Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Hematología
CONSENSOS NACIONALES • PUBLICACIÓN OFICIAL
Dirección:
Hospital de Clínicas «Dr. Manuel Quintela»
8° piso. Avda. Italia s/n.
CP 11.400. Montevideo, Uruguay.
Teléfono: (598 2) 487 5842
Sitio web: http://www.dcmedicina.edu.uy
Siempre se agradece la difusión del contenido de este libro y se permite su reproducción parcial cuando
lo autoricen por escrito el editor y los autores, no sea con fines de lucro o plagio y se envíe copia de
lo publicado a la editorial. También se estimula la lectura y el uso compartido del libro entre los estudiantes,
pero nunca su copia reprográfica ilegal ni mediante ningún otro medio no autorizado.
ISBN 9974–648–38–2
Presentación
De este trabajo multidisciplinario surgieron las pautas que publicamos en este libro.
Se sugieren los principales estudios de valor diagnóstico. Se presentan las principales
opciones terapéutica y los trabajos internacionales más importantes que avalan esas
conductas. Para los niveles de evidencia se tuvieron en cuenta la categorización del
Instituto Nacional del Cáncer «US National Institute of Health» y las del National Com-
prehensive Cancer Network, NCCCN.
ticular la conducta más apropiada. El desafío futuro es mantener este estilo de trabajo
conjunto, superarlo y actualizarlo periódicamente.
5
Contenido
7
51 Consenso Nacional de Leucemia linfoide crónica
COORDINADORA GENERAL Prof. Dra. Martha Nese. Coordinadores: Hugo Isaurralde,
Mariana Stevenazzi. Cátedra de Hematología, Departamento Clínico de Medicina
ELABORACIÓN PRE CONSENSO
Dr. Hugo Isaurralde. Ex Asistente de Clínica Hematológica. Dr. Raúl Gabus.
Hematólogo Serv. Hematología Hospital Maciel. Dra. Mariana Stevenazzi. Asistente
de Clínica Hematológica. Dra. Inés Sevrini. Ex Asistente de Clínica Hematológica.
Dra. Elvira Gossio. Hematóloga Casa de Galicia, FEMI. Dr. Otto Pritsch. Prof. Adj.
Bioquímica Fac. de Medicina. Dr. Ana Luz Rojo. Ex Asistente de Clínica Hematológica.
Dra. Ana Galán. Ex Asistente de Clínica Hematológica. Dr. Juan Zunino. Ex Asistente de
Clínica Hematológica. Dra. Martha Nese. Prof. de Clínica Hematológica
8
CONSENSOS NACIONALES
CONSENSO NACIONAL DE MIELOMAS Y DISCRASIAS PLASMOCITARIAS
comiende administrar tratamiento, se deberá con- gera más grande en la región globulina. Este
siderar el tratamiento sistémico para todos aque- patrón tubular es el que normalmente se en-
llos pacientes sintomáticos con neoplasias de cé- cuentra en los pacientes con mieloma.1
lulas plasmáticas.1 • Mielograma, para determinar el porcentaje de
Los pacientes con gammapatía monoclonal de células plasmáticas medulares. La distribución
significado incierto (MGUS) o con mieloma indo- de las células plasmáticas medulares puede
lente asintomático no requieren tratamiento inme- variar en diferentes sitios.
diato, pero se deben vigilar de cerca en busca de • BMO unilateral (según caso clínico).
signos que evidencien la evolución de la enferme- • Aspirado y/ o biopsia de plasmocitoma (se-
dad.1 gún caso clínico).
• Proteinograma electroforético (PEF), cuan-
tificación de inmunoglobulinas (Ig) en san-
DIAGNÓSTICO INICIAL gre y orina, inmunoelectroforesis (IEF).
• Historia y examen clínico, completos. Las determinaciones y el seguimiento de la
11
CONSENSO NACIONAL DE MIELOMAS Y DISCRASIAS PLASMOCITARIAS
proteína M sérica mediante electroforesis del Estos estudios iniciales que deben repetirse
suero, deben ser llevadas a cabo mediante el en forma periódica, permiten evaluar si la enfer-
mismo método.1,3 La cuantificación de Ig séri- medad es estable o progresiva. Es fundamental in-
cas aporta los valores de base de las Ig para el dividualizar los pacientes asintomáticos estables,
seguimiento y valora el estado inmunitario ge- que no requieren tratamiento, de los pacientes con
neral. Se debe identificar la cadena ligera de la mieloma progresivo sintomático, quienes requie-
proteína M mediante electroforesis por inmu- ren tratamiento inmediato.6,7
nofijación. Los pacientes con MGUS tienen una proteí-
• Examen de proteínas en orina (precipita- na M en el suero, la orina o ambos y menos del
ción con ácido sulfosalicílico, no tirilla) detec- 10% de células plasmáticas en la médula, pero
ta presencia de albúmina, globulinas, proteí- no muestran ninguna otra señal o síntoma de en-
na de Bence Jones (PBJ). Si es (+): PEF en fermedad. El 1% a 2% de los pacientes de MGUS
orina, para determinar la naturaleza monoclo- anualmente acaban desarrollando mieloma, ami-
nal. Cuantificación de cadenas livianas en ori- loidosis, un linfoma o una leucemia linfocítica cró-
na si se trata de un mieloma de cadenas livia- nica, por lo que estos pacientes deben ser obser-
nas (sin componente M en sangre). vados muy cuidadosamente.1
• Radiografías óseas: radiografías del cráneo, Los mielomas indolentes presentan caracte-
costillas, vértebras, pelvis, cintura escapular y rísticas similares, pero pueden tener más del 10%
huesos largos. Se realizará un examen de imá- de células plasmáticas medulares.
genes por resonancia magnética (RM) si se
detecta una masa paraespinal, o si los sínto-
mas indican que puede haber compresión de CRITERIOS DIAGNÓSTICOS (SWOG)
la médula espinal o de la raíz de un nervio. CRITERIOS DIAGNÓSTICOS MAYORES
• Ionograma, calcemia, fosfatasa alcalina, 1. Infiltración plasmocitaria en MO > 30%
deshidrogenasa láctica (LDH). 2. Pico monoclonal Ig G > 35 g/L, Ig A >20 g/L o
• Albúmina sérica y la globulina beta–2 PBJ > 1 g/L
(β2M).5 3. Plasmocitoma demostrado por biopsia.
• Estudio citogenético convencional y/o
FISH. CRITERIOS DIAGNÓSTICOS MENORES
• Proteína C Reactiva (PCR). 1. Infiltración plasmocitaria en MO 10-30%.
2. Pico monoclonal IgG < 35 g/L, Ig A < 20 g/L o
Exámenes adicionales de significado PBJ < 1 g/L.
pronóstico opcionales 3. Descenso de las otras Ig.
Citometria de flujo en médula ósea (MO). 4. Presencia de lesiones osteolíticas.
• Diagnóstico: un criterio mayor y un criterio
Exámenes adicionales generalmente menor o tres criterios menores que deben in-
útiles en determinadas circunstancias cluir 1 y 2.
RM (según caso clínico), TC sin contraste.
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
12
CONSENSO NACIONAL DE MIELOMAS Y DISCRASIAS PLASMOCITARIAS
vencia del paciente con mieloma sintomático a un Pacientes elegibles para trasplante de
promedio de 40 a 46 meses en pacientes con en- células progenitoras hematopoyéticas
fermedad en estadio I, 35 a 40 meses en pacien- (TCPH)
tes en estadio II, y 24 a 30 meses en pacientes en Criterios de inclusión: edad < de 65 años, condi-
estadio III.6, 7, 8, 9 ción biológica adecuada, usar regímenes que no
En la actualidad, el tratamiento de la mayoría sean tóxicos para la stem cell, evitar agentes alqui-
de los pacientes comienza con terapia no alquilan- lantes, nitrosureas y radioterapia:
te para evitar la exposición de las células progeni-
toras y tumorales, a estos fármacos antes del tras- Planes pretrasplante propuestos
plante autólogo o alogénico. (Anexo 1)
Los dos regímenes de inducción más comunes VAD (vincristina, doxorrubicina, dexametasona) 2
son altas dosis de dexametasona en pulsos con ta- A.
lidomida o sin esta10,11,12 o VAD (vincristina + doxo- VAD36 con doxorrubicina forma liposomal 2B.
rrubicina + dexametasona).13,14,15 Talidomida-dexametasona v.o.37 valorando en ca-
En la actualidad, son cinco las estrategias acti- da caso su aplicación dado los mayores riesgos
vas para el mieloma múltiple: de complicaciones, con prevención de TVP (AAS
1. Corticosteroides en alta dosis. o HBPM) 2A.
2. Fármacos antiangiogénicos como talidomida.
3. Quimioterapia convencional. Trasplante de Células Progenitoras
4. Trasplante autólogo o alogénico de progeni- Hematopoyéticas (TCPH)
tores hematopoyéticos de sangre periféricas El TCPH ha contribuido a mejorar la calidad y so-
(PHSP). brevida de los pacientes con mieloma y se ha con-
5. Inhibidores de proteosoma como bortezomib. vertido actualmente en una de las principales indi-
Los regímenes tradicionales incluyen [ver caciones de trasplante en los registros internacio-
ANEXO 1]: nales, que recluta un mayor número de pacientes.
1. VAD.13,14,15 Cabe señalar que la biología de esta enferme-
2. Talidomida oral sola o en combinación con do- dad y la dinámica de su tratamiento hace que el
sis alta de dexametasona.16,17,18,19 TCPH no sea un objetivo definitivo en sí, sino que
3. Dosis altas de dexametasona.10 constituya una herramienta más en un camino a
4. Ciclofosfamida más prednisona. recorrer, donde la combinación de pautas terapéu-
5. Trasplante autólogo o alogénico de células ticas pre y post trasplante son y serán esenciales
progenitoras hematopoyéticas. 21,22,23,24,25,26 para contribuir a lograr la cura de la enfermedad.
6. Bortezomib. 28
7. Melfalán y prednisona. 29,30
8. VBMCP (el protocolo M2): vincristina + car- TRASPLANTE AUTÓLOGO DE CPH
mustina + melfalán + ciclofosfamida + predni- (TACPH)
sona.31,32 Quimioterapia en alta dosis con infusión de proge-
9. VMCP/VBAP: vincristina + melfalán + ciclofos- nitores de médula ósea o sangre periférica autólo-
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
famida + prednisona alternándose con vincris- ga. El fracaso de la quimioterapia convencional pa-
tina + carmustina + doxorrubicina + predniso- ra curar la enfermedad ha llevado al desarrollo de
na.33,34,35 otras alternativas terapéuticas como el trasplante
de células hematopoyéticas.
El Instituto Nacional del Cáncer (US NIH:
MIELOMA MÚLTIPLE AVANZADO 2005) del tratamiento de miles de pacientes, que
ESTADIOS II, III han sido evaluados por los registros internaciona-
El tratamiento de inducción del mieloma se pue- les saca las siguientes conclusiones1:
de dividir en: 1. El riesgo de muerte temprana debido a los
1. Pacientes elegibles para trasplante de células efectos secundarios relacionados con el trata-
progenitoras hematopoyéticas (TCPH). miento se ha reducido a menos de 3% en po-
2. Pacientes no elegibles para TCPH. blaciones altamente seleccionadas.
2. La quimioterapia previa extensiva, especial-
mente con fármacos alquilantes, pone en peli-
13
CONSENSO NACIONAL DE MIELOMAS Y DISCRASIAS PLASMOCITARIAS
gro la hemopoyesis medular y podría imposibi- da general (50 contra 47 meses, P=0,41) con
litar la cosecha de un número adecuado de cé- un seguimiento medio de 33 meses.42 [Nivel de
lulas madre hemopoyéticas. prueba: 1iiA]
3. Los pacientes más jóvenes que gozan de bue- En resumen, los trasplantes dan como resul-
na salud toleran las terapias de altas dosis me- tado un beneficio significativo en cuanto a la
jor que aquellos pacientes con un rendimiento sobrevida, de 12 a 15 meses en pacientes me-
precario. nores de 60 a 65 años, con enfermedad esta-
4. El Grupo Francés de Mieloma en 220 pacien- ble o que responde al tratamiento de quimiote-
tes menores de 65 años de edad que no ha- rapia de inducción, con buen estado de funcio-
bían recibido tratamiento previo y los sometió namiento inicial y con un funcionamiento renal
a tratamiento con cursos alternados de VMCP/ razonable.21,27,38 Los beneficios de trasplante
VBAP en comparación con la terapia de do- no resultan muy claros en pacientes de mayor
sis altas (140 miligramos de melfalán/m2 e irra- edad, pacientes con insuficiencia renal o pa-
diación corporal total fraccionada), seguido de cientes con enfermedad biológicamente agre-
rescate autólogo de médula ósea. La sobre- siva.27
vida y la sobrevida libre de enfermedad esti-
mada a 5 años fue del 52% comparado con el Recomendación:
12% y de 28% comparada con el 10%, respec- El TACPH debe considerarse de primera
tivamente, mejoraron significativamente en el línea estándar luego del tratamiento de
grupo de dosis alta. [Nivel de prueba: 1iiA] La inducción con quimioterapia, en pacientes
sobrevida libre de enfermedad es significativa- menores de 65 años, con condición bioló-
mente mejor para el grupo de dosis altas (P= gica adecuada. A1.
0,01), pero no hay señales de disminución o de Mieloma múltiple estadio II y III de Du-
un punto de estabilidad en la tasa de recaídas rie–Salmon o con factores pronósticos
que indique que alguno de estos paciente se independientes de valor peyorativo.
haya curado.21 Con respuesta completa (RC) o parcial
Un ensayo prospectivo aleatorio de 401 pa- mayor (RPM), descenso del pico monoclo-
cientes menores de 65 años de edad que nal más del 50%, disminución de la infiltra-
no habían recibido tratamiento anteriormen- ción medular > del 50% con el tratamiento
te comparó quimioterapia de combinación de de 1ª línea de quimioterapia:
dosis convencional con terapia de alta dosis y 1. MM respondedores o estables RC,
trasplante autólogo de células madre; la tera- RPM luego de 1era línea de trata-
pia intensiva mejoró la sobrevida media de 42 miento A1 Criterio aceptado por
meses a 54 meses (P=0,04).38 [Nivel de prue- FNR.
ba: 1iiA] 2. MM respondedores o estables lue-
En otro ensayo prospectivo aleatorio, 193 pa- go de terapia de salvataje RC, RPM.
cientes con mieloma múltiple recibieron tras- Criterio aceptado por FNR.
plante autólogo periférico de células madre Es recomendable realizarlo precozmen-
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
después de quimioterapia con dosis altas con te, luego del 3er o 4to ciclo de quimiotera-
selección de CD34 o sin esta. A pesar de que pia para disminuir el daño de la stem cell.
la selección CD34 redujo la contaminación de (Se recomienda hacer la evaluación humo-
las células del mieloma en la cosecha de célu- ral luego de cada ciclo de quimioterapia y
las madre, no se observó una diferencia entre mielograma antes del TACPH; el estudio
la sobrevida sin enfermedades y la sobrevida inmunofenotipico es opcional y según dis-
total.22 [Nivel de prueba: 1iiA] ponibilidad del centro y caso clínico).
