El término “lluvia acida” fue empleado por primera vez por el químico británico Robert Angus Smith,

al observar las precipitaciones que caían sobre Manchester el año de 1853, en plena revolución
industrial. Smith comprobó que la acidez del agua de esas lluvias corroía los metales, desteñía la
ropa puesta a tender e incluso hacia enfermar a las personas y dañaba los vegetales. Hoy
cualquier precipitación que tenga un pH inferior […]

http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S2007-40182010000200009

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