. $ 12..

-
 ¡SUSCRIBASE A "OVNI S
UN DESAFIO A LA CIENCIA"f •

Nuestra public;ación le proporcionará mensualmente una información científica del fenómeno Ovni, reprodu·
ciendo múltiples colaboraciones de las más conspicuas autoridades mundiales en la materia. La reservación del
cupo pertinente d e ejemplares le permitirá ser beneficiario de las siguientes ventajas:
a) Seguridad en la recepción de cada número de la rev ista .
b) Disponibilidad de su unidad con diez días de anticipación a su distribución y venta por los canales ordinarios;
e) Descuento del 15 o¡, en toda venta de material bibliográfico y/o documental por parte del CADIU;
d) Precio fijo, no sujeto a incrementos por variabilidad de costos de impresión o franqueo.

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NUMEROS ATRASADOS: Argentina ($ 14.·); Exterior (u$s 2,00).

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OVNIS - Un Desafio
Señor Director de
a la Ciencia
c. c. 21e
CORDOBA, ARGENTINA

Estimado seftor Director:

Adjunto giro 1cheque n9 ..... . c/Bco/Correo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . • . . . . por va!or de

$ . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . a los efectos de cubrir ............... suscrlpclónfe) semestral(•) a vuestra

r.evltta, la. que cleber6 hacerse efectiva a partir del Nt ..... Inclusive.

AHe.

Nombre completo del(loa) beneflclarlo(s)

Dlrecclón(es) . . . . . • • . . . . . • . . . • • • . . • . . • . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ·· . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

Provincia o Estado . . . . . . • • . . . . . . . . . . . . • . . . . . • . . • . . · • ·
· · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · ·

Pala • • • • • • • • • • • o • • • • • • • • o • • • • • • :· • • • • • • • • • •• • • • •• • • • • • • • • • • • • • • • • • •
.
• • o . o o • • • o • • • • • o • • • • • • • • • • • • • • • o • • o .

Firma

L-- ---- - - ·- -- - -- - -- -- - ------ - _.J

 O V N 1 S
UN DESAFIO A LA CIENCIA
EDITORIAL
PubHcac16n m en su al del

tigaciones Ufológ!cas
Círculo Argentino de Inves-

CC.A.D.I. U.l
Dirección y Admini�tración:
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Córdoba - Argentina

Din'ctor:
Dr. Ost:ar A. Galíndez
Relacionas Públk:a.s:
Dr. Ro�rt.o L. Pedtcor.�
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Prof. Alberto M. A.storga.
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H!lda Tornadü de Bagú
Oilda Pedlcone de Mon�,<,:1e¡ro
Jane Thom�
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Extranjeras:
•"Fly!ng S a u e e r Review"
P.O. Box 25, Barnet,
Hetts EN5 2}1"R, En­
gland.
•"Ste ndek", (Apartado 282,
Transitamos un periodismo que nos exige mesura y precisión, aún
a riesgo de dilatar apreciablemente la difusión de algún acontecimiento
ufológico, No estamos embarcados en una carrera alc>cada cuya meta
.
inmediata sea contabilizar primicias, y, la mediata, la de 1mpactar al
lector con un manejo indiscriminado de información muy reciente.
El fenómeno Ovni es una realidad física anómala que debe abor­
darse con un riguroso criterio metodológico que permita profundizar
cientificamente las particularidades de su naturaleza última. Esta afirma­
ción suscita otra de sentido antinómico, traducible en términos de un
necesario rechazo a toda difusión apresurada de hechos flamantes, su­
puestamente relacionados con el tema. En nuestro caso, la objetividad y
la amplitud de prueba están reñidas con la primicia, sinónimo de ligereza
y de estrechez documental.
Esto no sucede en otros campos del periodismo, en donde muchas
veces pueden conciliarse la seriedad y la agilidad informativa, en aten­

•"Phenorr.e n es Spatiaux¡"',
Barcelona, España 1.
(69, rue de la Tombe Is­
soire, París 14e, Francia).
r'Lum!eres dans la Nuit",
("Les P!ns" -43400 Le
Chambon - Sur - Lignon,
Francia.
•"Inforespace", <Boulevard
Aristlde Br!and, 26, 1070
Bruxelles, Bélgica l.
•"Australlan UFO Review"
(UFOIC, Box El70, St. Ja­
mes P. O., Sydney, 2000,
Australia.
Distribuidores.
-Córdoba: J. Lerchundi, Pa­
raná. 26, Córdoba.
-Interior Prov. de Cba.: Ag.
Brites, Independencia 508
Córdoba; H. Calderón, Fra­
gue1ro 1575, Córdoba.
-Capital Federal: Malerba­
ción a la propia naturaleza de los hechos relatados. Pero en el terreno
ufológico no ocurre lo mismo. Quien pretenda afirmar lo contrario
ignora por completo los múltiples aspectos involucrados en el problema,
ya que el análisis pormenorizado del mismo exige el concurso de nume­
rosas disciplinas técnico-cientificas.
El supuesto descenso de un Ovni -por ejemplo- ligado a la
captación fotográfica del fenómeno y a la existencia de huellas en el
terreno, impone la necesidad de un análisis detenido del evento desde
muy distintas ópticas. El botánico -v.gr.- explicará si los hongos
que proliferaron en la marca en cuestión corresponden a la especie
generadora de los conocidos "anillos de hadas", erróneamente atribuidos
por el vulgo a los Ovnis. El físico -por su parte- evaluará las parti­
cularidades de la tierra y hierba calcinadas, barajando hipótesis conven­
cionales sobre la causa generadora de esos efectos y determinando para­
lelamente si el índice de radiactividad registrado en el sitio se ajusta al
nivel normal de radiación ambiental del lugar. El químico -en su caso­
analizará algún sedimento encontrado en el sector, mientras que el fotó­
grafo hará lo propio con los negativos obtenidos. El médico ensayará
una explicación científica sobre los efectos fisiológicos acusados por el
testigo, mientras qu.. ol siquiatra buceará en la mente del protagonista
en busca de una interpretación :oioalógica del fenómeno
Las etapas precedenteiJ'Iente indicadas aon apenas un reflejo muy
elemental de los múltiples problemas que debe arrostrar la ufología

cias de supuestos avistamientos y 1o aterrizaJes de Ovnis en algún punto

Br1eht, Arcos 1226, 3er. p.
Cap. Fed.
-Interior del país: Ryela
S.A.I.C.I.F. y A., Bmé. MI­
tre 853, 59 p., Cap. Fed.
Impresor:
Establecimiento G r á f 1 e o
LA DOCTA, Dr. S!lvestre
Remonda 530, Córdoba.
o � Franqueo Pag ado
científica frente a cada caso concreto. Casi a diario nos llegan denun·
del país. Si nuestra publicación fuese un mero órgano informativo de
cuanta estupidez sea puesta en circulación, no sólo se convertiría en
u n pobrísimo catálogo de lo absurdo, sino que dejaría de cumplir con
el cometido que signara su aparición,
Quienes pretendan encontrar en nuestras páginas un relato general
de cualquier episodio que haya sido divulgado reciente mente por los
conductos ordinarios, se verán por cierto defraudados. La Investigación
silenciosa y seria es una labor que Insume un apreciable margen de
tiempo. Es preferible sacrificar "primicias" en aras de la obtención de
un resultado científicamente más valedero. En caso contrario sólo se

g§cc:�
CE� r------1
Conc. NV 37/Dto. 6 divulgarían rumores, pero no Investigaciones. El rumor desjerarquiza a

8 *� ª Conc.
M la ufologia. La investigación la enaltece;

Tarifa Reducida
<: N9 115/Dto. 6

EL DIRECTOR
NUESTRA PORTADA
"El objeto estaba posado en el
mar y habla en él dos personas
de talla pequeña". (Del delato
del matrimonio brasileño Macha·
do).
 .
"Aparecier<·� en el cie'o · pá¡aros
negros Slil 'l'!l
· ' �'' que se a:Ja'••eron
Sob re ello!' 2rr '-'.
�¡á n ct o1es fuego y
agua".
 ESTUDIOS
El MITO DIAGUITA DE LOS
PAJAROS NEGROS SIN ALAS
Por Marceio B. Aballay
o
(Miembro del CADIU y nota�•e es­
tudioso de las culturas nauvas del
actual territorio argentino).
Los diaguitas hablaban de misteriosos "pájaros negros sin alas" de origen cósmico. ¿Este mito
guardaba alguna relación con hechos reales vividos por sus antepasados?
l . UN PASADO CON
INTER ROGANTES
Las ya comunes apanctones
de Ovn is en los cielos de di­
versos países, ava ladas por de­
c Laraci ones de testigos respon­
sables, n os l levan a pensar se­
riamente en el por q u é de estas
p resencias, p reguntándonos pa­
ralelamente si son o no de ori­
gen extrate rráqueo.
Los analistas contem porá­
neos se encuentran abocados a
l a tarea de i nvest i g a r este di­
lema a los fi nes de hal l ar una
respuesta adec uada a los m ú l­
ti p l es i nterrogantes q u e el m i s­
mo p l antea.
Ahondando e n tal búsq ueda
se h a l legado a explorar en lo
m ás profu n d o del pasado y de
allí s u rgen renovados m isterios,
tales como los q ue nos depa­
ran las pirámides eg i pc i as , l a
loza sepulc ral de Palenq ue o
las fig u ras de Nazca, sólo d ivi­
sables estas últi mas volando a
g ran altura. Nos satu ra así la
perm anente o bsesi ó n de i nda­
g a r no sólo en torno al verda­
dero origen o s i g n i ficación de
esos rastros, sino también con
relación a n osotros m i s mos co­
mo h u manos, haciéndonos du­
dar s i real mente somos n atu ra­
l es de este planeta tierra o si
hemos l l eg ado de las estrel las
escapando de alguna traged i a
cósmica.
Nosotros -los de este s i g l o
- creemos merced a l ejercicio
de la razón, haber llegado a s u­
perar integralmente a las gene­
rac i o nes anteri ores, al punto
q u e las tildamos con soberbia
de bárbaras e i g n o rantes. Pero
habiendo s i do el autor testi g o
ocasional (en l a p record i llera
andina) del despl iegue de esas
m isteriosas n aves, y atado a los
diaguitas por. tenue pero resis­
tente h i l o genésico ( pues es
descendiente de los p r i meros
habitantes del n oroeste argen­
t i no), vivamente i m p resionado
por aq u e l l a experi e n c i a aban­
donó esa cúspide de e n g rei­
m i ento y evocó con m ayor am­
plitud mental las enseñ anzas
maternas sobre el m i to d i a g u ita
de ¡·os páj aros neg ros s i n alas .
11. U N A S U PERCIVI LIZACION
E N E L PACIFICO
Seg ú n esas congregaciones
a utóctonas, en é pocas remotas
existió en a l g ú n dete r m i n ado
l u g a r del mar y a una consi dera­
ble d i stancia al oeste del G ran
Cerro (la Cord i l lera de los An­
des}, un poderoso i mperio de
n otable organizac i ó n . Esa co­
m u n idad aparentemente alcan­
zó u n n i vel tecnológico excep­
· ...
c i o n a l , al pu nto q ue con su i nte­
l i gencia se c reyó dotada de po­
deres invencibles y se hizo tan
osada q ue -cansada de po­
seer l a fuerza del rayo, del true-
no, del día y de la noche, y
acostumbrada a volar co mo l as
á g u i l as- dedicóse de lleno a
dominar a la Madre Naturaleza,
haciéndolo e o n tal ferocidad
que u n día, sin consideración
a nada, la violó. (Los hombres
de esa supercivilización desna­
t u r a l i zaron la flora y la fau na,
alteraron él c u rso de los rlos y
pertu rbaron la atm ósfera) .
111. LOS PAJAROS N E G ROS
S I N ALAS
E n to nces aparec ieron en el
c ielo " páj a ros neg ros s i n al as"
q ue se a batieron sobre e l los ,
arrojándoles fuego y agua du­
rante n ue•e d ías. El g l obo todo
osci ló; rasgóse la corteza te­
r restre; o l as de agua y fuego
azotaron el m u ndo hasta enton­
ces conocido y en un i nstante
los continentes se h u n d ieron en
te rrible torbe l l ír,o, emergiendo
a la vez e l fondo de los océanos
para acoger una n ueva v i d a en
tierra virge n .
De l a raza huma n a -que eran
g i gantes- n o q ued aro n m á s
q ue n ueve descendie ntes en
u ria peq ueña isia situada -se­
g ú n la t rad i c i ón- al oeste de
lo q u e es hoy la Cord i l le ra de
los Andes. Le nueve sobrevi­
vientes e ran '-'uatro parejas .y
u n hombre c i ego, u n a especia
de mesías, l l ama-:-lo Jolt. E s t e
último c ub rió con barro a cada
pareja de ;nacho y hem b ra,
&VMIS -1
ve ndándoles los ojos de negro
e· i m partiéndoles i nstr ucciones
para que pud ieran sobrevivi r a
la hecatom bre. Al retornar a l i ­
berarlos desc u b rió que t res pa-
La pa reja rojiza encontró al
Este de la catástrofe u n conti­
nente com pletame nte virge n , en
el que em pezaba a resurg i r tan­
to l a vida vegetal como ani mal.
y bebiendo en e l l a estos cono­
c i m ientos añejos cumple en dar­
los a co noce r, por si tienen al­
g u na i m portan c i a ; y que -por
j u stic ia a sus antepasados " bár­
baros"- debe recordar!

BOLSA DE PEDIDOS

•:• Entusiasta del tema Ovni desea

adquirir el libro "El Misterio de los
Platos Voladores" (Christian Vogt,
Edit. La Mandrágora, Bs. As.). Agra·
decerá toda información concer­

desde el año 1943 en adelante. Di·

niente a avistamientos argentinos

rigirse a: Ornar Mangieri, Constitu­

ción y Lavalle s n<?, José c. Paz,
Prov. de Bs. As., Argentina.

: Se agradecerá información (con

••

miras a su adquisición) sobre los

siguientes libros: a) "Visitantes del
Espacio, Hechos concretos y Ver·
dades sobre los Platos Voladores"
(E. Miranda), Ed. Perlado, 1958;
b) "Los Platos Voladores y sus Tri·

Glen, 1969¡ e) "El Misterio de los

pulantes" (Eduardo A. Tucci), Ed.

Platos Voladores" (Christian Vogt),

Ed. La Mandrágora, 1956; d) "Ovni,
Estudios sobre Naves lnterplane·
tarias" (Vicente C. Rodríguez), Ed.
Gráficos del Sur, 1971 ¡ e) "Unico
Documento confirmado sobre el
Origen, Estructura de los Ovl1is"

na, 1956). Dirigirse a: Rolando N.

(Jorge A. Duclot, Ed. América Lati­

Gra_mage, Pilcomayo 570, Bella Vis­

ta, Prov. Bs. As., Argentina.