Otro ensayo aleatorio de 261 pacientes de 65 El TACHP no se recomienda en pacien-
años de edad y menos sin tratamiento previo tes en recaída con enfermedad progre-
comparó el régimen de VAD seguido por con- siva o refractaria.
solidación intensiva con alta dosis de melfa- La obtención de la RC con la primera lí-
lán contra el mismo régimen seguido por tera- nea de tratamiento, incluido el trasplante,
pia mieloablativa y rescate autólogo de células es un elemento pronóstico significativo de
madre; no se observó diferencia en la sobrevi- valor evolutivo.
14
CONSENSO NACIONAL DE MIELOMAS Y DISCRASIAS PLASMOCITARIAS
recibir o melfalán oral convencional y predni- mioterapia con melfalán (140 a 200 mg/m2) al que
sona versus VAD (2 ciclos) seguidos de una se le podrá asociar la ICT, en caso que no se haya
secuencia de 2 episodios de terapia de alta do- realizado en el primer trasplante.
sis (melfalán 100 mg/m2) con soporte de cé-
lulas madre.44 Con un seguimiento medio de Recomendación: melfalán 200 mg/m2.
hasta más de >3 años, el grupo de trasplante
doble gozó de una supervivencia sin inciden-
tes superior (37% vs. 16% a 3 años, P< 0,001) FUENTE DE CÉLULAS PROGENITORAS
y supervivencia general (77% vs. 62%, P< La fuente de células progenitoras de elección es la
0,001).44 [Nivel de prueba: 1iiA] sangre periférica (PSP). Sin embargo, la elección
de la misma (sangre periférica, médula ósea o am-
Recomendaciones bas) se guiará de acuerdo a los criterios de cada
La estrategia terapéutica de doble tras- Centro de Trasplante, condición del paciente y pre-
plante «Trasplante en tandem» ha dado ferencia luego de ser informado del procedimiento.
15
CONSENSO NACIONAL DE MIELOMAS Y DISCRASIAS PLASMOCITARIAS
16
CONSENSO NACIONAL DE MIELOMAS Y DISCRASIAS PLASMOCITARIAS
17
CONSENSO NACIONAL DE MIELOMAS Y DISCRASIAS PLASMOCITARIAS
resultados equivalentes.30 Los dos regímenes recibieron tratamiento parecen tan altas como
más comunes tradicionalmente han sido MP aquellas en pacientes tratados con VAD en es-
oral (melfalán + prednisona) y ciclofosfamida te ensayo en etapa II.10 [Nivel de prueba: 3iii-
más prednisona oral.21,29,30 Diii]
Las combinaciones de fármacos alquilantes y Las ventajas de este régimen incluyen las si-
prednisona, dados de manera simultánea o al- guientes:
ternante, no han logrado mostrar ser superio- • Administración fácil.
res a la terapia con MP.33,34 [Nivel de prueba: • Ausencia de toxicidad hematológica signi-
1iiA] ficativa.
Un metaanálisis de estudios en los que se • Aplicable a los pacientes de edad y a aque-
compararon melfalán más prednisona con llos con estado de desempeño deficiente.
combinaciones de fármacos concluyó que am- • Evita la quimioterapia con fármacos al-
bas formas de tratamiento poseían la misma quilantes que podría aplicarse mejor más
eficacia.30 ] [Nivel de prueba: 1iiA] adelante.
Los pacientes con recaídas después de la tera-
pia inicial con ciclofosfamida y prednisona, no Talidomida – Dexametasona
tienen diferencia en cuanto a la supervivencia Instituto Nacional del Cáncer
en general (un promedio de 17 meses) cuando (US NIH: 2005)1
se les agrupa de manera aleatoria con VBMCP Talidomida (fármaco antiangiogénesis). La
o VAD.35 talidomida se administra oralmente a diario (en
general entre 50 mg y 200 mg) y ha demostra-
VAD do actividad en pacientes tratados y no trata-
Instituto Nacional del Cáncer dos previamente.11,12,16,18 [Nivel de prueba: 3iii-
(US NIH: 2005)1 Diii]
El régimen de VAD ha mostrado actividad en No se conoce el mecanismo de acción, pe-
pacientes tratados y en pacientes no tratados ro puede incluir antiangiogénesis, interferen-
anteriormente, con tasas de respuesta que os- cia con moléculas de adhesión y liberación
cilan entre 60% y 80%.13,15,36 [Nivel de prueba: de citocinas. La talidomida se ha combinado
3iiiDiii] Ningún estudio aleatorio respalda el con dexametasona, con tasas de respuesta de
uso generalizado de este régimen en pacien- 70% a 80% en pacientes que no habían recibi-
tes que no han recibido tratamiento. do tratamiento anteriormente; la durabilidad y
Este régimen evita la exposición temprana a las consecuencias a largo plazo de esta tera-
los fármacos alquilantes y por tanto disminu- pia primaria continúan sin conocerse.12,37 [Ni-
ye los problema de cosecha de células madre vel de prueba: 3iiiDiii]
y riesgo futuro de mielodisplasia o leucemia Ningún estudio aleatorio respalda el uso gene-
secundaria. Entre las desventajas tenemos ralizado de alta dosis de dexametasona con ta-
la logística para una infusión de 96 horas con lidomida. Los efectos secundarios comunes de
doxorubicina y una tasa de respuesta comple- la talidomida incluyen la sedación, el estreñi-
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
ta baja. Una versión alternativa al VAD substi- miento, la neuropatía periférica y la trombosis
tuye la doxorrubicina por doxorubicina liposo- venosa profunda (28% en un informe cuando
mal, eliminando la necesidad de una infusión se combinó talidomida con dexametasona).
continua (IC), con tasas de respuesta compa- La anticoagulación profiláctica con warfarina o
rables. Nivel de prueba: 3iiiDiii heparina de peso molecular bajo se encuentra
bajo evaluación clínica; las recomendaciones
Corticosteroides en alta dosis deberán esperar hasta que se lleven a cabo
Instituto Nacional del Cáncer más ensayos clínicos.12,37 La talidomida tiene
(US NIH: 2005)1 toxicidad hematológica mínima y es fácilmen-
Se administra una dosis de 40 mg de dexa- te administrable. Ensayos clínicos evalúan las
metasona oralmente durante 4 días consecuti- sustancias análogas inmunomodulatorias de
vos con la misma pauta que la utilizada para el la talidomida. Se analizan también combina-
régimen de VAD.10 Las tasas de respuesta de ciones de talidomida, dexametasona y quimio-
60% a 70% en pacientes que anteriormente no terapia convencional.33,37
18
CONSENSO NACIONAL DE MIELOMAS Y DISCRASIAS PLASMOCITARIAS
19
CONSENSO NACIONAL DE MIELOMAS Y DISCRASIAS PLASMOCITARIAS
20
CONSENSO NACIONAL DE MIELOMAS Y DISCRASIAS PLASMOCITARIAS
21
CONSENSO NACIONAL DE MIELOMAS Y DISCRASIAS PLASMOCITARIAS
38. Child JA, Morgan GJ, Davies FE, et al. High-dose chemothe- tiple myeloma responding to conventional induction chemo-
rapy with hematopoietic stem-cell rescue for multiple myelo- therapy. N Engl J Med 1990; 322 (20): 1430-4.
ma. N Engl J Med 2003, 348 (19): 1875-83, 58. Westin J, Rödjer S, Turesson I, et al. Interferon alfa-2b versus
39. Goldschmidt H, Hegenbart U, Wallmeier M, et al. Factors in- no maintenance therapy during the plateau phase in multiple
fluencing collection of peripheral blood progenitor cells fo- myeloma: a randomized study. Cooperative Study Group. Br J
llowing high-dose cyclophosphamide and granulocyte colo- Haematol 1995; 89(3): 561-8.
ny-stimulating factor in patients with multiple myeloma. Br J 59. Osterborg A, Björkholm M, Björeman M, et al. Natural interfe-
Haematol 1997; 98 (3): 736-44. ron-alpha in combination with melphalan/prednisone versus
40. Siegel DS, Desikan KR, Mehta J, et al. Age is not a prognos- melphalan/prednisone in the treatment of multiple myeloma
tic variable with autotransplants for multiple myeloma. Blood stages II and III: a randomized study from the Myeloma Group
1999; 93 (1): 51-4. of Central Sweden. Blood 1993; 81(6): 1428-34.
41. Badros A, Barlogie B, Siegel E, et al. Autologous stem cell 60. Browman GP, Bergsagel D, Sicheri D, et al. Randomized trial
transplantation in elderly multiple myeloma patients over the of interferon maintenance in multiple myeloma: a study of the
age of 70 years. Br J Haematol 2001; 114 (3): 600-7. National Cancer Institute of Canada Clinical Trials Group. J
42. Segeren CM, Sonneveld P, van der Holt B, et al. Overall and Clin Oncol 1995; 13 (9): 2354-60.
event-free survival are not improved by the use of myeloabla- 61. The Myeloma Trialists’ Collaborative Group. Interferon as the-
tive therapy following intensified chemotherapy in previously rapy for multiple myeloma: an individual patient data over-
untreated patients with multiple myeloma: a prospective ran- view of 24 randomized trials and 4012 patients. Br J Haematol
domized phase 3 study. Blood 2003; 101 (6): 2144-51. 2001; 113 (4): 1020-34.
43. Attal M, Harousseau JL, Facon T, et al. Single versus double 62. Zee B, Cole B, Li T, et al. Quality-adjusted time without
autologous stem-cell transplantation for multiple myeloma. N symptoms or toxicity analysis of interferon maintenance in
Engl J Med 2003; 349 (26): 2495-502. multiple myeloma. J Clin Oncol 1998; 16 (8): 2834-9.
44. Palumbo A, Bringhen S, Petrucci MT, et al. Intermediate-dose 63. Berenson JR, Crowley JJ, Grogan TM, et al. Maintenance the-
melphalan improves survival of myeloma patients aged 50 to rapy with alternate-day prednisone improves survival in multi-
70: results of a randomized controlled trial. Blood 2004; 104 ple myeloma patients. Blood 2002; 99 (9): 3163-8.
(10): 3052-7. 64. Berenson JR, Lichtenstein A, Porter L, et al. Long-term pami-
45. Cunningham D, Powles R, Malpas J, et al. A randomized trial dronate treatment of advanced multiple myeloma patients re-
of maintenance interferon following high-dose chemotherapy duces skeletal events. Myeloma Aredia Study Group. J Clin
in multiple myeloma: long-term follow-up results. Br J Haema- Oncol 1998; 16 (2): 593-602.
tol 1998; 102 (2): 495-502, 65. Rosen LS, Gordon D, Kaminski M, et al. Long-term efficacy
46. Barlogie B, Kyle R, Anderson K, et al. Comparable survival and safety of zoledronic acid compared with pamidronate di-
in multiple myeloma (MM) with high dose therapy (HDT) em- sodium in the treatment of skeletal complications in patients
ploying MEL 140 mg/m2 + TBI 12 Gy autotransplants versus with advanced multiple myeloma or breast carcinoma: a ran-
standard dose therapy with VBMCP and no benefit from in- domized, double-blind, multicenter, comparative trial. Cancer
terferon (IFN) maintenance: results of Intergroup Trial S9321. 2003; 98 (8): 1735-44.
[Abstract] Blood 2003; 102 (11): A-135. 66. Catell D, Kogen Z, Donahue B, et al. Multiple myeloma of an
47. Gahrton G, Tura S, Ljungman P, et al. Prognostic factors in extremity: must the entire bone be treated? Int J Radiat Oncol
allogeneic bone marrow transplantation for multiple myeloma. Biol Phys 1998; 40 (1): 117-9.
J Clin Oncol 1995; 13 (6): 1312-22,. 67. Kyle RA, Gertz MA, Greipp PR, et al. A trial of three regimens
48. Tricot G, Vesole DH, Jagannath S, et al. Graft-versus-myelo- for primary amyloidosis: colchicine alone, melphalan and pre-
ma effect: proof of principle. Blood 1996; 87 (3): 1196-98. dnisone, and melphalan, prednisone, and colchicine. N Engl J
49. Lokhorst HM, Schattenberg A, Cornelissen JJ, et al. Donor Med 1997; 336 (17): 1202-7.
lymphocyte infusions for relapsed multiple myeloma after allo- 68. Skinner M, Anderson J, Simms R, et al. Treatment of 100 pa-
geneic stem-cell transplantation: predictive factors for res- tients with primary amyloidosis: a randomized trial of melpha-
ponse and long-term outcome. J Clin Oncol 2000; 18 (16): lan, prednisone, and colchicine versus colchicine only. Am J
3031-7. Med 1996; 100 (3): 290-8.
50. Einsele H, Schäfer HJ, Hebart H, et al. Follow-up of patients 69. Skinner M, Sanchorawala V, Seldin DC, et al. High-dose mel-
with progressive multiple myeloma undergoing allografts after phalan and autologous stem-cell transplantation in patients
reduced-intensity conditioning. Br J Haematol 2003; 121 (3): with AL amyloidosis: an 8-year study. Ann Intern Med 2004;
411-8. 140 (2): 85-93.
51. Maloney DG, Molina AJ, Sahebi F, et al. Allografting with non- 70. Dispenzieri A, Kyle RA, Lacy MQ, et al. Superior survival in
myeloablative conditioning following cytoreductive autografts primary systemic amyloidosis patients undergoing peripheral
for the treatment of patients with multiple myeloma. Blood blood stem cell transplantation: a case-control study. Blood
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
22
CONSENSO NACIONAL DE MIELOMAS Y DISCRASIAS PLASMOCITARIAS
ANEXO 1 Participantes
Prednisona 60 mg/m2 v.o. d 1-4 ciación Española. Dr. Novoa Ernesto. Hospital Policial, FE-
MI. Dra. Parodi Mónica. Clínica Hematológica, SMI, CUDAM.
Cada 3 semana alternando con VBAP Dra. Pierri Silvia. Prof. Adj. Clínica Hematológica, Hospital
Británico. Dra. Piriz Beatriz. Hospital Lavalleja – FEMI. Dr.
VBAP Pomoli Santiago. Hospital Militar, Serv. Hematología Hos-
pital Maciel. Dra. Rettig Karen. Clínica Hematológica. Dra.
Vincristina 1 mg/m2 (max 2 mg) i.v. d 1 Rocca Alejandra. Clínica Hematológica. Dra. Rojo Ana Luz.
Hospital Policial. Dra. San Martín Rosario. Lab. Central Hos-
BCNU 30 mg/m2 i.v. d 1 pital de Clínicas. Dr. Santos Jorge. CEDEFCO. Dr. Sclavi
Ciclofosfamida 30 mg/m2 i.v. d 1 Jorge. Hospital de Rivera. Dra. Sevrini Inés. Prof. Adj. Clí-
nica Médica A. Dra. Stevenazzi Mariana. Asistente Clínica
doxorrubicina Hematológica. Dra. Sundberg Florencia. CH Pereira Rosse-
Prednisona 20 mg/m2 v.o. d 1-4 ll, CRAMI. Dra. Tejeira Natalia. Clínica Hematológica. Dra.
