Adrián Molina, nació el 23 de agosto de 1985.

Es un animador, guionista, guionista y letrista

estadounidense. Él ha estado en Pixar desde 2007, donde comenzó como animador 2D en
Ratatouille. Más tarde pasó a ser un artista de storyboard, trabajando en Toy Story 3 y
Monsters University. Después de escribir para El gran dinosaurio, Molina comenzó su primera
tarea como guionista, para Coco , y más tarde co-dirigió la película. Molina también ilustró
el Pequeño Libro de Oro para Toy Story.
Creció en Grass Valley, California, y se graduó de Bear River High School en 2003, para luego
asistir y graduarse del Instituto de Artes de California en 2007. Es descendiente de mexicanos.
Lee Edward Unkrich, nació el 8 de agosto de 1967. Es un director de
cine y montador estadounidense. Se graduó en la Universidad del Sur de California en 1990 y
en 1994 comenzó a trabajar como montajista en la productora de películas de animación Pixar.
Tras haber codirigido tres películas de Pixar, Toy Story 2, Monsters, Inc. y Buscando a Nemo,
debutó como director con Toy Story 3. En 2017 estrenó Coco. Es miembro del American
Cinema Editors.
La muerte hace parte de nosotros, así como el miedo a ser olvidados. El miedo al olvido prima
en el corazón del ser humano, pues nadie quiere ser olvidado, aparte de ser inherente a la
ausencia. Lo que hace la pelicula es convertir esto temible en algo cotidiano y agradable, algo
que no se teme, sino que hace parte de nosotros, en nuestra condición de seres mortales. La
tradición mexicana, conocida como el Día de los muertos, permite ver esta situación no de una
forma trágica como en otros países de Latinoamérica como Colombia, sino unida a una cultura
muy arraigada al respeto por los muertos, a los lazos familiares y a la conservación de una
memoria ancestral.
Aquello que se hace más notorio en la producción, es el deseo por preservar las tradiciones
familiares, que van configurando una memoria colectiva de lo que son como familia, es lo que
los determina como personas, puesto que si nadie puede conservarlo, estamos destinados al
olvido y con ello, al polvo de la vida, sin huella capaz de conservarse en la presencia de quienes
vivieron con nosotros. Esta perseverancia hecha por todos los integrantes de la Familia Rivera,
por mantener las costumbres vivas, tiene como objetivo asegurar su transmisión de
generación en generación. Miguel al no estar de acuerdo con estas tradiciones, que frustran
sus intereses personales, negando el propósito de fondo que tenía su familia de mantenerse
unida, está anulándose así mismo de la memoria familiar, sometiéndose al olvido futuro.
Es la confrontación de los valores familiares con los individuales. Prima el deseo por cumplir los
sueños, pero en contrapeso se encuentra la familia que busca mantener los lazos unidos por
generaciones. Son la red de apoyo de cada uno, puesto que se manifiesta entre ellos el valor
que tiene la unión familiar y el hacer lo que sea necesario para no romperla. Esta celebración
además, permite apreciar el valor que tiene la memoria, porque es a partir de esta que se
conservan rituales y los conocimientos de los ancestros, que aun después de muertos,
permanecen en la familia. Es el signo de que pertenecemos a un colectivo familiar, que cuenta
con una historia que luego se hereda. Por ejemplo, el talento de Miguel, es la manifestación
del talento de su ancestro Héctor, que se hizo presente en él.

La vocación de Miguel, deriva de la vocación de su ídolo, Ernesto de la cruz, quien es movido

por la ambición a la fama y a trascender aun después de muerto, distingue varias diferencias.
Ese camino de “vive tu momento” profetizado por Ernesto, implicó para el personaje
corromperse y sacrificar incluso a sus seres queridos, lo que cabe tener en cuenta, pues este
ejemplo deja claro que no vale tanto como parece, sacrificar todo para tener valor en vida, si
después de muerto puede ser borrado de la memoria de todos, incluso de aquellos que lo
creyeron inmortal. A diferencia de Miguel, quien siente una vocación pura y siente que su don
corre por sus venas.

