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CONDUCTAS AUTOLESIVAS NO SUICIDAS

(Antonella del Rosario Godinez Salazar y Luisa ….)

PALABRAS CLAVE (¿)

RESUMEN (¿)

En el presente artículo se compilan los hallazgos de diferentes publicaciones sobre las


conductas autolesivas sin intención suicida. En relación a su conceptualización se define que
las conductas autolesivas es causarse daño físico sin ningún deseo consciente de morir. Estas
conductas son más comunes en mujeres adolescentes. Se pueden presentar de diferentes
formas, como: conductas autolesivas mayores, estereotipadas, compulsivas e impulsivas. Y por
último, el artículo refiere los factores determinantes para el desarrollo de dicha conducta en lo
biológico, lo psicológico y lo social. La investigación supone un aporte para la intervención de
la salud pública en el fenómeno.

INTRODUCCIÓN

Las conductas autoagresivas pueden comprenderse como comportamientos transnosológicos


que, por su riesgo vital y complejidad psicopatológica, requieren de un diagnóstico y manejo
médico específicos. Existen variadas motivaciones que pueden desencadenar conductas
autolesivas, las que tienen su origen en dificultades específicas relacionadas con el estado
mental del paciente. Resulta importante identificar la presencia de patologías psiquiátricas
desencadenantes, o relacionados, para orientar el apropiado manejo clínico.

DEFINICIÓN

Una conducta autolesiva se define como toda conducta deliberada destinada a producirse daño
físico directo en el cuerpo, sin la intención de provocar la muerte. Que este acto sea deliberado
hace referencia a que no se trata de algo accidental, sino que es intencional y directo, que busca
tener un impacto inmediato sobre el cuerpo. En general no existe intención de morir; sin
embargo, en la práctica clínica se encuentra que puede haber cierta ambivalencia al respecto.
Se excluyen en el concepto: los actos con intención suicida; los rituales y prácticas culturales;
y el beber, fumar y comer en exceso

EPIDEMIOLOGÍA

En una investigación realizada por Villaroel, Jérez, Montenegro, Montes, Igor y Silva (2013)
argumentan que en poblaciones clínicas encuentran que el 21% de los adultos y el 30 a 40% de
los adolescentes que requieren hospitalización psiquiátrica es porque se han provocado alguna
conducta autolesiva. En estudios clínicos y poblacionales ubican que la edad de comienzo se
ubica entre los 11 y 15 años (es por esto que la adolescencia es un periodo de vulnerabilidad),
encontrándose que el inicio de estas conductas después de los 30 años es muy infrecuente.
Tradicionalmente se ha descrito que las conductas autolesivas son más frecuentes en las
mujeres, existiendo suficiente evidencia de esto en la población adolescente. No obstante, en
adultos los datos son contradictorios. (Conductas autolesivas no suicidas en la práctica
clínica. Primera parte: conceptualización y diagnóstico)

FACTORES DE RIESGO

Son factores de riesgo pertenecer al género femenino, ser adolescente, de bajo nivel
socioeconómico, con orientación homosexual o bisexual y presentar el antecedente de haberse
criado en un ambiente familiar adverso. (Conductas autolesivas no suicidas en la práctica
clínica. Primera parte: conceptualización y diagnóstico)

CARACTERÍSTICAS Y PRESENTACIONES CLÍNICAS

Las autoagresiones más comúnmente observadas son los cortes y magulladuras en las
extremidades y abdomen, producidos con objetos corto punzantes, también escoriarse la piel
hasta sangrar o quemarse. Debe destacarse que lo más frecuente es el uso de múltiples y
distintos métodos en cada ocasión. Se describe que las mujeres muestran preferencia por
cortarse superficialmente los antebrazos, mientras que los hombres optan por golpearse o
quemarse las extremidades. (Conductas autolesivas no suicidas en la práctica clínica.
Primera parte: conceptualización y diagnóstico)

Se destaca la diferencia en adolescentes que las mujeres son más proclives a utilizar métodos
que implican ver sangre (concretamente, cortarse y rascarse a uno mismo gravemente, a
diverencia de los hombres que son mas propensos a golpearse o quemarse. (Revisión y
actualización de la autolesión no suicida: ¿quién, cómo y por qué?)

