Está en la página 1de 11

5.5 SELECCIÓN DE EQUIPOS DE ENFRIAMIENTO.

Una selección en un sistema de refrigeración puede estar motivado por una de las
siguientes razones:

1. Cumplir con una necesidad presente en su planta o Mercado. Son


requerimientos definidos, establecidos por un cliente o equipo de trabajo,
donde el espacio y el uso ya están determinado.
2. Mejorar los consumos de energía. Son oportunidades que busca un espacio,
ya sea por insuficiencia de capacidad energética o porque las tecnologías,
instalaciones y operación son ineficientes para lo disponible actualmente.

3. Balancear los sistemas de producción y comercialización de su negocio.


Sistemas incapaces de soportar la operación y que actúan como cuellos de
botella en el proceso.
4. Cambio de tecnología. El cumplimiento de normatividades, la inoperancia de
sistemas, el crecimiento de la necesidad, son todos motivos que conllevan a
un cambio de tecnología.

Lo primero que debemos determinar de manera correcta es el valor de la carga


térmica que requiere mi necesidad. Existen en la actualidad muchos software que
permiten determinar las cargas térmicas. Todos ellos, por medio de algoritmos,
calculan la carga térmica de acuerdo a unos datos de alimentación o Input Data.

Lo importante en este paso no es ingresar los datos, lo importante es revisar el


criterio con el cual esos datos son asignados e ingresados en el software.
Particularmente creo que aunque el software es una herramienta muy útil,
inicialmente las cargas deben realizarse paso a paso, en una hoja de cálculo, o de
papel, que nos permita entender el impacto de cada dato en la ecuación. Una vez
se tenga criterio, usar el software será más preciso.

Después de obtener la carga, procedemos a determinar el tipo de sistema, el


refrigerante y los componentes del sistema (compresor, evaporador y
condensador), en conjunto para cerrar nuestro abanico de posibilidades. El tamaño
de la carga nos permite reducir las opciones en la tecnología de compresión y
reduce la opción de refrigerantes. La aplicación del equipo (qué debo de enfriar y
en dónde), me limita las opciones de evaporación, me da criterios para validar el
refrigerante, y me da criterios para validar el tipo de sistema. La ubicación del
sistema me ofrece elementos para determinar el tipo de refrigerante y tipo de
sistema mecánico. Este proceso es un flujo de decisiones que en algunas ocasiones
obliga a que una decisión que ya casi completa los requisitos de un proyecto deba
ser revisada al final, porque no es la más óptima para el lugar, por ejemplo.
Aunque son muchas las variables a considerar, el proceso de selección se puede
simplificar agrupando y clasificando las variables en tres grupos:

- Grupo A: Variables técnicas. Reúne la definición del equipo mecánico que cumple
con las necesidades termodinámicas del ciclo. Ningún sistema se debe de
descartar. El COP (Coeficiente de Operabilidad) no es la única variable crítica en
este proceso. El estudio de estas variables nos permite determinar:

Carga Térmica.
Tipo de sistema.
Elementos del sistema de refrigeración.

- Grupo B: Variables Financieras.


Costo de capital.
Costo de operación.
Beneficios en el proceso productivo o comercial.

- Grupo C: Variables Locativas.


Espacio de Ubicación.
Espacio Necesario.

Identificando entonces mi necesidad y definiendo de manera clara mis variables, el


flujo de decisiones se simplifica y me permite concentrarme en lo que realmente es
importante:

Cumplir con una necesidad presente en su planta o mercado. El orden de análisis


es variables técnicas, financieras, locativas. Sabemos exactamente qué se
necesita. No son negociables condiciones de humedad, temperatura, velocidad de
aire en mi sistema de refrigeración.

Mejorar los consumos de energía. El orden de análisis es financiero, técnico, y


locativo. Primero debo explorar si el proyecto tiene el retorno en la inversión
esperado, evaluando cada solución de sistema. Pero el resultado del análisis de las
variables técnicas es la base de la decisión.

