a) Se calculó los volúmenes de soluto (2-propanol) y solvente (agua destilada) según el
porcentaje para cada tubo de ensayo; en las cuales se puso 0, 5, 10, 20, 30, 40, 50, 70, 80 y 100% de soluto en cada tubo de ensayo previamente rotulado cada uno de los tubos. En cada tubo de ensayo el total de volumen fue 3 ml. b) Preparación de las soluciones. Se preparó las soluciones utilizando pipetas graduadas con el objetivo de ser lo más exactos posibles. c) Utilizando el refractómetro se midió el índice de refracción de cada una de las soluciones. Se colocó una alícuota de cada una de las soluciones en la superficie del vidrio (superficie del dispositivo óptico) y ajustando el botón para conducir a la iluminación del centro del retículo. En el caso del refractómetro mecánico se realizó el mismo procedimiento, sin embargo, fue muy complicado su lectura. d) Medida de índice de refracción de soluciones de sacarosa en agua Se preparó dos soluciones de sacarosa en las cuales su concentración fue de 0.5 y 0.1 seguidamente se midió el índice de refracción con la ayuda de los refractómetros CONCLUSIONES Se concluye que con la ayuda de los cálculos y el refractómetro de Abbe nos permitió obtener los resultados con mayor rapidez. Podemos concluir que a mediada que aumenta el soluto en cada una de las pruebas aumenta el índice de refracción, esto también se puede explicar con la densidad de cada solución cuanto más denso sea la solución más lento viajará la luz. También se podría deducir que existe una relación con las temperaturas ya que la temperatura influye en la variación de la densidad. En la toma de medida de índice de refracción de la solución de sacarosa también se puede evidenciar que a comparación del índice de refracción del agua este son mayores, sin embargo, varían de acuerdo a sus concentraciones, en la práctica realizada se observó y comprobó mediante los cálculos que la solución de 0.5 su índice de refracción es mayor que el de 0.1.