Dios bueno y grande, quiero poner en tus manos mi vida y la vida de todas las personas

que han hecho conmigo un camino, que han compartido luchas y alegrías, a los que me
distes para darle sentido a lo que soy y lo que vivo. A Ti te alabo en todo momento, porque
es grande tu amor, inmensa es tu misericordia, incontables tus grandezas. Gracias por
darme la existencia, enséñame a abrir mi corazón a tu acción para que sea digno de
permanecer en Tu Corazón. No permitas que mis ojos se aparten de Ti, no permitas que me
pierda porque quiero estar siempre contigo.
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No permitas que me distraiga en tantas situaciones que no me ayudan a crecer, ni me
hacen mejor ser humano. No me dejes cerrarme sobre mis terquedades ni caprichos y que
siempre esté dispuesto a saberte presente en mi vida diaria. Quiero ser tuyo y vivir para Ti,
quiero amarte y saber que cuando te tengo a Ti lo tengo todo y que no hay mayor riqueza
que tu amor y que tu misericordia. Quiero ser alguien capaz de aceptar y de valorar lo que
me regalas, que no ambicione más de la cuenta ni que deje que la avaricia se haga dueña
de mi ser. Porque cuando estoy contigo recibo paz y fuerza.
✨
Paz, porque siento que no debo desesperarme ni angustiarme por nada. Fuerza, porque
siento que tu Espíritu Santo me impulsa a hacer lo que tengo que hacer y me ayuda a
seguir adelante. Señor, gracias porque estás sanando las heridas de mi corazón, esas del
pasado, producto de las frustraciones. Te pido, mi amado Jesús, que sigas sanándome para
ser libre y poder darte lo mejor de mí y tener paz. Amén