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Motor grueso

Masaje: Frota con un paño suave crema o aceite en el cuerpo del bebé y al
mismo tiempo cuéntale cómo se sienten las caricias que le haces. Esta actividad
favorece el gusto al tacto y los lazos de empatía.
Ayuda a controlar su cabeza: Cuando el niño este acostado boca abajo, ofrécele
juguetes de colores llamativos y que tengan sonidos alegres para motivarlo a
levantar la cabeza. Si al niño le cuesta levantarla, colóquele una cobija bajo el
pecho y hombros o acuéstelo en su pecho casi sentado para que de esta manera
se le facilite el trabajo.
Otra manera es acostarlo boca arriba y colocarle juguetes a los lados para
estimularlo a girar la cabeza.
Estimúlalo a voltearse: Una vez que el niño tenga el control de su cabeza es hora
de enseñarlo a girar su cuerpo. Coloca al niño sobre una manta suave, levanta
lentamente un lado de la manta para que el niño ruede hacia el otro lado,
continúa haciéndolo rodar mientras le hablas demostrándole tu alegría. Esta
actividad de estimulación temprana favorece la motricidad del bebe.
Motor fino
Desarrollar la coordinación de manos: Colóquele un dedo en la palma de la mano
del bebé para que al tacto la cierre y lo ayude a estimular sus reflejos, si siempre
tiene la mano cerrada frótele desde el dedo meñique hasta su muñeca para que
abra la mano y le agarre el dedo, este pequeño ejercicio fomentará el desarrollo
de la psicomotricidad del niño.

Social
Viéndose en el espejo: Coloca al bebé en un lugar cómodo, deje que se mire
frente al espejo y se reconozca, mírese con él y sonría, haga señales con la
mano. Esta actividad estimula su auto-conocimiento corporal.
Lenguaje
Cuando no pueda dormir acarícialo, sonríele, háblale.
Llámalo por su nombre en un tono dulce.
Diviértete con él moviendo la mano y diciendo “adiós” para que el bebé comience
a imitarte.
Cuéntale todo lo que haces con un lenguaje claro para que entienda.

Cognitivo
Dale a tu bebé un golpecito suave en la punta de la nariz para estimular su reflejo
de parpadeo.
Cuando suelte un objeto deja que lo recoja.
Un ejercicio que puede ayudar también a su estimulación cognitiva es, aparecer
y desaparecer frente al él con una manta.
Motor grueso
Ejercicio de equilibrio: Sostenga al niño por las axilas e inclínelo con suavidad
hacia los lados, hacia atrás y adelante dejando que se enderece solo. Al
comienzo sostenga al niño, cuando mejore su equilibrio puede ir soltándolo
siempre prevenido por si se va a caer.
Motor Fino
Facilítale a tu bebe hojas y colores donde pueda expresarse libremente.
Social
Texturas: Vista a su niño de una manera cómoda dejando libre sus manos para
que pueda sentir distintas sensaciones, coloque frente a su bebe muñecos con
diferentes texturas para que pueda tocarlos y reconozca las diferentes texturas.
Esta actividad favorece la percepción.
Lenguaje
Recita las partes del cuerpo: Juega con tu niño invitándolo a tocarse las partes
del cuerpo mientras las vas recitando. Esta actividad favorece el proceso de
identidad.
Cognitivo
Cuando se esté peinando, cepillando, permita que el niño lo vea y copie esos
patrones.
Motor Fino
Actividades de estimulación temprana para niños
Hora clasificar: Clasifica objetos con tu niño, puede ayudarte a ordenar la ropa
colocando las medias en una montaña, camisas del otro lado o también puede
ser organizando los juguetes en cajas. Esta actividad de estimulación o atención
temprana ayuda a que el niño se concentre, preste atención a los detalles y se
fije en el parecido y en la diferencia de las cosas.
Luz roja, luz verde: En un extremo de la habitación, coloca en el suelo una cinta
y en el otro extremo coloca otra cinta paralela a la primera. Despeja la habitación
y coloca al niño detrás de una línea y dile que no se va a mover de ahí hasta que
se lo digas, explícale que cuando digas “ verde” tiene que intentar llegar a la otra
línea y traspasarla pero si dices “roja” debe detenerse. Comienza colocándote
de espaldas y dile “verde” luego dile “rojo” y te volteas en seguida a ver si se
detuvo. Sigue hasta que llegue a la línea final. Esta actividad ayudará a estimular
la paciencia y el autocontrol.
Lenguaje
Enséñale canciones para niños, busca canciones que le dejen un mensaje o le
enseñen algo, como por ejemplo canciones que ayuden a aprender los números,
colores, y otros. Este sencillo y divertido ejercicio te ayudará a la estimulación
del lenguaje de tu hijo.
Léele historias, cuentos infantiles cortos con ilustraciones, y otros; puedes hacer
que pregunte sobre los dibujos, luego hazle preguntas sobre el cuento y si es
posible que te narre la historia, también se pueden divertir dramatizando la
historia.
Social
Ayuda a que tu niño o niña entienda qué cosas son suyas y cuáles no debe
tomar. También puedes enseñarle tareas sencillas como recoger sus juguetes.
Enséñale a expresar sus sentimientos y describirlos, pregúntale constantemente
cómo se siente.
Incúlcale a ser limpio y enséñale a bajarse y subirse los pantalones para que
pueda ir cómodamente al baño, recuerda vestirlo con ropa cómoda y fácil de
usar.
Visita aquí nuestra categoría: Gimnasia Cerebral para Niños y conoce nuestros
demás artículos para fomentar el desarrollo de tu niño o niña.

Motor grueso
Dibujar como un ejercicio estimulante para la psicomotricidad infantil
Hora de bailar: Coloca canciones que puedan bailar juntos y que la letra indiquen
acciones, trata de coordinar los movimientos con las acciones que indica la
canción, también pueden inventar nuevos movimientos y variar las canciones, si
hay más niños puedes invitarlos a unirse.

