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EXTENSIÓN VALERA
MINISTERIO GENERAL DE EDUCACIÓN CRISTIANA
ASAMBLEAS DE DIOS DE VENEZUELA
Período Intertestamentario.
Desde Malaquías, el último profeta del antiguo testamento, hasta
Juan el bautista transcurrieron unos cuatrocientos años, tiempo en el cual
la historia da testimonio que no se levantó profeta, ni se escribió libro
canónico alguno. Este período es conocido teológicamente como “El
Silencio de Dios”, e históricamente como un tiempo en el cual se
desarrollaron un conjunto de acontecimientos en Israel y sus alrededores,
los cuales constituyen el escenario en el cual entra en acción el evangelio
de nuestro Señor Jesucristo.
Dichos acontecimientos, fueron de gran influencia en la llegada del
Mesías y nos dan luz, a la hora de interpretar los diversos pasajes de los
evangelios.
A. Dominación Persa.
Los persas dominaron en el mundo, durante la época comprendida entre
los años 430 al 331a.C. En esta etapa de la historia, fueron reyes del
imperio persa: Artajerjes I, Jerjes II, Darío II, Artajerjes II, Artajerjes III,
Arses y Darío III; los sacerdote pudieron ejercer su gobierno en la región
de Judea y hubo una separación definitiva entre judíos y samaritano.
B.Dominación Griega
Los griegos dominaron directamente Palestina durante los años 335
al 323 a. C.; tiempo en el cual Alejandro Magno alcanzó sus grandes
victorias, cayendo así el reino persa y quedando Persia, Palestina y Egipto
bajo su mando. El sumo sacerdote Judío, aún ejercía su gobierno en Judea
y hubo un buen trato hacia los judíos, lo que facilitó su aceptación de la
lengua griega y la helenización de la cultura judía así como en todo el
imperio.
Después de la muerte de Alejandro Magno la cultura de los griegos
dominó a Palestina. Como consecuencia del fallecimiento del conquistador
griego, sus cuatro generales: Casandro, Lisímaco, Seleuco y Ptolomeo, se
repartieron todo el territorio conquistado. Los dos últimos mencionados,
se ubicaron en Siria y Egipto respectivamente. Los Ptolomeos desde
Egipto dominaron dicha región, la cual disputaron con los Seleúcidas
hasta perderla.
C. Dominación Egipcia.
Conocida como la dominación ptolomeica, ya que durante este
tiempo gobernaron los reyes Ptolomeos: Ptolomeo Soler, Ptolomeo
Filadelfo, Ptolomeo Euergetes, Ptolomeo Filopater y Ptolomeo Epífanes. En
principio los Ptolomeos hostigaron a los judíos, pero, luego, les dieron
buen trato, designándoles aun funciones políticas.
En este tiempo se tradujeron las escrituras hebreas al griego,
traducción llamada, traducción de los 70 o Septuaginta. Concluyéndose así
el canon del Antiguo Testamento. También en este tiempo, se escriben
algunos libros apócrifos. Se establece una comunidad judía en Alejandría y
surge Filón, un escritor, pensador y filosofo judío, el cual junto con otros
judíos, introdujeron en las enseñanzas de las escrituras hebreas principios
ideológicos y éticos de la filosofía griega.
D. Dominación Siria
Conocida como la dominación seleúcida. Los reyes que gobernaron
durante este periodo fueron: Seleuco Nicanor, Antíoco II el grande,
Seleuco IV Filopater y Antíoco Epífanes. El período de esta dominación va
desde el año 198 hasta el 167 a.C.
Durante este periodo hubo crueles enfrentamientos entre Egipto y
Siria, fueron transportado muchos judíos hacia Asia menor como colonos,
se hicieron comunes las conspiraciones y disputas políticas entre
sacerdotes.
E. Dominación Asmonea
Durante esta época que va del año 166 al 63 a. C., gobiernan los
macabeos. Debido a la fuerte opresión seleúcida hacia los judíos, se
levanta un grupo de éstos liderados por Matatías, restauran el culto a
Jehová y destruyen los altares paganos.
