DIGESTIÓN ANAEROBIA La digestión anaerobia es un proceso bilógico, también conocido como biometanización o producción del biogás. Se realiza a través de la ausencia de oxígeno. Esto gracias a la materia orgánica, y la acción microrganismos que realizan su función a través de una mezcla de gases que contiene principalmente metano y dióxido de carbono. Este proceso se lleva acabo por la descomposición de la materia orgánica en compuestos sencillos, gracias a la intervención los diferentes tipos de microorganismos. la materia orgánica es transformada en ácidos grasos volátiles que son los principales moduladores del este proceso. Los ácidos son consumidos por los grupos de microorganismos metano génicos, y gracias a ello producen el metano y dióxido de carbono. Es un proceso biológico complejo y degradativo en el cual parte de los materiales orgánicos de un substrato (residuos animales y vegetales) son convertidos en biogás, mezcla de dióxido de carbono y metano. En este proceso los principales microorganismos utilizados para la descomposición y realizar este proceso de manera adecuada son bacterias anaerobias. Utilizando el proceso de digestión anaeróbica es posible convertir gran cantidad de residuos, residuos vegetales, estiércoles, efluentes de la industria alimentaria y fermentativa, de la industria papelera y de algunas industrias químicas, en subproductos útiles. En la digestión anaerobia más del 90% de la energía disponible por oxidación directa se transforma en metano, consumiéndose sólo un 10% de la energía en crecimiento bacteriano frente al 50% consumido en un sistema aeróbico.
La digestión anaerobia produce biogás que es una mezcla de gases combustibles
utilizados en diferentes aplicaciones como fuente de energía, y también, un digestato o residuo orgánico que puede ser utilizado como fertilizante en suelos agrícolas. Este fenómeno se puede reproducir a nivel industrial en digestores y aprovechar los productos resultantes con fines energéticos y/o como enmiendas orgánicas del suelo.