Está en la página 1de 16

UNIVERSIDAD DE PANAMÁ

FACULTAD DE CIENCIAS NATURALES, EXACTAS Y TECNOLOGÍA

I semestre 2019

Código de horario: 4019

Departamento: Biología

Título del trabajo: Polinización de las angiospermas

Profesora: Nayda Flores

Nombre de los estudiantes:


Diógenes Mora Sáenz 9-727-764

Arquímedes Domínguez 8-958-1986

Sonia González 8-517-2122

Erick González 8-958-2350

Sede: Campus Central Harmodio Arias Madrid, Universidad de Panamá

Unidad Académica: Facultad de Ciencias Agropecuaria

Carrera: Agronegocio y Desarrollo Agropecuario

Asignatura: Botánica

Fecha: 09/07/2019
I. Introducción

Según Fritsch (1879) y London (1920), La polinización es el proceso de transferencia del


polen desde los estambres hasta el estigma o parte receptiva de las flores en las
angiospermas, donde germina y fecunda los óvulos de la flor, haciendo posible la producción
de semillas y frutos.
De acuerdo con el vector polinizador, se reconocen diversos tipos de polinización: abióticos
que puede ser a través del aire (anemofilia) y el agua (hidrofilia) y bióticos que pueden ser por
distintos grupos de animales. Dependiendo del tipo de animal que poliniza dan lugar a
distintos fenómenos conocidos como cantarofilia (escarabajos), miofilia (mosca), mirmecofilia
(hormiga), melitofilia (abejas), psicofilia (lepidópteros diurnos), o falenofilia (lepidópteros
nocturnos), ornitofilia (aves) y quiropterofilia (murciélago) (Izco et al., 2004).

Los primeros reportes sobre polinizadores fueron abordados por Christian Konrad Sprengel,
publicado en 1793 en la primera obra “EL secreto de la naturaleza revelado en la estructura y
polinización de las flores” (Izco et al., 2004).

Isco y colaboradores en el (2004) hacen mención a estudios sobre polinización como biología
floral, biología de la reproducción, ecología de la polinización, evolución de los grupos,
coevolución de éstos con los agentes biológicos implicados en la polinización, etc.

La polinización en las angiospermas es la razón por la cual este grupo de plantas son
persistentes en el mundo. Por lo tanto, el objetivo de esta revisión bibliográfica fue conocer los
diferentes tipos de polinización, agentes polinizadores y su relación de coevolución con sus
agentes polinizadores.
II. CONTENIDO O REVISIÓN DE LITERATURA

La polinización puede ser Directa (autogamia) o cruzada (alogamia)


En la autopolinización, una flor es polinizada por su propio polen o por polen de otra flor de la
misma planta. Como las plantas que se autopolinizan no precisan de polinizadores o de otras
plantas para lograr una reproducción exitosa (Nabors, 2006).
Cuando el transporte de polen ocurre entre flores de individuos diferentes se conoce como
polinización cruzada (alogamia), la mayoría de la angiospermas necesitan de la polinización
cruzada, este tipo de polinización se da por factores abióticos y bióticos (Nabors, 2006).

Polinización por factores Abióticos


Polinización Anemófila (aire)
La mayor parte de las flores polinizadas por el viento (anemófilas), son de colores pálidos,
relativamente inodoras y no son productoras de néctar, sus pétalos son pequeños e
inexistentes. Debido a que las angiospermas polinizadas por el viento (Figura 1) no dependen
de los insectos para transformar su polen de una planta a otra. Sin embargo, este tipo de
polinización es poco eficiente, resulta satisfactoria si las plantas crecen en gran número y son
muy cercanas. Las flores de polinización anemófila normalmente presentan unos estambres
muy expuestos, de esta manera el polen es fácilmente capturado por el viento. En algunos
casos, las anteras se suspenden de largos filamentos que cuelgan libremente de la flor
(Ravent et al., 1992). Algunas plantas con flores como pastos, ambrosia, arces y robles son
polinizadas por viento, y producen muchas flores pequeñas (Salomon et al., 2001).

Figura 1. Polinización anemófila. Plantas Angiospermas dispersando sus granos de polen a


través del viento.