Matatías muere muy pronto y su hijo Judas conocido como Macabeo
(Martillo) toma su lugar; hicieron guerrilla inspirados por su fe en Dios.
Muchos judíos se unieron a ellos, aunque parecían esfuerzos inútiles, eran
pocos y con pocos recursos, en comparación con los sirios. En tres años
derrotaron a los sirios, liberaron a Jerusalén, liberaron y dedicaron el
templo profanado por los helenistas. Los sirios se vieron obligados a
cederle la libertad religiosa; sin embargo los judíos continuaron su lucha
por la independencia política, la cual consiguieron el 142 a. C., bajo el
liderazgo de Simón Macabeo; él y su descendencia, fueron proclamados
sumos sacerdotes y “etnarcas” perpetuos.
A pesar de esto, vemos que el sacerdocio y gobierno de los judíos se
desmoralizó nuevamente y abraza costumbres helenísticas. Se destacan
guerras civiles por el sacerdocio y bajo este clima debilitante, Palestina es
invadida por Roma, en una operación comandada por el General Pompeyo,
quien depuso a Aristóbulo II, tras la guerra civil de fariseos contra
helenistas y tras la salida de Aristóbulo II, es confirmado el Macabeo
Hircano II.
F. Dominación Romana.
Alrededor del siglo II a.C., el poder militar de Roma se había
apoderado de todo el Mediterráneo. A partir del 63 a.C., Palestina quedó
sometida al poderío militar y político de Roma.
Al inicio, los gobernantes judíos conservaron el título de reyes,
aunque estuvieran sometidos al poder romano. El Nuevo Testamento
destaca a Herodes el Grande, quien gobernó Palestina del 37 al 4 a.C. Fue
bajo su mandato cuando nació Jesús (Mateo 2:1-20; Lucas 1:5). Cuando
Herodes murió, el reino se dividió entre sus tres hijos: Arquelao, gobernó
Judea y Samaria hasta el año 6 a. C., Herodes Antipas en Galilea y Perea,
hasta el 39 d.C., y Filipo en el nordeste del Jordán, hasta el 34 d. C.
(Mateo 2:22; Lucas 3:1). Hacia el año 6 d. C., el emperador romano
Augusto quitó del reino a Arquelao, y Judea y Samaria pasaron a ser
propiedades del Imperio Romano. Los nuevos cambios administrativos
incluyeron nuevas autoridades romanas: los prefectos y los procuradores.
El más conocido de todos en la historia cristiana es Poncio Pilato, prefecto
de Judea, (26-36 d. C.), que condenó a muerte a Jesús. (Mateo 27:1-26).
Para el año 37 d. C., el rey Herodes Agripa sustituía a Filipo, y en el
40 d. C. a Herodes Antipas. En el año 41 d. C. Herodes Agripa extendió su
dominio hacia Judea y así reconquistó un reino tan grande como el que
había tenido su abuelo Herodes el Grande. (Hechos 12.1-19). Herodes
Agripa murió en el año 44 d.C., (Hechos 12.19-23), y con ello toda
Palestina pasó a manos de los romanos. Esto duró hasta el año 66 d.C.,
cuando se produjo la guerra judía. (Hechos 23:24; 24:27).
Entonces Roma desplegó su fuerza militar por todo Israel. Los
soldados se organizaban por “compañías”, las que tenían a su cargo velar
por la adoración del emperador en todo el imperio. Diez compañías
formaban una legión, unos 6.000 hombres. Los soldados debían facilitar
las conquistas y aplacar las rebeliones. Vigilaban las fiestas judías, las
prisiones y las ejecuciones. (Mateo 28:11-15; Lucas 23:47; Juan
19:2,23,24,34). Pese a ello, también los soldados se acercaban a Jesús y
al cristianismo. (Mateo 8:5-13; 27:54; Lucas 23:47).
EL Judaísmo.
