Está en la página 1de 21

Iglesia Luterana Cristo Rey – Desayunos luteranos

ROSTROS FEMENINOS DE AYER Y HOY EN LA REFORMA PROTESTANTE

Introducción

La Reforma Protestante fue un movimiento de carácter religioso-social, surgido en Alemania en la


segunda década del siglo XVI, uno de los principales agentes de la reforma fue el monje alemán
Martín Lutero (1483-1546), quien el 31 de octubre de 1517, en la puerta de la iglesia del Castillo de
Wittenberg clavó las 95 tesis que criticaban ciertas prácticas de la Iglesia Católica, como la venta de
indulgencias (cuando la Iglesia «dio» perdón divino a cualquier persona que pagara). Este
movimiento, además, tuvo fuerte apoyo de la nobleza de Alemania, desaprobó el capitalismo y la
utilización del dinero.

Tuvo como principales movimientos la Reforma Luterana (Alemania) dirigida por Martin Lutero, La
Reforma Calvinista (Francia) dirigida por Juan Calvino y la Reforma Anglicana (Inglaterra) dirigida por
Enrique VIII.

Causas de la Reforma Protestante

Las causas para el surgimiento de la Reforma Protestante están relacionadas directamente por el
cambio de visión del mundo, fruto del pensamiento renacentista y, principalmente por los abusos
cometidos por la Iglesia Católica como: la acumulación y centralización de capitales en la figura del
Papa; la venta de indulgencias y cargos eclesiásticos, entre otros; la crisis institucional y moral
(corrupción) de la misma Iglesia, todo esto con las respectivas excusas bíblicas; y los conflictos
políticos entre la Iglesia y las nacientes monarquías

Rostros femeninos de la Reforma protestante del siglo XVI

¿Qué ha pasado con la memoria de las mujeres en el movimiento de la Reforma protestante del siglo
XVI? ¿Participaron las mujeres? ¿Existen remembranzas escritas acerca de ellas? ¿por qué no han
llegado a nosotras? ¿qué fue lo que pasó?.

Durante gran parte de la historia de la humanidad, la participación de las mujeres ha sido


invisibilizada, en el mejor de los casos, interpretada por varones. En general se conoce que la
situación de las mujeres ha sido de sumisión y opresión, el siglo XVI o ha sido la excepción; sin
embargo, hubo brotes de cambio, pequeños, pero significativos para la época: concientización con
respecto a la idea que tenían de sí mismas, revalorización de la mujer casada, mayor libertad para las
mujeres cultas, como el caso de grandes escritoras, reformadoras religiosas y reinas.

No fue así desde el principio: se había olvidado que en el primer cristianismo no existían varón ni
mujer, sino que ambos eran iguales en Cristo. Las mujeres cristianas de los primeros siglos realizaban
ministerios al igual que cualquier hombre, predicaban, impartían los sacramentos del bautismo y la
Santa Cena, enseñaban, etc. Eran llamadas con el nombre específico de su ministerio: apóstolas,
diaconisas, maestras, evangelistas. Pero este lugar que Jesús les dio a las mujeres poco a poco se fue
olvidando, y mientras la iglesia se construía jerárquicamente masculina, la situación de la mujer
volvió a ser de sumisión.

En el siglo XVI, el protagonismo de la mujer, aunque escaso, fue significativo. Existieron mujeres que
se impusieron por encima de las costumbres de su tiempo y desempeñaron un papel muy importante
en la escena política o religiosa. A favor de la Reforma se proclamaron jóvenes y adultas mayores,
burguesas y campesinas. No solo fueron hombres quienes llevaron a cabo la Reforma protestante.
Se tiende siempre a mencionar a los hombres en la elaboración de la historia. Por mucho tiempo se

1
Iglesia Luterana Cristo Rey – Desayunos luteranos

negó que Jesucristo hubiera llamado a mujeres y se decía que solo tuvo doce apóstoles, ninguna
apóstola.

Así también hemos escuchado durante años los nombres de Jan Hus, Lutero, Melanchton, Calvino,
Farel, Zwinglio, etc., como padres de la Reforma protestante dejando de lado a las madres de la
misma, olvidando, negando y silenciando sus nombres y su obra.

