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UNIVERSIDAD JUAREZ

AUTONOMA DE TABASCO

División Académica de Ciencias


Biológicas

PRACTICA 3. DENSIDAD
APARENTE – DENSIDAD
REAL
INTEGRANTES:

Yoana Alcudia Juárez

Antonio Carlos de la Cruz Martínez

Lucero Hernández Hernández

Alma Karina Segura de la Cruz

ASIGNATURA:

Edafología

PROFESOR:

Dr. Jorge Francisco Fernando Molina Enríquez Murguía

GRUPO:

A15
Villahermosa, Tabasco 11 de septiembre de 2018
INTRODUCCIÓN

Las determinaciones físicas pueden ser observaciones sencillas basadas en la


experiencia de reconocedores de perfiles de suelo, o requerir instrumental de
diverso grado de precisión. Una de las medidas más comunes para conocer el
estado físico de un suelo es la densidad aparente.

La densidad aparente se define como la masa de suelo por unidad de volumen (g.
cm-3 o t. m3). Describe la compactación del suelo, representando la relación entre
sólidos y espacio poroso. Es una forma de evaluar la resistencia del suelo a la
elongación de las raíces. También se usa para convertir datos expresados en
concentraciones a masa o volumen, cálculos muy utilizados en fertilidad y
fertilización de cultivos extensivos. La densidad aparente varía con la textura del
suelo y el contenido de materia orgánica; puede variar estacionalmente por efecto
de labranzas y con la humedad del suelo sobre todo en los suelos con arcillas
expandentes.

En un mismo suelo, el valor de densidad aparente es un buen índice del grado de


compactación por medio del cálculo de la porosidad, es decir, la reducción del
espacio poroso con radio equivalente mayor, llamado también espacio poroso no
capilar, responsable del drenaje rápido del exceso de agua y, por ende, de la
aireación del suelo; resultando ser la densidad aparente, un buen indicador de la
calidad del suelo.

En suelos con desarrollo estructural muchos de esos poros, al menos los que tienen
mayores diámetros, se encuentran entre agregados o entre grupos de éstos que
forman terrones estables. Por tanto, el método de terrones no reflejará bien el grado
de compactación, obteniéndose valores mucho más altos.

Un medio de expresión del peso del suelo se manifiesta según la densidad de las
partículas sólidas que lo constituye. Normalmente se define como la masa (o peso)
de una unidad de volumen de sólidos del suelo y es llamada densidad de la
partícula; aunque pueden observarse variaciones considerables en la densidad de
los suelos minerales, individuales; la mayor parte de los suelos normales varían
entre los límites estrechos de 2,60 a 2,7 g/cc. Debido a que la materia orgánica pesa
mucho menos que un volumen igual de sólidos minerales, la cantidad de ese
constituyente en un suelo afecta marcadamente a la densidad de partículas. Como
consecuencia, los suelos superficiales poseen generalmente una densidad de
partículas más baja que la del subsuelo. La densidad más alta en estas condiciones,
suele ser de 2,4g/cc. También se le define como el peso de un volumen conocido
comparado con el peso de volumen igual de agua.
OBJETIVO

Calcular densidad aparente y densidad real de la muestra de suelo del horizonte G.

MATERIALES Y MÉTODOS

Densidad aparente

 Material
 Probeta de 10 ml
 Balanza granataria
 Franela

Procedimiento

1. pesar la probeta de 10ml


2. agregar suelo hasta los 10ml y golpear ligeramente 3 veces sobre la franela
3. agregar suelo el suelo que falte hasta los 10 ml
4. pesar la probeta con el suelo
5. restar el peso de la probeta y hacer los cálculos

Densidad Real

 Material
 Pinzas
 Piseta
 Balanza electrónica
 Matraz aforado de 100ml
 Agua destilada
 Suelo

Procedimiento

1. Pesar el matraz aforado de 100ml


2. Agregar el equivalente de 30g de suelo
3. Agregar una tercera parte de agua destilada con una piseta
4. Aplicar un movimiento de rotación suave, para desalojar el aire
5. Llenar el matraz hasta la marca.
6. Pesar el matraz con el suelo y el agua.
7. Lavar el matraz y secarlo bien.
CALCULOS

 Densidad aparente

Peso de la probeta: 37.3g

Peso de la probeta con suelo: 49.7 g

Repeticiones Peso

1 49.5 g

2 49.7 g

3 49.9 g

Promedio 49.7 g

Para calcular la densidad aparente se tiene que sacar el promedio de los 3 pesos
de la probeta con suelo, restar el peso de la probeta, y dividir entre 10cm 3.

