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Una 'ciudad sostenible' a las orillas del

Duero
 La Junta de Castilla y León construirá en Soria un enclave
empresarial
 También será residencial y con ciertos criterios de protección del
medio ambiente

La zona coloreada será la futura ciudad, cercana a Soria.

Actualizado martes 26/02/2008 14:10 (CET)

ROSA M. TRISTÁN
MADRID.- Compaginar el desarrollo económico de la zona con el máximo respeto
posible al valioso entorno natural que lo rodea es el objetivo que, según el Gobierno
castellano-leonés, ha primado en el diseño de la futura Ciudad del Medio Ambiente
que se levantará a escasos seis kilómetros de Soria, en el municipio de Garray.

Energías limpias, edificaciones realizadas con productos naturales, gestión de


las aguas residuales y reciclaje de las basuras son algunas de las propuestas que
integra el proyecto, que el pasado viernes presentó, en el Círculo de Bellas Artes de
Madrid, la consejera de Medio Ambiente de la Junta, María Jesús Ruiz.

La consejera, frente a las críticas de los ecologistas por el lugar elegido para
levantar la ciudad, defendió la necesidad de este proyecto: "Soria tiene una gran
riqueza ambiental, siempre sostenible, pero a ese objetivo había que superponer la
palabra desarrollo porque nada hay más insostenible que un territorio sin
población y es muy triste ver el éxodo de los jóvenes más preparados de la
provincia", señaló ante un nutrido grupo de representantes empresariales, a los que
pidió su colaboración en esta Ciudad del Medio Ambiente.

El plan, aprobado el año pasado por ley en las Cortes de Castilla y León,
consiste en levantar un enclave urbano en el Soto del Garray, una parcela situada a
la ribera del río Duero. Ocupará un total de 559 hectáreas en las que se
construirán 780 viviendas, un hotel con 300 plazas, centros de investigación
y desarrollo sobre energías renovables y otros sectores relacionados con el medio
ambiente, instalaciones deportivas (entre ellas, un centro de equitación) y un
polígono industrial. En este último, ya se han comprometido a participar 11 grandes
empresas españolas con más de 430 millones de euros, todas ellas con negocios
que están relacionados con la producción agroalimentaria o del sector energético.

Además, los planos incluyen una zona institucional, con un centro de


exposiciones y congresos, otra arqueológica (en la finca hay una necrópolis
medieval) y un parque fluvial que recorrerá las márgenes del Duero y en el que se
organizarán excursiones pedagógicas, una vez que las orillas sean regeneradas.

La propuesta ganadora del concurso, de los arquitectos Patxi Mangado y Félix


Arranz, fue la que delimita la gran parcela en ocho campus diferentes. "Es una
respuesta no urbana porque no habrá calles y los edificios se relacionarán con el
medio natural. Además, se ampliará la protección de las riberas del Duero de
los 25 metros actuales, que es la Red Natura 2000, a 300 metros. En total sólo hay
una calle en toda la ciudad, que ya existía antes de iniciarse", explicó Arranz a EL
MUNDO. En su opinión, Soto de Garray «era un lugar que estaba muy
abandonado».

Creación de empleos
Si la consejera destacó en Madrid el desarrollo que supondrá para la provincia de
Soria esta nueva ciudad –«Se crearán más de 1.000 empleos y colocará a Soria
como una referencia para la generación de oportunidades», dijo en su discurso– su
viceconsejero de Desarrollo Sostenible, José Manuel Jiménez, puso el acento en la
sostenibilidad del proyecto.

Jiménez mencionó que la Ciudad del Medio Ambiente será totalmente sostenible
gracias a que se aplicarán las últimas tecnologías. "Toda la energía eléctrica
provendrá de fuentes renovables, como la energía eólica, la solar, el hidrógeno
y la biomasa. En total, se superarán los 80 megavatios, aunque no se necesiten
tantos. La calefacción funcionará gracias a la biomasa forestal. Los residuos se
convertirán en energía limpia e incluso se reciclará el agua para el riego de las
zonas verdes", aseguró el viceconsejero.

A la entrada de la futura ciudad, a la que se podrá acceder desde la capital


soriana por una pasarela de madera y un puente que cruza el Duero, habrá un
aparcamiento para los vehículos convencionales, puesto que al interior sólo se
podrá acceder andando o en coches eléctricos no contaminantes.

