La importancia de la ortografía y la redacción para una correcta lectura en la actualidad
ocupan la manera de correcta de escribir las palabras manteniendo orden, estructura, una coherencia y cohesión, aunque la ortografía se designa al conjunto de reglas y convenciones que rigen el procedimiento de escritura de una lengua, aquí radica la importancia ese conjunto de reglas porque si no respetamos el mismo podemos dar cambio al sentido de las palabras o también en algunas ocasiones el significado, alterando así las oraciones y cambiando la idea a transmitir cuando leemos, esto incluye tomar en cuenta los signos de puntuación en los párrafos y el uso correcto de las letras en cada una de las palabras, esto se ha perdido debido al poco hábito de la lectura de las personas, porque una persona que lee constantemente tiende menos a cometer errores ortográficos y esto se debe siempre a que los lectores observan las palabras en su forma correcta por lo tanto saben cómo escribirla dando resultado a desarrollar estrategias de lecturas que son habilidades que emplea el lector que implica destreza, pericia, práctica y experiencia en comparación a las nuevas generaciones que no les gusta leer y usan gran parte de su tiempo a comunicarse por redes sociales y dispositivos electrónicos que acortan las palabras y redactan sin ninguna regla gramatical afectando terriblemente la comunicación escrita. Cabe tomar en cuenta que la redacción la encontramos en cualquier parte, en los libros, revistas, periódicos, trabajos de investigación, en los diversos escritos académicos como administrativos y eso requiere de coherencia y cohesión textual y dado que el orden de las palabras dentro de una oración puede modificar la intención del autor hacia los lectores así la redacción es la base desarrollar y mejorar, llámese las cualidades de la redacción para tener una concreta comunicación escrita. Mario Vargas Llosa, autor del libro “La civilización del espectáculo, premiado por el nobel de literatura en 2009, nos da a conocer temas acerca de los efectos y tribulaciones que puede tener la cultura en distintos aspectos de la actividad humana, ya sea la literatura, el cine, la televisión, los intelectuales, el erotismo, el arte, la religión, la política, la educación, etc., a nuestros días sobres esos hábitos o conductas permitidas y practicadas por la cultura. En donde el entretenimiento y la diversión se han convertido un valor máximo para desquitarnos del aburrimiento, frivolizando y banalizando la cultura de hoy en algo distante e instantáneo en la vida de nosotros, por ejemplo, “los lectores de hoy quieren libros fáciles, que los entretengan, y esa demanda ejerce una presión que se vuelve poderoso incentivo para los creadores” dándonos a entender que la sociedad acepta la cantidad que la calidad de la cultura o simplemente que somos conformistas y que tanto el artista o autor como el espectador y lector se llegue a tener mediocridad en la cultura y por decir un ejemplo propio, el arte sin talento. En la Metamorfosis de una palabra, desde una perspectiva de la redacción, sus párrafo son de introducción pero siendo leal a los tipos argumentativos, expositivos y aclarativos del propio párrafo porque explica por qué realizó este ensayo donde se trata de un movimiento hacia la banalización de la cultura que ha tenido lugar desde el final de la Segunda Guerra Mundial y que ya fue anunciado por prestigiosos autores como T.S. Elliot en su obra Notes Towards the Definition of Culture de 1948, George Steiner en IN Bluebird Castle. Towards the Redefinition of Culture (1971) y, sobre todo, en La Société du Spectacle de Guy Debord (1967), donde en la obra del peruano quiere tomar el testigo. Las cualidades de la redacción del escritor Llosa es que mantiene una sencillez que se puede entender sea quien sea el lector, porque aplica ejemplos de los autores que él menciona, citando sus ideas con una claridad con el fin de dar a entender de que la cultura se está volviendo más superficial y empobrecida con originalidad porque nos revela que el autor es antipolítico con adecuación e interés con el fin conducir al lector hasta el final tanto de cada capítulo como toda la obra, sin perder la atención en el contenido de cada párrafo de su introducción siguiendo ese anglicismo de cultura light hablando de donde hasta los lectores desean lecturas fáciles que simplemente entender los sencillos esfuerzos de redacción de los escritores sin esforzarse los lectores en su análisis profundo de los textos que leen.. En el capítulo I La civilización del espectáculo, el ensayista Vargas Llosa sentencia que la sociedad actual