Debido a la situación política y sus efectos sobre la vida
religiosa, la religión judía sufrió ciertos cambios durante el periodo
intertestamentario, entre ellos resaltan los siguientes:
1. Las Sinagogas.
Luego que los babilonios destruyeron el templo en la época del
exilio, donde se establecía una comunidad judía, se establecía también
una sinagoga, la cual era un lugar de reunión para el estudio y la
adoración. Esta figura permaneció aún en la época post-exílica, se
mantuvo durante el periodo intertestamentario y eran comunes en la
época de Jesús. En Palestina la sinagoga no sólo era un centro de
adoración, sino que, también eran centros políticos y educativos,
entendiendo que para el judío, existe una interrelación entre la religión, la
política y la educación; estas dos últimas dependen de la primera, y las
autoridades religiosas influían en todas las demás esferas de la vida.
Estas aparecieron en los días del cautiverio, estando el templo
destruido y la nación dispersa, puesto que eran necesarios los lugares de
instrucción y de culto, dondequiera que hubiera comunidades judías.
Luego del retorno de la cautividad, las sinagogas se continuaron tanto en
el hogar nacional, como en los centros judíos en otros países. En cada
ciudad importante había una y en Jerusalén, aún cuando se había
restaurado el Templo, había muchas.
2. El Templo.
Luego del retorno del exilio, los judíos habían reconstruido el Templo.
Este estuvo caracterizado por la sencillez que imponía las limitaciones de
los israelitas de esa época. Pero, desde el año 20 a. C., Herodes El
Grande, tratando de ganarse a los judíos, inicia la construcción de un
majestuoso templo, más grande que el construido por Salomón; aunque
con una estructura similar, su acabado era de mármol blanco y una buena
parte cubierta en oro; este templo quedó completamente terminado el
año 62 d. C. aproximadamente. Dicho edificio era altamente amado y
reverenciado por los judíos que cualquier afirmación que estuviera en algo
opuesta a su culto y perpetuidad, era juzgada como una blasfemia.
3. El Mishnah.
El mishnah, era un código basado en tradiciones de los ancianos o
ley oral; son interpretaciones de la ley y reglas basadas en ella, surgidas
como resultado de los estudios de los sacerdotes y escribas, durante los
tiempos del exilio y la época posterior a esta. El mishnah estaba
compuesto de las más minuciosas reglas, para todas las ocasiones que
pudiesen existir, convirtiéndose así en una pesada carga que se pretendía
que los judíos llevasen.
4. La Gran Sinagoga.
Nombre dado al concilio compuesto de 120 miembros, del cual se
dice haber sido organizado por Nehemías, cerca del 410 a. C., bajo la
presidencia de Esdras, con el propósito de reconstruir el culto y la vida
religiosa de los cautivos regresados, y al cual la tradición asigna parte
importante en reunir, agrupar y restaurar los libros canónicos del Antiguo
Testamento. Se cree que haya sido un cuerpo estable y que haya
gobernado a los judíos regresados hasta cerca del 275 a. C., cuando cedió
su lugar al Sanedrín.
5. El Sanedrín.
Era el máximo órgano jurídico y administrativo de la nación. Este
consistía en un consejo de 71 miembros, en el que estaban representados
los tres grupos político-religiosos más significativos de la época: los
sacerdotes, adscritos en su mayoría al partido saduceo; los ancianos,
generalmente fariseos, y los maestros de la Ley.
La religión y la política caminan juntas en el mundo judío. Eran dos
componentes de una sola realidad, expresada en el sentimiento
nacionalista que brotaba de la misma fuente que la fe en el Dios de
Abraham, Isaac y Jacob. La historia del pueblo de Israel es la historia de
su fe en Dios; y su fe es la fe en que Dios gobierna toda su historia; por
esa razón, el sumo sacerdote en ejercicio era quien presidía el Sanedrín.
El Sanedrín gozaba de todas las competencias de un gobierno
autónomo, salvo aquellas en las que Roma se reservaba los derechos de
última instancia. Por ejemplo, el Sanedrín era competente para condenar
a muerte a un reo, pero la orden de ejecución exigía el visto bueno de la
autoridad romana.
