Trabajo en el aula, análisis en base a

los textos trabajados en el año

Según Freire, las experiencias de la vida cotidiana son grandes generadoras de
aprendizaje, este niño se traslada de su ambiente natural, en un área seguramente
mucho más agreste, hacia la ciudad. Probablemente el nuevo entorno lo oprime y
hace sentir descolocado, lo que podría generarle ese retraimiento. En este caso la
institución y sus docentes serían los opresores, quienes por su supuesta excelencia
académica le imponen un sistema de conducta y lo obligan a adaptarse a este
contexto. La situación parece verse empeorada porque León prefiere adaptarse a
esta realidad sin cuestionarla, por lo cual a la vista de los profesores es un alumno
callado y con buenas notas. Notas mediante las cuales el alumno se siente
aprobado por este nuevo entorno que lo convirtió en alguien dependiente
emocionalmente de la institución. Sin embargo, esta situación parece no afectar su
parte cognitiva, que según Piaget, sería coincidente con la etapa de las
operaciones formales.
Lidia Fernández respecto a las relaciones emocionales del niño se refiere a las
“Significaciones Psicoemocionales”, el sujeto experimenta nuevos vínculos que lo
desafían a conformar su identidad en el entorno de la ciudad.

Davini habla de tradiciones académicas formales, que lo podemos relacionar con la

búsqueda de una institución centrada en la importancia extrema del nivel
académico. Notamos esto reflejado en el ejemplo que analizamos, por la cantidad
de alumnos que componen la división. Son 30 chicos con los cuales, desde el rol del
profesor, es imposible interiorizarse y comprometerse desde un aspecto personal
con la enseñanza que cada uno requiere.
Los padres asisten a una reunión con el rector de la escuela, quien les muestra el
edificio y sistema de enseñanza. Ellos ven reflejado algún ideal que quisieron
transmitir a su hijo mediante profesores que educaban de la misma manera que
ellos fueron educados. Finalmente se deciden por esta institución.
Esta escuela, por medio de las normas y exigencias curriculares, convierte al
profesor en un empleado que fracciona el conocimiento y lo estandariza para
avanzar sobre un programa de estudios muy apretado (idea que expresa bien
Giroux en “Los profesores como intelectuales”).
Alliaud en “El maestro que aprende” habla sobre algunos profesores que intentan
cambiar tradiciones profundamente arraigadas en la escuela. En este caso, vemos
la intención de algunos profesores que, en el ejemplo, llaman al chico por su nombre
con cariño. Estas costumbres, sin embargo, evidentemente no fueron transformadas
a nivel institucional.

Su expresión de un rostro sonriente ante la idea de que la profesora de Matemáticas

se ausente un mes es el único acto mínimamente desafiante respecto a una figura
que ya no está con él en el aula. Esta transformación de su personalidad
seguramente no pasó desapercibida por los padres, que con su segundo hijo deben
haber tenido en cuenta los aprendizajes que esperaban que el niño reciba en torno
a lo social (tal como las teorías del Aprendizaje Significativo de Ausubel) por lo que
emprenden nuevamente la búsqueda.