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SANTIDAD

1 ¿QUE ES LA SANTIDAD Y QUIEN SOY YO?

PLENARIA 1 MOISES, EL TABERNACULO, ISAAC Y EL CARBON


ENCENDIDO, EZEQUIEL Y EL RIO, JESUS EL AGUA DE VIDA

TALLER 1 MOSAICOS ¿QUIEN SOY? MUJER SAMARITANA LE PIDE AGUA


A JESUS

2 QUE PASA SI NO DECIDO VIVIR EN SANTIDAD

PLENARIA 2 EL PECADO DE DAVID Y SUS CONSECUENCIAS


EL CONSEJO DE DAVID A SU HIJO SALOMON 1 CRONICAS 28

TALLER 2 HOJA CON VERSICULOS, HACERLOS CON MUSICA, RITMO


SOPA DE LETRAS, EL MUNDO Y SUS PLACERES, LO QUE MIRO, LO QUE
ESCUCHO, LO QUE HAGO

3 TRES RAZONES PARA VIVIR EN SANTIDAD

PLENARIA 3 RAZONES PARA VIVIR EN SANTIDAD


LOS JOVENES QUE FUERON EXHORTADOS POR SATANAS, HECHOS 19

TALLER 3
CORAZON NEGRO, A CADA JOVEN LE ENTREGA A JESUS SU PECADO
LA SANTIDAD ES UN ESTILO DE VIDA 1 DE PEDRO 1, 13
ES UNA TRANSFERENCIA, JESUS TOMA TU PECADO Y EL TE DA SANTIDAD
1 DIOS SANTIFICO EL DIA DE REPOSO

Éxo 20:8 Acordarte has del día del reposo, para santificarlo:
Éxo 20:9 Seis días trabajarás, y harás toda tu obra;
Éxo 20:10 Mas el séptimo día será reposo para Jehová tu Dios: no hagas en él obra
alguna, tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu criada, ni tu bestia, ni tu extranjero
que está dentro de tus puertas:
Éxo 20:11 Porque en seis días hizo Jehová los cielos y la tierra, la mar y todas las
cosas que en ellos hay, y reposó en el séptimo día: por tanto Jehová bendijo el día del
reposo y lo santificó.

EL TABERNACULO

Éxo 40:1 Y JEHOVA habló á Moisés, diciendo:


Éxo 40:2 En el primer día del mes primero harás levantar el tabernáculo, el
tabernáculo del testimonio:
Éxo 40:3 Y pondrás en él el arca del testimonio, y la cubrirás con el velo:
Éxo 40:4 Y meterás la mesa, y la pondrás en orden: meterás también el candelero y
encenderás sus lámparas:
Éxo 40:5 Y pondrás el altar de oro para el perfume delante del arca del testimonio, y
pondrás el pabellón delante de la puerta del tabernáculo.
Éxo 40:6 Después pondrás el altar del holocausto delante de la puerta del
tabernáculo, del tabernáculo del testimonio.
Éxo 40:7 Luego pondrás la fuente entre el tabernáculo del testimonio y el altar; y
pondrás agua en ella.
Éxo 40:8 Finalmente pondrás el atrio en derredor, y el pabellón de la puerta del
atrio.
Éxo 40:9 Y tomarás el aceite de la unción y ungirás el tabernáculo, y todo lo que está
en él; y le santificarás con todos sus vasos, y será santo.
Éxo 40:10 Ungirás también el altar del holocausto y todos sus vasos: y santificarás
el altar, y será un altar santísimo.
Éxo 40:11 Asimismo ungirás la fuente y su basa, y la santificarás.
Éxo 40:12 Y harás llegar á Aarón y á sus hijos á la puerta del tabernáculo del
testimonio, y los lavarás con agua.
Éxo 40:13 Y harás vestir á Aarón las vestiduras sagradas, y lo ungirás, y lo
consagrarás, para que sea mi sacerdote.
Éxo 40:14 Después harás llegar sus hijos, y les vestirás las túnicas:
Éxo 40:15 Y los ungirás como ungiste á su padre, y serán mis sacerdotes: y será que
su unción les servirá por sacerdocio perpetuo por sus generaciones.
Éxo 40:16 Y Moisés hizo conforme á todo lo que Jehová le mandó; así lo hizo.
Éxo 40:17 Y así en el día primero del primer mes, en el segundo año, el tabernáculo
fué erigido.
Éxo 40:18 Y Moisés hizo levantar el tabernáculo, y asentó sus basas, y colocó sus
tablas, y puso sus barras, é hizo alzar sus columnas.
Éxo 40:19 Y extendió la tienda sobre el tabernáculo, y puso la sobrecubierta encima
del mismo; como Jehová había mandado á Moisés.
Éxo 40:20 Y tomó y puso el testimonio dentro del arca, y colocó las varas en el arca,
y encima la cubierta sobre el arca:
Éxo 40:21 Y metió el arca en el tabernáculo, y puso el velo de la tienda, y cubrió el
arca del testimonio; como Jehová había mandado á Moisés.
Éxo 40:22 Y puso la mesa en el tabernáculo del testimonio, al lado septentrional del
pabellón, fuera del velo:
Éxo 40:23 Y sobre ella puso por orden los panes delante de Jehová, como Jehová
había mandado á Moisés.
Éxo 40:24 Y puso el candelero en el tabernáculo del testimonio, enfrente de la mesa,
al lado meridional del pabellón.
Éxo 40:25 Y encendió las lámparas delante de Jehová; como Jehová había mandado
á Moisés.
Éxo 40:26 Puso también el altar de oro en el tabernáculo del testimonio, delante del
velo:
Éxo 40:27 Y encendió sobre él el perfume aromático; como Jehová había mandado á
Moisés.
Éxo 40:28 Puso asimismo la cortina de la puerta del tabernáculo.
Éxo 40:29 Y colocó el altar del holocausto á la puerta del tabernáculo, del
tabernáculo del testimonio; y ofreció sobre él holocausto y presente; como Jehová
había mandado á Moisés.
Éxo 40:30 Y puso la fuente entre el tabernáculo del testimonio y el altar; y puso en
ella agua para lavar.
Éxo 40:31 Y Moisés y Aarón y sus hijos lavaban en ella sus manos y sus pies.
Éxo 40:32 Cuando entraban en el tabernáculo del testimonio, y cuando se llegaban
al altar, se lavaban; como Jehová había mandado á Moisés.
Éxo 40:33 Finalmente erigió el atrio en derredor del tabernáculo y del altar, y puso
la cortina de la puerta del atrio. Y así acabó Moisés la obra.