Un considerable número de mujeres estuvo implicado en la Reforma protestante, en diferentes


ámbitos, a diferentes niveles y en varios países como Alemania, Italia, Francia, Inglaterra y España.
Algunas tenían cierta actividad política: reinas como Margarita de Navarra, Juana de Albret, etc.,
quienes patrocinaron, influyeron en su corte y los hombres cercanos a ellas, promulgaron leyes o
escribieron para promover la Reforma. Pero no solo las de familias nobles participaron en este
movimiento de cambio eclesiástico: mujeres del pueblo lucharon a favor de su fe.

La primera dama de Francia: Marie Dentière (1495-1561)

Nacida en 1495 en una familia de rango noble en Tournai, Francia, obtuvo buena educación, entró al
convento Agustino (el cual fue de la orden de Lutero), y seguramente sirvió como priora durante los
primeros años de 1520. Cautivada por la teología de Martín Lutero, Marie dejó el convento para el
año 1525 y se mudó a Estrasburgo para oficialmente unirse al movimiento de la Reforma. Ese mismo
año, tomó una segunda decisión radical al casarse con el ex-sacerdote Simón Robert.

Renunciar al celibato clerical y ensalzar los gozos del matrimonio por medio de las Escrituras se
convirtió en uno de los temas más presentes dentro del ministerio de Marie, especialmente en sus
intentos controversiales como fue el tratar de convertir monjas en Ginebra. Un reformador escribe
que Marie y Simón Robert “fueron los primeros esposos que aceptaron una asignación pastoral para
la Iglesia Reformada”. La pareja tuvo cinco hijos, pero Robert murió en el año 1533. Para el año 1535,
Marie se había casado con Antoine Froment, otro pastor reformado, y la familia se mudó a Ginebra.

La mayoría de lo que se sabe de Dentière, proviene de tres documentos atribuidos a ella. La primera
de sus obras escritas, cuenta los eventos de 1532-1536 en Ginebra desde el punto de vista de los
reformadores. Dentière fue quizá la primera escritora protestante que dio testimonio presencial de
ese tiempo tumultuoso, y fue de las primeras mujeres, sino la primera, en articular y defender la
teología Reformada en el idioma francés.

Pero aún más que historiadora, Marie Dentière fue una evangelista pronunciada. Amaba y honraba
la Biblia, se preocupada porque la Iglesia Católica había retenido tanto de la Biblia a las personas
comunes, y predicaba que cada persona, incluyendo las mujeres, deben poder leer por sí mismas las
palabras preciosas y gloriosas de Dios.

Dentro de las obras escritas de Dentière, la más famosa y controversial fue una carta a la Reina de
Navarra, titulada La carta más beneficiosa. La carta es una defensa bíblica de la teología reformada y
un ataque hacia la Iglesia Católica.

Es una obra enérgica y atractiva que demuestra extraordinarios conocimientos bíblicos y


comprensión teológica. El disturbio público que causó esta obra resultó en el arresto del impresor y
en la destrucción de la mayoría de las copias existentes. La carta de Dentière no solo condenó al
Catolicismo Romano, sino que también defendió el derecho de las mujeres a ser teólogas y maestras.
Ella escribe:

“Porque lo que Dios nos ha dado y revelado a las mujeres, no debemos esconderlo y enterrarlo en la
tierra más que los hombres. Y aunque no se nos permite predicar en congregaciones e iglesias

2
Iglesia Luterana Cristo Rey – Desayunos luteranos

públicas, no se nos prohíbe escribir y amonestar unos a otros en toda caridad” (Epistle to Marguerite
de Navarre [Epístola a Margarita de Navarra], 53).

En cuanto a su relación con otros reformadores, aunque Marie apoyaba y defendía fuertemente a
los líderes reformados, Juan Calvino claramente estaba irritado, por lo menos en cuanto a los
primeros años del ministerio de Marie, debido a su manera franca de hablar, sus ambiciones
teológicas, y su crítica publica hacia el liderazgo clerical masculino.