Semáforo: Indícale al niño que cuando le digas la palabra “verde” deberá


colocarse de pie y saltar, cuando le digas “rojo” deberá sentarse en el piso y
quedarse paralizado, cuando digas “amarillo” deberá correr hasta cierto punto y
regresar, esta actividad lo ayudará a saltar, correr, pararse de repente y
mantener su atención, también puedes ir agregar más colores y actividades a lo
largo del ejercicio.
Motor fino
Su propio cuento: Puedes ayudar al niño a crear su propia historia. Ayúdalo a
recortar imágenes que él elija y pueden pegarlas en hojas de papel y armar sus
propios libros de cuentos, es importante que sea el niño quien cree la historia.
Rompecabezas: También puedes enseñarle a armar rompecabezas, puedes
empezar con algunos sencillos de pocas piezas o recortar una imagen en forma
de rompecabezas y pedirle que lo arme, luego puedes decirle que te cuente una
historia relacionada con la imagen. Adicionalmente, fomentarás en tu niño o niña
la atención a los detalles.
Dibujando: Pide al niño que dibuje en una hoja de papel lo que él quiera y a
medida que lo hace ve preguntándole qué hace, luego sin ordenarle qué dibujar
o limitar su imaginación, dibujen juntos objetos específicos o personas, durante
el tiempo que dibujan puedes hacerle preguntas como dónde va ubicada la nariz,
la boca, los ojos, cómo los dibujaría, entre otros.
Lenguaje
Enséñale los nombres de diferentes formas como el cuadrado, rectángulo y
círculo; y enséñalo a reconocer cada uno por sus características y forma.
Puedes inventar una actividad para clasificar objetos con el niño según tamaño,
color, peso, figura, entre otros; mientras lo hacen pregúntale por qué clasifica los
objetos de esa forma, si llega a equivocarse no lo corrijas inmediatamente, sino
que a través de preguntas trata de persuadirlo para que se dé cuenta por sí solo.
Adicionalmente, mientras realizan este ejercicio puedes explícale para que sirve
cada objeto, como por ejemplo “el lápiz nos sirve para escribir”.
Busca siempre hablar con el niño y responder de forma clara y sencilla sus
preguntas, también pídele que te cuente de sus sentimientos y emociones.
Social
Déjalo que empiece a escoger él mismo su ropa y enséñale cómo debe vestirse
y desvestirse.
También puedes decirle que te ayude con algunos oficios del hogar. Juntos
pueden guardar los juguetes, doblar la ropa, entre otros.
Apóyate en sus maestros de la escuela, si va al colegio, y pregúntales cómo es
el desempeño del niño y sobre formas de ayudarlo a mejorar día a día.
Estas actividades permiten adicionalmente, desarrollar la concentración y la
atención a los detalles en tu niño(a). Si tu niña o niño se distrae rápidamente,
quizás debas leer aquí nuestro artículo sobre el déficit de atención.
Motor grueso
Invita a tu niño a quitarse los zapatos y a caminar en punta de pie y luego sobre
sus talones, puedes alternar este ejercicio.
Puedes dibujar una línea larga y derecha sobre el piso y pedirle que camine
sobre ella sin salirse de la raya.
Llévalo al parque y motívalo a que camine, corra, salte y haga uso de todo su
cuerpo y continúa haciendo ejercicios para bailar y coordinar sus movimientos.
Motor fino
Puedes jugar con él a hacer esculturas y figuras de arcilla, plastilina o masa de
varios colores.
Une semillas de varios tipos y tamaños y pídele que las separe con los dedos.
También pueden seguir haciendo sus propios cuentos con recortes e imágenes
y creando las historias.
Invítalo a construir cosas con objetos que le entregues, como cubos y palitos, y
que a medida que lo hace hazle preguntas que lo ayuden a pensar sobre lo que
está haciendo, pídele que te vaya contando sobre lo que vaya haciendo.
Lenguaje
Ayúdalo a diferenciar entre su lado derecho e izquierdo, a través de ejercicios
con sus manos. Por ejemplo, cuando le digas “derecha” deberá mover su brazo
derecho, cuando le digas “izquierda” deberá mover su brazo izquierdo, si le dices
“arriba” deberá saltar hacia arriba, si le dices “abajo” deberá agacharse, también
puedes ir agregando nuevos movimientos y combinarlos.
Trata de incorporar los números en las actividades que realizan juntos, por
ejemplo pueden contar sus zapatos cuando se cambia o sus juguetes. También
puedes aprovechar esas actividades y hacerle adivinanzas sencillas
relacionadas con objetos.
No olvides dialogar con el niño e invitarlo a que él lo haga contigo, que te cuente
cómo le va en la escuela, sobre sus profesores, sus amigos, qué tal su día, etc.
Social
Enséñale a decir su nombre completo y apellidos, el nombre de sus padres,
edad. Esto fomentará la estimulación del lenguaje del niño.
Procura que tu hijo se relacione con otros niños, que juegue y se divierta con
ellos, que inventen su propia forma de recrearse y divertirse.
Los niños siempre están cambiando física, mental, social, emocional y
espiritualmente. Siguen una norma general de crecimiento y desarrollo. Los
padres y maestros que están al tanto de las características comunes de los
diferentes grupos de acuerdo con sus edades, podrán encarar más
apropiadamente el comportamiento de los niños y enseñarles con mayor
eficacia.
Algunos niños podrían desarrollarse más rápidamente o más lentamente que
otros de su misma edad. Por ejemplo, un niño de seis años de edad podría
comportarse como uno de cinco o uno de siete años. Recuerde asimismo que
algunos niños podrían retroceder temporariamente a un comportamiento más
infantil en ocasiones de estrés o tensión emocional.
Los manuales de lecciones de la Iglesia se han preparado teniendo en cuenta
las características del desarrollo de los niños. A medida que vaya estudiando y
preparando cada lección, preste atención particular a cómo cada parte de la
lección podrá ayudarle a satisfacer las necesidades de esos niños.
No importan las edades del grupo al que esté enseñando, asegúrese de ser
paciente, respetuoso, cariñoso y considerado con cada uno de los niños. No
espere que éstos hagan más de lo que sean capaces de hacer.
Las siguientes descripciones y sugerencias podrán ayudarle a entender mejor a
los niños a quienes enseña.
Camina, trepa, gatea y corre. Le agrada empujar y tirar de las cosas. Es más
fácil desarmar algo que armarlo. Carece de buena coordinación. Se fatiga con
facilidad. Por lo general, no sabe contener sus necesidades físicas.
Produce muchos sonidos. Está desarrollando su capacidad lingüística. Se
expresa con frases de una sola palabra, principalmente “mío” y “no”. Acumula
conocimiento por medio de la vista, el oído, el tacto, el olfato y el gusto. Entiende
más de lo que puede expresar.
Disfruta mucho de jugar con otros niños, pero suele no relacionarse mucho con
ellos. Tiene dificultad para compartir sus cosas.
Llora con facilidad, pero sus emociones cambian súbitamente.
Sugerencias para los padres y los líderes
Emplee actividades varias para mantener el interés del niño. Use actividades que
le requieran caminar, empujar o tirar de las cosas. Utilice juegos con los dedos y
las manos, así como actividades musicales.
Ofrézcale muchas oportunidades para que hable y participe. Enséñele cómo ser
reverente durante las oraciones. Emplee ayudas visuales con los relatos.
Proporciónele juguetes que el niño pueda manejar y mover, tales como juguetes
que se puedan apilar, pelotas, rompecabezas sencillos y figuras de personas y
animales.
Proporciónele juguetes y actividades que le permitan jugar por sí solo. Ayúdele
para que aprenda a compartir y a llevarse bien con otros niños.
Sosténgalo en brazos cuando se sienta molesto o inseguro.
Es muy activo. Salta, camina y corre. Puede aplaudir y patear una pelota. Puede
agarrar pequeños objetos, pero no sabe cómo abotonarse la ropa o cuidar de sí
mismo de otras maneras. Se irrita y se exaspera cuando está cansado.
Es capaz de usar dos o tres palabras en una frase. Dice “no” con frecuencia, aun
cuando no es lo que quiere decir. Tiene pensamientos sencillos y directos. No
puede razonar. Puede tomar decisiones simples. Le agrada la repetición. Su
atención es de breve alcance (dos o tres minutos). Es curioso. Se mueve de una
actividad a otra. Le agradan los juguetes sencillos, materiales para dibujar, libros,
cuentos breves y actividades musicales.
Le gusta jugar solo. Está desarrollando el interés de jugar con otros, pero
generalmente prefiere jugar cerca de ellos y no con ellos. Con frecuencia discute
por los juguetes; tiene dificultad para compartir y cooperar, y pide a las personas
adultas cosas que otra criatura tiene.
Es amoroso y cariñoso. Le agrada sentarse en la falda de algún adulto o tomarlo
de la mano. Le encanta estar junto a su madre. Tiene arranques emocionales
para expresar sus emociones, obtener lo que desea y demostrar sus enojos o
frustraciones. Tiende a cambiar súbitamente su temperamento. Le agrada ser
independiente.
Le agrada orar. Comprende que nuestro Padre Celestial y Jesucristo nos aman,
pero tiene dificultad en entender la mayoría de los conceptos espirituales.
Sugerencias para los padres y los maestros
Emplee actividades pasivas, tales como juegos con los dedos y las manos, y las
que requieren música. Proporciónele actividades como aventar saquitos de
frijoles para que el niño los atrape, marchas y saltos. Evite las actividades que
requieran destreza y coordinación, tales como el uso de tijeras y engomado de
figuras de papel.
Mantenga sencillas sus conversaciones. Ayude a que el niño participe. Emplee
repeticiones. No deje solo al niño; los niños de esta edad pueden encontrarse en
situaciones peligrosas con facilidad. Ofrézcale oportunidades para que tome sus
propias decisiones.
Ofrezca al niño oportunidades para que se relacione con otros, pero no lo obligue
a hacerlo. Permítale decidir si desea participar en las actividades. Ofrézcale una
dirección cariñosa y sincera. Corrija su mal comportamiento.
Demuéstrele amor y cariño. Distraiga la atención del niño cuando sea necesario
corregir su mal comportamiento. Aliéntelo a ser autosuficiente, pero ofrézcale
ayuda cuando la necesite. Permítale que practique tomar sus propias decisiones.
Ofrézcale la oportunidad de orar. Destáquele los conceptos espirituales de la
familia y el amor de nuestro Padre Celestial y de Jesucristo.
Camina y corre, pero todavía carece de coordinación.
Le gusta hacer cosas con sus propias manos pero lo hace con cierta torpeza.
Tiene una mayor capacidad para el lenguaje. Le agrada hablar y aprender
nuevas palabras. Su atención es de corto alcance. Es curioso e inquisitivo. Con
frecuencia no entiende bien y suele hacer comentarios aparentemente ajenos al
tema. Le agrada usar su imaginación. Le gustan los juegos con los dedos y las
manos, los cuentos y las actividades musicales. No alcanza a diferenciar la
fantasía de la realidad.
Le agrada trabajar a solas. No le interesa jugar en cooperación con otros, pero
le gusta tener amigos a su alrededor. Es egocéntrico. Tiene dificultad en
compartir. Prefiere estar cerca de personas adultas, particularmente familiares,
porque se siente así protegido.
Le agrada complacer a las personas adultas. Necesita de su aprobación, su amor
y sus elogios. Reacciona emocionalmente cuando siente temor o ansiedad. Llora
con facilidad. Es sensible a los sentimientos de otras personas. Está
desarrollando cierta independencia. Experimenta emociones intensas, aunque
breves.
Se interesa por los principios sencillos del Evangelio, tales como la oración y la
obediencia. Tiene una mayor conciencia de nuestro Padre Celestial y de
Jesucristo, y tiene una fe sencilla en Ellos.
Sugerencias para los padres y los maestros
Utilice actividades que incluyan saltos, brincos, caminar y flexionar. Use
actividades sencillas de arte, tales como engomar figuras de papel, moldear con
arcilla y colorear. Evite las actividades que requieran talentos especiales y
coordinación, tales como atar y cortar. Esté preparado para limpiar lo que se
ensucie.
Enséñele ideas de una manera sencilla y clara. Emplee resúmenes y ayudas
visuales para reforzar tales ideas. Aliéntele a hacer preguntas y dar respuestas
en cuanto a las lecciones, pero requiera que cada niño tome su turno para ello.
Utilice una variedad de métodos para enseñar, tales como cuentos, canciones,
conversaciones, dramatizaciones, movimientos con los dedos y las manos y
otros juegos sencillos. Varíe entre las actividades quietas y las ágiles.
Proporciónele oportunidades para que juegue con otros niños. Emplee
actividades que le estimulen a compartir, tomar turnos y cooperar. Cultive una
amistosa relación con el niño y ofrézcale con frecuencia la oportunidad para que
hable acerca de su familia.
Demuéstrele su aprobación y confianza. Evite toda crí-tica. Reitérele el amor que
usted y la familia de ese niño sienten por él. Ayúdele para que llegue a
comprender los sentimientos de otras personas y a solucionar cualquier conflicto
relacionado con ellas. Aliéntelo a ser autosuficiente.

