Representan principalmente lavas basálticas en centros de expansión
oceánico o dorsales o en arcos insulares jovenes. En estos ambientes ocurre fraccionamiento entre basaltos, andesitas – basálticas y en menor proporción riolitas. Estos magmas son generalmente bajos en K, con un contenido promedio de sílice del orden de 53%. Yacimientos asociados a este tipo de magmatismo son los de cromita – platinoides (PGM), Bushveld, Sudáfrica, yacimientos de pirrotina – pentlandita – calcopirita, Sudbury, Ontario, yacimientos de magnetita – ilmenita – (vanaditina), Lago Stanford, EEUU, entre otros.
Magmas Calcoalcalinos
Ocurren en zonas de subducción, en arcos insulares maduros y en los
márgenes continentales, con rocas de composición desde gabro a granito (basalto a riolita). En el caso de arcos insulares dominan las rocas volcánicas, principalmente de composición andesítica (SiO2 del orden de 59%). Estos magmas son derivados de la fusión parcial de la cuña del manto y en menor medida corteza oceánica, con poca interacción ascedente.
En el caso de arcos continentales las rocas tienden a una composición
más silicea, andesitas, dacitas y riolitas y sus equivalentes intrusivos. Son derivados de fusión parcial de la cuña del manto y en menor medida corteza oceánica, con mayor o menor interacción y asimilación de corteza continental inferior. Yacimientos asociados a este tipo de magmatismo son pórfidos cupríferos, skarns, estratoligados, epitermales, entre otros.
Magmas Alcalinos
Se dan en zonas de rifting intracontinental, en las zonas de fallas
transformacionales y en los trasarcos magmáticos de los margenes continentales. Se fraccionan en shoshonitas (zonas orogénicas) y sienitas (zonas cratónicas).
Son rocas bajas en respecto a alto. A este tipo de
magma se asocian rocas peralcalinas en zonas cratónicas, kimberlitas y lamprófiros (a los cuales se pueden asociar diamantes) y carbonatitas.