El autor, Marcelo B. Aballay, en una fotografía de su niñez

tomada el 20-12-29 en Huaco, San Juan. Al fondo, un tejido
<t• Aficionado al fenómeno Ovni de­
diaguita. sea mantener intercámbio de noti·
cias sobre Ovnis con grupos o in·
vestigadores de cualquier parte del
rejas habían desobedecido sus A l l í toca ron t ierra y e n tal paraí­ mundo. Dirigirse a: Néstor Masc­
órdenes, sacánd ose antici pada­ so se m u l t i p l icaro n : El se l l a ma­ kauchán, 9 de Julio 1212, Corrien­
m ente el lodo protector. Sólo ba Huali y e l l a Hinch, algo así tes, Argentina.
una lo aguardó. La pri mera q u e como el Adán y Eva nativos.
rompió la envoltura adq u i rió En tal reg ión, q u e fuera el
una p i g mentación neg ra; l a se­ fondo de un océa no, los descen­
. + I.S.A.E.R.H.A. (lnYP!I!!gaciones
g u nda, roj a ; l a tercera resu l tó d ientes de l a parej a m ítica se sobre Simbología del Arte y Etnolo·
amari l l a y la q u e esperó a Jolt, aj ustaron estrictame nte a las gía para una Revisión Histórica del
respond iendo a sus i n d icacio­ leyes naturales temiendo con­ Arte Americano) desea reunir i�
nes, apareció con la piel b l anca . trariarlas, pues si l o hacía n , quietudes y trabajos investigativoa
relacionados con los objetivos pre­
E l Salvador, al notar que l as esos " p áj a ros neg ros" -h ijos cedentemente enunciados. Dirigir·
parej as eran enemigos i rrecon­ del cosmos- reg resarían n ue­ se a: Cristina Juana M. Wolczuk,
c i l iables, y frente a l a posi b i l i­ vamente desp legando· su e nor­ Marcial Candioti 4041, Santa Fe,
d ad i n mediata de exter m i n arse me poder y l os matarían. Así Argentina.
entre sf, las echó al agua seña­ fuero n fel ices hasta que vino el
l ándoles c u atro p u ntos d iferen­ b l anco y los exterminó.
tes en el i n menso océano. Sa­
+ Se solicita intercambio de ma­
bía que no se ahogarfan ya q u e Esto q ue el autor acaba de terial sobre el tema Ovni. Se ase­
h abían sufrido u n a metamorfo­ narrar lo aprendió e n su i nfan­ gura respuesta a todas las cartas
sis en las ext re m i dades i nfe­ cia. Y ahora, ante lo evidente
Bracamonte; 25 de Mayo 384, Río
recibidas. Dirigirse a: Mario Luis
riores, las q u e en l ugar de l uc i r del fenómeno Ovni, vue l ve re­
Cuarto, Prov. de Córdoba, Argen·
como p iernas semejaban a las trospectivamente a esta Fuen­ tina.
colas de los peces. te Antigua -para é l sagrada-
4- OVNIS
 CASUISTICA ARGENTINA
DOS EXTRAÑAS
HUELLAS
Por el Grupo CIVE
o
(Centro Investigador de Vida Extra­
terrestre. Dirección: Helg uera n9
761, Avellaneda, Buenos A i res, Ar-
gentina).
Estudio y eval u ac i ón de dos extrañas huellas aparecidas en u na finca próxima a Pigüé, Provincia
Existen a l g u nos episod i os
donde los efectos del fe nóme­
no Ovn i suscitan g ran perpleji ­
dad. Esos efectos, que a veces
esca pan a la lóg i ca hu mana, se
hiciero n presente en el aconte­
c i m iento vivido por la fa m i l i a·
Roque.
E n este evento contamos con
un princi pio de prueba fís i c a del
fenómeno (huel las, hongos, tie­
rra y h ie rbas carbon i zadas,
etc.) pero carecemos de lo q u e
llamaríamos evi dencia no físi­
ca, o sea, la visual izac ión del
objeto en s í. Este último hecho
es la ú n i c a d iferencia sustan­
cial que med i a e nt re el p resen­
te testimonio y tantos otros de
la casulstica m u ndial.
l. U N SONI DO. EXTRA�O
El señor Adri án Roque, s u­
mergido en l a l ectura del d i a­
rio bahiense " La N ueva P rovi n ­
c i a" , y Esther Argal d e Roque,
abocad a a sus quehaceres cu­
l i narios, fueron sobresaltados
y.:' �.
�,. ">:..·� '
f.
de Buenos Aires.
por u n extraño ruido, de tal
mag n i tud q ue la señora de Ro­
que corrió hac i a el patio de su
finca en b usca de la causa ori­
g i naria del pec u l i a r son ido.
A l salir, l o ún ico que observó
fue el nerviosismo de sus pe­
rros (más adelante haremos h i n­
capié en este últ i m o detal le). La
noche estaba tachonada de es­
t re l l as, rel uciendo l a l u n a en
cuarto c reciente. E ran las 22:1O
h oras del 20 de marzo de 1974.
" M ás q ue u n ruido -acota
e l señor Roq ue- fue como u n
s i l b i d o agudo que s e prolongó
por espacio de u n os 30 seg u n­
dos". "Descarto l a pos i b i l idad
d e un avi ón -añade n uestro
ent revistado- no sólo por la
naturaleza d timbre del sonido
percibido, sino también porq ue
det rás de m i estancia se alza
el cordón serrano de C u ra-M a­
l a l ,· perteneciente al s istema de
Ventan ia. Y debido a esta c i r­
c u nstancia -sub raya- todos
los aviones o avionetas q ue so­
b revuelan ese sector l o hacen
a una altura supe rior a los 2.000
metros, dado que estas s ierras
ya han cobrado n umerosas vi ­
das a n uestra aviación".
11. EL ESCENARIO
La estancia de los Roque se
encuentra ubicada sobre la ruta
nacional n9 33, k m . 126, a u nos
5 km de la ci udad de P i g üé,
colonia de franceses situad a ha­
cia el S.O. de la p rovi ncia de
Buenos Ai res, donde conviven
a l rededor de 30.000 h abitantes.
Sus riquezas g i ran en torno a l a
expl otación ganadera y agrí­
cola.
La tranquera de acceso d a al
cerro " E l Cajón" (que rec ibe es­
ta denominación por albergar
e n su cumbre un receptáculo
d e p iedra construido po r los i n­
d ígenas q ue habitaro n l a zona).
Detrás de l a fi nca aparece· ·31
ya citado s istema de Ventania,
c uyo punto m áximo es :a sie rra
de los Tres Picos, de u nos 1.260
m . de altu ra.
OVNIS- 5
111. PRIMERA HUELLA
Uno de ios investigad ores
del rreseí't� episo'iio es e! se-
f-1; .e�:, J-\n,':.)8. (co·respon-
de los pr.J-
n.
'.:',• v "¡::-,t,)
OdiO,\ El
�--
-·_,., e�t E·_·
sehc• A'IRVa nos GOrPunicó la
:-.=
p rod u cc•ón del caso, circuns­
tanc i a ésta que n os perm itió
60cm
80 cm
Fig. 1. Características d e una de las cuatro marcas que bor·
deaban la huella NC? 1 cada 90 grados.
ac u d i r p restamente al l u gar el
1 8 de abril de 1 974 y desc u b r i r
la p r i m e r a de l a s h ue l l as i nvo­
I L'cradas en el m ismo .
Se halla b a a u nos 1 80 me­
t ros de la finca de los Roq ue Y
a u nos 30 m. del camino de ac­
ceso a la casa . Este sector del
campo se mantiene e n un es­
tado de semi-virg i n idad, ya que
no ha sido arado desde h ace
bastante tiempo. La s u perficie
es l l a n a y l a n at u raleza del te­
rreno es rocosa. Al l í encontra­
mos pastos d u ros, ab rojos
(aperi oculum) y cardos (car­
dus).
El di ámet ro de l a h u e l l a era
de 5 m . y poseía en s u perife­
ria c u atro m arcas separadas
entre s í cada 90 grados. En s u
i n terior f ueron hall adas h ierbas
cham uscadas y trozos de car­
dos total mente q uemados y sec­
cionados, a parentemente co mo
consecuencia de l a acc i ó n de
u n a g rar. fue nte calóri ca. En
las figuras 1 y 2 hemos p recisa­
do las med i ciones p racticadas
a l as marcas en cuesti ón .
6- OVNIS
I V. SEGUNDA HUELLA
El segundo enc u es t 3 d o r de
este caso es e l señ or Ar1o 'l E.
Fcyná'ldez �.�"!.''Jr. rnie J'
r.:;c:ivc. c1e CiVÉ. E1 19 dt1 tt·c
··o del año en curso, en o ...•or
!unidad ae hallarse en la zona
en cuestión, se le i nformó del
descu b r i m iento de u n a seg u n -
'
1
,_
. ..-..J
da h u e l l a .
E n torno a l as ci rcunstanci as
que rodearon el hal lazgo de l a
m i sma, e l señor Héctor Ad rián
Roque (h) nos expresó !o si­
g u i en te: "Todo marchaba n o r­
malmente, hAsta q u e vi a l o le­
jos un gran c írcu l o azul p l omi­
zo . Para mí esta n o es u n a ex­
pe riencia novedosa. En di ciem­
bre de 1 973 había encontrado
dos m a rcas más, u n a de las
cuales aún es perceptible,
mientras q ue l a otra -de u nos
30 m. de d i ámetro- l a e nco ntré
en un terreno sembrado de sor­
go, ya l i sto para ser cosechado.
Esta últ i ma -pros i g u e el señor
Roq ue (h)- e ra extraordi naria :
se trataba de u n círc u l o perfec­
to en c uyo i nterior h al l é a l a
san g u i naria (san g u i n arius), m a­
leza ésta que se desarrol l a en
suelos du ros; pero no encontré
ni u n a sola p l anta del cereal
sembrado. Sus contornos esta­
ban perfe�tamente definidos por
los m i smos sorgos. Al parecer
el Ovn i , o lo que fuese, estuvo
a l l l en fecha m uy anterior a l a
d e m i descubrimiento".
"Volviend o a la marca q ue
nos ocu pa ( N D LR : segunda h ue­
lla). me extrañó sobremane, a
1ue mientras araba con u n élla·
io a d i scos (introducido s éstos
J ,é-� :!r:ma
1 profu;ld i dad del
,L "'10) a l pretender arar l a co­
r'-'r,¿ o borde del círculo, l os
discos sal i e ron total mente a l a
superficie en razón d e l a extre­
ma d u reza de ese sector del te­
rreno. Tuve q ue c l avarlos más
para poder romper l a tierra, lo
q ue conseg u í con gran dificul­
tad. Pero l o insól ito -añade el
señor Roq ue (h)- fue q u e tras
s u perar esa franja de 0,50 m.
de ancho, los discos se h u ndie­
ron fác i l mente en el terreno.
E l l o me h ace s u poner q ue só­
lo l a t i erra del a n i l l o perma ne­
c ía en ese parti c u l a r estado de
solid ez, siendo norm al o casi
normal en el i nte rior del m i s­
mo".
Esta huella se enco ntraba
u bicada a u n os 26 m . de la ruta
n9 33 y a no m ás de 85 m . del
c a m i n o de acceso a la vivienda.
Entre la pri mera y la seg u nda
h u e l l a había una d i stan c i a de
610 metros.
Las caracte r ísticas de este
seg u n do c ircu l o difieren del an­
terior, tanto e n aspecto como en
tamaño. Si bien ambos rastros
son c i rc u l ares el segundo pare­
era u n a suerte de corona o dos
a n i l l os concéntricos separados
por l os 0,50 m . de l a franja so­
l idificada. El diámetro del borde
exterior de esta ú l t i m a huella
era de 6 m. (Fig . 3) .
La m arca estaba ·bordeada
por n u me rosos hongos. Estos
son bastante c o m u nes e n ese
ti p o de zona a g ropecu aria, i n ­
c l usive e n cuanto a l vol u me n
q ue tenía n . E l ú n i c o aspecto c u ­
rioso estuvo dado por u n o de
e l l os q ue era de mayor t a m a­
ño y que, h abiendo aparecido
en l a periferia de l a h ue l l a"
cuando se i ntentó extraerlo se
des h i zo por completo. Es i m­
portante apuntar q ue los hon­
g os sólo s u rg i e ron e n l os bor­
des de las zonas afectadas por
e l fenómeno.
La franja de 0,50 m . se en­
contraba calcinada, a parente­
m e nte por efecto de una gran
fuente calórica. Posteriorm ente
fue arada y sembrada; y cuando
se acercó l a tem po rada de l a
cosecha -hacia mediados de
di cie mbre de 1974-, la fa mi­
, (El el eri1ento principal con
lia Roque comprobó que los
trigales de la corona o franja
eran entre O, 15 y 0,20 m . más
elevados que l os del inte rior y
exterior del círculo. Aparente­
mente al agente desconocido
qu� suscitó este fenómeno, no
sólo secó orig i nal mente la tie­
rra, sino q ue a la vez la abonizó.
V. COMPORTAMI ENTO DE
LOS PERROS
La señora Esther de Roq ue
nos refirió que --en la noche
del ruido- notó un desusual
comportamiento en sus tres her­
mosos ejemplares cani nos (Pas­
tor, Baby y Dia na). "Al sal i r al
patio -nos comen ta- obser­
vé que P astor y Baby e r an píe­
sa de un estado de desasosie­
go o ne rv iosis m o , acusando los
mismos s íntomas Di ana, q ue se
hal laba atada. Los tres an ima­
les l ad raban como enloq u eci­
dos. Pas tor y Baby se despla­
zaban de u n Jugar a otro miran:..
do hacia el cielo nocturno. Lo
curioso -nos aceita la señora
de Roque- es que a partir de
aq uella noche, toda vez q ue
pasa u n avión o una bandada
de pájaros orientan sus cabezas
hacia arriba, como esperando
ver n uevamente aquello que
verdaderamente les im presionó.
Antes, cuand o pasaban pájaros
o aviones --concl uye nuestra
e ntrevistada- no les p restaban
la menor atención ya q ue esta­
ban acostumbrados a ellos. Es­
te comportamiento q u i zá des­
carte la pos i b i l i dad de u n ae­
roplano o bandada de aves " .
VI. DATOS PERSONALES
DE LOS TESTIG OS
a) Esther Elena Argm de Ro­
que: argentina, de 6 1 años de
edad. Tiene cursado hasta el
tercer grado de la escuela pri­
maria y es madre de dos hi¡os;
b) Adrián Roque: argentino,
de 60 años. Ciclo primario com­
pleto;
e) Héctor Adrián Roque (h):
arg en t in o , de 43 años de edad .
Tiene estudios cursados hasta
primer año del ciclo básico co­
mercial (enseñanza sec u ndaria) .
Siempre han gozado de b ue­
na salud, tanto antes como des-
pués de estos hechos . No pade­
cen de enfermedades mental�s
n! afrontan problemas s.oelales
de ninguna fndole,
Nuestro crit, �rlo personal con·
respecto a la probidad de nues­
tros entrevistados es bastante
elevada. Nos inspiran confian­
za y pensamos que son co m­
p letamente s i nce ros .
VI l . - CONCLUSIONES
Cuando nos propusimos
abordélr el fenómeno Ovni, de­
jamos sentado q ue l a total idad
de nuestros estud ios e i nvesti­
gaci o nes estarian siem pre sig­
nados por la seriedad, la obje­
tivi d ad y el rigor científico. Es­
tas pre misas nos han llevado a
ser más bien escépticos q ue
c réd u los en t od o lo concernien­
te a la a p rec i ación de proban­
zas rel acion adas con el espec­
t ro fenomén ico q ue nos ocu pa.
E n consideración a ell o, juz­
gamos conveniente analizar el
p resente episodio e n función de
� · -------
i
1
1
�, ___ ,____
Flg. 2. Meclidas y asPQCto ge11eral ae la ht.elle NC? 1.
la eval uac ión de las pautas ne­
g at ivas y positivas q u e el mis­
mo trasunta. Asi:
a) Pautas Negativas
1 9) Ausencia de visualización
del fenómeno generador de las
huel las.
q ue se debe trabajar es el c uer­
po o fenórr,eno generador de
u na visión o de u n efe cto físico
denunc i ado. E n n uestro caso,
la falta de u n registro de este
tenor to rna m ás dific ultosa l a
i nvestigación y , p o r consi g u ien­
te, la concl usión a q u e p udiera
arribarse) ;
2'?) Falta de confi rmación " i n
situ" de la segu n d a h ue l l a .
(Las características d e l a m i s­
ma le fueron refe ri das por el
propio testigo Héctor Adrián Ro­
q ue ( h ) al señor An íbal E. Fer­
n ández M ayer, pero éste no pu­
do confi rmarlas "de visu " , ya
q u e en o portu n i d ad de s u i n ves­
tigación el área ya había sido
arada y cu l tivada) ;
39) Inexisten c i a de d i fere n ­
cias q u ím i cas en la tierra afec­
t ada .
( E l anál isis com parativo entre
una m uestra de tierra de la pri­
mera h u el l a y o tr a de un á rea
5 m
--- _, --,
no afe ct ad a , s i tu ada a 20 me­
tros de aquél l a, no arrojó dife­
rencias científica m e nte im por­
tantes. Aunque en descargo de
esta conc l usión debemos acla­
ra r q u e la muestra s u p uesta­
mente afectada se extrajo hace
ap roxi madamente u n año, m ien-
OVNIS ....... 7
tras q ue l a segunda lo fue hace
tan s ólo dos meses).
b) Pautas Positivas
1 °) Improbab i l idad de un
avión .
(Si bie n no es un hecho de­
terminante, debe tenerse en
cuenta que los testigos descar­
tan l a posib i l idad de un avión ,
e n co nsiderac i ón a l a altura e n
q ue éstos sob revuelan e s a zo­
na. El sonido percibido , de to­
dos modos, es un aspecto m e­
ram ente subjeti vo cuya n atura­
leza ú l tima no estamos e n con­
d iciones de ensayar ya q ue no
hemos sido oyentes del mismo.
Empero, entendemos q ue la
cond i c i ón de vi ejos trabajado­
res rural es de los testi gos, acos­
tumb rados a todo t i po de mani­
festac iones cam pestres como
consecuencia del mismo con­
tacto que mantienen con l a n a­
tural eza, les coloca en s ituac i ón
prefe re ncial para l a determ ina­
ción de cualq uie r ruido o so nido
extrañ o. La perpl ejidad de los
testimo niantes avala l a produc­
ción de un fenómeno fuera de
lo comú n) .
29) Resi duos cal cinados en l a
primera huella.
( Los cardos del i nterio r del
círculo estaban q uemados y
seccionados, mient ras que los
6m
5.50m
Fig. 3. La huella NI? 2 y su curioso aspecto anular.
8- OVNIS
de los alrededores gozaban de
vitalidad. Apare ntem ente h ubo
al l í una fuente calórica q ue no
se manifestó en l as demás áreas
de la zona) .
39) Esteril ización de tierra e n
l a segunda h ue l l a.
(En l a franja de 0,50 m del
anil l o sól o se encontró a la san­
guinaria, una m al eza q ue -co­
mo pl aga- pod ría haber sido
l _a c ausal de la ause ncia de
germinac1o n vegetal en esa
área. Pero seg ú n los ingenie ros
ag rónomos Roberto Antonio
Fernández y F rancisco Macri­
a quienes ag radecemos su va­
l iosa col2.bo rac i ón en el estudio
de este caso- l a sangui n aria
no c rece en círculos! ( U n a cu­
riosi dad de la natural eza?) .
49) Solidificación de tie rra de
l a segunda h ue l la.
( U n a fuente c al órica de gran
inte nsidad produce e l efecto de
solidificación de tierra; es l o
q ue ocurre -por eje m plo- en
la e l aborac i ó n del l adril l o de
barro. Nuestros testimoniantes
pre ndieron fuego en c írcul o?).
59) Ne rviosismo desusual de
los perros. ·
( La curiosa reacción acusada
po r estos animales i n duce a
pensar que fue ron afectados
po r un a v1si ón o ruido fuera de
l50cm
lo com ú n . Este tipo de efecto es
bastante frecuente en l a casuís­
tica ufo l ógica mundial).
69) Hongo desmesurado en l a
segunda huel l a.
(En uno de l os bordes de l a
segunda h ue l l a se descub rió -,
según apuntam os- un hongo
g i g antesco q ue n o g uardaba re­
l ac i ón con los demás de la mis­
ma especie q ue tam bién fl ore­
cieron en torno al c írculo. En
el info rme ren dido por l os pro­
fesionales precedentem e n t e
nom brados, se da cuenta q ue
el hongo en cuestión era de l a
especie "Basid i o m icete", cono­
c i do vul g arme nte como "hongo
de s o m b rero". A j ui c i o de los
m ismos, su vol umen exagera­
do pod r ía derivar de un a m uta­
ción operada en su espora. En
efecto, s i se hace incidir un ra­
yo ultravio leta sobre la espora
-y por ende en el ácido deso­
xirribonucleico ( D NA) , que está
principal mente en l os c ro moso­
mas del n ú c leo- se altera el
código de éstos, produciendo
anomal ías como la apuntada) .
79) Pro::ie ración de hongos
en los bordes de la segunda
hue l l a.
(Teniendo en cuenta l a cir­
cunstancia de q ue los hon gos
son alótrofos -son incapaces
de elaborar sustancias org�=mi­
cas , por cuyo motivo deben ab­
sorberlas ya fo rmadas- cabe
apuntar q ue po r tal razón el ti­
po "Basidiomicete" c rece siem­
pre cerca de un árbol o e n u n
l ug ar donde existe m ate ria or­
gánica. Esto l leva a indagar en
torno a l a existencia -en el
l ugar de la h ue l l a- de restos
de animales o veget::�les en es­
tado de descomposición. Pero,
por q ué en c írcul o ?
89) Poste rior c recimiento des­
mesurado del t rigal en la se­
g unda h ue l l a.
( E l in geniero agrónomo Ro­
be rto A. Fernández n os subrayó .
la posib i l idad de q ue se haya
operado en e l sue l o afectado
una fuerte abon ización q uími­
ca. De l a s upe rficie del anil l o
se recogieron 3 0 bolsas de tri­
go ( m ientras q ue para la m is m a
superficie -en área n o afecta­
d a- se cosec haron 1 2. Cada
bolsa equival e a unos 60 kg.) .