Testa Graciela. Hospital Salto–FEMI. Dra. Topolansky Lau-
ra. Asistente Clínica Hematológica, CITMO. Dra. Torre Lu-
ján. Prof. Adj. Cátedra de Reumatología, IMPASA. Dra. Touri-
ño Cristina. Prof. Adj. Dpto. Básico de Medicina. Dr. Vázquez
Alberto. Serv. Hematología Hospital Maciel
23
CONSENSO NACIONAL DE LNH: LINFOMAS FOLICULARES, LINFOMAS DIFUSOS A GRANDES CÉLULAS...
25
CONSENSO NACIONAL DE LNH: LINFOMAS FOLICULARES, LINFOMAS DIFUSOS A GRANDES CÉLULAS...
munotipificación por Citometria de Flujo de las He- te del cirujano con un método riguroso y manipu-
mopatías Malignas». lación adecuada del ganglio linfático (GL), son ele-
CD19, CD3, CD56, CD 4, CD 8 más el estudio de mentos determinantes en el diagnóstico lesional.
Kappa y Lambda. El cirujano debe estar familiarizado con este tipo
En los procesos de línea B se continua con de biopsia quirúrgica y los métodos de fijación co-
un segundo paso según los hallazgos con CD5, rrectos. Debe enviarse al patólogo una ficha clíni-
CD22, CD23, FMC7, CD10, CD38 y Bcl–2. Si se ca donde conste el sexo, la edad del paciente, la
sospecha una tricoleucosis o un linfoma velloso de topografía del ganglio o conglomerado selecciona-
zona marginal se agregan CD11c, CD103 y CD25. do para biopsiar. Deben consignarse los datos clí-
Si se halló una proliferación de línea T se estu- nicos.
dia en segunda instancia CD7, TCRαβ y TCRδγ y
si no queda clara la clonalidad del proceso se pa- Manejo del ganglio linfático
sa a un tercer nivel que es el estudio de las regio- Se debe planificar la biopsia con el cirujano. Se-
nes variables del TCR. leccionar la topografía (evitar los ganglios inguina-
Si el proceso es a células NK se estudian les por la presencia de procesos inflamatorios), no
CD16 y CD57. pinzar el ganglio con pinzas traumáticas.
PET. – Citogenética.
Galio 67. – FISH.
RM (cráneo, ósea). – Inmunología.
– PCR.
– Cultivo de tejido y microbiología.
GANGLIO LINFÁTICO. – Bacteriología y virología.
ALGORITMO DE ESTUDIO Realizará improntas por aposición y raspado.
Introducción Es imprescindible la comunicación de todos
La resección con biopsia quirúrgica del ganglio lin- los integrantes del equipo diagnóstico, cirujano,
fático y su fijación posterior son los elementos de- hematólogo, patólogo, oncólogo, bacteriólogo, vi-
terminantes de una correcta interpretación inmu- rólogo y biólogo molecular.
nomorfológica, así como la posibilidad de estudios
de citometría de flujo e inmunogenética. Inmunohistoquimica (IHQ)
La buena obtención de las muestras por par- La pobre reproducibilidad de la IHQ es principal-
26
CONSENSO NACIONAL DE LNH: LINFOMAS FOLICULARES, LINFOMAS DIFUSOS A GRANDES CÉLULAS...
mente causada por una inadecuada fijación del te- expulsión en el líquido contenido en el tubo. El
jido. procesamiento debe realizarse antes de las 4
Los tejidos fijados durante 12 – 24 horas pre- horas.
servan mejor los antígenos.
Las muestras deben ser congeladas para iden- Clasificación recomendada para el
tificar los antígenos. diagnóstico histológico
Clasificación de la OMS o clasificación REAL/
IHQ cuantitativa en los linfomas WHO.1
• Tejidos congelados.
• Tejidos parafinados. IMAGENOLOGÍA
Métodos: utilizando software de análisis de imá- La imagenología tiene un papel fundamental en
genes. el diagnóstico, estadificación, pronóstico y control
a) Medición de la densidad óptica de las células evolutivo de los LNH. Basa su diagnóstico en el ta-
individuales. maño de las adenomegalias. El índice esplénico es
b) Medición de la densidad óptica en secciones también un buen indicador de actividad de la enfer-
de tejido. medad y de la respuesta al tratamiento.
c) Conteo de células blásticas. La radiología general: radiografía de tórax
es de baja sensibilidad y especificidad en el diag-
Recomendación para la obtención, nóstico.
conservación y traslado de muestras para La ecografía tiene buena sensibilidad en el
inmunofenotipo por citometría de flujo en diagnóstico y es útil como control en enfermeda-
LNH des abdominales y pelvianas, siendo útil funda-
• Muestras de sangre y médula ósea: se reco- mentalmente para evitar el exceso de irradiación
gen en tubos conteniendo EDTA (tubo de he- de los pacientes.
mograma). Opción: recoger en heparina evi- La TC es el estudio principal para el diagnósti-
tando su exceso. Plazos de conservación y co y evaluación del tratamiento por su amplia dis-
traslado: La muestra debe llegar al laboratorio ponibilidad y su gran sensibilidad.
antes de 24 horas. (No refrigerar y evitar fuen- La RM está principalmente indicada en el
tes de calor cercanas). SNC, en la evaluación ósea y fundamentalmente
• Muestras de LCR: se recogerán en tubo esté- en la evaluación de la médula espinal.
ril, sin anticoagulantes en tubo con tapa rígida. El PET es capaz de demostrar enfermedad ac-
Otros líquidos biológicos, líquido pleural o de tiva en ganglios aumentados de tamaño y también
ascitis en tubos con EDTA. en ganglios de tamaño normal. Es importante co-
• Muestras biópsicas de ganglios. La mues- nocer el tamaño normal de los ganglios en cada
tra se coloca Suero fisiológico estéril, si pue- uno de los territorios.
de procesarse antes de las 6 horas, de lo con- GANGLIOS TORÁCICOS
trario, ponerla en una solución de RPMI y pro- Esternales: mamarios internos y parietales
cesarla antes de 24 horas. Envío y conserva- anteriores: 6 mm.
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
27
CONSENSO NACIONAL DE LNH: LINFOMAS FOLICULARES, LINFOMAS DIFUSOS A GRANDES CÉLULAS...
28
CONSENSO NACIONAL DE LNH: LINFOMAS FOLICULARES, LINFOMAS DIFUSOS A GRANDES CÉLULAS...
Instituto Nacional de Cáncer (NCI) 2005: La vencia sin complicación mejoró considerablemen-
combinación de rituximab y CHOP (R–CHOP) ha te con el trasplante (46% contra 12%). La super-
mostrado mejoría en la sobrevida libre de enferme- vivencia en general también mejoró considerable-
dad y la sobrevida global en comparación al tra- mente con el trasplante (53% contra 32%).21 (Nivel
tamiento con CHOP solo, administrado a 399 pa- de prueba: 1iiA).
cientes mayores de 60 años con linfoma difuso a Los pacientes que respondieron a la terapia
grandes células B en estadio avanzado (SLE 57%, inicial y que han respondido a la terapia conven-
contra 38%, P = 0,002 y SG 70% contra 57%, P = cional para recaída antes del TMO han tenido los
0,0007, a los 2 años).16 mejores resultados.22,23 El anticuerpo monoclonal
También se mostró en 326 pacientes evalua- antiCD20, puede inducir a una respuesta a un ter-
bles menores de 61 años de edad que el régimen cio de los pacientes con linfoma agresivo recidi-
R–CHOP mejora el intervalo de tiempo hasta el vante de fenotipo apropiado (CD20 positivo).24 (Ni-
fracaso del tratamiento (TFT) y la sobrevida global vel de prueba: 3iiiDiii).
(SG), en comparación con CHOP sólo (TFT 84% Los pacientes que presentaron recaída tardía
contra 62%, P = 0,00003, y SG 95% contra 85%, (más de 12 meses del diagnóstico) tuvieron mejor
P = 0,0036 a los 15 meses).17 sobrevida que los pacientes que sufrieron una re-
Estos dos estudios establecen al R–CHOP caída temprana (la sobrevida a 8 años fue de 29%
como el régimen estándar para los pacientes versus 13%, P = 0,00001).25 [Nivel de prueba: 3ii-
que debutan con linfoma difuso a grandes cé- iA] Aun aquellos pacientes que nunca tuvieron
lulas B. una remisión total con la quimioterapia convencio-
Se continúan investigando modificaciones de nal podrían prolongar la sobrevida sin enfermedad
CHOP y R–CHOP mediante el aumento de dosis, (31% a los 5 años) después del tratamiento con
reducción de los intervalos entre ciclos y la combi- dosis altas de quimioterapia y trasplante de célu-
nación de nuevos fármacos. las madre hematopoyéticas si mantienen quimio-
sensibilidad a la terapia de reinducción.26 [Nivel de
Recomendaciones de tratamiento es- prueba: 3iiiDii].
tándar:
• 6 –8 CHOP + rituximab (R–CHOP) Recomendaciones
(categoría 1). 1. Candidatos a altas dosis de quimiotera-
• Quimioterapia en combinación sola- pia
mente: CHOP 14, m BACOD, CHOP– Dos o tres ciclos de quimioterapia intensi-
E ± R (2B). va previa al trasplante. El plan de elección
• Trasplante autólogo de médula ósea dependerá del o los tratamientos previos y
en primera RC para pacientes con alto la duración de la remisión.
riesgo de recaída, IPI > 2 y/o Bulky. RICE, RIME, ESHAP, ASHAP, m BACOD,
DHAP
Linfoma no Hodgkin agresivo y recurrente Trasplante autólogo de progenitores
en adultos hematopoyéticos
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
29
CONSENSO NACIONAL DE LNH: LINFOMAS FOLICULARES, LINFOMAS DIFUSOS A GRANDES CÉLULAS...
30
CONSENSO NACIONAL DE LNH: LINFOMAS FOLICULARES, LINFOMAS DIFUSOS A GRANDES CÉLULAS...
la sobrevida media fue de 13,6 años, en el 2 de 11,1 Linfoma Folicular indolente estadios
años, en el 3 de 10,8 años y en el 4 de 3,9 años. avanzados (III/IV) asintomáticos
Analizando las características clínicas del pa- La conducta de «watch and wait» es una alterna-
ciente y los factores pronósticos, se deben tomar tiva aceptada para estadios avanzados asintomá-
las decisiones terapéuticas. ticos, fundamentalmente en pacientes añosos con
estados co–mórbidos y con enfermedad avanzada
Tratamiento asintomática.38 De tratarlos, hacerlo como en los
Los LF grados I y II se deben tratar como linfomas estadios avanzados sintomáticos.
indolentes, mientras que los LF Gº III deben ser
tratados como LNH agresivos. Linfoma Folicular indolente estadios
avanzados (III/IV) sintomáticos
Linfoma folicular indolente estadios I–II Son similares los resultados terapéuticos con los
El 15–30% de los LF se presentan en este esta- diferentes esquemas de PQT: ciclofosfamida, CVP,
dio, en este grupo el tratamiento puede tener in- CHOP, CHOP–Bleo, m–BACOD, etc. Hay contro-
tención curativa. versias sobre la asociación de Rt a los planes de
National Cancer Institute 06.2005: La Uni- PQT clásicos. En el M.D. A.C.C. se realizó un es-
versidad de Stanford 5, realizó una evaluación de tudio fase II asociando CHOP–Bleo a Rt para LF
177 pacientes con estadio I (n=74) y II (n=104) III obteniéndose 75% de sobrevida global y 52%
con LNH indolentes tratados con radioterapia de sobrevida libre de enfermedad a 5 años.39 Estu-
(Rt). La sobrevida actuarial a 5, 10, 15 y 20 años dios del NCI y de Stanford no demostraron benefi-
fue de 82%, 64%, 44% y 35%. La sobrevida me- cio con la asociación de Rt a los planes de PQT.40
dia fue de 13,8 años. La sobrevida libre de enfer- Los análogos de las purinas, la fludarabina y
medad a 5, 10, 15, y 20 años fue de 55%, 44%, el claribidine, propician un nuevo grupo de traba-
40%, 37%. Se observaron pocas recaídas luego jos con distintas combinaciones de PQT. Flinn et
de los 10 años.35 al. en LF previamente no tratados utilizaron cilo-
Un estudio similar se realizó en el Princess fosfamida 600 mg/m2 por un día y fludarabina 20
Margaret de Toronto, 699 pacientes con LF esta- mg/m2 por 5 días. Se obtuvo 60% de RC y 32%
díos I y II fueron tratados con Rt de campo com- de RP.41
prometido. La sobrevida global a 5 y 10 años fue En 2003, el M.D. Anderson publicó una serie
de 79% y 62%, y la sobrevida libre de enferme- de 78 pacientes no tratados con LNH indolentes
dad de 56% y 41%.36 en estadios avanzados. Recibieron mitoxantrona
En un intento por mejorar los resultados ob- 10 mg/m2 por un día y fludarabina 25 mg/m2 por 3
tenidos con Rt, el M.D. Anderson realizó un estu- días cada 28 días. Se obtuvo 44% de RC y 53%
dio en 102 pacientes estadios I y II con LNH indo- de RP. La media de progresión libre de enferme-
lente. Los pacientes recibieron 10 ciclos de PQT dad fue de 32 meses con 38% de progresión libre
COP–Bleo o CHOP–Bleo más Rt en campo com- de enfermedad a 4 años.42
prometido. La RC fue del 99%, la sobrevida glo- Las combinaciones con fludarabina obtuvieron
bal a 10 años para los pacientes con LF fue de mayor tasa de respuesta, sin lograr una estabiliza-
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
31
CONSENSO NACIONAL DE LNH: LINFOMAS FOLICULARES, LINFOMAS DIFUSOS A GRANDES CÉLULAS...
32
CONSENSO NACIONAL DE LNH: LINFOMAS FOLICULARES, LINFOMAS DIFUSOS A GRANDES CÉLULAS...
et al., en un estudio aleatorizado con 140 pacientes – Consolidación con TPH autólogo en primera
demostró que el trasplante autólogo de progenito- RC o RP.
res periféricos es superior a la PQT convencional – TPH alogénico ablativo o semiablativo en pa-
en términos de SLE y de SG. En el LF en recaída ciente con compromiso de MO o resistentes.
no demostró ventaja de la purga in vitro.58 – R + m– BACOD (si la características del pa-
Los trabajos ya mencionados sobre resultados ciente no permiten realizar planes más agresi-
de negativización molecular del rearreglo bcl– vos).