La gloria del Señor


Éxo 40:34 Entonces una nube cubrió el tabernáculo del testimonio, y la gloria de
Jehová hinchió el tabernáculo.
Éxo 40:35 Y no podía Moisés entrar en el tabernáculo del testimonio, porque la
nube estaba sobre él, y la gloria de Jehová lo tenía lleno.
Éxo 40:36 Y cuando la nube se alzaba del tabernáculo, los hijos de Israel se movían
en todas sus jornadas:
Éxo 40:37 Pero si la nube no se alzaba, no se partían hasta el día en que ella se
alzaba.
Éxo 40:38 Porque la nube de Jehová estaba de día sobre el tabernáculo, y el fuego
estaba de noche en él, á vista de toda la casa de Israel, en todas sus jornadas.

2 ISAIAS ES PURIFICADO

Isa 6:1 El año de la muerte del rey Uzías, vi al Señor excelso y sublime, sentado en
un trono; las orlas de su manto llenaban el templo.
Isa 6:2 Por encima de él había serafines, cada uno de los cuales tenía seis alas: con
dos de ellas se cubrían el rostro, con dos se cubrían los pies, y con dos volaban.
Isa 6:3 Y se decían el uno al otro:

"*Santo, santo, santo es el Señor *Todopoderoso;


toda la tierra está llena de su gloria."
Isa 6:4 Al sonido de sus voces, se estremecieron los umbrales de las puertas y el
templo se llenó de humo.
Isa 6:5 Entonces grité: "¡Ay de mí, que estoy perdido! Soy un hombre de labios
*impuros y vivo en medio de un pueblo de labios blasfemos, ¡y no obstante mis ojos
han visto al Rey, al Señor Todopoderoso!"
Isa 6:6 En ese momento voló hacia mí uno de los serafines. Traía en la mano una
brasa que, con unas tenazas, había tomado del altar.
Isa 6:7 Con ella me tocó los labios y me dijo:

"Mira, esto ha tocado tus labios;


tu maldad ha sido borrada,
y tu pecado, perdonado."
3 EL RIO DE EZEQUIEL QUE SALE DEL TEMPLO

Eze 47:1 El hombre me trajo de vuelta a la entrada del templo, y vi que brotaba
agua por debajo del umbral, en dirección al oriente, que es hacia donde da la fachada
del templo. El agua corría por la parte baja del lado derecho del templo, al sur del
altar.
Eze 47:2 Luego el hombre me sacó por la puerta del norte, y me hizo dar la vuelta
por fuera, hasta la puerta exterior que mira hacia el oriente; y vi que las aguas fluían
del lado sur.
Eze 47:3 El hombre salió hacia el oriente con una cuerda en la mano, midió
quinientos metros y me hizo cruzar el agua, la cual me llegaba a los tobillos.
Eze 47:4 Luego midió otros quinientos metros y me hizo cruzar el agua, que ahora
me llegaba a las rodillas. Midió otros quinientos metros, y me hizo cruzar el agua,
que esta vez me llegaba a la cintura.
Eze 47:5 Midió otros quinientos metros, pero la corriente se había convertido ya en
un río que yo no podía cruzar. Había crecido tanto que sólo se podía cruzar a nado.
Eze 47:6 Entonces me preguntó: "¿Lo has visto, hijo de hombre?" En seguida me
hizo volver a la orilla del río,
Eze 47:7 y al llegar vi que en sus márgenes había muchos árboles.
Eze 47:8 Allí me dijo: "Estas aguas fluyen hacia la región oriental, descienden hasta
el Arabá, y van a dar al Mar Muerto. Cuando desembocan en ese mar, las aguas se
vuelven dulces.
Eze 47:9 Por donde corra este río, todo ser viviente que en él se mueva vivirá.
Habrá peces en abundancia porque el agua de este río transformará el agua salada
en agua dulce, y todo lo que se mueva en sus aguas vivirá.
Eze 47:10 Junto al río se detendrán los pescadores, desde Engadi hasta Eneglayin,
porque allí habrá lugar para secar sus redes. Los peces allí serán tan variados y
numerosos como en el mar Mediterráneo.
Eze 47:11 [1] Pero sus pantanos y marismas no tendrán agua dulce, sino que
quedarán como salinas.
Eze 47:12 Junto a las orillas del río crecerá toda clase de árboles frutales; sus hojas
no se marchitarán, y siempre tendrán frutos. Cada mes darán frutos nuevos, porque
el agua que los riega sale del templo. Sus frutos servirán de alimento y sus hojas
serán medicinales.
EL RIO QUE SALE DEL INTERIOR