Sin embargo, para el año 1561, el año en que Marie falleció, la tensión entre ambos disminuyó, y el
respeto y la admiración de parte de Calvino hacia Marie había aumentado. Calvino hasta le pidió que
escribiera el prefacio de su sermón impreso sobre la modestia de la mujer según 1 Timoteo 2:8-12.
Quizá, irónicamente, podríamos argumentar que Calvino le pidió enseñar acerca de un pasaje bíblico
que expresamente se lo prohibía.

Para Marie Dentière, las noticias asombrosas de la gracia salvadora y el poderoso mensaje de
igualdad ante Dios eran verdades que habían sido escondidas por la Iglesia Católica, y que tenían que
ser proclamadas desde las azoteas por cada persona que las había descubierto por sí misma en la
Palabra de Dios. Para sus debates teológicos o predicaciones usaba directamente el texto bíblico,
siempre interpretando pasajes en los que las protagonistas eran mujeres, defendiendo el ministerio
femenino y volviendo sus argumentos en contra de sus detractores, normalmente reformadores
opuestos al ministerio de la mujer.

No hay duda de que Marie carecía de lo que en esos tiempos se consideraba la modestia y humildad
apropiada para una mujer, pero por su pasión, la cual fue encendida por las páginas de las Escrituras,
sus obras escritas conmovieron y cambiaron corazones no solamente en sus tiempos, sino que en los
nuestros también. En el año 2002, Marie Dentière se convirtió en la única mujer en tener su nombre
grabado en el famoso Muro de Los Reformadores en Ginebra

“Muchos de sus escritos se le atribuyeron a su esposo, quien gozaba de fama de buen predicador.
Algunos editores se han dado cuenta de la gran diferencia que existía entre los textos de Marie y
los de su esposo. “Tanto uno es vivo y lleno de astucias retóricas como el segundo es pesado… las
frases de Marie son sueltas y bien construidas, a menudo entrecortada y lacónica. Ella aprieta el
paso y Fromet se arrastra”. Su orientación teológica estaba más influida por Farel y Zwinglio que
por Lutero. Es considerada por muchos una de las primeras teólogas laicas feministas.”

“Pareciera que la ‘alianza’ que colocamos en nuestra mano el día del matrimonio fuera como el
anillo de Giges, que tenía la propiedad de hacerlo invisible; pero en nuestro caso no para
protegernos de nuestros enemigos, sino para arrebatarnos el derecho al tiempo y al espacio, para
impedirnos el acceso al ágora”.

“¿Qué predicadores han hecho más que la mujer samaritana, que no se avergonzó de predicar a
Jesús y su palabra, confesándole abiertamente a todo el mundo, tan pronto como oyó de Jesús que
uno debe adorar a Dios en Espíritu y en verdad? O, ¿hay otra como María Magdalena, de quién
Jesús sacó siete demonios, capaz de presumir de haber tenido la primera revelación del gran
misterio de la resurrección de Jesús? Y, ¿por qué no la otra mujer, a quien, en lugar de a hombre,
su resurrección fue anunciada por su ángel, recibiendo el mandamiento de hablar, predicar y
declararla a los demás?

A mis hermanas

“Pasé un largo tiempo en la oscuridad de la hipocresía. Solamente Dios pudo hacerme ver mi
condición y conducirme a la luz verdadera.

3
Iglesia Luterana Cristo Rey – Desayunos luteranos

Si Dios dio gracia a algunas buenas mujeres, revelándoles algo santo y bueno a través de su Sagrada
Escritura, ¿tienen ellas que, por causa de los difamadores de la verdad, atreverse a no escribirlo,
no hablarlo o no declararlo a los demás? ¡Ah! Puede ser demasiado impúdico cubrir el talento que
Dios nos ha concedido, nosotras que debemos tener la gracia de perseverar hasta el fin. ¡Amén!”

