Antes de nombrar las disposiciones constitucionales que sirven como fuente del derecho aduanero,

resulta necesario indicar primeramente que la constitución es la norma jurídica suprema positiva
que rige la organización de un Estado, estableciendo la autoridad, la forma de ejercicio de esa
autoridad, los límites de los órganos públicos, definiendo los derechos y deberes fundamentales de
los ciudadanos y garantizando la libertad política. Por ende, esta prevalece sobre las demás normas
jurídicas, lo cual concuerda con lo establecido en la pirámide de Kelsen. Ahora, dichas disposiciones
que sirven de fuente para el derecho aduanero son las que se presentan en los siguientes artículos:

Artículo 59: El cual establece el rol económico del Estado, estimulando la creación de riqueza y
garantiza la libertad de trabajo y la libertad de empresa, comercio e industria.

Artículo 63: Disposición que promueve la inversión nacional y extranjera bajo las mismas
condiciones. Asimismo, establece que en el caso de que otro país o países adoptan medidas
proteccionistas o discriminatorias que perjudiquen el interés nacional, el Estado puede, en defensa
de éste, adoptar medidas análogas.

Artículo 64: Establece que el Estado garantiza la libre tenencia y disposición de moneda extranjera.

Artículo 74: Establece la primacía del principio de Legalidad respecto a La Constitución Del Régimen
tributario y presupuestal.

Artículo 118: Donde se establecen atribuciones del Presidente de la República:

(...)

8. Ejercer la potestad de reglamentar las leyes sin transgredirlas ni desnaturalizarlas; y, dentro de

tales límites, dictar decretos y resoluciones.

11. Dirigir la política exterior y las relaciones internacionales; y celebrar y ratificar tratados.

20. Regular las tarifas arancelarias.