Jua 4:1 Jesús* se enteró de que los fariseos sabían que él estaba haciendo y
bautizando más discípulos que Juan
Jua 4:2 (aunque en realidad no era Jesús quien bautizaba sino sus discípulos).
Jua 4:3 Por eso se fue de Judea y volvió otra vez a Galilea.
Jua 4:4 Como tenía que pasar por Samaria,
Jua 4:5 llegó a un pueblo samaritano llamado Sicar, cerca del terreno que Jacob le
había dado a su hijo José.
Jua 4:6 Allí estaba el pozo de Jacob. Jesús, fatigado del camino, se sentó junto al
pozo. Era cerca del mediodía.*
Jua 4:7 Sus discípulos habían ido al pueblo a comprar comida. En eso llegó a sacar
agua una mujer de Samaria, y Jesús le dijo: --Dame un poco de agua.
Jua 4:8 (OMITTED TEXT)
Jua 4:9 Pero como los judíos no usan nada en común* con los samaritanos, la mujer
le respondió: --¿Cómo se te ocurre pedirme agua, si tú eres judío y yo soy
samaritana?
Jua 4:10 --Si supieras lo que Dios puede dar, y conocieras al que te está pidiendo
agua --contestó Jesús--, tú le habrías pedido a él, y él te habría dado agua que da
vida.
Jua 4:11 --Señor, ni si quiera tienes con qué sacar agua, y el pozo es muy hondo; ¿de
dónde, pues, vas a sacar esa agua que da vida?
Jua 4:12 ¿Acaso eres tú superior a nuestro padre Jacob, que nos dejó este pozo, del
cual bebieron él, sus hijos y su ganado?
Jua 4:13 --Todo el que beba de esta agua volverá a tener sed --respondió Jesús--,
Jua 4:14 pero el que beba del agua que yo le daré, no volverá a tener sed jamás, sino
que dentro de él esa agua se convertirá en un manantial del que brotará vida eterna.
Jua 4:15 --Señor, dame de esa agua para que no vuelva a tener sed ni siga viniendo
aquí a sacarla.
Jua 4:16 --Ve a llamar a tu e sposo, y vuelve acá --le dijo Jesús.
Jua 4:17 --No tengo esposo --respondió la mujer. --Bien has dicho que no tienes
esposo.
Jua 4:18 Es cierto que has tenido cinco, y el que ahora tienes no es tu esposo. En
esto has dicho la verdad.
Jua 4:19 --Señor, me doy cuenta de que tú eres profeta.
Jua 4:20 Nuestros antepasados adoraron en este monte, pero ustedes los judíos
dicen que el lugar donde debemos adorar está en Jerusalén.
Jua 4:21 --Créeme, mujer, que se acerca la hora en que ni en este monte ni en
Jerusalén adorarán ustedes al Padre.
Jua 4:22 Ahora ustedes adoran lo que no conocen; nosotros adoramos lo que
conocemos, porque la salvación proviene de los judíos.
Jua 4:23 Pero se acerca la hora, y ha llegado ya, en que los verdaderos adoradores
rendirán culto al Padre en espíritu y en verdad,* porque así quiere el Padre que sean
los que le adoren.
Jua 4:24 Dios es espíritu, y q uienes lo adoran deben hacerlo en espíritu y en
verdad.
Jua 4:25 --Sé que viene el Mesías, al que llaman el Cristo --respondió la mujer--.
Cuando él venga nos explicará todas las cosas.
Jua 4:26 --Ése soy yo, el que habla contigo --le dijo Jesús.
Jua 4:27 En esto llegaron sus discípulos y se sorprendieron de verlo hablando con
una mujer, aunque ninguno le preguntó: "¿Qué pretendes?" o "¿De qué hablas con
ella?"
Jua 4:28 La mujer dejó su cántaro, volvió al pueblo y le decía a la gente:
Jua 4:29 --Vengan a ver a un hombre que me ha dicho todo lo que he hecho. ¿No
será éste el Cristo?
Jua 4:30 Salieron del pueblo y fueron a ver a Jesús.
Jua 4:31 Mientras tanto, sus discípulos le insistían: --Rabí, come algo.
Jua 4:32 --Yo tengo un alimento que ustedes no conocen --replicó él.
Jua 4:33 "¿Le habrán traído algo de comer?", comentaban entre sí los discípulos.
Jua 4:34 --Mi alimento es hacer la voluntad del que me envió y terminar su obra --
les dijo Jesús--.
Jua 4:35 ¿No dicen ustedes: 'Todavía faltan cuatro meses para la cosecha'? Yo les
digo: ¡Abran los ojos y miren los campos sembrados! Ya la cosecha está madura;
Jua 4:36 ya el segador recibe su salario y recoge el fruto para vida eterna. Ahora
tanto el sembrador como el segador se alegran juntos.
Jua 4:37 Porque como dice el refrán: 'Uno es el que siembra y otro el que cosecha.'
Jua 4:38 Yo los he enviado a ustedes a cosechar lo que no les costó ningún tra bajo.
Otros se han fatigado trabajando, y ustedes han cosechado el fruto de ese trabajo.
Jua 4:39 Muchos de los samaritanos que vivían en aquel pueblo creyeron en él por
el testimonio que daba la mujer: "Me dijo todo lo que he hecho."
Jua 4:40 Así que cuando los samaritanos vinieron a su encuentro le insistieron en
que se quedara con ellos. Jesús permaneció allí dos días,
Jua 4:41 y muchos más llegaron a creer por lo que él mismo decía.
Jua 4:42 --Ya no creemos sólo por lo que tú dijiste --le decían a la mujer--; ahora lo
hemos oído nosotros mismos, y sabemos que verdaderamente éste es el Salvador
del mundo.
Jua 4:43 Después de esos dos días salió de allí rumbo a Galilea
Jua 4:44 (pues, como él mismo había dicho, a ningún profeta se le honra en su
propia tierra).
Jua 4:45 Cuando llegó a Galilea, fue bien recibido por los galileos, pues éstos habían
visto personalmente todo lo que había hecho en Jerusalén durante la fiesta de la
Pascua, ya que ellos habían estado también allí.
Jua 7:37 En el último día, el más solemne de la fiesta, Jesús se puso de pie y exclamó:
--¡Si alguno tiene sed, que venga a mí y beba!
Jua 7:38 De aquel que cree en mí, como dice* la Escritura, brotarán ríos de agua
viva.
Jua 7:39 Con esto se refería al Espíritu que habrían de recibir más tarde los que
creyeran en él. Hasta ese momento el Espíritu no había sido dado, porque Jesús no
había sido glorificado todavía.