Polinización hidrofilia (agua)


La polinización hidrofilia es por medio del agua. Vallisneria (monocotiledónea acuática)
presenta flores flotantes, las femeninas permanecen fijas a la planta por un largo pedúnculo
floral; las flores masculinas se desprenden, flotan, y son llevadas por la corriente del agua o el
viento hasta las flores femeninas. Algunas Angiospermas hidrófitas como Najas marina y P.
pusillus, tienen flores masculinas y femeninas sumergidas, en este caso la reproducción
también es adaptada y es hidrófila. En todos los casos el polen es llevado por el agua hasta
los estigmas, y a pesar de que las plantas no están emparentadas, el polen tiene aspecto
similar: es filamentoso, flexible, pegajoso. Las flores de Zostera marina (Figura 2), planta que
vive sumergida en el mar, presentan granos de polen filiformes de más de 2 mm de longitud, y
las unidades se adhieren entre si formando copos. En otras especies con polen esférico, las
unidades vas embebidas en largas tiras de mucílago. Su forma facilita el contacto y la
adherencia a los largos estigmas (Gonzales, 2019).

Figura 2. Polinización hidrofilia. Zostera marina, planta sumergida con polen y estigma.

Polinización por factores Bióticos


La polinización por factores bióticos se da por diferentes grupos de animales que
generalmente buscan alimentos, recompensas, que son el polen (rico en proteínas, grasas,
glúcidos y vitaminas) o el néctar. Las flores presentan atractivos para asegurar la visita de los
agentes, que pueden ser de naturaleza óptica (color) o química (olor) (González, 2019).
Los olores atraen a los polinizadores, algunos tienen el olfato muy desarrollado,
especialmente los insectos y los murciélagos. De acuerdo con la sensibilidad humana, los
olores se clasifican en simpáticos (agradables) o idiopáticos (desagradables). Entre los
primeros tenemos olores aromáticos (canela, vainilla, etc.), dulces (miel, rosa, violeta, etc.), a
frutas (naranja, banana, etc.). Entre los olores idiopáticos tenemos olores fétidos (olor a carne
en descomposición, a excrementos) y olores feos (a pescado, caprino, etc.). También están
las feromonas, aromas producidos por los animales para provocar una respuesta de
comportamiento reproductivo en un receptor de la misma especie (González, 2019).

Polinización Cantarofilia (escarabajos)


La cantarofilia representa el grupo más primitivo de polinización por insectos. Géneros
actuales con caracteres arcaicos (Magnolia, Degeneria, Drymis, así como gran parte de
mimosáceas, ranunculáceas, ninfeáceas, cistáceas, etc. Son flores regulares robustas con
muchos estambres (poliníferas), es decir que ofrecen polen como recompensa (Figura 3),
androceo claramente accesible, aplanadas, o en forma de plato, ausencia de atracciones por
néctar, como muestra de la evolución del carpelo cerrado para proteger los óvulos fuera del
alcance de las mandíbulas o depredación de sus polinizadores (escarabajos). La cantarofilia
se da también en umbelíferas y en géneros (Cornus, Viburnum) más evolucionado, la
presencia de carpelos y estambres en la misma flor para aumentar la efectividad de la vista de
cada polinizador (Raven et al., 1992, Izco et al. 2004 y González 2019).
Los coleópteros que visitan estas plantas son atraídos por el olor desagradable (Figura 4),
similar a la carne en putrefacción, provocado por sustancias químicas como aminas e índoles,
que se dispersan más eficientemente con el calor (González, 2019).

Figura 3. Flores cantarófilas: escarabajo alimentándose del polen de la flor de Hepatica


americana Mill. (Ranunculaceae). Foto de Raven et al., 1992.

Figura 4. La planta llamada lengua del diablo produce un olor florar desagradable para el ser
humano. Olor que atrae a los escarabajos. (Cortesía de J.M. Patt y B.J.D. Meeuse).

