adsorcién asimétrica del cuarzo podia ser la responsable del origen de la quiralidad mole- callar, idea popularizada por el cristal6grafo Bernal, 1949, 1951; y trabajos experimentales como los de Bonner y Ka- vasmaneck, 1976, con muestras racémicas de alanina [un aminoacido] expuestas a fino polvo de d- y l-euarzo que muestran cémo son adsorbidas selectivamente; o los de Hazen et al., 2001, que prueban que la capacidad de la caleita para separar enantiémeros y adsorber aminodci- dos es incluso mucho mayor que la del cuarzo}, sin em- bbargo, como fue evidenciado por Frondel (1978, exami- nando mas de 27.000 cristales de cuarzo de distintas lo- calidades, se sabe que existen tantos cristales de cuarzo 19 Articulos de una quiralidad como de otra, lo que quiere decir que cualquier efecto quiral del cuarzo, de adsorcién o catélisis seria anulado. En el caso de las arcillas y a su comprobada capacidad para almacenar moléculas orgénicas y activar sus reaccio~ nes, algunos autores [Degens et al., 1970; Jackson, 1971; Bondy y Harrison, 1979} afiaden la propiedad de interac- cidn estereoselectiva con las moléculas quirales, lo que conlleva a un reconocimiento quiral de las moléculas enantioméricas, Sin embargo, estos resultados son cues- tionados por otros autores que dudan de la validez de su protocolo experimental, debido a la baja reproducibilidad de los experimentos {Jackson, Wellner & Bondy, 1979) y destacan la controversia de la aquiralidad cristalina de las, arcillas (Brindley, 1961, Wellner, 1978), pues aunque existen algunas con cristales centrosimétricos [como la montmorillonita) y estos presentan miiltiples facctas quirales, en conjunto se hallan balanceadas dentro de cada cristal, dando un efecto global aquiral, lo que difi- culta justificar tedricamente ningtin tipo de interaccién estereoselectiva con moléculas quirales, que resulte en una capacidad de producir excesos enantioméricos signi- ficativos. Debido a estos resultados contradictorios y los de otros estudios como los de Lahav (1999), Hazen y Sholl (2003), as{ como el de De Yoreo y Dove (2004), se sigue conside- rando la viabilidad de esta hipotesis y se requieren mas prucbas para evaluarla. La combinacién de estas hip6tesis y datos recabados con diferentes enfoques permiten construir escenarios ms detallados que expliquen hasta cierto punto el origen de la homoquiralidad. Por ejemplo: el exceso enantiomé- rico hallado en los meteoritos Murchison, Allende y Mu- tray de L-aminodcidos, sugieren la existencia de un ele~ mento quital en el espacio exterior, Se ha propuesto, con base en los resultados experimentales, que la luz circular- mente polarizada proveniente de una supernova o una es- trella de neutrones fuese la causante de dicha asimetria y que, por lo tanto, la fotodestruccién quiroselectiva es el proceso mas probable para un exceso enantiomérico ini- cial en las moléculas orgénicas. Esto sittia el origen del exceso enantiomérico en las regiones del espacio exterior, donde la luz circularmente polarizada es capaz de incidir sobre las particulas y, en particular, donde la longitud de 20 onda de esta luz polarizada es del tamafio preciso para que sea absorbida por los aminofeidos (luz ul- travioleta). Esta luz ultravioleta circularmente po- larizada no Hlega a la superficie terrestre con la suli- ciente intensidad para tener un efecto significativo sobre las mezclas racémicas de aminodcidos, por tal motivo el origen césmico del exceso enantiomé- rico de las moléculas orgénicas y, en particular, de os L-aminodcidos, se sitia como una opcién pro- able, Sin embargo, no existen publicaciones que establezcan claramente la presencia de luz ultra- violeta circularmente polarizada proveniente de ‘una supernova o estrella de neutrones que pueda causar la fotodestruccién preferente de los D-ami- nodcidos. El descubrimiento de nanotubos de carbono qui- rales en el medio interestelar y en los meteoritos (como el Allende, Murchison y Murray} ha sugeri- do que ademas de actuar sobre los aminodcidos y otras particulas biogénicas, la luz circularmente polarizada puede inducir estructuras quirales que sirvan de soporte a otras. Es decir: la presencia de nanotubos de carbono en el medio interestelar re fuerza esta idea y su formacién y adhesién sobre la superficie de meteoritos permite tomarlos seria mente como candidatos para establecer estos espa- cios cuasi unidimensionales sobre los que se pue- dan polimerizar aminoacidos con quiralidad opues- taala del microtébulo quiral; lo que puede estabili- zar el exceso enantiomérico de L-aminoacidos, 0 por lo menos retrasar su racemizacién, producida por la fotolisis antes descrita ‘Una vez que se ha logrado un desequilibrio signi- ficativo en una mezcla racémica, favoreciendo la predominancia de uno de los enantiémeros sobre el de quiralidad opuesta, este ligero desequilibrio ini- cial puede ser amplificado a valores muy altos de pu- reza Optica gracias a reacciones quimicas que scan sensibles a sustratos de una quiralidad especifica, lo que da como producto de la reaccién una molécula con la misma quiralidad que la empleada para su inicio. A esta reaccién, o serie de ellas, que emplean ‘una molécula quiral como catalizador de la reaccién para originar productos moleculares con la misma Bol. Soc, Mex. Fis. 29-1, 2015 Articulos quiralidad, se le denomina autocatilisis y, puesto que sélo genera moléculas de la misma quiralidad que la molécula empleada al inicio, se le lama enantioselectiva y puede generar valores altos del exceso enantiomérico a partir de valores bajos. En conclusién, el mecanismo por medio del cual una mezcla racémica, equilibrada y por lo tanto en desorden, puede perder este equilibrio y ordenarse para generar un suficiente exceso enantiomérico para disparar una reaccién de amplificacién auto- catalitica, atin ha de ser te6rica y experimental- mente respaldado. Ademés, a la ruptura de esta si- metria le ha de seguir la racemizacién del sistema; ppor Jo que un mecanismo que mantenga este siste- ma fucra del equilibrio debe ser igualmente consi- derado, Referencias Bibliogrificas: ‘Arthenius, §. 1908. 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