Todos, cuando dejan de sonar las campanas de la vida, tienen la probabilidad de vivir en el
abandono de la memoria, anhelando situaciones que ya no sucederán, como la eterna espera
de Héctor, viviendo en una constante agonía hasta que llegue su momento de retornar a la
tierra que los vio nacer. Por ello, es muy valioso el esfuerzo de todos los personajes por
perdurar en la memoria, en la vida después de la vida, aunque no hagan parte de ese mundo
ya, se les recuerda y conmemora por aquello que fueron en vida. “El sufrimiento que permito,
la brutalidad perpetrada, continúa existiendo tras el momento en que suceden, solo en la
conciencia humana que recuerda, y se extinguen con ella“(Horkheimer, Anhelo de justicia). Pues
todas esas acciones tienen un objetivo, incluso en el mundo de los muertos, de poder tener
una vida gloriosa, que anhelan aquellos que no quieren ser olvidados.

En la película Coco, se expone una idea fundamental, de que la vida humana se construye a
partir de los lazos que creamos en vida, que lo que construye a una persona como tal y como
un ser eterno, es el tejido de relaciones que construye en su vida histórica y las que deja en su
partida para dar evidencia de lo que también ayudó a construir.

Al compartir una tradición, como el oficio de la zapatería, se encargan también de asegurar su

continuidad como familia, su lugar al lado de sus antepasados, que los ven orgullosos por
continuar con la costumbre. De ahí se deriva la situación de Miguel, que al no querer
pertenecer a la tradición impuesta y, en medio de su frustración, llega a desear no hacer parte
del altar familiar, si ello implica que deje a un lado sus intereses por los de su familia.
Conjuntamente, se hace énfasis en un tema importante, y es la vocación. Miguel se mueve a
partir de su deseo de ser músico, porque siente que corre por sus venas, pero claramente al
ver impuesto algo que no ve de su provecho, huira de ello.

Coco cuando recupera su memoria, la memoria de su padre, representa el perdón, la unión y la

esperanza que se hallaba perdida en la familia Rivera. Es el miedo al olvido, de olvidar y ser
olvidado, lo que une todos los lazos perdidos en la familia, separada por la intransigencia y el
resentimiento.

Considero relevante tener en cuenta los premios que gano esta producción, pues justifican el
gran trabajo que realizaron los directores por unir grandiosos elementos en una sola creación,
tales como la cultura mexicana, que no expresa solamente los estereotipos de México y lo
conocido mundialmente, si no esa rica tradición que aún se conserva en muchas familias,
ofreciendo con ello una lección familiar de manera amena y acompañada de personajes
capaces de tener empatía por su alrededor. Al mismo tiempo, expone una celebración que en
otros países de Latinoamerica parecería extraño, pues es en el Día de los Muertos que se
conmemora la memoria de los fallecidos. Se convierte en una fiesta familiar y no da lugar para
penas, y esto es lo que quiere manifestar la pelicula, digna de todas las premiaciones.

Algunos de estos premios fueron, Premios Oscar por mejor pelicula animada en 2017 y mejor
canción original en el mismo año; dos Globos de Oro por mejor pelicula animada y mejor
canción original, también en el mismo año. Un MTV Millenial Awards en 2018 por mejor
pelicula del año, y una cantidad considerable de Premios Annie en 2017, en distintas
categorías, como por ejemplo mejor director, mejor pelicula animada, mejor animación de
personajes, mejor música y mejores efectos animados, por solo mencionar algunos.

Claramente se logró un gran trabajo en la producción de la pelicula, la cual se recomienda si se

busca entender un poco más la cultura mexicana y las costumbres que tiene arraigada en sí,
además de todo lo que no se muestra al mundo porque es diferente. Su personaje principal,
Miguel, logra empatizar con el público, pues es la manifestación de los miedos a ser olvidado y
a romper los lazos familiares, pero también expresa que la perseverancia tiene frutos. Permite
visualizar la muerte en todo su esplendor, sin tacharla de algo trágico, solo si el individuo
tiende al olvido. Sin embargo, la enseñanza que deja esta situación, es que por más que se
evite, la hora llegara en su momento y en el mundo de los vivos, solo quedaran los despojos de
lo que fuimos y los vínculos que hicimos, así que la muerte no puede ser evitada y el miedo al
olvido tampoco, lo único que podemos hacer como seres destinados a convertirnos en polvo,
es llevar una vida en la que se respeten las tradiciones familiares, pero también hacer lo que
uno ama.