Es muy activo. Se mueve con rapidez. Le gusta brincar, saltar, correr, trepar y
arrojar cosas.
Le agrada conversar y aprender nuevas palabras. Hace muchas preguntas.
Alcanza a razonar un poco, pero todavía tiene muchas ideas equivocadas. Tiene
dificultad en diferenciar la realidad de la fantasía. Su atención es de corto
alcance. Emplea dibujos para expresar sus sentimientos. Disfruta de usar su
imaginación y de las representaciones dramáticas.
Juega con mayor espíritu de cooperación con otros.
Suele ser físicamente agresivo, dominador, grosero y obstinado, pero puede
asimismo ser amigable. Está aprendiendo a compartir, a aceptar las reglas y a
tomar su turno. Reacciona ante todo elogio sincero.

Con frecuencia, trata de ver hasta dónde podrá salirse con la suya. Es
jactancioso, especialmente en cuanto a sí mismo y a su familia. Podría ser
complaciente en un momento y pendenciero en el siguiente. Tiene más confianza
en sí mismo. Podría tener ciertos temores y sentimientos de inseguridad.
Está comenzando a entender lo bueno y lo malo, y generalmente desea hacer lo
bueno. Suele culpar a otros por sus propios errores. Siente un amor y respeto
naturales por nuestro Padre Celestial y por Jesucristo, y hace muchas preguntas
en cuanto a Ellos. Le agrada orar y quiere ser bueno. Está interesándose más
en los principios del Evangelio.
Sugerencias para los padres y los maestros
Varíe entre las actividades quietas y las ágiles. Ayude a que el niño aprenda a
controlarse y a ser responsable por sus acciones. Enséñele maneras adecuadas
de expresar sus emociones.
Emplee conversaciones y actividades que estimulen el pensamiento, tales como
simples adivinanzas y acertijos. Aclare todo malentendido. Use láminas, objetos
y experiencias reales. Enséñele nuevas palabras. Pídale que haga algunos
dibujos que se relacionen con las lecciones. Acepte y estimule los esfuerzos
creativos del niño. Permítale que explore sus alrededores. Emplee
representaciones dramáticas.
Ofrézcale oportunidades para que juegue y trabaje en cooperación con otros.
Enséñele a ser bondadoso, paciente y cortés. Ayúdele a seguir normas sencillas,
tales como tomar turnos. Ayúdele para que aprenda a adoptar un
comportamiento social positivo sin tener que castigarlo o reprenderlo.
Establezca límites e impóngalos con firmeza. Permítale al niño que hable acerca
de sí mismo y de su familia. Enséñele que él es una persona muy especial para
nuestro Padre Celestial y para Jesucristo. Exprese el amor que usted y los
padres de ese niño sienten por él.
Ayude a ese niño a ser responsable por su propio comportamiento y enséñele la
importancia de tomar buenas decisiones. Enséñele que nuestro Padre Celestial
ama a Sus hijos y que todos podemos comunicarnos con Él por medio de la
oración. Ayúdele a determinar cómo ser reverente en la Iglesia. Enséñele los
principios básicos del Evangelio.

