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Traductores
Margarita de la Vega Lázaro
Traductora de la lengua otomí
ISBN: 978-607-402-320-6
Introducción .................................................................................................................................. 11
Francisco Monroy
Miguel León-Portilla
S
on múltiples el arte y las ciencias que dan vida a los diccionarios en que se confrontan vo-
cablos de dos lenguas distintas. Tales obras responden a una necesidad primordial: buscar la
correspondencia entre los significados de palabras de idiomas diferentes para hacer posible la
comprensión de quienes los hablan.
Todo vocabulario es, en última instancia, el inventario de la propia cultura. Si en ella predomina
la actividad agrícola, abundará en vocablos referentes a plantas, semillas y formas de cultivo. Si en
cambio, la cultura de los que hablan una lengua está altamente tecnificada, incluirá ella términos que
designen su instrumental y elementos científicos. Por eso, para buscar las equivalencias, cuando las
hay, entre vocablos de dos universos culturales diferentes, es imprescindible ahondar en las significa-
ciones, a veces muy complejas, que corresponden a cada palabra. Y, si la suma de ellas abarca todos
los campos del saber, la elaboración de un diccionario exige conocimientos múltiples, así como el
arte de saberlos trasmitir.
Desde la antigüedad se inició la preparación de glosarios, que son una forma de diccionarios.
Hubo griegos y romanos que los elaboraron con diversos propósitos. Unos buscaron la explicación
de palabras identificadas en obras como las de Homero o Aristóteles. Otros registraron nombres de
lugar o vocablos especializados referentes a diversas materias. En tiempos posteriores aparecieron
diccionarios bilingües e incluso otros en que se dio entrada a las equivalencias entre palabras de tres
o más lenguas.
El arte y la ciencia de la que se ha llamado lexicografía han florecido de muchas formas a lo largo
de los siglos. Ahora bien, como nunca antes en la historia universal, el encuentro de dos mundos a
partir del viaje de Cristóbal Colón en 1492, trajo consigo la necesidad de comprensión entre millo-
nes de personas de lenguas distintas. Quienes penetraban en el Nuevo Mundo y los que vivían en él
desde hacía milenios, requerían comunicarse, aun cuando fuera principalmente para beneficio de los
procedentes de Europa.
9
DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
Primero fueron los españoles y luego portugueses, ingleses, franceses, italianos, holandeses y
también africanos en su condición de esclavos, quienes entraron en un escenario en el que hombres y
mujeres hablaban un sinfín de idiomas. Eran las lenguas de los que habitaban en las islas del Caribe
y en muchos lugares de la inmensa Tierra Firme. Algunas de esas lenguas eran habladas y compren-
didas por millones de hombres y mujeres en extensos territorios. Otras, en cambio, se escuchaban
sólo en ámbitos reducidos.
Dio principio entonces una extraordinaria actividad lingüística dirigida a captar y describir las ca-
racterísticas fonológicas, léxicas y estructurales de centenares de idiomas amerindios. En tal empeño
participaron los hablantes de ellos y buen número de frailes misioneros, franciscanos, dominicos,
agustinos y miembros de la Compañía de Jesús. Fruto de sus trabajos fueron no pocos vocabularios
bilingües, así como artes o gramáticas de dichas lenguas.
Se ha criticado a veces sus aportaciones por haber tomado como modelo los trabajos lingüísticos
de Antonio de Nebrija, publicados a partir de las últimas décadas del siglo XV. Semejantes críticas
resultan bastante ingenuas. Por una parte, no es cierto que en las gramáticas y vocabularios que en-
tonces se prepararon se siguiera servilmente lo aportado por Nebrija. Además los frailes, espontáneos
lingüistas, algunos de los cuales habían estudiado en universidades como las de Salamanca, Alcalá
y la Sorbona de París, identificaron las grandes diferencias que había entre los idiomas europeos y
los amerindios.
Se convirtieron, entonces, en creadores de nuevos paradigmas o modelos lingüísticos. Por otra
parte, ¿qué otras aportaciones de mayor modernidad en su tiempo pudieron haber encontrado como
marco de referencia?, ¿habría que pedirles que hubieran adoptado los de la gramática generativa de
Noam Chomsky?
Muy pronto, en el siglo XVI, hubo gramáticas y diccionarios de lenguas como el náhuatl, tarasco
o purépecha, zapoteco, mixteco, maya y otras de Mesoamérica, así como del quechua y el aimara del
mundo andino. A esas obras —varias de ellas ejemplo de honda capacitación lingüística— siguieron
otras; se cuentan por centenares las muchas lenguas habladas en el continente americano.
En este contexto, hay que notar que, sobre todo, a partir de mediados del siglo XVI y luego mucho
más ampliamente, los acercamientos a las lenguas amerindias han aumentado. La tarea de dotar a
cada una de estas lenguas de su propia gramática y diccionario ha sido y continúa siendo difícil. Los
avances de la moderna lingüística han aportado instrumentos para lograr mejores aproximaciones.
Sin embargo, no pocas de las primeras aportaciones de los frailes mantienen plenamente su valor.
Ofrecer ahora un conjunto de obras, referidas a los idiomas amerindios, muchos de los cuales
están en peligro de extinción, es empresa cultural de elevado mérito. Conlleva el rescate de un tesoro
cultural, ya que toda lengua es portadora de diferentes perspectivas de captación de todo lo que nos
rodea y, por consiguiente, refleja distintas formas de pensar. Por ello, es verdad que, cuando muere
una lengua, la humanidad se empobrece.
Doble valor tiene lo que ha emprendido la Editorial Plaza y Valdés. Por una parte, contribuye
activamente al rescate del tesoro de las lenguas amerindias. Por otra, con la publicación de estos
diccionarios, dentro de la Colección Bicentenario, Lenguas de nuestra Tierra, propicia el estudio y
la preservación de las mismas.
Si la confusión de lenguas de la que habla la Biblia fue interpretada como un castigo a la arrogan-
cia humana, hoy podemos afirmar que, a la postre, la pluralidad lingüística y cultural son de valor
imponderable. De modo paralelo a lo que ocurre con la biodiversidad, preciado atributo de los seres
vivos, y más aún, porque concierne a los seres humanos, la diversidad de lenguas es patrimonio de
la humanidad, legado que hay que preservar para bien de cuantos hoy vivimos y de cuantos habrán
de venir.
Por ello, estos diccionarios de las lenguas amerindias son un gran tesoro.
10
Introducción
L
os festejos del bicentenario de la Independencia y del centenario de la Revolución, al que
todos los mexicanos estamos convocados, es una excelente ocasión para reflexionar acerca de
las condiciones y de los factores que se han conjuntado para constituir nuestra mexicanidad
y para, a partir de ello, reconocer lo que hemos sido como pueblo, los retos que hemos superado, los
logros que hemos sido capaces de cosechar, y, sobre todo, lo que necesitamos y deseamos construir
para la presente y futuras generaciones de mexicanos.
Dentro de esas reflexiones, hay una de primordial importancia para comprender mejor la esencia
de nuestra sociedad; es aquella que implica reconocer que si bien México, como país, cumplirá 200
años de vida independiente, de haberse insertado a partir de ello en el continente de las naciones que
surgieron con la modernidad del siglo XIX, posee una acervo cultural que rebasa tres mil años de
tradición.
Una milenaria historia cuyos testigos no son sólo los monumentales vestigios arquitectónicos
presentes en gran parte del territorio nacional, principalmente en la región mesoamericana, y que
han sido desde siempre motivo de admiración de propios y extraños, por los misterios que guardan
y su por su inigualable munificencia.
Testigos son, también, esos elementos vivos, depositarios de la percepción del mundo, del pensa-
miento colectivo y de la patente muestra de la forma de expresar experiencias vitales; elementos de
vida que lograron sobrevivir ante condiciones adversas y que hoy, aún con aliento, son capaces de
manifestar parte del espíritu ancestral de los mexicanos de hoy: las lenguas autóctonas u originarias
de México.
Muchas son las lenguas que hablaron los antiguos habitantes de lo que hoy es México, pero
muchas de ellas fueron desapareciendo por la presión ejercida por otras lenguas imperiales en sus
respectivos tiempos, y, principalmente, por el castellano asentado en el territorio desde mediados
del siglo XVI.
La supervivencia de las lenguas originarias de México ha sido extremadamente difícil a lo largo
de los últimos 500 años, pero su influjo no ha abandonado las bases de la configuración de la mexi-
canidad de hoy, a 200 años de vida independiente, en consideración a que 13 millones de mexicanos
son indígenas, y a que la población mestiza, mayoritaria, es heredera de alguno de los varios grupos
autóctonos del país.
11
DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
1
Cfr. Manuel Javier, Amaro Barriga, La linguodiversidad y las minorías lingüísticas en el siglo XXI,
México, Plaza y Valdés, 2010, p. 248.
12
INTRODUCCIÓN
es que su esplendor literario superó a la totalidad de las lenguas amerindias de ella contemporáneas.
Al margen de estas consideraciones, este autor proporciona una interesante introducción al estado
actual de la lengua, una sucinta geografía de las hablas nahuas en la región y claves que, al estilo de
Ángel María Garibay, ofrecen un interesante acercamiento a las reglas gramaticales de esa lengua.
Es un trabajo colectivo que mucho abonará al necesario rescate e imprescindible promoción de
las lenguas autóctonas mexicanas, que mucho han perdido por el olvido secular al que lo condujeron
la colonización, inicialmente, y la errada difusión de la noción de lengua nacional única, a partir de
la reinstauración de la República en el siglo XIX.
La publicación de esta obra de carácter lexicográfico y gramatical, dentro del marco de las cele-
braciones de los centenarios de México es, por tanto, una contribución de las entidades, instituciones
y gobierno del Estado de México, interesados en acrecentar el aprecio de nuestra mexicanidad a
partir de la convicción de formar parte de un país multicultural, plurilingüe, capaz de cimentarse con
más vigor y mayor sentido de trascendencia, merced al reconocimiento de que nuestra diversidad es
el valor más sólido de nuestra unidad.
13
Introducción a la lengua hñähñu (otomí)
L
os otomíes se identifican lingüísticamente como: Hñähñu (otomí), que significa: “el que ha-
bla su propia lengua en referencia a otra diferente” o “lengua que se habla de tres formas
a través del aliento” tomando en cuenta el espacio simbólico que representa el fogón lugar
sagrado para el pueblo y en donde se articula y se trasmite de manera oral de generación en gene-
ración de padres a hijos la lengua otomí, esta lengua pertenece al tronco lingüístico otomangue.
El origen y significado del nombre otomí ha provocado discrepancias, es considerado por Saahagún
como proveniente de otomítl, nombre de su primer caudillo, sus hijos y descendientes se llaman
otomíes. También puede derivarse de Totomitl “flechador de pájaros”.
Desde entonces, este pueblo habita en la Meseta Central, entre los 19 y 23º de latitud norte y a
más de mil metros de altitud.
Soustelle considera que la extensión geográfica que ocupaba la familia otopame comprendía las
entidades de Tlaxcala, Puebla, Veracruz, oriente del estado de Hidalgo, Estado de México, Distrito
Federal, Michoacán, San Luis Potosí y Guanajuato.