Polinización Miofilia (moscas)


En la polinización el engaño es parte importante ya que emiten un aroma a putrefacción o
estiércol para que pongas sus huevos en la flor y a la vez poliniza a la flor. Además, las flores
de estas plantas presentan androceo y gineceo de colores atractivos, ya sea brillantes o que
semejan carne o algún otro tinte de materia putrefacta, otras desarrollar trampas para atrapar
a las polinizadoras durante un lapso de tiempo y así depositan el polen. Otro tipo de
polinización sería un atractivo de feromona en la orquídea, está feromona simula una hembra
buscando copular, el macho se acerca para copular y atrapa masa de polen en la cabeza y la
transporta a otra flor (Jensen, & Salisbury, 1998).
Una especie polinizada por moscas es Cabomba caroliniana, planta acuática de nuestros
humedales. Al visitar flores en su primer día de antesis, al buscar el néctar, recoge el polen en
su cabeza de las anteras y los lleva al estigma de la misma flor o lo transporta a otras flores.
Otras flores polinizadas por dípteros tienen olor desagradable, a carroña, que atrae a las
moscas necrófagas, como por ejemplo las flores de Rafflesia arnoldii (Rafflesiaceae), planta
del sudeste de Asia, la flor más grande conocida. Algunas especies polinizadas por dípteros
presentan flores trampa con flores unisexuales protóginas (González, 2019).
Es el segundo síndrome de polinización más común e importantes después de los
himenópteros (como abejas y abejorros). Los sírfidos pertenecientes a la familia Syrphidae
(Figura 5), conocidos como moscas de las flores. Se estima que más de 500 especies de
plantas son polinizadas por sírfidos y son una excelente alternativa, donde los polinizadores
habituales como abejas y abejorros no son eficaces (Jensen, & Salisbury, 1998).

Figura 5. Una mosca de la familia Syrphidae (Toxomerus spp.) come polen de una flor de
gallardia (Gaillardia aristata), planta natural de América del Norte de la familia del girasol. Foto L.
Garibaldi.

Polinización Mirmecofilia (hormigas)


El término mirmecofilia define cierto tipo de relación entre plantas y hormigas, en la cual, las plantas,
llamadas mirmecófilas, presentan estructuras especializadas destinadas a alimentar o a servir de
abrigo a las hormigas, y en donde estas últimas, pueden llegar a ser especialistas u oportunistas.
Aunque muchas de las relaciones entre plantas y hormigas se arropan bajo este concepto. La
myrmecotrofia designa la producción de corpúsculos nutritivos por las plantas para alimentar a las
hormigas (Delabi et al., 2003).

Los nectarios extraflorales, o pseudonectarios, son glándulas productoras de exhudados


azucarados atrayentes para las hormigas; pueden encontrarse en varias partes de la planta
como tallos, hojas y en las partes externas de las flores, exhibiendo una gran diversidad de
formas. Los nectarios extraflorales se diferencian de los florales por su función y no por su
forma o posición en la planta, y porque están exclusivamente dedicados a la función de
polinización (Bentley 1977). La existencia de pseudonectarios es resultado de un proceso
coevolutivo convergente entre diversas familias de plantas como: Orchidaceae, Cytinaceae,
Euphorbiaceae, Orobanchaceae, Amaryllidaceae, Brassicaceae (Figura 6 A-G) (Vega y
Gómez, 2014).

Figura 6. Hormigas polinizando diferentes especies de plantas. (A) Leporella fimbriata, (B)
Cytinus hypocistis, (C) Euphorbia nicaeensis, (D) Limodorum abortivum, (E) Orobanche
densiflora, (F) Narcissus obsoletus, y (G) Lepidium stylatum. Fotos: R. Peakall (A), C. de Vega
(B), E. Narbona (C), R. G. Albaladejo (D-F), J. M. Gómez (G).

Polinización Melitofilia (abejas)


