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ALERGIAS

SISTEMA IMMUNOLÒGIC

Martín Crespí Mairata | 2n Bachillerato| 2018-2019


INTRODUCCIÓN
El sistema inmune es similar a un sistema sensorial ya que recibe información
del entorno y produce una respuesta adaptativa.

Su objetivo es reconocer invasores extraños, como bacterias y parásitos, y


lanzar un ataque para neutralizar la amenaza de infección.

También reconoce y elimina las células internas enfermas o defectuosas, para


evitar la propagación de una enfermedad.

La forma en que el sistema inmune logra esto es reconociendo lo que es


extraño o anormal, y separándolo de lo que es normal.

Esto se hace a través de un proceso complejo que produce millones de


anticuerpos únicos que sirven como agentes de reconocimiento que pueden
desencadenar una respuesta inmune.

Después de que un anticuerpo se activa a través del reconocimiento /


interacción con una proteína extraña, entonces es producido en masa por las
células inmunes y circula el cuerpo para formar una memoria inmunológica.

Así es como funcionan las vacunas, donde la exposición a componentes


debilitados o parciales de microbios causantes de enfermedades permite que
el cuerpo se prepare para lanzar una respuesta inmune grande cuando se
encuentre el microbio en el futuro.

Durante la producción por parte del sistema inmune, se supone que estos
anticuerpos deben ser modificados para eliminar los que atacan al propio
organismo.
 En los casos en que esto no ocurre, se producen trastornos
autoinmunes, como la esclerosis múltiple.
 En los casos en que los anticuerpos reaccionan a proteínas no
amenazadoras, como las que se encuentran en el polen de pasto, se
produce alergia.

¿QUE ES EXACTAMENTE LA ALERGIA?


Las alergias se encuentran entre las
afecciones crónicas más comunes en
todo el mundo. (VÍDEO)

De acuerdo con los principales


expertos en alergia, una reacción
alérgica comienza en el sistema
inmune que nos protege de los
organismos invasores que pueden
causar enfermedades.

Si tienes una alergia, tu sistema


inmunológico confunde una sustancia
inofensiva como un invasor.

Esta sustancia se llama alérgeno.

Los alérgenos más comunes incluyen:

 Caspa y
proteínas de animales

 Polvo
 Medicamentos

(Antibióticos o
medicamentos que se
aplican sobre la piel)

 Alimentos

(Huevo, leche, nueces,


soya, pescado, carne
de animal y trigo)

 Esporas fúngicas

 Heces de insectos y ácaros


 Piquetes y mordeduras de insectos (su veneno)
 Látex de hule natural

 Polen

El sistema inmune reacciona de forma exagerada al alérgeno


produciendo anticuerpos de inmunoglobulina E (IgE).

Estos anticuerpos viajan a las células que liberan histamina y otros


químicos, causando una reacción alérgica.

SÍNTOMAS DE LA ALERGIA

Los síntomas de alergia van desde


hacernos miserable, hasta ponernos
en riesgo de reacciones que amenazan
la vida. (VÍDEO)
Una reacción alérgica generalmente desencadena síntomas en la
nariz, los pulmones, la garganta, los senos, las orejas, el
revestimiento del estómago o la piel.

Para algunas personas, las alergias también pueden desencadenar


síntomas de asma.
En los casos más graves, puede ocurrir una reacción potencial mente
mortal llamada anafilaxis.

COMO REACCIONA EL SISTEMA IMMUNITARIO?


Nuestro sistema inmune es el sistema de defensa del cuerpo contra agentes
invasores, como bacterias, virus y parásitos.

Estos agentes se llaman antígenos.

Los glóbulos blancos son nuestra principal defensa contra estos antígenos.

Un tipo importante de glóbulo blanco es un linfocito.

Dos tipos principales de linfocitos involucrados en la protección del cuerpo


contra los invasores son los linfocitos T y los linfocitos B.
 Las células de linfocitos T destruyen las células que han sido
infectadas o dañadas por los antígenos.

 Los linfocitos B se encuentran en los órganos relacionados con


la inmunidad, como los ganglios linfáticos. Estos dirigen la fabricación
de inmunoglobulina E, llamada IgE. IgE es una proteína especial contra
las enfermedades conocida como un anticuerpo. Se une a un antígeno
en nuestro cuerpo, como las bacterias, dejándolo inofensivo.

Los anticuerpos como el IgE son muy específicos.

Al igual que un sistema de bloqueo y llave, solo funcionan con antígenos


particulares. Si, por ejemplo, un virus de la gripe ingresa en nuestro cuerpo, los
anticuerpos especiales contra la gripe lo atacan.

Cada vez que estás expuesto a un nuevo agente invasor o antígeno, el cuerpo
crea diferentes anticuerpos para combatirlo.
FIGURA 1. Distribución del sistema inmunitario

¿Qué son los anticuerpos?

Son proteínas que circulan por la sangre producidas por el sistema


inmunitario, en concreto por los linfocitos B.

Son moléculas, cuyo tamaño es de una millonésima de milímetro.

Los anticuerpos también son denominados inmunoglobulinas y se abrevian


con las letras Ig. Desde el punto de vista estructural, tienen forma de Y griega.

Hay varias clases de


inmunoglobulinas que se
denominan con letras:
IgG, IgA, IgM, IgD e IgE.

FIGURA 2.
Molécula de
inmunoglobulina
Los anticuerpos son generados por el sistema inmunitario como una
respuesta de defensa contra los microbios y contra todas las sustancias que
penetran en el organismo.