Balancear los sistemas de producción y comercialización de su negocio. El orden


de análisis es locativo, financiero, y técnico. Los problemas de flujo en los procesos
de refrigeración van asociados generalmente al espacio: muy cerca, muy retirado,
poco espacio para el tiempo de enfriamiento, poco espacio para el almacenamiento
de inventario. El análisis de estas variables me permitirá, en conjunto con el recurso
financiero que resulte del aumento de eficiencia en el sistema, adoptar la tecnología
necesaria para mi proceso productivo. Ubico a la tecnología como última porque
generalmente este tipo de decisiones va en línea con la tecnología que ya está
instalada en mi sistema.
Cambio de Tecnología. El orden del análisis es técnico, locativo, financiero. No
importa la inversión, requiero una tecnología por una razón ineludible, y una premisa
técnica. Luego debo revisar con cuidado si la tecnología que aplique se puede usar
en el sitio con el recurso disponible, y finalmente debo procurar el recurso, que es
la consecuencia de las decisiones anteriores.

Los sistemas de aire acondicionado y calefacción ya no son un lujo, es una


necesidad derivada de los cambios climáticos que sufre nuestro país y el mundo
entero a consecuencia del calentamiento global causada por la emisiones masivas
que realzan el efecto invernadero principalmente por el cambio de uso de suelo y
quema de combustibles fósiles.

En el mercado se encuentra un sin número de equipos que nos ayudan a


proporcionar las condiciones de confort para realizar tareas específicas del día en
el hogar, trabajo o diversión.

Del equipo que trataremos en este reporte es el equipo paquete, los puntos básicos
que debes de conocer para su selección son los siguientes:

1. COMPONENTES BÁSICOS:

Paquete Residencial Elementos


A) Módulo de Condensador: Está integrado por el compresor, serpentín de
Condensación, ventilador, tablero de fuerza y control.

B) Módulo del Evaporador: Integrado por serpentín evaporador y ventilador de


inyección de aire.

C) Termostato: Para el control de la temperatura.

2. MONTAJE:

Sobre techo o piso, se debe de considerar que el ruido que genera no moleste al
área acondicionada ni a instalaciones contiguas. El equipo genera calor o frío
depende del sistema de operación, por lo que se debe de proveer espacios
suficientes para operar y desplazar el aire generado sin problemas a su entorno y
no se proteja por temperatura.

3. REQUERIMIENTO DE FUERZA Y CONTROL:


Se deben de instalar 2 circuitos independientes para proveer alimentación eléctrica
de fuerza y de control, además considerar que su edifico cuente con el voltaje y
capacidad apropiada para su operación, por lo regular los equipos de hasta 5.0 t.r.
son 220 volts, monofásicos pero los equipos de 6.0 t.r. y mayores son a 220 o 440
volts y son trifásicos, acuérdese que estos equipos consumen una considerable
carga eléctrica.

4. SISTEMAS DE OPERACIÓN:

Aunque hay de solo frío para lugares o requerimientos donde no sea necesario la
calefacción, es necesario que al momento de proyectar o comprar, se indique si lo
requieren solo frio o frío/calor.

5. CAÍDA DE PRESIÓN DEL AIRE EVAPORADOR:

Debido a que el aire tratado que genera este equipo es para ser conducido por
medio de ductos y rejillas de inyección hasta al área a condicionar, y una vez
realizado su trabajo retornar hasta el equipo de nueva cuenta, es necesario que un
diseñador le indique la caída de presión que estos componentes ofrecen al paso de
aire en conjunto, por lo regular expresada en Pulg. de C.A. o Pascales. Esto con el
fin de garantizar que aire llegue hasta la última rejilla de inyección del sistema y
proporcionar el confort deseado.

6. TIPO DE REFRIGERANTE:

Verifique su tipo, en caso de que el refrigerante no sea ecológico, solicitar el modelo


sustituto para utilizar los que están libres de cloro y ayudar a nuestro medio
ambiente, algunos refrigerantes de este tipo son: 134A, 407C, 410A, etc.