2 con planes de PQT con rituximab y los traba-
jos de Gribben sobre la importancia de esta nega-
tivización en la evolución del TAPH48, sugieren que LINFOMAS EXTRANODALES
una PQT con rituximab sería la aproximación ideal SNC
para el trasplante autólogo de progenitores peri- Dexametasona + Mtx a altas dosis 3–5 g /m2.
féricos. Se podría asociar la purga in vivo con an- En menores de 60 años se pueden asociar: Mtx +
ti CD20 en la estimulación previa a la movilización Rt holocraneana.
de progenitores. Recaída:
Los trasplantes no mieloablativos han sur- – Altas dosis de ARA – C.
gido como efectivos en controlar enfermedades
de baja evolutividad. Son una opción válida en pa- Gástrico
cientes portadores de LF en quienes los trasplan- Erradicación de HP con triple plan ATB.
tes alogénicos ablativos tienen una mortalidad su- – Formas indolentes.
perior al 30%. Localizados: Rt.
Khouri et al., utilizaron en 20 pacientes (me- Diseminado: PQT + Rt.
dia 51 años) con linfomas indolentes luego de re- – Formas agresivas: igual a LDGCB.
caída, fludarabina 25 mg/m2 / 5 días o 30 mg/m2 /3
días con ciclofosfamida 1 g/m2 /2 días o 750 mg/
m2 /3 días, 7/20 asociaron rituximab. 9/20 estaban ANEXO 1
en RC preTPH, 20/20 están en RC con un segui- R–CHOP cada 21 días x 6 series.
miento medio de 21 meses.59 Rituximab 375 mg/m2/día i.v., día 1.
Los anticuerpos monoclonales radiocon- Ciclofosfamida 750 mg /m2/día i.v., día 1.
jugados han generado una nueva expectativa. El Doxorrubicina 50 mg/m2/día i.v., día 1.
Zevalin, anticuerpo monoclonal anti CD–20 conju- Vincristina 1,4 mg/m2/día i.v. (máx. 2 mg), día 1.
gado con Ytrium–90, y el Bexxar, anticuerpo mo- Prednisona 100 mg v.o., día 1–5.
noclonal anti CD–20 conjugado con Yodo–131,
han demostrado su efectividad en distintos síndro- R– CVP cada 21 días x 6 series.
mes linfoproliferativos B. Ambos han sido utiliza- Rituximab 375 mg/m2/día i.v., día 1.
dos en asociación a PQT no mieloablativa, o mie- Ciclofosfamida 750 mg /m2/día i.v., día 1.
loablativa con un plan de infusión de células ma- Vincristina 1,4 mg/m2/día i.v. (máx. 2 mg), día 1.
dres autólogas.60, 61 Prednisona 100 mg día 1–5.
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
33
CONSENSO NACIONAL DE LNH: LINFOMAS FOLICULARES, LINFOMAS DIFUSOS A GRANDES CÉLULAS...
34
CONSENSO NACIONAL DE LNH: LINFOMAS FOLICULARES, LINFOMAS DIFUSOS A GRANDES CÉLULAS...
who experience relapse after autologous stem cell transplan- of patients respond to a four–dose treatment program. J Clin
tation for lymphoma: a report of the International Bone Marrow Oncol 1998; 16: 2825–33.
Transplant Registry. Blood 2004;104 (12): 3797–803. 43. Hiddemann W, Forstpointer R, Kneba M,Schmitz N, Schmi-
29. Kaminski MS, Zelenetz AD, Press OW, et al. Pivotal study of tz R, Metzner B, Reiser M, Lengfelder E, Woermann B, et al.
iodine I 131 tositumomab for chemotherapy–refractory low– The addition of rituximab to combination chemotherapy with
grade or transformed low–grade B–cell non–Hodgkin’s lym- CHOP has a long lasting impact on subsequent treatment in
phomas. J Clin Oncol 2001;19 (19): 3918–28. remission in follicular lymphoma but not in mantle cell lym-
30. Witzig TE, Gordon LI, Cabanillas F, et al. Randomized con- phoma: Results of two prospective randomized studies of The
trolled trial of yttrium–90–labeled ibritumomab tiuxetan radio- German Low Grade Lymphoma Study Group (GLSG). Sas-
immunotherapy versus rituximab immunotherapy for patients sion type: Oral. Blood 2004. 104: 50a (abstract 161).
with relapsed or refractory low–grade, follicular, or transfor- 44. Marcus J, Imrie K, Belch A, et al. CVP chemotherapy plus ri-
med B–cell non–Hodgkin’s lymphoma. J Clin Oncol 2002;20 tuximab compared with CVP as first line treatment for advan-
(10): 2453–63. ced follicular lymphoma. Blood 2005; 105: 1417–23.
31. Wiseman GA, Gordon LI, Multani PS, et al. Ibritumomab tiuxe- 45. Herold M, Pasold R, et al. Results of a prospective randomised
tan radioimmunotherapy for patients with re¬lapsed or refrac- open label phase III study comparing rituximab plus mitoxan-
tory non–Hodgkin lymphoma and mild thrombocytopenia: a trone, chlorambucile, prednisolone chemotherapy (R–MCP)
phase II multicenter trial. Blood 2002.;99 (12): 4336–42. vs. MCP alone in untreated advanced indolent Non–Hodg-
32. Jaffe E. Histopathology of the Non–Hodgkin Lymphomas and kin lymphoma (NHL) and mantle cell lymphoma (MCL). Blood
Hodgkin disease. The Lymphomas. Baltimore: WB Saunders 2004; 104: 584a (abstract).
1998. 5; 77–106. 46. Zinzani PL, on behalf of an Italian Cooperative Study Group
33. Solal–Celigny P, Roy P, Colombat P, White J, Armitage JO, on Lymphoma. A randomized trial of fludarabine and mitoxan-
Arranz–Saenz R, Au WY, Bellei M, Brice P, Ca¬ballero D, trone plus rituximab versus CHOP plus rituximab as first–li-
Coiffier B, Conde García E, Doyen C, Federico M, Fisher RI, ne treatment in patients with follicular lymphoma. (Abstract).
García Conde JF, Guglielmi C, Hagenbeck A, Haioun C, Le Blood 2001; 98: 844a.
Blanc M, Lister AT, López–Guillermo A, Mc. Laughlin P, Mil- 47. Gribben JG, Neuberg D, Freedman AS, Gimmi CD, Pesek
pied N, Morel P, Mounier N, Proctor SJ, Rohatiner A, Smith KW, Barber M, Saporito L, Woo SD, Coral F, Spector N, et al.
P, Soubeyran P, Tilly H, Vitolo U, Zinzani PL, Zucca E, Mont- Detection by polymerase chain reaction of residual cells with
serrat E. Follicular Lymphoma International Pronostic Index. the bcl–2 translocation is associated with increased risk of re-
Blood 2004; 104:1258–1265. lapse after autologous bone marrow transplantation for B–ce-
34. Dave SS, Wright G, Tan B, Rosenwald A, Gascoyne RD, Chan ll lymphoma. Blood 1993; 81(12): 3449–57.
WC, Fisher RI, Braziel RM, Rimsza LM, Grogan TM, Miller TP, 48. López–Guillermo A, Cabanillas F, McLaughlin P, et al. The cli-
Le Blanc M, Greiner TC, Weisenburger DD, Lynch JC, Vose J, nical significance of molecular response in indolent follicular
Armitage JO, Smeland EB, Kvaloy S, Holte H, Delabie J, Con- lymphomas. Blood 1998; 91:2955.
nors JM, lansdrop PM, Ouyang Q, Lister TA, Davies AJ, Nor- 49. Ghielmini M, Schmitz SE, Cogliatti SB, Pichert G, Hummerjo-
ton AJ, Muller–Hermelink HK, Ott G, Campo E, Montserrat E, hann J, Waltzer U, et al. Prolonged treatment with rituximab in
Wilson WH, et al. Prediction of survival in follicular lymphoma patients with follicular lymphoma signifincatly increases event
based on molecular features of tumor–infiltrating immune ce- free survival and response duration compared with standard
lls. N Engl J Med 2004; 351: 2159–2169. weekly X 4schedule. Blood 2004; 103:4416–23.
35. Mac Manus MP, Hoppe RT. Is radiotherapy curative for sta- 50. Hochster H, Weller E, Ryan T, Habermann M, Gascoyne R,
ge I and II low–grade follicular lymphoma? Results of a long– Frankel S, Horning S. Eastern Cooperative Oncology Group.
term follow–up study of patients treated at Stanford Universi- Cancer and Leukemia Group B. Results of E1496: A phase III
ty. J Clin Oncol 1996; 14(4): 1282–90. trial of CVP with or without maintenance rituximab in indolent
36. Petersen PM, Gospodarowicz M, Tsang R, Pintilie M, Wells lymphoma (NHL). J of Clin Oncol. ASCO Annual Meeting Pro-
W, Hodgson D, Sun A, Crump M, patterson B, Bailey D. Long– ceedings 2004; Vol. 22, No14S: 6502.
term outcome in stage I and II follicular lymphoma following 51. Solal–Celigny P, Lepage E, Brousse N, Tendler CL, Brice P,
treatment with involved field radiation therapy alone. J Clin Haioun C, Gabarre J, Pignon B, Tertian G, Bouabdallah R,
Oncol ASCO Annual Meeting Proceedings 2004; Vol 22, No Rossi JF, Doyen C, CoiffierB. Doxorubicin–containing regi-
14S: 6521. men with or without interferon alfa 2b for advanced follicu-
37. Seymour JF, Pro B, Fuller LM, Mannung JT, Hagemeister FB, lar lymphomas: final analysis of survival and toxicity in the
Romaguera J, Rodriguez MA, Ha CS, Smith TL, Ayala A, He- Groupe D’Etudes des Lymphomes Folliculaires 86 Trial. J Clin
ss M, Cox JD, Cabanillas F, Mc Laughlin P. Long–term follow– Oncol 1998; 16(7): 2332–8.
up of a prospective study of combined modality therapy for 52. Lenz G, Dreyling M, Schiegnitz E, Forstpointner R, Wandt H,
stage I–II indolent non–Hodgkin’s Lymphoma. J Clin Oncol. Greund M, et al. Myeloablative radiochemotherapy followed
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
35
CONSENSO NACIONAL DE LNH: LINFOMAS FOLICULARES, LINFOMAS DIFUSOS A GRANDES CÉLULAS...
a history of low–grade B–cell non–Hodgkin’s lymphoma. 59. Khouri IF, Saliba RM, Giralt SA, Lee MS, Okoroji GJ, Hage-
Blood 1991; 77(11): 2524–9. meister FB, Korbling M, Younes A, Ippoliti C, Gajewski JL,
56. Bierman PJ, Vose JM, Anderson JR, Bishop MR, Kessinger Mc Laughlin P, Anderlini P, Donato ML, Cabanillas FF, Cham-
A, Armitage JO. High–dose therapy with autologous hemato- plin RE. Nonablative allogeneic hematopoietic transplantation
poietic rescue for follicular low–grade non–Hodgkin’s lympho- as adoptive immunotherapy for indolent lymphoma: low inci-
ma. J Clin Oncol 1997; 15(2): 445–50. dence of toxicity, acute graft–versus–host disease, and treat-
57. Schouten HC, Qian W, Kvaloy S, Porcellini A, Hagberg H, Jo- ment–related mortality. Blood 2001; 98(13): 3595–9.
hnson HE, Doordijn JK, Sydes MR, Kvalheim G. High–dose 60. Cheson BD. Radioimmunotherapy of non–Hodgkin’s lympho-
therapy improves progression–free survival in relapsed folli- mas. Blood 2003; 101:391–8.
cular non–Hodkin’s lymphoma: results from the randomized 61. Witzig TE, White CA, Gordon LI, et al. Safety of Yttrium–90
European CUP trial. J Clin Oncol 2003; 21(21): 3918–27. Ibritumomab Tiuxetan Radioimmunotherapy for relapsed low–
58. Magni M, Di Nicola M, Devizzi L, et al. Succsessful in vivo pur- grade, follicular or transformed non–Hodgkin’s lymphoma. J
ging of CD34–containing peripheral blood harvests in mantle Clin Oncol 2003; 21: 1263.
cell and indolent lymphoma: Evidence for a role of both che-
motherapy and rituximab infusion. Blood 2000; 102: 2351.
Para los niveles de evidencia se siguieron los criterios del Instituto Nacional del Cáncer, US National Ins-
titute of Health (NCI) y del National Comprehensive Cancer Network (NCCN).
Participantes
Dra. Acosta Giselle, Prof. de Anatomía Patológica. Dra. Ar- cina. Dra. Lizarralde Adelina, Hematóloga CAMS Soriano,
bes Patricia, Patóloga. Dra. Bonomi Rossana, Hematóloga AMEDRIN Fray Bentos, FEMI. Dr. Lorenzelli Amilcar. FEMI.
Esp. en Genética Asoc. Española. Dra. Beñarán Beatriz, He- Dra. Magariños Alicia, Ex Asistente de Clínica Hematológi-
matóloga, Ex Prof. Adj. Medicina y Asistente de Hematología, ca, Presidente Soc. Hematología del Uruguay, Serv. Hemato-
CRAMI. Dr. Borelli Gabriel, Asistente Clínica Hematológica, logía Hospital Maciel, CASMU, Casa de Galicia. Dr. Marchet-
Serv. Hematología Hospital Maciel. Dra. Bruzzone Margari- ti Nicolás, Hematólogo Maldonado. Dra. Martínez Claudia,
ta, Clínica Médica C. Dr. Camacho Luis, Clínica Médica C. Clínica Hematológica, Casa de Galicia. Dr. Martinez Lem,
Dra. Caneiro Ada, Hematóloga Hospital Británico. Dra. Car- Ex Asistente de Clínica Hematológica, Director Serv. Hema-
nelli Alicia, Oncóloga COMEPA, Hospital Escuela del Lito- tología Hospital Militar, Asoc. Española. Dr. Méndez Manuel,
ral Paysandú FEMI. Dr. Carnelli Américo, Oncología Clínica. Anatomía Patológica. Dra. Moirano Claudia, Hematóloga
Dra. Carrizo Cecilia, Ex Asistente de Clínica Hematológica, Hospital Rivera. Dra. Monteserin Noela, Clínica Hematológi-
Prof. Adj. Clínica Médica Hosp. Maciel. Dra. Cawen Laura, ca. Dra. Moro Isabel, Clínica Hematológica. Dra. Motta Ga-
Oncología Clínica. Dra. Costa Virginia, Ex Asistente de Clí- briela, CH Pereira Rossell, MUCAM. Dra. Murieda Berta,
nica Hematológica. Prof. Adj. Clínica Médica 2, Hospital Pas- Hematóloga INDO. Dra. Musto Ma. Luisa, Anatomía Patoló-
teur, Hospital Militar. Dr. Correa Fernando, Ex Asistente de gica. Dr. Muxi Pablo, Prof. Agdo. Clínica Hematológica, Hos-
Clínica Hematológica. Prof. Adj. Clínica Médica. Dr. Cuña Al- pital Británico. Dra. Nese Martha, Prof. Clínica Hematológica.
genor, FEMI. Dra. Damiano Sandra, Hematóloga INDO. Dau Directora de la Cátedra de Hematología. Dr. Noble Marcelo,
Carlos, Hematólogo del INDO. Dra. Delgado Lucia, Prof. Hospital de Florida, FEMI. Dra. Novoa María de los Ángeles,
Agdo. Oncología Clínica. Dr. De Bellis Roberto, Prof. de He- Hematóloga Hospital Militar, Asociación Española. Dr. Novoa
matología, Hospital Británico. Dra. Decola Adriana, Oncolo- Ernesto. Ex. Prof. Adj. Clínica Hematológica. Dir. Serv. He-
gía Clínica. Dra. De Galvez Gabriela, Asistente, Clínica He- matología Hospital Policial, FEMI. Dra. Parodi Mónica, Clíni-
matológica. Dr. Desiervo Andrés. Clínica Hematológica. Dra. ca Hematológica, SMI, CUDAM. Dra. Pierri Silvia, Prof. Adj.