En el Estado de México, el grupo otomí se encuentra distribuido en la parte central y norte de
la entidad en 39 municipios aproximadamente, sobresaliendo con mayor número de población los
siguientes: Acambay, Aculco, Timilpan, Jiquipilco, San Bartolo Morelos, Chapa de Mota, Jilote-
pec, Villa del Carbón, Temoaya, Jilotzingo, Toluca, Lerma, Xonacatlán, Otzolotepec, Huixquilucan,
Ocoyoacac, Metepec, Naucalpan, Nicolás Romero, Tultitlán, Ixtapaluca, Atizapán de Zaragoza,
Coyotepec, Xalatlaco, Polotitlán, Tianguistenco, Xonacatlán, Tepozotlán y Melchor Ocampo, con
una población total de hablantes 104 357 de los cuales 49 902 son hombres y 54 455 son mujeres
según el censo del INEGI (2000).
Los otomíes se dedican al cultivo principalmente de maíz, frijol y trigo; las técnicas agrícolas son
rudimentarias, utilizan la coa para la siembra, y la yunta de bueyes para roturar la tierra y además
hay lugares en donde sacan dos cosechas al año, en estos lugares siembran trigo, chícharo, haba y
papa. La ganadería es una actividad complementaria.
La venta de artesanías propias de la región y elaboradas por ellos mismos, es también una fuente
de ingreso.
El tipo de vivienda que predomina en la región otomí, está determinado por construcciones de
adobe de uno o dos cuartos con techo de dos aguas.
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DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
Indumentaria otomí
En algunos de estos municipios aún utilizan su indumentaria tradicional, principalmente la mujer
ya que en el hombre ésta ha desaparecido, la cual consiste en una falda de enredo de lana muy amplia
de color azul (en el sur el estado ), y de color negro, café con líneas verdes, blancas, anaranjadas
y amarillas (en el norte), con una blusa de manta o popelina de color blanco, con manga corta
y bordados en forma de plantas y animales, figuras geométricas o combinados, se acostumbra
también el quexquemetl de algodón, lana o artisela
Los otomíes han conservado muchos rasgos de su cultura que no carecen de interés. Éstos no son
grandes sesteros, ni alfareros; ya que cuando el hombre se encuentra fuera de sus hogares la mujer
emplea el tiempo en la preparación de los alimentos y se entrega a la fabricación de hilos, cuerdas,
textiles entre otras actividades.
El hilado manual y cordelaría es un trabajo masculino, los hilos son fabricados de fibras de ixtle,
sin ayuda del malacate (se compone de un pezón de tierra secada o cocida). Este hilo es empleado
para coser en espiral las cintas de paja de los sombreros. El telar con el que se teje la lana es parecido al
que se emplea para el ixtle.
Las mujeres otomíes especializadas en el tejido producen: ayates, fajas, faldas, quesquémels,
morrales y morralitos.
Las enaguas de manta blanca son concebidas de manera a sobresalir ligeramente de las faldas de
lana, la banda que sobresale está cubierta de bordado de punto de cruz en la de varios colores. Los
motivos más frecuentes en los bordados son los venados y las flores pequeñas.
Los ayates en ciertas regiones del área otomí son decorados con bandas paralelas con lana de
diversos colores, separados por espacios sin decorado. Todos los trabajos de tejido que se acaban
de considerar son estrictamente femeninos y relacionados con la técnica del telar típico de la
América indígena.
El tejido de sarapes es un trabajo masculino que se ejecuta con un telar de origen europeo. La
confección de los diseños requiere también una paciencia infi nita y una habilidad muy grande.
La base es la cuenta de hilos.
Finalmente, la vestimenta en forma de capa triangular llamada quesquémel. Las mujeres no
llevan sino raramente sombrero o huaraches, van generalmente con los pies descalsos y la cabeza
descubierta. Algunas veces, trenzan su cabello por las mañanas, introducen en las trenzas gruesos
cordones de lana roja o verde.
El adorno femenino más difundido es el collar, pues se cree que es una cuenta del tiempo meso-
americano y además es símbolo de autoridad, la mujer de mayor edad es quien lo porta tanto en la
familia o en la comunidad, este adorno llevan por lo general la cantidad de 12 collares , superpuestos
en vueltas cerradas alrededor del cuello. Y tiene que ser de color rojo porque simboliza el sol.
Una de sus costumbres de mayor arraigo se relaciona con el baño de temascal, para la mujer que
ha dado a luz, es atendida por una curandera, la suegra suele estar presente durante el alumbramiento
acompañando a la curandera; posteriormente se le baña con hierbas (hojas de naranjo, jarilla,
pechtón, capulín, tejocote, ahile, gordolobo, pericón, pirul tepozán, ruda, estafiate, ortiga y árnica,
además de flores como la nochebuena, lirio, cerillo, rosa de Castilla, entre otras). Se cuida mucho el
ombligo del niño, con el baño se purifica por lo que se considera al temascal como lugar sagrado.
El Temascal es un baño rústico el cual es construido de adobe, algunos con aspecto de horno de
pan, en su mayoría miran al oriente, dentro existe una parrilla hecha con varilla y encima colocan
unas piedras, éstas en función al tipo de baño que se le va a dar a la persona o personas, si es con
fines curativos.
16
INTRODUCCIÓN A LA LENGUA HÑÄHÑU (OTOMÍ)
Compadrazgo, éste es uno de los elementos más importantes de cohesión familiar y comunitaria
entre los otomíes, se practica en diversos tipos de ceremonias tales como el bautizo, confirmación,
casamiento, oratorios de mazorcas cuates, de la cruz y de la primera piedra de la casa-habitación
Entre sus costumbres está el trueque, el cual consiste en intercambiar productos como quelites,
acosiles, berros, sal, chiles, cal, por capulines, tejocotes, manzanas o peras, esta forma de comercio
se puede apreciar en el día de plaza o en las fiestas patronales de los municipios de habla otomí.
En los hogares otomíes, se rinde culto a espacios simbólicos como es: el tlecuil o fogón, por ser el
lugar de reunión de la familia, de allí la importancia que se le da, ya que se cree que es como el sol
de la casa; se adorna con flores cada 18 de marzo, fecha en que los otomíes reciben el equinoccio de
primavera, acontecimiento importante debido a que el sol calienta con mayor intensidad. También
se adorna el fogón en cada fiesta familiar. Otro lugar es el Adoratorio (pequeño altar dedicado a los
santos), aquí se realiza gran número de ceremonias y danzas, para abrir cualquier tipo de actividades,
saludando a los puntos cardinales, ofreciendo flores e incienso. En la actualidad han construido
capillas destinadas a este fin, en donde se cree que ha caído un rayo.
La religión del área es una mezcla sincrética en donde se une el culto cristiano con elementos
de probable extracción prehispánica, dentro de estos últimos tenemos a makita (sol-fuego), makime
(tierra-luna), que a base de la dualidad junto con el agua y el viento son las fuerzas que hacen que la
vida exista.
La música y el canto otomíes tienen una forma particular de ser un sello indígena inconfundible,
debido a que el texto otomí puro o casi puro impone un prosodia propia, estableciendo una forma
muy personalizada de musicalizar con un ritmo monótono, para arrullar a los niños se emite un
sonido articulado que suena como gchi gchii, éste es propio del grupo otomí y el ejemplo que se
presenta proviene de la comunidad de Huitzizilapan del municipio de Lerma y Tixmadeje municipio
de Acambay.
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Reglas gramaticales hñähñu (otomí)
A
unque la mayoría de las grafías para las consonantes son semejantes a las del español, algu-
nas representan fonemas distintos del español, y aun aquellos que son parecidos tienen sus
características particulares en la lengua otomí. La “t” o la “s” del otomí, por ejemplo, son
algo distintas de las del español. El maestro que no ha escrito ni ha leído en otomí debe estar muy
consciente de este hecho, o se confundirá.
En la lengua otomí se utiliza indistintamente nu, ra y ro para indicar el artículo.
En el singular siempre se utilizará el nu o ra.
El plural siempre se escribe con yâ, yu y yo.
La palabra gentho o ra ghento siempre denotará comparación.
En la lengua hñähñu los términos jabu, habi, ar y aru indican pregunta.
Para la conjugación de verbos, siempre tendrá el ju las tres personas del plural en su terminación.
Los marcadores del tiempo presente Di, Gi, I.
Los marcdores del tiempo pasado o, Go, Bi.
Los marcadores del tiempo futuro son Go, Gi, Da y además se agrega el término ma entre el
marcador de tiempo y el verbo.
El marcador de tiempo gi se utiliza en la segunda persona del singular tanto para el presente y futuro.
Para la puntuación se usan los siguientes signos de puntuación universales:
La interrogación y la admiración se señalan en otomí por medio de morfemas-gramemas, por lo
que el uso de los signos ¿? ¡! es opcional.
El acento (´) se usa en los adjetivos posesivos para la tercera persona del singular y del plural,
para distinguirlos de los artículos determinados:
El apóstrofe (‘) representa la oclusión glotal, un corte en la palabra, aparece entre vocales, así
como entre vocal y consonante.
19
DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
Articulación
Para quienes sientan curiosidad de saber cómo se produce la voz, van las siguientes explicaciones
Los sonidos se producen por el aire aspirado, que pone en actividad los órganos de la articulación.
Se llama articulación a la posición adoptada por los órganos bucales cuando se produce un sonido.
La cavidad bucal está formada por una bóveda inmóvil que comprende los dientes superiores,
los alvéolos y el paladar duro, órganos pasivos de la articulación, y los labios, la lengua y el velo del
paladar, que son los órganos activos. Entre los órganos, la lengua es la más importante.
La posición que toman los órganos de fonación en la emisión de un sonido depende del punto de
articulación, lugar donde se aproxima un órgano pasivo y un activo, lo que produce un estrechamien-
to del canal y la manera en que sale el aire de manera fonética.
Se llama fonema a cada uno de los abstractos que representan un sonido, el cual forma el sistema
fonético de una lengua, representado por vocales y consonantes.
El alfabeto que se propone para la escritura de la lengua häñtho - hñähñu, es la que ha venido uti-
lizando la Dirección General de Educación Indígena para el caso del Estado de México, que consta
de las siguientes grafías: 22 consonantes y 13 vocales.
Las vocales se clasifican conforme a dos dimensiones que son: el grado de abertura de la boca
(cerradas, medias, abiertas); y a la parte de la boca en que se hace el sonido: anteriores delanteras
(hacia los labios), centrales (hacia el paladar), y posteriores (hacia la garganta).
Con excepción de la a, a estas 13 vocales se les llaman orales, porque al pronunciarlas el aire
sale por la boca. La ä y la ö son nasales porque al pronunciarlas el aire sale por la nariz. La e, i, o
y u, también tienen su correspondencia nasal, pero en éstas la nasalización no se representa en la
escritura. A las vocales representadas con las grafías e, o, u y la o en algunos círculos, se les llama
vocales medias.
Ejemplo:
Consonantes
En la lengua otomí, las consonantes aparecen al principio de la palabra o entre vocales; nunca apa-
rece una consonante al final. Las vocales aparecen al principio de palabras, junto a otras vocales y
al final de palabra.
Por la pronunciación y el lugar en que se produce el sonido, tenemos en la lengua otomí las si-
guientes consonantes: b, ch, d, f, g, h, ,j, k, l, m, n, ñ, p, r, s, t, x, y.
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REGLAS GRAMATICALES HÑÄHÑU (OTOMÍ)
Existe además la unión de una o dos grafías para representar un solo sonido; se les denomina
grupos consonánticos : th, ts, tz, ch.
Existen cuatro tipos de consonantes interrumpidas que son: oclusivas, fricativas, laterales y na-
sales.
Oclusivas: b, p, d, t, g, k, h
Fricativas: f, th, z, ts, s, ch, x, j, y
Laterales: l, r
Nasales: m, n, ñ
El alfabeto hñähñu
El alfabeto consta de 22 consonantes y 13 vocales siendo un total de 35 letras que se presentan en el
siguiente orden , bu, chu, du, fu, gu, hu, ju, ku, lu, mu, nu, ñu, pu, ru, su, tu, thu, tsu, xu, yu, zu, yu.