7. CAPACIDAD TÉRMICA:

La última y la más importante, su equipo debe de ser de la capacidad que resulte


del cálculo térmico realizado por un proyectista especialista en aire acondicionado,
por lo regular expresada en T.R. (Toneladas de refrigeración). No instale equipos
de menor capacidad de la indicada por que corre el riesgo de no dar condiciones de
confort o demore mucho el equipo en hacerlo, y finalmente su equipo tendrá una
vida útil más corta.
5.6 SELECCIÓN DE ACCESORIOS

1. Refrigerante

2. Contaminantes presentes en el sistema

3. Presión máxima de operación

4. Temperatura máxima de operación

5. Humedad total en el sistema

6. Tipo y cantidad de refrigerante

7. Tipo y tamaño de sistema

8. Diámetro de la tubería.

Filtros deshidratadores

En sistemas más grandes o de baja temperatura, la presencia de aceite es algo que


no debe ser pasado por alto y se deben tomar las precauciones necesarias para
evitarlo. Aquí deben considerarse si los componentes están muy distantes unos de
otros o si las líneas son muy largas, si se trata de un solo compresor o es un arreglo
de varios compresores en paralelo, la temperatura ambiente, etc.

En la mayoría de las aplicaciones de refrigeración es necesario abrir o detener el


flujo, en un circuito de refrigerante, para poder controlar automáticamente el flujo de
fluidos en el sistema. Para este propósito, generalmente se utiliza una válvula de
solenoide operada eléctricamente. Su función básica es la misma que una válvula
de paso operada manualmente; pero, siendo accionada eléctricamente, se puede
instalar en lugares remotos y puede ser controlada convenientemente por
interruptores eléctricos simples.

La severidad de los problemas varía con el tipo de sistema y el refrigerante


empleado; ya que el bombeo de aceite hacia el sistema, no es de consideración en
equipos pequeños de media y alta temperatura, como son los refrigeradores
domésticos y unidades de aire acondicionado de ventana, los cuales están
diseñados para que el aceite sea regresado al compresor por el mismo refrigerante.

Se deben tener en cuenta los siguientes factores:

- volumen del local (m3);

- condiciones actuales del local [temperatura (°C) y humedad (%H.R.);


- condiciones deseadas en el local [temperatura (°C) y humedad relativa (%H.R.);

- características de los materiales presentes en el interior (cantidad, factor


higroscópico, número de personas);

- tiempo deseado para la puesta a régimen;

- eventuales inmisiones de aire exterior (infiltraciones, apertura ocasional de puertas


y ventanas);

- cantidad de aire exterior de renovación (m3/h);

- condiciones externas de proyecto [temperatura (°C) y humedad relativa (%H.R.);

- condensación sobre la batería de frío.

Selección de accesorios:

Un Sistema de Aire Acondicionado de Volumen de Aire Variable (VAV) varía el


volumen del aire a temperatura constante que es suministrado para cumplir con los
cambios de carga del espacio por acondicionar.

Selección de la válvula solenoide

El gasto volumétrico de aire se controla en las cajas terminales y la velocidad del


ventilador debe responder a los requerimientos del sistema. Debido a que la
capacidad del ventilador es directamente proporcional a su velocidad y la potencia
requerida es proporcional al cubo de la velocidad, ésta debe disminuir cuando el
gasto volumétrico decrece. En este caso deben hacerse varias consideraciones
económicas y técnicas. Para estos sistemas la fuente de potencia ideal es el motor
eléctrico de velocidad variable.

-Humidificadores y deshumidificadores
-Selección del acumulador
-Desplazamiento volumétrico del compresor (metros cúbicos/minuto) o pies
cúbicos/minuto).
-Temperatura de evaporación
-Temperatura de condensación
-Tipo de refrigerante
-Tipo de recinto
-Ubicación geográfica del lugar
-Nivel de humedad relativa
-Cambios de aire por hora
-Capacidad de humidificar o deshumidificar
-Dimensión del recinto
Flujo de aire requerido
Causas del regreso de refrigerante Líquido

a) La válvula de expansión puede ser de mayor tamaño (fluctuación).

b) El bulbo de la válvula de expansión no está haciendo buen contacto en la línea


de succión.

c) La válvula de expansión está mal ajustada o se quedó atorada en posición


abierta.

d) Sobrecarga de refrigerante en sistemas que usan tubo capilar.

e) Falta de carga en el evaporador que puede ser por:

1. Que no estén operando los ventiladores del evaporador.

2. El evaporador esté cubierto de escarcha.

3. Evaporador obstruido por suciedad entre las aletas.

4. No hay carga o es muy pequeña.

5. Filtros de aire tapados.

f) Regreso de líquido al terminar el ciclo de deshielo con gas caliente.