4
Iglesia Luterana Cristo Rey – Desayunos luteranos

5
Iglesia Luterana Cristo Rey – Desayunos luteranos

Argula von Grumbach (1492-1553)

Fue la primera mujer que se atrevió a hacer una defensa de Lutero, ante el desconcierto de los
inquisidores. En 1523 escribió al cuerpo académico de la Universidad de Ingoldsadt para defender a
Alsacius Seehofer, joven de dieciocho años arrestado por ser luterano. Se atrevía a desafiar a sus
autoridades eclesiásticas y civiles, como el duque de Bavaria, al cual le mandó decir en una carta que
ella no era ni débil ni estúpida. Incitaba a la gente a leer libros en contra de la religión católica. De
ella decía Lutero: “Me regocijo de ver como una hija del pecado de Adán se ha convertido en una
buena hija de Dios”. Escribió varios libros, entre ellos una sátira dirigida a un teólogo católico llamado
Schatzgeyer. Fue todo un símbolo de confusión, perplejidad e inquietud femenina.

Es la primera mujer en publicar una carta a favor de la Reforma. Proviene de una familia de la nobleza
bávara. Exigió un debate público en alemán a la Universidad de Ingolstadt en una carta donde
denunciaba la expulsión del joven Arsacius Seehofer, por haber difundido las enseñanzas de Lutero.
Su carta no obtuvo respuesta, pero se reimprimió en Núremberg, Basilea, Augsburgo, Erfurt,
Estrasburgo, Stuttgart o Leipzig. Su acción, sin embargo, le causó problemas con su familia y fue
maltratada por su marido porque su defensa de las ideas protestantes llevó a que lo destituyeran de
la prefactura local

De ella escribe Joana Ortega:

“Argula afirmaba que los inquisidores habían sustituido a Cristo por Aristóteles, además de
manifestar su desacuerdo con San Pablo por imponer sobre las mujeres el silencio en la
Iglesia. Esta mujer se convirtió en un símbolo de la “confusión, perplejidad e inquietud”
femenina que se suscitó en toda Europa a través de los textos de Lutero. Los procesos
femeninos de la Inquisición revelan que esta inquietud ya era importante, debido a las
lecturas de Erasmo y de Savonarola.”

6
Iglesia Luterana Cristo Rey – Desayunos luteranos

7
Iglesia Luterana Cristo Rey – Desayunos luteranos

Katharina von Bora (1499-1522)

Fue consagrada monja del convento cisterciense de Marienthron, donde realizó votos de pobreza,
obediencia y castidad. En 1523, cuando tenía veinticuatro años, se fugó del convento junto con otras
monjas en barriles de basura del convento cistercense de Marienthron. Ella fue la que sugirió a
Martín Lutero que se casaran. Administró los recursos y el dinero del monasterio de los agustinos
que les cedió el príncipe Juan. No fue una teóloga como Marie Dentière: la importancia de su persona
radica en que formó parte de la primera generación de mujeres casadas con pastores protestantes
junto a los cuales lucharon por la fe. Dio abrigo a monjes y monjas que habían abjurado de su fe y no
tuvo miedo de los riesgos que esto y ser esposa de Lutero significaba.

La también llamada doctora Katharina o Doctora Lutero estuvo muy implicada en la vida intelectual
de su época y era participante de las tertulias teológicas que se celebraban en su casa con otros
reformadores. Se recuerda por su carácter emprendedor además de por estar también detrás de la
impresión de buena parte de las obras de Lutero.

8
Iglesia Luterana Cristo Rey – Desayunos luteranos

9
Iglesia Luterana Cristo Rey – Desayunos luteranos

Katharina Zell (1497-1562)

Se consideró a sí misma como “madre de la Iglesia”, y durante la Guerra de los Campesinos (1524-
1525) organizó un servicio de acogida para los desplazados por el conflicto y atendió a cientos de
víctimas. En su texto comentando el Padre Nuestro, comparó a Dios con una madre que conoce los
dolores del parto, exigió el diaconado para la mujer y reivindicó la participación pública de las mujeres
reformadoras. Sin embargo, debía firmar algunos de sus escritos con el nombre de su marido,
Matthäus Zell, como pseudónimo para evitar la censura.

“Siempre, desde que tenía diez años de edad, he sido estudiosa y una especie de madre de la iglesia,
muy dada a asistir a los sermones. He gustado y frecuentado la compañía de hombres de saber, y he
conversado mucho con ellos del Reino de Dios.”

