Uno de los debates energéticos más apasionados de la última década ha sido
sobre fracking (también conocido como fractura hidráulica. Esta técnica es utilizada en Vaca Muerta para l extracción de petróleo y gas. La fracturación hidráulica, fractura hidráulica o estimulación hidráulica (también conocida por el término en inglés fracking) es una técnica para posibilitar o aumentar la extracción de gas y petróleo del subsuelo. La técnica consiste en la perforación de un pozo vertical u horizontal, entubado y cementado, a más de 2500 metros de profundidad, con el objetivo de generar uno o varios canales de elevada permeabilidad a través de la inyección de agua a alta presión, de modo que supere la resistencia de la roca y abra una fractura controlada en el fondo del pozo, en la sección deseada de la formación contenedora del hidrocarburo. Esta agua a presión es mezclada con algún material apuntalante y productos químicos, con el objetivo de ampliar las fracturas existentes en el sustrato rocoso que encierra el gas o el petróleo, y que son típicamente menores de 1 mm, y favorecer así su salida hacia la superficie. Se estima que en 2010 esta técnica estaba presente en aproximadamente el 60 % de los pozos de extracción en uso. Debido a que el aumento del precio de los combustibles fósiles ha hecho económicamente rentables estos métodos, se ha propagado su empleo en los últimos años, especialmente en los Estados Unidos. Los partidarios de la fracturación hidráulica argumentan que la técnica no tiene mayores riesgos que cualquier otra tecnología utilizada por la industria, e inciden en los beneficios económicos de las vastas cantidades de hidrocarburos previamente inaccesibles, que esta nueva técnica permite extraer. La industria argumenta que aquellos casos excepcionales en los que se haya podido producir contaminación, ha sido debido al uso de malas prácticas como defectos en la construcción de los pozos o en el tratamiento de aguas residuales, pero no de la fracturación hidráulica en sí misma. Sus oponentes, en cambio, señalan el impacto medioambiental de esta técnica, que en su opinión incluye la contaminación de acuíferos, elevado consumo de agua, contaminación de la atmósfera, contaminación sonora, migración de los gases y productos químicos utilizados hacia la superficie, contaminación en la superficie debida a vertidos, y los posibles efectos en la salud derivados de ello.También argumentan que se han producido casos de incremento en la actividad sísmica, la mayoría asociados con la inyección profunda de fluidos relacionados con el fracking. Por estas razones, la fracturación hidráulica ha sido objeto de atención internacional, siendo fomentada en algunos países, mientras que otros han impuesto moratorias a su uso o la han prohibido. Reino Unido levantó su moratoria en el año 2012 y en la actualidad apuesta de manera decidida por esta industria como modo de crear empleo, asegurar el suministro energético y avanzar hacia un sistema bajo en carbono La Comisión Europea emitió el 24 de enero de 2014 unas recomendaciones a los países miembros que deseen explorar y producir hidrocarburos no convencionales utilizando la fracturación hidráulica para garantizar la protección adecuada del medio ambiente. Antecedentes del Fracking en el mundo
El proceso de fracturas hidráulicas ha generado mucha polémica y está
asociado a casos de contaminación por el uso del fracking en zonas con ecosistemas delicados, durante las actividades de fractura se utilizan grandes cantidades de agua y componentes químicos que deben ser tratados con extrema precaución para evitar daños al medioambiente, cuando estas medidas de seguridad no son cumplidas en su totalidad pueden ocasionarse casos de contaminación.
En Pensilvania se han publicado un total de 243 casos registrados
de contaminación de pozos de agua como consecuencia de la aplicación del fracking, estos casos están distribuidos en un total de 22 condados, donde algunos fueron más afectados que otros. Las actividades de fractura afectaron el agua de una gran cantidad de pozos, contaminándolos con gas metano, residuos contaminados y malas prácticas operacionales, causando que el agua potable resultara inutilizable. Es muy importante destacar que estos casos fueron publicados mucho tiempo después de que la población denunciara las irregularidades. Diferencia entre proceso en depósito convencional y no convencional. Fuente: Fracking.
Para llevar a cabo un proceso de fracking en un pozo de hidrocarburos, son
necesarios hasta 7 millones de galones de agua y hasta 400 mil galones de aditivos (químicos, lubricantes, removedores de escala, controladores de bacterias, entre otros), más del 50% de todos los fluidos serán producidos y tiene la posibilidad de mezclarse con aguas superficiales y contaminar las tierras fértiles.
En Luisana, se registró un caso de contaminación por fracking que ocasionó la
muerte de diecisiete vacas luego de ser expuestas al fluido utilizado en las fracturas, éste se había derramado en la superficie, dicho caso fue registrado en una granja, donde dos personas presentaron arsénico y acetona en su torrente sanguíneo. Al suroeste de Nueva York se encuentra parte de la formación Marcellus, ésta contiene grandes cantidades de gas de esquisto y su mayor parte se encuentra en Pensilvania. Actualmente la GeisingerHealthSystem está llevando a cabo un estudio para conocer el estado de salud de miles de personas que viven cerca o sobre la formación Marcellus, con el fin de determinar si se encuentran afectados por los gases provenientes del subsuelo.
Fuentes de contaminación en Estados Unidos. Fuente: EPA. GOB
En la ciudad de Dimock (Pensilvania), se registró un escape de gas debido a
un revestidor dañado perteneciente a una perforación de hidrocarburos, esto trajo como consecuencia el estallido de un pozo de agua privado, los estándares de seguridad indican que el 3% de este tipo de instalaciones pueden presentar este tipo de fallas.
En la actualidad se están realizando estudios para conocer si algunos de los
movimientos telúricos registrados en ciudades de Estados Unidos están asociados a la activación de fallas debido a las técnicas de fractura hidráulica para lograr extraer gas de esquisto, esto podría representar un gran factor de alto riesgo debido a la seguridad de los habitantes que residen en zonas aledañas a centros de producción de hidrocarburos por medio del fracking.