Díaz Lilián, Prof. Agdo. Clínica Hematológica. Dra. Di Mat- Clínica Hematológica, Hospital Británico. Dra. Piriz Beatriz,
teo Carina, Prof. Adj. Anatomía Patológica. Dra. Estévez Ana Hematóloga Hospital Lavalleja, FEMI. Robinson Ma Isabel,
Laura. Hematóloga Hospital de San José, AMSJ, FEMI. Dr. Residente Anatomía Patológica. Dr. Rodríguez Robinson.
Gabus Raúl, Ex Asistente de Clínica Hematológica Servicio Prof. Agdo. Oncología Clínica. Dr. Pomoli Santiago, Hema-
Hematología Hospital Maciel, Hosp. Evangélico. Dr. Galeano tólogo Hospital Militar, Serv. Hematología Hospital Maciel. Dr.
Sebastián, Hematólogo. Servicio Hematología Hospital Ma- Porta Daniel. Dra. Rettig Karen, Clínica Hematológica. Dra.
ciel. Dra. García Ana María, Ex Prof. Adj. Clínica Hemato- Rocca Alejandra, Clínica Hematológica. Dra. Rojo Ana Luz,
lógica. Prof. Agdo. Laboratorio de Patología Clínica Hospital Hematóloga Hospital Policial. Dr. Sclavi Jorge, Hospital de
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
Pereira Rossell. Dra. González Marianela, Hematóloga Hos- Rivera. Dr. Fernando Sempol. Dra. Sevrini Inés, Ex Asisten-
pital de Salto. Dra. Gossio Elvira, Hematóloga Casa de Ga- te de Clínica Hematológica, Prof. Adj. Clínica Médica A. Dra.
licia, CUDAM, CAMEDUR, Durazno FEMI. Dr. Giordano Hu- Stevenazzi Mariana, Asistente Clínica Hematológica. Dra.
go, Esp. en Laboratorio Clínico. Asoc. Española. Dra. Gualco Suárez Liliana, Asistente Ontología Clínica. Dra. Sundberg
Gabriela, Esp. Anatomía Patológica. Dra. Iglesias Teresa, Florencia, CH Pereira Rossell, CRAMI. Dra. Tejeira Natalia,
Lab. Central Hospital de Clínicas. Dr. Isaurralde Hugo, Ex Clínica Hematológica. Dra. Testa Graciela, Hematóloga Hos-
Asistente de Clínica Hematológica, Prof. Adj. Dpto. Emergen- pital Salto-FEMI. Dra. Topolansky Laura, Asistente Clínica
cia Hospital de Clínicas, CITMO. Dra. Jordan Ximena, Clíni- Hematológica, CITMO. Dra. Touriño Cristina, Hematóloga.
ca Hematológica. Dra. Kescherman Francis, Asistente Clí- Prof. Adj. Dpto. Básico de Medicina. Dra. Uriarte Rosario. Li-
nica Médica A. Dra. Kollar Patricia, Ex Asistente de Clínica cenciada en Ciencias Soc. Española. Dr. Varela Daniel. Prof.
Hematológica, Servicio Hematología Hospital Maciel. Dra. Agdo. de Clínica Quirúrgica. Dr. Vázquez Alberto. Serv. He-
Lens Daniela, Hematóloga. Prof. Adj. Dpto. Básico de Medi- matología Hospital Maciel
36
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA MIELOIDE CRÓNICA
Consenso Nacional de
Leucemia mieloide crónica
tienen pronósticos equivalentes a los Ph–positivos descenso de la leucocitosis, se puede usar en si-
(Ph+).3,4,5 tuaciones de urgencia.14
El tratamiento de primera línea de la LMC en No se recomienda el uso del busulfán como
fase crónica es polémico y tema de investigación tratamiento, reservándose únicamente para los re-
activa. El único tratamiento curativo de la LMC pa- gimenes condicionantes en el alo–TPH.15
ra más de la mitad de los pacientes es el trasplan- Las técnicas de aféresis pueden usarse como
te alogénico de médula ósea.6,7 medidas de soporte, para disminuir el riesgo del
Muchos pacientes no reúnen las condiciones síndrome de lisis tumoral.
para este método, por la edad, el terreno o la au-
sencia de un donante. Por otra parte, la mortali-
dad relacionada con el tratamiento es del orden de PAUTAS DE DIAGNÓSTICO EN LMC
15% a 30%. 1. Historia clínica y examen completo.
Con el interferón alfa8,9 aproximadamente 10% 2. Hemograma con lámina periférica: anemia
37
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA MIELOIDE CRÓNICA
fase crónica cuando presenta las siguientes LMC. Kvasnicka y col., 2001, propusieron un
características histomorfológicas: nuevo sistema de score pronóstico para pa-
• Médula ósea hipercelular (95% de los ca- cientes con LMC Ph+ fase crónica. Los aspec-
sos) sin representación prácticamente del tos morfológicos más importantes en la BMO
tejido adiposo con casi 100% de tejido he- como parámetros pronósticos en todos los
matopoyético. grupos de riesgo e independientes del trata-
• Hipercelularidad a expensas de hiperpla- miento, son:
sia de la serie granulocítica. • Mielofibrosis: es uno de los aspectos mor-
• Aumento de las capas de células granulo- fológicos más importantes. Tiene correla-
cíticas inmaduras a nivel periosteal y pe- ción con pronóstico y sobrevida indepen-
rivascular (normalmente son 2 a 3 capas diente de los regímenes terapéuticos uti-
de células inmaduras, mientras que en la lizados. Las fibras de reticulina se ponen
LMC llegan a ser 5 a 10 capas). en evidencia por técnicas de impregna-
38
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA MIELOIDE CRÓNICA
ción argéntica y las de colágeno por téc- uno de los parámetros histológicos en mé-
nicas de tricrómico. El aumento de las fi- dula ósea que se consideran de buen pro-
bras argirofìlicas se asocia a peor pronós- nóstico y posibles indicadores de mayor
tico. Análisis de multivariables enfatizan sobrevida. Las células de pseudo–Gau-
que no solamente la fibrosis manifiesta se cher son macrófagos modificados que pre-
correlaciona con mal pronóstico, sino que sentan en su citoplasma restos de células
un aumento borderline de fibras de reticu- fagocitadas. Se ponen en evidencia por
lina (score 1) refleja estadios más avanza- las características de su citoplasma fibrilar
dos de la enfermedad y se asocia con me- birrefringente o el patrón estriado del cito-
nor sobrevida. plasma con técnica de PAS. Los resulta-
• Precursores eritroides nucleados de la mé- dos analizados en la literatura con respec-
dula ósea: la disminución de la cantidad de to al impacto pronóstico de las células de
precursores eritroides refleja la expansión pseudo–Gaucher son ambiguos. La fre-
de la masa celular granulocítica leucémica cuencia con que aparecen en médula ósea
y la progresión de la enfermedad. La mar- de pacientes portadores de LMC Ph+ es
cación con un anticuerpo monoclonal di- mucho mayor de lo que se cree, según al-
rigido contra la glicoforina C, polipéptido gunos autores como Busche G y col, 1997,
de membrana presente en los eritrocitos y su frecuencia puede llegar a alrededor del
sus precursores y la morfometría demues- 70%. Esto hace dudar de su importancia
tran una disminución significativa del lina- pronóstica.
je eritroide en aproximadamente un tercio 4.5. Valora los efectos del tratamiento.
de los pacientes con LMC Ph+ fase cróni- El patólogo debe conocer los antecedentes del
ca, comparado con BMO normales. Si se tratamiento realizado.
utilizan sistemas de graduación semicuan- Los patrones histológicos no son estables y
titativos, una desviación de la relación mie- cambian en el curso de la LMC por la propia
lo/eritroide (M/E) a un valor de 10–12: 1 evolución de la enfermedad y por efectos del
en la BMO, es indicador de mal pronóstico. tratamiento. Estos cambios a nivel de la BMO
Existe correlación entre una marcada dis- ocurren relativamente temprano. Destacando
minución de la eritropoiesis medular, es- las modalidades terapéuticas más importantes
tados más avanzados de la enfermedad y podemos resaltar los siguientes puntos:
disminución significativa de la sobrevida. • Interferón: la monoterapia con interferón
• Megacariocitopoiesis: dada la correlación en LMC tiene un efecto fibrogénico so-
biológica y funcional de la fibrosis y los bre la médula ósea y éste aparece alrede-
megacariocitos, éstos también tendrían dor de los 6 meses del comienzo del trata-
un valor pronóstico. En la literatura exis- miento. En pacientes con tratamiento pro-
ten datos controversiales en relación al im- longado con interferón no debe interpre-
pacto pronóstico del número de megaca- tarse la mielofibrosis como un signo de fa-
riocitos. La LMC Ph+ subtipo megacarioci- se acelerada. Asimismo existe aumento
tíca evoluciona más frecuentemente a una del número de megacariocitos.
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
forma mielofibrótica reticulínica y colagé- • Imatinib: los cambios que produce a nivel
nica, condicionando un curso pronóstico de la médula ósea son, normalización de
desfavorable. Se puede utilizar la inmuno- la eritropoiesis, marcada reducción de la
marcación con un anticuerpo monoclonal granulopoiesis, disminución significativa
(CD61–glicoproteina antiplaquetaria IIIa) del número de megacariocitos con reapa-
para identificar los megacariocitos, prome- rición de formas de tamaño normal y dis-
gacarioblastos, megacarioblastos y micro- minución significativa de la mielofibrosis
formas anormales. Estos elementos pue- en pacientes con fibrosis inicial.
den cuantificarse por métodos morfométri- • Trasplante de progenitores hematopoyé-
cos. El aumento de más de 60–70 mega- ticos (TPH): la presencia de fibrosis em-
cariocitos/mm2 se asocia a peor pronósti- peora el pronóstico, enlentece la recons-
co. titución de la hematopoyesis y aumen-
• Células de pseudo–Gaucher: constituyen ta el tiempo en adquirir independencia de
39
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA MIELOIDE CRÓNICA
fue la primera alteración cromosómica asocia- bién en la ruta mayor con una frecuencia muy
da a una patología neoplásica, confirmando la inferior (1%) se encuentra la trisomía del par
hipótesis de T. Boveri en cuanto a la relación 19, +19.
existente entre alteración genética y desarro- La ruta menor está constituida por la pérdida
llo neoplásico. Se estableció más tarde la pre- del cromosoma Y, la monosomía del par 7 (–
sencia del cromosoma Philadelphia en un ba- 7) la monosomía del par 17 (–17) y la trisomía
jo porcentaje de leucemias agudas linfoides y de los pares 17 y 21 (+17) (+21). Como úni-
excepcionalmente en leucemias agudas mie- ca anomalía estructural, forma parte de este
loides. Los hallazgos citogenéticos guiaron los grupo la translocación entre los pares 3 y 21,
estudios moleculares hacia los puntos de rup- t(3;21)(q26;q22).
tura involucrados. Ello permitió identificar los 6. Estudio molecular por PCR.
genes allí ubicados: a nivel 9 q34 el gen de En el momento del diagnóstico se debe reali-
la leucemia murina de Abelson (ABL) y locali- zar en forma simultánea el estudio citogenéti-
40
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA MIELOIDE CRÓNICA
co y molecular. El ensayo molecular no requie- nocer la linea de base y predecir pacientes con
re la presencia de células en división y pue- alto riesgo de recaída. Durante el tratamiento
de ser realizado tanto en muestras de sangre en los casos con resistencia clínica o respues-
periférica como médula ósea con resultados ta inadecuada al imatinib se sugiere analizar
equivalentes. Permite la identificación de la ex- principalmente las mutaciones que afectan el
presión del gen BCR–ABL y sus isofomas va- dominio kinasa del Abl (P loop y T315) que son
riantes (e1a2, b2a2/b3a2, e19a2) contribuyen- las más comunes y de mal pronóstico (Tefferi
do: al diagnóstico diferencial de LAL Ph (+), A y col., 2005).
LNC o LMC y a identificar el 5% de los pacien- 7. Ecografía abdominal con medición de los
tes BCR–ABL (+) con cariotipo normal. La ca- diámetros esplénicos para control evolutivo.
racterización molecular del clon anómalo en el 8. Fosfatasa alcalina leucocitaria opcional.
inicio de la patología es fundamental también 9. Determinación de vitamina B12 opcional.
para la evaluación de la ERM durante el segui- 10. Estudios de valoración generales:
miento. Se debe considerar realizar en sangre 10.1. Funcionalidad renal: azoemia, creatini-
periférica la determinación de deleciones en el nemia, examen de orina.
cromosoma derivado, 9q(+), mediante FISH y 10.2. Uricemia.
establecer los niveles de transcrito BCR–ABL 10.3. Ionograma.
presentes en la muestra al debut mediante 10.4. Funcional y enzimograma hepático.