Si estas sustancias externas son reconocidas por el sistema inmunitario como


no perjudiciales, resultan toleradas y se producen Ig del tipo G (IgG).

Por ejemplo, se generan anticuerpos IgG frente a los pólenes que son
inhalados por las personas sanas. Por el contrario, las personas alérgicas
producen además de anticuerpos IgG, inmunoglobulinas del tipo E (IgE).

¿Qué son los mastocitos?

Los mastocitos son unas células que se caracterizan por su capacidad de


poder fijar moléculas de IgE en el exterior de su membrana celular.

Pueden llegar a tener alrededor de 500.000 receptores por cada célula.

Los mastocitos no circulan por la sangre, sin embargo, están ampliamente


distribuidos en el aparato respiratorio, la piel, el hueso, el aparato digestivo y
el tejido nervioso.

Los mastocitos son células grandes (10-15 µm de diámetro) y poseen


numerosos gránulos en su interior, llenos de productos con un importante
poder para producir inflamación, principalmente de histamina

FIGURA 3. Mastocito humano


Qué son los basófilos?
Los basófilos son un tipo de leucocitos circulantes.

Al igual que los mastocitos, cuentan con receptores en su superficie para unir
la IgE y también poseen gránulos en su interior repletos de sustancias tóxicas.

FIGURA 4. Basófilo humano circulante

¿Qué sustancias se liberan en las reacciones alérgicas?

Las sustancias liberadas de las células que intervienen en las reacciones


alérgicas son las responsables últimas de los síntomas que sufre el paciente
alérgico.

 La histamina es uno de los principales mediadores de la inflamación


alérgica. Es el producto más abundante, puesto que se encuentra en
los gránulos de y de los basófilos.
La respuesta biológica a la liberación de la histamina es:
1. El picor cutáneo, por estimulación de los nervios;
2. La dilatación y aumento de la permeabilidad de los vasos
sanguíneos, con lo que se produce calor y enrojecimiento de la piel y
de las mucosas, y salida de líquido hacia los tejidos de alrededor, con
lo que se origina hinchazón (edema);
3. La contracción de la musculatura de los bronquios, que causa
dificultad para respirar y mayor producción de moco en las vías
respiratorias.

Por esta razón, los antihistamínicos son los fármacos más empleados en el
tratamiento de las enfermedades alérgicas ya que, al bloquear la acción de
la histamina, son eficaces para el control del picor ocular, nasal y de la piel,
del goteo de nariz, de los estornudos, etc., que están causados por la acción
directa de la liberación de histamina.

 La triptasa es una sustancia sintetizada por los mastocitos, que se


libera durante las reacciones alérgicas. Su determinación en la sangre
u orina es utilizada para establecer la existencia de reacciones
alérgicas debidas a la activación de estas células.

¿Cómo se producen las reacciones alérgicas?

Las reacciones alérgicas técnicamente se denominan reacciones de


hipersensibilidad inmediatas. Tras tener un primer contacto con el alérgeno
(por ejemplo, el polen), se produce una captación de éste por parte de unas
células llamadas células presentadoras de antígeno, que lo procesan en
su interior y lo presentan a los linfocitos T, que a su vez interaccionan con los
linfocitos B, los cuales producen IgE específica frente a ese polen concreto.

Esta IgE se unirá a los mastocitos y los basófilos, células que contienen
receptores para la IgE en su superficie.

Hasta aquí, el paciente no siente nada, ni experimenta ningún síntoma de


alergia. Este proceso puede durar varios días, meses o años y se
denomina sensibilización (el individuo se hace sensible a ese alérgeno, el
polen en el caso que hemos puesto de ejemplo).

Éste es el punto de inflexión a partir del cual el individuo se ha vuelto alérgico.

Es algo muy importante, ya que aunque se nazca con predisposición genética


para hacerse alérgico, la enfermedad no se desarrollará si no se ha estado
durante un cierto tiempo en contacto con el alérgeno responsable.

Esto determina algo fundamental que será la regla en todas las enfermedades
de causa alérgica: la imposibilidad de presentar síntomas en una primera
exposición o contacto; por ejemplo, un individuo que ingiere por primera vez
una fruta tropical no podrá presentar síntomas alérgicos tras su ingesta esta
primera vez.
A partir de entonces, la evolución puede ser diferente: bien seguirá tolerando
esta fruta sin problemas siempre; o por el contrario, a partir de esa primera,
segunda, tercera o x toma, se habrá sensibilizado y manifestará síntomas de
alergia en futuras ingestas.

En una exposición posterior, los pólenes que vuelven a ponerse en contacto


con el sistema inmunitario son dirigidos directamente hacia los anticuerpos
IgE específicos que ya habían sido secretados, y que se encuentran unidos
a la superficie de los mastocitos y basófilos.

Es entonces, al contactar el alérgeno (polen) y el anticuerpo (IgE específica


frente al polen), cuando se produce una pequeña explosión que hace que
el mastocito o basófilo liberen el contenido de sus gránulos, llenos de
histamina y otras sustancias con potente actividad inflamatoria

Esto ocurre a los 15-20 minutos de inhalar el polen, al cual el individuo está
sensibilizado y empezará a notar los síntomas típicos de la alergia nasoocular
y respiratoria producidos por la acción de la histamina y demás sustancias
liberadas.

FIGURA 5. Composición A, B, C (mecanismo de la reacción alérgica)

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