Apo 22:1 Luego el ángel me mostró un río de agua de vida, claro como el cristal,
que salía del trono de Dios y del Cordero,
Apo 22:2 y corría por el centro de la calle* principal de la ciudad. A cada lado del río
estaba el árbol de la vida, que produce doce cosechas al año, una por mes; y las hojas
del árbol son para la salud de las naciones.
Apo 22:3 Ya no habrá maldición. El trono de Dios y del Cordero estará en la ciudad.
Sus siervos lo adorarán;
Apo 22:4 lo verán cara a cara, y llevarán su n ombre en la frente.
Apo 22:5 Ya no habrá noche; no necesitarán luz de lámpara ni de sol, porque el
Señor Dios los alumbrará. Y reinarán por los siglos de los siglos.
4 TU ESTILO DE VIDA

1Pe 1:13 Por lo cual, teniendo los lomos de vuestro entendimiento ceñidos, con
templanza, esperad perfectamente en la gracia que os es presentada cuando
Jesucristo os es manifestado:
1Pe 1:14 Como hijos obedientes, no conformándoos con los deseos que antes
teníais estando en vuestra ignorancia;
1Pe 1:15 Sino como aquel que os ha llamado es santo, sed también vosotros santos
en toda conversación:
1Pe 1:16 Porque escrito está: Sed santos, porque yo soy santo.
1Pe 1:17 Y si invocáis por Padre á aquel que sin acepción de personas juzga según
la obra de cada uno, conversad en temor todo el tiempo de vuestra peregrinación:
1Pe 1:18 Sabiendo que habéis sido rescatados de vuestra vana conversación, la cual
recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro ó plata;
1Pe 1:19 Sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin
contaminación:
1Pe 1:20 Ya ordenado de antes de la fundación del mundo, pero manifestado en los
postrimeros tiempos por amor de vosotros,
1Pe 1:21 Que por él creéis á Dios, el cual le resucitó de los muertos, y le ha dado
gloria, para que vuestra fe y esperanza sea en Dios.
1Pe 1:22 Habiendo purificado vuestras almas en la obediencia de la verdad, por el
Espíritu, en caridad hermanable sin fingimiento, amaos unos á otros
entrañablemente de corazón puro:
1Pe 1:23 Siendo renacidos, no de simiente corruptible, sino de incorruptible, por la
palabra de Dios, que vive y permanece para siempre.
1Pe 1:24 Porque Toda carne es como la hierba, Y toda la gloria del hombre como la
flor de la hierba: Secóse la hierba, y la flor se cayó;
1Pe 1:25 Mas la palabra del Señor permanece perpetuamente. Y esta es la palabra
que por el evangelio os ha sido anunciada.

1Ti 4:12 Ninguno tenga en poco tu juventud, sino sé ejemplo de los creyentes en
palabra, conducta, amor, espíritu, fe y pureza.