Las abejas forman el grupo de animales polinizadores más importante, responsables de la
polinización de plantas en mayor grado que cualquier otro grupo animal. Tanto las abejas
machos como las hembras se alimentan del néctar, y las abejas obreras también recolectan
polen para alimentar a las larvas. Estos insectos poseen piezas bucales, pelos en el cuerpo y
otros apéndices con adaptaciones especiales que les permiten recoger y transportar estos
materiales nutritivos. Las especies de abejas de hábitos alimenticios restringidos a menudo
presentan adaptaciones morfológicas y fisiológicas. Presentan pelos ásperos en el aparato
captador de polen (si visitan plantas con granos de polen grandes) o piezas bucales alargadas
(si toman néctar de plantas con flores de corola tubular alargada). Este tipo de adaptaciones
demuestra que las abejas ejercen fuerza evolutiva enorme en la especialización de las plantas
que polinizan (Raven et al., 1992).
Las abejas que han coevolucionado con las flores. Sus piezas bucales se han fusionado para
formar un tubo succionador que contiene una lengua. El primer segmento de cada uno de los
tres pares de patas posee una región de pelos en su parte interna. Los del primer y segundo
par de patas actúan como cepillos que recogen el polen que se pega en el cuerpo peludo de
la abeja. Los pelos del tercer par de patas forman una especie de peine que recoge el polen
de los dos cepillos mencionados y también del abdomen. Las flores que han coevolucionados
con las abejas poseen pétalos vistosos, brillantes y coloreados, normalmente azules y
amarillos (Figura 7). Estas flores presentan rasgos distintivos como “guías de miel” marcas
especiales que señalan la posición de los nectarios en lugares profundos, donde solo sólo son
accesible para los órganos bucales especializados de las abejas y no para la mandíbula de
otros polinizadores como los escarabajos (Raven et al., 1992).

Figura 7. Una abeja melífera (Apis mellifera) visita una flor de zapallo (Cucurbita maxima).
Foto L. Ashworth.

Alguna de las flores más avanzadas, en particular las orquídeas, han desarrollado complejos
“pasajes” y obstáculos que fuerzan a las abejas que la visitan a seguir una ruta particular de
entrada y salida. Esto asegura que tanto la antera como el estigma entre en contacto con el
cuerpo de la abeja en un punto en particular y en las secuencias ubicadas (Raven et al.,
1992).
En panamá se estudió la polinización por abejas en café utilizando variedades de Caturra y
Catimor. Se comparó la cantidad y calidad de los granos en plantas con flores cubiertas y
flores abiertas. Donde ambas variedades aumentaron un 25% en cantidad cerezo que
maduraron. Los granos y cerezos de Caturra pesaron 25% más y se desarrollaron más rápido
en las flores abiertas, el aumento por planta con flores abiertas fue de 56% gracias a la
polinización por abejas africanas (Roubik, 2001).

Polinización Psicofilia (lepidópteros diurnos)


Las flores que han coevolucionado con las mariposas y polillas diurnas (aquellas que son más
activa durante el día que la noche). Las plantas que polinizan muestran flores de coloración
roja o anaranjada (Figura 8) y aromas fuertes, ya que estas mariposas se valen principalmente
de la vista y el olfato para llegar a las flores (Raven et al., 1992).
Figura 8. Lepidóptero alimentándose del polen de una planta que muestra una coloración
típica de atracción de estos insectos. Foto cortesía de Francisco Javier Clavijero.

Polinización Falenofilia (lepidópteros nocturnos)


Las flores que han coevolucionado con las polillas nocturnas son de colores pálidos y de
fragancias intensas es el caso de diversas especies de tabaco (Nicotiana); un olor dulzón y
penetrante que se suele emitir sólo después del ocaso solar. Dos especies conocidas de
plantas con este tipo de polinización son las especies de color amarillo de onagras o flore de
muerto (Oenothera). Los nectarios de una flor polinizada por mariposas o polillas se suelen
localizar en la base de una corola tabular larga o esbelta, donde solo son accesibles a los
largos aparatos chupadores de estos insectos (Figura 9). Las flores que son polinizadas por
mariposas nocturnas que son de menor tamaño, con requerimientos energéticos menores que
los esfíngidos, a menudo poseen corolas más cortas y flores más pequeñas (Raven et al.,
1992).

Figura 9. Un lepidóptero nocturno alimentándose del néctar de una flor de Nicotiana.

Polinización ornitofilia (aves)


En Norteamérica y Sudamérica los principales pájaros polinizadores son los colibríes (Figura
10). Las flores polinizadas por aves presentan una copiosa producción de néctar cuando el
polen está maduro, poseen olores poco intensos, ya que el sentido del olfato se encuentra no
muy desarrollado en estos animales. Estas aves poseen el sentido de la vista muy
desarrollado para el color, muy parecido al de hombre: de ahí que no sea sorprendente que
las flores polinizadas por aves sean de colores vistosos, la mayoría de ellas son rojas,
anaranjadas o amarillas. Algunos ejemplos de flores polinizadas por aves son: Las fucsias, los
eucaliptos, los hibiscos, la flor de pascua, bananas y orquídeas. Estas plantas forman grandes
inflorescencias la cual las favorecer para atraer los polinizadores. Las aves en algunos casos
restringen sus visitas a las flores de una especie a periodos cortos de tiempo, y esto
representa un factor que fomenta la fecundación cruzada. Las flores de color rojo son las más
ventajosas para recibir estas aves (Ravent et al., 1992).