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Aspecto Social.
En la sociedad israelita de la época de Jesús, había tres clases
sociales: una alta, una media y otra pobre. La clase alta se componía de
las familias de los jefes políticos y religiosos, de los comerciantes
solventes y terratenientes, y de los recaudadores de impuestos, conocidos
como publicanos. La clase media contaba con los medianos y pequeños
comerciantes, los artesanos, los sacerdotes y los maestros de la ley. Por
último, la clase pobre, la más numerosa, estaba formada por jornaleros
que vivían al día, (Mateo 20:1-16), y por muchos otros que vivían al
margen de la sociedad, como los mendigos, los leprosos y los paralíticos.
(Marcos 10:46).
Según las leyes, el lugar más bajo en la escala social lo ocupaban
los esclavos, aunque su situación real dependía de la posición y carácter
de sus amos. Los esclavos que no eran judíos; rara vez recuperaban su
libertad. En cambio, los esclavos israelitas podían recuperar su libertad en
el año sabático.
Los principales oficios eran la agricultura, la ganadería, la pesca en
el lago de Galilea; trabajos artesanales: Alfarería, zapatería, carpintería,
albañilería, etc. y el comercio. También la atención del templo daba
trabajo a un gran número de sacerdotes y levitas.
Se dice que la población de Palestina en la época de Jesús, pudo
haber sido de aproximadamente un millón de personas. Dado que el
pueblo de Israel sufrió diversas deportaciones masivas a lo largo de la
historia, era común encontrar comunidades judías fuera de Palestina. Esas
comunidades constituyeron lo que se llama el judaísmo de la “diáspora” o
“dispersión”. Aunque estas comunidades siguieron fieles a sus tradiciones
religiosas (por ejemplo, Hechos 16.13), adoptaron el griego como idioma
propio.
* RELIGIOSOS
- El imperio romano era tolerante con las religiones de los pueblos
dominados bajo su mando.
- Las principales profecías recibidas en la antigüedad se habían cumplido,
pero esperaban la más gloriosa de ellas: El levantamiento de un gran rey
que les daría victoria, paz, prosperidad, estabilidad política, y les llevaría a
la gloria. En esta época de fuerte opresión romana, existía una
expectativa de la inminente venida del Mesías.
- El Antiguo Testamento se había traducido al griego: Versión de los
setenta o Septuaginta.
- La filosofía griega había socavado las bases del misticismo religioso
pagano, llevando a las personas a pensar por si misma, lo cual afectó de
manera determinante la concepción religiosa de la época y permitió la
acogida del monoteísmo, ya que era más consistente que el politeísmo.
- La filosofía ocupaba el lugar de la religión en aquella época, pero su
carácter abstracto y frívolo, dejaban ver que no satisfacía el vacío
espiritual que sentían.
- Los judíos de la dispersión habían difundido su fe monoteísta, su
esperanza mesiánica y sus elevados valores éticos y morales.
* SOCIALES
- Habían muchos esclavos y desposeídos en el imperio romano a los
cuales les llegó bien la seguridad, dignidad y la hermandad en la fe que
trajo Jesús.
Tabla Cronológica de Emperadores y Gobernantes en la Época de
Jesucristo
Emperadores Fecha Relatos Gobernantes de
de Roma Palestina
Augusto 37 – 27 a. C. Herodes El Grande
Tiberio 7 ó 6 a. C. Nacen Juan el
4 a. C. Bautista y Jesús
Arquelao en Judea
14 d. C.
4 a. C. – 34 d.
Herodes Filipo,
C.
Felipe en Iturea
4 a. C. – 44 d.
Herodes Antipas
C.
en Galilea
26 – 36 d. C. Bautismo de Jesús
Poncio Pilato
28 d. C. Muerte de Juan el
Bautista
30 d. C.
Jesús es crucificado
y resucita
LUCAS: era médico de profesión, el mensaje del libro era para los griegos,
para convencer a los griegos que hay un Dios verdadero, así como
también que Jesús es el Mesías.