....
.· .
·. .
•
•• #
S
N SEGUNDA
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
a PIGÜÉ
Fig. 4. Plano general del S! ío de aparicion de 1as
La eval uación mesurada de eventual p roducci ó n , estimamos
las pautas positivas y negativas que p robable mente no pod re­
-no o bstante el n ivel cuantita­ mos reu n i r más antecedentes
tivo de l as pri meras- n os l leva que Jos recogi dos hasta el p re­
a conc l u i r q ue los elementos sente.
p robato rios reu n i dos no alcan­
NOTA DEL DIRECTOR DE
zan un g rado óptimo de acep­ "OVNIS UN DESAFIO A LA CIEN·
•
tac i ó n , al menos en Jo concer­ CIA"
n i e nte a l a hi pótesi s de la p re­
Es posible q ue la segu n da huella
sencia de un fenómeno Ovn i . del caso relatado precedentemente
Qu izá defraudemos l a s ex­ encaje dentro del c u rioso fenóme­
pectativas de las mentes fan­ no de los "an i l l os de hadas", pro­
tasiosas, pero e n tendemos q ue d ucidos éstos por hongos q ue se
el rigor c ientífico debe ante po­ d isponen en círcu los qua a umentan
anualmente su diámetro.
nerse a cualquier espec ulación En la superficie del a n i l l o n o
g ratuita. El caso no está ce rra­ crece vegetación en razón d e la
do, pero te niendo en c uenta el g ran toxicidad de esos hongos, Es
tiempo transcurrido desde su más, la propia coloración azulada
Cl
I:D
CA
CAMPO VIRGEN
\
HUELLA
. . . . . .
@
. .
.
.
a BAHIA BLANCA ____
nueuas.
que el señor Héctor Adrián Roque
advirtió en uno de los anil los es
debida a los m icelios de dichos ve­
getales, q ue se propagan en forma
s ubterránea.
Pero en honor a la verdad, cabe
apuntar que sorprende sobrema­
nera el s u r g i m iento súbito de ese
c írculo de hongos, c ircunstancia
q ue no con c i l ia con las particula­
ridades de los "an i l los de hadas".
De todos modos, y entendiendo
que debemos clarificar cientlfica­
mente el remanido problema de la
proliferación de hongos en supues­
tas huellas de Ovnis, publ icaremos
en n uestro próximo número un do­
cu mentado artículo de los france­
ses Claude Bourtembourg y Jac­
q ues Scornaux, referido precisa­
mente a los "an i l los de hadas".
0\o'NIS- 1
 CASUISTICA
ESPARA

OVNI Y HUMANOIDE EN
PUENTE DE HERRERA
Por el Grupo Charles Fort
(Dirección: López y Gómez, 1 2, Val ladolid, España)
(Reproducido de STENDEK, Barcelona, España,
n'? 1 1, diciembre 1 972, pp. 3-8. D irección: Apartado
282, Barcelona, España).

El presente caso fue i nvestigado por miem bros del g rupo "Charles Fort" de Valladolid en
marzo de 1972. El considerable retraso en la pu bl icación de esta interesante observación -que
hemos calificado con la m áxima puntuación de nuestra escala de valor (Peso)- ha sido motivado
por una serie de razones, que merecen ser sucin tamente consideradas:

19 La reducida incidencia ele aterrizajes con humanoides en nuestra casuística ibérica,

n os impelió a considerar que un caso de dicha índole -como es el que nos ocupa- era mere
cedor de un meticuloso y prolongado análisis.

29 La tendencia, m uchas veces difícilme nte controlable, que tenemos los investigadores
a aceptar sin reservas hechos que pueden confir.mar o al menos apoyar la hipótesis extraterrestre,
detrimentaba n uestra capacidad crítica y por en de la objetividad del testimonio; circunstancia
que recomendaba u n compás de espera con objeto de l iberarse de la carga emocional' que con­
lleva el enfrentamiento con estudios d e este tipo, y poder replantearse posteriormente los hechos
desapasionadamente.

39 Finalmente, las dificultades en la ela boración de los diversos elementos que comple­
mentan este estudio (fotografías, gráficos, etc.), en torpecieron secund ariamente su pronta publicación.

1- EL SUCESO sembrado de alfalfa q u e tenemos en la f i nca. Me

E l 1 6 de agosto de 1 970 ( 1 ), encontrándose
la señorita C. R . t rabaj ando como e m p leada de
hogar en la finca del Sr. Don Lu i s de D i ego,
u b icada e n l a locali dad de P uente de Herrera.
(Val ladoli d}, t uvo ocasi ón de p resenciar el i nsó­
l ito hecho q ue nos relató como a conti n uación
expone mos :
"Acababa de ver el p rograma de Televisión,
y en concreto la pelíc u l a de la noche de los
sábados "Centro méd i co", cuando me vi de
p ronto sorprendida por un i ntenso s i l bido, que
me p reoc u pó por l o anormal del m ismo dada la
ho ra. Al disponerme a sal i r , noté q u e la televi­
sión p resentaba alterac iones de la i magen por
lo que opté por man i p u l a r en los mandos del
aparato con objeto de mej orar la visión . Pese
a q ue toqué todos los " botones" no logré solu­
cionar las i nterferencias ; por tanto, y como ya
era casi l a hora del cie rre, apag u é el receptor
y me d i ri g í haci a la puerta que da al jard ín con
la i n tención de averiguar la causa del r u i do q u e
había oído. No pueden f i g u rarse cuál f u e m i
sorpresa al e ncontrarme q u e en la "carrilera",
se ha l l aba una " cosa rara" con varias l uces. y
cerca de e l l a aparecía u n ho mbre m i rando el
asusté m u c ho, por lo que volví a meterme e n
c a s a y cerré la p ue rta. A l rato, oí de n uevo el
s i lbido como al pri nci pio. Poco después m i ré
por l a ventana de m i hab itación y " aquello" ha­
bía desaparecido"
ll -ENCUESTA
Tras haber hab l ado i n i nterrumpid ame nte so­
b re s u experiencia y con vistas a lograr añad i r
más datos a la na rrac i ón p recedente, l e pl an­
teamos una extensa serie de p regu ntas q ue ha­
cemos constar a cont i n uación:
a) Datos generales
Pregunta.- ¿Qué t i po de alteración p resentó
la TV? ¿Afectó a la i m agen? ¿A! sonido?
Respuesta. - En l a panta l l a aparecieron mu­
c has rayas.
P. - ¿Se encontraba usted sola en el c halet?
R. - No, estaba acom pañada por la abuela,
es dec i r por l a mad re de Don Lu is. La S ra. oyó
los ru idos, pero no vio el OVNI.

10- OV�lS
 P.·- ¿En dicha fi nca no existían perros u
otros a n i males?
R. - Esa temporada sólo había dos caballos
q u e montaban los señores. Pero también hemos
ten ido ganado vacuno y perros.
P. - ¿Perdone que i ns ista, ¿había perros?
R. - No.
P. - ¿Notó usted s i g nos de i n q u i etud en los
caballos?
R. - No, pero tam poco pod ría haberme d ado
cuenta, ya q u e la cuadra q u eda un poco lejos (2) .
P. - ¿Cómo fue el sonido que usted oyó?
¿Varió en su i n tensidad?
Versión artlstlca dei·Ovnl de Puente de Herrera y de la flgüra antropomorfa vista en las proxlml·
dades del. mismo.
R.- Era como el de un sil bato. El s i l b i do duró
· todo el tiem po que estuve en el q uicio de l a
puerta, pero era menos intenso q u e cuando l o
o í desde dentro de l a casa. D espués poco antes
de volver a m i ra r desde l a ventana; se hizo tan
agudo como al principio.
P. - ¿Qué tiempo transcurrió desde q u e Sé..
l i ó y vio el OVNI hasta q u e volvió a cerar l a
puerta?
R.- Estuve sólo una "pintina" y me metí en
seg ui da.
P.- ¿En cuánto eva l ú a usted el tiem po q u e
separó e l pri mer s i l b i do del seg u n do ?
R . - Pues c reo q u e e n 5 ó 6 m i n utos , y a q u e
·
hice varias cosas. (3).
P. - ¿Qué d i stancia existía entre el OVNI y
el chalet?
R. - U n os 30 metros aprox i m adamente.
b) Datos referentes al Objeto
P. - Si el o bjeto lo compara con un coche
"Seat 850" colocado lateralmente, ¿sería m ayor,
menor o i g ual ? (4 ) .
R. - Casi igual.
P. - ¿Qué altura tendría el pl ati ll o" ?
"
R.- Llegaría a l a m is m a altura q u e los árbo­
l es recién P.l antados que había en la fi nca . . .
P. - Expresándo l o en m etros, ¿cuáles serían
las di mensiones reales del OVNI?
R. - Unos 4 metros de ancho, por cerca de
2,5 de altura. De el los u nos 60 cms. correspon"'
OYWIS- Jl

� .t\���
ff
1'
VA L L A D 9 L I D
Area correspondiente <�1 s u ces o en Puente de Herrera.
d ía n a i as p atas y e l resto al 2 r m a z ó n y la c ú p u l a .
P. - ¿ Q u é f o r m a t e n í a e l o b j et o ? ¿ Po d r ía
dibujarlo?
R . - S í , se l o p u e d o d i b u j a r .
P. - E n su g rá f i c a . n o s m u est r a u n OVN I d e
f o r m a e l i ps o i d a l , s u st e n t a d o s o b re v a r i os sopor­
tes y c o r o n a d o p o r u n a c ú p u l a s e m i es fé r i c a .
¿ Pod ría d e c i r n os de q u é c o l o r era d i c h a c ú p u l a ?
R. - C o m o d e c ri s ta l . Cas i t r a n s p a re nte .
. .
P. -- ¿ Q u é c o l o r t e n ía l a est r u c t u r a e l i ps o i d a l ?
R. - E ra d e c o l o r p l atead o .
P . - ¿ S e e n c o nt r a b a e l O V N I s u s pe n d i d o e n
e l 2 i re , o b i e n estaba p o s a d o d i rec t a m e nte s o b re
el s u e l o ?
R. - Y o c reo q ue estaba s o b re u n a s patas
q u e se a poyab a n sobre el c e m e n to d e l a "ca­
rrilera".
P. -- ¿ P resentaba 8 : g u n a l u z ? En c as o a f i r­
m a t i v o , ¿ po d r ía desc r i b i r l as ?
R . - S o b re l a c ú p u l a p resentaba u n a l u z d e
c o l o r b l a n c o-az u l a d o q ue g i ra ba , p e r o n o d e f o r-·
m a c o n t i n u a : d a b a u na v u e l t a , se p a rab a , d a b a
otra . A d e m ás , l a vP i o c i d a d d e g i ro e r a bas­
tante l e nt a . Al ir d e s ce n d i e n d o l a veloc i d ad , d i s­
m i n u ía l a i n te n s i d c: d d e la l u z , pero el foco n o
s e a pa g ó e n n i n g ú n m o m e nt o .
P. - ¿ S o b re e l e l i ps o i d e h a b ía a l g u n a l uz ?
R . - S í . h a b ía va r i os f o c os d e v a r i a d os c o l o­
res y de m e n o r i a m a ñ o q ue e l a n te r i o r . C re o
q u e eran b l a n c o s , m or a d o s . y a m a r i l l en tos
P. - ¿ Es t a b a n l as l u ces e n l í n e a o d is tr i b u í­
d as i r reg u l a r m e n te en l a estru c t u ra d e l OVN I ?
R. - Estaban e n f i l a . f o r m a n d o u n a l i n e a a l ­
r e d e d o r d e l objeto.
P. - ¿ Po d r í a c o n c retar sobre c u ántos sopor-
tes se a poya b a e l OVN I ?
R. - No s a b ría d e c i ri o c o n exact i t u d .
P . - ¿ La c ú p u l a o c a b i n a g i ra b a o estaba fij a ?
R. ·- E s t a b a f i j a . L o q u e g i ra b a e r q l a l uz q u e
1 2 - OVNIS
estaba s o b re e l l a , c o m o ya les he d i c h o.
P. - ¿ No t ó s i e l o b j eto presentaba a l g u n a
p u e rta o esca l e r i l l as ?
R. - N o v i n ad a , pero pod ría estar detr3s.
f u e r a d e mi vista.
e) D atos referentes al ocupante
P. - ¿ C u án tos o c u p a ntes o bservó ?
R. - Yo s ó l o vi u n o q u e estaba f u e ra d e l
" p l ati l lo " . D e n t ro d e l a c a b i n a n o v í a n a d i e .
P. - ¿ Q u é d istan c i a s e p a r a b a a l OVN I d e s u
tripul ante?
R. - 3 ó 4 m et ros.
P. - ¿ Po d r ía desc r i b i r l o ?
R . - M e p a r e c i ó u n h o m b re d e 1 . 8 0 metros
de a l tu r a . I b a vest i d o con u n traje c e ñ i d o os­
c u ro de c o l o r n e g ro o azul m a r i n o . La c a beza
�
la te ía c u b i e rt a por un g o r r o aj ustado del m i s­
mo c o l o r q u e e l resto de l os vest i dos. Al reded o r
d e l as m u ñecas y t ob i l l os t en ía u n a e s pec i e d e
�
" p u lseras" d e c o l o r b l a n c o b r i l l a n t e . T a m b é n
te n ía e n l a p a rte m e d i a d e l a c i n t u r a u n a he b 1 l l a
-creo q u e sería d e l ci n t u r ó n- c u ad r a d a , d e l
m is m o c o l o r q u e l as m u ñe q ueras y t o b i l l e ra s .
P. - ¿ P u e d e d a rn o s a l g ú n deta l l e respecto a
l a cara?
R. - N o .
P. - ¿ T a m po c o se d i o c u e n t a s i e l c o l o r d e
su p i e l era b l a n c a , n eg r a o a m a ri l l a ?
R. - C re o q u e l a c a r a era c l a ra .
P. - ¿ T e n ía c a b e l l os ?
R. - N o l o s é , y a q u e n o s e l e v e í a n .
P . - ¿ P o d r íc: h ac e r nos u n a desc r i pc i ó n com-
p l eta d e la a c t u a c i ó n del h u m a n o i d e ? .
R. - C u a n d o yo le vi estaba de p1e m 1 ra n d o
c o n ate n c i ó n e l c a m p o d e a l f a l fa . No s e a g a­
c h ó s ó l o m i raba a su a l re d e d o r . Después, l e vi
�
a n d r e n d i recc i ó n a l " p l at i l l o " , pero n o l e vi
s u b i r y a que e n t o n c es c e r ré l a puerta.
P. - ¿ A n d a b a como una p e r s o n a n o r ma l ?
¿ Obse rvó a l g ú n defecto o d i f i c u l ta d e n l a m ar­
c h a ? ¿ B race a b a ?
R.- A n d a b a n o r m a l m e nte. D a n d o g ra n d e s pa­
sos .. . Sí, l as " z a n cad as" me p a r e c i e r o n bas­
tante l a rgas. Los b razos los m o v í a c o m o c u a l ­
quier person a .
P. - ¿ C ree usted q u e e l h u m a n o i d e l e v i o ?
R. - C r e o q u e n o . A d e m ás n o estaba a s o m a­
da . . . Yo sa l ía d e re c h a para baj a r l as escal e ra s
d e l c h a l et pero a l v e r "eso" m e v o l v í h a c i a atrás
y me q u e d é m e t i d a e n casa, a s o m a n d o s o l a m e n ­
te l a c a beza . . . P o r o t r o l a d o l as l uces d e l a
e n t ra d a est a b a n ? p a g a d a s , y a q u e t e n g o p o r
cost u m b re h a c e r l o t o d o s los d ía s e n t re l a s 1 0,30
y 1 1 h o ras d e la n o c h e . Por e l l o no creo que se
me viera desde d o n d e estab a .
d ) Datos referentes a rastros físicos o huellas
P. - ¿ Dej ó el o bjeto a l g ú n t i po d e h u e l l as o
m a rcas e n e l l u g a r de ate r r i z aj e ?
R. - Sí.
P. - ¿ Có m o e r a n las c itadas h u e l l as ?
R . - C u a n d o m e a s o m é e n l a s e g u n d a oca­
s i ó n desde la v e n ta n a , se veía p e rfecta m ente
 C o m o a u t o c r ít i c a a l a m etód i c a d e e n c uesta
podemos d e c i r q ue c o me t i m o s e l e r r o r e n a l g u ­
q ue e n el l u g a r en q u e h a b í a estedo posado e l

n a o c a s i ó n d e h acer preg u ntas s u gestivas, l a s

O V N I toda l a z o n a b r i l l a b a u n i fo r me m e n te . P o r

c u a l es. c o m o d i c e e l D r . V 2 l lejo N ág e r a (5) . pre­

l a m a ñ a n a , ya de d ía , e n e l m i s m o s i t i o a p a re­

fijan l a res p u esta e n personas s u gesti o n a b l e s .

c ía n c l a r e m e n t e m arcas d e p i s adas d e c o l o r
n e g ro.
P. - ¿ De qué f o r m a e ra n l a s h u e l l a s d e l as
p i sa d as ? ¿ C u ántas h a b í a ?
R . - Semej a b a n u n p i e h u m a n o . C o m o u n
zapato ; más exac t a m e n te e n f o r m a d e b o t a . c o n
e l t a c ó n más estrecho q ue l a p a rte d e l a n tera
d e l a suela. E n esta ú l t i m a h ab ía g ra b adas u n as
rayas o b l ic u a s . Su n ú m e ro no las c o n t é . P e ro
h a b ía v a r i a s p i sa d a s .
P. - ¿ N o e nc o n t ró n a d a l l a m a t i v o s o b re l a
t i e rra c o l i n d a n t e ? ¿ H ie r b a a p l astada o q ue m a ­
d a ? ¿ A l g ú n a r b o l ito, t ro n c h a d o ?
R. - E l OVN I tend r ía q u e p i s a r tam b i é n l a
t i e r r a , pero y o so l a m e n te v i l a s h u e l i as s o b re
el c e m e n t o .
N o o b s t a n t e . t a l d e f e c to s e c o m e t i ó ú n i c a m e n te
a i g r a b a r m a g n é t i c a m e nte l a c o n ve rsa c i ó n , y e l l o
s e efectuó d e s p u és d e h ab e r h a b l a d o a n t e r i o r­
m e nte c o n l a test i g o , u t i l i z a n d o en e l i n te r r o g a­
.
t o n o s o l a m e n te p re g u n tas n e ut r a s . P o r t a n to .
c reemos q ue no i nv a l i d a n l a e n c u esta , ya q u e l a
g r aba c i ó n f u e c o n f i r m a c i ó n o r e p e t i t o r i o d e l a
c o n versa c i ó n m a n t e n i a a p r ev i a m e n te .
I V - EL LUGAR D E LOS H E C H O S
La f i n c a e n q ue se p ro d u j e ro n los a c o n te c i ­
m i e n tos n a rrados está s i t u a d a e n l as afuer as
de l a l oc a l i d ad de P u e n t e de H e rrera, prov i n ­
c i a d e Va l l ad o l i d . D i sta ex 3ctamente 1 1 k m s . 600

mts. de esta ú lt i m a c a p i ta l . esta n d o u b1 c ad a en

P. - ¿ Las v i o a l g u i en m ás ? ¿ C u á n t o t a rd a r o n
e n desaparec e r ?
l a c a rretera M a d r i d - Le ó n .
R. - L a s m a n c has l as v i e ro n t o d as l a s p e rso­
nas q ue e n t r a b a n a la f i n c a , pero como yo no Tod a l a reg i ó n está m c l u i d a e n l a l l am ad a
conté n a d a , no l es d i e r o n i m p o rta n c i a . Las p i sa­ " zo n a de rive ras " . E l p u e b l o , a u nq u e a g r íc o l a ,
posee r i cos c u l t i vos d e rega d ío a provec i 1 a n d o
e l a g u a a e l r í o D ue r o y a b u n d ante vegetac i ó n
d as t a rd a ron va r i os d ías e n d e s a p a r e c e r y c o m o
y a h e d i c h o d e n o c h e re l u c ía n .
d e espec i es d e r1 0j as res i n osas.
L a l o c a l i z a c i ó n d e l a c i t a d a f i n c a e n la c a r re­
P . - ¿ N o e n c o n t ró a l g u n a h u e l l a c i rc u l a r ?
tera d e S e g o v i a ( M a d r i d- Le ó n ) y l a fac i l i d a d c o n
R. - N o . D u r a n te e l d ía s ó l o s e \·e r a n l as p i s a ­
d a s de c o l o r n e g r o . Y p o r l a n o c h e re l u c í a e l
q u e c � a l q u i e r a u t o m o v i l ista p u e d e v i s u a l i za r e l
s u e l o p e r o n o " a m a n c h a s " , s i n o todo é l .
i nterior de la m is m a . nos i m p ulsó a i n dagar e l
v o l u m e n d e l t rá f i c o n o c t u r n o . L a m e n t a b l e m ente
111 - LA TESTIGO
s ó l o p o d e r.1 os a p o r t a r e i índice d e i nt e n s i d a d
media del trá7ico d i ario por l a citada ruta, q u e
e s d e 1 . 000- 1 . 999 v e h íc u l os c a d a 2 4 h o ra s .
Se trata d e una m u c h ac h a de 22 a ñ os a ñ o s ,