Figura 10. Polinización ornitofilia. El colibrí obtiene néctar de flores tubulares. Los granos de
polen en las plumas del ave serán llevados a la siguiente planta que visite.

Polinización Quiropterofilia (murciélago)


Las flores polinizadas por murciélagos se encuentran en regiones tropicales. Más de 250
especies de murciélagos, aproximadamente un cuarto del número total de especies del grupo,
tienen una dieta alimenticia que incluye al menos néctar, frutos, o polen. Estas especies de
murciélagos que obtienen su alimento de las flores, poseen hocicos largos y esbeltos, lenguas
extensibles también largas, algunas veces con extremos parecidos a pinceles, y sus incisivos
son reducidos e incluso ausentes (Raven et al., 1992, Jensen, & Salisbury, 1998 y Salomón et
al., 2001).
Las flores polinizadas por murciélagos son, en muchos aspectos, parecidas a las flores
polinizadas por las aves; flores grandes, robustas, con gran producción de néctar. Las flores
polinizadas por murciélagos son de colores pálidos y en mucha de ellas sólo se abren por la
noche debido a que estos polinizadores son de hábitos nocturnos. Muchas de estas flores son
tabulares (Figura 11) o se encuentran modificadas estructuralmente con el fin de proteger el
néctar. Los murciélagos son atraídos a las flores por el olor que se asemeja a productos
fermentados o de frutas, muy intensos. Los murciélagos se trasladan de árbol a árbol,
sorbiendo el néctar, comiéndose el polen y otras piezas florales y llevando el polen de flor a
flor en su pelaje. Se conocen como mínimo unas 130 especies de angiospermas polinizadas
por murciélagos (Raven et al., 1992, Jensen, & Salisbury, 1998 y Salomón et al., 2001).
En otros estudios publicados en el libro de Raven y colaboradores (1992), se descubrió que
algunos murciélagos obtienen una parte de su dieta proteica a partir del polen que consumen
y que el polen de estas flores visitadas por murciélagos ha coevolucionado en niveles de
proteínas significativamente mayores que los de flores polinizadas por insectos.

Figura 11. Murciélago narigudo menor obtiene néctar de la flor tubular de un cardón. (Merlin
Tuttle/Bat Conservation international/Photo Researchers, enc.).

Polinización de los ficus


En panamá existen unas 40 especies en su mayoría de zonas húmedas cercanas a los ríos.
En estudios recientes se demuestra que las aves que comen fruta prefieren los de color rojo,
sin embargo, los murciélagos carpófagos prefieren los frutos verdes. A pesar de estas
diferencias de los higuerones, la polinización que posibilita la gran producción de frutos
depende de una pequeña avispa de la familia Agaonidae y sus ciclos de vida son similares.
Por lo general cada especie de avispa poliniza a una especie de Ficus. La fecundación de la
higuera (Ficus carica) supone una compleja relación entre la planta y su polinizador, una
pequeña avispa (Blastophaga psenes, Aganaónidos), que ha llevado a la diferenciación de
flores femeninas con estilo largo y otras con estilo corto (flores galígenas) probablemente a
partir de una heterogeneidad inicial en la longitud del estilo, dentro de la inflorescencia, el higo
(sicono), a la relación de estos grandes árboles y estas pequeñas avispas se le conoce como
mutualismo. El proceso comienza con la llamada “avispa fundadora” hembra, que vuela
transportando polen en las cavidades externas de su tórax hasta que encuentra un árbol con
fruto en estado receptivo (Figura 12-A), entra por el ostiolo distal, abriéndose poso a través de
las escamas que lo cierran. Cuando el árbol está en estado receptivo, produce una gran
cantidad de estructuras redondas, casi cerradas, llamadas synconium que están compuestas
por muchas florecillas. Esta característica especializada define al género Ficus, y
eventualmente se convertirán en la fruta de higuerón. Cuando las avispas polinizadoras entran
a estas estructuras especializadas, deposita el polen que trae consigo en las florecillas que
bordean el interior de esta inflorescencia. Al mismo tiempo ponen sus huevos en algunas de
estas flores. La puesta se realiza a través del estilo y sólo es posible en las flores con estilo
corto, adaptado a la longitud de su órgano ovopositor (oviscapto), mientras que las flores de
estilo largo quedan a salvo y producen frutos fértiles. Estas avispas fundadoras mueren dentro
de estas estructuras y cuando las avispitas, salen de sus huevos cada una se alimenta de una
semilla (Figura 12-B) que en mucho de los casos no sufren daños. Al llegar a la etapa final de
maduración el macho que no vuela se arrastra hasta llegara al synconium abren la semilla
donde está la avispa hembra y se aparean. Luego las hembras que, si pueden volar, emergen
de la semilla, recolectan polen en su tórax y salen de los higos donde nacieron para volar y
dispersar el polen y comenzar nuevamente el ciclo de vida. Una vez que las avispas
abandonen el higuerón que le vio nacer, la fruta madura y sirve de alimentos a muchos
animales que dispersan sus semillas (Herre, 2001 y Izco et al., 2004).