Estas conductas pueden presentarse de diferentes formas, por esto se realiza una clasificación
reunidad por diversidad investigaciones: (1) Conductas autolesivas mayores, que son actos
infrecuentes que producen grave daño tisular. Su aparición es repentina, impulsiva y cruenta.
Ocurre durante episodios psicóticos. (2) Conductas autolesivas estereotipadas, se observan en
el TEA, retardo mental severo y patologías neurológicas. Los pacientes se golpean la cabeza,
se muerden labios, lengua, mejillas y manos, se rasguñan la piel, se golpean la cara y se tiran
el cabello. (3) Conductas autolesivas compulsivas, conductas repetitivas como rascarse
reiteradamente la piel, morderse las uñas o tirarse el cabello. (4) Conductas autolesivas
impulsivas, son cortarse o quemarse la piel, introducirse objetos punzantes. Puede ser
ritualizado y se observa en pacientes con trastornos de personalidad. (Conductas autolesivas
no suicidas en la práctica clínica. Primera parte: conceptualización y diagnóstico)

POSIBLES EXPLICACIONES PARA LAS AUTOLESIONES NO SUICIDAS

Para una mejor compresión de las motivaciones que hacen desarrollar estos tipos de conductas:
(1) Modelo de la regulación de los afectos, visto como una estrategia para aliviar afectos
negativos agudos e intensos. (2) Modelo de la disociación, visto como una respuesta a la
aparición de estados de disociación, de despersonalización y/o desrealización. (3) Modelo de
conducta suicida alternativa, aparece como un mecanismo adaptativo de resistirse al deseo
genuino de quitarse la vida. (4) Modelo de influencia interpersonal, usada para influir sobre
las conductas, afectos y decisiones de otras personas significativas. (5) Modelo de los límites
interpersonales, sirve para darse un sentido propio de identidad. (6) Modelo del castigo, los
sujetos en el pasado aprendieron que el castigo es aceptable y necesario para moldear una
conducta. (5) Y el modelo de búsqueda de sensaciones, visto como una forma de generar
excitación en un sujeto necesitado de emociones intensas para sentirse contactado con la vida.
(Conductas autolesivas no suicidas en la práctica clínica. Primera parte:
conceptualización y diagnóstico)

En otras investigaciones se encontró la siguiente clasificación: (1) Factores biológicos, en


donde se incluyen la disminución de los neurotransmisores cerebrales, por ejemplo: la
serotonina (regula la impulsividad y la agresión); los opioides (regula las emociones y la
supresión del dolor). (2) Factores psicológicos: deficiente capacidad para solucionar los
problemas, autovaloración negativa, conflictos para expresar sus sentimientos, presencia de
desequilibrio alimenticio, culpas inconscientes, traumas emocionales, depresión, ansiedad y/o
frustración. Y por último (3) Factores sociales: sensación de ser aislados, acto de protección
después de haber sido rechazados y/o no ser aceptados socialmente. (Revisión sistemática
sobre conductas autolesivas sin intención suicida en adolescentes)

DIAGNÓSTICO

Es necesario identificar las características y motivaciones de una conducta autolesiva


específica, ya que permite evaluar el riesgo vital de un paciente para planificar las
intervenciones terapéuticas necesarias y suficientes en cada situación clínica. El tratamiento
integral de un sujeto que se autolesiona sin el objetivo de morir resulta distinto al tratamiento
de un sujeto que decide terminar con su vida, porque la sospecha de intencionalidad obliga a
un manejo clínico altamente restrictivo, que se impone a la voluntad tanto del propio paciente
como de su familia. Resulta costoso, desgastador y excesivo si la motivación del paciente no
es morir y en algunos casos, se llega a empeorar la evolución del paciente. (Conductas
autolesivas no suicidas en la práctica clínica. Primera parte: conceptualización y
diagnóstico)