4 COMO ES UNA VIDA SIN SANTIDA


SAUL NO OBEDECE Y ES DESECHADO POR DIOS
1Sa 15:22 Y Samuel dijo: ¿Se complace Jehová tanto en los
holocaustos y víctimas, como en que se obedezca a las palabras de
Jehová? Ciertamente el obedecer es mejor que los sacrificios, y el
prestar atención que la grosura de los carneros.
1Sa 15:23 Porque como pecado de adivinación es la rebelión, y como
ídolos e idolatría la obstinación. Por cuanto tú desechaste la palabra de
Jehová, él también te ha desechado para que no seas rey.
1Sa 15:24 Entonces Saúl dijo a Samuel: Yo he pecado; pues he
quebrantado el mandamiento de Jehová y tus palabras, porque temí al
pueblo y consentí a la voz de ellos. Perdona, pues, ahora mi pecado,
1Sa 15:25 y vuelve conmigo para que adore a Jehová.
1Sa 15:26 Y Samuel respondió a Saúl: No volveré contigo; porque
desechaste la palabra de Jehová, y Jehová te ha desechado para que
no seas rey sobre Israel.
1Sa 15:27 Y volviéndose Samuel para irse, él se asió de la punta de
su manto, y éste se rasgó.
1Sa 15:28 Entonces Samuel le dijo: Jehová ha rasgado hoy de ti el
reino de Israel, y lo ha dado a un prójimo tuyo mejor que tú.
1Sa 15:29 Además, el que es la Gloria de Israel no mentirá, ni se
arrepentirá, porque no es hombre para que se arrepienta.
1Sa 15:30 Y él dijo: Yo he pecado; pero te ruego que me honres
delante de los ancianos de mi pueblo y delante de Israel, y vuelvas
conmigo para que adore a Jehová tu Dios.
1Sa 15:31 Y volvió Samuel tras Saúl, y adoró Saúl a Jehová.

LA VIDA DE DAVID, DIOS LO DEJO SOLO CUANDO PECO, NO CAMINO CON EL


CUANDO DAVID PECO.
1Sa 16:12 Envió, pues, por él, y le hizo entrar; y era rubio, hermoso
de ojos, y de buen parecer. Entonces Jehová dijo: Levántate y úngelo,
porque éste es.
1Sa 16:13 Y Samuel tomó el cuerno del aceite, y lo ungió en medio
de sus hermanos; y desde aquel día en adelante el Espíritu de Jehová
vino sobre David. Se levantó luego Samuel, y se volvió a Ramá.

Jehová envió a Natán a David;(A) y viniendo a él, le dijo: Había dos


hombres en una ciudad, el uno rico, y el otro pobre.
2Sa 12:2 El rico tenía numerosas ovejas y vacas;
2Sa 12:3 pero el pobre no tenía más que una sola corderita, que él
había comprado y criado, y que había crecido con él y con sus hijos
juntamente, comiendo de su bocado y bebiendo de su vaso, y
durmiendo en su seno; y la tenía como a una hija.
2Sa 12:4 Y vino uno de camino al hombre rico; y éste no quiso tomar
de sus ovejas y de sus vacas, para guisar para el caminante que había
venido a él, sino que tomó la oveja de aquel hombre pobre, y la
preparó para aquel que había venido a él.
2Sa 12:5 Entonces se encendió el furor de David en gran manera
contra aquel hombre, y dijo a Natán: Vive Jehová, que el que tal hizo
es digno de muerte.
2Sa 12:6 Y debe pagar la cordera con cuatro tantos, porque hizo tal
cosa, y no tuvo misericordia.
2Sa 12:7 Entonces dijo Natán a David: Tú eres aquel hombre. Así ha
dicho Jehová, Dios de Israel: Yo te ungí por rey sobre Israel, y te libré
de la mano de Saúl,
2Sa 12:8 y te di la casa de tu señor, y las mujeres de tu señor en tu
seno; además te di la casa de Israel y de Judá; y si esto fuera poco, te
habría añadido mucho más.
2Sa 12:9 ¿Por qué, pues, tuviste en poco la palabra de Jehová,
haciendo lo malo delante de sus ojos? A Urías heteo heriste a espada,
y tomaste por mujer a su mujer, y a él lo mataste con la espada de los
hijos de Amón.
2Sa 12:10 Por lo cual ahora no se apartará jamás de tu casa la
espada, por cuanto me menospreciaste, y tomaste la mujer de Urías
heteo para que fuese tu mujer.
2Sa 12:11 Así ha dicho Jehová: He aquí yo haré levantar el mal sobre
ti de tu misma casa, y tomaré tus mujeres delante de tus ojos, y las
daré a tu prójimo, el cual yacerá con tus mujeres a la vista del sol.
2Sa 12:12 Porque tú lo hiciste en secreto; mas yo haré esto delante
de todo Israel y a pleno sol.(B)
2Sa 12:13 Entonces dijo David a Natán: Pequé contra Jehová. Y
Natán dijo a David: También Jehová ha remitido tu pecado; no
morirás.
2Sa 12:14 Mas por cuanto con este asunto hiciste blasfemar a los
enemigos de Jehová, el hijo que te ha nacido ciertamente morirá.

2Sa 12:15 Y Natán se volvió a su casa.