Es i m porta n te q u e señ a l emos q u e a u nos 1 00

e m p l e a d a d e h o g a r , p rofe s i ó n q u e ejerce d e s d e
t e m p r a n a e d ad . S u n ivel c u l t u ra l es m u y d e f i ­
mts. d e l c h a l et e x i s te u n tend i d o e l é c t r i c o d e
1 3,2 Kw.
c i e nte ya q u e n o h a c u rsado l os años correspon­
d i e ntes a la e d u c a c i ó n p r i m a r i a . Es p o r t a n to
a n a l fabeta y d e s c o n o c e l as c u atro reg l a s e l e­ La d ista n c i a e n t re la p ro p 1 e d a d y el río D u e ro
mentales. es de 300 metros a p rox i m ad :1m e nte.
D u ra n t e l a e n t revista s u act i t u d v a r i ó d e u n
rec e l o i n i c i a l a u n a b u e n a c o m u n i c ac i ó n í nt e r­
perso n a l , a c e p t a n d o s i n p r otestas n uestra s u g e­
re n c i a de g r a b a r l a e n trevista e n c i n t a m ag ne­
tofó n i c a .
N o o b s t a n t e , t o d a n uestra c o n v e rsac i ó n estuvo
p res i d i d a por la t e n s i ó n y la a n s i e d ad q ue l a
r e m e m o r a c i ó n d e l o s a c o n te c i m i entos p r o d u c ía
e n l a testi g o .
P oste r i o r m e n te , t u v i m os c o n oc i m i e n t o a t ra­
vés d e s u s fa m i l i a res d e q ue a l m ar c h a r n o s
t u v o u n a reac c i ó n h i ste ri fo r m e , c a racte r i z a d a
p o r u n a b u n d a n te l l a nto y p rotestas a s u c u ñ a d o
"��
'
l b' S
fB
"J..
p o r h a be r c o m u n i c a d o e l su ceso a n u estro
centro.
e
La e n c u es t a estuvo l ó g i c a m e nte d i f i c u l ta d a a
l a h o ra d e l i nterrogatorio s o b re l o s datos d e
t a m a ñ o , c uyas m e d i das s ó l o p u d i e r o n s e r obte­
n i d as d e forma c o m p a ra t i v a c o n objetos d e uso·
común.
As i m i s m o , s u l i m i t a d o l éx i c o l a o b l i g ab a c o n

Croquis del inll:: rio r de la finca: 1) Terraza : 2) Garaje;

frec u e n c i a a e x p resa rse gest u a l m e n t e . C o m o ·
d ato a n e c d ó t i c o c i ta r e m o s e l h e c h o d e q u e <'1 1 . ¡ 5) Sembrado de alfalfa¡ a} Testigo;
b) Lugar de atemza¡e¡ e) Humanoide.
3) Cuadras¡ 4) Pts� m �
desc r i b i r n os e l m at i z d e l s i l b i d o esc u c h a d o . o ptó
p o r lé! i m i t2 c i ó n o n o m ato p é y i c a como forma
más ase q u 1 b l e a s u e x p l i c a c i ó n .
OVNIS - 13
 La d istri bución de l os edificios en el i nterior
de la finca puede ser o bservada e n el g ráfico
B. Por ello no entraremos en detal les. U n icamen­
te haremos constar que l a finca se encuentra
val lada en todo su perímetro.
La carretera de entrada a la finca tiene un an­
cho aprox i m ado de 4,50 mts. y se encuentra
flanq ueada por árboies de peq ueña altura como
puede observarse en las fotografías q ue adj un­
tamos (6).
V - CONCLUSION
Tenemos l a convicción de que las hab i tua­
les exp l i cac iones q ue se emplean al i ntentar
aclarc:r hechos de esta índole, como : l a presen­
cia de un vehículo convencional (helicóptero)
o l a i n cidencia de una alteración de la sanso­
p e rcepción del testi go, en este caso son i n ad­
m i s i bles, dadas las pec u l i ares caracte r ísti cas
del obj eto avistado de un l ado y la p resencia
d i u rn a d e rastros físicos q ue por s í m ismos ex­
cluyen la pos i b i l idad de un fenómeno a l u c i n ato­
rio o de una s i m ple i l u s i ó n .
No podemos o l v i d a r a l a h o r a de dar créd i to
al p resente test i m onio l a proba b i l i d ad de u n
fraude vc l u ntario o i n vol u ntario (fabulación). El
fraude volu ntario es descartable por l as s i g uien­
tes razo r es :
1
Analfabetismo d e l a testigo que l a i m po­
- (?) E l h u m a n oide observado corresponde al Tipc 1, varian­
sibil ita u rd i r una hi storia de esta com plej i dad.
Tampoco consideramos q ue la i nformación que
sobre el tema poseen los restantes m iem b ros
de la fam i l i a sea suficiente como para que l a
Srta. C . R . haya a portado e n s u decl arac i ó n
datos t a n prec i sos y por o�ra parte constatados
en otros casos de aterri zaj e .
2 - Ausencia de una motivac ión concreta
(afán de publ icidad, broma, etc . ) . A este res­
pecto, es i m portante q ue sub rayemos que l a
testigo ú n i c amente comun icó su observación a
s u n ovio y q u e i ncl uso su fam i l i a descono­
c i ó l os hechos hasta m arzo de 1 972, e n que
de forma fortuita l a testigo na rró su experien­
cia a su c u ñado, cuando éste hizo u nos comen­
ta.rios s u perficiales sobre el fenómeno OVNI.
Creemos q ue no tiene tampoco n i n g u n a base
consistente en q u é apoyarse l a posi b i l id ad de
una fabulac i ó n o de una m itomanía d ado que:
1
- E n s u biografía consta que es u n a perso­
na s i ncera.
2 ---:- En n uestra encuesta n o log ramos, pese
a n uestros reiterados i ntentos, captar n i n g u n a
contrad i cc i ó n o i ncoherencia e n sus afi rma­
ciones .
Basándonos e n este hecho testi monial , c uy a
veraci dad consideramos está fuera de toda
d iscusión , concl ui mos que nos h al l a m os ante
u n genuino caso de aterrizaje de un Objeto
Vol a nte N o I dentificado con presencia de h u­
m an oides.
Creemos que tampoco es descabellado e m itir
seriamente la h i pótesi s -si n posi b i l idad obvia­
mente de corroboración- de q u e el c itado OVN I
se tratase e n vi rtud de s u s pecul i aridades y d e
l4 - OVNIS
la p resencia de u n tripulante, de u n verdadero
VED (Vehículo Extraterrestre D i rig ido) (7}, (8).
G rupo "Charles Fort" de Val l adolid.
Artículo: J . M ac ias y Angel Barrigón.
Investigación : E n ri q ue Bueno, Santiago Mella
y J . Macias.
G ráficos y dibujos : Fernando Lorenzo.
NOTAS DE L OS AUTORES
(1) Creemos q ue es la fecha exacta, ya que la testigo
recordaba q ue el suceso se produjo entre dos d ías festivos
del mes de agosto (sábado-domingo), es decir en la noche
(2) Las caballerizas distan del chalet u n os 50 metros.
entre el 15 y el 16 del citado mes.
(3) En virtud de su "tiempo psíq u ico o subjetivo enlen­
tec ido por la situación de ansiedad y temor, creemos que
l a vivencia del tiempo transcurrido pudo haber sido erró­
nea y por tanto no coincidir con el tiempo objetivo.
(4) Utilizamos este térm ino comparativo por ser éste el
vehículo del propietario de la finca, e l cual estaba acos­
tumbrada la testigo a ver circular por "la carrilera" de
acceso a la mansión.
Nágera, pág. 20.
(5) " Introducción a l a Psiqu ;atría". Dr. J . A . Vallejo­
(6) La mayor parte de los datos i n c l u idos en este apar-
tado han sido obtenidos del l ibro "Estructura y perspectiva
?e desarrollo económico de la provincia de Valladolid",
éditado por el Consejo Económico Sindical Provincial.
te 1 (T1 .V1 ) de la clasificación de J ader U . Pereira.
STENDEK 05, j u n i o 1 971.
(8) La abundancia de aterrizajes recopi l ados por n uestro
Centro en las cercanías de la l ínea BAVIC a su paso por
la península, y la circunstancia de no haber existido en
ninguna de las provincias por ella atravesada centros ufo­
lóg icos hasta 1 969 (Grupo "Charles Fort" en Val ladolid -
Burgos), hace necesario volver a rep lantearse el análisis
g lobal de la casuística de aterrizajes ibéricos, pues cree­
mos que , la m uestra u t i l izada en los estudios pretéritos
no es representativa.
NOTA DEL DIRECTOR DE
"OYNIS • UN DESAFIO A LA CiENCIA"
Adviértase la notable coincidencia que guarda la
fosforescen c ia de la huella de este episodio con el
anillo de Delphos, U.S.A., correspondiente al caso
narrado en "Ovnis Un Desafio a la Ciencia", Nros.
•
2 y 3, pp. 22-25 y 26-33, respectivamente.
Igual considera.ción para la luminiscencia de las
h uellas de pisadas denuncfadas por el senor Enri­
que Moreno, en oportunidad del pQBterior rastreo
del lugar en que habla visto una entidad antropo­
morfa en Santa Isabel, Argentina. ("Ovnis - Un De­
safio a la Ciencia, NQ 3, pp. 21 -27).
•-LUMIERES DANS LA NUI'r'
(Revista mensual f':n francés)
ux,es Pins" 43400
• Ls Chambon · sur ·
Lignon - France
( GRUPOS UFOWGICOS
ARGENTINOS
( Con miras a posibilitar un e6-
tudio cen.:>al ü-e entidades ufo­
lógicas argentinas, invitamos a
los clire-:tivos de 1as mi..."Dlas a
proporcionarnos nombre ry si­
gla de sus respectivos Grupos,
cuadro constitutivo, sede y/o
periodicidad de ésta ) .
dirección postal, publicación y
-CEFAI (Centro d e E s t udi os de
Fenómenos Aéreos ! nusuales). En·
tidad privada sin fines de lucro, cu­
yo objetivo es la investigación y
análi si s científico de los fenóme­
nos al"ómalo:o designados corrien­
temente con el término Ovni. Pu­
blicaciones: a) Seriadas: Trabajos
monográficos varios (hasta 1974 se
han editado 6 folletos); b) Perió­
dicas: "Cefai Revista" (boletín se­
mestral). Todas estas publicacio­
nes se distribuyen gratuitamente .
Directores : P rof . Osear A. Uriond o,
Roberto E. Banchs y Pro !. Osear
Sardella. Dirección: Casilla de Co­
r�eo n'? 9, Sucursal 26, Buenos Ai­
res, Argentina.
-LIVE (Uga de Investigación de
la Vida Extraterrestre). Entidad
privada fundada en 1973 y que in·
vestiga el problema Ovni y la Vida
Extraterrestre en forma metódica y
objetiva. Publica un boletín bimen­
sual de distribución gratuita, rotu­
lado "La I n cóg nita del Hombre".
Director: Luis E. García Fan:o; Co­
ordinación y Dibujo: Claudia J. Gar·
cía Fanlo; Culturas Antiguas: Fi·
lonzi; Exobiología: Luís E. García
Fanlo; Secretaria: Susana Meona;
Ovnilogía: Horacio Cassia; Corres­
ponsal en EE.UU.: Jorge Mazzocco.
Dirección: Murillo 648, 1 er. p.,
Opto. F, Cap. Federal, Argentina.
-CEVE (Centro de Estudios sobre
Vida Extraterrestre). Entidad sin
fines de lucro, fundada el 14 de no­
viembre de 1974 y dedicada al aco­
pio y evaluación de d atos sobre
el fenómeno Ovni. Integrantes: Juan
Carlos Pérez, Laureano R. Castaño,
Sergio Quiben, Raúl Colón, Jorge
E. Outeda (Corresponsal en Vene­
zuela).
Dirección: Aristóbulo del Valle
1861, Vte. López, Florida, Prov. Bs.
Aires, Argentina.
-CISOVNI (Centro Investigador So·
bre Objetos Voladores No lden·
tificados). Grupo privado constituí­
do por estudiantes secundarios ase­
sorados por profesores interesados
en el tema Ovni. Presidente : Jorge
Medina ; Jeie de Investigaciones
Científicas: Jorge Carbajo ; Se<:reta­
rio: Pablo N. Sabatini.
D i rección: Colegio Nacional,
Quintana 84, Tres Arroyos, P r ov. de
Buenos Aires, Argentina.
-DISO (Departamen�o de I nvesti-
gaciones Sobre Ovnis). Grupo ju·
venil fundado el 31 de enero de
1973, dedicado de lleno al estudio
científico de los Ovnis. Publica un
boletin bimestral gratuito llamado
"Bogey".
Dirección: Calle 68, n'? 1224, La
Plata, Buenos Aires, Argentina.
-Grupo J U PITER. Entidad privada
dedicada al estudio de los obje­
tos voladores no identificados.
Dirección: Tuyuti 3641, Valentín
Alsina, Lanús, Prov. de Buenos Ai­
res, Argentina.
-COIFE (Centro de Observación
e Investigación de Fenómenos Es­
paciales). Entidad constituida por
u n entusiasta grupo de jóvenes es­
tudiantes cuya edad oscila entre
los 14 y 18 años.
Dirección: Italia 1320, Rosario,
Provincia de Santa Fe, Argentina.
-CLUB DEL COSMOS. Grupo par-
ticular dedicado al estudio de los
misterios del cosmos, los Ovn is, la
astronomía, la vida extraterrestre
y ternas afines.
Dirección: Rivadavia 180, Río
Cuarto, Prov. de Córdoba, Argen­
tina.-
-SIFO (Sociedad Investigadora del
Fenómeno Ovni). O rganismo pri·
vado dedicado al estudio del pro·
blema Ovni y ramas conexas.
Dirección: Sergio Alejandro Biels­
ki, Av. Juan B. Justo 748, Córdoba
Argentina.
OVNIS - 15
CASUISTICA

UN MISTERIOSO OBJ o s
n9 5, j un i o 1 971 , pp. 22-24. D i rección : AfJarlado 282,
(Reproducido de STENDEK, Barcelona, España,

(Barce lona, España).

16- OVNIS
 Por el Grupo CEONI
(Este grwpo español -Círculo de Estud ios sobre
Objetos Voladores N o Identificados- fue d isuelto
recientemente, a u n q ue. varios de sus ex i ntegrantes
·
--entre el los e l · renombrado anal ista Vicente J uan

) SUBMARINO
Bal lest�r Ol mos - prosigue n i n d ividualmente la. l ínea
investiWativa oportunamente trazada desde ese
centro)

l UN CILINDRO EN EL LECHO MARINO

12,
la, -

El d omingo 26 de j u l i o de 1 970, alrededo r d e

l as trece horas, u n j oven submarinist a de 24
años da edad se encontraba practi cando la pes­
ca subacuática en Alcocebre (provi ncia de Cas­
tellón de la P l a n a), en un p u nto sttuado a 39 58 '
40" Este y 409 1 4' 45" No rte frente a l a u rbani­
zac i ón " Las Fuentes " . El lugar ten ía de 8 a 1 0
metros de fondo bari métrico y se encontraba a
u nos 60/70 pl e!fos de la o r i l l a de la p l aya .
El fondo de esa zona es de arena m uy f i n a y
de espolones rocosos s u avemente erosio nados.
Como es normativo en España para l a pesca
submarina, no utili zaba botel las de a i re compn­
m i do (Atwa-lang).
A cierta d i stancia. de donde se enco ntraba,
observó b aj o el agua un extraño obj eto m etál ico
que sobresal ía por enc i m a d e un es polón roco­
so, lo cual h i zo q u e se acercara al m ismo.
Entre dos de estos es polones , d istantes u nos
9 metro$, desc ansaba sobre el fondo, p rod ucien­
do un aplasta m i ento de un palmo sobre l a arena,
un o bjets;> c i l índ rico con una extrem i dad l i gera­
mente cónica y de u nas di mensi ones aprox i m a.­
das de 1 metros de largo por 3 metros d e d i á­
m etro. El extremo op uesto, q u e era algo con­
vexo, m i raba mar adentro. Cerca de s u extremo
cónico y en la parte s u perior de su su perficie
p resentaba u n a solución de conti n u idad de al re­
dedor de 1 centímetro de anchura y 2 cent íme­
tros dé pr.of u n d idad, e n form a de ci rc unferencia.
Esta �ra seg u ía el contorno c i rc u l a r d el
c i l i nd ro y e n marcaba u n c írcu l o de 1 m et ro de
d i ámetro El extremo convexo estaba c i rc u nva­
lado por otra ran ura s i m i lar.
. .