PCR cuantitativo (Kantarjian y col., 2004). 11. Estudio de HLA en pacientes candidatos a
6.1. Seguimiento y evaluación terapéutica. trasplante de progenitores hematopoyéti-
La evaluación de ERM en la LMC permite la cos (TPH).
detección de recaídas precoces y con ello la Análisis de quimerismo en el post–trasplante
rápida intervención terapéutica. Debe realizar- de células hematopoyéticas.
se en sangre periférica cada 6 meses median-
te RT–PCR (PCR cualitativo) o Q–PCR (PCR
cuantitativo). La cuantificación de transcritos OPCIONES DE TRATAMIENTO
BCR–ABL en SP y MO ha demostrado resulta- La LMC fue descrita por Bennett, Virchow y Crai-
dos similares y una buena correlación de am- gie en 1845 y desde esa fecha se han utilizado dis-
bos. Estudios recientes han mostrado el valor tintas modalidades terapéuticas. Durante años se
del Q–PCR en predecir un buen pronóstico en empleó la iradiación esplénica, el busulfán o la hi-
aquellos pacientes que mostraron una reduc- droxiurea. En la década de 1970 se introdujo el
ción mayor de 3 log (respuesta molecular ma- trasplante alogénico de médula ósea como trata-
yor). En cuanto a su valor predictivo de recaí- miento de elección en aquellos pacientes que te-
da los datos preliminares sugieren una correla- nían un donante histocompatible. La introducción
ción positiva si bien se requieren estudios con del interferón, a mediados de la década de 1980,
un mayor número de pacientes para estable- constituyó el tratamiento estándar para aquellos
cer conclusiones válidas (Cortes y col. 2004). pacientes que no tenían un donante histocompa-
6.2. Resistencia al imatinib. Se ha descrito tible. El interferón demostró prolongar la sobrevi-
un grupo de pacientes que desarrollan resis- da y respuesta citogenética completa o mayor en
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
tencia al tratamiento con imatinib. Esta puede 10–38% de los casos.1,2 El descubrimiento del gen
ser primaria (previa a la exposición al imatinib) de fusión BCR–ABL, su actividad tirosin–quinasa
o secundaria (post–exposición) siendo los me- y la demostración de que constituía el único even-
canismos de resistencia la amplificación ge- to patogénico en el desarrollo de la LMC, condu-
nómica, sobre–expresión de BCR/ABL, muta- jo a la búsqueda de un fármaco que actuara a ni-
ciones puntuales en el dominio tirosinquinasa vel molecular. La actividad del transcripto BCR –
del Abl. Estas mutaciones son poco frecuentes ABL se definió como blanco de acción terapéutica.
en fase crónica (FC) y su incidencia aumen- El STI571 o mesilato de imatinib, actúa inhibiendo
ta significativamente en estados avanzados de en forma competitiva la fosforilación de quinasas:
la enfermedad y con el aumento del transcrito BCR – ABL y al receptor del factor de crecimien-
BCR–ABL post–remisión. Por ello se aconseja to plaquetario. El mecanismo de acción del Imati-
investigar la presencia de las mutaciones aso- nib es unirse al receptor del ATP en la molécula del
ciadas a la resistencia pretratamiento para co- BCR – ABL, impidiendo la fosforilación de los resi-
41
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA MIELOIDE CRÓNICA
duos de tirosina de ese transcripto y de otras pro- Mesilato de imatinib a la dosis de 400 mg/
teínas. Estudios preclínicos revelaron que el ima- d. 20–22 Los comprimidos deben administrar-
tinib inhibe específicamente la población de célu- se con las comidas preferentemente en el
las proliferantes que expresan BCR–ABL, in vitro e desayuno, o dividido en dos tomas cada 12
in vivo.16 Se ha demostrado su actividad en todas horas, según tolerancia.
las fases de la LMC, pero el mayor número de res-
puestas estables se ha observado en la fase cró- Seguimiento
nica.17–22 Los pacientes en tratamiento con mesilato de ima-
Instituto Nacional del Cáncer 2005.23 El Ima- tinib a la dosis de 400 mg/d en fase crónica deben
tinib inhibe la oncoproteína BCR/ABL. En 454 pa- seguirse con control clínico y hemograma seriado
cientes con LMC en fase crónica resistentes al in- semanal hasta la estabilización de los recuentos,
terferón (INF), el Imatinib indujo respuestas cito- luego de la remisión hematológica completa (RHC)
genéticas en 60% de los pacientes y respuesta he- cada 2 o 4 semanas y posteriormente a la RCC ca-
matológica completa en 95%. El 89% no evolucio- da 4 o 6 semanas. Se tiene que asociar en forma
naron a fase acelerada o blástica con un segui- semanal por 4 semanas funcional y enzimograma
miento medio de 18 meses.16 [Nivel de prueba: 3iii- hepático y luego mensual.
Diii] En 261 pacientes con LMC en fase crónica, re- A los 3 meses de iniciado el tratamiento se
sistentes al INF que fueron tratados con Imatinib, debe evaluar la evolución. Si el paciente está en
con un seguimiento medio de 45 meses, 26%, pre- remisión hematológica completa (RHC) se conti-
sentaron a 4 años negativización del BCR/ABL por núa con imatinib a la dosis de 400 mg/d y se recon-
RT—PCR.(17) [Nivel de prueba: 3iiiDiii] sidera nuevamente a los 6 meses.
Un ensayo aleatorio de 1106 pacientes sin tra- Si no existe RHC o en casos de recaída hema-
tamiento previo, recibieron imatinib o INF más cita- tológica se plantea realización de TPH, si es pasi-
rabina. La tasa de respuesta citogenética comple- ble del mismo o se introduce en estudios clínicos.
ta (RCC) fue del 76% con imatinib en comparación Si no es pasible de TPH o de entrar en estudios clí-
con 14% para el INF más citarabina con un segui- nicos, se aumenta la dosis de Imatinib a 600–800
miento mediano de 19 meses.(18) [Nivel de prueba: mg/d, si lo tolera, o pasa a tratamiento con interfe-
1iiDii] A los 18 meses, 96,7% de los pacientes que rón alfa + citarabina.
recibía imatinib había logrado evitar la evolución A los 6 meses se debe realizar: estudio ci-
a una fase acelerada o blástica en comparación togenético en médula ósea. Si hay RCC se reali-
con 91,5% del grupo que recibía INF más citara- za estudio molecular por PCR en sangre periféri-
bina (P<0,001). ca estableciendo el nivel mínimo de detección de
En un ensayo de 114 pacientes tratados en la técnica (cuando esté disponible, este último se-
1era línea con el doble de la dosis regular de ima- rá sustituido por PCR cuantitativo (PCR en tiem-
tinib (400 mg dos veces al día), después de un se- po real). Si existe respuesta citogenética RCMa o
guimiento mediano de 15 meses, ningún pacien- RCC, se puede continuar con igual dosis de imati-
te ha evolucionado a la fase acelerada o blástica nib. En caso de RCMa se puede aumentar a 600–
y 63% no mostró BCR/ABL por RT—PCR.19 [Nivel 800 mg/d, según tolerancia.
de prueba: 3iiiDiii] Si no existe respuesta citogenética o está en
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
Hasta que no se realicen estudios aleato- recaída, se puede aumentar la dosis a 600–800
rios, no se sabrá claramente si las dosis altas mg/d, según tolerancia, iniciar tratamiento con IFN
darán como resultado respuestas más prolon- alfa + citarabina, o realizar TPH si es pasible del
gadas o ventajas de sobrevida. 23 Todos estos te- mismo.
mas han llevado a una reevaluación activa de las A los 12 meses se repite el estudio citogenéti-
recomendaciones a fin de obtener una terapia de co en médula ósea.
primera línea óptima para la LMC en fase crónica. Si se logra RCC continúa en tratamiento con
imatinib y se realiza estudio molecular en sangre
periférica aclarando nivel de detección mínimo.
TRATAMIENTO DE PRIMERA LÍNEA Si hay RCMa, se aumenta la dosis de imatinib
LMC en fase crónica a 600–800 mg/d según tolerancia, o se continúa
con la misma dosis hasta los 18 meses, o se reali-
Recomendación: za un TPH, o entra en estudios clínicos.
42
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA MIELOIDE CRÓNICA
Presencia en el hemograma de células inmaduras va para la LMC hasta el momento. Se acepta que
(blastos, promielocitos o mielocitos). los pacientes con LMC que reciben un alo–TPH y
Descenso del recuento plaquetario < 50%, con re- logran una remisión molecular con desaparición
lación al recuento pre tratamiento, pero superior a del rearreglo BCR ABL, mantenido durante años
450.000 x 10 9 /l. (indetectable por RT–PCR) pueden considerarse
Persistencia de esplenomegalia con < 50% res- curados. 26-27 En 5725 alo–TPH reportados al IBM-
pecto al tamaño pre tratamiento. TR, entre 1996 y 2001, la probabilidad de sobre-
Respuesta citogenética (RC): vida a los 6 años fue de: 71% en 2720 trasplan-
El estudio citogenético permite evaluar la respues- tes realizados en el primer año luego del diagnós-
ta al tratamiento estableciendo el porcentaje de tico y 59% en 1317 pacientes trasplantados luego
células Ph+. Así se establecen los grupos: del año. La morbilidad del procedimiento y la pro-
– Respuesta nula (RCN) persistencia de babilidad de obtener un donante haploidéntico limi-
más de 95% Ph+ tan el procedimiento, sólo un 30% de los pacien-
43
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA MIELOIDE CRÓNICA
tes tiene un donante HLA idéntico. La sobrevida li- la LMC asocian altas dosis de quimioterapia e irra-
bre de enfermedad y la sobrevida global son cla- diación corporal total o quimioterapia sola. Uno de
ramente superior si se realiza el procedimiento del los más usados es busulfán y ciclofosfamida (Bu/
TPH en fase crónica, que en fase acelerada o cri- Cy). Con estos planes se provoca una adecuada
sis blástica. 28-32 inmuno supresión para lograr el engrafment y ma-
yor posibilidad de eliminación de células leucémi-
Se recomienda realizar el trasplante en cas remanentes, asociando el efecto de la quimio-
fase cónica en el primer año del diagnós- terapia al de GVL.
tico.
Recomendación Bu/Cy
RECOLECCIÓN DE CÉLULAS
HEMATOPOYÉTICAS Los regímenes semiablativos (mini– alo) se
Se comparó la cosecha de células progenitoras basan en el uso de regimenes condicionantes de
hematopoyéticas de sangre periférica (CPSP) vs. menor intensidad, provocan una mejor tolerancia,
médula ósea (CPMO) y se comprobó en la CPSP una menor toxicidad y una menor GVHD aguda.
tiempos de engraftment más rápidos, con un ries- Su objetivo es controlar la enfermedad por medio
go equivalente de enfermedad injerto versus hués- del efecto inmunológico originado por la reacción
ped (GVHD) aguda y una GVHD crónica maneja- injerto versus leucemia (GVL). Está indicado en
ble. Champion et al. en una revisión sobre la expe- pacientes en los que se espera una alta mortali-
riencia del IBMTR y el European Group for Blood dad relacionada al trasplante, ya sea por la edad
and Marrow Transplantation (EBMT), analiza re- u otros factores de riesgo. Con esta modalidad de
trospectivamente la evolución de 288 pacientes trasplante, en general se logra inicialmente un qui-
sometidos a TPH con CPSP vs. 536 con CPMO, merismo parcial, transformándose en completo
todos con donantes relacionados HLA idénticos, con la supresión de la inmunosupresión o con la
sin depleción de linfocitos, con una media de se- infusión de linfocitos del donante (ILD).
guimiento de 12 meses. La recuperación de neu-
trófilos y plaquetas es significativamente más cor- Recomendación: pacientes en los cuales
ta con CPSP (14 vs. 19 días y 18 vs. 25 días), lo se espera una alta mortalidad relacionada
que acortó los tiempos de internación a favor del al trasplante, ya sea por la edad u otros
primer grupo. La incidencia de GVHD aguda no es factores de riesgo.
diferente, pero sí de la forma crónica que es ma-
yor con CPSP. La probabilidad de recaída es simi- El plan de condicionamiento depende del pro-
lar. La mortalidad relacionada al trasplante (MRT) tocolo del centro. Los regímenes más usados son:
y la SLE también son similares en leucemias en Bu/Cy/Fludarabina.
estadios tempranos; siendo la CPSP mejor opción Bu/Fludarabina.
cuando se trata de leucemias avanzadas. La LMC Ciclofosfamida/Fludarabina/ATG.
necesita asociado a la GVHD, el efecto injerto vs. Fludarabina/melfalán.
leucemia (GVL) como uno de los mecanismos de Irradiación corporal total fraccionada a dosis redu-
curación.33 cida.
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
44
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA MIELOIDE CRÓNICA
TRASPLANTE CON DONANTE NO zación tipo ICE, mini ICE y G–CSF, en LMC en fa-
RELACIONADO se crónica tempranas colectadas precozmente. Se
Uno de los principales problemas del alo–TPH es realizó esta técnica en 33 pacientes donde la re-
la dificultad para obtener un donante relacionado. construcción hematopoyética Ph– la observaron
Es posible realizar trasplantes con una fuente al- en 48% de los pacientes. Todos recibían manteni-
ternativa de células hematopoyéticas: donante no miento con INF e IL2. Nueve pacientes permane-
relacionado compatible (histoidéntico), donante re- cian en respuesta citogenética completa a los 31
lacionado no histoidéntico, células progenitoras meses. No hay hasta el momento resultados con-
hematopoyéticas de cordón umbilical (CPCU). La cluyentes.
LMC es la patología con mayor incidencia de TPH El advenimiento del imatinib abre una nueva
no relacionado en los EUA. La posibilidad de con- perspectiva en paciente que logran la negativiza-
seguir un donante a través de los diferentes regis- ción citogenética y molecular, se requieren estu-
tros de donantes es de 60% y los tiempos de bús- dios prospectivos para poder sacar conclusiones
queda son de un promedio de 4 meses. El TPH definitivas.
con donante no relacionado es un procedimiento
de mayor riesgo, con una mortalidad mayor pero PACIENTES CANDIDATOS A TPH
con un claro potencial curativo. Los pacientes so- Primera decisión
metidos a trasplante de donante no emparentado Pacientes en tratamiento con imatinib
generalmente son más jóvenes y tienen un interva- A los pacientes con respuesta subóptima al imati-
lo mayor entre el diagnóstico y el trasplante. El Na- nib debe ofrecerse un alo–TPH. (ASH 2004)
tional Marrow Donor Program (NMDP) 34 sobre un Se considera respuesta subóptima con el tra-
total de 1423 pacientes con LMC, con una media tamiento, en base de 400 mg x 6 a 12 meses cuan-
de edad de 35 años, presenta a los 3 años una so- do:
brevida del 37%. 1. No hay remisión hematológica luego de los 3
Para el IBMTR35 la sobrevida con trasplante meses.
no relacionado idéntico, realizado antes del año 2. No hay respuesta citogenética luego de 6 me-
del diagnóstico en 677 pacientes registrados entre ses.
1996–2001 es del 55% a los 3 años, y cuando se 3. No hay respuesta citogenética mayor luego de
realiza después del año es del 52% (N=951). 12 meses.
La mayoría de las recaídas ocurren en los pri- Si se puede realizar RT–PCR (cuantitativo).
meros 5 años, pero han ocurrido hasta 9 años des- 1. Se observa menos de 3 log de reducción de
pués del TPH. Los trasplantes de donantes no rela- la relación BCR/ABL/ABL, con relación al pre
cionados están asociados con un riesgo mayor de tratamiento.
rechazo del injerto e infección, la frecuencia de re- 2. Hay aumento de 2 log en la relación BCR/ABL/
caída es más baja. ABL por RT–PCR o detección de mutaciones
La posibilidad de utilizar donantes no histoi- en la región quinasa del ABL.
dénticos relacionados, sería una opción en la de-
cisión de pacientes sin otras alternativas terapéuti- Segunda decisión
cas y sin donante histoidéntico no relacionado, que Si el paciente es candidato para TPH, si tiene < 45
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
además requeriría de procedimientos especiales, años debemos evaluar si tiene un donante histo-
como ser depleción linfocitaria del inóculo, tratan- compatible relacionado (DIR) y si tiene menos de
do de manejar la GVHD y su morbimortalidad. 35 años y no tiene DIR se debe realizar una bús-
El trasplante con células de cordón se realiza queda en el Registro Internacional de Donantes.
principalmente en niños, por el número de proge- Si es un paciente de alto riesgo (Anexo 1) el lími-
nitores que se obtienen con la técnica y la LMC es te etario para la realización del TPH aumenta en
excepcional en el niño. 10 años, y si es una LMC de bajo riesgo, disminu-
ye en 10 años.