En contraste, un Sistema de Volumen de Aire Variable (VAV) envía el aire primario


a una temperatura constante y varía el flujo o volumen de aire para mantener la
temperatura del espacio requerida a las condiciones de carga.

Capacidad de retención no menor al 50% de la carga del sistema. Otra


consideración que se requiere tomar en cuenta, es la capacidad del acumulador
para funcionar sin provocar una excesiva caída de presión en el sistema.

Debe ser capaz de regresar líquido a una proporción adecuada bajo diferentes
condiciones de carga.
Nunca debe seleccionarse un acumulador basándose en el diámetro de la línea de
succión. El acumulador no necesariamente debe tener las conexiones del mismo
diámetro que la línea de succión del compresor Separado de aceite Válvula
solenoide

Un sistema simple de VAV debe contar con lo siguiente

• Una unidad manejadora de aire con ventilador de volumen variable (variador de


frecuencia), un serpentín de enfriamiento, posiblemente un serpentín de
calefacción, controles, filtros, caja de mezcla, y opcionalmente un ventilador de
retorno o desfogue.

• Ducto de inyección.

• Cajas de Volumen de Aire Variable un su propio termostato para cada zona


independiente a controlar.

• Termostato y controlador para cada unidad terminal

• Ducto de retorno o pleno Separadores de aceite

5.7 PROGRAMACIÓN DEL MANTENIMIENTO DE EQUIPOS DE


REFRIGERACIÓN DE AIRE.

El mantenimiento preventivo programado con actividades de inspección de los


equipos, tanto de funcionamiento como de limpieza y calibración, debe llevarse a
cabo en forma periódica con base en un plan de aseguramiento y control de validez.
Su propósito es prevenir fallas y mantener los equipos en óptima operación.
Los mantenimientos preventivos se realizan con la finalidad de que las fallas sean
reducidas al mínimo y que ninguna pieza o componente que presente fallas sea
olvidado por más de una semana. Para ello se debe hacer un checklist que cubra
cada parte del sistema, operaciones recomendadas y tiempo en el que deben
realizarse.

Un checklist eficiente:

1. Los niveles de aceite del compresor deben ser verificados. Si el nivel está bajo,
se debe agregar más aceite y ser observado por un lapso de tres a cuatro horas en
operación continua para determinar la causa del bajo nivel

2. Si el compresor es de lubricación forzada, es importante verificar la presión del


aceite. La lectura de la presión manométrica de éste debe ser por lo menos de 15 a
20 lb/in2 más alta que la presión de succión

3. El compresor debe ser detenido para verificar el estado del sello mecánico y
probado con una lámpara haloidea para encontrar cuarteaduras y con un detector
para comprobar que no haya fugas de refrigerante

4. La condición de los filtros en el equipo de manejo de aire. Si los filtros presentan


suciedad deben ser limpiados o reemplazados. Para condensadores y
evaporadores deben ser sopleteados exteriormente con aire a presión. Si se
emplean cepillos, deberá tenerse en cuenta que no se desprenda material del cepillo
ni obture las aletas de los condensadores o evaporadores.
Los filtros de tubería de agua también deben limpiarse
Las condiciones de los ductos deberán ser verificadas para un eficiente manejo de
aire.

5. En el sistema completo deberá verificarse cualquier condición anormal de


operación. La revisión del refrigerante en la mirilla debe hacerse cuando el equipo
esté operando y ha estado trabajando, por lo menos, durante 30 minutos continuos

6. En todas las flechas de motores y ventiladores deberá verificarse que tengan una
lubricación adecuada y su condición de operación sea la correcta.
Debe cuidarse la lubricación de los cojinetes y hacerlo cada seis meses, siguiendo
las recomendaciones del fabricante.
Debe verificarse que el ajuste del “Juego en el extremo” sea el más adecuado

7. Todas las bandas deben ser verificadas para contar con la tensión y la alineación
correctas, las bandas viejas o desgastadas deberán ser reemplazadas

8. Deberán ser verificados los esfuerzos sobre las poleas y flechas de volantes; de
encontrarse flojos, no deberán moverse hasta que sean alineados

9. Si el sistema cuenta con manómetros de alta presión deben ser observados; si la


presión de la cabeza es más alta que la normal, la causa debe ser determinada y
corregida. La purga de aire y otros gases condensables del sistema puede ser
necesaria

10. Para un condensador evaporativo o torre de enfriamiento, deben verificarse las


condiciones de las mamparas de succión y de las espreas.
La condición del agua también debe ser evaluada. Si existe lodo o algas, el
tratamiento del agua es necesario. Las bombas de agua deben estar limpias y los
tanques deben sopletearse completamente para eliminar cualquier oxidación o
corrosión antes de pintar.

