Deduce el egoísmo como algo impregnado en la naturaleza del hombre que vive económicamente, así pudiendo satisfacer sus necesidades personales, también que existe una diferencia entre lo moral y lo económico: concluyendo que la simpatía moralmente hablando resalta lo mejor de las personas que nos rodean, y el egoísmo económicamente hablando requiere que nuestras necesidades sean satisfechas. La población social se determina como algo estructuradamente trabajadora y comercial. Pudo observar que la población dividía su trabajo en diferentes secciones, pudiendo optimizar la recolección, creación o producción para satisfacer el trabajo de unos y de ellos mismos. Principios de David Ricardo: