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Audiencia Provincial
de Las Palmas (Sección 5ª) Auto num. 35/2003 de 17 febrero
AC\2003\1589
SUMARIO
HECHOS
PRIMERO
SEGUNDO
TERCERO
RAZONAMIENTOS JURIDICOS
PRIMERO
SEGUNDO
TERCERO
Jurisdicción: Civil
SEGUNDO
El relacionado auto, se recurrió en apelación por la indicada parte de conformidad a lo dispuesto
en el artículo 457 y siguientes de la Ley de Enjuiciamiento Civil , y no habiéndose practicado prueba
en esta segunda instancia, y tras darle la tramitación oportuna se señaló para su estudio, votación y
fallo el día siete de febrero de dos mil tres.
TERCERO
Se ha tramitado el presente recurso conforme a derecho, y observando las prescripciones legales.
Es Ponente de la sentencia el Iltmo. Sr. D. Carlos García Van Isschot, quien expresa el parecer de la
Sala.
RAZONAMIENTOS JURIDICOS
FUNDAMENTOS DE DERECHO
PRIMERO
La resolución de instancia estima la excepción de falta de jurisdicción del artículo 37.2 de la Ley de
enjuiciamiento civil , opuesta por la parte demandada en el alegato inicial del artículo 443.2, párrafo
primero y acogida conforme al párrafo segundo de ese mismo apartado del precepto, y, sin entrar a
examinar el fondo del asunto, declara la falta de jurisdicción del órgano judicial civil para conocer del
litigio a favor de la contencioso-administrativa.
La tesis del vecino y coadjudicatario es la de que una entidad mercantil particular a través de sus
operarios había irrumpido en el patio interior que conforma el bloque de viviendas protegidas
instalando allí una caseta de obras metálica y depositando material de construcción sin la
autorización de los vecinos, y que ésta es cuestión netamente civil sin que la relación jurídica
(contrato administrativo entre la demandada y el Ayuntamiento de Las Palmas de GC para la
demolición de obras ilegales en los grupos de viviendas municipales) sea relevante para el presente
litigio por tratarse de un tema que está «meramente relacionado» [artículo 3 a) de la Ley de la
Jurisdicción contencioso-administrativa ] de modo que aunque la entidad territorial mencionada sea
la que realmente se encuentra detrás de los actos de los demandados, que son meros ejecutores de
sus órdenes, ésta es una cuestión atinente, en buena técnica jurídica, a la legitimación pasiva para
ser demandado en un litigio sobre la tutela sumaria de la posesión.
En consonancia con esto último advertimos que si el propio interdictante, hoy recurrente, es
consciente y conoce, sin duda alguna, que es el Ayuntamiento de Las Palmas de GC el que está
actuando a través de la entidad privada demandada que se limita a canalizar la decisión municipal en
buena ortodoxia procesal debió haber dirigido la demanda contra el inductor de lo que reputa despojo
posesorio, por lo que consideramos que el brazo ejecutor, en este caso, no pude ser el blanco de la
acción sino que debió dirigir la acometida procesal contra el genuino dueño del hecho.
SEGUNDO
No obstante lo anterior hemos de decir, en lo concerniente a la cuestión principal que se plantea al
Tribunal en el presente recurso, que ésta atañe al todavía controvertido problema, de si en la
actualidad, después de la nueva Ley 29/1998, de 13 de julio , reguladora de la Jurisdicción
Contencioso-Administrativa y la Ley Orgánica 6/1998 , también de 13 de julio, que modificó el artículo
9.4 de la Ley Orgánica del Poder Judicial para adecuarla a la nueva misión competencial, aún caben
los procedimientos interdictales civiles contra las Administraciones Públicas o si éstos han venido a
ser sustituidos y subsumidos por la jurisdicción contencioso-administrativa en tanto se ha establecido
una modalidad procesal específica en la ya citada LJCA para el control de las actuaciones
administrativas constitutivas de vías de hecho.
Las respuestas dadas están lejos de ser unánimes e incluso son contradictorias y, por ende,
carentes de solución definitiva, aunque no están exentas de fundamento jurídico, por lo que no
pudiendo esta Sala quedarse en el plano dogmático y especulativo sino que como Tribunal se halla
obligada a resolver el caso, exponemos seguidamente nuestro parecer, en la confianza que el
transcurso del tiempo con la continua elaboración y estudio y pronunciamientos judiciales podrá
confirmarlo o modificarlo.