49.7𝑔 − 37.3𝑔
𝐷𝑒𝑛𝑠𝑖𝑑𝑎𝑑 𝑎𝑝𝑎𝑟𝑒𝑛𝑡𝑒 = 3
= 1.23 𝑔⁄𝑐𝑚3
10𝑐𝑚

 Densidad real

Para obtener la densidad real se realizó lo siguiente:

Pm+a: peso del matraz con agua


Pm: peso del matraz
Pm+a+s: peso del matraz con agua y suelo
30g: peso de la muestra
1. Calcular la densidad del agua

𝑃𝑚+𝑎 − 𝑃𝑚 = 𝑃𝑎

145.4𝑔 − 45.6𝑔 = 99.8𝑔

𝑃𝑎
= 𝐷𝑒𝑛𝑠𝑖𝑑𝑎𝑑 𝑑𝑒𝑙 𝑎𝑔𝑢𝑎
100𝑐𝑚3
99.8𝑔
= 0.998 𝑔⁄𝑐𝑚3
100𝑐𝑚3

2. Se calculó el peso del agua en el matraz con suelo


𝑃𝑚+𝑎 − 𝑃𝑚 − 30𝑔

145.4𝑔 − 45.6𝑔 − 30𝑔 = 69.8𝑔

3. Se calcula el espacio que ocupa el agua, con la densidad del agua


𝑃𝑚+𝑎+𝑠 − 𝑃𝑚 − 30𝑔
175.4𝑔 − 45.6 − 30𝑔 = 99.8𝑔
4. Se procede a dividir el peso del agua entre la densidad = 𝑐𝑚3 que ocupa el
agua y se resta el resultado de los 100ml= 100𝑐𝑚3 = volumen de suelo.
𝑃𝑒𝑠𝑜 𝑑𝑒𝑙 𝑎𝑔𝑢𝑎
= 𝑥
𝐷𝑒𝑛𝑠𝑖𝑑𝑎𝑑 𝑑𝑒𝑙 𝑎𝑔𝑢𝑎

69.8𝑔
= 69.93𝑐𝑚3
0.998 𝑔⁄𝑐𝑚3

100 𝑐𝑚3 - x = vol. del suelo

100𝑐𝑚3 − 69.93𝑐𝑚3 = 30.07𝑐𝑚3

5. El resultado del paso 4, es el volumen que ocupa el suelo. Se divide los 30g
de muestra entre ese volumen para obtener la densidad de los sólidos del
suelo

30𝑔
= 𝐷𝑒𝑛𝑠𝑖𝑑𝑎𝑑 𝑟𝑒𝑎𝑙
𝑉𝑜𝑙𝑢𝑚𝑒𝑛 𝑑𝑒𝑙 𝑠𝑢𝑒𝑙𝑜

30𝑔
𝐷𝑒𝑛𝑠𝑖𝑑𝑎𝑑 𝑟𝑒𝑎𝑙 ∶ = 0.977 𝑔⁄𝑐𝑚3
30.7𝑐𝑚3
 Porcentaje de espacio poroso

𝐷𝐴
%𝑃 = 100 (1 − )
𝐷𝑅

1.23
100 (1 − ) = 25.89%
0.977

RESULTADO Y DISCUSIÓN

Densidad aparente 𝟏. 𝟐𝟑 𝒈⁄𝒄𝒎𝟑

Densidad absoluta 0.977 𝑔⁄𝑐𝑚3

Porcentaje de espacio poroso 25.89%

Los factores que afectan a la densidad aparente son la composición y la estructura.


Por ejemplo, suelos arenosos tienden a tener densidades mayores que suelos más
finos, al mismo tiempo en suelos bien estructurados los valores son menores.

La densidad aparente del suelo es un buen indicador de importantes características


del suelo, tales como porosidad, grado de aireación y capacidad de drenaje.

En un tipo de suelo los valores bajos de densidad aparente implican suelos porosos,
bien aireados y con buen drenaje.

Por otro lado, si los valores son altos, quiere decir que el suelo es compacto o poco
poroso, que tiene poca porosidad en su composición, que la infiltración del agua es
lenta, lo cual puede provocar anegamientos.

En base a esta información podemos saber que nuestra muestra de suelo viene de
un suelo arcilloso.
CONCLUSIÓN

Mediante la realización de esta práctica fue evidente observar los diversos


factores que intervienen en la densidad real, así como su relación con la
densidad aparente para poder determinar la porosidad del suelo.
por otro lado aprendimos a utilizar estas técnicas para determinar y
comprender mucho más la naturaleza de los suelos.

Conocemos que los suelos no siempre son iguales, cambian de un lugar a


otro por razones climáticas y ambientales, de igual forma los suelos cambian
su estructura, estas variaciones son lentas y graduales excepto las originadas
por desastres naturales.

Y en relación con la densidad aparente:

Por eso es importante conocer que el valor de densidad real aumenta con la
profundidad del suelo en el perfil, debido al bajo contenido de materia
orgánica y, consecuentemente, menor agregación y mayor compactación.

Podemos concluir entonces, que debido al contenido de materia orgánica


presente en el suelo y la profundidad a la cual se encuentre nuestra muestra,
será el grado de soltura o compactación del suelo, resultando así, que a
mayor contenido de MO será menor la densidad aparente debido al espacio
poroso provocado por la adición de MO. También a mayor profundidad
aumentara la compactación del suelo, lo que provocara que la densidad
aparente del suelo aumente con la profundidad.
Y en base a nuestros resultados podemos observar que la MO presente en
el suelo es alta por la baja DA y que el suelo es del tipo limo-arcilloso.
BIBLIOGRAFÍA
Flores Delgadillo, L., & Alcalá Martínez, J. (2010). Manual de procedimientos
analíticos. Universidad Nacional Autónoma de México, 36-37.

Julieta M. Rojas, S. P. (2012). Comparación de métodos de determinación en


Ensayo de rotaciones en siembra directa . Centro Regional Chaco
Formoso, 1.

Buckman Harry and N.C. Brady, 1966. The Nature and Properties of Soils. The
Macmillan company. 590 pp.
ANEXO FOTOGRAFICO

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