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La Vida

Vida solo hay una y nosotros los humanos tratamos de aprovecharla al máximo,
conociendo nuestras debilidades y fortalezas, pero ¿Qué sucede cuando nos agobia
los problemas? O ¿Cuando una situación nos hace aferramos más a la vida? La
respuesta para cada persona es diferente y Melissa tiene su punto de vista.

El día de Melissa transcurría normal, como un día común, su situación se empezó a


complicar cuando según ella, iba a su casa. Como siempre a las 9:35pm se dirige a
la estación de Transmilenio donde espera el G43, después de 10 minutos se sube a
su respectivo bus, se baja en la parada de San Mateo. Cuando se prepara para
coger su último transporte se acerca un tipo bien parecido en un carro, ella lo miro y
no le noto nada raro, él muy cordial le preguntó si la podía acercar, obviamente ella
le dijo que no.

Pero las vueltas que da la vida. Pasadas las 10:40pm y Melissa esperando aún su
transporte, este tipo se vuelve acercar y de nuevo le ofrece transporte, con la
diferencia que esta vez ya había otra chica en el carro, lo que a ella le da un poco
más de confianza y decide irse con ellos, la chica carismática y con un cabello
hermoso, como un comercial de shampoo, está en la parte de adelante junto al tipo.
Un man bien parecido de barba y con los ojos claros, habla de todos los estudios
que tiene, como le ha tocado vivir fuera de Bogotá y lo chévere que es la vida en un
pueblo frío.

Melissa impaciente por llegar a su casa solo asiente con la cabeza, esperando su
llegada piensa en qué va a comer. La chica vive unas cuadras antes que Melissa

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