En efecto, si con anterioridad a la entrada en vigor de la Ley 29/98, de 13 de julio, Reguladora de
finalidad de garantizar la uniformidad jurisprudencial sobre la misma y con ello la seguridad jurídica
mediante la fijación de la doctrina y de los criterios interpretativos al respecto que es el fin último de
la jurisprudencia».
Continúa dicha sentencia haciendo notar que «después de la reforma del Art. 9.4 de la LOPJ y de
la entrada en vigor de la misma y de la LJCA , anterior en todo caso a la presentación de la demanda
rectora a la que por ello alcanzan sus efectos, no cabe plantear interdictos frente a la Administración
en los supuestos de la llamada vía de hecho resulta de la propia exposición de motivos de la Ley
29/98, tan citada, en la que explicando la intención del legislador ya se recoge, como una novedad
destacable el sometimiento al control jurisdiccional del orden Contencioso Administrativo, de los
actos de cualquier clase de la Administración Pública que estén sujetos al derecho administrativo,
incluidos sus actos materiales en vías de hecho, principio que desarrolla su Art. 25 cuando en su
párrafo segundo amplía el objeto del recurso administrativo a la “inactividad de la Administración y
contra sus actuaciones materiales que constituyan vías de hecho en los términos establecidos en
esta Ley”, lo que reiteran, desarrollando las especialidades procedimentales, los arts. 30 y siguientes
de la misma, y aunque no regule un procedimiento específico interdictal es lo cierto que idéntica
finalidad de salvaguarda jurisdiccional interina y urgente principio de orden público que subyace en
todo proceso interdictal, cual la de impedir que nadie pueda tomarse la justicia por su mano, en estos
supuestos de vías de hecho, se consigue mediante la específica regulación que la nueva Ley de la
Jurisdicción Administrativa hace a las medidas cautelares en su art. 136».
Por otra parte, la crítica desfavorable que un sector de la doctrina hace sobre el nuevo recurso
contra las vías de hecho, no es razón suficiente para desvirtuar lo expuesto, como tampoco lo es el
argumento de la no utilización del interdicto de obra nueva ( sentencia del Tribunal de Conflictos de
Jurisdicción de 20 y 21 de diciembre de 1993 , que cita la sentencia de la Audiencia Provincial de
León de 2-3-2001 ) sino el de retener o recobrar la posesión, pues se utilice uno u otro interdicto, el
efecto indirecto que se consigue (aunque no sea el que se persigue) es paralizar la construcción de
la obra pública, que es la razón de fondo que inspira el rechazo hacia el interdicto de obra nueva.
TERCERO
Ante lo argumentado, que no es sino recordatorio de las consideraciones efectuadas por esta
misma Sala en sus sentencias de 25 de marzo de 2002 (rollo 100/2001 ; Ponente Ángel
Montesdeoca Acosta) y de 23 de septiembre de 2002 (ROLLO: 143/2002 ), damos por reproducidos
los fundamentos jurídicos de la resolución apelada y desestimamos el recurso; todo ello sin que haya
mérito para hacer expreso pronunciamiento sobre las costas de esta instancia, ante la complejidad
del debate y los propios razonamientos jurídicos del actor y apelante, que aunque no comparta el
Tribunal, en modo alguno puede tildarse de superfluos, insustanciales o dilatorios.
Vistos los artículos citados y demás de general y pertinente aplicación.
PARTE DISPOSITIVA
LA SALA DIJO: Que desestimamos el recurso de apelación interpuesto por D./Dña. Sebastián,
contra el auto de fecha 4 de marzo de 2002, dictado por el JDO. PRIMERA INSTANCIA N. 11 de
LAS PALMAS DE GRAN CANARIA, el cual CONFIRMAMOS, en su integridad sin expresa
imposición al apelante de las costas del recurso.
Dedúzcanse testimonios de esta resolución, que se llevarán al Rollo y autos de su razón,
devolviendo los autos originales al Juzgado de procedencia para su conocimiento y ejecución una
vez sea firme, interesando acuse de recibo.
Así, por este Auto, lo acuerdan, mandan y firman los Iltmos. Sres. arriba referenciados.
Análisis
Normativa considerada
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