Era innovador, le gustaba experimentar con nuevas posibilidades, se hacía de la tecnología
para revolucionar su obra artística. La implementación de la fotografía, utilizando la cámara
como una herramienta de diseño, junto con la tipografía lo llevó a generar interés en la Bauhaus por la comunicación visual, y, en la educación, atraído por el constructivismo ruso, fue puliendo su obra para un arte basado más en la idea que en la inspiración.