Mateo:
Autor:
Se acepta comúnmente que el Autor del primer Evangelio (en el
orden de nuestras Biblias) fue Mateo, cuyo nombre original bien pudo ser
Matías (<<donde de Dios>>). Era uno de los doce Apóstoles (Mt. 10:3;
Mr. 3:18; Lc. 6:15; Hch. 1:13), y se cree que el mismo Levi, cobrador de
impuestos, a quien Cristo llamo, según Mr. 2:14 (compare con Lc. 5:27).
Papías, uno de los primeros escritores de la Iglesia, dice que << Mateo
compilo los dichos (gr. Logia) en hebreo>>, es decir, en Arameo.
Solamente nos ha llegado el texto en griego.
Fecha:
Es imposible determinar con exactitud la fecha de composición, pero
es casi cierto que fue escrito antes de la destrucción de Jerusalén;
probablemente, hacia el año 60 de nuestra era; quizás antes.
Lugar:
Aunque no poseemos datos concretos, podemos suponer que fue en
Judea.
Capítulos:
Veintiochos.
Destinatarios:
La evidencia interna nos muestra que Mateo escribió principalmente
para sus compatriotas los judíos, como se puede ver por las referencias a
Jerusalén, a David, al Reino; por las 65 citas del Antiguo Testamento; por
su punto de vista en cuanto al cumplimiento de las profecías; y por trazar
la genealogía de Jesús hasta Abraham, no mas arriba. Solo los judíos
podían estar interesados en tales detalles.
Versículo clave:
23:37-39
<<!!Jerusalén, Jerusalén, que matas a los profetas, y apedreas a los que
te son enviados! !!Cuántas veces quise juntar a tus hijos, como la gallina
junta sus polluelos debajo de las alas, y no quisiste!>>
<<He aquí vuestra casa os es dejada desierta>>.
<<Porque os digo que desde ahora no me veréis, hasta que digáis:
Bendito el que viene en el nombre del Señor>>.
Estilo:
El estilo podría ser caracterizado por lo que el arcediano Farra ha
llamado << antigua sencillez y monumental grandeza>>. Hay aquí un
arte que es tanto más efectivo cuanto que no es buscado. ¿Cómo habría
podido un oscuro galileo, iletrado cobrador de impuestos, componer, sin la
Divina inspiración, un libro tan inmensamente efectivo? ¿Cómo pudo
diseñar una tragedia que, con la sencilla Divinidad de su tema, deja
tamañita a la más grande de las obras trágicas humanas? ¿Cómo pudo
componer una obra musical cual la Pasión, que, desde los tonos suaves,
como de mágica flauta, de su dulce obertura, hasta la coral gigantesca de
su final, acumula con progresiva fuerza los elementos más poderosos del
más refinado patetismo? ¿no perdería el mundo muchísimo más con la
perdida de este breve libro de un despreciado galileo que con la perdida
de Hamlet, la Divina comedia y el Paraíso Perdido juntos? ¡Es que este
libro no se debe al genio, sino a la revelación; no al arte, sino a la verdad!
La grandeza de la obra se basa, no en el escritor, sino en aquel de quien
él escribió; y en que, sin pretender hacer arte, ni pulir estilo, ni buscar
retórica, sino con perfecta e inconsciente sencillez, refiere los hechos tal
como ocurrieron. Es <<inmensamente efectivo>>, precisamente porque
en ninguna de sus frases va en busca de <<efectividad>>.
Propósito del tema:
El objetivo de este evangelio, se descubre en parte por el hecho de
que fue escrito para lectores Judíos y es enteramente judío en sus
características. Parece que el escritor, se propuso conectar la Ley con el
Evangelio y mostrar la relación de la Antigua Dispensación y la Nueva:
<<Conectar los recuerdos de sus lectores con sus esperanzas; mostrar
que el señor de la Iglesia era el Mesías de los Judíos.
