Pontificia Universidad Javeriana.

Relaciones Internacionales.
Epistemología de las ciencias sociales.
Kevin Ferreira Salgado.

La época de la imagen del mundo

El autor en su ensayo buscar estudiar la situación del hombre occidental a partir de la

modernidad, este realiza una descripción sobre las características del mundo moderno, su
esencia y a la vez se le compara con la época que le procede. Mi objetivo es explicar la
manera en la que Heidegger entiende la metafísica y de igual manera analizar sus ideas,
partiendo de sus puntos principales, los cuales son: la empresa y la ciencia.

En este texto “la época de la imagen del mundo” el autor habla de temas como los
fenómenos que se asocian a la era moderna y de igual manera en que se distingue este de
los demás periodos. Para el autor, el mundo se convierte en una representación para el
sujeto, la cual conlleva a que el ser del ente no se busque en el ente mismo sino en la razón
del sujeto que se pregunta por el ser del ente. Heidegger plantea que en la metafísica se
lleva a cabo la meditación sobre la esencia de lo ente, así como una decisión sobre la
esencia de la verdad. Expone también que la metafísica fundamenta una era desde el
momento en que, por medio de una determinada interpretación de lo ente y una
determinada concepción de la verdad, le procura a ésta el fundamento de la forma de su
esencia. Por lo tanto, este fundamento domina por completo todos los fenómenos que
caracterizan a dicha era y viceversa, plantea que quien sepa meditar puede reconocer en
estos fenómenos el fundamento metafísico, ya que la meditación consiste en el valor de
convertir la verdad de nuestros propios principios y el espacio de nuestras propias metas
en aquello que más precisa ser cuestionado.

Según el autor en la metafísica como en la ciencia se lleva a cabo la meditación sobre lo

que existe y sobre la esencia de la verdad. La metafísica fundamenta una época, la cual,
por medio de una interpretación de lo existente y una determinada concepción de la verdad,
procura a esta el fundamento de la forma de su esencia. La edad moderna posee importantes
manifestaciones, tales como su propia ciencia, la cual es denominada como la técnica
mecanicista. Dicha técnica considera el arte como expresión de la vida del hombre y el
“que hacer” humano se convierte en cultura, otro aspecto relevante que plantea el autor, es
el concepto de desdivinización o la perdida de dioses, el cual se puede entender como el
doble proceso de cristianizar el mundo; por un lado, este concepto clasifica principalmente
a “El mundo” como el todo y a lo infinito como lo incondicionado; en segundo lugar,
aparece otro concepto, el cual es el cristianismo, interpreta su propia cristiandad como una
cosmovisión cristiana y de esta forma logra ingresar a la modernidad. El vacío de la
desdivinización se cambia por medio de la investigación histórica y psicológica del mito.

Heidegger plantea que la ciencia griega no era exacta, puesto que para su cultura y en
general en el contexto histórico no era necesario que lo fuera. Por esta razón, resulta difícil
afirmar que la ciencia contemporánea sea más exacta que la de la época antigua, puesto
que, en la antigüedad había métodos distintos para ver lo que existía en dicha era. Lo que
llamamos ciencia en la actualidad es la investigación, lo significativo de esta es que el
conocimiento se convierte en un proceso de control de entes, de la naturaleza y/o de la
historia y por ello resulta importante para la vida contemporánea, otro fenómeno en la
época moderna es el proceso en el que se introduce al arte en el horizonte de la estética, lo
cual significa que la obra de arte se convierte en un objeto de lo vivido y, en consecuencia,
el arte pasa por ser expresión de la vida del hombre. Por otra parte, también expone que el
obrar humano se puede de cierta manera interpretar como cultura. De esta manera, la
cultura, se entendería como la realización efectiva de los valores supremos, por medio del
cuidado de los bienes más importantes para hombre. La esencia de la cultura ocasiona que,
en su calidad de cuidado, ésta debe cuidar a su vez de sí misma, convirtiéndose en una
política cultural.

La ciencia moderna se caracteriza por un proceso fundamental, el cual se denomina

“empresa”. La investigación de la ciencia moderna no solo se basa en la obtención de
nuevos datos, esta se concentra también en encontrar nuevos caminos de búsqueda, los
cuales son desarrollados en verdaderas empresas centradas en la investigación, la
combinación de diferentes ramas de métodos investigativos genera que la ciencia
contemporánea sobresalga, dejando una huella en la historia futura. El significado de
ciencia moderna añadiendo el concepto de empresa con sus nuevas metodologías de
búsqueda, causa la aparición de un nuevo individuo, el cual, reemplaza el título de sabio
por el de investigador. Esta persona es la encargada de dar su visión del dónde y el cómo
se tienen que tratar los diversos temas, también, teniendo en cuenta las diferentes vistas de
la rama de la ciencia. El investigador utiliza y transforma lo existente para dar a entender
los sucesos tanto del futuro como del pasado y crea una nueva forma de interpretar la
ciencia. Esta nueva forma en concebir el mundo es considerada una evolución al
pensamiento antiguo de la edad media, la cual, sustentaba sus investigaciones en el quien
y en el cómo, enfocándose principalmente a la creación o el pasar a la modernidad, en
donde, el hombre se convierte en referente de lo que existe como hombre y se centra en el
pensamiento de hoy siendo reflejado solo una esencia del pasado y así poder lograr un
papel que resalte en la era contemporánea.

Toda ciencia debe estar fundada sobre un sector de objetos bien delimitado, el cual debe
especializarse en el desarrollo del proyecto por medio de su método. La ciencia también
está determinada por el proceso de la empresa. La empresa es un fenómeno que hace que
ninguna ciencia sea reconocida en tanto no haya sido capaz de llegar a los institutos de
investigación. Con la ciencia como empresa el investigador toma el lugar del sabio, pues
no queda lugar para el conocimiento mismo. La ciencia sólo llega a ser investigación
cuando la verdad se transforma en certeza de representación. Ciencia e individuo están
relacionadas, pues aquella le permite a éste instalarse en el mundo, pero al mismo tiempo
le permite conocerlo.

Por lo tanto, podemos concluir que seguimos comparando el pasado con la época actual,
tanto en historia como en naturaleza, la historia y la unión de dichas épocas es todo lo que
marca la esencia y nuestro comienzo de pensar para descubrir la ciencia y por lo tanto
investigarla. El hombre es el protagonista y director de un mundo que el mismo se ha
encargado de convertir en su entorno principal, este se transforma en el centro de
referencia, convirtiéndose en el ente y fundamenta todo lo demás. Heidegger menciona que
la novedad no es tanto la posición que ocupa el individuo, sino el hecho de que la ocupa
por sí mismo. La metafísica antigua pensaba el mundo de manera diferente a los de la época
moderna. Para los griegos, interpretar el mundo era volverse como el mundo; en cambio,
la metafísica moderna interpreta al hombre como un ente supremo, como subjetum, frente
al que todo se convierte en objeto y al mundo como su representación. Esta forma de
concebir el mundo tiene como consecuencia el surgimiento de la subjetividad y el
relativismo. Para Heidegger, las características principales de la Edad Moderna es que el
mundo se convierte en imagen y el individuo en subjetum. Se puede concluir entonces, que
en la Edad Moderna hay una reinterpretación del mundo y lo ente, y un cambio en la manera
en que podemos conocerlos, también cabe destacar que la ciencia, con el paso del tiempo,
se fue convirtiendo en empresa con el fin de obtener un beneficio de esta.

Bibliografía:

 Heidegger, M. (1938). La época de la imagen del mundo. Messkirch.