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Según estudios e investigaciones realizados en Colombia, con enfoque en los hábitos de convivencia

en lugares residenciales o encerramientos privados, unas de las principales causas de conflictos


entre familias o residentes de un mismo lugar se ve reflejado en las clases socioeconómicos,
teniendo en cuenta los principios y culturas que se hacen parte de cada una de las diferentes familias
que componen estos recintos.

Por otro lado encontramos la vulnerabilidad de lo íntimo y lo privado entre las culturas y costumbres
de quienes habitan estas zonas, ya que la mayoría de veces algunos integrantes se sienten
afectados. Para algunos autores, la convivencia se ve interferida por comportamientos
sexuales, por el fisgoneo, por los chismes, la moda, el comportamiento de niños y
adolescentes, la violación de correspondencia etc.

Por otro lado se han encontrado como resultado en investigaciones realizadas sobre los
comportamientos en los Espacios Residenciales Multifamiliares, según el Género, Edad y sexo, que
entre otros, los principales problemas o dificultades que se presentan en los ERM, son los ruidos
extremos tanto en los adultos como en los niños y algunas actividades cotidianas, de igual forma
otro factor que se observa con menos frecuencia son el consumo de sustancias psicoactivas en
espacios destinados para actividades (deportivas y sociales.).

Otras de las frecuentes y molestas problemáticas que viven los residentes de copropiedades, es la
convivencia con las mascotas, por lo general en la mayoría de conjuntos residenciales se observa
con mucha frecuencia el uso y tenencia de diferentes animales domésticos, los cuales son permitidos
por ley, y que en ocasiones generan molestia principalmente a quienes no los tienen, De igual forma
en la gran mayoría de las unidades existen personas que omiten los reglamentos internos de
propiedad horizontal, las juntas comunales, los procesos sancionatorios y hasta en ocasiones las
mismas autoridades, realizando actos como ruidos molestos, fiestas con alto volúmenes de equipos
de sonido, discusiones etc.; que perturban la normal convivencia y afectan la paz y la tranquilidad
de las demás personas trayendo como consecuencia directa las discusiones verbales y las agresiones
físicas entre copropietarios.
Por lo general todas las investigaciones llevan a concluir que la principal razón de conflictos generados
en el interior de estas propiedades privadas o conjuntos residenciales, se dan por las quejas en el exceso
de ruido, fiestas, celebraciones, mal manejo de residuos sólidos y basuras, descuido de las mascotas y sus
heces fecales, uso excesivo de palabras soeces (vulgares), niños(as) groseros etc., Por lo general se cuenta
con medios legales como los reglamentos de propiedad horizontal (Ley 675 de 2001), el manual de
convivencia ciudadana y el nuevo código de policía, pero que en ocasiones son vulnerados por los mismos
propietarios.

Ref. Rincón Salazar, M. T., Maldonado Gómez, M. C., & Echeverri Velásquez, M. L. (2010).
Security and living together in gated communities: an overview to urban closed multiresidential
áreas. Sociedad y Economía, (19), 335-340.
Ref. Guzmán Barney, A. (2011). Seguridad y Convivencia en Multifamiliares: una mirada al
encerramiento residencial.

Ref. Martínez Sanabria, W. C. Revisión de las problemáticas en la administración de la propiedad


horizontal que se presentan en los conjuntos residenciales en Colombia.

Ref. Corena, B., Esther, P., David, J., Galofre, G., & Velásquez Lara, S. D. J. (2017). La
convivencia en la propiedad horizontal: un problema sociocultural.

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