Aunque no fue el primero en ser escrito, se coloca el primero en la
Biblia por ser el más íntimamente conectado con el Antiguo Testamento.
Como ha dicho el profesor Word, el propósito el escritor, es
presentar al mundo la Persona de Jesucristo frente al panorama del
pasado, para que su rostro destaque con tal claridad sobre el trasfondo de
la promesa, de la profecía, de los tipos y de los símbolos, que los hombres
puedan reconocer en Él, el cumplimiento de la voz del pasado en la
actualización del presente. Fue el designio de Mateo (o, más bien, el del
Espíritu Santo a través de él) mostrar que, en el Antiguo Testamento, el
Nuevo esta prefigurado; que el Nuevo emergía del Antiguo, y lo trascendía
vastamente; que, en Jesús, el Antiguo tenía su conclusión; y el Nuevo, su
comienzo. Esto es verdad en el relato de Mateo más que en cualquier otro
de los evangelistas.
Detalles Característicos:
Este Evangelio, que es aproximadamente de la misma largura que el
de Lucas, contiene catorce porciones enteras que se hallan solo en él.
Entre sus peculiaridades, encontramos diez parábolas, dos milagros,
cuatro acontecimientos de la infancia del Señor, siete incidentes
relacionados con su pasión, muerte y resurrección y no pocas grandes
porciones en sus discursos. Una cuarta parte de todo el libro contiene las
palabras mismas del Hijo del Hombre.
Fecha:
Es cosa segura que fue el primer evangelio que se puso por escrito,
y quizás el primer escrito del nuevo testamento, con la probable excepción
de Santiago. Recientes investigación dan gran probabilidad a una fecha no
ulterior al año 50 de nuestra era.
Lugar:
Se ha sostenido que Marcos escribió su evangelio en Egipto, en
Samaria, en Antioquia y hasta en cesarea, pero preponderan los
testimonios a favor de Roma como lugar de redacción. Si la
<<Babilonia>> de 1 P. 5:13 significa Roma, como es muy probable. Este
punto de vista obtiene una mayor garantía.
Capítulos:
Dieciséis.
Destinatarios:
Hay una larga antigua tradición, de que Marcos escribió su evangelio
para los cristianos de Roma. Al revés que el de Mateo, contiene pocas
referencias al Antiguo Testamento. Siempre traduce las palabras y
expresiones que los romanos desconocían, asi como las costumbres
peculiares de los Judíos (por Ej., 3:17; 5:41; 7:2 y ss., 10:46; 15:42;
entre otros). Se aclara ubicación del Olivete (13:3) no se hace mención de
la Ley judía. Y hallamos en el, palabras latinas que no se encuentran en
ninguno de los otros relatos (por Ej. 6:27; 7:4; 12:42; entre otros)
Palabra clave:
Ministerio.
Versículo clave:
10:45
<<Porque aun el Hijo del Hombre no vino a ser servido, sino a servir y a
dar su vida como rescate por muchos>>.
Estilo:
De todos los evangelios, Marcos es el más grafico, sencillo y directo.
Sus palabras son como pequeños cuadros. Sus tiempos gramaticales
favoritos son el pretérito imperfecto y el presente histórico, los cuales
ponen ante nuestra vista la actividad y el movimiento de la vida real (po
Ej. 1:30,37). El estilo de Marcos, en opinión del Dr. Morrison, <<no es
clásico, es provinciano y carente de toda apariencia de “sabiduría verbal”.
Es casero, sin adornos ni artificio Literario>>. Es precisamente esto lo que
forma parte del encanto que posee.
Propósito y tema:
Las palabras con que se abre el relato parecen indicar el objetivo del
escritor (1:1), a saber, presentar a Jesús como Él era en la vida diaria,
viviendo y obrando entre los hombres, en la plenitud de sus energías, el
siervo que se agacho para vencer (Sal. 110:7; Is. 52:13 __53:12; Zacarías
3:8).
