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En la peluqueria

uno no sabe lo que puede suceder cuando entre a la peluqueria, todo es incierto alli dentro, el
aspecto de las personas no es el mismo que tienen normalmente, empezando por ello, todo es
bastante irreal.

podemos decir que nadie se conoce entre si en ese espacio, salvo los empleados, pero
igualmente parece un sitio donde ir a desahogar penas, este local donde uno va a cortarse el
pelo ,entre muchos otros servicios, a menudo es utilizado por muchos para evadirse un rato de
las obligaciones y de paso acicalarse.

Reyna Danes habia tenido un comienzo de dia complicado, no se veia bien con ningun atuendo y
tampoco el clima humedo la ayudaban, entonces se iluminó, tal vez era hora de hacer un cambio
algo radical en su aspecto y cortarse un poquito las puntas.

si uno es un poco inseguro, no es nada facil tomar aquella desicion, y puede ser tan beneficiosa
como perjudicial segun el resultado, Reyna emprendio el viaje vestida de gris.

decidio caminar las largas cuadras del barrio hasta el local que le habian recomendado -podes ir
tranquila! te van a dejar exactamente como deseas!- le dijo una conocida, ya lo veremos...

reyna danes vive en una zona muy centrica y es muy comun ver todo tipo de negocios,
almacenes, chinos, kioscos, y grandes bazares, camina por una avenida siempre muy concurrida,
pero hoy esta especialmente vacia, al parecer hay bastantes gatos en el barrio asomados por las
cornizas y balcones -y eso que no es de noche! a medida que caminaba se le increcentaba la
sensacion esa que uno tiene cuando se va a encontrar con alguien que hace tiempo no ve, que
es parecida a la de "olvidar algo en casa y no saber que", fue caminando acrecentanto la
velocidad, y cuando se daba cuenta que casi estaba corriendo sonreia y aminoraba la marcha,
intentando mirar vidrieras y no entrebuscar conocidos en las caras de los transeuntes.

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