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DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
Pronombres personales
Son la parte de la oración que sustituye al nombre o lo determina.
Los pronombres personales tienen varias formas, según el oficio que desempeñan en la oración.
Al ir en lugar del nombre, se llama primera persona el que habla, segunda persona a quien se
dirige al hablar, y tercera persona de quien se habla.
Nugo yo:
Nuke tú:
Nugege él:
Nugoju nosotros:
Genkoju vosotros, ustedes:
Nugegeju ellos:
Adjetivos posesivos
Pronombres posesivos:
Designa al poseedor
Ma meti: Mío, mía Ma metiju De ustedes
Ri metiju
Ri meti: Tuyo Ri metiju Suyos, su de ellos
Ro metiju
Ro meti: Suyo, su (de él o ella) Mametigúi,mametiju Nuestro
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REGLAS GRAMATICALES HÑÄHÑU (OTOMÍ)
Pronombres indefinidos
Se les llama así a los pronombres que designan de un modo vago o general a las personas o cosas a
que se refieren.
El artículo
El artículo es un introductor de sustantivos; se indica con tono y aparece antes de nombres o sustan-
tivos, que se apoyan de adjetivo, adverbio o posición.
Artículos definidos:
Singular Ejemplos
Nu: el nu ngú: el ratón
nu: la nu fani: el caballo
Plural Ejemplos
Yu: los yu xenthe: los montes
Yä: las yä käjä: las tunas
Artículo indefinido:
Singular Plural
Ra: un yu: las, unos
n’a: una yä: las, unas
Número
Cuando las vocales cambian de forma a las palabras se llaman accidentes gramaticales, lo cual co-
rresponde a ciertas variantes en el significado.
El número es el accidente gramatical que sirve para denotar si se habla de una o más personas o
cosas. Los números son dos: singular y plural. El singular denota una sola persona o cosa, el plural
denota dos o más personas o cosas.
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DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
Adjetivo calificativo
El adjetivo calificativo es el que modifica al sustantivo, señalando una cualidad o defecto.
Grados de significación de los adjetivos.
Positivo:
Comparativo superlativo:
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REGLAS GRAMATICALES HÑÄHÑU (OTOMÍ)
tonu: Quién
Tekja, te, te romejyu Qué
Tengu Cuántos
Ha Cómo
Terofedi, ndana Cuál
Adverbios
Los adverbios son palabras que modifican a un verbo, un adjetivo o a otro adverbio, en la oración
funcionan como circunstanciales o formando parte de modificadores, son invariables, ya que no
tienen género ni número.
De tiempo:
De cantidad:
25
DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
De lugar:
De afirmación:
Ja: jä Sí
Nkjapu Cierto
Xo enkjapu, Xotankjapu Ciertamente
Nkjapu, xo nkjapu La verdad
De negación:
Jina No
Nindi Nunca
Xo jingi nkjapu Jamás
Xo ningi nkjapu Tampoco
NIngi nkjapu: xo jina Pues no
De duda
De comparación:
Ta: ma ra Tan
Xo Tanto
Ta Cuan
Tengo, tengu Cuanto
Nkja, nkjangu Como
De orden:
Meto Primero
Befa Después
M´a befa Último
N’a ngu n’a Sucesivamente
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REGLAS GRAMATICALES HÑÄHÑU (OTOMÍ)
Las preposiciones
La preposición es una palabra que relaciona los elementos de una oración. Las preposiciones pueden
indicar origen, procedencia, destino, dirección, lugar, medio, punto de partida, motivo, etc.
Las posiciones son: a, ante, bajo, con, de, desde, durante, en, entre, excepto, hacia, hasta, mediante,
para, por, salvo, según, sin, sobre y tras.
A De Excepto MAKE
Ante Ama Hacia aro
Bajo Mbra I
Con Ko Hasta tabi
De Ga Mediante xoko
Desde Ka Para panu
Durante Di Por doma
En Ga Salvo pexo
Entre Bi Según nkjangu
Sin Kuexo Sobre amaña
Tras De
Verbos:
El verbo es la parte de la oración o categoría léxica que expresa existencia, acción, condición o es-
tado del sujeto. La gramática tradicional ha considerado que el verbo es el núcleo del predicado de
la oración, aunque según el enfoque generativista serían las inflexiones verbales de tiempo las que
constituyen un auténtico núcleo sintáctico de la oración o sintagma de tiempo.
27
DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
Ejemplo:
Oni: Preguntar Motho De pie
Odi: Pedir Mi Sentar
Xödi: Leer Meni Acostar
Xi’mi: Escarbar Ñoo Caminar
Kuat’i: Pegar Nzöki Brincar
Tongi: Pasar brincando Âjä Dormir
Teni: Seguir Tsii Comer
Mafi: Gritar Ini Jugar
M’oi: Parar Jekuari Correr
Ete: Hacer Nthuki Limpiar
Ñudi: Señalar Jutsi Anotar
Joki: Limpiar Bini Acordar
Ts’i: Comer Nujti Señalar
Jeki: Cortar Penti Agarrar
Boi: Parado Petse Subir
Xot’i: Soltar Ñ´a Hablar
Xifi: Decir Nzöfo Llamar
Pädi: Saber N’itsi Pisar
Dine: Querer Tsodi Vomitar
Nzöni: Volar Puxti Pelar
Nthe: Encontrar Âxi Rasurar
Tsoti Escupir Pixti Inflar
Ni: Bailar Jeni Cortar
Yoti: Alumbrar Je’ke Partir
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REGLAS GRAMATICALES HÑÄHÑU (OTOMÍ)
La traducción de español a lengua indígena nunca debe ser literal, porque se pierde el contenido
del mensaje. Se sugiere que se utilicen sinónimos para que las traducciones sean más apegadas a la
realidad, ya que hay términos en español que no tiene la lengua indígena.
29
Introducción a la lengua fot’una (matlatzinca)
L
a comunidad de San Francisco Oxtotilpan, es una de las 28 comunidades pertenecientes al
municipio de Temascaltepéc del Estado de México, la cual se encuentra a 40 kilómetros,
aproximadamente, de la ciudad de Toluca; esta comunidad es la única de habla matlatzinca
según el XII Censo de Población y Vivienda 2000; San Francisco Oxtotilpan colinda con dos pue-
blos de habla náhuatl, San Miguel Oxtotilpan y San Mateo Almomoloa, además de Mesón Viejo,
San Bartolo Morelos (municipio de Amanalco de Becerra) y San Antonio Acahualco (municipio de
Zinacantepec). San Francisco Oxtotilpan se divide en siete colonias: Santa Teresa, Las Manzanas,
Los Remedios (el Polvorín), El Panteón, Las Mesas, Los Pinos y Buenos Aires.
Actualmente la lengua matlatzinca se habla en San Francisco Oxtotilpan como única comunidad,
no obstante, sus habitantes a través de la migración se han dispersado en varios municipios del
Estado de México, principalmente en Nezahualcóyotl, Chimalhuacán, Toluca, Valle de Chalco
Solaridad, la ciudad de México, donde el asentamiento de las familias permite el habla de la lengua,
y por supuesto, en Temascaltepéc, en la comunidad de San Francisco Oxtotilpan cuya comunidad
es nuestra área de estudio, pues ahí se encuentra el corazón de la lengua y la cultura matlatzinca
en sus contextos de habla.
Según el II Conteo de Población y Vivienda del 2005 menciona que en el municipio de Temascal-
tepéc se encuentran 785 hablantes de la lengua matlatzinca donde se ubica San Francisco Oxtotilpan
pues en dicho municipio se encuentra nuestra comunidad de estudio (SFO). También menciona que
otra parte de la población se encuentra fuera de la misma, principalmente en la ciudad de México
con 952 hablantes; así como diferentes puntos del Estado de México lo que hace un total de 1 904
hablantes de la lengua matlatzinca donde 910 son hombres y 994 son mujeres.
Entre los habitantes de SFO la principal fuente de trabajo se da en los campos de cultivo medio de
temporal y de riego; con el primer medio se cultiva maíz principalmente, aunque también suele cul-
tivarse frijol, avena, trigo, chícharo o papa, mientras que en los cultivos de riego se encuentran el de
papa y chícharo, que son cultivos que se exportan a la ciudad de Toluca o México, además de cultivos
como la flor de cempasúchil, flor de nube y avena. Para llevar a cabo el cultivo de riego, la comunidad
cuenta con una serie de canales que distribuyen el agua en diferentes zonas de la comunidad y el
agua que se utiliza es proveniente del río que atraviesa la comunidad. Actualmente SFO utiliza la
yunta de caballos para el cultivo del campo, aunque algunos otros habitantes utilizan el tractor.
31
DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
Otro sustento de trabajo es la cría de trucha arcoiris, en el cual se aprovecha el agua del río de
la comunidad. En la actualidad muchos de sus habitantes que de jóvenes emigraron a la ciudad de
México, han regresado a la comunidad para desempeñar el trabajo que solían realizar en pequeños
talleres, como son los de hojalatería y pintura, de eléctricos, de vidrio y aluminio, pollerías.
Además, esta comunidad cuenta con un elemento de importancia histórica: “el temascal”, que
entre los hogares matlatzincas suele haber uno por cada familia, teniendo diferentes fines como
son: bañarse, remedio de reumas, dolores de espalda, entre otros. El temascal entre la comunidad
ha adquirido mucha relevancia sobre todo como baño de vapor, tomándolo en promedio cada tercer
día, también lo usan para relajación por la arduas jornadas de trabajo en el campo a la vez que sirve
de limpieza personal. El temascal se utiliza también como remedio para las mujeres que dan a luz,
puesto que evita que a éstas les entre frío en el vientre.
Esta preservación de costumbres se ha dado debido a que la comunidad cuenta con una gran y
bien estructurada organización tanto social como religiosa, lo que le ha favorecido. La organización
religiosa se compone de la iglesia con el fiscalito, el fiscal, los mayordomos, los campaneros y los re-
zanderos; mientras que la organización social puede dividirse en la delegación y una subdelegación
que cuenta con tres delegados, el primero cuenta con un presidente, un secretario y un tesorero, jefes
de vigilancia, jefes de ventena, recolectores del dinero, además de contar con capitanes de faena por
cada colonia; por otro lado está el de bienes comunales, quien cuenta con un presidente, un secretario
y un tesorero, jefes de vigilancia para el bosque, personas que avisan para las asambleas, y por últi-
mo el de bienes ejidales, que cuenta con un presidente, un secretario y un tesorero, jefes de vigilancia
para el bosque, gente para avisar las asambleas. Todos los cargos de SFO son de rotación, los cargos
religiosos son de un año mientras que los sociales son de tres.
Esta lengua pertenece a la familia otomangue, considerada en la otomí-pame, en la que hay
cuatro familias, pame, jonaz, matlatzinca y otomazahua, donde el matlatzinca se subdivide en dos
lenguas: el matlatzinca y el ocuilteca, esta última denominada actualmente tlahuica de San Juan
Atzingo. Existe una relación de estas últimas lenguas ya que tienen una hermandad en los contextos
de su habla.