10
Iglesia Luterana Cristo Rey – Desayunos luteranos

Margarita de Navarra (1555-1572)

Fue interlocutora directa de Calvino. Tradujo al francés la Meditación sobre el Padre Nuestro de
Lutero y fue autora de varios poemas, entre ellos “Prisiones”. Su hija, Juana de Albret, vio a su padre
golpearla por rezar oraciones protestantes. Durante el reinado de Margarita de Navarra, Francia se
convirtió en refugio y vivero de la Reforma. Escribió y publicó poemas, tenía un carácter abierto,
mucha cultura e hizo de su corte un centro del humanismo.

Tuvo fuertes desavenencias con Calvino debido a que albergó a Poque y Quentin, a quienes Calvino
llamaba “libertinos Espirituales”, pero Margarita, como ellos, creía que el ser humano podía ser
divinizado. Creían que un ser humano deificado no puede pecar, porque Dios no puede pecar. Tal era
la indignación de Calvino que se dirigió a Margarita con estas palabras: “Como un perro debe ladrar
para defender a su maestro, de igual forma debería denunciar a estos seductores del honor de Dios.”

Juana de Albret (1528-1572).

Hija y sucesora al trono de Margarita de Navarra, siguió los pasos de su madre y bajo sus auspicios
se llevó a cabo la traducción del Nuevo Testamento a la linguæ navarrorum. Rompió totalmente con
el catolicismo y fue excomulgada por el papa. Declaró su reino oficialmente protestante aun cuando
no persiguió el catolicismo. Para ella, la Reforma era oportuna y necesaria, tanto que pensaba que
sería una cobardía y deslealtad a Dios dejar que el pueblo permaneciera en un estado de suspenso e
indecisión.

El matrimonio de Juana de Albret, con Antonio de Borbón reunió varios territorios bajo su control.
Dada la identificación de ambos monarcas con la Reforma, esos territorios se convirtieron en zonas
de refugio para numerosos protestantes.

11
Iglesia Luterana Cristo Rey – Desayunos luteranos

12
Iglesia Luterana Cristo Rey – Desayunos luteranos

13
Iglesia Luterana Cristo Rey – Desayunos luteranos

Renata de Ferrara (1510-1575)

Conservó su fe protestante después de casarse con un duque católico y trasladarse a su corte en el


norte de Italia. Tuvo problemas religiosos, ya que albergó a Calvino durante un mes, protegió a los
herejes protestantes y se negó a asistir a misa. Fue confinada a su palacio por su esposo por presiones
de la Inquisición.

Debido a los devastadores efectos de la Inquisición, la Reforma protestante en España no tuvo un


gran auge. Muchos hombres y mujeres sufrieron persecución y hasta la muerte, como fue el caso de
María de Cazalla, quien había logrado acceso a los libros de Erasmo y Lutero. Después de esas
lecturas, cuestionó la validez de los sacramentos católicos. Fue inspiración espiritual de amas de casa
y profesores de la Universidad de Alcalá, a quienes ofrecía consejería pastoral y estudios bíblicos. Fue
detenida por la Inquisición y torturada en 1534. Muchas mujeres más en España y toda Europa fueron
encarceladas, torturadas y quemadas en la hoguera por luchar a favor de la Reforma protestante.

No fueron muchas las reformadoras, pero cada una desde su lugar influyó, de una manera u otra,
para que se diese el movimiento de la Reforma. Es justo y necesario reconocer y nombrar no solo a
los hombres que hicieron posible la Reforma protestante: ese movimiento no solo tiene padres,
también tiene madres. La historia de la Reforma protestante también tiene rostro y nombre de
mujer.

Estos son algunos de los nombres de mujeres que se comprometieron y lucharon a favor de los
cambios urgentes que necesitaba la iglesia en el siglo XVI. La Reforma protestante no ayudó, en la
práctica, a reivindicar el papel de la mujer, limitado al marco doméstico sin poder acceder al
eclesiástico en el reconocimiento de sus ministerios o a la ordenación. Pero sentó las bases de
doctrinas tales como el sacerdocio universal de los creyentes y la soberanía de Dios, que sirven de
base para debatir la tradición patriarcal.