considera que el primer lugar en la tabla de valores vigente ocupa el entretenimiento. En este capítulo, el ensayista conserva una claridad bastante fuerte, aunque utiliza anglicismos como bróker, light paparazzi, rock and roll, best seller, perfomances, mainstream y conservar los nombres en su idioma original de las galerías de arte de diversos países que el autor ha asistido, sus párrafos son aclarativos, explicativos y argumentativos alcanzando una sencillez en sus antecedentes del periódico español El País, siempre con una adecuación de este capítulo para no perder la comprensión y gusto del lector intentando evadir los diversos vicios de la redacción para no llegar a la confusión del ideas, en ese sentido correlaciona la democratización de la cultura y banalización del arte, donde la vida cultural se va eliminando su importancia, denuncia que el facilismo formal y la superficialidad del contenido de proyectos culturales se justifican en razón del propósito cívico de llegar al mayor número, o sea, la cantidad es más importante que la calidad y el espectáculo y el entretenimiento ha tocado el cine, la literatura y la música y hasta el deporte desmoronando su antigua calidad dando resultado al arte sin talento con una originalidad e interés del texto advirtiendo que paralelamente al consumismo como la búsqueda del placer como una escapatoria de preocupaciones y responsabilidades En el capítulo II Un breve discurso sobre la cultura, el autor nos muestra un discurso expositivamente argumentativo que procura una adecuación, sencillez, claridad, concreción y ordenación como es un discurso argumentativo presenta ideas de la introducción y el capítulo del La Civilización del espectáculo, sus párrafos son argumentativos donde predomina la coherencia. Como sabemos el discurso es lo que decimos, es decir , el término se asocia con la transmisión de un mensaje mediante las palabras, la postura que predomina en este capítulo que es un discurso escrito es expresiva, para la filosofía responde el autor a un sistema social de ideas y pensamientos que es la highbrow culture (cultura de la ceja levantada) y la lowbrow culture (la cultura de la ceja bajada) que vemos un extanjerismo, en inglés así lo interpretó Vargas Llosa como un modelo que clasifica a las manifestaciones culturales con base a su complejidad y capacidad que tiene el público como masa de comprender, absorber o deleitar esa producción, cómo valoramos el proyecto cultural u obra de los artistas. Con una originalidad y adecuación, no pierde la coherencia y adecuación en este capítulo para que el autor mantenga una neutralidad con el ensayista peruano, ya que Vargas Llosa se desliza hacia el insulto. El ensayista inicia un debate sobre la distinción entre el precio y el valor, el estado de las cosas denuncia a Mijaíl Bajtin porque él y sus seguidores de algún modo abolieron o rompieron la frontera entre cultura e incultura dando a lo inculto una dignidad relevante, que la ignorancia e indiferencia aumentan en la sociedad, citando que los antropólogos establecieron que cultura era la suma de creencias, conocimientos, lenguajes, costumbres, atuendos, usos, ellos buscaban la comprensión y el respeto de sociedades primitivas. De igual manera el autor mantiene el nombre original del instituto de artes en donde asistió y ahí el traduce los anglicismos y extranjerismos del ensayo narrativo y expositivo del periódico español, en el cual a Jean Baudrillard lo califica de charlatán y evita saludarlo al final de la conferencia del instituto de arte en donde asistió el autor peruano, el filósofo francés desarrollaba sus ideas de los simulacros que se confunden con la realidad original, que existe la ficción en el arte, la publicidad . El autor peruano habla de la influencia del periodismo en la civilización del espectáculo se revela en ese periodismo que busca entretener informando, de modo que la prensa que conquista grandes públicos no es la seria, veraz y de confianza en su información, sino que la que se ocupa del chisme, de la vida privada y de la catástrofe. En el capítulo III, Prohibido prohibir, en este capítulo el tema central de este apartado es la educación y la crisis que la domina. De igual manera es un ensayo, un ensayo expositivo que a lo largo del capítulo se convierte en argumentativo, sus cualidades del redactor en sus ideas son claras, concisas, coherentes, adecuadas y en sus antecedentes se encuentra la sencillez manteniendo ese interés hacia los lectores del libro de Llosa. El escritor expone un documental de la marcha estudiantil “Mayo francés de 1968” en la capital de Francia, donde grupos estudiantiles