Las obras, según anunció la consejera a EL MUNDO, comenzarán a finales de este


año o principios de 2009 y se espera que estén finalizadas totalmente para
2011. De hecho, el proyecto de la Cúpula de la Energía –el edificio institucional– ya
está adjudicado y, según María Jesús Ruiz, se iniciará en breve.p>
Polémica sobre el emplazamiento
Las principales organizaciones ecologistas del país (Greenpeace, Ecologistas en
Acción, SEO/Birdlife y también WW/Adena) se han manifestado en contra del
proyecto de la Ciudad del Medio Ambiente por el emplazamiento elegido. Para
todas, el Soto del Garray es un emplazamiento de gran riqueza natural, tanto
por su masa vegetal (fresno y abedul), como por las colonias de cigüeña y otras
especies de aves (milano real, azor, águila y alimoche) que allí se asientan.

Consideran que esa calidad ambiental, a orillas del río Duero, se verá gravemente
dañada por el proyecto urbanístico, contra el que iniciaron una campaña a nivel
nacional.

Frente a estas críticas, la consejera de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y


León, María Jesús Ruiz, argumenta: «Enclaves como éste hay miles en toda la
comunidad; claro que tiene valores ambientales, como todo el suelo rústico de
Soria. Pero es inadmisible acusar a esta consejería de actuar contra el medio
ambiente; Soria merece un proyecto que genere trabajo y la sitúe en el
futuro».

Respecto a la elección del Soto de Garray y no otra finca más deteriorada respondió
que «se eligió por ser una superficie grande de un propietario, por estar al
lado de Soria y junto al Duero». «Estoy convencida de que no impactará a la
fauna de la zona», declaró.

La ciudad ‘ecológica’ de Soria se


asentará en suelo protegido
La Ciudad del Medio Ambiente que pretende construir la Junta de Castilla y
León en Soria alardea de sus criterios sostenibles cuando afectará
drásticamente a un entorno protegido donde no hay infraestructuras.
Carolina Yacamán
07/06/07 · 18:27
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TERRENO PROTEGIDO. La Ciudad del Medio Ambiente se va a construir en una zona con
vegetación centenaria de fresnos, sauces, majuelos y abedules.
Desde mediados de 2003, la Junta deCastilla y León viene planificando
laconstrucción de la Ciudad del Medio Ambiente (CMA) en el municipio
deGarray, Soria. La futura ciudad ecológica,prevista para 2010, albergará800
viviendas en su mayoría unifamiliares,un parque empresarial,
institucionesde I+D de medio ambientey un centro hípico de
referencianacional, en una zona declarada deespecial protección por su
importantevalor ecológico.
Este ambicioso proyecto urbanístico pretende convertirse en un
referente mundial en el ámbito del medio ambiente y la sostenibilidad. Para
ello, la Ciudad del Medio Ambiente anuncia que se construirá y funcionará
estrictamente bajo criterios ecológicos, obteniendo la energía, principalmente, a
través de fuentes renovables (de tipo eólico, solar e hidroeléctrico).
También anuncia que evitará la emisión de gases de efecto invernadero
restringiendo la circulación al interior de la ciudad de coches de gasolina, y
proponiendo el uso exclusivo de coches eléctricos. La construcción de las
casas también se regiría de acuerdo a criterios bioclimáticos. A pesar de que la
Ciudad del Medio Ambiente pretende mostrarse ante la sociedad soriana como
motor de la economía regional y ejemplo de la sostenibilidad, el proyecto no ha
estado exento de polémicas. El principal malestar se debe al
emplazamiento elegido: unos terrenos con la clasificación de suelo no
urbanizable de especial protección que forman parte de la Red
Natura 2000. En términos claros, esta ciudad se va a construir sobre una
Dehesa Boyal, con vegetación centenaria de fresnos, sauces, majuelos y
abedules, y con un excelente estado de conservación del bosque de ribera; una
zona donde, según el Libro Rojo de Aves, habitan aves rapaces amenazadas y
una gran variedad de aves singulares. El proyecto estaría, así, incumpliendo la
Directiva Hábitat, que prohíbe la ejecución de cualquier plan en una zona que
alberga las características mencionadas.
Mientras, el Consorcio para la Ciudad del Medio Ambiente declara lo contrario:
“la actuación no sólo será respetuosa con el medio ambiente sino que además
inducirá mejoras en un entorno de gran calidad”. Los grupos ecologistas, la
Asociación Soriana para la Defensa y Estudio de la Naturaleza (ASDEN),
advierte n de que será inevitable una alteración drástica del ecosistema
cuando se pretende construir una ciudad en un entorno que carece de
infraestructuras y servicios de algún tipo. Según Carlos González miembro de
ASDEN, “la mayoría del suelo donde se va a construir está
calificado como no urbanizable especialmente protegido, por lo
que pensamos que para cambiarle la calificación a este suelo y
hacerlo urbanizable, la Consejería de Medio Ambiente tendría que
presentar unos informes, de acuerdo con la ley, que dijeran que esos suelos
se descalifican porque han perdido esos valores naturales que en su
momento motivaron esa catalogación. Y esto no lo pueden hacer, pues
los valores naturales se preservan hasta el momento de manera íntegra”. El
descontento de la sociedad soriana se ha visto fortalecido por el procedimiento
que ha elegido la Junta de Castilla y León para asegurar su construcción, que en
vez de tramitar el proyecto como cualquier plan urbanístico ha
preferido tramitarlo como ley.
Argucia legal
La estrategia de la Junta se viene fraguando desde el 18 de diciembre de 2006,
cuando modificó la Ley de Ordenación del Territorio, en la cual se permite
tramitar como ley “los proyectos regionales de excepcional relevancia para el
desarrollo social y económico”. Tres meses más tarde, el 13 de marzo de 2007,
por la vía de urgencia, en lectura única y gracias a la modificación legal de
diciembre, se tramitó el proyecto de la CMA como de Interés Regional por el
Consejo de Gobierno. De esta manera, los terrenos pasaron a ser urbanizables.