En el origen de la comunidad de SFO hay un gran enigma, ya que entre los habitantes se desco-
noce cómo llegó a ser este lugar el asentamiento de los matlatzincas actuales, si en su historia fue
un pueblo con auge en el valle de Toluca. De esta forma no se sabe con precisión el origen de esta
comunidad pero cabe mencionar que ya existía antes de la Revolución mexicana, pues en SFO hay
personas de edad muy avanzada que cuentan en la tradicional oral, que a ellos les tocó vivir la re-
volución escondiéndose en diferentes lugares, y que tenían de 8 a 10 años aproximadamente, a esto
habría que sumarle por lo menos unas generaciones antes de ésta, aunque no hay certeza de cuántas.
En este sentido, un originario de la comunidad durante una faena del agua potable, sin querer tocó
el tema de cómo fue que sus ancestros se asentaron en esta zona y comentó al respecto: “me contó
mi abuelo que sus tatarabuelos le dijo que nuestros antepasados venían del valle de Toluca con una
planta mejor conocida como maguey, buscando un lugar donde asentarse, por lo que esa planta era
el símbolo para encontrar el lugar adecuado y que tenían que sembrarla y si se daba con abundancia
ése era el lugar adecuado y que esa planta se dio en abundancia en lo que hoy es nuestro pueblo por
eso aquí fue donde se asentaron los matlatzincas” (Padilla, 2005).
malinalcas. La llegada de los matlatzincas a lo que hoy se denomina el valle de Toluca, se sitúa en
el año de 1120; de acuerdo con estudios realizados por Gracia Payón y con los datos proporcionados
por Torquemada, hasta el siglo VII ocupaban un territorio tan extenso que llegaba hasta la frontera
del actual estado de Sinaloa. Cazés menciona que de ser cierta esta mención, los matlatzincas de los
que habla García Payón, debieron ser los primeros pobladores, y que lo extenso de su territorio lo de-
bieron haber abarcado en un momento nomádico. Para llegar al valle de Toluca tuvieron que cruzar,
según Chavero, el territorio de Guerrero, mientras que Orozco y Berra dan como fecha de estable-
cimiento de los matlatzincas en Ocuilán el año de 648. Así al ir penetrando al valle de Toluca, situa-
ción que les permitió un gran desarrollo cultural parecido al de otras culturas mesoamericanas; esta
denominación como lo demuestran materiales reunidos y estudiados por Quezada, se extendieron
en determinado momento hasta alcanzar a más de la mitad del estado de Morelos, buena parte de los
estados de Guerrero, Michoacán y virtualmente todo el occidente de México; tales extensiones no
pueden menos sugerir que la importancia de los matlatzincas en Mesoamérica debió ser enorme.1
Entre los años de 1200 y 1478 d.C. los asentamientos más importantes, al parecer fueron Ca-
lixtlahuaca, Teotenango y Malinalco. Durante la Conquista, los matlatzincas fueron sometidos por
Gonzalo de Sandoval, pasando a ser tributarios de la corona española.
Para los años treinta, García Payón señala que se habla matlatzinca en San Francisco, en los
ranchos de Oxtotilpán, San Miguel, entre otras comunidades pertenecientes al distrito de Temascal-
tepéc, así como en San Juan Atzingo, Ocuilan.
Hacia 650 d.C. decae la hegemonía de Teotihuacán como gran centro rector en el altiplano y
surgen otros centros ceremoniales como Teotenango, Calixtlahuaca, principales zonas arqueológicas
de los matlatzincas del valle de Toluca; el primero se encuentra citado en diversas fuentes históricas
del siglo XVI, se deriva del teotl, sagrado, dios divino; tenamitl, muralla, cerco, albarrada, y de co,
indicativo de lugar, es decir: “en el lugar de la muralla sagrada o divina” que sirvió de fortaleza
para los matlatzincas del valle de Toluca, mientras que el segundo era centro ceremonial “que en los
tiempos de la infidelidad se llamaban en lengua matlatzinca Pintabatl y que era además la casa de
los señores del matalcingo”. De esta forma Calixtlahuaca era, según un documento colonial, la casa
de los ídolos, quizá porque el jefe supremo de toda la provincia del matlatzingo residía en Toluca,
siendo Calixtlahuaca la ciudad ceremonial. Cabe mencionar que el dios más importante en el área
de Toluca fue Coltzin, deidad agrícola a quien en su honor se sacrificaba a personas (insertas en una
red hasta comprimirlas totalmente).
La palabra matlatzincas etimológicamente proviene del náhuatl, de las raíces matlatl, red; zintli,
reverencial y catl, gentilicio; es decir “los señores de la red” que era utilizada para desgranar maíz,
cargar objetos pesados y también en los sacrificios para honrar a sus dioses. Debido a las zonas
que ocuparon en el interior de la zona purépecha, éstos los llamaron pirindas, “los de en medio”.
Mientras que Basalenque da cinco nombres con los que los matlatzincas eran conocidos en su época:
“nipynthatuhui: los de la tierra, del mais”, “nintambati, los de en medio del valle”, “matlatlzingos,
los que hacen redes” y “pyrindas…porque el puesto que habitan es la mitad del reino de mechoacán
y la mitad en esta lengua se dice pirinta…se les llama pirindas que quiere desir los de en medio”.2
Actualmente los hablantes de la lengua matlatzinca se autodenominan como fot’, que en matla-
tzinca significa “nuestro idioma”.
De esta forma la cultura matlatzinca fue de gran apogeo en el hermoso valle de Toluca, pero se
desconoce cómo fue que se extinguió después de haber homogenizado el famoso valle de Toluca y
1
Citados de la obra de Daniel Cazés.
2
Ibid.
33
DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
actualmente reducirse a una sola comunidad; San Francisco Oxtotilpán. Aunque una de las causas
que posiblemente dieron pauta a este fenómeno fue que en 1565 la población disminuyó de forma
drástica a causa de las epidemias, se calcula que eran cerca de 180 mil las personas hablantes de la
lengua matlatzinca en el área del actual Estado de México y de Michoacán, por ello el gran declive
el poder que sustentaban en el valle de Toluca.
Bibliografía
Cazés Daniel, El pueblo matlatzinca de San Francisco Oxtotilpán y su lengua, México, ENAH, 1967.
El regreso de los días del sol, CEDIPIEM.
Quezada Ramírez Noemí, Los matlatzincas. Época prehispánica y época colonial hasta 1650, INAH,
México, 1972.
34
Reglas gramaticales fot’una (matlatzinca)
L
a enseñanza de la lengua matlatzinca en la Universidad Intercultural del Esta-
do de México ha permitido la experiencia dentro de la enseñanza-aprendizaje
de dicha lengua entre los estudiantes originarios de San Francisco Oxtotilpan,
principalmente, se ha cuestionado sobre el uso adecuado de un alfabeto en la mis-
ma lengua para su enseñanza dentro del aula de clases, y en ese sentido, dicho
alfabeto está sustentado en los análisis sobre el estudio fonológico de la lengua
matlatzinca por la licenciada en lingüística Etna Teresita Pascasio Montijo. A partir
de los diversos estudios fonológicos realizados de dicha lengua se permite esque-
matizar un alfabeto mejorado en relación con el que en su momento, a través del
departamento de educación indígena por parte del profesor Ermmelando Mendoza
fue propuesto. Sin embargo, bajo la necesidad de la universidad de tener una pos-
tura sólida en la lecto-escritura de la lengua matlatzinca se propone el siguiente
alfabeto práctico.
Los antecedentes sobre un alfabeto práctico sobre esta lengua se encuentra
oficialmente el alfabeto propuesto por Ermelando Mendoza, el cual consta de 34
grafías, de las cuales siete son vocales mientras que 27 grafías son consonantes,
siendo las siguientes:
Pronombres en matlatzinca
37
DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
De acuerdo con el cuadro podemos observar que hay prefijos específicos para
indicar la persona y el tiempo al que se refiere el hablante en matlatzinca, todos
estos prefijos van prefijados al verbo, por lo tanto el equivalente de cada prefijo
dependerá del verbo que se esté conjugando. Ejemplo con el verbo ganar en la
primera persona singular conjugado en los tres tiempos: tajbeetota (t. pas. “gané”);
tubeetota (t. pres. “estoy ganando”); rujbeetota (t. fut. “voy a ganar”).
38
REGLAS GRAMATICALES FOT’UNA (MATLATZINCA)
39
DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
40
Introducción a la lengua pjiekakjo (tlahuica)
L
a lengua tlahuica forma parte del diccionario multilingüe del Estado de México,
por lo que pone en las manos del lector este material que se fue desarrollando
a lo largo de varias reuniones colegiadas con todos los que en él participan,
con el propósito de auxiliar a todos los que se interesan en el estudio de las lenguas
indígenas en especial a la lengua tlahuica. San Juan Atzingo, se encuentra ubicado
en el municipio de Ocuilán Estado de México, colinda con las siguientes comunida-
des al Norte: con Coatepec de las Bateas y Xalatlaco. Al Sur con Chalmita y Ocuilán
de Arteaga. Al Oriente: con Huitzilác, Buenavista del Monte y Morelos. Al Poniente:
con el Municipio de Joquicingo. En esta comunidad se encuentra asentada la lengua
tlahuica, la cual se habla en cinco comunidades como son Santa Lucía, La Colonia
Gustavo Baz, San José el Totoc, el Capulín y San Juan Atzingo, se localiza en la parte
sur del Estado de México; en las cercanías del sitio arqueológico de Malinalco y el
santuario de Chalma. Testimonios de las personas de estos lugares indican que San
Juan Atzingo es el pueblo originario de los demás.
La palabra A-tzingo, se deriva de la palabra náhuatl que significa “en el agua
pequeña”. Atzintli, es diminutivo de átl, que significa agua.1
Para llegar a ella partiendo de la ciudad de Toluca, sobre la carretera federal
No. 55 y estatal No. 42, las vías de comunicación tocan los siguientes puntos:
Metepec, Mexicaltzingo, Chapultepec, Santa Cruz Atizapán, Tianguistenco, San
Nicolás Coatepec, Santa Martha, Santa Lucía del Progreso y San Juan Atzingo.
Ahí se encuentra la desviación de aproximadamente un kilómetro de distancia,
orientada al este en relación con la carretera estatal que comunica a la localidad con
el exterior.
La comunidad se encuentra sobre la carretera, Santiago Tianguisteco–Chalma,
pasando por los siguientes poblados con una duración de 45 minutos aproximada-
mente; Aguatenco, Ocotenco, Coatepec, Tlacuitlapa, San Bartola, la Lagunilla,
Coyoltepec, Santa Martha, Santa Lucía, hasta llegar a la colonia Gustavo Baz, ahí se
1
Amador Ramírez Tlajtolchiuali, Palabra en Movimiento: El verbo. Instituto mexiquense de cultura
2002.
41
DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
Querétaro
de Arteaga Hidalgo N
Michoacán
Tlaxcala
de Ocampo
Puebla
Morelos
Guerrero
Ocuilán
San Juan
Atzingo
Pertenencia lingüística.
Al estudio de las lenguas conocidas en la literatura especializada con los nombres
otomí, mazahua, matlatzinca o pirinda, ocuilteca o atzinca, pame del norte, pame
del sur y chichimeco jonaz, todas ellas habladas en el centro de México. Han sido
comprobadas por lo menos desde 1937, lo que ha permitido que en conjunto hayan
sido llamadas familia otomí-pame o grupo otopame.2
2
Disponible en http://celia.cnrs.fr/FichExt/Am/A_01_03.htm#_ftnref1
42
INTRODUCCIÓN A LA LENGUA PJIEKAKJO (TLAHUICA)
Familia lingüística
Esta lengua pertenece a la rama otopame de la familia Otomangue, junto con el
mazahua, el otomi, el matlazinca, el pame y el chichimeco son las otras lenguas
de esta rama.3 Las lenguas matlazinca y tlahuica son lenguas otomianas que se
encuentran al sur del Estado de México.