Este objeto ten ía u n a s u perficie m etá l i ca , pu­

lida, de· e� color pareci d o al acero i noxidable
m ate. �ec ía de remaches o algo parec ido y
s u aspecto no era de haber permanecido m ucho
tiempo bajo el agua, p u es no tenía depós itos
calcáreos, abollad u ras, ni se encontraba oxi da­
do, calculando que no llevaba all í ni una semana,
por estar tota l mente l i m p i o y des p rovisto de
i n c rustaciones.
El buceador pudo comprobar que dicho obje­
to n o era mag nético, porq ue al acercarie s u
c u c h i l l o {normalmente i mantado) n o se p rodu­
cía efecto alguno. Con este c u c h i l l o i ntentó ra­
yar la superficie d el obj eto, pero n i ng u no de los
dos fue rayad o. Las med idas del obj eto fueron
real i zadas s i rviéndose de s u fusil s u bmarino.
Comentando con el b uceado r la teoría d e q uE:'
p u d i era haberse tratado de u n d epósito de resi­
d uos i nd ustriales , rad i activos, etc . , nos i nd ic ó
n o poder afi rmar n i n egar nada, p o r desconocí-

OVNIS - 17

l· 3m. d ia. ¡
..
--r-
-
7m.
· m ás de 1 O seg u ndos. No oyó tam poco n i ng ú n
o ( Im.
_L
Vistas superior y lateral de l obj e to submarino.
m i ento; s i n em bargo, repitió enfáticamente q ue
se hu b i era necesitado " u n g ran tem poral" para
moverlo de allí, con la ca racter ísti ca de "mar
de fo ndo", el cual era tota l m ente i nexistente
esos d ías. Por otra parte, la pendi ente marina
es m ín i m a o p rácticamente n ula en ese lugar,
lo cual n os i n d ica el g rado de d ific ultad para
que el obj eto s e arrastrase por s í solo.
E l s u b mari n ista trató de m over el objeto sin
éxito, recalcando el hecho d e q u e en ese el e­
m ento -el ag ua- es casi i m posible hacer
fuerza o pres i ó n , i ncluso con u n p u nto de apoyo.
E l s e a poyó en u n a roca (en uno d e l os espo­
lones, el q u e se encontraba más cerca), pero
n o hizo efecto en el objeto submarino.
Ta m b i én n os hizo n otar q u e el obj eto n o des­
ped ía ruido alg u n o y q u e carecía de c u a l q u ier
otra particularidad .
El testigo n o· p u ed e dec i rn os e n absoluto
c uá nto tiempo permanec i ó baj o el agua exami­
nando el objeto. Nos rec uerda q u e " b aj o el
agua se p i erde com pletamente la noción del
tiempo", y lam enta no poder darnos este d ato.
11 - EXTRAF4A EMERSION
E n la madrugada del d ía s i g u i ente, sobre las
3 ho ras, el testigo se encontraba con u n a a m i­
ga alemana, de u n os 20 años (que estaba de va­
caciones recorriendo Es paña con su tienda d e
camping, e n compañía de otra chi ca), e n u n a
peq ueña barqu ita d e rem os, e n frente d e l a u rba­
n izac ión antes mencionada, cuando, en un m o­
m ento dado, la c hica adv i rtió q u e algo hab ía
salido del agua.
Interrogado el joven _ deporti sta sub f!�� rino
sobre este i n c i dente nocturno, en compama de
la j oven alemana, éste s e desarrolló más o me­
nos así:
Ella: "Allí ha sali do u n a cosa". (En u n caste­
llan o bastante chapurreado, pero m uy enten d i­
b le. )
El: " Habrá s i d o u n pez" .
Eira : "No, no" .
El : Repite lo anted i c ho.
Ella: "No, n o era un pez, era más g rande".
El entonces m i ra hacia donde ella le se ñala
( l a su perficie d el mar), y ella le dice "arri b a " .
Pero el m u c hacho n o ve n a d a . El t i em po t rans­
c u rrido hasta q ue él m i ró , l o calcula en algo
r u i d o , n i v i o l u m i nosidad a l g u n a y , a u n q u e la
d i rec ción seña l ad a (a 200 ó 300 metros), corres­
pondía con la zona donde la mañan a anterior
hab ía encontrado el extraño obj eto c i líndrico,
no l e d i o momentaneamente n i n g u n a i m portan­
cia. Sobre esto ú l t i m o n os comenta ei testigo
q u e l o v i sto pod r ía haber sido algo poco i ntrigan­
gante, ya q ue s u amiga no hi zo posteriores
comentarios, ni se quedó observa ndo, n i se en­
contraba alarm ada. E l , por su parte, no preg u ntó
más detalles , pues no creyó que se tratase de
nada s i n g u l a r.
M ucha� rm:.'untéls q u e se nos ocu rren <ll res­
pecto no pued en ser contestadas, pues la j oven
es i n acce&lb!e: no se conoce su nombre, ni la
c i udad donde reside, ni nada más. La forma
d e desaparecer d eJ p resu nto objeto, sus carac­
terísticas, etc . , deben permanecer -q u i zás­
en el rec u erdo de la mencionada j oven . Recor­
d emos q u e, sea lo q u e fuere, el l a no d i o tam­
poco demas iada i m portancia al " i ncidente" ; en
verdad , p rácticamen te n i n g u na.
111 - DESAPARICION DEL CILINDRO
Sobre las n u eve de l a mañana d e aquel m i s m o
d ía ( l u nes), e l b ucead or e n c uestión volvió a
sumergi rse con á n i m o de volver a ver el objeto,
meramente por c u riosidad. Y c u ál sería s u sor-­
p resa cuan do , llegado al sitio exacto, se percató
de q u e ya n o estaba allí.
El testigo, q u e b ucea d esde los 6 años, cono­
ce es.os paraj es perfectamente d esde hace m u­
c ho por ser el lugar de veraneo de s u familia.
Vista frontal de la cápsula entre dos espolones
rocosos.
A pesar de el l o , para u n conven c i m i ento absolu­
to exploró todos los espolones rocosos de l a
zona, s i n res u ltado positivo algu no, d eteni é ndo­
s e en su búsq ueda exhaustiva por l os al rededo­ C O S TA
res d u rante una hora. F u e entonces , y sólo en­
tonces , cuando asoc ió ia d esaparición del c i l i n­
d ro con l a observac ión h e� h a por su _am iga.
Posteriormente ha buceado vari as veces en
el m ismo l u g a r s i n encontrar vestigio a l g u n o
d e l objeto, y n o s reitera q u e aquella z o n a l a
conoce m uy bien, s i n q u e h u b i era posib i l i d ad
de q u e o b i en eq uivocase el sitio o se perd i ese.
Por n u estra parte recordamos que s e trata de
u n buceador muy experto.
Preguntado sobre la hora en q u e después d e
s u excu· rs i ó n nocturna se encontraba y a b ucean­
do, y extrañados ante el h echo d e que esa
noche dorm i ría m uy pocas h oras, n os res­
ponde m uy son riente q u e el l o es m uy usual en
los submarinistas. M uchas veces, ellos, los jóve­
n es , h a n estado bailando u n a noche en u n pue­
b l o cercano a l a playa y a l as 6 de la mañana,
s i n dorm i r o habiéndos e acostado u n a o d os
horas, toman los eq ui pos y b aj an al m ar. Repe­
60-7 0 m
timos: su pasión por el deporte s u b marino hace
de l a vig i l ia. algo muy normai.
El testigo, q uEt actualmente es vendedor de
automóv i l es , es del i n eante, soltero y de rel igión
catól ica. N u nca antes había visto objeto o fenó­
meno (aé reo o ac u áti co) extraño. No tiene es pe­
c i a l i nterés por ! os temas OVNI , ciencia-ficción,
etc. , d e l os c u ales n o h a l eído ningún i i b ro. Sí
alg u n a h i storia en prensa o rev istas ; l o normal.
El ori g i nal d el i nforme CEONI está firmado por
el testigo en cuestió n , · con su nombre y apel li­
dos, como cert ificación de la exactitud del texto,
pero solicita cierta d iscreción por lo que nosotros
decidimos no publicarlos.
Las encuestas, l l evadas a cabo por los m i em­
bros de CEONI, se rea l i zaro n :
1 9 E n u n a entrevista pers o n al con Vicente­
J ua n B al l ester (Presi dente de CEONI), a raíz d e
u n a c onferencia p ro n u nc i ad a e n e l Coleg i o M a­
yor Alejandro Salazar d e Valen c i a sobre aterri­
zajes ibéricos de OVN i s . El testi g o v i n o a ena
d espués de l eer en la prensa un anuncio sobre
l a c harl a.
29 En u n a entrevista-encuesta, con l a parti­
c i pación de var!os m iembros de CEONI y con
l a asistencia d e Don José Cezón , d e CEI Madrid,
l l evada a cabo el m es d e abril d e 1 971 .

VIsta superior en relación a la costa.

39 E n u n a ú ltima entrevista,- celebrada en el

l oc al de CEONI d u ra nte el m es de mayo d e
1 971 , en l a cual s e puntual izaron cuestiones y
pormenores relativos a este caso, surgidos en
nuestras d iscusiones en torno a l mismo.
VIsta lateral en relación a la costa. CEO NI

OVNJ8 - 11
 TE ORlA

LA METAMORFOSIS DE LOS O Y N I S
por f' l Pro!. Osear A. U riondo

(Reproducido de "CEFAI-Revista", n 9 3, marzo 1 975, pp. 3-5. D irección : Cas i l l a de Correo n9 9, S uc. 26, Buenos
Aires, Argentina).

Uno de los aspectos m ás sorprenden tes, dentro de l a fantástica fenomenología de los

OVNI S, lo constituyen las modificaciones de for ma y tamaño que aquéllos suelen exhibir. Aun­
que se trata en verdad de un rasgo algo infrecu ente, no menos cierto es que tales observaciones
han sido efectuadas en buenas condiciones de visibilidad y por testigos que, en general, merecen fe.
Dos son los interrogantes que de i n media to surgen a propósito de tan insólitas manifesta­
ciones proteicas: 1 ) ¿ Son ellas reales o sólo ap arentes? y 2) Aunque reaies, merecen ser conside­
radas como auu;i'i:ica:s ;ns tamorfosis?

En P. fecto, ocu rren c asos de avistam ientos e n
que ' testi gos han reg i st rado fotog ráficamen­
te n cH a b l es alte rac io nes en l a config u ración de
l os O V N I S ; e n estos e p i sodios no puede descar­
tarse, lógicame nte, que no se t rate de s i m p l es
d i s!ors i ones de i m agen p rovoc adas por c a m b i os
de . n i s i ó n e l ec trom agnética d e l OVN I . Otra
maño se refieren ú n i camente a objetos e n vuelo,
y nunca han sido obse rvados e n los fenómenc�
de t i po 1 (Aterrizajes y casi -aterri zaj es ) . Esta c i r­
c u nstancia tal vez s i g n i f i q ue una c l ave d e i m por­
tanci a para el esclarec i m i ento final de los oscu­
ros p rocesos f ísicos i nvol u c rados e n l a m eta­
m o rfos i s
.

causa -la más corrie nte -de variac iones a pa­

rentes en la conformac.ión de los objetos, está
dada por los efectos d e perspectiva, de �cuerdo
con los c u ales, por ej e m p l o , u n c u erpo lenti c u l a r
será perc i b i d o d iversamente, seg ú n s u á n g u l o d e
i nc l i naci ó n : como u n c i ga rro afi nado, c o m o e l i p­
ses d e variada excentrici dad, o como u n a s u per­
ficie c i rc u lar.
Por otro lado, hay c i ertas c l ases de ep isod i os
en q u e s e p rod ucen indud ables transformacio­
nes de estructura: Los casos de d i visión del
OVNI e n d os o más partes ; y aq u e i l os i n c i d entes
e n que tienen l u gar mod ificaci ones s u pe restruc­
tu rales (como apari c i ó n y desaparición de c ú p u ­
l a s , t u bos, etc .) se i nc l uyen e n esos rubros. S i n
em bargo, e n n i n g u n a de estas si tuaci ones esta­
mos e n p rese ncia de una metamo rfos i s cab a l .
Sólo c u ando se advierte q u e l o s hechos desc r i p­
tos s u g i e re n u n a aparente transgres i ó n a las
leyes físicas q ue gobiernan l a cohes i ó n de los
cue rpos sól idos -como bien lo ha defi n i do el
D r. Osear A. G a l í nd ez- podemos hablar f u nd ada
y legít i m ame nte de p rocesos meta mórficos .
A con t i n u ac i ó n revista remos alg u nos eje m plos
extraídos de u na c as u ística que gl obal mente
considerada, vi goriza la pres u n c i ó n de que en
ocas i ones l os OVN I S sufren verdade ras m u tacio­
nes d i f íc i les de expl icar conve n c i o n a l mente.
De paso, es i nteresante acotar que todos l os
casos conoc i dos de variac iones de forma y ta-
MISTERIOSAS AEROFORMAS SOBRE
EL LABRADOR
El Centau rus, un Boe i n g Stratoc ruiser de la
B.O.A.C., se d i r i g ía e n vuelo reg u l ar de N u eva
York a Lond res, vía G oose Bay , Labrador. Eran
l as 1 7 del 30 de j u n i o de 1 954. A poco de sob re­
vol a r las Seve n l s lands y mient ras se mante n ía
a una altitud de 1 9 m i l pies, el p i l oto del avi ó n ,
capitán J a mes Howard y e l copiloto, p r i mer ofi­
c i a l Lee Boyd, observaron a la izqui erda de su
cabina, a una distancia de tal vez 5 m i l l as , un
conj u nto de extraños objetos que se movía n ,
penetr2 ndo y sal iendo de u n a c a p a desgarrada
de stratoc ú m u l os. Estos obj etos ascendi eron
l u ego por e n c i m a de l as n u bes y p u d i e ron ser
vistos c l aramente, p royectados contra e l c ielo
del c repúsculo. E ran 7 cue rpos o pacos y oscu­
ros, uno d e g ra n tamaño y los otros 6, más
peq ueños . El objeto mayor tenía el aspecto de
una medusa, y mod i ficaba cont i n u ame nte su
forma.
Los t r i p u l an tes del Centau rus i n form aron a l a
Base aérea de G oose Bay c o n respecto a l o s
e n i g m áticos fenómenos que estaban observan­
do. Desde al l í se envió hacia el l u gar de los
hechos un caza- i n te rceptor F-94 ; e n ese preciso
i n stante. los 6 eleme ntos menores parec ier�""'

20 - 0\'NIS
penetrar en e l m ás g rande; l uego éste se e nco­ tanc i a , m ás a l l á de l a· c asa op uesta al departa­
g i ó repenti namente y todos desaparecieron de la mento del señor Russe l l .
vista.
" BALLET" AEREO E N EL N E PAL
ENTRE SAINT LOUIS Y MITCHELL
Dos jóvenes británicos, Step h e n G i l l y Roddy
E l caso que na r raremos a conti n uación ofrece B a i r , efect uaban un paseo por l as cercan ías del
c i e rta s i m i l itud con el episodio de Goose Bay. peq ue-ño poblado de Pokhara, en e l Nepa l , el
E l 25 de octubre de 1 963, a l as 1 8 : 45, los 1 8 de abril de 1 972 . A la caída de la tarde,
p i l otos de u n avión q u e volaba desde S a i nt L o u i s observaron en el c i e l o a poca altu ra sobre u n a
h a c i a M itc h e l l (Estados U n i dos) v i e r o n repenti­ cadena d e montañas, a l g o as í como u·n "enjam­
namente, a u nos dos mil metros de a l t u ra y por bre de p u ntos oscuros", desplazándose de i z­
enc i m a de el los, una masa de contornos b i e ri q u ierda a derecha . Pensaron que pod ía tratarse
defi n i dos, acom p añada por u n objeto de menor de u n a m i g ra c i ó n de p áj a ros o tal vez de u n
tamaño . Los p i l otos alte raron su rumbo y se enjam bre de abejas ; pero deb ieron desec h a r
dirigiero n h acia e l fe nómeno. E nton ces, el obj eto am bas pos i b i l idades, p u e s las abej as, a l a d i s­
más peq ueño parec i ó h acerse más g rande, m i en­ tancia a que se manifestaba el fenómeno (al re­
t ras que el cue rpo m ayor se encogía . Luego dedor de 20 m i l las) no h u b i eran podido ser vis­
a m bos se a l ej a ron de l os observadores, q u ienes tas ; y e n cuanto a l os pájaros, algu nos fác i l men­
retomaron s u c u rso o r i g i nal y conti n u a ron vigi­ te identificables, q u e volaban e n l as p roxi m i da­
l a ;ldc l as evol ucio nes de los m i steri osos obje­ des de la extraña formac i ó n , daban u na i m agen
ios . La m asa mayor, ahora sol a, se des i ntegró
de p ronto e n 1 O ó 20 frag mentos pequeños y
todo el g ru po -excepto u n p u nto q u e semej aba
un aerop l an o visto desde atrás- desaparec i ó
de l a vista. A las 1 9, l a masa fue avistada n u e­
vamente ; pero los p i l otos no pudi eron a p roxi mar­
se a ella. Su diámetro aparente e ra el de u n Boe­
i n g 707 a 2 m i l las de distancia. U n a vez más, s u r­
g i ó u n pequeño p u n to ; crec i ó y e l o bjeto mayor
d e n uevo se encogió como e n l a ocasión ante rior.
F i n a l mente, los dos objetos c a m b i aron com p let a ­
men te sus roles. Al no poder acerc a rse , los
aviad ores dec i d i e ro n reg resar y aterrizaron en
M itchel a las 1 9 :40.