Es muy activo. Tiene buen sentido del equilibrio y está llegando a tener mejor
coordinación. Puede patear una pelota, caminar en línea recta, saltar, brincar y
marchar. Le agrada dibujar, colorear y participar en actividades y en juegos; está
aprendiendo a ponerse los zapatos y a atarse los cordones de los zapatos, y a
abotonarse la ropa.
Reconoce algunas letras, cifras y palabras. Le gusta aparentar que sabe leer y
escribir. Podría estar aprendiendo a leer. Es conversador. Hace preguntas y
comentarios, y ofrece contestaciones que demuestran un mayor entendimiento.
Sabe resolver ciertos problemas. Es curioso y anhela conocer los hechos. Está
comenzando a distinguir entre la verdad y la fantasía. Su atención es de corto
alcance pero está empezando a incrementarse. Prefiere las tareas concretas. Le
gustan los acertijos y las bromas, pero no puede reírse de sí mismo. Le agradan
los cuentos, las canciones, las poesías y las dramatizaciones.
Es amigable y está ansioso por complacer y cooperar.
Está comenzando a gustarle encontrarse en pequeños grupos de niños, pero
podría preferir tener un mejor amigo. Provoca menos conflictos al jugar en
grupos. Está empezando a querer amoldarse y critica a los que no desean
hacerlo. Está comenzando a entender las reglas, pero suele tratar de cambiarlas
para su propio beneficio.
Concentra sus intereses en el hogar y en su familia. Es afectuoso para con
personas adultas y desea complacerlas. Se abochorna con facilidad,
especialmente acerca de sus propios errores.
Quiere ser bueno. Está aprendiendo a distinguir entre lo que es bueno y lo que
es malo. A veces dice mentiras o culpa a otros por sus equivocaciones debido a
su profundo deseo de complacer a los adultos y hacer lo que es correcto. Está
listo para aprender en cuanto a los principios espirituales.
Sugerencias para los padres y los maestros
Envuelva al niño en actividades físicas. Emplee juegos sencillos y otras
actividades. Permítale recortar y engomar figuras, y armar rompecabezas.
Permítale que sea independiente. Exprésele confianza. Acepte y estimule todos
los esfuerzos del niño.
Permita que el niño hable y haga preguntas. Permítale que lea palabras o frases
sencillas. Utilice tiras de papel para las palabras simples. Asígnele tareas y
responsabilidades sencillas. Emplee actividades con dibujos, relatos de historias
verdaderas y ayudas visuales. Use diversas actividades con láminas, juegos,
canciones y análisis. Utilice actividades que contengan problemas a solucionar,
tales como adivinanzas y preguntas que susciten un análisis. Permita que el niño
imagine, que haga una dramatización y que utilice títeres. Ríase cuando el niño
ría.
Sea sensible a la necesidad que el niño tiene de que usted lo apruebe. Fomente
la amistad y trate de ayudarlo si pareciera que no tiene amigos íntimos o que no
es aceptado en el grupo. Hable en cuanto a cómo se siente una persona cuando
otros son bondadosos o descorteses. Explique la importancia de amar al prójimo
y expresarles gratitud, y enséñele cómo debe hacerlo. Ayúdele a valorar las
diferencias entre una persona y otra.
Enséñele con frecuencia en cuanto al valor y la importancia de la familia.
Ofrézcale la oportunidad de expresar sus sentimientos acerca de su propia
familia. Demuéstrele su amor y su afecto por él. Elogie particularmente todo
comportamiento positivo. Evite las actividades o expresiones que podrían
abochornar al niño.
Enséñele lo que es un comportamiento apropiado. No se sorprenda si el niño
dice algo que no es verdad o apropiado, pero continúe enseñándole en cuanto a
la importancia de que debemos aceptar la responsabilidad de nuestras propias
acciones. Fortalezca el testimonio del niño compartiendo el suyo propio.
Comparta con él relatos e ideas que puedan fortalecer el amor y la fe que el niño
tiene en nuestro Padre Celestial y en Jesucristo y Sus enseñanzas.
Es muy activo. Suele ser ruidoso, inquieto y vivaz. Le agrada participar en
actividades y llevar a cabo pequeñas tareas, aun cuando pudieran ser difíciles
de realizar. Le desagrada ser simplemente un espectador.
Necesita que se le enseñen conceptos en maneras específicas. Está mejorando
su memoria. Es conversador y hace muchas preguntas. Está aprendiendo a
tomar decisiones, pero suele ser indeciso. Está incrementando su tendencia a
prestar atención. Le gusta leer, escribir, cantar, escuchar cuentos y usar su
imaginación.
Está más interesado en actividades en grupo y en relacionarse con compañeros
de juego, pero continúa siendo un tanto egoísta. En ocasiones suele ser
dominador, agresivo o descortés con sus compañeros. Tiene amistades
inestables. Se preocupa por la forma en que otros lo tratan. Anhela ser aprobado
socialmente.
Es jactancioso. Exagera y critica. Se emociona, se hace el chistoso y se ríe por
todo fácilmente. Puede ser generoso, afectuoso y compatible, pero su ánimo
puede cambiar fácilmente.
Se preocupa por el buen y el mal comportamiento, particularmente si afecta a su
familia o a sus amigos. A veces culpa a los demás por sus errores. Le agradan
los relatos de las Escrituras, en especial los que se refieren a Jesús.
Sugerencias para los padres y los maestros
Tenga paciencia en cuanto a la abundante energía e inquietud del niño. Emplee
actividades tales como escribir, colorear, recortar y engomar figuras de papel y
moldear con arcilla. Utilice juegos que permitan al niño aprovechar sus energías.
Utilice actividades para solucionar problemas, tales como adivinanzas, repasos
y relatos para los que el niño deba sugerir cómo han de finalizar. Use láminas,
figuras para franelógrafos y otras ayudas visuales. Enséñele nuevas palabras.
Hágale preguntas. Permítale tomar decisiones. Analice con él la importancia de
hacer lo que es justo y permítale tomar decisiones con alternativas limitadas.
Ofrézcale oportunidades para que lea, escriba, cante, escuche cuentos y haga
representaciones dramáticas. Planee sus lecciones teniendo en cuenta los
intereses particulares del niño.
Estimule en el niño el deseo de compartir y participar con otros. Ofrézcale
muchas oportunidades de participar en actividades de grupo. Exprésele
felicitaciones y aprobaciones específicas. Enfoque sus lecciones en demostrar
amor ayudando a otros y preocupándose por sus necesidades. Aliéntelo a
participar en los juegos y otras actividades.
Elogie los esfuerzos específicos del niño de manera que no tenga necesidad de
jactarse. Elógielo cuando diga la verdad. No lo critique. Ríase con él, pero nunca
se ría de él. Estimule en el niño un ánimo positivo. Mediante su ejemplo personal,
enséñele a comportarse con calma y confianza.
Enseñe al niño a preocuparse y responsabilizarse por su propia conducta y por
cómo mejorarla. Asegúrele que todos cometemos errores. Enséñele la
simplicidad del arrepentimiento. Emplee las Escrituras para enseñarle los
principios básicos del Evangelio. Ayúdele a entender y aplicar las Escrituras.
Conceptualización
Como respuesta involuntaria, el reflejo es una pauta de comportamiento que se
repite en toda una especie. Se trata de una respuesta local, que implica a solo
una parte del organismo, y cuyo mecanismo es puesto en marcha de manera
automática.
Un acto reflejo es una acción involuntaria que tiene lugar cuando un receptor
sensorial es estimulado. La neurona sensorial recibe el estímulo y lo envía a un
centro reflejo que se encuentra en la médula espinal; ésta lo retransmite a una
neurona motora, que responde al estímulo, activa la secreción de una glándula
o produce un movimiento muscular.
Como reflexión de la luz, un reflejo es el cambio de dirección de un rayo o de
una onda que tiene lugar en la superficie de desaparición de dos medios. Esta
reflexión puede ser especular (como acontece en un espejo) o difusa (la imagen
se conserva, pero se refleja la energía).
Arco reflejo
Se pueden definir los reflejos como las respuestas inmediatas de naturaleza
nerviosa que se producen en la mayor parte de los animales ante un estímulo
determinado, externo o interno. El acto reflejo es un proceso involuntario que
ocurre al ser estimulado un receptor sensorial y su base anatómica la
proporciona el llamado arco reflejo. Éste consta básicamente de una neurona
(célula nerviosa) sensorial, que capta el estímulo, un centro reflejo situado en la
médula espinal, donde se recibe la información transmitida por la anterior, y una
neurona motora o efectora, que provoca la respuesta al estímulo, bien activando
la secreción de una glándula, bien ocasionando la contracción de un músculo y
dando lugar así a un movimiento.
Reflejos en los bebés
También conocidos como, Reflejos infantiles; Reflejos primitivos; Reflejo tónico
del cuello; Reflejo de Gallant; Incurvación del tronco; Reflejo de búsqueda u
hociqueo; Reflejo del paracaídas; Reflejo de prensión
Consideraciones generales
La presencia e intensidad de un reflejo es una señal importante de
uncionamiento y desarrollo neurológico.
Muchos reflejos en los bebés desaparecen a medida que el niño crece, aunque
algunos permanecen a lo largo de la vida adulta. La presencia de un reflejo en
un bebé después de la edad en la que normalmente desaparece puede ser un
signo de daño cerebral o daño al sistema nervioso.
Los reflejos de los bebés son normales en ellos, pero anormales en otros grupos
de edades. Tales reflejos abarcan:
Reflejo de moro
Reflejo de succión (succionar cuando se estimula el área alrededor de la boca)
Reflejo del sobresalto (retraer los brazos y las piernas después de un sonido
fuerte)
Reflejo de marcha automática (hacer movimientos de marcha cuando las plantas
de los pies tocan una superficie dura)
Otros reflejos en los bebés comprenden: El reflejo tónico del cuello se produce
cuando la cabeza de un niño relajado, acostado boca arriba, gira hacia un lado.
El brazo hacia el cual el bebé está mirando se extiende derecho lejos del cuerpo
con la mano parcialmente abierta, mientras que el brazo del lado contrario se
flexiona y el puño se aprieta fuertemente. Al invertir la dirección en la cual se ha
volteado la cara del niño, se invierte también la posición. La posición tónica del
cuello a menudo se describe como posición de esgrima, debido a que se
asemejan a la postura de un esgrimista.
La incurvación del tronco o reflejo de Gallant se produce al acariciar o dar
golpecitos a lo largo del lado de la columna mientras el bebé permanece boca
abajo. El bebé girará sus caderas hacia el lado del estímulo haciendo un
movimiento "danzante".
Reflejo de Prensión
El reflejo de prensión se produce al poner un dedo en la palma de la mano abierta
del niño. La mano se cerrará alrededor del dedo. El intento de retirar el dedo
hace que el agarre sea más fuerte. Los recién nacidos tienen mucha fuerza de
prensión y casi que pueden ser levantados de la mesa de exámenes si se
emplean ambas manos.
El reflejo de búsqueda u hociqueo se produce al acariciar la mejilla. El bebé
girará la cabeza hacia el lado estimulado y comenzará a hacer movimientos de
succión con la boca.
El reflejo del paracaídas ocurre en bebés un poco mayores y se produce al
sostener al niño en posición erguida y rotar el cuerpo rápidamente con la cara
hacia adelante (como si cayera). Los brazos se extienden por reflejo como para
interrumpir la caída, aunque este reflejo aparece mucho tiempo antes de que el
niño camine.
Los ejemplos de reflejos que persisten en la vida adulta son:
Reflejo de parpadeo: uno parpadea los ojos al contacto o cuando aparece
súbitamente una luz brillante
Reflejo de la tos: uno tose cuando se estimula la vía respiratoria
Reflejo nauseoso: uno siente náuseas cuando se estimula la garganta o la parte
posterior de la boca
Reflejo del estornudo: uno estornuda cuando las vías nasales se irritan
Reflejo del bostezo: uno bosteza cuando el cuerpo necesita oxígeno adicional