Número de hablantes
El Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI), para el año 2000,
registró que en los diferentes barrios de San Juan Atzingo, su población sumaba un
total de 1,831 habitantes; de ellos, 881 (48.1%) fueron hombres y 950 (51.9%) muje-
res, siendo ligeramente mayor el sexo femenino.
Una de las características de la comunidad es que las viviendas se encuentran
distribuidas de forma dispersa; en cada uno de los barrios. Lo anterior es una li-
mitante en el suministro de servicios públicos como son energía eléctrica, agua
potable y drenaje.
Vocativos
Se designan diferentes vocativos al grupo étnico. Muntzel dice, que a esta lengua se
le llama (ocuilteco) porque se habla en el municipio de ocuilán.4
Los hablantes de esta lengua se reconocen como “tlahuicas, maclazincas y pjie-
kakjo que quiere decir “lo que hablo”. El finado don Rodrigo Sosa Fermina, de San
José el Totoc, argumentó que anteriormente no tenía ningún nombre esta lengua,
por ello sólo decían “Ñi kjue ye kakjo” que quiere decir hablemos nuestra lengua”
dijo además que no se escuchaba el término tlahuica, el pueblo empezó a recono-
cer la lengua indígena con este nombre hasta 1975, cuando el finado José Trinidad
Tiburcio Santo, fue nombrado jefe supremo de la comunidad representando a esta
etnia ante el gobierno, siendo este el primer personaje que impulsa el registro de
esta lengua, posteriormente se firmó un documento escrito llamado “Pacto del valle
Matlazinca” el cual fue firmado con sangre de cada uno de los representantes de los
diferentes grupos étnicos del Estado de México, fue precisamente el la comunidad
de San Juan Atzingo donde se llevó a cabo este evento, a partir de entonces se re-
conoce oficialmente como tlahuicas del Estado de México.
Cazés Daniel, denomina a esta langue como atzinca.5
3
C. Martha Muntzel, La aplicación de un Modelo Generativo a la fonología del tlahuica (oculteco)
México, INAH, 1982, p. 9.
4
Idem.
5
Disponible en http://celia.cnrs.fr/FichExt/Am/A_01_03.htm#_ftnref1
43
Reglas gramaticales pjiekakjo (tlahuica)
L
a escritura de la lengua pjiekakjo-tlahuica, está reperesentada con grafías del
alfabeto español, con la cual se pretende acercar al lector a la pronunciación
correcta de las palabras y pueda leer tal y como está escrita. Se van a encontrar
simbolos adicionales como algunos dígrafos que consisten en usar dos fonemas
para sonidos simultáneos con sonoridad africada, una diagonal y un apóstrofo son los
que van a determinar la pronunciación correcta de dichas palabras, de no usarse se
estarían diciendo palabras diferentes de las que queremos decir, todo ello viene con
ejemplos para una mayor comprensión y de apoyo, de la misma manera se encon-
trarán algunas vocales dobles que corresponden a una pronunciación prolongada y
vocales heridas.
45
DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
Palatalizadas son:
By Dy Ly Py Ty ky
Ñuyaby Ndyiuly Lyujaby Pikityemepy Nloty Ts’oky
Abono Tenamastle Dejar Cocina Maguey Zopilote
46
REGLAS GRAMATICALES PJIEKAKJO (TLAHUICA)
Vocales
Se usan las cinco vocales de forma normal, cinco con una prolongación vocálica o alargando
el sonido, cuatro guturales heridas y tres prolongadas heridas.
Ejemplos:
a E i o u
Aja Mexa Iji Okua Umty
Cuándo Mesa Dile Dónde Enséñale
aa Ee ii oo uu
Nlitjaa Tyetat’ee Nlyii Jondobikilok’oo Muuxchy
Pájaro No es Carne Buenos días Humea
e̷ i̷ ø u̷
Mume̷ Bet’ i̷ i̷ Bemø Nlyij u̷
47
DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
Pronombres personales
Ejemplos:
Pronombres demostrativos
Éstos señalan la distancia en que se encuentra la persona que habla con relación a
otra persona animales o cosas, se clasifican así:
48
REGLAS GRAMATICALES PJIEKAKJO (TLAHUICA)
Ejemplos:
Pronombres posesivos
Son los que indican posesión o pertenencia, pueden señalar uno o varios posee-
dores. Tienen la característica de poder funcionar como sustantivo, adjetivo y pro-
nombre.
Ejemplos:
49
DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
Pronombres indefinidos
Se llaman así a los pronombres que designan de modo general, a las personas o
cosas a las que se refieren pero sin especificarla.
Miwa Alguien
Tawawa Nadie
Mioya Cualquiera
Mbiwanguitutna Quienquiera
Tyenda Algo
Tatyenda - mita mbla Nada, ninguno
Mbla Uno
Mula Otro
Mink’ich Poco
Lyutatpøeky Bastante
Mñjitje Algunos
Ejemplos:
50
REGLAS GRAMATICALES PJIEKAKJO (TLAHUICA)
Pronombres relativos
Singular Plural
Que wami Que kitmbo
Cual Oya Cuales Oyañje
Quien Wa Quienes Wañje, wangui
Del que (a) Oya Cuyos Oyañje
Cuanto (a) Ndietso , Mink’ich, Mit’ere cuantos (a) Ndietsoñje
Ejemplos:
Pronombres interrogativos
¿Quién? Wa
¿Quién es? Wañje
¿Cuándo? Aja
¿Cuánto? ¿Dónde? Okua ñumjoxy
¿Qué? Tyenda
¿Cómo? Okua
¿Por qué? Tyel t’a
¿Para qué? Tyenda lyije̷e̷
Ejemplos:
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DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
El artículo
Determinados Indeterminados
Singular plural Singular Plural
Wire Ñe , muñjitje Mbla Oloignda, mñjitje
El, la Los, las Un , una Unos, unas
Cuántos son
Okua loignda
muñjitje
Los demás
Ejemplos:
El sustantivo
52
REGLAS GRAMATICALES PJIEKAKJO (TLAHUICA)
53
DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
El adjetivo
Ejemplos:
Ndo t’undyu mbo El niño es grande Chinye mbi metpa Hoy hace mucho
tndye̷. jia calor
Wire mbajly tndye El caballo grande Mbi metse nda El agua es muy fría
Xuwa lmachy es de Juan
Wire ntse̷ ndo laja El chiquihuite Wire ñitjo tndye La casa grande
chico
Mbo tayok’a nmje La tortilla se endu- Ñumbotju Maíz negro
reció
Wire mpanzi t’exlo El pan dulce Ñe pelax ñunyoby Las peras verdes
ADJETIVOS POSESIVOS
Kak mach Li mach Ñelolmach Ñel mach
Mío, mía, mías, Tuyo, suyo, tuyas, Suyo, suya, suyas, De ellos, de ellas
míos. tuyos. suyos.
Ñejo mach
Nuestro, nuestras
SINGULAR PLURAL
Ka - mi. Ñep - mis
Na - nuestra, lyi - tus,
na y lyi _ tu Nak- nuestras.
Legt’e - su de el, Ñel – sus de ellos.
Wep – mi. Ñejop-nuestros.
Ñelol – de ellos
Ejemplos:
54
REGLAS GRAMATICALES PJIEKAKJO (TLAHUICA)
Son aquellos que van siempre unidos a un sustantivo o vocablo sustantivado; de-
terminan su ubicación o un atributo general.
Ejemplos:
Ñep nyixndy iwalinwe pla ma María. Mis zapatos son iguales a los de María.
Ñe mje mbi ndandyee. Las tortillas son tan grandes.
Legt’eñje tyeta plajkakjo. Ellos no son como nosotros.
Kach tyeta pla Xuwa. Tu no eres como Juan.
3. Grado de superlativo: indica una cualidad de grado extremo casi siempre en-
fatiza con la palabra MUY. MBi
mbla mno pjiu Ngunoo Kuit’a Mblandojo mñiendojo mñinguno Mblatilajt’a Mblajt’a
1 2 5 4 5 6 7 8 9 10
55
DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
Después del número 10 se usa el término MUTS’I que significa más por ejemplo
decimos MBLAJT’A MUTIS (LA) significa 11 es como decir 10 +1 = 11, No se usa el
término (mbla), por que no hace falta mencionarlo, éste se sustituye por la sílaba (la)
que da la secuencia numeral tampoco se una en el número12 quedando de la siguiente
manera, mblojnda muts’i (no), el 13, se dice Mblojnda muts’i (jiu). Del 14 hasta el 19 si
se pronuncia normalmente, ejemplos: mblajt’a tuts’i ngunoo 14, mblajt’a muts’i kuit’a 15,
mblajt’a muts’i mblandojo 16, mblajt’a muts’i mñiendojo 17, mblajt’a muts’i mñiegunoo
18, mblat’a muts’i mblatijajt’a 19 Y para el número 20 de usa el término MBLOJNDA
después el 21 se dice así MBlOJNDA MUTIS LA, sucede lo mismo con el número 21,22,
y 23 la secuencia despues de éste sigue el mismo procedimiento de los números ante-
riores. El 30 se llama mblojda muts’i lajt’a. Es como decir 20 + 10 = 30.
Los números ordinales por lo regular se usan así PRIMERU, SEGUNDU, TERCERU.
Como se observan son préstamos del castellano.
Adverbios
Existen ocho tipos de adverbios, éstos son de: de lugar, de tiempo, de modo, de
cantidad, de orden, de afirmación, de negación y de duda.
De De De De De
De Lugar De tiempo De modo
cantidad orden afirmación negación duda
Juiñe Chinye Pima Npøeky Premeru Jaa T’akua Nzetkuepla
Aquí Hoy Bien Mucho Primero Sí No Acaso
Mbømbø Mdaa Tyetyula Lutatp¦ky Ultumu Kinjamø T’aja Nomiaja
Allí Ayer Mal Bastante Último Cierto Nunca Quizá
Mbø
Muxu Mbørech Mink’ich Kinjamøø T’aja
wajlyu
Mañana Así Poquito Ciertamente Jamás
Allá
Juiñe Kiyaja Lilyi iji Poco Mut’e T’akua
Cerca Antes Buenamente Ndok’ich También tampoco
Meptje Ngoxy Tyetyulilo No mi aja
Lejos Después Mal Ya nunca
Mulajnyily Mbi
Mbitji Muy
Pasado ndutsi
Fuera Mbi
Mañana Es tacaño
Dentro Michinye Muk’uch Tatyenda
Pimbi pronto Más No hay
Pjia Ngoxy Mindok’iky
Arriba Después Menos
Mnzii Mulajñi Mitndye
Abajo Siempre Mayor
Pimbi T’ajaa Bengoxy
Debajo Nunca Menor
Tak’ojly Mbo milnda Ñutjuxy
Adelante Tarde pequeño
Pilyuñji
Mbo ñji
Atrás,
Temprano
detrás
56
REGLAS GRAMATICALES PJIEKAKJO (TLAHUICA)
Ejemplos
Verbo
Las oraciones Impersonales, se refieren a los sonidos o voces que emiten los
animales.
Ejemplos:
wire ntsi lyuta mu waja benye ñe El perro ladra mucho, cuando pasan
bet’a las personas
Muk’aju̷ wire nmis mbo ndina nkats’i El gato Maúlla, ya quiere comer
Ñe tamatyu muk’aju̷ñje jeki Los gallos cantan en la madrugada
mupanguily
Ñe chjutyu mbo milchofe ñe njant’e Las gallinas pusieron huevos por eso
hacen ruido
57
DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
La oración unipersonal, son las que no llevan sujeto y se refieren a los fenómenos
naturales.