Rostros femeninos de la Reforma protestante en el siglo XXI

Susana Strachan (1874-1950)

Fue una misionera británica, cofundadora, junto a su esposo el también misionero Enrique Strachan,
de distintas instituciones en Latinoamérica, una de ellas la escuela bíblica para mujeres en San José
Costa Rica, la que entre 1923 y 1941 se denominó Instituto Bíblico de Costa Rica, posteriormente
Seminario Bíblico Latinoamericano, institución que ahora es conocida como Universidad Bíblica
Latinoamericana. Graduada en el Harley College de Londres, en su estancia en la Argentina fundó la
Liga de Mujeres Evangélicas y la revista Guía del Hogar. Además, fue cofundadora del Hospital Clínica
Bíblica (San José de Costa Rica).

14
Iglesia Luterana Cristo Rey – Desayunos luteranos

15
Iglesia Luterana Cristo Rey – Desayunos luteranos

16
Iglesia Luterana Cristo Rey – Desayunos luteranos

Irene Foulkes (Chicago 1932-2016)

Estudió sociología en el Wheaton College, luego literatura bíblica, y después de una sólida reflexión
relacionada con la experiencia de servicio que vivió entre los ghettos de familias afrodescendientes
en su ciudad, se vinculó a la Misión Latinoamericana, se trasladó a Costa Rica, ya casada, en 1955
para comenzar su tarea docente. Su tesis de maestría la había dedicado a la exégesis católica sobre
la Virgen María, tema muy controversial para la época.

Con una larga carrera como profesora y misionera, tuvo una carrera academica admirable. Realizó
grandes trabajos como el libro El griego del Nuevo Testamento, también trabajó en el Diccionario
conciso griego-español del Nuevo Testamento que, junto con su discípula Elsa Tamez, preparó para
la edición crítica de las Sociedades Bíblicas Unidas y Caribe (1975), así como el Diccionario ilustrado
de la Biblia (Caribe, 1974), coordinado por Wilton M. Nelson. Luego de 1983 y julio 1984, en un
periodo de estudios pos-doctorales realizado en el Instituto Pontificio Bíblico de Roma, hizo una
investigación sobre “El Reino de Dios y Pablo”, donde trabajó la temática de los principados y las
potestades.

En 1984 fue pionera de los estudios sobre la mujer al publicar el módulo sobre pastoral de la mujer,
producto de cursos que dictó desde cuatro años atrás con Tamez bajo el título “La mujer en el
pensamiento bíblico”, uno de los primeros materiales latinoamericanos que asumieron esta pastoral
tan específica. El recuento completo de sus publicaciones rebasaría el espacio disponible aquí, pero
valga destacar que al revisar la lista que claro su constante empeño en la práctica y la divulgación de
los métodos cada vez más contextuales de interpretación bíblica.

En sus últimos años fue profesora Emérita de la Universidad Bíblica Latinoamericana, en San José,
Costa Rica.

Elsa Tamez (México 1951)

En 1969 intenta comenzar a estudiar teología en su país pero recibe rechazo y discriminación, por
eso se traslada a Costa Rica, su formación académica comienza a los dieciocho años en el Seminario
Bíblico Latinoamericano, en 1976 se hace parte del Departamento Ecuménico de investigaciones,
después de licenciarse en Teología, en 1985 termina sus estudios de Literatura y Lingüística, ese
mismo año publica su libro de entrevistas a teólogos de la liberación sobre el tema de la mujer. Hace
un doctorado en Suiza entre los años 1987-1990, el doctorado en Biblia en la Teología Metodista de
la Facultad, para su tesis doctoral escribe “Contra toda condena: La justificación de la fe desde los
excluidos”. La mayor parte de la obra escrita de Elsa Tamez se enmarca dentro de la teología
feminista latinoamericana nacida en el seno del discurso de la teología de la liberación. Entre sus
numerosas publicaciones destaca La Biblia de los oprimidos, que ha sido traducida al inglés y al
francés.

