Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Edad: 36 años
Sexo: Masculino
Motivo de consulta:
Fue internado en una clínica psiquiátrica después de tener una crisis
nerviosa, por más de 2 semanas; caracterizada por presentar excitación
psicomotriz, confusión mental y pensamientos suicidas.
Cuatro semanas antes había asistido a un curso de siete días sobre
desarrollo personal, organizado por su empresa. Durante el curso mostró
una excitación creciente y hablaba mucho. Conversaba con gente día y
noche y bebía excesivamente. También tuvo una relación sexual con una
mujer participante del curso. Al regresar a su casa tuvo una crisis, estaba
excitado e inquieto con estados de ánimo cambiantes. A veces se sentía
extremadamente feliz sin causa aparente, tenía planes extravagantes, se
mostraba hiperactivo y hablaba mucho interfiriendo en todo. En otros
momentos se lo veía decaído, cansado y con sentimientos de culpa y
pensamientos suicidas. Le decía a la gente que podía leer sus pensamientos
y predecir el futuro. También dijo que recibía mensajes simbólicos de
personas en la televisión, que tenía habilidades telepáticas y que había sido
elegido para una misión lo que significaba que ciertos enemigos lo trataban
de perseguir. Al mismo tiempo sentía que todo a su alrededor parecía irreal,
como si estuviera en un escenario delante de él. De noche dormía mal. De
todas formas, lograba hacer su trabajo. Sin embargo, el día antes de su
internación se quebró completamente. En la oficina se lo veía excitado y
perturbado. Anunció a sus colegas que había sido nombrado director de la
empresa, y que todos deberían hacer un viaje alrededor del mundo. Tuvo
que ser llevado a su casa y luego fue internado en la clínica.
Antecedentes: El paciente era hijo único. Su padre era jardinero en un
pueblo de provincia. Al terminar la escuela secundaria, hizo un curso de
vendedor en la industria textil y desde los 27 años fue empleado en una
empresa textil. Se casó a los 24 años y tuvo dos hijos, quienes, en el
momento de su internación, tenían 9 y 11 años. La familia vivía en casa
propia y le iba bien económicamente. Siempre había sido extrovertido,
activo y enérgico, pero muy responsable. Era ambicioso y le gustaba su
trabajo. Trabajaba en forma eficiente y su esfuerzo era apreciado por sus
empleadores.
Datos actuales: Al ser admitido, el paciente parecía perplejo y ansioso, pero
estaba completamente orientado. Se mostraba verborrágico, con fuga de
ideas y por momentos parecía responder a alucinaciones auditivas. Al día
siguiente estaba excitado y confundido. Dijo que había sido sentenciado a
muerte y que su vida estaba en peligro. Una luz que entraba por la ventana
le indicaba que estaba bajo vigilancia especial. Una estrella en el cielo era
un objeto volador no identificado que había venido a llevárselo de la tierra.
Entre el ruido de la sala distinguía voces que se burlaban y reían de él. Al
mirar televisión veía las caras y oía la música deformadas. Sentía que otras
personas podían “nadar en su mente”, sacar sus pensamientos y hacerle
sentir emociones e impulsos que no eran los de él. Por momentos se volvía
irritable y verbalmente agresivo, y hablaba incesantemente con fuga de
ideas.
Evolución: Al ser tratado con 10 mg de haloperidol por día, el paciente se
fue calmando gradualmente y después de 10 días ya no parecía psicótico.
Estuvo algo deprimido durante otra semana, después de lo cual su familia
lo consideró en su normal estado mental.
TRASTORNO DE DELIRIOS
Idea delirante de celos: Convicción delirante de que la pareja sexual es infi el. 4. Idea delirante
de grandeza: Idea delirante cuyo contenido implica una exagerada valoración de la importancia,
el poder, el conocimiento o la identidad personales. Puede ser de naturaleza religiosa, corporal
o de otra clase. 5. Idea delirante de pobreza: Idea delirante de que el sujeto ha perdido o perderá
todas o casi todas sus posesiones materiales.
. Idea delirante persecutoria: Idea delirante cuyo tema central es la convicción de que una
persona (o grupo) es ataca da, acosada, engañada, perseguida o víctima de una conspira ción.
Por lo general la naturaleza del individuo, del grupo o de la institución está relacionada con el
motivo de la persecución. A esta clasifi cación habría que añadir: el delirio de culpa (el paciente
se siente culpable y responsable de todo tipo de miserias), el delirio de Sosías o síndrome de
Capgras (el paciente cree que personas importantes en su vida están siendo usurpadas por un
impostor, aun a sabiendas de que tienen la misma apariencia) y el delirio de amor o síndrome
de Clerembault (el paciente cree que alguna otra persona está locamente enamorada de él).
Han sido descritas tres clases de tolerancia. La denominada tolerancia metabólica se desarrolla
porque el alcohol induce a los sistemas enzimáticos que lo degradan, de tal forma que a medida
que se ingiere más alcohol, aumenta su degradación metabólica.
El último tipo de tolerancia, la tolerancia psicológica, fue descrita para la morfina, e implica un
proceso de condicionamiento clásico.
3) hipótesis adaptativa,
4) predisposición genética.
mente normal, incluso en la presencia del alcohol. Esta adap tación no es necesariamente dañina
y es la causa de la tolerancia y dependencia. Si el alcohol se retira rápidamente del sistema,
habrá un tiempo de desajuste entre la retirada y la vuelta a la normalidad de las células
nerviosas.