LAS FOTOS DE STREATHAM

El caso s i g u i e nte reviste espec i a l I m po rtan cia,

p ues l os cambios de forma fueron reg i strados
en l as placas fotográficas.
La tarde del 15 de d i c i e m b re de 1 966, e l señor
Antho ny Russell se h a l l aba j u nto a la ventana
de s u departamento e n Streat h a m , u n s u b u r b í o
de Londres, p r'o bando s u cámara Zenith 3M. E n
esas c i rc u nstancias advirtió que u n o bjeto de to­
nal idad marró n caía desde el cielo y se deten ía
b ruscamente, para q uedar suspendidó en el a i re,
l uego descend ía a ú n más con u n l e nto movi­
m iento pend u l a r q ue semejaba la ca ída de una
h oj a seca.
Aprovec h ando que tenía a mano su cámara,
el señor Russe l l tomó una serie de 4 fotog raf ías
en colores, la ú ltima c u ando el objeto se a l eja­
b a , e n ascenso cas i ve rtica l , lentame nte al p ri n­
c i p i o y l uego con ve locidad considerable.
En l as fotos , el fenómeno aparece como u n a
s i l ueta osc u ra perfilada contra u n fondo d i fusa­
mente i l u m i nado, y no revela d ot al l e a l g u n o . Lo
c u ri oso es que en las sec u e ncias fotog ráficas,
el OVNI m u estra variac iones de fo rma, a pesar
de que el testigo afi rmó n o haberlas n otado
visual mente.
Sometid? � al veredicto de expertos, las p l acas
fuero n . calificadas como fotografías g e n u i n as de
u n objeto e n e l aire, l ocal izado a c ie rta d is-
Primera fotografía e n colores tomada por el señor Anthony
Russell en Streatham, Inglaterra, el 15-12-66. El artefacto
tenia una coloración amarronada, era de aspecto discoi­
dal y presentaba una protuberancia superior.
(Fotos Copyrigth by FSR • Archivo: CADIU).
completamente d istinta a la de los com ponentes
de aq u é l l a.
Otros enjambres recién arri bados, i n i ci aron
e ntonces un extraño "bal let" aéreo, con u n a
coreog rafía t a n complej a q u e res u l taba c as i
i m posible de seg u i r.
A conti n u ación, l os p u ntos i ntegrantes de los
enjam b res comenzaron a acercarse e ntre s í, a
compactarse, "so l id ificándose" gradual mente
h asta adq u i r i r las formás c l ás i cas de p l atos
i nvertidos, vistos de pe rfi l y l uego bajo d iferen­
tes áng ulos. Los obj etos así solidifi cados eran
i n c reíblemente versátiles e n sus m ov i m i e ntos :
a veces q uedaban suspe n d i dos ; otras se movían
lentamente otras aceleraban de modo al arm an­
te. No se oía ruido a l g u no ni se perci bía tampoco
n i ng ú n detalle. La mayor ía de esos objetos eran
de color gris plomo y los testi gos n o pud i eron
dete r m i n a r s i tenía n luz propia o s i reflejaban
l a del sol poniente.
OVNIS - Zl
 Finalmente, ros objetos comenzaron a experi­
mentar u n fenómeno de "d ispersión", desvane­
ciéndose s i m plemente y dejando tras d e sí un
p ronunciado anillo d e h umo. E l humo surgió al re­
dedor del borde del objeto, que l uego desapa­
reci ó mientras el a n i l lo se iba formando.
LA COHESION Y EL PRINCIPIO DE ECONOMIA
¿ Los procesos metafóricos observados, s i g n i­
fican necesariamente una efectiva violación de
l as propiedades de l a cohesión ?
La respuesta a este i nterrogante dependerá
fund amental mente de que apl i q uemos o no un
antiguo i nstrumento conceptual : · l a l l amada " na­
vaja de Occam" o principio de econom ía del
pensam iento. Traducido al leng uaje actual , este
principio-g u ía del nomi nalismo filosófi co p uede
anunciarse brevemente así: el número de hipó-
En la· segunda placa d• Slreatham, la Nllente auperlor
ha desaparecido, obaerv6ndoae una .-tructura Mmejante
a la de un habano u objeto lenticular vlalo de · perfil.
tesis no debe ser multiplicado innecesariamente.
A11te un hecho por expl icar sólo habremos de
recu rri r a l as hi pótesis más complej as e i ncier­
tas, cuando hay amos agotado l as más s i m pl es y
más firmemente establec idas.
Si optamos por orientarnos según d icha nor­
ma metodológica, es posible expl icar l as altera­
ciones estrOcturales de los OVN IS en térmi nos
que no franquean los l im ites instituidos por l as
leyes de l a f ísica ortodoxa. En verdad nada se
sabe acerca de l a naturaleza de los materiales
que com ponen los OVNI S, de sus propiedades
gene rales y particularmente de su g rado de elas­
ticidad. Además, como nos l o recuerda el b iólo­
go lvan T. Sanderson, existen animales (batra­
cios y peces) c apaces de hincharse repentina­
mente hasta d uplicar s u volumen normal ; y por
ZZ - OVNIS
otra parte, s i m ples glooos de j u g uete, de pocos
centímetros de long itud , pueden i nfl arse y trans­
formarse casi i nstantáneamente en complej as
figu ras de g randes d i mensi ones.
Si p referi mos, en cambio, dejar de lado el
principio de econom ía y aceptar como real la
violación de la cohesión, deberemos ad miti r en­
tonces que los OVN I S. son entidades m aleables
'en las que ocu rren ciertos fenómenos que pare­
cen escapar a la actual com prensión científica
del género h u m ano.
Lo que pueda decirse respecto de d ic has enti­
dades es, por hoy, enteramente conjetu ral . ¿ Se
trata de una nueva c lase de seres vivos, no rotu­
lada todavía ? ¿ De a rtefactos elaborados por una
tec nolog ía asombrosamente avanzada, cuyas
mani festac iones -a decir de Ai mé M i chel­
ape recen como " magia" ante · · nuestros oj os?
En esta tercera toma, el fenómeno de Streatbam ha estre­
tando un aspecto similar al de un merengue. cabe acota•
chado sua extremos y engrosado su parle superior, presen­
que en la cuarta placa el cuerpo ya aparece borroso J oon
contornos Imprecisos.
O como lo sug iere John Kee l, ¿constituyen e l l as
manipulaci ones temporarias de materia y ener­
g ía por parte de i ntel igencias superiores, que
coexisten con el hombre en otros planos o
d i mensiones de l a real idad?
En e l momento actual de l a i nvestigac i ón ufo·
lógica, nadie podría pretender, sensatamente
respuestas categóri cas a estos i nterrogantes.
Nos hemos l i m itado a describir hechos y a
pl antear al g u nas posi b i l idades de i nterpretación
que l os m ismos esti m u l a n . Pero, tal vez, en últi­
m a i nstanc i a la Verdad esté más allá de todo lo
hasta ahora i mag i n ado.
 BRASil

1 CON DOS OCUPAN TES

1 Por el Dr. Walter Buhler
1

ll
� o
(Traducido del i n g lés por J ane Tho­
1 (Medico y ufólogo bras i leño. D 1rec·
mas, según art. aparecido en FSR,
tor de 1a SBEDV - Sociedad B r a S I ­
Londres, n 9 3, mayo-j u n i o 1 971 pp.
leña de Estudio de los D iscos Vo­
3-7, D i recci ó n : P. O. Box 25, Barnet,
ladores). Herts EN5 2 N R , E n q l a n d ) .
-
------ -- - ----·

Cuando en 1 9 70 el Dr. J. Allen Hynek estuvo en Londres, se refirió a la i mportancia obvia de Jos
casos con testigos múltiples. El presente episodio brasileño -muy interesante y que cae dentro de
esta categoría- nos fue comunicado poco tiempo d espués de h aberse producido por el Dr. Buhler,
en oportunidad de su visita a Inglaterra. Gordon Creighton preparó e l m aterial para su publicación,
pero ésta fue demorada ante n uestro requerimiento de aclaración de algunos p untos del hecho. Re­
cién ahora estamos en condiciones de presentar u n a versión mucho más detallada del mismo, previa
revisión -por parte del autor- del texto original en portugués que apareció en .SBEDV, Boletín
nC? 74-79, mayo 1 970 - Febrero 1 971 . - C HAR LES BOWEN

l . EL LUGAR Y LOS TESTIGOS La ave n ida N i emeyer se en­ móvi les. U n as horas antes, por
Este i ncidente, q u e tuvo l u gar cuentra e n ese sector a u n a al­ l a mañana, n osotros m i smos ha­
a plena l uz del d ía (más concre­ tura de u nos 30 a 40 metros s o­ b íamos estado en esa zona y
tamente, a l as 1 1 :40 hs. del 27 bre e l n ivel del mar, m i entras recorda mos que al rededor de
d e j u n io de 1 970), es bastante q u e la casa desde la cual los las 7 el cielo s e encontraba a ú n
n otable debido a que -con to­ testi g os efectuaron s u observa­ bastante c u b i e rto.
da segu ridad- fue observado ción está u b icada u n poco más Tres de l os testigos entrevis­
arriba, sobre l a c arretera. tados son e l señor Ariste u Ma­
chado y su esposa, doña M ar ía
por l o menos por ocho testigos ,
y porq ue i l ustra g ráficamente E ra un d ía domingo, con tiem­
cómo los Ovn is están acercán­ po bueno. Cal c u l a mos que h a­ Nazaré M achado, q u ienes v i ­
dose c ada vez más a n u est ros b r ían estado c i rc u l ando --cada ven en el 31 8 de Av. Nie meyer,
centros u rbanos más densamen­ h ora- no menos de 1 .800 auto- y s u vec i n o y visitante, e l señor
te poblados. Un g ra n d isco me­
tál ico descendió sobre l a su per­
ficie d e l Océano Atlántico Sud,
a no m ás de 1 00 metros de l a
Avenida N i e meyer, una famosa
costanera recortada entre los ce­
r ros y que tiene una hermosa
vista a l mar; corre en d i rec­
c i ó n s ud oeste, desde el s u b u r­
b i o de R ío de J aneiro l l amado
Leblon.
El d i sco permaneció e n la su­
perficie del agua por espac i o de
med i a hora, siendo también vis­
tos dos tripul antes con cascos
y vestimentas a l u m i nizadas gris
b r i l l ante, semejantes a l os tra­
jes de n u estros astronautas.
Cuando e l d isco se elevó, dejó
en el . mar una espec i e de ani­
llo o aro que, aparentemente,
había c u m pl i d o alguna función,
q u izá como flotador o estab i l i ­ La Avda. Niemeyer, que corre abajo de la casa de Jos Machado.
zador d e l o bj eto e n cuestión. (Fotos Copyrigth by FSR)

OVNIS - 11
 r después res u l tó u n d isco, apa­
El extraño objeto posado en el mar y las des figuras antropomorfas vistaa
en cubierta.
Joao Aguiar, q u e es ofi c ial de la
p o l i c ía federal b rasi leña y vive
e n e l n ú mero 21 O de la misma
ave n i d a . E l c uarto test igo es !a
h ij a mayor de los Machado,
C re u za, de 23 años. Los c uatro
observadores resta ntes fueron
l as demás hijas de M ach ado :
Consu e l o , de 1 4 años ; Rose ma­
ry, de 1 0 ; Margarita, de 8 y Ca­
t i a , de 5. (No e nt revistamos a las
c i nco h ijas, sino sólo a sus pa­
d res y al señor Joao Agu iar).
El Dr. Carlos Netto, del perió­
d i co d e Rro " D iario de Noti­
cias", fue q u i e n n os notificó ele
i n med iato acerca del caso, al
punto que p u d i mos acompañar­
lo al l �o�gar y hablar con estcs
testigos a l as 1 6 ho ras del m is­
mo d ía. (Es de h acer notar que
e l " Diario de Not i c i as " ha s i d o
el p r i m e r periódico d e R ío de
Janei ro q ue ha abordado e l p ro-
E l matrimonio Machado observanc:IQ e l m ar desd• la terraza
de su casa.
24 - OVNIS
blema Ovni con seriedad y c i e r­
to g rado de conti n u idad ) .
1 1. ACUATI ZAJ E D E U N D I SCO
CON DOS TRIPI,JLANTES
El relato de los Machado es
el siguiente : Doña Ma r ía Na­
zaré M achado se encontraba
e n l a coc i n a p reparando e l al­
m uerzo. De tanto e n tanto sa­
l ía a la te rraza, donde se en­
contraban l os restantes fa m i ­
l i ares que, j u nto con e l señor
Aguiar, d i sf rutaban de u n j ue­
go. En determi n ad o m o mento
p reg u ntó la hora. Eran las
1 1 :38. U nos dos m i n utos des­
p ués el señor Ag u i a r echó u n
vistazo a l m a r y rápidame nte
l l amó la atención de los demás
respecto a lo que pensó era
" u na l ancha a motor gol peando
e l agua". (Y e l l o porq u e lo que
renteme nte al descender, l evan­
tó bastante espuma a s u al re­
dedo r) .
De i n mediato todos aban do­
naron su j uego y se suscitó u n
i nte rca m b i o d e i m p res io nes so­
bre la actitud a adopta r , y si l a
" l a n c h a " necesitaba o n o ay u­
da, ya q ue pod ían ver dos " b a­
fl istas " dentro del ve h íc u l o q ue
parec ían hacer señales con los
brazos. El señor Ag u i a r estaba
seg u ro de q u e había dos per­
sonas q ue vestían ropas b r i l lan­
tes y l l evaban " a l g o en sus ca­
bezas " . Parec ían " r e g o rdetas y
bastante peq u e ñ as " .
Las d o s personas e n c uestión
parecían estar trabaj ando en l a·
c u b i e rta del veh íc u l o , el cua l te­
n ía un color g ris metál ico y pa­
rec ía ser de u nos 4 a 6 metros
de largo. Estaba c u b i erto por
una c ú p u l a transparente . Se
convino que el señor A g u i a r
fuera h asta el " H otel Mar" para
que telefoneara a l as autorida­
des d e s alvataj e , m i e nt ras el
resto del g rupo conti n u aba ob­
serva ndo atentamente el obje­
to. Este se encontraba j usto
donde siem pre el agua parece
más osc u ra, casi e n la l ínea di­
visoria entre el agua m ás oscu­
ra del l ado de l a costa y la m ás
clara del océano abi erto.
El i nforme del " D iario de No­
t i c ias" del 28 de j u n i o de 1 970
exp resa q u e el área del mar
donde bajó el d i sco estaba a
u nos 500 metros de la costa,
a u n q u e un poste rior examen del
caso s u g i ere que el objeto b i e n
podría h a b e r estado bastante
más alej ado, q u izá a 700 ó
1 000 metros. De todos modos,
muy p róxi m o a l a costa!
E n n uestras i nvest i g acio nes
s u b s i g u i e ntes tomamos conoci­
m iento de que en dete r m i nado
momento el d isco se desplazó
u nos 1 00 metros e n d i rección a
la costa. No se esc u c h ó son i do
algu no, n i se adv i rt i ó el carac­
terísti c o mov i m iento de balan­
ceo de los botes.
IH. ASCENSO DEL DISCO
El t i em po i ns u m ido por el se­
ñor Aguiar en i r y regresar del
" Hotel M ar" (distante aprox i m a­
damente 1 k m . , en l a d i rección
de Leblon) fue de u nos 25 a 35
m i n utos. Cuando reto rnó al de-
 partamento de los M achado, el
d i sco a ú n se h al l aba sobre el
mar y tu vo oportu n i d ad de ver­
lo despegar. Por tanto, la per­
m an e n c i a del objeto en el agua
fue de u nos 40 m i n utos.
E l señor Ag u i a r nos i nformó
que cuando el d i sco asce ndió
no l o h i zo ve rt ical mente, sino
que se des l i zó u n os 300 metros
a lo l 2 rgo de l a s u pe rficie del

mar, p roduciendo e l m ismo ti­
po de marej ad a de u n a lancha
a motor. En real i d ad , sólo c u a n ­
do l a máq u i n a s e elevó en e l
a i re y comenzó a a l ej arse m a r
afuera, h a c i a el su deste, 1 o s
testigos se percataron de que
no era u n bote com ú n , s i n o un
d isco vo l ador .
Doña M a r ía Nazaré demostró
ser u n a excel ente observadora
porq ue, al operarse el asce nso
del d i sco, notó que en su parte
i n ferior tenía un objeto de for­
ma hexagonal q u e -d ijo- se
parecía a la fruta b ras i leña co­
noc i d a como " carambola". Es­
te obj eto parec ía ret raído den­
t ro de l a nave y h a b ía u n a can­
tidad d e l uces d e colores que
se e ncen d ía n y apagaban siem­
p re en el m ismo orden sucesi­
vo, es decir verde, a m a r i l l o páli­
d o y rojo. (Otros i nformes p re­
c isan u n a l uz g i rato ria q u e va­
riaba de colores) .
Tal como s e expresara ante­
rio rmente, mi entras descansaba
sobre e l mar, e l d i sco parec ía
ser de aspecto a l u m i n i zado, pe­
ro u n a vez en e l a i re daba l a
i m p resión d e ser t rans parente.
En esta ú ltima o portu n i d ad Do­
ña M a r ía Nazaré pudo ver c l a ra­
mente, en el i nte rior de la n a­
ve, a los dos ocu pantes.
A esa hora había poco tránsi­
to en l a ave n i d a y, en conse­
cuencia, poco ruido. S i n em bar­
Trayectoria seguida por el Ovni para cobrar altura.
Al cabo de poco tiempo este
" a n i l l o " se s u me rg i ó ; l uego rea­
parec i ó y se despre n d i ó de él
un o bj eto amari l l o de forma
ovalada, c uyo di ámetro en su
p u nto más ancho era de a pro­
xi madamente 0,40 m, y que flo­
taba exh i b i e n d o u n os 0,20 m
fuera de l a s u pe rfi cie del agua.
Luego de perma necer esta­
c ionado d u rante u nos tres m i ­
n utos, este objeto ovalado co­
menzó a move rse le ntamente
hac i a la p l aya, con su eje más
largo en d i recc ión a la casa de
los testi gos. En e l extremo más
alejado del objeto h2bía u n bor­
de verdoso que después se se­
paró del c uerpo p r i n c i pal (ama­
r i l lo) y continuó s i g u i éndolo " a
una d istancia d e u n os 0 , 8 0 m " .
Después d e u n m a r g e n d e
tiempo q ue d o ñ a M a r ia Nazaré
esti m ó en· unos 1 5 m i n utos, el
objeto a m a r i l l o l legó a una d is­
tancia d e 1 20 metros de l a cos-
j
ta. E ntonces efectuó u n g i ro en
angulo recto hacia l a izq u i e r­
d a y enfiló hacia la p l aya de
G ávez, siempre m anteniéndose
más o menos a la misma d is­
tancia de l as rocas de la costa.
ESTE M OV I M IENTO (HACIA E L
OESTE) E R A EN R EA L I DAD
CONTRAR I O A LA CORRI ENTE
MAR I T I M A Q U E P R EVALECIA
EN E L LUGAR E N ESE M O­
M E NTO.
Doña M a r ía N azaré bajó en­
tonces h asta l a calle que pasa
por el frente de su casa y t rató
d e observa r los subsiguientes
desplazamie ntos del obj eto
amarillo. Con e l l a se h a l l aban
·
u nos n i ños que aparecieron en
ese momento y les señaló e l
obj eto. Los c hicos t rataron d e
al canzarlo a rroj ándole piedras,
pero sin éxito. Esta otra fase
d u ró u nos 1 O m i n utos aproxi­
m adamente, des pués de lo cual
e l o bj eto desaparec i ó d e su vis-

l
go, tal como se acotara, n i n g u ­
no d e los testi gos perc i b i ó soni­
do a l g u n o que p rov i n i era del
aparato . Una vez en e l a i re, el
d isco d esaparec ió rápid amente (
/l:\1
'-.../

de la vista. \___/
__
IV. APARICION D E
ELEM ENTOS FLOTADORES
'""-�
E n el l ug a r del mar donde h a­ 1
b ía descansado el o bjeto q uedó ' '---- -- ------- ------�

" a l g o b l anco con fo rma d e aro,

del tamaño de un baúl o arma­
rio" (seg ú n l a propia desc r i p­
Reconatrucción de la parte Inferior del Ovni.
c ión de doña M a r ía N aza ré) .
OVNIS - Z5
ta a la altu ra de u n p ro mo nto­ a d m i n istraci ó n centraJ está cer­
r i o rocoso, a u nos 500 metros ca del aeropuerto de CªJabou­
d e donde se encontraban p a­ co, en l a zo n a central de Rí0 .d�
rados. J a nei ro . De modo que tend ría
E ntre tanto el "aro b l a nco" que haber transc urrido, por l o
era aún visible, no obstante h a- menos, u n a hora h asta q u e pu-
L AGOA
G AVEA o L E B LON p�
RO D R I G O
.
F R E I TA S
N _.r--
Cuando l a l a·n cha arribó a
ese sector, se detuvo a u n a
d istanc i a a p roxi mada de 1 km.
.d e l.a costa. Luego los testigos
viero n q�:�e ,l a tri p u l ación subla
a bordo -:::-e pn gran d ificultad
,
un objeto c i l ln d rico rojo. (La
d i f i c u l tad se debía -si n d ud a­
·
a l gran peso de este objeto) .
Cumpl i mentada esta tarea, l a
l ancha reg resó a g ran velocidad