Aun cuando Marcos pone de relieve, ante todo, la figura humana de
Jesús, como el Siervo Sufriente de Is. 53, el hecho histórico de la
Encarnación del Hijo de Dios, y hasta la aserción explicita de su Deidad,
no faltan en este Evangelio (v. ., 11; 5:7; 9:7; 14:61-62; 15:39). El
Ministerio de Jesús aparece llenos de obras tan maravillosas, que resulta
evidente para todo el que tenga ojos, que el reino de dios estaba en Él.
Sin mencionar el nacimiento ni la infancia de Jesús (carente de
importancia para los pobres esclavos de Roma), comienza su relato con la
aparición del Precursor, para seguir con el Ministerio publico de Jesús y,
finalmente, con su Pasión y Resurrección.
Detalles Característicos:
Este Evangelio es muy rico en detalles, de los que nombraremos los
más salientes: Dieciocho Milagros, de los que dos son exclusivos de
Marcos; cuatro parábolas, de las que una se encuentra solo en él (4:26-
29). Ninguna de las palabras aparece aquí desarrollada, y tampoco hay
largos discursos. Solo Marcos dice, y lo dice dos veces, que los apóstoles
<<no tenían tiempo ni para probar bocado>>. Usa 41 veces el adverbio
griego euthys, que nuestras versiones traducen por <<luego>>,
<<entonces>>, <<inmediatamente>>, <<enseguida>>, <<al
instante>>, entre otros. Solo Marcos nos dice, no menos de 11 veces,
que, en medio de su Ministerio, Cristo se retiraba, ya para escapar de sus
enemigos, o para refrigerar su alma con la oración. Solo él nos dice que
Jesús era <<el carpintero>> (gr. Tekton = constructor con madera), lo
cual arroja mucha luz sobre los años oscuros pasados en Nazaret. Otras
características de Marcos son el énfasis por repetición (v., poe Ej. 1:45;
4:8; 14:58, entre otros), y la riqueza de detalles en cuanto a nombres,
números, tiempo, espacio, color y sentimientos (por Ej. 3:16; 10:46;
5:13; 6:7; 1:35; 4:35; 11:4; 12:41; 6:32; 1:41,43; 8:12,23; entre
otros).
NOTA IMPORTANTE
Lo que se llama la crítica bíblica se divide en dos grandes ramas:
critica textual y critica histórica. Esta última se ocupa de temas como: la
composición, autoridad, fecha y valor histórico de los documentos, ya que
estos pueden discernirse por evidencia interna.
En cambio, la crítica textual se ocupa del estado del texto, tratando
de conocer con certeza su forma original, libre de los errores que se
introducen inevitablemente en la transmisión de los manuscritos antiguos.
Con esto tiene que ver la discusión de si los últimos doce versículos
de Marcos son o no genuinos, es decir, obra de Marcos. No es cuestión de
sentimientos, si no de crítica textual; y lo más que se puede decir, sin
prejuicios, acerca de dicho final del evangelio de Marcos, en vista del largo
y acalorado debate de los expertos, es que, aunque su genuinidad podría
ponerse en entredicho, no puede descartarse del todo, sin más. Los dos
MSS más antiguos y autorizados, que son el Vaticano y el Sinaitico
terminan en el versículo 8, pero muchos otros MSS de suficiente valía,
tanto griegos como latinos, tiene el final que aparece en nuestras biblias.
Si esta disputa quedara acabada algún día, nadie lo puede asegurar, pero
mientras no lo este, podemos decir con uno de los grandes expertos (el
doctor Gregory): <<Todo cristiano puede leer, disfrutar y ponderar esos
versículos, y ser agradecido por ellos tanto como lo plazca>>.
LUCAS
Autor:
Los expertos están totalmente de acuerdo en que Lucas es el autor
del tercer Evangelio. Lucas es mencionado en el nuevo Testamento
solamente tres veces, todas ellas en las Epístolas de la cautividad (Col.