El síndrome de abstinencia puede ser tan intenso y aversivo que los sujetos afectados
mantendrán la ingesta con el fi n de evitar estos síntomas.
La principal crítica de esta hipótesis viene de que a menudo existe una disociación entre los
síntomas de abstinencia y las recaídas y deseos compulsivos de ingerir alcohol.
EVITACIÓN DEL SÍNDROME DE ABSTINENCIA: En la primera hipótesis se postula que el uso del
alcohol se inicia por curiosidad, presión social, o por el deseo de obtener los efectos placenteros
atribuidos al consumo de alcohol. El consumo prolongado de alcohol produce tolerancia a sus
efectos, por lo que el sujeto tiene que aumentar la cantidad y la frecuencia de ingesta para lograr
el mismo efecto.
El alcohol podría ser así un reforzador sin la necesidad de recurrir a modelos donde,
deliberadamente, disfunciones putativas psicológicas o estrés fueran las causas subyacentes a
la conducta dependiente. El alcohol se bebería por su capacidad de recompensa. Los beneficios
percibidos por el sujeto explicarían la dificultad de la abstención en ausencia de los síntomas de
abstinencia.
Es un hecho conocido desde antiguo que la ingestión excesiva de alcohol provoca trastornos,
agudos o crónicos, del sistema nervioso central y en particular del cerebro. Sin embargo, hasta
el siglo xix estos conocimientos no comenzaron a sistematizarse.
Todavía hoy, no conocemos los mecanismos por los cuales el alcohol (o su metabolito, el
acetaldehído) produce los síndromes cerebrales asociados a su consumo. Tradicionalmente se
consideró que la psicopatología del alcohol no era otra que la consecuencia de la acción directa
y exclusiva de éste sobre el sistema nervioso central.
El estudio de los procesos patológicos asociados con el alcoholismo evidencia que algunas de
estas alteraciones son claramente neurológicas y definibles en función de la neuropatía
producida. Por ejemplo, la ataxia (alteración en la coordinación del movimiento) es producida
por daño cerebelar y de la protuberancia central.
sin embargo, muchos de los síndromes ligados al alcoholis mo presentan una sintomatología
neuropsicológica amplia (trastornos cognitivos, de la personalidad, afectivos) que podría estar
originada por alteraciones más o menos difusas de distintas estructuras cerebrales, pero cuya
etiología, hoy por hoy, está aún por determinar.
1. La amnesia dependiente de estado, en la que el individuo, cuando está ebrio, esconde dinero
y bebida que no puede encontrar cuando está sobrio. Sin embargo, en el siguiente episodio de
ingesta se dirige directamente al escondrijo.
2. La amnesia fragmentaria es una forma de amnesia en la que no existe una demarcación clara
del momento en el que aparece o finaliza la pérdida de memoria, y que se caracteriza por
presentar «islotes» de recuerdos preservados de los períodos que abarca la amnesia.
3. La amnesia en bloque, la tercera forma de amnesia, tiene un comienzo y un final muy bien
definidos. Cuando el individuo supera el período amnésico describe una sensación de «tiempo
perdido» sin islotes de recuerdos preservados.
f) Trastornos del sueño Hace tiempo que se vienen investigando los efectos de la ingestión de
alcohol sobre el sueño, tanto durante la intoxicación como en la abstinencia.
ón como en la abstinencia. La depresión que sobre el sistema nervioso central ejerce el alcohol
está acompañada de una disminución de la actividad electroencefalografía y de un aumento de
la amplitud de las ondas de menor frecuencia.
2. Crónicos a) Alteraciones cognitivas Aproximadamente entre un 50 y un 70% de los alcohólicos
presenta alteraciones cognitivas, Durante los primeros meses de la abstinencia las disfunciones
cognitivas aumentan en las dos terceras partes de los individuos que están en desintoxicación,
pero en la mayoría de los individuos, después de una abstinencia prolongada, estas alteraciones
se normalizan, si no total, al menos parcialmente.
b) Encefalopatía de Wernicke Este síndrome fue descrito por primera vez por Wernicke en 1885.
Se presenta en alcohólicos crónicos con una nutrición deficiente. Tiene una fisiopatologia
característica con lesiones simétricas de las estructuras cerebrales que rodean al tercer
ventrículo, al acueducto y al cuarto ventrículo.
c) Síndrome amnésico de. El síndrome amnésico de se caracteriza por un fuerte deterioro en las
funciones de la memoria anterógrada y de la memoria retrógrada, apatía, y preservación de las
capacidades sensoriales y otras capacidades intelectuales.
1. El abatimiento del humor puede desarrollarse como una reacción mental comprensible a las
consecuencias que los hábitos de beber le imponen al alcohólico.
La depresión puede tener su origen en cuadros neuroquímicos que tienen lugar como
consecuencia de la ingestión excesiva de alcohol.
3. Trastornos de ansiedad A pesar de los numerosos trabajos que indican una concurrencia de
síntomas neuróticos y trastornos del uso del alcohol (abuso, intoxicación, dependencia,
abstinencia), los datos y conclusiones varían de un estudio al otro.
4. celopatía Las dudas y sospechas patológicas respecto a la fidelidad del compañero sexual son
excusas que tanto hombres como mujeres aducen con frecuencia para explicar su dependencia
al alcohol.