Ejemplos:
Ndetso jia mupanguily mbi munge̷ge̷ Todos los días amanece nublado
Mumafby jeki mumda jia Llueve a medio día
Michinye micho jia Rápido se metió el sol
Michinye milndaa Rápido atardeció
Mechinye milnda ndatju Rápido nació el maíz
Oraciones transitivas
Son las que se construyen con el verbo cuya acción pasa de la persona que la
ejercita, llamada ajente y la que recibe, se llama recipiente. Se puede reconocer si
se transforma a voz pasiva.
Ejemplos:
El verbo
Los tres tiempos fundamentales del verbo son: presente, pasado y futuro, los
tiempos a su vez pueden ser: simples y compuestos. Los simples expresan su acción
por sí mismo, los compuestos requieren un verbo auxiliar.
Presente Presente
58
REGLAS GRAMATICALES PJIEKAKJO (TLAHUICA)
Ejemplos:
59
Introducción a la lengua jñatjo (mazahua)
Antecedentes históricos
E
l origen histórico del grupo mazahua es oscuro por la escasez de fuentes que
tratan sobre él y porque no hay mucha información. Además los investigadores
no se han puesto de acuerdo en el sentido de que han confundido a los oto-
míes con los mazahuas; por ejemplo Fray Manuel Crisóstomo Naxera1 al referirse a
la lengua mazahui (mazahua) dice: “... es tan parecida al otomí, que si no son madre
e hija, ‘son hermanas’...”, debido a la proximidad y su similitud cultural entre ambos
grupos.
Por su parte Clavijero afirma que: “encontramos escrito el nombre de este idio-
ma de muy diversas maneras, mazahui, mazahua, matlazahua, mozahui, todas las
noticias adquiridas convienen en que es un dialecto del otomí2 y que era el idioma
de los habitantes de las montañas occidentales del Valle de México que formaban
la provincia de mazahuacán y pertenecía a la Corona de Tacuba.
Hrlidcka piensa que los mazahuas se acercan más a los tarascos que a los oto-
míes.3
En tanto que Pedro Carrasco, sí identifica muy bien a los otomíes y a los maza-
huas como dos grupos diferentes y hace notar que: “...otomí, mazahua, matlatzinca
y ocuilteco son de alta cultura mesoamericana, ocupan un territorio continuo y no
demasiado extenso...”4 y en comunidades en donde hablaban tanto mazahua
y otomí como Ozolotepec lo describe como “...un pueblo medio otomí medio
mazahua...”.
Cuando se refiere a mazahuacán en le Códice Mendocino, dice que la población
más importante de este grupo se encuentra en Jocotitlán y que sus pobladores se
dedican a la cacería del venado y se pintaban el rostro con diferentes colores.
1
Manuel Orozco y Berra, Citando a Manuel Crisóstomo Náxera. Geografía de las lenguas y carta
etnográfica de México, 1864, p.17.
2
Fco. Javier Clavijero, Historia Antigua de México, p. 98.
3
Jacques Sous, La familia otomí-pame del México Central, FCE, p. 1933.
4
Pedro Carrasco Pizana, “Los otomíes”. Instituto de Historia. Méx. 1956, p. 13.
61
DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
Ahora, parece que la palabra mazahua proviene de la voz azteca o mexicana ma-
zatl que quiere decir venado. Este nombre se le debe al primer jefe de este pueblo
que se llamó Mazatl-Tecutli; y hay quienes piensan que se deriva del náhuatl mázatl
que quiere decir “donde hay venado” o poseedor de venados, que es el nombre del
origen de este pueblo.
Buschamann dice: “Creyendo probable que también otras naciones aztecas hayan
emigrado de México a Guatemala, me he sorprendido de los nombres de 5 pueblos
de Guatemala llamados Masaua”5 esta semejanza con el grupo mazahua de México
pudiera ser casual, pero que tampoco se puede afirmar.
Otros señalan que los mazahuas provienen de los acolhuas quienes dieron origen
a la provincia de mazahuacán, actualmente Jocotitlán, Atlacomulco e Ixtlahuaca.
Xólotl, gran monarca de los chichimecas que conquistaron el territorio de los
mazahuas y otras tierras antes que los aztecas, los repartió entre sus jefes prin-
cipales para que los gobernaran cediendo a Tecpa e Ixtacuautli las tierras que le
correspondían a la provincia de mazahuacán, y él escogió a Jocotitlán como asen-
tamiento de su reino.
Cuando se consolida el imperio azteca, la provincia de mazahuacán quedó bajo
el reino de Tlacopan. Durante la expansión del imperio azteca, con el gobierno de
Moctezuma Ilhuicamina, los mazahuas participaron en la conquista de las tierras
del sur. El rey Axayácatl fue quién sometió definitivamente al grupo mazahua.
La Colonia
Durante la época de la Conquista y con la llegada de Gonzalo de Sandoval al te-
rritorio mazahua, éstos quedaron sometidos al nuevo régimen. Y gran parte de su
territorio quedó sujeto a encomienda como sucedió con Atlacomulco, Almoloya de
Juárez, y Jocotitlán. En esa misma época se constituyeron las grandes haciendas,
tales como la de Solís en Temascalcingo, la de Tultenango en el Oro, La Villegré en
Jocotitlán y La Gavia en Almoloya de Juárez.
En esta época, la mayor parte de la región mazahua, los frailes tuvieron a su
cargo el proceso de evangelización de la población, siendo los franciscanos y los
jesuitas, estos últimos se establecieron en Almoloya de Juárez. En su mayoría reali-
zando trabajos de investigación etnográficos y lingüísticos como el licenciado Diego
de Nágera Yanguas, párroco de Jocotitlán que escribió la obra: “Doctrinas y ense-
ñanza en la lengua mazahua”; que aparte de escribir esta doctrina, también registró
los topónimos de los lugares cercanos de la región mazahua y otros lugares en
que supuestamente se desplazan los mazahuas, por ejemplo: Anyahue ‘Tacubaya’;
Anbechi ‘Tlaxcala’; Xanxua ‘Zitácuaro’, etcétera.
Una cosa que sorprende es que no se haya encontrado algún vestigio o monu-
mento arqueológico prehispánico o ídolo de barro o de piedra de este grupo, tan
sólo los adoratorios que registran Jaques Soustelle.
5
Juan Carlos E. Buschmann, “De los nombres de lugares aztecas”, tr. Del alemán por Oloardo
Hassey, en Boletín de la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística. t. (México 1860, p. 99).
62
INTRODUCCIÓN A LA LENGUA JÑATJO (MAZAHUA)
La Independencia
En la época de Independencia los indígenas mazahuas participaron en las diferentes
batallas, como por ejemplo la del Cerro de las Cruces, de igual manera participaron
en el gran movimiento armado que fue la Revolución de 1910. Actualmente los
mazahuas se llaman así mismos jñatjo o jñatrjo.
Localización
Los mazahuas ocupan hoy día la mayor parte occidental del centro del Estado de
México y una pequeña parte al oriente del estado de Michoacán.
Los municipios que componen la región mazahua son: Almoloya de Juárez, At-
lacomulco, Asunción Donato Guerra, El Oro de Hidalgo, Ixtlahuaca, San Felipe del
Progreso, Temascalcingo, Jocotitlán, Villa de Allende, Villa Victoria en el Estado de
México y en el municipio de Zitácuaro en el estado de Michoacán.
La región mazahua limita al norte con el estado de Querétaro y con los muni-
cipios de Acambay y Timilpan del Estado de México; al sur con los municipios de
Zinacantepec, Toluca, Amanalco de Becerra, Valle de Bravo e Ixtapan del Oro; al
oriente con los municipios de Temoaya, Jiquipilco y Morelos; y al poniente con el
municipio de Morelos en el estado de Michoacán.
El XI censo general de población y vivienda de 1990 reporta que la población
total de los mazahuas es de 127,826 habitantes de cinco años y más.
Lengua
Con respecto a la lengua mazahua ésta se ubica en el grupo lingüístico otomangue,
al que pertenece la familia otomí-mazahua. Esta lengua se encuentra emparentada
con las lenguas otomíes, pame, matlatzinca, pirinda, ocuilteca, y chichimeca. Esta
lengua no es un dialecto del otomí como investigadores lo consideraron en un
tiempo sino que es una lengua que tiene su estructura propia. El 97% de los 127,826
hablantes de la lengua mazahua es bilingüe y sólo un 3% habla únicamente su lengua
materna.
Actividad artesanal
Los municipios que cuentan con una mayor actividad artesanal son: San Felipe del
Progreso, Temascalcingo, Ixtlahuaca y Atlacomulco; en donde se confeccionan co-
bijas, fajas, tapetes, manteles, morrales, quexquémitl de lana. En San Felipe del
Progreso y Villa Victoria hay pequeños talleres en donde se fabrican productos con
la raíz de zacatón, por ejemplo: escobas, escobetas y cepillos. En Temascalcingo
se producen piezas de alfarería de barro rojo y loza de alto fuego, como cazuelas,
ollas, macetas y crisoles. En Ixtlahuaca las familias tejen a mano o a máquina con
hilo de acrilán o lana, guantes, bufandas, pasamontañas y suéteres.
63
DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
Bibliografía
Buschmann, Juan Carlos E. (1869), “De los nombres de lugares aztecas” (Tr. del
Alemán por O. Hassey), Boletín de la Sociedad Mexicana de Geografía y Esta-
dística, 8.
Carrasco Pizaña, Pedro (1979), Los otomíes. Cultura e historia prehispánica delos
Pueblos mesoamericanos de habla otomiana, Toluca, Méx., Gobierno del Estado
de México. (Ed. Facsimilar de la de 1950).
Clavijero, Francisco Javier (1958), Historia Antigua de México. 2ª. ed., Ed. y Pról. de
Mariano Cuevas, México, Porrúa.
Orozco y Berra, Manuel (1864), Geografía de las lenguas y carta etnográfica de México,
México.
Soustelle, Jaques (1993), La familia otomí-pame, México, FCE.
64
Reglas gramaticales jñatjo (mazahua)
E
l alfabeto mazahua ha retomado las grafías utilizadas en español, las que ha
elaborado en forma sencilla para hacer más práctico su uso, algunas con su
misma equivalencia en sonido y otras modificadas, ya que la lengua Jñatjo es
tonal, por lo tanto, se complementa con algunos signos convencionales que requiere la
lengua. Cuenta con fonemas guturales y nasales, además de las cinco vocales orales.
El alfabeto jñatjo esta formado por vocales y consonantes; de acuerdo con el análisis
lingüístico para facilitar su comprensión, se representa por las siguientes grafías o letras:
Vocales
En el jñatjo hay vocales orales y nasales. Por su pronunciación, existen las formas
modificadas o acompañadas con un signo convencional.
Normales: Son vocales que por su pronunciación son equivalentes del español:
a, e, i, o, u.
Nasales: Éstas ocurren cuando el aire es interrumpido en algún lugar de la boca,
pero el sonido sale por las fosas nasales y es representado con un guión debajo de
las grafías: a ,̱ e ,̱ i ,̱ o ,̱ u .̱
Glotales: Cuando al producirse el sonido hay un cierre en la glotis: i’, e’, a’, u’, o’.
Abiertas o guturales: u ̷, u ̷, e ̷, a ̷, o ̷.
Además de éstas, existen las alargadas, tales como: aa, ee, ii, oo, uu, a ̷a ̷, e e ̷ ̷,
oo̷ ̷, u ̷u ̷, aa, ee, ii, oo, uu, u ̷u ̷; y vocales cortadas: a’a, e’e, i’i, o’o, u’u.