4:14; 2 Ti. 4:11; Flm. 24). Era médico de profesión y, con base en los 17
términos náuticos que usa en su escrito, se ha inferido que ejercía su
profesión en los Navíos mercantes que incesantemente surcaban de un
lado al otro el mar Mediterráneo. Sus conocimientos profesionales se
reflejan en los numerosos términos médicos que usa, tanto en el
evangelio como en hechos. Bien puede ser uno de los primeros gentiles
convertidos, y uno de los primeros evangelistas en Europa (nótese la
primera persona de plural Hech. 16:10). La asociación de Lucas con Pablo
es un hecho de suma importancia, tanto para ambos como para la Iglesia.
Una vez más, observamos el provecho mutuo de santos amigos en las
épocas formativas de la Iglesia: Pablo y Lucas, Pedro y Marcos, Lutero y
Melanción, Calvino y Beza entre otros. Sentimos mucho no saber más del
propio Lucas, pero, a través de sus escritos y de lo que Pablo dice de él,
vemos en el al erudito, al investigador minuciosos, un carácter muy bien
equilibrado, bondadoso, pacifico, generoso y hasta humorista (v. en Hech.
19:23-41 su delicioso relato del alboroto en Éfeso).
Fecha:
Por lo que diremos acerca del lugar más probable en que se escribió
su Evangelio, podemos deducir la fecha de redacción del Evangelio de
Lucas, pues Pablo estuvo en Cesarea en los años 58-60 de nuestra era. Se
cree que su Evangelio es el más tardío de los tres sinópticos; así que, si el
de marcos hacia el 50(o, quizás, antes), y el de Mateo entre los años 55-
57 Lucas debió de escribirlo hacia el año 60 de nuestra era o un poco
antes teniendo ante sí el de Marcos y los <<Logia>> como fuente. Hay
quienes demandan fechas más tardías, pero las que hemos dado gozan de
la mayor probabilidad.
Lugar:
Puesto que Lucas estuvo con Pablo durante los dos años de la
prisión de este en Cesárea, pudo tener allí abundantes oportunidades para
las investigaciones a las que hace referencia en su prólogo (1:14).
Podemos, pues, afirmar que el Evangelio de Lucas se escribió en Cesárea.
Capítulos:
Veinticuatro.
Destinatarios:
Marcos escribió para romanos, Mateo para judíos y Lucas para
griegos (1:1-4, Hch. 1:1). Quedando así representados los tres grandes
pueblos que configuraron la historia en aquel tiempo: los romanos, en el
campo de las leyes; los judíos, en el de la religión; y los griegos, en el de
la literatura y el arte. Teófilo, de quien no sabemos nada, bien pudo ser el
representante del mundo pagano, es decir, de extracción gentil.
Palabra clave:
Humanidad.
Versículo clave:
19:10.
“Porque el hijo del hombre vino a buscar y a salvar lo que se había
perdido”.
Estilo:
El estilo literario de Lucas es el más refinado de todo el Nuevo
Testamento, pues el autor dominaba el griego clásico mejor que ningún
otro escritor de la biblia.
Propósito y tema:
El tema de Lucas está bien explicito en su grandioso prologo (1:1-
4). Donde expresa sus motivos y su método. En cuanto al método,
“investigo todo con esmero desde su origen” y escribió “ordenadamente”,
es decir, por orden cronológico; en cuanto al motivo, fue para que sus
lectores “se percataran bien la solidez de las enseñanzas en que habían
sido instruidos”. El objetivo de Lucas fue presentar en lugar prominente el
designio universal del evangelio, y en esto refleja el espíritu y los anhelos
misioneros de Pablo, cuyo compañero fue.
Detalles Característicos:
Las características de cada uno de los Evangelios están en la misma
línea que sus respectivos objetivos. Esto se ve claramente en Mateo y un
Lucas. El primero es Judío sin duda alguna; el segundo es, igualmente
indudable, gentil en sus características.
Los dos primeros y los dos últimos cps. Son de gran importancia y
suma belleza; y la gran sección exclusiva de Lucas (9:51__18:14) es de
tremendo interés y de gran valor histórico; se la ha llamado <<diario de
viajes>> y <<la gran inserción>>.