Y Jehová hirió al niño que la mujer de Urías había dado a David, y
enfermó gravemente.
2Sa 12:16 Entonces David rogó a Dios por el niño; y ayunó David, y
entró, y pasó la noche acostado en tierra.
2Sa 12:17 Y se levantaron los ancianos de su casa, y fueron a él para
hacerlo levantar de la tierra; mas él no quiso, ni comió con ellos pan.
2Sa 12:18 Y al séptimo día murió el niño; y temían los siervos de
David hacerle saber que el niño había muerto, diciendo entre sí:
Cuando el niño aún vivía, le hablábamos, y no quería oír nuestra voz;
¿cuánto más se afligirá si le decimos que el niño ha muerto?
2Sa 12:19 Mas David, viendo a sus siervos hablar entre sí, entendió
que el niño había muerto; por lo que dijo David a sus siervos: ¿Ha
muerto el niño? Y ellos respondieron: Ha muerto.
2Sa 12:20 Entonces David se levantó de la tierra, y se lavó y se
ungió, y cambió sus ropas, y entró a la casa de Jehová, y adoró.
Después vino a su casa, y pidió, y le pusieron pan, y comió.
2Sa 12:21 Y le dijeron sus siervos: ¿Qué es esto que has hecho? Por
el niño, viviendo aún, ayunabas y llorabas; y muerto él, te levantaste
y comiste pan.
2Sa 12:22 Y él respondió: Viviendo aún el niño, yo ayunaba y lloraba,
diciendo: ¿Quién sabe si Dios tendrá compasión de mí, y vivirá el niño?
2Sa 12:23 Mas ahora que ha muerto, ¿para qué he de ayunar? ¿Podré
yo hacerle volver? Yo voy a él, mas él no volverá a mí.

Aconteció al año siguiente, en el tiempo que salen los reyes a la


guerra, que David envió a Joab, y con él a sus siervos y a todo Israel,
y destruyeron a los amonitas, y sitiaron a Rabá; pero David se quedó
en Jerusalén.(A)
2Sa 11:2 Y sucedió un día, al caer la tarde, que se levantó David de
su lecho y se paseaba sobre el terrado de la casa real; y vio desde el
terrado a una mujer que se estaba bañando, la cual era muy hermosa.
2Sa 11:3 Envió David a preguntar por aquella mujer, y le dijeron:
Aquella es Betsabé hija de Eliam, mujer de Urías heteo.
2Sa 11:4 Y envió David mensajeros, y la tomó; y vino a él, y él
durmió con ella. Luego ella se purificó de su inmundicia, y se volvió a
su casa.
2Sa 11:5 Y concibió la mujer, y envió a hacerlo saber a David,
diciendo: Estoy encinta.
2Sa 11:6 Entonces David envió a decir a Joab: Envíame a Urías heteo.
Y Joab envió a Urías a David.
2Sa 11:7 Cuando Urías vino a él, David le preguntó por la salud de
Joab, y por la salud del pueblo, y por el estado de la guerra.
2Sa 11:8 Después dijo David a Urías: Desciende a tu casa, y lava tus
pies. Y saliendo Urías de la casa del rey, le fue enviado presente de la
mesa real.
2Sa 11:9 Mas Urías durmió a la puerta de la casa del rey con todos
los siervos de su señor, y no descendió a su casa.
2Sa 11:10 E hicieron saber esto a David, diciendo: Urías no ha
descendido a su casa. Y dijo David a Urías: ¿No has venido de camino?
¿Por qué, pues, no descendiste a tu casa?
2Sa 11:11 Y Urías respondió a David: El arca e Israel y Judá están
bajo tiendas, y mi señor Joab, y los siervos de mi señor, en el campo;
¿y había yo de entrar en mi casa para comer y beber, y a dormir con
mi mujer? Por vida tuya, y por vida de tu alma, que yo no haré tal
cosa.
2Sa 11:12 Y David dijo a Urías: Quédate aquí aún hoy, y mañana te
despacharé. Y se quedó Urías en Jerusalén aquel día y el siguiente.
2Sa 11:13 Y David lo convidó a comer y a beber con él, hasta
embriagarlo. Y él salió a la tarde a dormir en su cama con los siervos
de su señor; mas no descendió a su casa.
2Sa 11:14 Venida la mañana, escribió David a Joab una carta, la cual
envió por mano de Urías.
2Sa 11:15 Y escribió en la carta, diciendo: Poned a Urías al frente, en
lo más recio de la batalla, y retiraos de él, para que sea herido y
muera.
2Sa 11:16 Así fue que cuando Joab sitió la ciudad, puso a Urías en el
lugar donde sabía que estaban los hombres más valientes.
2Sa 11:17 Y saliendo luego los de la ciudad, pelearon contra Joab, y
cayeron algunos del ejército de los siervos de David; y murió también
Urías heteo.
2Sa 11:18 Entonces envió Joab e hizo saber a David todos los asuntos
de la guerra.
2Sa 11:19 Y mandó al mensajero, diciendo: Cuando acabes de contar
al rey todos los asuntos de la guerra,
2Sa 11:20 si el rey comenzare a enojarse, y te dijere: ¿Por qué os
acercasteis demasiado a la ciudad para combatir? ¿No sabíais lo que
suelen arrojar desde el muro?
2Sa 11:21 ¿Quién hirió a Abimelec hijo de Jerobaal? ¿No echó una
mujer del muro un pedazo de una rueda de molino, y murió en
Tebes?(B) ¿Por qué os acercasteis tanto al muro? Entonces tú le dirás:
También tu siervo Urías heteo es muerto.
2Sa 11:22 Fue el mensajero, y llegando, contó a David todo aquello a
que Joab le había enviado.
2Sa 11:23 Y dijo el mensajero a David: Prevalecieron contra nosotros
los hombres que salieron contra nosotros al campo, bien que nosotros
les hicimos retroceder hasta la entrada de la puerta;
2Sa 11:24 pero los flecheros tiraron contra tus siervos desde el muro,
y murieron algunos de los siervos del rey; y murió también tu siervo
Urías heteo.
2Sa 11:25 Y David dijo al mensajero: Así dirás a Joab: No tengas
pesar por esto, porque la espada consume, ora a uno, ora a otro;
refuerza tu ataque contra la ciudad, hasta que la rindas. Y tú aliéntale.
2Sa 11:26 Oyendo la mujer de Urías que su marido Urías era muerto,
hizo duelo por su marido.
2Sa 11:27 Y pasado el luto, envió David y la trajo a su casa; y fue ella
su mujer, y le dio a luz un hijo. Mas esto que David había hecho, fue
desagradable ante los ojos de Jehová.