A �
1 RIO DE J A N E I R O y a s u pu nto de origen.
C O PAC.A B A N A 6 k m
V. COM ENTAR I O S Y TEORIAS
I PA N E
�
AV E N I DA -- No podemos, a p r i o r i , i ntu i r

:�?
NI EMEY ER 4 3
el p ropósito �e este descenso
de s u puestos extrater restres en
A2 ei mar. Pero pod ría especul ar­
se que esas i nte l i gencias trata­
ron de i nvesti gar ciertas condi­
ciones locales por cond ucto de
"sondas " (acaso 1 o s objetos
9! I.. H A
1 L H A DA PA L M A S
<J I L H OTA
B A R R A DA T I JUCA CAGARRA

I L HOTA P � Q U E N A O C A G A R R A
c::;:J fl otantes q u e dejaron?) o q u i­
� zá estos últi mos fueron " re­
0
A 1 L H OTA puestos" dest i n ados a alguna.
I LHA COMPRt DA t:f' G RA N D E base submarina extrate r restre y
q ue se habrían d i rigido b a j o

l_
control auto mático hacia la mis­
C E A N O AT l A N T O
m a ? O bien pod r ía haberse t ra­
O __ I C tado de aparatos automáticos
__
____
que, ya sea a ras de las aguas
__ __ __
____
____
____

o s u mergidos, estaban en con­

d icio nes de t ransmitir i nforma­
ción sobre las reacc iones sico­
Referencias: 1) Suburbio de Leblon ; 2) Fuerte de Copacabana ; l ógicas de los testigos de -d i­
3 ) Punta del Arponeador ; 4) Casa d e los Mactlado; 5) Playa do gamos- la casa del n9 31 8
Gavea; 6) Pico de Gavea ; 7) Punta Marisco ; 8) Hospital Louren· de la Av. Niemeyer y, m ás tarde,
.co Jorge; ,9) Nomtires consignados en el mapa. A·1 : primera también d e la gente q ue se en­
¡,osición del' disco ; A-2: el disco antes de emprender vuelo; contraba en las playas de Gávez
13: despegue; C: curso del objeto amarillo. y Barra de Tij uca? Estas "son­
d as " habrían sido rec u peradas
ber desapareci <..�O tem poraria­ d iera l legar al l u g a r en cues­
m ás tarde o habr ían permane­
nnente vari as vece .<; . También se tión u n a lancha patru l l era. Cu an­
cido flotando h asta perderse
aproxi maba a la p .l aya de G á­ do telefoneó a la P refectura,
d ef i n itivamente en el mar? O
vez, como s i a l l í fuera a u n i rse desde a l l f control aron s u n ú me­
bien se t rató de aparatos q ue
n uevamente al o bjeto amari l lo. ro d e aparato y p ro metieron en­
tend r ían a l g ú n t i po de efecto
Los testigos observéi'ron el a ro viar ayu d a al grupo i nvol ucrado
a largo pl azo sobre la sicologla
b:t anco por u n períodc""� total d e en el s u puesto acc idente. De a l l l
h u mana, es dec i r , terrestre ?
a¡proximadamente 20 m Ln utos, q u e el Sr . A g u i l a r sa sorprendie­
incluyen d o las desaparicic""�nes y r a sobremanera cuando sólo 20
mapariciones del m ismo, .�las­ m i n utos d espués del l l amado
"STENDEK"
ta q u e también lo perd ieron ,<je vio q u e u n a lancha se d i ri g ía
vista. velozmente hacia l as islas ( I s­
La fam i l ia, q u e antes de me­ l a d e l as Palmas e I s l a Com­
d i o d ía h abía i n terru m p i d o s u prida). (Revista trimestral en
j uego c u ando a parec i ó e l d i s­ Esta lancha era s i n d u d a u n a
co, s ó l o retornó a l a terraza a d e l a s util izadas normal mente
castellano)
conc l u i rl o a las 1 5 hs. (cuando por e! For de Copacabana. No
l a observac ión ya h a b ía fi n al i­ s abemos s i s u t r í p u l ación vio Apartado 282
zado) y no a l m o rzaron h as t a l as d espegar el Ovn i , pero p uede

Esp3.ña
1 7 horas. presu m i rse q ue l o vio en razón
En c u anto a l l l a m ad o telefó­ de que lo hab ría tenido a l a v i s­ Barcelona -

n i co p racticado p o r el señor ta m ucho antes de l legar a l a

J oao Agui ar, l o fue a l a P refec­ zon a d e s d e donde s e elevó y
t u ra (Policía de P ue rto) , cuya quedó el " aro b l anco".
26 - . OVNIS
 PROCESAM1ENTO

A l SIS COM PARATIVO DE

·

OBSE RVAC IONES DE OVNIS EN

ARGEN TI A, CHILE Y URUGU AY
Por Roberto E. Banchs

Asistente en D i s e ñ o ka � •: e c ! ó n i c o , y estudiante MUFON), l l i m o is, USA.

superior de A r q u i t e c ; -.� ra en la Un iversidad de Colaborador de n umerosas publ icaciones especia­
Belgrano. l izadas, e n tre el las, "Skylook", " Data-Net" ( US A ) ,
D i rector del C en: r o de Fenó menos Aéreos l nusuales ·'Fiying Saucer Review" (England), "Stendek" (Es­
paña), etc. Autor de " Fenómenos Aéreos l n usua­
a revista Atom, d u rante 1 9 74. les" (1 973), y dei " UFO Manual", a p ublicarse por
( C E FA I ) .
S u bd irector de
R e p resen a n e argentino de la M utual UFO Network el Observatorio de Newchapel , I n g laterra).

Aparentemente el fenómeno Ovnl responde a leyes propias que mantienen una uniformidad espa­
cio-temporal, Independiente de toda delimitación política.

Cotej ar u n as medici ones con otras, analizar l. ANALISIS DEL G RAFICO ANUAL
ciertos aspectos del conj unto, t razar tendencias
a t ravés del tiempo, ded u c i r una norma de com­ U n a observación detenida del g ráfico y datos
portamiento y con e l l a p redec i r los posi bles estad ísticos an uales, nos permite establecer l o
res u ltados en ciertas condiciones fijadas, s o n s i g u iente :
a l g u nos d e l o s p ropós itos q u e están a n uestro a) Hay períodos en los cuales se acrecienta l a
alcance a fin de esc l a recer el problema de los
OVN IS. Y esto se logra por medio de la esta­
d ística, pero i nvariabl emente necesita y a la vez C,'?; lrtCA 1lrj{f'ISIJ�l
p rovee i nformación para permitir su función.
S i g uiendo l a l ínea mencionada, el aboramos ;----T -:-· ; ..-¡-- - l
.
1 /. 0

un trabaj o basado en l os avistam ientos d e OVN I S

ocurridos e n Argentina, C h i l e y U r u g u ay (en total
i
¡ ---�-¡
¡ ¡
¡ - 1;
r

TJ
1 '!)

(4.661 .385 km2), oc u rridos e ntre 1 947 a 1 968, l o

!
lOC
q ue representa u n p erío d o de 2 2 años conse­
c utivos. 00
_: - , _ ,

Para este estudio hemos util i zado u n total de

: : :
965 i nformes que se dP-sglosan de l a s i g u iente '0

--T-t--:----1--
manera: 662 en Argentina, 1 86 en Chile y 1 1 7 1

e n U r u g u ay.

:--�;·+t J
'

Los casos en part i c u l ar, q ue por s u extensión

res u lt a i m posible i n c l u i rlos aq u í , se encuentran
en " Fenómenos Aéreos l n usuales", un catálogo
general de observac iones que consta d e 62 pági­ Ai
n as publ icado por el autor de este i nforme. Ade­
más, parte del p resente tratado está í n c l u ido
en el estudio com pa rat ivo de l os avistam ientos
correspondientes a C h i l e y U r u g u ay, p u b l i cado
en "CEFA I-Revista" n 9 2 , m ayo d e 1 974.
Con este mate ri a l , a part i r de e ntonces i n i c i a­
mos con e l señor M i l ton H o u rcade, a q u i e n ag ra­ 1\Msr s ¡ t

dezco enormemente su encomiable esfuerzo, l a

etap a f i n a l d e l trabaj o q ue aq u í p resentamos.
Gráfica de variaciones mensuales.

OVNIB --. 1'1

 1 1 . ANALISIS DEL GRAFICO M ENSUAL
cantidad de i nformes OVN IS.
b) Dichos períodos s e dan e n forma i rregu lar.
e) Los períodos de acrecentam iento se p resen­
tan en los años : 1 947, 1 950 1 954/55, 1 958/59, a) Los resu l tados estad ísticos e;1tre los tres
' pa íses considerados vuelven a ser coinciden­
1 965 y 1 968.
d) Luego de u n período de ac recentam iento se tes, como ocu rre en el bal ance anual.
b) El mes de j u l i o s u rge con evidente contraste,
p roduce u n verti g i noso descenso, que osc i l a
entre u n 6 0 y u n 1 00 % c o n respecto al a ñ o como el de mayor afl uencia de i nformes ' si-
anterior. S o n notables en este sentido los g u iéndole l uego m a rzo.
años 1 948-1 949, e l período que va desde e) Otro g ru p o i ntegrado por aq uel los meses en
1 951 a 1 953, y también el año 1 960. q ue también se da esta coincidencia de una
e) La apreciación de la d iferencia c uantitativa m ayor afl uencia de i n formes, son : enero,
existente entre los pe ríodos de mayor canti­ m ayo y noviembre.
dad de i nformes perm ite ordenar a los m is­ d) Respecto a l a cantidad de casos reg i strados
mos en forma dec reciente, de la s i g u iente mensual mente, tenemos en orden decre­
manera: ciente el s i g u iente cuadro:
19 - j u l io
1 9 - 1 968
29 - m a rzo.
29 - 1 965
39 - novie m b re
39 - 1 954/55
49 - mayo
49 - 1 958/59
59 - enero
59 - 1 950
e) Como general idad, podemos d ec i r que -a
69 - 1 947
f)
excepción de Chile y U r u g u ay- Argentina
Los datos estad ísticos obteni dos nos permi­
m a rca u n ascenso conti nuo de i nformes a
ten conc l u i r que, tanto los pe ríodos de recru­
partir del mes de m arzo, y que tiene c u l mi­
dec i m iento como de dec rec i m iento de i nfor­
nación en e l mes de j u lio. Pero los i nformes
mes son coincidentes en los tres países.
de Argentina no descienden en n i n g u n o de
Exi ste un leve desfasaje en los años 1 954/55,
los meses en q u e asci .e nden en los otros dos
y u n a sola excepción del año 1 962 en Argen­
países considerados, lo:que final m ente deter­
m i n a .:JUc l as estad ísticas mensuales arrojen
tina, pero de características aparentes ya q ue
h u bo u n a considerable cantidad de i nformes
ocasionados por la observación de un m i s­ u n a estructura coinc ide nte para los tres paí­
mo fenómeno en u n m i s mo d ía, el 1 3 d e m a­ ses. Esto i n d uce a pensar -a n ivel más p ro­
yo, lo q u e nqs permite red u c i r a l a m itad l a fundo- q u e s u bs iste u n a causa q u e origina
cifra d ada para ese año. E n s íntesis, todo esos i nformes a u n mismo ritmo y s i m u ltá­
esto h ace s u poner la actividad de una rea:­ neamente en los tres países.
l idad motivado ra.
1 1 1 . ANALISIS DEL G RAFICO DIARIO

Habiendo analizado los d atos res u ltantes de

los g ráficos an uales y mensuales, nos p ropone­
,';'f},'l.�flt4
mos estudiar de i n med iato los i nformes, extre­
' -
chando aún m ás nuestros l ím ites tem porales
"OI
11'}
1 •• : .
marcados, para observar la conti n u i dad del rit­
mo i rreg u l ar de l as manifestaciones, pese a q u e
--- 4 -
debemos t e n e r en c uenta q u e u n estudio m á s
pormenori zado req u ie re i ndefectibl emente u n
, mayor número d e i nformes para s u trata m iento.
Veamos, pues, los resu ltados obtenidos.
a) N u evamente se d a u n a total coi ncidencia
. ----+- --¡·· - j -
' '
estructural .
: : b) Se obse rva q ue d u rante la noche se registra
. '
' '
un mayor n ú mero de casos q ue d u rante l as
¡ +-- 1
h oras del d ía.
e) Las h oras de oscu ri d ad entre las c uales se

11
•o reg i stran m ayor cantidad de i nformes son las
' q u e van desde las 18 de un d ía, h asta las 3
del d ía s i g ui ente.
d) El mayor recrudec i m i ento noctu rn o se advier­
! : te entre las 1 8 y las 21 horas.

1
'

._�_'-_-.--� = !�::���· i ,.�

e) El recrudec i m i ento d i u rno se p rod uce entre
:::::
---_
..._____ 3 _- , _
"-_ " ,, 1 ,
las 1 2 y l as 1 5 h oras .
_
_

IV. CONCLUSIONES

Gráfica de variaciones diarias. De l o expuesto, s e p uede i nterpretar fác i l men­

te que existe u n fenómeno que o pera detrás de

28 - OVNIS
 GHA F!CA ANUAl

Gráfica de variaciones anuales.

l os i nformes, regido aparentemente por ciertas
leyes tem po rales aún no descubiertas , lo que
p roduce la asom brosa i rreg u l aridad y coinci den­
c i a apu ntadas.
C reemos q ue es sumamente i m p robable q ue
estos resu ltados sean orig i nados por u n a cam­
paña de p rensa a n ivel i nte rnacional, al g rado de
refi nam iento tal q u e se publi q uen ú n i camente
l os i nformes e n determi nados años, y dentro
de el los, sólo e n d eterminados meses y en deter­
m i n adas horas, s i g uiendo siempre un o rden c re­
ciente y decreciente coincide nte.
Es evidente, i ns i sti mos, q ue los resu ltados de
'
este trabajo nos m uestran la existencia de una
realidad motivadora q ue se e ncuentra detrás del
conj u nto d e los i nformes, q ue no es otra que e l
m ismo fenómeno OVN I .

• •

RECOMENDAMOS:
SEROR ABONADO: RENUEVE SU
"TEORIA DE PROCESOS DE LOS OVNI" SUSCRIPCÍON;
Por Miguel Guasp
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Si en el recuadró superior figura una "X",
Ensayo científico de 160 páginas, 66 ilustra ­
ciones, formato 29,5 x 21 cm.
su suscripción ha cadúcado con la recepción
del presente número. Renuévela l
Un volumen que no debe faltar en la bibliogra
fía selecta del aficionado o del a nalista cien
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tífico Recuerde que no se aceptan pagos supe­

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Enviar giro por u$s 4. 00.- ( dólares america­