Con este procedimiento, la Junta evita un posible parón judicial y


asegura que la ley sólo se pueda recurrir ante el Tribunal
Constitucional, lo que implica un proceso más complicado y largo que
recurrir una recalificación. Además, durante el proceso, el Tribunal no tendría
por qué declarar una paralización cautelar, lo que significa que pueden
pasar años hasta una resolución; y para entonces la CMA puede estar en su fase
de construcción, con su consiguiente afección al espacio natural. Según Carlos,
se trata de un pelotazo urbanístico. “Las 200 hectáreas ha) del Ayuntamiento de
Garray y las 300 ha de Caja Duero, al estar calificadas como de especial
protección, tienen un valor de mercado cero, puesto que no se pueden
edificar. Se han puesto de acuerdo con la Junta de Castilla y León para
conseguir la reclasificación y, así, han pasado de no valer nada a
muchísimos millones. Es la única explicación que encontramos, pues en Soria
hay terreno de sobra al ser una provincia con muy poca población”.Las
alegaciones presentadas por ASDEN ante la Junta ponen de
manifiesto cómo la zona también presenta peligro de inundaciones,
por lo que incumpliría también la Ley 5/1999 de Urbanismo de
Castilla y León y la Ley de Aguas, que en su artículo 9 dice: “en áreas
amenazadas por riesgos naturales como inundaciones, no se permitirá
ninguna construcción”.
Los grupos ecologistas, las asociaciones de vecinos, así como CC OO y UGT
proponen la alternativa de ubicar la CMA en Soria, y aprovechar las
infraestructuras y ya recursos existentes para evitar una catástrofe ambiental.

ALIANZA DEL CAPITAL PRIVADO


La inversión prevista por la Junta de Castilla y León para la ciudad es de más de
500 millones de euros. Contará con apoyo privado, puesto que es bastante difícil
construir una ciudad que carece de infraestructuras con financiación pública
exclusivamente. Hasta el momento, cuenta con el apoyo de Telefónica,
Iberdrola y el grupo ACS, que participan a través de sus filiales de servicios
ambientales para obtener beneficios 'verdes'. El 27 de abril se cerró un acuerdo
que permite al grupo ACS construir la primera instalación de todo el mundo para
generar energía en forma de gas a partir del aprovechamiento de los residuos
urbanos, y crear un Centro de Investigación para avanzar en el aprovechamiento
de los residuos urbanos, con una inversión prevista de 24 millones de euros.
Iberdrola pretende abastecer el 50% del alumbrado público y el 50% del transporte
interno (que será eléctrico).

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