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IV

De tus héroes la epónima gesta


en octubre te dio libertad;
mirá el cielo esa altiva protesta,
y bendijo tu siembra de paz.

V
Hoy tus hijos forjando broqueles
de ese yunque en la fragua ideal
a tu herencia juramos ser fieles
y a tus lauros sin mancha guardar.
HIMNO DE PORTOVIEJO
VI
CORO Con la vista en la azul cordillera
A la Reina de heráldica historia, y la mano tendida hacia el mar,
Portoviejo, la invicta ciudad, de la Patria serás la primera
con amor canta el himno de gloria en el rito de unión fraternal.
de sus hijos la voz inmortal.

I
Castellana de origen, un día
te acunaron los brazos del mar,
y en tu surco aborigen surgía
nueva raza de empuje vital.

II
A la muerte venciendo acudiste
otro asilo en tu valle a buscar,
donde fértil campiña te viste,
con primores de manto imperial.

III
El real tamarindo nativo
y el cielo la fronda sin par
a tus campos dan hálito vivo,
y a tu río genial majestad.
V
En tus playas se aduerme el turista
se extasía en tu mar, en tu cielo;
pescadores con fe, con desvelo,
lanzan redes en busca del pan.

VI
HIMNO DE CRUCITA En tu suelo fecundo germina
el esfuerzo del hombre semilla
Del Pacífico gema Inefable convertida en genial maravilla
Oh Crucita, ondina del mar para ser el sustento vital.
Manabita, fortín, venerable
de trabajo y orgullo sin par VII
Del Pacífico gema Inefable
I Oh Crucita, ondina del mar
Con argéntico canto loamos Manabita, fortín, venerable
al cenit de tu épica historia, de trabajo y orgullo sin par
que a tus hijos los nutre de gloria
a la espera del nuevo auroral. VIII
Tus mujeres son ninfas vivientes
II Expresión de excelencia y linaje
Crucitenses por siempre seremos engalanan la faz del paisaje
con aureolas de innata prestancia al nacer y crecer en tu lar.
sin mezquina, sin vil arrogancia
hoy luchamos por verte triunfar IV
Aquí están los añejos recintos
III para hacerte mejor cada día
Es en junio que naces portento y entornar la marcial sinfonía
al amparo de Dios que te guía, de sentir que vivimos en paz
hacia el puerto de eterna de sentir que vivimos en paz
ambrosía,
donde brille tu místico afán.

IV
En tu azarja hay herencia y
cultura,
donde luce el amor de la gente
adalid singular diligente,
manantial de sublime verdad.

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