PAPEL DEL TPH AUTÓLOGO
Al comienzo de la década de 1990 el grupo del Tercera decisión Indice de Gratwohl
Hospital San Martino de Génova Italia, empezó a El grupo de Gratwohl y colaboradores36, de acuer-
realizar TPH autólogos, con recolección de stem do a los datos aportados por el grupo Europeo de
cell periféricas Ph–, usando esquemas de movili- trasplantes definieron 5 factores pronósticos prin-
45
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA MIELOIDE CRÓNICA
riférica. Si no tiene donante o el paciente se nie- debe tener en cuenta si desarrolló o no en-
ga a recibir un TPH, se sigue la línea de tratamien- fermedad injerto versus huésped (GVHD).
to como para un paciente que no es candidato a Si desarrolló GVHD se puede continuar
trasplante. con imatinib, o pasar a tratamiento con
IFN, o iniciar estudios clínicos.
Factores de SLE a los 5 MRT Si no desarrolló GVHD, se suspende la in-
riesgo años munosupresión y se espera si aparece la
0–1 60% 20% – 23% GVHD y la reacción injerto contra leuce-
2 47% 31% mia (GVL) e instala la RCC.
Si logra RCC, se realiza estudio ABL–BCR
3 37% 46%
si es negativo control. Si es positivo se
4 35% 51%
aconseja realizar RT– PCR cuantitativo, si
5–6–7 19–16% 71 – 73% aumenta, se realiza infusión de linfocitos
46
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA MIELOIDE CRÓNICA
del donante (DLI) o se trata con imatinib, TPH) subpoblaciones. Si existe quimeris-
con IFN, o entra en ensayos clínicos. mo mixto en alguna subpoblación conti-
nuar análisis secuencial en subpoblacio-
Análisis de quimerismo nes.
En el trasplante alogénico la infusión de progeni- B) TPH con regímenes de condicionamiento
tores hematopoyéticos, además de reconstituir el de intensidad reducida o no mieloablativo:
sistema inmune del receptor, induce un efecto «an- 1. Microsatélites. Inicialmente 10 loci en TPH
titumoral» de las células del donante contra las emparentado.
células neoplásicas del receptor conocido como 2. PCR múltiple–electroforesis en poliacrila-
«efecto injerto contra leucemia» especialmente en mida en secuenciador automático.
protocolos no ablativos. 3. De rutina en sangre periférica. Sólo en si-
Después del trasplante, es importante poder tuaciones particulares se coordinarán es-
monitorear la dinámica del implante hematopoyéti- tudios en médula ósea.
co. La coexistencia de células de distinto origen en 4. Mensual el primer trimestre. Luego de
un mismo individuo «quimerismo» revela grados acuerdo a situación QM/QT, respuesta de
diferentes de relación entre las poblaciones celula- la enfermedad y posibles complicaciones.
res de ambos orígenes: receptor/donante. 5. Subpoblaciones: linfocitos T, B, neutrófi-
Esto ha permitido clasificar dicho quimerismo los.
en total, mixto, micro o de linaje, de acuerdo a la
relación porcentual existente y a la población ce-
lular analizada. BIBLIOGRAFÍA
1. Kurzrock R, Kantarjian HM, Druker BJ, et al. Philadelphia
Múltiples técnicas han sido utilizadas para
chromosome–positive leukemias: from basic mechanisms to
«medir» este quimerismo. molecular therapeutics. Ann Intern Med 2003; 138 (10): 819–
En los casos de trasplantes entre individuos 30.
2. Deininger MW, Goldman JM, Melo JV. The molecular biology
del mismo sexo, grupo sanguíneo, HLA idénticos,
of chronic myeloid leukemia. Blood 2000; 96 (10): 3343–56,
el análisis de regiones variables del ADN resulta 3. Onida F, Ball G, Kantarjian HM, et al.: Characteristics and out-
útil para identificar diferencias entre donante y re- come of patients with Philadelphia chromosome negative, bcr/
abl negative chronic myelogenous leukemia. Cancer 2002; 95
ceptor, que permiten analizar el estado de quime- (8): 1673–84.
rismo post–trasplante. 4. Martiat P, Michaux JL, Rodhain J.Philadelphia–negative (Ph–
) chronic myeloid leukemia (CML): comparison with Ph+ CML
and chronic myelomonocytic leukemia. The Groupe Français
Estudio de quimerismo post TPH en LMC de Cytogénétique Hématologique. Blood 1991; 78 (1): 205–
1. Qué sistemas estudiar. 11.
5. Cortes JE, Talpaz M, Beran M, et al. Philadelphia chromoso-
2. Cómo. me–negative chronic myelogenous leukemia with rearrange-
3. En qué muestras. ment of the breakpoint cluster region. Long–term follow–up
4. Cuándo y con qué frecuencia. results. Cancer 1995; 75 (2): 464–70.
6. Goldman JM, Melo JV. Chronic myeloid leukemia–advances
5. En qué poblaciones celulares. in biology and new approaches to treatment. N Engl J Med
A) Trasplante convencional: 2003; 349 (15): 1451–64.
7. Lee SJ, Anasetti C, Horowitz MM, et al. Initial therapy for
1. Microsatélites. Inicialmente 10 loci en TPH
chronic myelogenous leukemia: playing the odds. J Clin Oncol
emparentado y 6 en no relacionado para
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
47
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA MIELOIDE CRÓNICA
ANEXO 1
CRITERIOS DIAGNÓSTICOS DE FASE ACELERADA
Pelger–Huet, eritroblas-
Evidencia citogenética de evolución clo-
tos, fragmentos de megaca- Basófilos + Eosinófilos en SP > 20%
nal
riocitos
Anemia o plaquetopenia no
Trombocitosis persistente
relacionada con tratamiento
Evolución clonal
Esplenomegalia progresiva
Duplicación de GB en <5
Esplenomegalia progresiva
días
ANEXO 2.
FASE BLÁSTICA
WHO IBMTR
12. Hughes TP, Kaeda J, Branford S, et al. Frequency of major some–positive chronic–phase chronic myeloid leukemia after
molecular responses to imatinib or interferon alfa plus cytara- failure of interferon–alpha. Blood 2004; 104 (7): 1979–88,
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
bine in newly diagnosed chronic myeloid leukemia. N Engl J 18. O’Brien SG, Guilhot F, Larson RA, et al. Imatinib compared
Med 2003; 349 (15): 1423–32. with interferon and low–dose cytarabine for newly diagnosed
13. Rosti G, Martinelli G, Bassi S, et al. Molecular response to chronic–phase chronic myeloid leukemia. N Engl J Med 2003;
imatinib in late chronic–phase chronic myeloid leukemia. 348 (11): 994–1004.
Blood 2004;103 (6): 2284–90. 19. Kantarjian H, Talpaz M, O’Brien S, et al. High–dose imatinib
14. Kantarjian HM, Deisseroth A, Kurzrock R, et al. Chronic mye- mesylate therapy in newly diagnosed Philadelphia chromoso-
logenous leukemia: a concise update. Blood 1993; 82 (3): me–positive chronic phase chronic myeloid leukemia. Blood
691–703. 2004;103 (8): 2873–8.
15. Clift RA, Buckner CD, Thomas ED, et al. Marrow transplanta- 20. Peggs K, Mackinnon S. Imatinib mesylate––the new gold stan-
tion for chronic myeloid leukemia: a randomized study compa- dard for treatment of chronic myeloid leukemia. N Engl J Med
ring cyclophosphamide and total body irradiation with busul- 2003;348 (11): 1048–50.
fan and cyclophosphamide. Blood 1994;84 (6): 2036–43. 21. Druker BJ, Sawyers CL, Kantarjian H, et al. Activity of a spe-
16. Kantarjian H, Sawyers C, Hochhaus A, et al. Hematologic and cific inhibitor of the BCR–ABL tyrosine kinase in the blast
cytogenetic responses to imatinib mesylate in chronic myelo- crisis of chronic myeloid leukemia and acute lymphoblastic
genous leukemia. N Engl J Med 2002; 346 (9): 645–52. leukemia with the Philadelphia chromosome. N Engl J Med
17. Kantarjian HM, Cortes JE, O’Brien S, et al. Long–term survi- 2001;344 (14): 1038–42.
val benefit and improved complete cytogenetic and molecular
response rates with imatinib mesylate in Philadelphia chromo-
48
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA MIELOIDE CRÓNICA
22. Rosti G, Martinelli G, Bassi S, et al. Molecular response to myelofibrosis at diagnosis of Ph + chronic myelogenous leu-
imatinib in late chronic–phase chronic myeloid leukemia. kemia – a multicentre study on 495 patients. Br J Haematol
Blood 2004;103 (6): 2284–90. 2001; 112: 727–739.
23. National Cancer Institute. Chronic Myelogenous Leukemia 5. Buesche G, Georgii A, Duensing A, et al. Evaluating the volu-
(PDQ) Treatment 2005 me ratio of bone marrow affected by fibrosis: a parameter cru-
24. Wagner JE, Zahurak M, Piantadosi S, et al. Bone marrow cial for the prognostic significance of marrow fibrosis in chro-
transplantation of chronic myelogenous leukemia in chronic nic myelogenous leukemia. Hum Pathol 2003; 34: 391–401,.
phase: evaluation of risks and benefits. J Clin Oncol 1992;10 6. Thiele J, Kvasnicka HM, Schmitt–Graeff A, et al. Effects of
(5): 779–89. interferon and hydroxyurea on bone marrow fibrosis in chro-
25. Goldman JM, Szydlo R, Horowitz MM, et al. Choice of pre- nic myelogenous leukemia: a comparative restrospective mul-
transplant treatment and timing of transplants for chronic ticentre histological and clinical study. Br J Haematol 2000;
myelogenous leukemia in chronic phase. Blood 1993;82 (7): 108: 64–71.
2235–8. 7. Beham–Schmid C, Apfelbeck U, Tsybrovsky O, et al.Treatment
26. Clift RA, Appelbaum FR, Thomas ED. Treatment of chronic of chronic myelogenous leukemia with the tyrosine kinase in-
myeloid leukemia by marrow transplantation. Blood 1993;82 hibitor STI571 results in marked regression of bone marrow fi-
(7): 1954–6 brosis. Blood 2002; 99: 381–383.
27. Pichert G, Roy DC, Gonin R, et al. Distinct patterns of minimal 8. Braziel RM, Launder TM, Druker BJ, et al. Hematopathologic
residual disease associated with graft–versus–host disease and cytogenetic findings in imatinib mesylate–treated chro-
after allogeneic bone marrow transplantation for chronic mye- nic myelogenous leukemia patients: 14 months’ experience.
logenous leukemia. J Clin Oncol 1995;13 (7): 1704–13. Blood 2002; 100: 435–441.
28. Beelen DW, Graeven U, Elmaagacli AH, et al. Prolonged ad- 9. Buesche G, Helmann R, Hecker H, et al. Marrow fibrosis, in-
ministration of interferon–alpha in patients with chronic–pha- dicator of therapy failure in chronic myeloid leukemia – pros-
se Philadelphia chromosome–positive chronic myelogenous pective long–term results from a randomized–controlled trial.
leukemia before allogeneic bone marrow transplantation may Leukemia 2003; 17: 2444–2453.
adversely affect transplant outcome. Blood 1995;85 (10): 10. Thiele J, Kvasnicka HM, Beelen DW, et al. Erytropoietic re-
2981–90, constitution, macrophages and reticulin fibrosis in bone ma-
29. Giralt SA, Kantarjian HM, Talpaz M, et al. Effect of prior inter- rrow specimens of CML patients following allogeneic trans-
feron alfa therapy on the outcome of allogeneic bone marrow plantation. Leukemia 2000;14: 1378–1385.
transplantation for chronic myelogenous leukemia. J Clin On- 11. Thiele J, Kvasnicka HM, Beelen DW, et al. Relevance and dy-
col 1993; 11 (6): 1055–61. namics of myelofibrosis regarding hematopoietic reconstitu-
30. Giralt S, Szydlo R, Goldman JM, et al. Effect of short–term tion after allogeneic bone marrow transplantation in chronic
interferon therapy on the outcome of subsequent HLA–iden- myelogenous leukemia – a single center experience on 160
tical sibling bone marrow transplantation for chronic myelo- patients. Bone Marrow Trasplant 2000; 26: 275–281.
genous leukemia: an analysis from the international bone ma- 12. Busche G, Majewski H, Schlue J, et al. Frequency of pseu-
rrow transplant registry. Blood 2000; 95 (2): 410–5. do–Gaucher cells in diagnostic bone marrow biopsies from
31. Hehlmann R, Hochhaus A, Kolb HJ, et al. Interferon–alpha be- patients with Ph+ chronic myeloid leukemia. Virchow Archiv
fore allogeneic bone marrow transplantation in chronic myelo- 1997;430: 139–148.
genous leukemia does not affect outcome adversely, provided
it is discontinued at least 90 days before the procedure. Blood
1999;94 (11): 3668–77. Pautas de diagnóstico y seguimiento
32. Morton AJ, Gooley T, Hansen JA, et al. Association between
pretransplant interferon–alpha and outcome after unrelated genético–molecular en leucemia mieloide
donor marrow transplantation for chronic myelogenous leuke- crónica
mia in chronic phase. Blood 1998; 92 (2): 394–401.
Bibliografía
33. Goldman J. Stem Cell Transplantation for CML: Its place in
1. Buchdunger E, Cioffi CL, Law N, Stover D et al. ABL protein
treatment Algorithms 2001. Hematology 2001:103–108.
tyrosine kinase inhibitor STI571 inhibits in vitro signal trans-
34. National Marrow Donor Program. Transplant Outcomes by Di-
duction mediated by c–kit and platelet derived grow factor re-
sease Stage. www marrow.org. 2005
ceptors. J Pharmacol Exp Ther. 2000; 295 :139–145.