11. El agua deberá drenarse del sistema de condensación y se deberá realizar una
inspección completa y cuidadosa, incluyendo los tubos del condensador, que deben
estar libres de costras o escamas

12. La condición de los desagües tiene que verificarse. Deben estar limpios y ser
capaces de transportar toda el agua derramada, sin peligro de taponear el sistema
o inundarlo

13. La condición de los contactos eléctricos en todos los arrancadores y controles


debe revisarse, tanto parámetros de operación, como el correcto funcionamiento de
arranque y de paro
Ningún sistema de refrigeración deberá pararse durante varios meses con presión
completa de refrigerante en las líneas del equipo. Esto produce esfuerzos
innecesarios en el equipo que pueden ocasionar una pérdida de la carga a través
del compresor.

Cuando el enfriamiento o refrigeración no se requieren durante un largo periodo, el


sistema se debe descargar y el refrigerante debe ser almacenado en un
condensador o en un recibidor, hasta que el equipo sea requerido nuevamente.
Cuando se requiere que el sistema de refrigeración se encuentre encendido, es
necesario cumplir las siguientes condiciones:
Compresor o recibidor con su refrigerante completo
Filtros en condiciones de operación
Lavado y deshidratado del sistema
Detección exhaustiva de fugas.

Evaluación del sistema


Antes de que el sistema sea arrancado nuevamente, es indispensable que todo el
equipo sea inspeccionado. El equipo de manejo de aire deberá estar disponible para
el arranque y los filtros deben estar limpios.

Si se usa condensador evaporativo, se debe verificar que esté pintado y que su


mantenimiento haya sido realizado. En el sistema se verifica que las tuberías de
agua expuestas a bajas temperaturas no estén rotas o presenten fugas. Todas las
flechas deben girar libremente y no estar oxidadas. Todos los desagües deben
abrirse. Completada esta inspección el sistema será puesto en operación.
Los responsables del mantenimiento deben desarrollar un programa que incluya las
estaciones de refrigeración con todos los equipos periféricos, fuentes de energía,
sistemas de iluminación y de control de condiciones ambientales, áreas de
mantenimiento y de almacenamiento de partes, consumibles, equipos, pintura de
exteriores e interiores, cableado e instalaciones eléctricas generales que influyan
en la correcta operación del sistema.

La aplicación del mantenimiento preventivo programado es un proceso dinámico


que debe actualizarse cuando se adquieren nuevos modelos o tipos de equipos,
cuando hay cambios en instalaciones o remodelaciones.
En general durante los mantenimientos preventivos programados, se deben
incorporar todos los registros documentados de las actividades de rutina, de las
calibraciones e inspecciones, así como de las acciones de mantenimiento correctivo
realizadas debido a fallas o a eventos no programados.

Elementos por considerar:

Frecuencia de inspección/mantenimiento por equipo


Programas de calibración
Programas de sustitución de partes o refacciones
Lugares y responsables de reparación de equipos
Registros mensuales de las actividades de prueba, inspección y mantenimiento
Formatos de verificación y recepción de consumibles, refacciones y equipos
Registros sobre movimiento o cambio de ubicación de equipos

1. Fluido a controlar (refrigerante).

2. Servicio (líquido, gas de descarga o gas de succión).

3. Capacidad del equipo (en T.R.).

4. Caída de presión permisible. Esto se refiere a que la caída de presión a través de


la válvula, esté dentro del rango del MOPD al cual se requiere que abra (las
normalmente cerradas) o cierre (las normalmente abiertas).

5. Temperatura del evaporador.

6. Conexión (tamaño y estilo).

7. Características eléctricas (voltaje y hertz).

8. Opciones (presión segura de trabajo SWP, angular o recta, normalmente cerrada


o abierta, con o sin vástago manual, etc.).Compuertas autorreguladas.

También podría gustarte