protestaron en contra de la sociedad del consumo, el capitalismo, el imperialismo, el autoritarismo que de alguna manera desautorizaban las organizaciones políticas y sociales de ese entonces, dentro de sus párrafos donde expone y argumenta que la docencia y el prestigio de los maestros se desvanece, al igual que las figuras políticas y culturas de la enseñanza moral e intelectual se les consideran como represión.. Así con mucha claridad y coherencia en esta redacción de Vargas Llosa expone que la educación pública, uno de los grandes logros de Francia, se ha empobrecido y ha llegado a manos de la educación privada la formación académicos de futuros líderes políticos y culturales. Dentro de este contexto del ensayo argumenta que la interpretación vale más que la obra de arte, y el crítico más que el artista, y no la de un crítico cualquiera, sencillamente dice el autor peruano que la crítica que separa el lenguaje de la realidad es fruto de ciertas teorías postmodernas, como el deconstruccionismo, que Lionell Trilling exponía que la crítica literaria no puede romper lazos del quehacer humano. El ensayista Vargas Llosa vuelve al tema de la educación sin repetir prácticamente las mismas expuestas de ese tema realizando una reflexión sobre el ensayo de Trilling como un entorno a la enseñanza de la literatura, enfocándose a la dificultad de impartir el verdadero valor de una obra literaria ante un auditorio o centro cultural, cuando ese valor es verdaderamente un crimen en la intimidad de la lectura. La redacción es algo por lo que tenemos que ocuparnos. Es como los cimientos de la comunicación escrita, si esto falla, probablemente todo se irá abajo. La redacción tiene que ver con casi todo: expresamos con claridad para una buena comunicación, la buena impresión que causará nuestro trabajo. Si manejamos correctamente la redacción como tal las cualidades de esta misma así tendremos ya resuelto varios problemas al escribir como también los vicios que casi siempre usamos en nuestros escritos. Para algunos, la escritura sólo sirve para reproducir la lengua oral y la enseñanza de la misma, consta sólo de la memorización de grafemas, vocabulario y reglas ortográficas. El enfoque tradicional de la redacción se concentra en la forma, no en la substancia. Ésta para de la premisa de que, para escribir bien, sólo necesitamos conocer las reglas de ortografía eso no es el caso sino para poder redactar bien es necesario saber componer y expresar nuestras ideas con coherencia, así como las aplicaciones de los tipos de párrafos. La redacción ayuda a desarrollar el pensamiento y a organizar nuestras ideas. La mejor forma de poder realizar una buena redacción no solamente es la práctica, sino también tener una lectura constante, aprender disfrutando de la literatura, los periódicos, ensayos, los discursos, artículos ya sea científico o de divulgación, tesis, todos los escritos desde académicos hasta administrativos que existan en los que es la comunicación escrita. En la actualidad la mayoría de nosotros muchas veces se nos dificulta redactar correctamente ya que no tenemos buena ortografía, no sabemos leer profundamente y no tenemos por decir la inspiración de nuestras ideas por no saber leer y analizar esa lectura, esto ocasiona que no tengamos coherencia de lo que escribimos. Como bien lo comentaba Mario Vargas Llosa que los lectores sólo desean libros o textos fáciles de entender, es decir, la lectura sin ningún esfuerzo de meternos a las palabras de los autores de esos escritos, pues quizás lo más difícil en una redacción sea la posibilidad de incluir ideas originales e interesantes del autor, pues lo más frecuente es dudar de nuestra propia capacidad para crear conceptos nuevos, que a muy pocos se les hubiera podido ocurrir y que además mantengamos la lógica y el sentido común. Si vemos la lectura y redacción como cultura, Mario Vargas Llosa denuncia que la sociedad actual se va más a lo fácil, simple y superficial a lo que es entender, respetar, conocer la cultura en sí, donde los nuevos artistas se existe el hamparte, un nuevo término que surgió, que su definición es como el arte sin talento, donde inclusive si la obra consiste simplemente en la elección de un objeto colocarlo en un pasillo de una exposición de una galería lo convierte en obra de arte. O que la educación, los maestros son signos de represión, o donde la política pueden ascender los famosos, en pocas palabras Vargas Llosa advierte que nosotros como sociedad caemos ante el consumismo, cultura mediocre, creernos el chisme en las noticias y que la cultura light solamente funciona para el espectáculo y el entretenimiento.