TIPOS DE REFLEJOS
Los reflejos se medían mediante rutas neuronales específicas (arco reflejo); una
neurona capta un estímulo, la información se transmite hacia la médula espinal
donde es captada por un centro reflejo; en los animales superiores como el ser
humano, una buena parte de las rutas de las neuronas sensoriales no pasan
directamente al cerebro sino que la sinapsis se da directamente en la médula
espinal - se activan neuronas motoras allí y se envía la señal al lugar
correspondiente donde se realiza el movimiento involuntario, y por este motivo
la reacción es tan rápida. Los reflejos son de dos tipos, incondicionado y aquellos
que son condicionados.
Los reflejos incondicionados
Los reflejos condicionados
Reflejo incondicionado
Los reflejos incondicionados son los reflejos innatos, los reflejos que forman
parte del repertorio de automatismos con los que cuentan los animales desde su
nacimiento, ligados a las conductas básicas que necesitan para sobrevivir
atendiendo a su relación con el nicho ecológico en el que se desenvuelve su
vida. El esquema de los reflejos incondicionados es Estímulo Incondicionado.
Reflejo condicionado
Los reflejos condicionados son los reflejos aprendidos, consecuencia de haber
experimentado la asociación entre el estímulo incondicionado y el estímulo
neutro. La función de los reflejos condicionados es la de adaptarse a las
modificaciones del medio en el que los animales deben sobrevivir pues permiten
más flexibilidad en el comportamiento que el reflejo incondicionado. El esquema
de los reflejos condicionados es Estímulo condicionado ─────> Respuesta
condicionada.

CLASIFICACION DE LOS ALIMENTOS

CLASIFICACIÓN.
Los alimentos se pueden clasificar en los siguientes grupos:

1º.- LECHE Y DERIVADOS.


La leche de vaca es uno de los alimentos más completos ya que en su
composición entran prácticamente todos los nutrientes.

2º.- CARNE, PESCADO Y HUEVOS ( PROTEÍNAS ).


Todos estos alimentos son ricos en proteínas. Los distintos tipos de carne y
pescado tienen un valor nutritivo parecido. Así un huevo contiene 6 gramos de
proteínas que es el contenido proteico de 30 gramos de carne. En la dieta
mediterránea se consume más el pescado que la carne.

3º.- CEREALES, LEGUMBRES Y PATATAS (HIDRATOS DE CARBONO)

Los cereales y derivados contienen cantidades elevadas de almidón y proteínas.


Son aconsejables excepto en el caso de obesidad. Los cereales integrales
contienen además celulosa que facilita el tránsito intestinal y vitamina B1.
Las legumbres son nutritivamente parecidas a los cereales pero contienen más
hierro y proteínas. La cantidad de nutrientes de las patatas es inferior.

4º.- FRUTAS Y VERDURAS.

Son alimentos de gran riqueza en vitaminas y minerales. Las frutas contienen


gran cantidad de vitaminas y muchas de ellas aportan pectina, otra fibra vegetal
útil para el organismo. Debe tomarse fruta una o dos veces al día. Las verduras
son ricas en vitaminas, minerales y fibras, tanto si se toman hervidas como fritas.

5º.- ACEITES, MARGARINAS, MANTECA Y ALIMENTOS EMBUTIDOS


DERIVADOS DEL CERDO (LÍPIDOS).

Los alimentos de este grupo están constituidos mayoritariamente por grasas,


llevan mucha energía y son indicados para las personas que realizan trabajos
físicamente duros. Tomarlos en exceso puede ser peligroso para el cuerpo.
Los frutos secos como las avellanas, las almendras, las nueces, etc... tienen un
alto contenido en aceites, es decir, en lípidos, y a la vez de proteínas.

6º.- BEBIDAS.

El agua es la única bebida necesaria para el organismo. Sin el agua no podemos


vivir; sin alimentos podemos vivir unos días, pero sin agua, no. Tres cuartas
partes de nuestro cuerpo es agua. Es necesario beber por tanto litro y medio
cada día; el resto nos llega a través de los alimentos. El agua realiza estas
funciones:

Ayuda a realizar la digestión, circulación, absorción de los alimentos,


metabolismo, excreción del sudor, la orina.
Regula la temperatura de nuestro cuerpo.
Sirve para filtrar la sangre en los riñones ( A través del sudor, respiración y heces
se pierde al día dos litros diarios.).

VITAMINAS.
Son substancias presentes en los alimentos absolutamente necesarias, en
cantidades mínimas, para el correcto funcionamiento del organismo. La carencia
de alguna de ellas puede ocasionar graves trastornos e incluso la muerte.

VITAMINAS MÁS IMPORTANTES

ALIMENTOS QUE LA
NOMBRE FUNCIÓN
CONTIENEN
Vitamina
Relacionada con la vista. Leche, zanahorias, tomate.
A
Interviene en muchas
Vitamina B Carne, pescado, plátanos.
reacciones químicas.
Esencial para el crecimiento de
Vitamina C Frutas, coliflor, patatas.
muchos tejidos.
Vitamina D Interviene en el crecimiento. Huevos, pescados azules.
Vitamina E Necesaria para la fertilidad. Huevos, aceites vegetales.
Interviene en la coagulación de
Vitamina K Hígado, espinacas, lechuga
la sangre.
Las vitaminas se pueden destruir por las siguientes causas: Hervir
excesivamente los alimentos. Se pierde por el calor y por su contacto intenso
con el oxígeno o pasando al agua en su calidad de hidrosoluble.
Por ciertos factores atmosféricos: luz, humedad, aire..
La acción de algunos microorganismos.
Durante algunos procesos industriales.

LOS MINERALES.

Las sales minerales son muy importantes ya que el 4% de los tejidos humanos
es material mineral.
Pueden ser:
a) Macro elementos o mayoritarios ( calcio, sodio, magnesio, fósforo ).
b) Oligoelementos porque están en pequeñas cantidades ( yodo, hierro, zinc,
selenio ).
Las sales minerales son importantes por: Regulan muchos procesos químicos.
Participan en la construcción de los tejidos ( azufre, magnesio ).
Equilibran el volumen de agua y sangre ( sodio, potasio ).
Regulan el tono muscular.
Participan en la elaboración de síntesis de hormonas ( zinc en la insulina y el
yodo en las tiroideas ).

ALIMENTOS QUE CONTIENEN SALES MINERALES.

El fósforo se encuentra en la leche, pescado, queso, marisco, frutos secos y


cereales integrales. El sodio en la sal de mesa, conservas, anchoas enlatadas.
El magnesio en los cereales integrales, legumbres, frutos secos, verduras, higos
secos.
El yodo se encuentra en la sal yodada, las algas, el pescado y el marisco.
El hierro en la yema del huevo, carne, sardinas, verduras, legumbres.
El potasio en la fruta fresca, las patatas, cítricos.
El calcio en la leche, lácteos, sardinas y verduras.

LOS ALIMENTOS SEGÚN NECESIDADES.

Alimentos para crecer: carne, pescado, legumbres y huevos ( proteínas ).


Alimentos ricos en vitaminas: frutas y verduras.
Alimentos con energía: pasta, pan, arroz y dulces.
Alimentos para fortalecer huesos y músculos: la leche y derivados
Importancia de la lactancia materna
Bebe La lactancia materna es la forma más adecuada y natural de proporcionar
aporte nutricional, inmunológico y emocional al bebé, ya que le aporta todos los
nutrientes y anticuerpos que lo mantendrán sano, sin olvidar que le permitirá
crear un fuerte lazo afectivo con la madre.
1. La cura del cordón umbilical
El cordón umbilical, al dejar de recibir aporte sanguíneo se momifica y acaba
cayendo pasados unos días. El cómo curarlo depende un poco del hospital en
que el bebé nazca, pues hay quien recomienda utilizar alcohol de 70ºC, hay
quien dice que solo agua y jabón y hay quien dice que no hace falta hacer nada.

