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El dolor de puede llevar a algo grande.

Emma reyes, es una pintora muy reconocida, alguna de sus pinturas


es la expresión de lo que fue su vida, junto con su gran libro Memorias por correspondencia. Es un libro
que narra su historia, pero no vista desde una persona grande, y recordando su historia, sino como la niña
Emma Reyes, desde una perspectiva infantil, muestra la cruel niñez que está pequeña pasó. Inicia desde
su crianza que tuvo junto con la que decía ser su madre, digo “decía ser su madre”, porque la palabra que
amor no existía en ella, junto con su hermana María y su amigo "le piojo", que después de un tiempo él
no volvió, pues tuvo suerte de irse de ese despiadado lugar. Horas de encierro, horas de llanto, una voz
que gritaba un dolor, que nadie pudo escuchar pues se ocultaba en la inocencia de Emma y de su hermana.
Cada paso, y anécdotas de su vida, fueron lo que marco la vida de una niña, ver cómo regalaban a su
hermanito, el abandono de su madre, las horas de soledad, la burla de las personas, la dura realidad que
estaba sola en la vida y que parecía no existir una luz, una esperanza de una vida mejor.

Emma con el relato de su libro, no enseña que muchos tienen una vida difícil, llena de soledad, pero ese
dolor, ese llanto puede llevarte a ser alguien grande, que inspire, que ayude, que guie a aquellas personas
que no encuentran el sentido al dolor, a su soledad. Emma reyes es una colombiana ejemplar, que
prevalece por encima de las situaciones. “El amor propio, fundamenta el amor hacia el otro, y estos juntos
todo lo pueden”.

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