Figura 12. A) La fruta de higuerón partida en dos está en su estado receptivo, lista para recibir
el polen de una avispa polinizadora. B) Vista de un fruto que ha sido polinizado. Las semillas
negras sirvieron de alimento a las avispas polinizadora; las de color dorado están sanas y
servirán para reproducir el árbol. Foto A-B: P. Becker.

Polinización en algunas orquídeas


Algunas orquídeas ofrecen recompensa de alimento a sus polinizadores, existen otras que se
basan en el engaño visual, aromático, táctil o utilizar las tres a la vez para atraer a sus
polinizadores. Algunas orquídeas atraen a las abejas haciéndose pasar por flores productoras
de néctar, mientras que otras, como la orquídea Drácula, atraen mosquitos mediante una
colección de olores desagradables, desde el de los hongos y carne podrida hasta el de orine
de gato y pañal de bebé. Pero el engaño más ingenioso de todos lo elaboran las orquídeas del
género Ophrys que seducen a las abejas machos con la promesa de sexo. Este género de
orquídeas lleva a cabo su engaño sexual imitando la apariencia, olor y hasta la experiencia
táctil de una abeja hembra. Estas orquídeas liberan una feromona con olor similar a la que
liberan las abejas hembras cuando desean copular y este engaño atrae a las abejas machos.
La Coevolución de estas diminutas orquídeas se puede ver también en el labio inferior, o
labelo que se parece mucho a una abeja vista desde atrás. En algunas especies de Ophrys
incluye pelaje falso y lo que parecen codo y alas iridiscentes dobladas, se ve como si tuviera
la cabeza metida en una flor verde formada por dos sépalos de la orquídea. Durante estos
esfuerzos de copulación las abejas machos auténtica se posa en el labelo y empieza a
realizar movimientos que parecen un intento anormalmente vigoroso y prolongado por copular
(Figura 13). Durante estos esfuerzos inútiles, la abeja empuja la columna de la orquídea (una
estructura que contiene los órganos sexuales masculinos y femeninos) y dos bolsas amarillas
llenas de polen (llamadas polinia) se le adhieren a la espalda gracias a una sustancia que es
como pegamento de secado rápido.

Figura 13. Se puede apreciar una abeja macho tratando de copular la falsa abeja hembra que
es el engaño de la orquídea. Fotografía cortesía de Christian Ziegler.
III. Conclusiones
1. La polinización es importante porque es la razón de la existencia de las plantas, en su
mayoría angiospermas que forman la flora de un ecosistema, producen oxígeno, elemento
fundamental la vida del ser humano. Además, nos permite disfrutar de la biodiversidad y
variedad de plantas.

2. Las plantas son la fuente de alimento de todos animales ya sea directa o indirectamente
mediante sus hojas, raíces, frutos, semillas, y flores (néctar o partes florales); las
angiospermas que es el grupo más amplio y que a su vez necesita de la polinización para
la producción de frutos y semillas y de esta manera asegurar la supervivencia de su
especie.