Todas las soluciones son correctas, pues en una revisión de estudios realizada
por la OMS en 2004, en que se incluyeron 22 estudios con 8.959 bebés, vieron
que era indiferente cómo se curara el ombligo al comparar el uso de antiséptico
con el cuidado del cordón en seco. Así que en el fondo da igual cómo curarlo
(siempre que no se utilice povidona yodada). En caso de que huela mal o supure,
es necesario llevarlo al pediatra.

2. La ropa en los primeros días


¿Abrigarlo? ¿No abrigarlo? Durante los primeros días es interesante tener al
bebé relativamente abrigado, pues viene del útero materno donde estaba a una
temperatura alta en comparación con el exterior. No pasarse, pero no ponerlo
exactamente como vamos nosotros, o si va igual, tener claro que estamos en un
ambiente donde no puede pasar frío. Una vez pasan los primeros días, se suele
decir que hay que vestirles con una manga más que nosotros. Es una manera
de explicar que tendrían que ir igual que los adultos, pero con una capita fina
más, pues ellos no regulan la temperatura como nosotros y, además, no tienen
la cantidad de grasa que nosotros sí tenemos y que en cierto modo nos protege
(y no hablo de sobrepeso ni nada por el estilo, sino de que ellos tienen una piel
muy finita y nosotros, aun delgados, no tanto).

Lo ideal en este sentido es tocarles la zona del cuello y la espalda. Así sabremos
si están confortables o si tienen frío o calor.

3. El baño

Durante mucho tiempo los bebés se bañaban cada día tanto por higiene como
por aquello de que se quede relajado antes de ir a dormir. La realidad es que no
todos se relajan (muchos se lo pasan pipa y salen de la bañera más despiertos
de lo que entraron) y bañarlos todos los días puede ser demasiado. Y es que el
baño reseca la piel, elimina las bacterias naturales que tenemos y muchos bebés
sufren después las consecuencias, en forma de eccemas e infecciones
cutáneas. Vamos, que lo recomendable es bañar al bebé cada dos o tres días, y
en los días que no lo bañas hacer algún cambio de pañal con agua y jabón.

¿Que cómo bañar al bebé? Con el agua a temperatura adecuada (unos 36


grados), en un lugar donde no haga frío y con todo preparado para después.
Ahora viene el verano y no hay mucho problema, pero en época de frío es
interesante secar bien al bebé, sobre todo en los pliegues, y luego secarlo y
vestirlo rápido.

4. La crema después del baño


De igual modo que el baño se suele hacer cada día, o se hacía cada día, lo de
poner crema después del baño parece también algo que deba hacerse sí o sí.
La realidad es que los primeros días sí es interesante, porque en muchos casos
los bebés se "pelan", pero pasados los primeros días un bebé no suele necesitar
ni cremas ni aceites ni prevención de culito. Según la AAP (Asociación
Americana de Pediatría) “un bebé no necesita que le pongan habitualmente
cremas, aceites ni talcos”.

Esto no quiere decir que sea malo, sino sólo una cuestión práctica y económica.
Si la piel del bebé está bien no hace falta poner nada. Si está un poco seca por
algunas zonas, pues se le pone crema de bebé (crema mejor que aceite, que
hidrata menos) en esas zonas, o si se quiere en todo el cuerpo hasta que no
queden zonas secas.

Como consejo, si se aprovecha el momento de poner la crema para hacerle un


poco de masaje al bebé, yo sí lo haría todos los días, pero no por la crema, sino
por el masaje. Es un momento de cariño hacia él y esos momentos son muy
importantes para ambos.

5. El cuidado de las uñas

En las uñas no hay que hacer nada especial más allá de cortarlas cuando haga
falta. Muchos padres creen que no se pueden cortar hasta que los bebés tienen
un mes, o una edad específica. Lo cierto es que no hay una edad mínima para
cortar las uñas de un bebé. Es más bien una cuestión de lógica. Si el bebé tiene
las uñas largas pues se cortan, tenga la edad que tenga.

Puede hacerse con una lima o puede hacerse con unas tijeras de punta redonda
y es mejor hacerlo en algún momento que esté relativamente tranquilo. De todas
maneras, tenemos que sujetar bien su mano, no sea que un movimiento nos
lleve a cortar lo que no debemos.
6. Los ojos, las orejas y la nariz
Con los ojos, las orejas y la nariz no hay que hacer nada, pero en caso de que
haga falta, vale la pena saber cómo hacerlo. Si hay legañas, que al principio
puede ser habitual porque los conductos lagrimales no siempre funcionan bien y
no limpian el ojo como debieran, se limpian con un poco de suero y con una gasa
que limpie de dentro hacia afuera y luego tirándola (solo una pasada por gasa).

Si vemos cera, solo limpiar la parte de cera que veamos, la del exterior, y mejor
no usar bastoncillos. Como os dijimos hace unos meses, la mejor manera de
limpiar las orejas es con el codo. Es decir, no meter nada dentro.

En el caso de la nariz, si notamos que tiene moquitos y no respira bien, dado que
ellos no sacan los mocos voluntariamente, se recomienda utilizar suero
fisiológico. El modo menos agresivo de hacerlo es echarlo poco a poco, gota a
gota, por los orificios nasales, de manera que el moco se vaya diluyendo y salga
más fácilmente por la nariz o bien se lo trague.

7. Cómo limpiar la zona del pañal


Como ya os he comentado antes, lo ideal es hacer al menos un cambio al día
con agua y jabón. Si pueden ser más, pues más, que siempre limpia mejor que
las toallitas. La dirección que usemos para limpiar es importante, porque según
cómo lo hagamos llevaremos los restos hacia el lugar donde quitamos la mano.
Es importante, entonces, hacerlo desde los genitales hasta el ano. De arriba a
abajo, para que las heces no vayan hacia los genitales, sino todo lo contrario.

8. Cuando el culito se escuece


Si después de limpiarlo no está irritado no hace falta poner nada. Si se irrita, les
ponemos pasta al agua en los cambios de pañal hasta que la zona perianal esté
otra vez rosadita y sanita. Una manera de hacer crema de bebés casera es
utilizando una mezcla de maicena y aceite de oliva, que también funciona.

9. El lavado de la ropa del bebé


La piel de los bebés es bastante delicada y suele responder fácilmente a
cualquier "agresión". Seguro que habréis notado que si les cogéis desnudos
quedan marcados nuestros dedos durante un rato. Para evitar posibles
reacciones, es recomendable lavar la ropa del bebé por separado, asegurarnos
de que se aclara bien y a ser posible no utilizar suavizante, pues provoca muchas
reacciones alérgicas en la piel (granitos, enrojecimiento, etc.). Conviene hacer lo
mismo con sus sábanas y mantitas y con las nuestras si el niño acaba en nuestra
cama o duerme alguna siesta en ella.

10. ¿Qué hacer con la costra láctea?

La costra láctea es la costra que les sale a los lactantes. Por eso se le llama así
(nada que ver con que tome leche materna). Es un problema estético, una
dermatitis seborreica que no produce ningún síntoma y que, como tal, solo se
retira si se quiere (a menos que haya signos de infección). En caso de querer
retirarla, lo que se suele recomendar es utilizar aceite de oliva, de almendras o
de bebé, aplicándolo en la cabeza durante un rato. Ese masaje con aceite
reblandece las costras y así, media hora después, saltan al bañarle y pasarle
una esponja por la cabeza. Se hace despacio, con cariño, y sin esperar que caiga
todo en un día (caen unas pocas cada vez que se hace).
11. Cortar o no cortar el pelo
El corte del pelo del bebé se hace también por una cuestión de estética. En los
primeros meses suele caerse gran parte del pelo de bebé y muchos se quedan
prácticamente calvos. Luego, hacia los seis meses, empieza a salir el pelo
definitivo. Cortarlo no hará que el pelo salga más fuerte, así que solo se hace si
los padres consideran que el bebé estará mejor con el pelo corto. Para ello deben
utilizarse tijeras con la punta redonda (la cuchilla está totalmente desaconsejada
y el corta pelo puede hacerle daño) y tener al bebé tranquilo para no hacerle
daño

¿Qué es la estimulación temprana en bebés sanos?


La estimulación temprana es una nueva corriente de crianza que intenta
aprovechar momentos claves del crecimiento del bebé en los tres primeros años
de vida, para supuestamente mejorar su desarrollo. Se trata de ejercicios y
técnicas de estimulación que originalmente se crearon para ayudar al desarrollo
de bebés con discapacidades. Estás técnicas incluyen ejercicios físicos,
visuales, auditivos y de lenguaje.
Hay muchos estudios que prueban la efectividad de estos métodos de
estimulación en bebés prematuros o en bebés que nacen con discapacidades
como el síndrome de Down. De hecho, si tu bebé tiene algún problema, la
estimulación temprana es muy importante y necesaria para ayudarlo a
desarrollarse.