Aquí se ha considerado el acento (la tilde), á, é. í, ó, ú, para distinguir palabras de
igual escritura pero diferente significado según la ubicación del acento. Por ejemplo:
b’ech’i (beber en plato caldo o líquido) y b’éch’i (dar a tomar líquido a la fuerza).
Consonantes
Por la pronunciación y el lugar en que se produce el sonido, tenemos las siguientes
consonantes en jñatjo: b, ch, d, g, j, k, l, m, n, ñ, p, r, s, t, ts, x, y, z, zh.
65
DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
chjo o
̱ ̱ ‘maíz’ jmii ‘cara’ jnotsa ‘tepozán’
jyoo ‘papá’ jñatjo ‘mazahua’ nzhu ̷nu ̷ ‘toro’
Para poder diferenciar el uso de las letras es necesario utilizar las mayúsculas y
minúsculas, de los primeros para escribir palabras de nombre propio, así como de
los pueblos y algunos parajes conocidos y de los comunes se deben escribir con
minúscula.
Uso de la coma (,), punto y coma (;), dos puntos (:), y punto y aparte (.), es impor-
tante hacer uso de ellos en la escritura a fin de que sea comprensible y entender su
contenido.
Partes de la oración
Artículo
Para el jñatjo es muy usual anteponer la partícula e en los nombres propios, e Xuba,
Juan; a Lipe, Felipe; y ne a los sustantivos en singular ne xiza, el árbol; ne ngumu ̷,
la casa; se utiliza igual para el género masculino y femenino. Ye o yo para el plural:
ye xiza, los árboles; yo ngumu ̷, las casas, y se aplica lo mismo para el género mas-
culino y femenino.
Demostrativo
El jñatjo utiliza los demostrativos de tres diferentes maneras: una para indicar
cercanía: ne, que equivale a este, y lejanía: nu, equivalente a ese; y para el plural,
nujyo: estos, aquellos.
66
REGLAS GRAMATICALES JÑATJO (MAZAHUA)
Sustantivo
Es la parte que designa a un ser u objeto, por lo tanto en jñatjo tenemos los si-
guientes sustantivos: propios, abstractos, personales, locativos, animados e inani-
mados.
e Xuba Juan
e Chiko Francisco
e Lena Elena
mbonge carnicero
mbixka fiscal
xopu ̷ te maestro
Zu ̷mi Toluca
Pameje Valle de Bravo
D’adyo Jñiñi Pueblo Nuevo
Mbaro Atlacomulco
Adjetivo
El adjetivo es la palabra que acompaña el sustantivo o nombre que expresa las ca-
racterísticas o propiedades del mismo; en el caso del jñatjo ‘mazahua’ se presenta
como un prefijo.
67
DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
Aumentativo: se forma con los prefijos tr’a-, ta-, cha- dependiendo de la variante;
tr’amixi gatote
tr’adyo perrote
taixi manzanota
chapjad’u ̷ caballote
changumu ̷ casota
ts’imixi gatito
ts’idyo perrito
ts’ingumu ̷ casita
ch’ingumu ̷ casita
zedyo perrucho
zengoñi gallinucho
zengumu ̷ casucha
Femenino Masculino
Posesivos
Para indicar la persona a quien pertenecen los sustantivos se utiliza el posesivo in:
mi, tu, su; aunque también puede ser solamente i.
68
REGLAS GRAMATICALES JÑATJO (MAZAHUA)
Ejemplos:
Preposición
69
DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
De tiempo: ra, en, hacia, hasta; mi, de; nreze mi, desde.
a xonru ̷ ra enje in jyoo, mañana vendrá mi papá.
mi nzha ̷a ̷ o enje dyeb’e, ayer llovió.
yo tee k’o ngara ndeze mi jingua, la gente que vivió desde hace mucho tiempo.
De instrumento: Se utiliza con la preposición ko, con.
Ne xut’i paxu ̷ ko na b’axu ̷, la muchacha barre con una escoba.
Otras preposiciones son: kja, k’a, kja ne, mbe, a, ko
Adverbio
De modo: a kjanu, así, de esta manera; ya, ya; pama pama, diariamente; ngek’ua,
por eso,
Ro kjaa a kjanu ‘lo hice así’
Ya sa ̷ja ̷ in jyoo ‘ya llegó tu papá’
Pama pama ri pe ̷pjigo ‘diariamente yo trabajo’
O jya ̷b’a ̷ xitsi ngek’ua na see ‘cayó helada por eso hace frío’
70
REGLAS GRAMATICALES JÑATJO (MAZAHUA)
Pronombre
Nuts’ko yo
Nuts’k’e tú
angeze él
nuts’kojme nosotros
nuts’kobi nosotros (dual)
nujyo ellos
Verbo
Para conjugar el verbo de acuerdo con la persona gramatical, se utilizan los si-
guientes sufijos:
yo -go
tú -ge
él -nu
nosotros -jme
nosotros (dual) -obi
ustedes, ellos -jyo
Tiempos verbales
Ejemplos
Presente Pasado
71
DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
trabajamos trabajamos
ri pe ̷pjigobi nosotros ri pe ̷pjigob’e nosotros
trabajamos trabajamos
(dual) (dual)
ri pe ̷pjiyo ustedes/ellos ro pe ̷pjiyo ustedes/ellos
trabajan trabajan
Futuro
ra pe ̷pjigo yo trabajaré
ra pe ̷pjige tú trabajarás
ra pe ̷pjinu él trabajará
ra pe ̷pjigojme nosotros trabajaremos
ra pe ̷pjigobi nosotros trabajaremos (dual)
ra pe ̷pjiyo ellos trabajarán
Imperativo
En jñatjo no existe una forma para decir el imperativo, solamente se pone énfasis
en el verbo al dar una orden.
bu g
̷ u ̷ ¡corre!
mimi ¡siéntate!
Interrogativos
Para realizar preguntas en jñatjo no utiliza signo alguno al escribir. Como esta len-
gua es tonal, se plantea la pregunta con cierta entonación mediante los adverbios;
los más comunes: pjenkja, por qué; jango, cómo; pjek’o, paraqué; jango, jange,
jak’ua, dónde; jangua, jingua, cuándo; nzi, cuánto, qué. Por ejemplo:
Conjunción
Los términos que se utilizan para la conjunción en la lengua jñatjo son: ñeje o ñe.
72
Introducción a la lengua náhuatl
E
l Estado de México tiene cinco grupos étnicos originarios entre ellos el náhuatl,
quienes a pesar del proceso de transculturación por el impacto de la urbanización,
aún conservan valores organizativos, estéticos, filosóficos y lingüísticos, este
último es elemento fundamental con la cual se transmite y perpetúa el pensamiento
étnico, pues es puente entre la construcción mental y la práctica social, como afir-
mó el señor Brígido García de Almomoloa en 1994 durante la ceremonia de inau-
guración del tercer encuentro cultural de Día Panamericano del Indio, “tu jlatu, ki
kixtia tleka tu yulo ki mati ua tu ma tekiti, nuestra palabra, es la que saca lo que el
corazón siente para que nuestra mano trabaje”.
Aquí es donde la importancia de la lengua trasciende para que no quede en una
unidad cultural dentro del hogar u hombre, sino que se conozca por el resto de la
sociedad, lo cual hace necesario la difusión evitando el olvido, hacia su propio ex-
terminio.
La lengua náhuatl, es hablada de origen en varios municipios del Valle de Toluca
aunque con poca población, entre ellos se encuentran Temascaltepec, Xalatlaco,
Tezcalyacac; en el Valle de México a pesar del avance urbano por la colindancia con
el Distrito Federal, hay más hablantes de origen en poblados que pertenecen a los
municipios de Texcoco, Chimalhuacán, Chiconcuac; y casi en todos, hay migrantes
del interior de la República, razón por la cual se aprecian variantes de las regiones
huasteca, poblana sierra norte y valle de Tehuacán, Veracruz centro y sur, princi-
palmente en los municipios de Chimalhuacán, Texcoco, Ecatepec, Naucalpan, entre
otros.
El bagaje de variaciones dialectales fonéticas donde algún sonido se sonoriza,
corta, apocopa o suprime provocado por acomodos en los órganos fónicos como el
de xokoyotsin, donde la /x/ pasa a /ch/ o se castellaniza con /j/, apocopado queda
en xoko, choko o joco; las conceptuales, siguiendo con xokoyotsin para referirse a
niño, encontramos konetl, okichpil, siuapil, xotetsi o piltontli; permite observar la
riqueza en vocabulario para la comunicación eficaz.
Morfológicamente entre los hablantes originarios del Estado de México y los
migrantes, amalgaman tres formas en el uso de /tl/ como tlakatl en un principio, la
segunda se da suprimiendo la sonoridad de la /l/ final quedando solamente en /t/
73
DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
74
Reglas gramaticales de la lengua náhuatl
La escritura
L
as antiguas culturas tuvieron códigos de comunicación los cuales de manera convencional
se interpretaban dentro de sus sociedades, los mexicas desarrollaron la náhuatl plasmando
sus ideas en pictogramas representando el objeto directamente, los ideogramas en el cual
se modificaba el significado del objeto, es decir, sólo se interpretaba, así el encierro a través de
una soga simboliza el sauatl-ayuno y los fonogramas que se integran por raíces de los objetos,
generalmente son para nombrar topónimos como Matsojtla de matsojtli piña y tla entre la abun-
dancia, interpretado como: Entre el piñal (Sullivan...)
El trabajo lingüístico de los primeros misioneros en México, fue la adaptación de las lenguas
indígenas al alfabeto castellano, dada la particularidad de éstas, en muchos términos la fonética
nativa no tiene equivalencia al castellano, ya señalado por Horacio Carochi en 1758, quien advirtió
el desuso de la /h/.
Rémi Siméon (1885) señaló la necesidad de suprimir grafías.
“Las diecisiete letras del alfabeto castellano para reproducir los sonidos de la lengua náhuatl /a/c/
ç/h/y/l/m/n/o/p/q/t/u/x/y/z/, podrían reducirse a 13, puesto que las guturales /c/ y /q/ equivalen a
/k/ y la /ç/z/s/i/y/o/u/ son usadas indistintamente en mucho términos”.1
Ángel María Garibay Kintana señaló la similitud fonética existente en el castellano.
“Es verdad que cada signo representa un sonido, también un sonido corresponde a veces a dos
signos, el sonido k=c, QU; H, signo de aspiración, del saltillo y unida a la U representa el sonido de
W. También otras ocasiones un solo signo representa dos sonidos: C=K y C=S”.2
En septiembre de 1978 la Organización de Profesionistas Indígenas Nauas, Asociación Civil (OPINAC);
la Alianza Nacional de Profesionistas Indígenas Bilingües, Asociación Civil (ANPIBAC), y el Centro de
Investigaciones Superiores del INAH (CIS-INAH) organizaron un seminario de “Gramática del náhuatl
moderno de la región Huasteca” (Hidalgo y Veracruz), con el propósito de formar etnolingüistas
hablantes de la lengua materna, cuyo resultado dió la integración del nauatlajkuilolpamitli (alfabeto
náhuatl) de 18 grafías, unificando el uso de /c/ y /z/ en /s/, /c/ y /q/ en /k/ y la /j/ en lugar de /h/.
1
Remi Simeon, Diccionario de lengua náhuatl, p. XXXIV.
2
Ángel María Garibay Kintana, La llave del náhuatl, p. 25.