Los mejor como tratamiento sería una reestructuración cognitiva, acompañada de


intervenciones psicosociales para obtener mejores resultados. Se usa tambien la medicación si
los niveles de ansiedad o depresión son elevados. (Revisión y actualización de la autolesión
no suicida: ¿quién, cómo y por qué?)

TRASTORNO LIMITE DE PERSONALIDAD Y AUTOLESIONES NO SUICIDAS

Las conductas autolesivas no suicidan aparecen como parte de los criterios diagnósticos para
el trastorno límite de personalidad; esta asociación se basa en que más del 70% de los sujetos
con diagnóstico de TLP realizan conductas autolesivas repetitivas con distintas motivaciones.
Se plantea que los factores que aumentan el riesgo de autolesiones en sujetos con TLP son la
presencia de impulsividad, inestabilidad afectiva, apego inseguro y difusión de identidad.
(Revisión de la literatura sobre el papel del afrontamiento en las autolesiones no suicidas
en adolescente)

CONCLUSIÓN

Las conductas autolesivas pueden diferenciarse de los intentos suicidas en tres aspectos
básicos: intención, repetición y letalidad. (Conductas autolesivas no suicidas en la práctica
clínica. Primera parte: conceptualización y diagnóstico)

Los acontecimientos vitales estresantes y la sintomatología emocional están asociados a


diversas autoagresiones. La función frecuentemente señalada por los adolescentes de las
conductas autoagresivas fue la evitación de eventos privados aversivos, con anormalidad de
los gestos suicidas cuya función más habitual fue el reforzamiento positivo social.
(Características psicopatológicas, acontecimientos vitales estresantes y conductas
autolesivas suicidas y no suicidas en adolescentes evaluados en salud mental)

Pueden tener un propósito analgésico-curativo o bien propósito comunicativo. La autolesión


parece tener efectos orgánicos que producen diferentes cambios bioquímicos en
neurotransmisores asociados a las emociones como la serotonina y endorfinas. Además, se ha
encontrado que los factores con gran influencia sobre este comportamiento son aquellos que
provienen de los aspectos sociales y psicológicos. Los adolescentes informan que son
conductas que les sirven como mecanismos para liberar ansiedad y manejar tensiones.
(Revisión sistemática sobre conductas autolesivas sin intención suicida en adolescentes)

BIBLIOGRAFÍA

Diaz, M. (2014). Características psicopatológicas, acontecimientos vitales estresantes y


conductas autolesivas suicidas y no suicidas en adolescentes evaluados en salud mental.
Universidad Autónoma de Madrid.

Flores, R., Cancino, M., & Figueroa, R. (2018). Revisión sistemática sobre conductas
autolesivas sin intención suicida en adolescentes. Revista Cubana de Salud Pública, 44(4),
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Gonzalez, L., Vasco, I. & Nieto, L. (2016). Revisión de la literatura sobre el papel del
afrontamiento en las autolesiones no suicidas en adolescentes. Cuadernos Hispanoamericanos
de Psicología, 16(1): 41-56

Vega, D., Sintes, A., Fernández, M., Puntí, J., Soler, J., Santamarina, P., Soto, A., et al. (2018).
Revisión y actualización de la autolesión no suicida: ¿quién, cómo y por qué? Actas Españolas
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Villarroel, J., Jerez, S., Montenegro, A., Montes, C., Igor, M., & Silva, H. (2013). Conductas
autolesivas no suicidas en la práctica clínica: Primera parte: conceptualización y diagnóstico.
Revista chilena de neuro-psiquiatría, 51(1), 38-45

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