Aunque en bebés normales los beneficios de la estimulación temprana no son


tan claros, hay científicos que consideran que hay momentos claves en el
desarrollo de los bebés que son como "ventanas de oportunidad" que debemos
aprovechar al máximo.
Nuevas conexiones en el cerebro
La mejora de técnicas para obtener imágenes cerebrales ha permitido a los
científicos determinar qué parte del cerebro de un bebé se está desarrollando
más en qué momento. Así, algunos autores proponen que, si estimulas más a tu
bebé (hablándole, cantándole y leyéndole, por ejemplo) en el periodo en que
determinadas áreas de su cerebro están estableciendo conexiones, tu bebé
creará más conexiones neuronales y por tanto tendrá más capacidades
intelectuales cuando crezca.

Ciertamente hay estudios que indican que cuando las técnicas de estimulación
temprana se aplican a bebés normales que están en ambientes de riesgo, como
orfanatos o ambientes con privaciones, los resultados en el desarrollo son mucho
mejores que en los bebés que no las reciben.
Ante todo, que sea divertido y natural
Aunque cualquier bebé, con o sin discapacidades, se puede beneficiar de la
estimulación temprana en forma de juegos y actividades con sus padres, es
importante no utilizar estos métodos con un sentido de urgencia y de
"oportunidades perdidas". Ante todo, recuerda que cada bebé es diferente y se
desarrolla a su propio ritmo.

La estimulación temprana debe ser algo divertido y natural tanto para ti como
para tu bebé. Consulta nuestros hitos del desarrollo para aprender más acerca
de la etapa en que se encuentra tu hijo y de todo lo que puedes hacer tú para
estimularlo a alcanzar las metas esperadas.

También encontrarás información muy interesante en nuestra sección sobre los


cinco sentidos de tu bebé, incluyendo sorprendentes videos que te enseñan
cómo se desarrollan el gusto, el olfato, la vista, el oído y el tacto de tu pequeño.

En nuestra sección de Vamos a jugar encontrarás dos actividades por semana


que podrás hacer con tu bebé durante todo el primer año. Mira además lo que
puedes empezar a hacer en los tres primeros meses de vida de tu bebé:
Estimulación para el primer mes
Durante el primer mes la mayoría de los niños levantan la cabeza, responden a
los sonidos y miran las caras que los rodean.
Algunos juegos divertidos de estimulación temprana para estas primeras
semanas son:

Usar marionetas para los dedos


Hablarle a través de un tubo de cartón.
Hablar con él haciendo ruiditos.
Estimulación para el segundo mes
En el segundo mes es común mantener la cabeza erguida durante periodos
cortos, sonreír o levantar la cabeza y los hombros.

Entre los juegos divertidos de estimulación temprana para este mes están:

Crear objetos colgantes para que el bebé los siga con la vista.
Hacer que "vuele".
Mostrarle hojas de colores.
Estimulación para el tercer mes
A esta edad tu bebé seguramente podrá reconocer tu rostro y voltearse cuando
esté acostado en el suelo.

Algunos juegos divertidos para estimularlo pueden ser:

 Jugar al pimpón.
 Tocar un tambor.
 Hablar por teléfono.
Beneficios que la lactancia materna aporta al bebé

 Por tratarse de leche específica para el ser humano, es mucho más fácil
de digerir que las fórmulas en polvo, además de que se trata de fluido
vivo, que cambia para cubrir las necesidades del infante conforme crece.
 Ayuda a tener desarrollo maxilofacial óptimo, pues cuando el bebé extrae
la leche del pecho utiliza más músculos faciales que con el biberón.
 Al fluir la leche directamente del pezón a la boca del bebé, esta queda
exenta de manipulaciones y libre de contaminación por gérmenes.
Beneficios que la lactancia materna aporta a la madre

 La lactancia contribuye a que el útero o matriz se contraiga rápidamente,


lo que reduce hemorragias tras el parto.
 Le ayuda a perder el peso ganado durante el embarazo, ya que la grasa
acumulada se utiliza como energía para producir la leche.
 Se ahorra tiempo, pues es alimento siempre disponible.

¿Cómo inicia la lactancia materna?


Tras el nacimiento del bebé, la glándula mamaria produce una especie de líquido
amarillento y cremoso llamado calostro, el cual es abundante en proteínas,
minerales, vitaminas y anticuerpos.
Al tercer o cuarto día posterior al parto tiene lugar la bajada de la leche
(acumulación del lácteo en la mama); después de una semana se produce “leche
de transición”, que es blanquecina, acuosa y rica en grasa, lactosa, vitaminas
hidrosolubles y calorías. Luego de 3 a 6 semanas se estabiliza la emisión de
“leche madura”.

¿Por qué se recomienda la lactancia materna?


La leche humana está compuesta en un 88% por agua. La carga renal de solutos
es 3 veces menor a la de cualquier fórmula comercial, lo que permite que el riñón
(que sólo tiene una capacidad de filtración del 25%), mantenga su función
adecuadamente y así el bebé no requiera de ser hidratado con agua, té, jugos o
fórmulas, aún en lugares muy calurosos.

¿Cómo debe alimentarse la madre durante la lactancia materna?


Se recomienda a la madre realizar al menos tres comidas balanceadas y dos
tentempiés al día, las cuales deberán incluir los distintos grupos de nutrientes
(carbohidratos, grasas, proteínas, vitaminas y minerales). Deben ignorarse las
creencias de que pulque, atole y cerveza incrementan la cantidad del lácteo,
pues su consumo sólo provoca un aumento de peso.
El peso y la talla de los bebés dicen mucho de su desarrollo físico. Desde su
nacimiento, el bebé es pesado y medido y, especialmente, en el primer año de
su vida, su peso y sus medidas de crecimiento deben ser controlados por el
pediatra.
La herencia genética y el momento de la gestación que el bebé elige para nacer
determinan, en principio, su peso y talla. Así, el tamaño de los padres influye en
el peso y talla del bebé no sólo en el momento del nacimiento, sino también en
su desarrollo posterior.
Tabla de pesos y estatura del bebé
Respecto al momento del parto, hay que hacer una distinción entre los que nacen
a término y los que se adelantan a la semana 38 de gestación. En otras
ocasiones, una enfermedad materna que no le haya permitido recibir suficiente
alimento durante el embarazo o una diabetes gestacional también pueden
determinar el peso y talla del bebé al nacer.
¿Cuánto ha pesado el bebé?
Es la pregunta más frecuente a la que responden los padres tras el nacimiento
de su hijo junto con el nombre elegido para él. Por debajo de los 2.500 gramos,
se considera bajo peso en los bebés nacidos a término, mientras que por encima
de los 4.000 gramos, el peso es evaluado como alto. El valor medio está situado
entre ambas medidas y en torno a los 3.000 gramos.
¿Cuánto debe crecer el bebé y aumentar de peso?
La medición del peso y la talla son controles rutinarios que llevará a cabo tu
pediatra en cada visita. Es importante no obsesionarse con estas medidas
porque los picos de aumento de peso y de crecimiento no son siempre los
mismos y, durante el primer año, cambian cada trimestre.
Así, durante los primeros tres meses, el aumento de peso oscila entre 750 - 900
gramos mensuales. Entre el tercero y sexto mes, decrece y el aumento gira en
torno a 500 - 600 gramos mensuales. Entre el sexto y noveno mes, el aumento
de peso es menor, entre 350 - 400 gramos mensuales. Y, finalmente, entre el
noveno mes y el año de edad, el promedio mensual se sitúa entre 250 - 300
gramos.

Tabla de peso y talla para niños y niñas


Las tablas sobre el peso y las medidas ideales son orientativas, un aspecto que
deberás tener en cuenta a la hora de pesar y medir a tu hijo. Esta orientación NO
sustituye a los consejos del pediatra. Sigue respetando y considerando las
revisiones mensuales indicadas por el médico. Será él quién dará la última
palabra cuánto al estado físico de tu hijo.
La tabla de la OMS para niños y niñas
Hasta abril de 2006, las tablas de crecimiento se basaban en una población
infantil reducida, de un mismo origen geográfico y sin distinguir entre los bebés
alimentados con leche materna y los que se nutrían de leche de fórmula. Hace
quince años, la Organización Mundial de la Salud, OMS, consciente de esta
situación y de que esas tablas podían estar interfiriendo en el cuidado de la salud
de los bebés, decidió iniciar un estudio mucho más amplio.