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DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
NAUATLAJKUILOLPAMITL
Vocales a, e, i, o, u
Consonantes ch, j, k, l, m, n, o, p, s, t, x, tl, ts
Sustantivo concreto
Son los términos que provienen de manera original o primitiva cuyas raíces pueden generar otras
interpretaciones, tienen terminaciones en /li/tli/tl/ y muy pocos en vocal, aunque estas últimas en
algunas regiones les posponen la /n/.
Terminados en /
Terminados el /li/ Terminados en /tl/ Terminados en vocal o /n/
tli/
Kali Casa Nochtli Tuna Kilitl Verdura Michi-michin Pez
Xali Arena Achtli Piñón Tlakatl Hombre Kimichi-kimichin Ratón
Koli Abuelo Ichtli Fibra Xochitl Flor Kuakue Res
Kili Perico Poktli Humo Siuatl Mujer Poloko Burro
Los sustantivos provenientes de verbo, indicarán el evento de ese verbo, cuya terminación es
/listli/.
2.1.2. Los adjetivos toman forma sustantiva, cuando refieren al calificativo como sujeto, los cua-
les generalmente terminan en /li/.
Las raíces de un sustantivo concreto, verbo o adjetivo, forman con la terminación /yotl/ el sustanti-
vo abstracto los cuales en castellano terminan generalmente en /eza/encia/dad/ura/una/, muchos de
ellos no tienen un término exclusivo para el castellano, lo que sólo permite interpretar el sentido.
76
REGLAS GRAMATICALES DE LA LENGUA NÁHUATL
Terminados en /titlan/.
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DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
El sustantivo reverencial se integra del nombre con la terminación /tsin/, aunque en algunos mo-
mentos esto pasa a ser partícula que da la categoría de diminutivo.
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REGLAS GRAMATICALES DE LA LENGUA NÁHUATL
Adjetivo
Generalmente son terminados en /k/ pero en la diversidad de su integración, difieren por su des-
cendencia de raíces.
Los colores terminan generalmente en /tik/, pero esto puede modificarse cuando se usan ante-
puestos al sustantivo en forma apocopada.
Derivadas
Son adjetivos que se forman a partir de alguna raíz primitiva procediendo de sustantivo o verbo,
cuyas terminaciones variarán en /yo/ o en su caso /le/.
De sustantivo
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DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
De verbo
Adverbio
De lugar
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REGLAS GRAMATICALES DE LA LENGUA NÁHUATL
De tiempo
De frecuencia
De duda
Conectivos
Conjunción
Preposición
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DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
Preposición de lugar, para poder usarse debe estar antecedido por un adjetivo posesivo, lo que
indicará de quien se trata o quien está operando con ello.
De modo
Negación-afirmación
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REGLAS GRAMATICALES DE LA LENGUA NÁHUATL
Imperación
El verbo
Término que indica acción, para que pueda funcionar debe estar siempre antecedido por un pro-
nombre verbal el cual suple al pronombre personal o al sujeto, éste tiene función primordial para
ser entendido adecuadamente.
El verbo en esta lengua tiene una característica particular, ejemplo: tlakua – come, éste se compone
de dos vocablos: tla, que proviene de tleno-algo; y kua, que en sí es el verbo come, ya que en esta
lengua el verbo infinitivo no es funcional y siempre estará conjugado con alguna persona, así teme-
nos tlapaka - lava, tlamaseua - sufre, tlayekana - adelanta, etcétera.
La funcionalidad y comprensión depende de partículas que marcan persona, número y desinencias
temporales:
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DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
Intransitivo -transitivo
Los verbos intransitivos inician con /tla/ y pierden este vocablo al tener sentido transitivo, así
“la acción recae sobre una persona o cosa, expresa o táctica”,3 lo cual permite apreciar el objeto
directo.
Intransitivos Transitivos
Verbo Español Verbo Español
Tlatsonteki Corta Tsonteki Corta
Tlapoua Lee, cuenta Poua Lee, cuenta
Tlameua Escarda Meua Escarda
Tlajtoua Habla ijtoua Dice
Tlapaka Lava Paka Lava
Ejemplos:
Intransitivo
Transitivo
Tiempos
Existen algunos tiempos semejantes al castellano, sin embargo otros no corresponden, general-
mente todas las desinencias de tiempo están al final del verbo con excepción del pasado simple,
que lleva la partícula /o/ antepuesta al verbo, esto aplica a transitivos e intransitivos.
3
Idem
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REGLAS GRAMATICALES DE LA LENGUA NÁHUATL
Modos
Tiempo Persona Verbo Tiempo Uso naua Uso castellano
Antepretérito 2ª singular tlakua Toskia Ti tlakuatoskia Hubieras comido
subjuntivo 2ª plural Tlakua Toskiaj Non tlakuakoskiaj Hubieran comido
El modo circunstancial se divide en inmediato, mediato y condicional, esto refleja una acción que
se identifica por una desinencia al final del verbo, el cual funciona con los tiempos básicos, transiti-
vos e intransitivos y todas las personas ya explicadas.
Inmediato
Mediato
Tiempo Persona Verbo Tiempo Uso naua Uso castellano
Presente 1ª singular tlakua Sok Ni tlakuateuasok Hasta que coma y me iré
ua ni yas
mediato 1ª plural Tlakua Seyok Ti tlakuateuaseyok Hasta que comamos y nos
ua ti yaskej iremos
Condicionales
86
REGLAS GRAMATICALES DE LA LENGUA NÁHUATL
Impersonal
Es funcional con todos los tiempos explicados, transitivos e intransitivos; la partícula /te/ indica
la no especificidad de persona con quien se hará la acción.
Direccional
Trabaja con dos tiempos pasados, dos futuros y el presente, este modo indica que la acción se
hace en otro lugar de donde se está, las terminaciones para futuro son /ti/ y /ki/, para el pasado /
to/ y /ko/ y para el presente se antepone al verbo el vocablo /on/ ejemplos:
Futuro direccional
Ni tlakuati mostla Iré a comer mañana Ki chiuaki i ikpal Vendrá a hacer su silla
Tik itaki mo ikni Vendrás a ver a tu hermano Tik paxaloti mo nana Irá a visitar a tu mamá
Pasado direccional
Ni tlakuato yaljua Fuiste a comer mañana Ki chiuako i ikpal Viniste a hacer su silla
Tik itako mo ikni Viniste a ver a tu hermano Tik paxaloto mo nana Fuiste a visitar a tu
mamá
Presente direccional
Indica una acción estando en un lugar y la acción en otro, para lo cual se antepone a la persona
el vocablo /on/.
Keman ni uala ni on tlakua iuan no nana Cuando vengo voy a comer con mi mamá
Sentel ni on mujtotia iuan ichpokamej Siempre voy a bailar con las muchachas
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DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
Así que las terminaciones quedan como: /ti/ iré a, /ki/ vendré a, /to/ fui a, /ko/ vine a, /on/ voy
a, en este caso ya no se usa el verbo ir /yauia/ como tal.
Verbo reflexivo
Hay un grupo reducido de verbos que funciona de manera regular, donde el “complemento
directo es la misma persona que ejecuta la acción”,4 pero hay otro grupo donde se pueden in-
tegrar todos los verbos tomando un sentido reverencial, incluyendo también los de uso común
pero con una terminación diferente, para lo cual siempre tendrán antepuesto el vocablo /mo/; la
funcionalidad siempre será con los pronombres verbales intransitivos.
Ejemplos:
Ipan ojtli mo xixa yolkamej En el camino excretan lo animales
Mostla ni mo tlaloti ijnaltsi Mañana iré a correr temprano
Xi mo iljui kenik ti tekitis Piénsale como trabajar
Verbo reverencial
Todos los verbos pueden funcionar de esta manera, según sea la terminación; para ello, se divi-
dirán en dos grupos y tendrán las desinencias que se explican en los siguientes cuadros.
4
Jesús Álvarez Constantino, Gramática Funcional del español, t. II, p. 152.
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REGLAS GRAMATICALES DE LA LENGUA NÁHUATL
Ejemplos:
Los verbos que terminan en /ia/ perderán la /a/ final y los que terminan en otra vocal pasarán a
ser /i/, para que la terminación reflexiva en este grupo se con /ilia/.
Verbo frase
No tienen correspondencia con otra lengua, lo cual se entiende como frase o en su caso, como
enunciado, pero tienen funcionalidad con todos los tiempos y modos ya descritos.
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DICCIONARIO ESPAÑOL-OTOMÍ, MATLATZINCA, TLAHUICA, MAZAHUA Y NÁHUATL
Verbos yuxtapuestos
Pronombres personales
Singulares
Yo Tú Él, ella
Ne Te Ye
Nejua Tejua Yejua
Nejuatl Tejuatl Yejuatl
Na Ta Ya
Naja Taja Yaja
Nea Tea Yea
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REGLAS GRAMATICALES DE LA LENGUA NÁHUATL
Plurales
Es un vocablo que antecede al verbo y siempre indicará la persona con quien se ejecutará la acción,
como se describe en la siguiente estructura:
Cantidades
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Pluralidad
Fuentes
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B
baba s guene ch’uni nba xenk’ijñi nexetl
babear v raguene manch’uni mukumyii b’eje k’ijñi tenalauia
bagazo s zafani rakuati xilo xidye pachtli
bagre s moi bagre, kjachamju nlyiju̷ nanyily s’ob’ezo/jmo̱o̱ xolotl
bailarín, a adj xoni webenebi beñefby nemego/jneme mijtotini
bailar v ni ine̸bi muñefby neme mijtotia
baile s ranimi nje̸bi muñefe̸e̸ jneme mijtotili
bajada s ka’i tjiti mulaty a ndu̷b’u̷ temoli
bajar v raka’i chabi plaby zo̷bu̷/d’ab’u̷ temoua
bajo,a adj jingate kajchabi dolaja se̷b’i echkapa
balacear v yeintini p’eti tyumbiñje pjat’u̷ zapju̷ totopoka/totopotsa
balanza s rajugi balanza nza mateakjee k’o ni dye̷dyiji etikayotl
balero s (juguete) nfotsiza balero mbalyeru balero kuatolontli
balsa s buxa balsa ximonza ts’ib’u̷u̷ atlapechtli
banca, o s thujni chjopi chjopy tjujnu̷ ikpali
bandido adj s pipite k’ajye̸ betyejendunda mbe̱e̱ amkualtlakatl
banqueta s (grada) lenguñuu naru okua pundiñje ñu̷nu̷ ndañi tetekaikpali
ñe bet’a
bañarse v raji texuti kexujtyii xaja mo altia
baño s ji pu matejontapi pumbiñje ñe xaja/pojo atili
bet’a
baño de vapor s tita nit’e̸ putyejiñje ngumu̷ pareje temasakali
barato, a adj jingamadi kixbi tyetañitmuly dya mizhi amo patiyo
barba s kuni chu̸ri nyiily k’u̷d’u̷ tentso
barbilla s gune ch’ana ch’amna sjajne tenkeketsoli
barco,a s nguametsidomi barko ximonza b’u̷u akali
mimundy pnda ̷
barranca,o s jñi pijewi ndoñje kot’u̷/ñinzhe tlaxitintli
barrendero, a adj nkokite webetekuechi bembaxchy mbaxu̷ tlaochpanani
barrer v nkokite kuechi takmbaxchy paxu̷ tlaochpana
barrido, a adj xokoki nibukuechi mbo̷milmbaxchy o paxu̷ tlaochpampa
barriga s mui ya ñipii pjejme ijkti
barrio s jñini nunijani werawi ñemepndit’ii ts’ijñiñi kalpuli
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