DAVID VUELVE A PECAR CONTRA DIOS

Volvió a encenderse la ira de Jehová contra Israel, e incitó a David


contra ellos a que dijese: Vé, haz un censo de Israel y de Judá.
2Sa 24:2 Y dijo el rey a Joab, general del ejército que estaba con él:
Recorre ahora todas las tribus de Israel, desde Dan hasta Beerseba, y
haz un censo del pueblo, para que yo sepa el número de la gente.
2Sa 24:3 Joab respondió al rey: Añada Jehová tu Dios al pueblo cien
veces tanto como son, y que lo vea mi señor el rey; mas ¿por qué se
complace en esto mi señor el rey?
2Sa 24:4 Pero la palabra del rey prevaleció sobre Joab y sobre los
capitanes del ejército. Salió, pues, Joab, con los capitanes del ejército,
de delante del rey, para hacer el censo del pueblo de Israel.
2Sa 24:5 Y pasando el Jordán acamparon en Aroer, al sur de la ciudad
que está en medio del valle de Gad y junto a Jazer.
2Sa 24:6 Después fueron a Galaad y a la tierra baja de Hodsi; y de
allí a Danjaán y a los alrededores de Sidón.
2Sa 24:7 Fueron luego a la fortaleza de Tiro, y a todas las ciudades
de los heveos y de los cananeos, y salieron al Neguev de Judá en
Beerseba.
2Sa 24:8 Después que hubieron recorrido toda la tierra, volvieron a
Jerusalén al cabo de nueve meses y veinte días.
2Sa 24:9 Y Joab dio el censo del pueblo al rey; y fueron los de Israel
ochocientos mil hombres fuertes que sacaban espada, y los de Judá
quinientos mil hombres.

2Sa 24:10 Después que David hubo censado al pueblo, le pesó en su


corazón; y dijo David a Jehová: Yo he pecado gravemente por haber
hecho esto; mas ahora, oh Jehová, te ruego que quites el pecado de tu
siervo, porque yo he hecho muy neciamente.
2Sa 24:11 Y por la mañana, cuando David se hubo levantado, vino
palabra de Jehová al profeta Gad, vidente de David, diciendo:
2Sa 24:12 Vé y dí a David: Así ha dicho Jehová: Tres cosas te
ofrezco; tú escogerás una de ellas, para que yo la haga.
2Sa 24:13 Vino, pues, Gad a David, y se lo hizo saber, y le dijo:
¿Quieres que te vengan siete años de hambre en tu tierra? ¿o que
huyas tres meses delante de tus enemigos y que ellos te persigan? ¿o
que tres días haya peste en tu tierra? Piensa ahora, y mira qué
responderé al que me ha enviado.
2Sa 24:14 Entonces David dijo a Gad: En grande angustia estoy;
caigamos ahora en mano de Jehová, porque sus misericordias son
muchas, mas no caiga yo en manos de hombres.
2Sa 24:15 Y Jehová envió la peste sobre Israel desde la mañana
hasta el tiempo señalado; y murieron del pueblo, desde Dan hasta
Beerseba, setenta mil hombres.
2Sa 24:16 Y cuando el ángel extendió su mano sobre Jerusalén para
destruirla, Jehová se arrepintió de aquel mal, y dijo al ángel que
destruía al pueblo: Basta ahora; detén tu mano. Y el ángel de Jehová
estaba junto a la era de Arauna jebuseo.
2Sa 24:17 Y David dijo a Jehová, cuando vio al ángel que destruía al
pueblo: Yo pequé, yo hice la maldad; ¿qué hicieron estas ovejas? Te
ruego que tu mano se vuelva contra mí, y contra la casa de mi padre.
LE DIO EL CONSEJO A SU HIJO SALOMON
1Re 2:3 Guarda los preceptos de Jehová tu Dios, andando en sus
caminos, y observando sus estatutos y mandamientos, sus decretos y
sus testimonios, de la manera que está escrito en la ley de Moisés,
para que prosperes en todo lo que hagas y en todo aquello que
emprendas;
1Re 2:4 para que confirme Jehová la palabra que me habló, diciendo:
Si tus hijos guardaren mi camino, andando delante de mí con verdad,
de todo su corazón y de toda su alma, jamás, dice, faltará a ti varón
en el trono de Israel.