Elsa Tamez es una de las mujeres pioneras de la Teología Feminista que interpreta y reflexiona sobre
la Biblia bajo su perspectiva de mujer fijándose especialmente en las heroínas bíblicas. Es indudable
que sus numerosos escritos teológicos y su interpretación de la Biblia contribuyeron enormemente
a lograr cambios dentro de la Teología de la Liberación consiguiendo que admitieran la perspectiva
de la mujer en la teología. Según ella, la Biblia pueden leerla juntos tanto católicos como
protestantes: “no existe una Biblia católica, ni una Biblia protestante sino una sola Biblia”.

17
Iglesia Luterana Cristo Rey – Desayunos luteranos

18
Iglesia Luterana Cristo Rey – Desayunos luteranos

19
Iglesia Luterana Cristo Rey – Desayunos luteranos

Teresa Forcades i Vila

“No tengo fe en un libro. Honro la Biblia y no me puedo imaginar mi vida sin ella; la leo cada día (o
casi todos los días), pero no espero que el texto bíblico sustituya mi pensamiento.” Teresa Forcades.

Religiosa española de la orden de San Benito ha realizado estudios de teología en Harvard (master
en teología protestante) en la facultad de teología de Catalunya y en la universidad Humboldt de
Berlín además de ser licenciada en medicina por la universidad de Barcelona con una especialización
en medicina interna por la universidad estatal de Nueva York.

Teresa es más reconocida por su lucha en contra de las industrias farmacéuticas además de su
participación como promotora del movimiento independista proceso constituyente en Cataluña. En
sus libros se puede apreciar las dos caras de toda teología critica incluida la feminista: la constante
lucha contra el sistema dominante pero también el gozo de la sorpresa en la gratuidad y el
descubrimiento de caminos nuevos de liberación del ser humano.

Nancy Bedford.

“A diferencia de muchas teóricas feministas, las teólogas feministas tenemos un vínculo natural con
un espacio concreto de praxis y reflexión más allá del ámbito académico: la comunidad de fe.”

Hija de misioneros Estadounidenses, nacida en Argentina, Nancy cuenta con una licenciatura en
periodismo de la universidad de Austin, Texas, un master en Divinidad del Southwestern Baptist
Theological Seminary, Fort Worth y un doctorado en teología de la universidad de Tubinga, Alemania,
donde hizo su tesis bajo la supervisión de Jurgen Moltmann.

Nancy es coautora de varios libros y muchos artículos publicados y ha sido profesora de distintos
seminarios e institutos bíblicos incluidos el seminario internacional teologico bautista y el ISEDET en
Argentina es miembro de la iglesia menonita en Illinois, Estados Unidos donde radica actualmente.

Desde su infancia, como ella misma lo narra en sus escritos, Nancy vivió en la frontera de dos mundos
(vivir en Sudamérica, pero ser estadounidense) más adelante durante sus estudios en Estados
Unidos, y como lo sigue haciendo hasta ahora, cooperó con comunidades de ayuda al migrante lo
que marcó su vida y su teología.

Al leer sus escritos, vas a poder sentir el dolor de las mujeres migrantes, las luchas y sacrificios de
este grupo que muchas veces ha sido silenciado, pero también vas a poder ver como la comunidad
de fe centrada en el evangelio da oportunidades y esperanza de una vida plena para todas ellas.
Mercedes Navarro Puerto.

“El puente entre el ayer y el hoy debe ser un revulsivo a nuestra manera de estar en este mundo y un
estímulo para transformar el patriarcado de las religiones en comunidades igualitarias.”

Teóloga y psicóloga, docente de Antiguo Testamento en la universidad pontificia de Salamanca,


cofundadora de la asociación de teólogas españolas es una de las biblistas feministas más prolífica
siendo sus libros publicados por la prestigiosa editorial Verbo Divino.

En Mercedes Navarro se combina un excelente conocimiento de las herramientas de la exégesis y


hermenéutica bíblica con una aguda critica a las interpretaciones patriarcales. Cuando uno lee a
Mercedes Navarro se da cuenta que la revelación bíblica no está peleada con el feminismo, pero la
misma tiene que ser leída cuidadosamente aceptando su trasfondo patriarcal, solo así no se le quita
su poder liberador.

20
Iglesia Luterana Cristo Rey – Desayunos luteranos

21

También podría gustarte