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nos ) a la orden de Miguel Guasp, Dr. Vila
Barberá, 8, ValenciA 7. ESPA:&A.
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OYJIIIII · - a
 CASUISTICA
SEG U I M I E TO A
UN AUTOMOVIL
Por J. Víctor Soares
Cósmica Cruz do Sul". Dirección. Caixa Postal 72,
(Ufólogo brasileño. Presidente del grupo " lrmandade
94000, Gravatay, R. R . S u l , Brasil).
(Traducido del portugués por el Dr. Osear A . Gal indez).
-.
Fascinante relato brasileño sobre el seguimiento de un a utomóvil por parte de un Ovni que proyec­
taba un extenso haz coherente de luz.
l. - DATOS PRELIMINARES
Fec h a : 13 de setiem bre de 1 973.
Hora: 01 :30
Lugar: lj u i (20 km de) , R. G. S u l , Bras i l .
Observadores : Lucia Pau l a Peixoto (20 años) ;
M a rcos Gaetner (24) ; Sela Gaetrier Rod r i ­
g u es (29) ; " M an i nho".
11.
- APARICION DEL OVNI
En la madrugada del dia 1 3 de setie m b re de
1 973, Lucia Paula Peixoto, d e 20 años, residen­
te e n la Avenida Gal. Flores da G un h a 6467, V i l l a
Santa Fe, G ravatay, se con d u c ía e n automóv i l
r u m b o a l a c i udad de lj u í en compañ ía de sus
a m igos M arcos Gaertner, Sela Gaertner Rod ri­
g ues y otra persona conocida como " M a n i n h o" .
A l a 01 :30, cuando el veh íc u l o se encontraba
aún a 20 km de ljui, observaron en el c i e l o
u n objeto l u m inoso " c o m o s i fuese u n a g ran
estre l l a" , aunque tenia una coloración azu l c l a­
ra y aumentaba y d i s m i n u ía de tamaño. Pri mera­
mente fue visto por Lucia, quien l uego llamó l a
atención d e los demás.
El extraño objeto comenzó a o descende r ,
aumentando g radualmente de volumen a medida
que se aproximaba a tierra. Su forma era oval y
su color habla vi rado ahora al amari l lo fuerte,
con tendeoncia al rojo. Cuando adq u i rió su tama­
ño máximo, el m ismo era igual al espacio ocu­
pado por u n cuarto d e luna l lena. En l a parte
i nferior poseia un foco l u m i noso del mismo co­
lor amari l l o fuerte, aunque menos b r i l lante,
que era d i ri g ido en la d i rección del automóvil
en que viajaban, pero sin l legar a alcanzarlo.
30 -· OVNIS
BRASIL
: .-
111. - INTERCAM BIO D E SEÑALES
De i n m ed i ato el objeto comenzó a acompañar
al veh rc u l o , situándose al frente y hacia l a iz­
q u ie r d a y manteniendo siem pre la misma d i stan­
cia con relación al automóv i l (entre 2 y 3 k m ) .
Posteriormente asce n d i ó vertical mente hasta
f i i a rse n uevamente como u n a estrel l a o p unto
t Ú m i noso de color azu l cl aro. M a rcos, que se
encontraba al vol ante del auto, comenzó a ma­
n iobrar en zig-zag, apagando y encendiendo
los faros del mismo . I nmed iatamente fue corres­
pondido por el m isterioso ·objeto que i g ualme � te
pasó a d i s l ocarse en zi g-zag, aumentand ? y d is­
m i n uyen d o su i ntensidad de l uz, pero sm apa­
garla por com pleto ; también su foco de luz
o
aumentaba y d i sm i n u ía. de longitud, s i n l legar en
n i ngún momento a i l u m i nar el veh ícu l o o íos
testigos.
IV. - DETENCION DEL VEHICULO
Después de algún tiempo, los testigos -sal­
vo "Maninho"- resolvieron estacionar el ve­
h lculo a la vera deol cami no. Tras dejar encendi­
dos· los faros, Lucia, Marcos y Sel m a ("Mani­
nho" no q u iso partici par porque estaba bastante
atemorizado) se colocaron al frente del auto­
móvil -para ser. vistos- y gesticularon hacia
el objeto. A esta altura de los acontec i m iento s
.
se percataron que estaban observando un posi­
b l e Disco Vol ador. E l objeto, por s u parte, des­
cendió bastante, siempre conservando la dis­
tancia de 2 a 3 km.
Seg ún nuestra entrevistada, Lucra Pauta, el
Ovni p reten d la aterrizar, pues ese descenso l o
El misterioso objeto proyectaba Mc:ia el automóvtt un haz de luz compacto que se retraía y alarga:.
ba.
l levó a pocos met ros del suel o ; pero por al g u n a
causa desconoc ida n o l o h i zo. Los p rotagonis­
tas dec i d ieron retornar a! veh íc u l o y reanudar
l a marcha. E l disco se elevó ento nces verti­
calmente.
V. - R EAN UDACION DEL SEGUIMIENTO
El automóvi l em p rend i ó la marcha n uevamen­
te r u m bo a lj u í y, por tercera vez, el extraño
objeto desce ndió -s iempre sobre la margen
izqu ierda de la carrete ra- p royectando su foco
l u m i noso e n la d i recc ión de los testi gos. Seg ú n
L u c í a este foco l u m i noso era m uy d iferente a
los com unes, y a q u e aumentaba y red ucía su
longitud y parecía estar consti tuido por l u z con­
densada o com pacta.
PROXIM O N U M ERO
Alg un os trtu!os de n uestro N� 8 :
-LA SORPRENDENTE FOTO DE OREGON.
Por Ad rian Vanee.
-E L I N C I DENTE BRUNELLI-PORCH I ETIO : UNA
TELE PORTAC I O N ?
P o r e l D r Osea r A. Gal índez.
. Comunicamos a nuestros lectores que -por razones de
-EXPLICACION C I E NTI FICA D E LOS ANi LLOS
DE HADAS.
.Por Claude Bourtembourg y J aeq ues Scornaux
D u rante todo el tiempo de seg u i m ie nto (cer­
ca de u n a hora) , no notaron n i n g u n a i nterfe­
ren c i a en el aparato de rad i o , ni en el motor
del veh íc u l o o sus l uces.
Seg ú n n uestra e nt revistada, u n a j oven q u e
n o s parec i ó m uy esc larecida, d u rante u n cierto
tiempo de la o bservaci ó n tuvo la i m p resión de
q ue algu ien i n te ntaba -mentalmente- entrar
e n contacto con ella.
Cuando arri baron a lj u í tuvieron conoci m iento,
por conducto d e otras personas, que el m ismo
objetp l u m i noso u otro sem ejante venía siendo
observado en los al reded ores de lj u í, todas l as
n oches, siem p re entre las 01 :30 y 02 : 00 hs. de
la m ad rugada.
Tiempo total de la obse rvac ión : cerca de 60
m i nutos.
-PSICOSIS E N TAN D I L. Por Roberto E. Banehs.
--NOTABLE COMPROBAC I O N EN E L CASO
H ! LL. Por J aeq ues Seornaux.
-UNA DOCENA D E OVN I S SOBRE H EYBELLI.
Por Ergun Ari kdal.
R ESERVE CON T I E MPO E L N<? 8!
A NUESTROS LECTORES
espacio- hemos pospuesto para el N� 8 la continuación
de los trabajos seriados "La Guía del Encuestador" "Ca·
tálogo Preliminar de Manifestaciones Argentinas d el Tipo
1" y "Algunas Constantes en las manifestaciones Argenti·
nas del Tipo 1" •
C ,A . D . I . U .
OVJIIB -. 11
 ( Las c a r t as deben dirigirse a nue.>tra dirección
postal -Casilla de Correo 218. C órd o ba , Argentina­
Y t ie n e n qu e s e r e s cr i ta s co n clari d a d . prefere n t e ­
m en te a máquina, a dos espacios y c o n u n a exten­
sión no m a yo r a una carilla de oficio. El remitente
deberá precisar si autoriza la publicación de su nom­
bre y direc c i ón > .
EPISODIOS RECIENTES
Sr. D i rector:
Me dirij o a Ud. a los fines de hacerle l legar una
información q ue, para m í, es noticia ya que aún
no la he leído en la revista de su di rección.
En efecto, e n la Revista "Así" del 1 1 -2-75 se pu­
bl ica una nota referida al señor Carlos D íaz, em­
pleado ferroviario · de la c i u dad de B a h ía B lanca,
q u ien afirma haber sido ·secuestrado por seres ex­
traterr'lstres que lo cond ujeron a una nave c i l ín drica.
Sus captores le habrían asegurado que tomarían
n uevamente contacto con él dentro de cuarenta
d ías.
Tras esta narración, la m isma p u b l icación cita
otros casos con fechas y nombres de personas y
loca l idades de avistamientos, l os c uales no figuran
-a excepción de uno o dos de e l l os- en vuestra
revista.
No es mi propósito formularle una critica sobre e l
particular, s i n o m á s b i e n interiorizarle de la nota y
sol icitarle su opinión al respecto.
Elver José Romagnoli
Pasaje Brown 856
Alto Alberdi
Córdoba, Argentina
Estamos en conocimiento de las denuncias co­
rrespondientes a los casos citados por Ud. A este
respecto, en nuestro editorial de este número ade­
lantamos nuestra posición sobre la necesidad de
postergar toda publicación de hechos recientes, has­
ta tanto se haya completado -en cada supuesto­
la investigación científica de los mismos.
UN ENTE UFOLOGICO UNICO?
Sr. Director:
Me i nteresaría saber si e l CAD I U es una organ i­
zación independiente, ya q u e ten g o conoc i miento
que existen en e l país n umerosos grupos ufológi­
cos.
Igualmente agradeceré me informe sobre las ra­
zones por las c uales estos centros investigativos
no constituyen un ente ún ico.
Silvia Ferrari
Laprida 138
Paraná, Entre R íos
Argentina
En números anteriores hemos precisado el carác­
ter autónomo del CADIU, así como la conveniencia
de que se constituyan otros nucleamientos indepen­
dientes en las demás provincias argentinas. Esta
circunstancia habrá de redundar en una división
zonal del trabajo que aliviará la labor investigaliva
de los grupos existentes. Por tal motivo no resulta
aceptable la posibilidad de un organismo único,
aunque si es ne�sarlo que la uniformidad metodo-
32 - 0�
lógica presida la labor de todos estos centros ufo·
lógicos.
B I BLIOGRAFIA UFOLOGICA
Sr. Directo r :
Desearía contar c o n u n l istado d e l material bibl io­
gráfico que actualmente tiene en venta el CADI U .
L u í s P a b l o Trumper
E n r i q u e Carbó 62
Paraná, Entre R íos
Argentina
El CADIU no vende libros ni material fotográfico
alguno, pero tiene previsto reseñar las obras ufoló­
gicas más importantes publicadas hasta el presente,
con especificación de las direcciones de los res­
pectivos sellos editoriales. También haremos lo pro­
pio con relación a los grupos extranjeros que ven­
den fotografías y diapositivas atinentes al fenómeno
Ovni.
R I BERA DENUNCIA FRAUDE EN EL PERU
Sr. D i rector:
Le fel ic ito sinceramente por la cal idad y cate­
goría de la p u b l icac ión, y p o r la excelente idea de
reunir en e l la los mejores trabajos ufológicos inter­
nacionales, correctamente traducidos al castellano,
poniéndolos así al a lcance del lector de h ahl�
h ispana.
Es m i deseo esc r i b i rle sobre algo que h a sacudi­
do bastante a la opinión públ ica española, primero
a través de l os reportajes de Juan J osé Ben ítez -
enviado especial del periódico "La Gaceta del Nor­
te", de Bi lbao, y l uego a través de varias entrevis­
tas de Radio y Televisión, en las que yo m ismo he
interven ido.
Se trata -en mi opinión - de u n · probab l e fraude
perpetrado por los miembros de · I P R I peruano, a
cuenta de sus prete n d i d os contactos, primero tele­
páticos y l uego "personales" con seres proceden­
tes de Ganímedes y Apu (Alfa del Centauro). Bení­
tez estuvo veinte d ías en el Perú -donde fue es·
pecia lmente enviado por su periódico- y regresó a
España bastante convencido de lo q u e afirmaban
los del I P R I . Trajo consigo -y como "pruebas"­
varias fotografías de naves de Gan ímedes, Apu, etc.,
que le faci l itaron l os propios miembros del I nstitu­
to Peruano de Relaciones I nterplanetarias.
Ben ítez, cron ista n ivel , receptó de buena fe la h is­
toria s u m i n istrada por los del I P R I , y que c ul m i­
nó con el avistamiento propio de una l uz entre n u ·
bes. El joven periodista tuvo la gentileza de rem itir·
me u n a colección completa de sus reportajes (hace
unos meses me entrevistó en mi domicil io para
su periódico), y, cuál no sería mi sorpresa a l h a l lar
entre " la evidéncia fotográfica" que le s u m i n istrara
el I P R I , una .serie de "caras conocidas". Estas
fueron las s i g u ientes:
a) Una n u be ciclón ica lenticu lar, presentada como
nave de los seres extraterrestres con los que esta­
blecieron contacto. No escapa a su conocimiento,
amigo Gal índez, que hay g ran abundancia de n u bes
lenticu lares e n malas obras sobre Ovnis y que
pretender. hacerse pasar como "astronaves extrate­
rrestres" ;

b) Un fotograma de la película de la Paramount
Pictures "Emboscada a Matt Helm", producida por
l rving A f ien (véase la desaparecida publ icación "Cí­
clope", N<? 1 4), que se pretende atribuir a una "na­
ve de A p u " . Esta foto y la anterior aparecieron e n
e l primer r e portaje, publicado el domingo 2 9 de
e) En el suplemento a todo color de "La Gaceta
setiembre de 1 974;
del Norte", del d ía 6 de octubre, se publ ica (cito
textua lmente) " . . . una ampl iación de una fotografía
de una de las naves de la "Confederación de M un­
dos", tomada por uno de los miembros del I P R I en
Perú. La nave -según han explicado Jos peruanos
que aseguran estar en contacto con los extrate­
rrestres- es tripu lada habitual mente por seres de
Apu o Gan ímedes". Además de una buena memoria
gráfica, poseo un considerable arch ivo fotográfico
q u e he formado en veinte años de investigación. Por
tal razón no tardé en identificar a la supuesta nave
de la "Confederación de Mundos". Se trata del "pla­
til lo" fotografiado cerca de R iverside (California) en
1 95 1 . (Probablemente sea un trucaje más de los
muchos que -sin d uda- se han perpetrado lan­
zando al aire y fotografiando el tapacubos de u n
coche de l a época. Referenc i a : revista "Flying Sau­
cers - Ufo Reports", Dell Publ ishing Co., l nc., 1 967,
no 1 , New York) ;
d) La fotografía tomada sobre C l uj ( Rumania), si­
m i lar a la tan conocida de Rex Heflin (Santa Ana,
Cal ifornia), también pretende ser exhibida como do­
cumento gráfico de una nave de los ganimedianos
o apuanos, etc., etc.
En m i opinión, todo esto inva l i da por completo las
aseveraciones hechas por los miem bros del I P R I ,
q uienes sin d uda se propusieron hacerse u n a pu­
b l icidad gratu ita a costa de l a bobaliconería gene­
ral . Es evidente q ue estas h istorias de extraterres­
tres altos, rubios, bellos, buenos y sabios que vie­
nen a "salvarnos" (pese a que su ética -se g ú n
afirman reiteradamente J o s "contactee"- l e s pro­
h ibe interve n i r en nuestro m undo, lo q ue no deja de
ser una contradicción de la · que nadie parece ha­
berse dado cuenta), ejercen una notable fasc inación
sobre lii gente sencilla, desengañada de las rel igio­
nes oficiales y aferrada de lleno a esta providencial
tabla de salvación ante la i n minente "catástrofe"
que estos señores no cejan de anunciar, j unto con
la f.Jrmulación de d ifusas enseñanzas de matiz más
o menos cristiano.
Advierta, amigo Gal índez, q ue las historias de
contactos, tipo Adamski, Sirag usa, etc. se circuns­
criben sólo a p ueblos blancos y de rel igión cristiana.
Por qué no nos llegan narraciones de este tipo de
Africa o Asia, con extraterrestres "redentores" ne­
gros o amaril los, y q ue basen sus "enseñanzas"
en e l Corán, en el Budismo o en e l Taoísmo? M is­
terio.
Me gustaría conocer su opinión al respecto, aun­
que me te·mo q ue nos hallemos ante u n g igantesco
fraude {al que vendría a añad irse e l - de las piedras
de lea, caso parecido al que expone Von Diiniken
en s u · obra "El Oro de los D ioses", Edic. Martínez
·
Roca, S. A., Barcelona).
Próximamente le haré llegar algunas colaboracio­
nes propias para la excelente revista que usted
d irrge.
Antonio R i bera
Sant Feliu de Co-:lines
Barcelona - España.
Le agradecemos sinceramente sus conceptuosas
apreciaciones sobre nuestra modesta labor y que­
por venir de una de las más conspicuas autorida­
des mundiales en la materia- nos estimulan sobre­
manera a proseguir con renovado entusiasmo nues­
tro trabajo ufológico.
El I nstituto Peruano de Relaciones Interplanetarias
siempre se caracterizó por tomas de posiciones es­
pectaculares, acomP.añadas por · inusitados desplie-
gues publicitarios. Lo lamentable no es solamente
esto último, sino el apresuramiento y la superficiali­
dad- de sus "revelaciones". En varios de nuestros
editoriales hemos llamaí:to la atención acerca de la
mesura con que debe moverse el analista ufológico,
tanto en la evaluación de elementos fotográficos co­
mo en la formulación de hipótesis explicativas sobre
determinados aspecto_s del fenómeno.
El supuesto fraude que Ud. menciona no nos sor­
prende, ya que contamos en nuestros archivos con
otros antecedentes de ese grupo que, en nuestra
opinión, avalarían la impresión general de una linea
seudo-científica que está dañando la imagen de la
verdadera ufología, particularmente en el Perú, en
donde coexisten nucleamientos investigativos de
probidad, como el APRO-Perú y la Agrupación EFE
(Estudio de Fenómenos Espaciales), liderados --res­
pectivamente- por el ingeniero Ermanno Manlero
y el señor Carlos Mora Herrera,
En apretada síntesis consignamos a continuación
algunas de las "andanzas" del IPRI, obviamente
anteriores al "affaire" denunciado:
a) El presidente del IPRI, señor Carlos Paz Gar­
cía, afirma que ese organismo cuenta con elemen­
tos probatorios que avalan la impresión de que la
presencia de los ovnis en diversas partes del mundo
se debe al deseo de seres extraterrestres de tomar
contacto con la tierra. Según sus declaraciones las
Naciones Unidas ha hecho saber que despué de �
la guerra de Vietnam, la aparición de platos vola­
dores que pertenecen a otras galaxias es su mayor
preocupación. (La Razón, Bs. As., 2-8-68).
(Si los supuestos elementos "probatorios" son del
mismo tipo que los entregados al señor Benítez,
los comentarios huelgan. Con respecto a la "de­
claración" atribuida a la ONU, cabe recordar que
su desaparecido �ecretario General, señor U . Thant'
se apresuró a desmentirla categóricamente).
b) El IPRI estudiará en Arequipa la forma de pre­
parar a los seres humanos para un posible cont¡¡cto
con seres de otros planetas. ("La Razón", Bs. As. 2-
9-68).
(Desconocemos los resultados de esos "estudios"
pero presumimos -en funciól1' de lo ocurrido co �
otros grupos argentinos que han puesto en práctica
"sesiones parapsicológicas" de dudoso rigor cien­
tífico- que de las mismas podrían haber surgido
supuestos "telépatas" que mantendrían pretendidos
"contactos mentales con extraterrestres". En des­
cargo de los miembros del I PR I -y es sólo una
-
suposición - cabría pensar en la factibilidad de
que hayan sido burlados en su buena fe, dando ple­
no crédito a las "revelaciones" de esos "ilumina­
dos". Pero esta hipótesis resulta insostenible a la
luz de la documentación fotográfica entregada al se­
ftor Benítez. Es obvio que, como grupo decano del
Perú, los miembros del IPRI tendrían que haberse
percatado fácilmente del verdadero origen de las
e) El IPRI asegura haber descubierto una pista de
placas).
aterrizaje de platos voladores en la zona de Chumo,
al sur del departamento de Cusco. ("La Razón",
Bs. As., 26-9-68).
c ones circ� l�res de piedra , de singular importan­
(Las supuestas "huellas" no eran sino construc­
�
Cia arqueolog1ca, pero no ufológica).
d) El presidente del I PRI asegura que el grupo
d � nde aterrizarían platos voladores. El lugar está
está a punto de descubrir una ciudad subterránea
s1tuado cerca � e la ciudad de Sicuani, Puno, a l
sudeste del Peru. ("La Razón", 1 9-1 1 -68. (Fiel a su
permanente vocación por los desaciertos el IPRI no
pu_do comprobar absolutamente nada).
ficientem�nte elocuentes y nos eximen de mayores
Entendemos que los hechos consignados son su­
comentarlos. Nuestro sincero reconocimiento por la
carta Y su ofrecimiento de colaboración. Nuestras
páginas están abiertas a todos los analistas serios
del mundo, por lo que nos sentiremos honrados
de contarle entre nuestros articulistas.
Arriba y abajo: extraños trazos luminosos captados hacia
mediados de abril de 1 970 por el señor Eduardo Stukert, de
lpanema, Rfo de Janelro, Brasil. En horas de la noche tomó
una docena de fotografías de la ensenada de Urca, variando
las aberturas y los tiempos de exposición a fin de asegurarse
un buen clisé del hermoso efecto representado pqr el claro
de luna reflejadp en el mar. Al revelar las tomas comprobó
que tan sólo 6 placas habían salido bien. Pero en las dos Arriba y abajo: ampliaciones de cada una de las placas.
primeras advirtió que se distinguían con nitidez 4 trazos Cámara: Exacta 1000 (lente Tessar, diet. focal de
luminosos que se reflejaban en el mar. Teniendo en cuenta 50 mm); película: Kodak Plus Pan (125 ASA)¡ abertura:
que el tiempo de exposición fue en cada caso de 20 segundos, 2,8; tiempo de exposición 20 seg.; revelación 8 min. en
puede colegirse que los objetos se movían más rápldarnen· baño D-78 Kodak.
te en el primer clisé (alrededor de 13 km/h), ya que los Atención: SBEDV • Aldtlvo (f.A.D.I.U.
trazos de la segunda fotografía (abajo) son sensiblemente
más cortos. Las tomas Involucradas llevan loa nú�neros 1 1
y 1 2 d e una película de 2 0 secuencias y estjn seguidas de
otros 4 clisés donde ya no aparecen los objetos, Ni el fotó­
grafo ni los familiares qutt le acompal\aban vieron absoluta·
mente. nada en oportunidad de la obtención de las placas.