1Cr 28:9 Y tú, Salomón, hijo mío, reconoce al Dios de tu padre, y sírvele con corazón
perfecto y con ánimo voluntario; porque Jehová escudriña los corazones de todos, y
entiende todo intento de los pensamientos. Si tú le buscares, lo hallarás; más si lo
dejares, él te desechará para siempre.
1Cr 28:10 Mira, pues, ahora, que Jehová te ha elegido para que edifiques casa para
el santuario; esfuérzate, y hazla.
1Cr 28:11 Y David dio a Salomón su hijo el plano del pórtico del templo y sus casas,
sus tesorerías, sus aposentos, sus cámaras y la casa del propiciatorio.
1Cr 28:12 Asimismo el plano de todas las cosas que tenía en mente para los atrios
de la casa de Jehová, para todas las cámaras alrededor, para las tesorerías de la casa
de Dios, y para las tesorerías de las cosas santificadas.
1Cr 28:13 También para los grupos de los sacerdotes y de los levitas, para toda la
obra del ministerio de la casa de Jehová, y para todos los utensilios del ministerio de
la casa de Jehová.
1Cr 28:14 Y dio oro en peso para las cosas de oro, para todos los utensilios de cada
servicio, y plata en peso para todas las cosas de plata, para todos los utensilios de
cada servicio.
1Cr 28:15 Oro en peso para los candeleros de oro, y para sus lámparas; en peso el
oro para cada candelero y sus lámparas; y para los candeleros de plata, plata en
peso para cada candelero y sus lámparas, conforme al servicio de cada candelero.
1Cr 28:16 Asimismo dio oro en peso para las mesas de la proposición, para cada
mesa; del mismo modo plata para las mesas de plata.
1Cr 28:17 También oro puro para los garfios, para los lebrillos, para las copas y
para las tazas de oro; para cada taza por peso; y para las tazas de plata, por peso
para cada taza.
1Cr 28:18 Además, oro puro en peso para el altar del incienso, y para el carro de los
querubines de oro, que con las alas extendidas cubrían el arca del pacto de Jehová.
1Cr 28:19 Todas estas cosas, dijo David, me fueron trazadas por la mano de Jehová,
que me hizo entender todas las obras del diseño.
1Cr 28:20 Dijo además David a Salomón su hijo: Anímate y esfuérzate, y manos a la
obra; no temas, ni desmayes, porque Jehová Dios, mi Dios, estará contigo; él no te
dejará ni te desamparará, hasta que acabes toda la obra para el servicio de la casa de
Jehová.
1Cr 28:21 He aquí los grupos de los sacerdotes y de los levitas, para todo el
ministerio de la casa de Dios, estarán contigo en toda la obra; asimismo todos los
voluntarios e inteligentes para toda forma de servicio, y los príncipes, y todo el
pueblo para ejecutar todas tus órdenes.

Cuando Salomón hubo acabado la obra de la casa de Jehová, y la casa


real, y todo lo que Salomón quiso hacer,
1Re 9:2 Jehová apareció a Salomón la segunda vez, como le había
aparecido en Gabaón.(A)
1Re 9:3 Y le dijo Jehová: Yo he oído tu oración y tu ruego que has
hecho en mi presencia. Yo he santificado esta casa que tú has
edificado, para poner mi nombre en ella para siempre; y en ella
estarán mis ojos y mi corazón todos los días.
1Re 9:4 Y si tú anduvieres delante de mí como anduvo David tu
padre, en integridad de corazón y en equidad, haciendo todas las
cosas que yo te he mandado, y guardando mis estatutos y mis
decretos,
1Re 9:5 yo afirmaré el trono de tu reino sobre Israel para siempre,
como hablé a David tu padre, diciendo: No faltará varón de tu
descendencia en el trono de Israel.(B)
1Re 9:6 Mas si obstinadamente os apartareis de mí vosotros y
vuestros hijos, y no guardareis mis mandamientos y mis estatutos que
yo he puesto delante de vosotros, sino que fuereis y sirviereis a dioses
ajenos, y los adorareis;
1Re 9:7 yo cortaré a Israel de sobre la faz de la tierra que les he
entregado; y esta casa que he santificado a mi nombre, yo la echaré
de delante de mí, e Israel será por proverbio y refrán a todos los
pueblos;
1Re 9:8 y esta casa, que estaba en estima, cualquiera que pase por
ella se asombrará, y se burlará, y dirá: ¿Por qué ha hecho así Jehová a
esta tierra y a esta casa?(C)
1Re 9:9 Y dirán: Por cuanto dejaron a Jehová su Dios, que había
sacado a sus padres de tierra de Egipto, y echaron mano a dioses
ajenos, y los adoraron y los sirvieron; por eso ha traído Jehová sobre
ellos todo este mal.
6 TRES RAZONES PARA VIVIR EN SANTIDAD

1. LA SANTIDAD NOS PERMITE VER A DIOS

HEBREOS 12.14
Heb 12:14 Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie
verá al Señor.

APOCALIPSIS 21.27
Apo 21:27 Nunca entrará en ella nada impuro, ni los idólatras ni los
farsantes, sino sólo aquellos que tienen su nombre escrito en el libro
de la vida, el libro del Cordero.

SALMOS 51.17
Sal 51:17 El sacrificio que te agrada es un espíritu quebrantado; tú,
oh Dios, no desprecias al corazón quebrantado y arrepentido.

2. SI VIVIMOS EN SANTIDAD PODEMOS TENER LA UNCION PARA SANAR


ENFERMOS, SACAR DEMONIOS

HECHOS 19.16

SANTIAGO 4.7

3. LA SANTIDAD ES UN CERCO DE PROTECCION SOBRE TU VIDA Y TU FAMILIA

JUAN 10.10
1 DE PEDRO 1.16
1 JUAN 2.1
EFESIOS 5.27
1 TESALONISENSES 4. 7,8
1 TESALONISENCES 5.23
2 TIMOTEO 2.19
FILIPENSES1.16

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