3. Los agentes polinizadores son de gran importancia tanto para la existencia de las plantas
como para la supervivencia del hombre y otros animales. Ya que mediante la polinización
se garantiza la producción de alimentos y la existencia permanente de los mismos.

4. Las abejas son el grupo de insecto más importante en la polinización y actualmente se


está protegiendo este insecto debido a su eficacia en la polinización.

5. Sin polinizadores, muchas flores ya no podrían producir frutos. Esto afectaría no solo el
rendimiento de los cultivos sino la variedad de alimentos disponibles para todos los
humanos.
IV. Referencias bibliográficas

1. Bentley, B.L. 1977. Extrafloral nectaries and protection by pugnacious bodygards. Annual
Review of Ecology and Systematics.
2. De Vega, C. y Gómez, J. M. 2014. Polinización por hormigas: conceptos, evidencias y
futuras direcciones. Artículo publicado en Open Access bajo los términos de Creative
Commons attribution Non Comercial License. Asociación española de ecología terrestre.
disponible en www.revistaecosistemas.net. Citado 08-07-2019.
3. Delabie, J.H.C.; Ospina, M. y Zabala, G. 2003. Relaciones entre hormigas y plantas: una
introducción. Articulo online.
https://www.researchgate.net/publication/238623624_Relaciones_entre_hormigas_y_plant
as_una_introduccion. Citado el 08-07-2019.
4. Fritch, E. F 1886. An Introductión to the Structure and reproduction of plants. En ingles.
Publicada por London, G. B. 1920. Plant anatomy, Plants. Cornell University Library,
cornell; biodiversity; americana, Estados Unidos.
https://es.wikipedia.org/wiki/Polinizaci%C3%B3n. consultada el 03-07-2019.
5. González, A. M. 2019. Morfología de Plantas Vasculares. Articulo online. Universidad
Nacional del Nordeste, Corrientes, Argentina. www.biologia.edu.ar/botanica. Consultado el
05-07-2019.
6. Herre, A. 2001. El fascinante mundo de los higuerones y sus avispas polinizadoras.
Artículo publicado en la revista de Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales por
Stanley Heckadon Moreno, Panamá: puente biológico.
7. Izco, J.; Barreno, E.; Brugués, M.; Costa, M.; Devesa, J. A.; Fernández, F.; Gallardo, T.;
Llimona, X.; Prada, C.; Talavera, S.; Valdés, B. 2004. Botánica. II edición. McGraw-Hill.
Interamericana. México.
8. Nabors, M. W. 2006. Introducción a la botánica. Edición en español, traducción, Paola
González-Barreda. Editorial-Pearson educación, s.a. Ribera del Loira. Madrid, España.
9. Oliveira, P. S. y C. R. F. Brandão. 1991. The ant community associated with extrafloral
nectaries in the Brazilian cerrados, pp. 198-212 en C. R. Huxley y D. F. Cutler, eds., Ant-
plant interactions. Oxford University Press, Oxford.
10. Oliveira, P. S. y M. R. Pie. 1998. Interaction between ants and plants bearing extrafloral
nectaries in cerrado vegetation. Anais da Sociedade Entomológica do Brasil 27(2):161-176.
11. Raven, P. H.; Evert, R. F.; Eichhorn, S. E. 1992. Biología de las plantas. Edición en
español, trad. por Sergi Santamaría del Campo, Francisco Lloret Maya, Maite Mas Serra,
Ma Angeles Cardona Florit. Colaboración de Loreta Rossellis (Bióloga). Editorial Reverté,
s.a. Barcelona, España.
12. Roubik, D. 2001. Las abejas africanas y el café en Panamá. Artículo publicado en la
revista de Instituto Smithsonian de Investigaciones Tropicales por Stanley Heckadon
Moreno, Panamá: puente biológico.
13. Salomón, E. P., Berg, L. R.; Martín, D. W. () Biología. Quinta edición en español. Trad. por
Roberto Palacios Martínez, Gabriel González Loyola. Coordinación editorial por Alejandra
Barrios Váldez. McGraw-Hill Interamericana. México.

También podría gustarte