La población seleccionada incluye niños de diversas etnias y procedencias y la


novedad es que todos han sido alimentados con leche materna, que se considera
el patrón de referencia en cuanto a alimentación.
Se trata de trastornos que, aunque también pueden afectar a los adultos, son
más comunes en los niños. Su nombre se debe a que suelen manifestarse a
través de un exantema, es decir, provocan erupciones en la piel, casi siempre de
color rojizo, que aparecen de forma súbita.
Varicela
Esta enfermedad está causada por el virus Varicela-Zoster, que pertenece a la
familia de los herpes. Se caracteriza por la aparición de vesículas, que en un
primer momento están llenas de un líquido claro pero después adquiere un color
amarillento. Al cabo de unos días, las vesículas se rompen y se desarrolla una
costra. Suelen aparecer en la cabeza y el tronco, y provocan prurito y en algunos
casos fiebre alta.
Eritema infeccioso
Esta patología está provocada por un virus de la familia de los Parvovirus y se
contagia fundamentalmente a través de las secreciones respiratorias. Se
manifiesta a través de un enrojecimiento de la piel, que inicia en la cara,
generalmente en ambas mejillas, y después se extiende a las nalgas. No
obstante, no suele aparecer fiebre alta.
Sarampión
Esta enfermedad está causada por un virus de la familia de los Paramixovirus y
suele aparecer en la parte interior de la boca, las mejillas y el paladar. Más tarde,
en cuestión de unos tres días, se extiende a la cara y el cuello. Entonces
aparecen las típicas lesiones: pápulas rojas y levantadas que producen prurito.
También puede provocar tos, fiebre y dolor muscular.
Rubéola
La rubeola está causada por un virus de la familia de los Togavirus y se
caracteriza por lesiones en la piel de color rosado, que suelen aparecer primero
en la cara, detrás de las orejas y el cuello, pero al cabo de pocas horas se
extienden al tronco. En este caso, no hay prurito pero se pueden notar diferentes
ganglios inflamados.
Parotiditis
Esta enfermedad la causa el virus de la parotiditis, que pertenece al grupo de los
Paramyxovirus. Se contagia a través de la tos y los estornudos y se presenta con
un agrandamiento de las glándulas parótidas, que se encuentran debajo de la
mandíbula, aunque en ocasiones puede afectar solo una glándula. Además de
la inflamación, puede dar dolor de cabeza, fiebre y dolor de garganta.
Enfermedades más comunes en los niños
Las enfermedades no exantemáticas más usuales en la infancia
Se trata de infecciones que se pueden presentar a cualquier edad, pero que
también son comunes en los niños, en cuyo caso, los síntomas suelen ser
ligeramente diferentes a los de los adultos.
Rinofaringitis
Esta enfermedad más conocida como resfriado común, generalmente tiene una
causa vírica, y es más usual durante los meses de otoño e invierno, así como
cuando el niño comienza la guardería. Suele producir síntomas como: rinorrea,
congestión nasal, fiebre y tos, esta última puede persistir algunos días más,
aunque el resto de los síntomas hayan desaparecido.
Amigdalitis aguda
Suele tener una causa bacteriana y también provoca tos, congestión nasal y
rinorrea, aunque la fiebre suele ser alta y se aprecia un enrojecimiento de la
garganta, casi siempre debido a la presencia de pus en las amígdalas.

Otitis media aguda


Se trata de una infección bastante común en los niños de menos de tres años.
En la mayoría de los casos se debe a una bacteria, pero también puede estar
causada por un virus. Los síntomas más comunes son el dolor en el oído
afectado, la fiebre y, curiosamente, la diarrea, sobre todo en niños pequeños.
Giardiasis
Esta enfermedad es común en los niños de 1 a 5 años. Se suele transmitir a
partir del contacto con otros niños, en las guarderías o en la escuela. Suele
provocar unas diarreas de carácter crónico que se extienden durante varias
semanas. Otros síntomas son: inapetencia, náuseas, gases o distensión
abdominal y fiebre baja.
Infección urinaria
Se estima que un 3% de las niñas y un 1% de los niños sufren este problema
durante sus primeros años de vida. E. coli es la principal bacteria que origina la
cistitis, pero no la única. En este caso, los síntomas más típicos son: escozor al
orinar o tener ganas continuas de ir al baño. A veces puede aparecer fiebre e
inapetencia.
También denominada Coordinación oculo-pédica. Hace referencia a la
capacidad del sujeto de realizar movimientos que cumplen una finalidad
determinada, donde intervienen los agentes ojo – pie. Técnica de posturas y
posiciones acorde a objetos, trayectoria del cuerpo en un juego y un espacio
determinado.
Por ejemplo en el juego del ponchado los movimientos del cuerpo están de
acuerdo a la visualización de la pelota o objeto a lanzar, lo mismo sucede en el
Tai-chi donde los movimientos y posturas se visualizan hasta lograr su dominio.

La coordinación viso-manual y viso-pédica son aquellas actividades que


trabajos con algún tipo de elementos para fortalecer y afianzar el dominio de
manos y piernas de manera coordinada y dinámica donde juega un papel
importante la visión, ya que esta nos garantiza si el gesto que estamos realizando
es coordinado.
El gateo es un momento evolutivo importante en la vida del bebé, es ir
adquiriendo una autonomía y una oportunidad de descubrir y experimentar el
entorno que le rodea. Los padres se preguntan: ¿no serán más autónomos
cuando andan? Pues ocurre que cuando el bebé comienza a andar es mucho
más dependiente de los adultos debido a que entra en juego el equilibrio, y por
tanto dejan durante algún tiempo de explorar el medio para perfeccionar su
nuevo logro.

Tipos de gateo en el bebé


Muchos padres se preguntan: ¿Es malo que los niños no gateen? Aunque la
verdadera pregunta debería ser: ¿es malo que los bebés no quieran
desplazarse? Y Ahí es donde quiero llegar:
Según Robson:
- 82% de los niños gatean sobre las manos y las rodillas de forma atípica o típica.
- 9% gatean desde una posición de sedestación, es decir, en posición de
sentados.
- 1% se arrastran sobre el abdomen en decúbito prono.
- 1% ruedan sobre sí mismos.
- 7% de los niños empezó a caminar sin una fase de gateo previo.
De ahí, que quiera darle mayor importancia al hecho de que lo importante es que
el bebé quiera desplazarse, y lo consiga, sea del modo que sea.
Tipos de gateo en el bebé
Vamos a ver qué tipo de gateo, o de desplazamientos puede realizar el bebé:
Arrastre: este tipo de desplazamiento es uno de los más utilizados sobre todo
al principio. Utilizando solamente los brazos, reptan hacia adelante, arrastrando
el resto del cuerpo. Algunas veces se desplazan también hacia atrás.
Gateo típico o estándar: es aquel en que los bebés se posicionan sobre las
manos y las rodillas y van cruzando la marcha, es decir cuando avanza la mano
derecha, avanza la pierna izquierda, y al contrario, y empieza a formarse una
curvatura a la altura de los lumbares. Es la preparación para el patrón de la
marcha, donde se mueve una pierna a la vez que se acompaña del movimiento
del brazo contrario.
Gateo atípico o de oso: este tipo de gateo es posterior, pues aparece entre las
48 semanas y el año. Los bebés se apoyan con las manos y los pies, flexionando
los muslos. Importante para la formación de la curvatura lumbar y da mucha
estabilidad para obtener posteriormente la bipedestación.
Sentado: se van arrastrando, flexionando y estirando las piernas, mientras se
apoyan ligeramente con las manos para impulsarse hacia adelante. Dan
pequeños saltitos sentados para ir avanzando poco a poco.
Estos son algunos de los tipos de gateo más típicos, aunque luego hay
variaciones a cada uno de estos y nos encontramos con gateos muy peculiares.
Pero hay que dar importancia a que tengan esa intención de querer desplazarse
y explorar.
Debemos dejar a nuestros pequeños gatear, sin temor a que se ensucien.
Debemos dejarles correr siempre que esto sea posible y no reñirles por ello.
Debemos dejar que se encaramen y suban a todas partes, siempre que no corran
peligro. Debemos dejar que lo toquen e investiguen todo, controlando que no
puedan hacerse daño. Sólo así los haremos libres.

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