35. CIBMTR Stadistical Center atf the International Blood and Ma-
2. Cortes J, Talpaz M, O´Brien S, et al. Clinical significance of
rrow Transplant Center. www cibmtr.org 2005
molecular monitoring in CML in chronic phase wirh imatinib
36. Gratwohl A, Hermans J. Allogeneic bone marrow transplanta-
therapy. Abstract 272. Blood 2004; 104: 81a.
tion for chronic myeloid leukemia. Working Party Chronic Leu-
3. Kantarjian HM, Cortes JE, O´Brien S et al. Long–term survi-
kemia of the European Group for Blood and Marrow Trans-
val benefit and improved complete cytogenetic and molecular
plantation (EBMT). Bone Marrow Transplant 1996; 17 (Suppl
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
49
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA MIELOIDE CRÓNICA
50
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA LINFOIDE CRÓNICA
Consenso Nacional de
Leucemia linfoide crónica
51
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA LINFOIDE CRÓNICA
raco abdómino pélvica. Son de es- no es posible realizar IgVH. Por cito-
pecial utilidad, para la medición de la metría de flujo de la proteína de mem-
esplenomegalia, evidenciar adenopa- brana o PCR del RNA. Puede ser mar-
tías profundas intratorácicas o intra cador sustituto del estado mutacional,
abdominales y para determinar el gra- su expresión se correlaciona con la
do de remisión luego del tratamiento, forma no mutada.12,13,14 Su positivi-
en especial en paciente con compro- dad (> 20%) se correlaciona con mal
miso bulky. pronóstico: sobrevida media de 6–10
1.7. Marcadores séricos de valor pro- años vs. > 15 años.
nóstico. 1.7.g. Estudios citogenéticos, en es-
1.7.a. Beta 2 microglobulina. pecial por FISH. El estudio del 13q–
1.7.b. LDH. , 17p–, 11q–, trisomía 12 tiene valor
1.7.c. CD38 por citometría de flujo. pronóstico. Los pacientes con 13q–
52
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA LINFOIDE CRÓNICA
aislado, trisomia 12, delección del 11q, ble, de valor pronóstico, de disponer-
o pérdida de una copia del gen p53 se, es opcional.18–21
(17p–), tuvieron una media de sobrevi- Algunos factores pronósticos tienen di-
da de 133, 114, 79 y 32 meses, respec- ferente valor según el tratamiento uti-
tivamente.15 Además, 6q– se asocia a lizado. Así por ej., la mutación del gen
mal pronóstico. Dos análisis multiva- p53, predice pobre respuesta a fluda-
riados recientes mostraron que sólo rabina22 o uso aislado de rituximab23,
el estado mutacional de IgVH y la pér- pero no a altas dosis de corticoides o
dida o mutación del gen p53 tuvieron de Campath–1H.
significado pronóstico independien- El momento y la frecuencia con que
te.16,17 Se estudia en el MCR LLC trial y se solicitan los factores pronósti-
en el German LLC trial si la valoración cos son elementos importantes a
de los factores pronósticos biológicos considerar. Algunos marcadores per-
se traduce en una mejoría en los resul- manecen constantes en el curso de la
tados clínicos. enfermedad, como el estado mutacio-
1.8. Test de Coombs directo e indirecto, nal IgVH, mientras que otros, como las
pacientes con anemia, en los que se alteraciones citogenéticas y/o la ex-
sospecha hemólisis, en especial pre- presión CD38 pueden modificarse en
vio al tratamiento con análogos purí- la evolución.
nicos.
1.9. Reticulocitosis, para valorar si se Se recomienda: estratificar a los pacien-
trata o no de una médula regenerati- tes al diagnóstico desde el punto de vista
va, en especial en complicaciones in- pronóstico según criterios clásicos (esta-
munes de la serie roja. dio Rai/Binet). La realización de exáme-
nes que permitan estratificar el riesgo de
2. Se recomienda realizar según caso acuerdo a los marcadores biológicos (CD
clínico: 38, ZAP–70, estudios moleculares, citoge-
2.1. Mielograma. No es imprescindi- nética por FISH, se recomiendan en espe-
ble para el diagnóstico Los criterios cial en pacientes en etapas tempranas o
diagnósticos clásicos incluyen infiltra- asintomático ya que pueden incidir en la
ción linfocitaria mayor al 30%. Con los toma de decisiones terapéuticas. Los es-
nuevos criterios el mielograma tiene tudios citogenéticos y/o la expresión CD38
valor pronóstico (infiltraciones ma- se deberían repetir ante una agravación
yores al 80% se correlacionaron con del cuadro clínico.
peor evolución), como control de res-
puesta al tratamiento y en ciertos ca- ESTUDIO DE ENFERMEDAD RESIDUAL
sos para determinar la causa de una MÍNIMA
citopenia. En pacientes en remisión completa, es de gran in-
2.2. Biopsia de médula ósea. De valor terés pronóstico el estudio de enfermedad residual
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
pronóstico clásico según el patrón de mínima, ya sea por citometría de flujo o PCR pa-
infiltración; difusa, nodular, intersticial ra la determinación del estado de remisión mole-
o mixta. Permite valorar la respues- cular. 24,25
ta terapéutica.
2.3. Biopsia de adenopatía. La histología
e inmunohistoquímica ganglionar no CRITERIOS DIAGNÓSTICOS
es requerida para el diagnóstico. Pue- Según el National Cancer Institute Sponsored
de ser necesaria en casos de diagnós- Working Group 26 (NCI Working Group in CLL) y el
tico incierto y ante la aparición de ma- International Workshop on CLL (IWCLL) se inclu-
sas ganglionares bulky para excluir la yen:
transformación linfomatosa u otra cau- 1. Linfocitosis absoluta en sangre periférica.
sa no relacionada. • > 5000/ mm3 (NCI working group).
2.4. Timidino kinasa sérica, CD 23 solu- • > 10.000/mm3 (IWCLL).
53
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA LINFOIDE CRÓNICA
54
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA LINFOIDE CRÓNICA
55
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA LINFOIDE CRÓNICA
Reducción de por lo menos 50% en el ta- se adoptará una estrategia paliativa, de control de
maño de adenopatías o hepatoespleno- síntomas, o si la meta será prolongar la sobrevida
megalia. libre de enfermedad, la sobrevida global tendien-
Plaquetas > 100.000 y Hb > 11 g/dL, o au- do a la curación.
mento de 50% en sus valores (sin transfu-
siones). LLC EN ESTADIOS TEMPRANOS
Cambios desde el estadio C al A o B, o (A DE BINET, no progresiva, bajo riesgo de RAI),
desde el B al A. sin indicaciones de tratamiento según criterios del
Si persisten nódulos linfoides en MO, se NCI, 1999.
califica de respuesta nodular parcial.
Enfermedad progresiva: Fundamentos
Aumento en 50% o más de: linfocitosis y En pacientes asintomáticos el tratamiento puede
hepato esplenomegalia o su aparición. ser diferido hasta la aparición de síntomas, el ini-
Aumento de más del 50% de la suma de cio de terapia en estos casos no tiene ventajas pro-
por lo menos 2 adenomegalias, una de las nósticas (Nivel de Evidencia 1iiA del NCI).
cuales debe ser mayor de 2 cm, o apari- El clorambucil, no está indicado como tra-
ción de nueva adenopatía palpable. tamiento inicial en estadios tempranos. (Re-
Cambio desde el estadio A al B o C o des- comendación Grado A, Nivel de Evidencia Ia del
de el B al C. NCI). El French Cooperative Group on CLL32, no
Transformación a formas histológicas más encuentra diferencias entre tratamiento inicial con
agresivas. clorambucil vs. demorado en diferentes esquemas
Enfermedad estable, corresponde a los que no de dosificación. No hubo deferencias de sobrevida
cumplen los criterios anteriores. (Nivel de evidencia 1iiA del NCI).
Remisión molecular, enfermedad residual mí- Un meta análisis de 2048 pacientes de 6 estu-
nima (ERM) debe investigarse: dios de tratamiento con clorambucil con o sin pre-
• ERM por citometría de flujo (panel: CD19/ dnisolona vs. tratamiento diferido, no mostró dife-
CD5/CD20 y CD79b). Puede detectar 1 rencias significativas en la sobrevida a 10 años33
célula en 10 4 células normales24, o (Nivel de evidencia 1iiA del NCI).
• ASO–PCR (real–time quantitative allele En el primer estudio francés, en la rama no tra-
specific oligonucleotide PCR) 25. tada, un 51% de los pacientes progresaron y un
La ERM positiva siguiendo a análogos puríni- 27% de los estadios A, murieron de su enferme-
cos, Ac monoclonales o autoTPH, es predictor de dad.
recaída clínica. Luego de alo–TPH, fundamental- Se requiere evaluar si en pacientes en esta-
mente en los semi ablativos, la ERM puede negati- dio A, asintomáticos, con factores de mal pronós-
vizarse en la evolución 27–31. La mayoría de los au- tico (citogenética, CD38, ZAP–70, forma no muta-
tores recalcan la necesidad de reconsiderar los da del gen IgVH), el inicio temprano de tratamien-
criterios de remisión completa ya que los actua- tos con alta tasa de RC y respuestas moleculares,
les, permiten considerable compromiso de médu- se traducen en ventajas de sobrevida. Es aún in-
la ósea. cierto si el tratamiento inmediato con análogos pu-
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
56
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA LINFOIDE CRÓNICA
• Agentes alquilantes: clorambucil vs. cios de la década de 1990, es una droga de pri-
PQT mera línea en menores de 70 años, así como en
Los agentes alquilantes, fundamentalmente el clo- pacientes en recaída o refractarios a otros trata-
rambucil, asociados o no a la prednisona y la po- mientos.
liquimioterapia tipo CHOP, COP o CAP fueron du- Como opción terapéutica de primera línea se
rante años los tratamientos de alternativa de la obtiene entre 70 a 80% de respuestas globales,
LLC. Estudios con bajas dosis de clorambucil con con 30% de respuestas completas, con sobrevida
o sin prednisona, mostraron respuestas globales media de 73 meses, utilizada como único agente, a
entre 45–86%, no encontrándose ventajas de SLP dosis de 25 mg/m2 i.v. durante 5 días, cada mes.42
ni SG con el agregado de prednisona 35. Tampo- Respuestas tan elevadas no fueron reproducidas
co hubo diferencias entre administración continua en estudios comparativos de fludarabina vs fluda-
o intermitente de clorambucil. rabina ciclofosfamida.
Se comparó en 4 estudios aleatorizados, clo- El agregado de prednisona no ofrece venta-
rambucil vs. COP en 630 pacientes.36–39 Los trata- jas de sobrevida.43 Las respuestas con fludarabina
dos con COP presentaron mayor número de res- oral (Anexo 1) son comparables a la vía i.v.44
puestas las que fueron más rápidas, pero sin dife- Tres estudios fase III, en pacientes sintomáti-
rencias en la sobrevida libre de progresión ni en la cos sin tratamientos previos demostraron la supe-
sobrevida global. rioridad de fludarabina en número de respues-
El Grupo Cooperativo Francés demostró en tas globales y completas y sobrevida libre de
1990, ventajas de sobrevida con el agregado de progresión comparada con CHOP, COP, CAP
adriamicina en bajas dosis (CHOP modificado) y clorambucil, aunque sin ventajas en sobrevida
frente al COP en LLC avanzada, sin tratamiento global (nivel de evidencia 1iiDii del NCI).45–47 Los
previo.37 pacientes que fallaron al CAP, CHOP o clorambu-
Es un meta–análisis de 2022 pacientes inclui- cil se cruzaban a la rama fludarabina, con buen nú-
dos en 10 estudios, comparativos entre clorambu- mero de respuestas. Las complicaciones infeccio-
cil con o sin prednisona, versus quimioterapia de sas severas fueron menores con clorambucil.
combinación (en 6 estudios se utilizó adriamicina), En un seguimiento del MDACC el obtener RC,
mostró idéntica sobreviva a 5 años, de 48%, se uti- con fludarabina en monoterapia no tuvo correla-
lizara o no adriamicina.33 Por lo tanto, en LLC avan- ción con sobrevida a largo plazo.48 La incidencia
zada los regímenes de PQT que incorporan un an- de SMD/LAM relacionada a la terapia fué de 3.5%
traciclínico no tienen ventajas de sobrevida com- con fludara y clorambucil, 0.5% con fludara solo y
parado con un agente alquilante (Nivel de Eviden- 0% con clorambucil solo.49
cia 1iiA del NCI). Todos los estudios mostraron mayor toxicidad
Cuando se evalúa en forma aleatorizada, altas para fludarabina en especial infecciones por neu-
dosis de clorambucil en 279 pacientes (intermiten- tropenia, infecciones herpéticas, anemia hemolí-
te 75 mg cada 4 semanas, o continua 15 mg/día) tica autoinmune (AHAI) y trombocitopenia persis-
con prednisona, los que recibieron en forma con- tente. El mayor riesgo de infecciones puede persis-
tinua presentaron mayor número de respuestas tir meses o años luego de finalizada la terapia con
(70% vs. 30%) y mayor sobrevida media (6 años fludarabina. Se recomienda profilaxis contra Pneu-
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
vs. 3 años p< 0.01).40 mocystis carinii por 6 a 12 meses con trimetopri-
En 228 no tratados previamente, se randomi- ma–sulfametoxazol y contra herpes virus con aci-
zaron a altas dosis de clorambucil a dosis fijas de clovir o valaciclovir.
15 mg/día, o CHOP, 6 series.41 La rama clorambu- En un estudio del EORTC que compara flu-
cil obtuvo mayor número de respuestas globales darabina con clorambucil en altas dosis continuo,
(89% vs. 75%), y más prolongada sobrevida (68 se obtuvieron iguales resultados ya sea en núme-
vs. 47 meses). ro de respuestas, duración de las mismas y sobre-
vida media.50
• Análogos purínicos En busca de mejorar la calidad de RC, SLP y
Fludarabina SG, se estudió la combinación de fludara ciclofos-
La incorporación de los análogos de las purinas famida (Anexo 1). El Grupo Cooperativo del Este
sobre todo la fludarabina permitió cambios signi- (ECOG) en conjunto con el US intergroup (ECOG
ficativos en término de respuestas. Desde los ini- 2997 study) 51 y el German CLL Study Group52 han
57
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA LINFOIDE CRÓNICA
completado dos estudios fase III usando FC, se al- ma concurrente vs. secuencial. La tasa de RC fue
canzó entre un 75 y un 94% de respuestas glo- de 47% vs. 28% a favor del régimen concurrente.
bales con un claro aumento de la tasa de respues- Los pacientes de la rama concurrente recibieron
tas completas. El grupo alemán aleatorizó 375 pa- un promedio de 10 a 11 ciclos de rituximab vs 4 de
cientes sin tratamiento previo a recibir FC o fluda- la rama secuencial. No se objetivan diferencias en-
rabina, obteniendo RC en 20% y 9%, SLP de 28,2 tre las 2 ramas en la media de duración de la res-
y 22,8 meses, respectivamente, destacando las puesta y de sobrevida con un seguimiento medio
ventajas de FC. Son necesarios los seguimientos de 23 meses 54
a largo plazo antes de confirmar con certeza las Cuando se compara en forma retrospectiva
ventajas de agregar ciclofosfamida. Además, la in- con pacientes que recibieron fludarabina sola, en
cidencia de SMD/LAM a largo plazo no se cono- primera línea (CALGB 9011 y CALGB 9712),55 se
ce (incrementada en los estudios de fludara más observó que las respuestas globales, RC, SLP y
clorambucil). SG a 2 años fue de 84 vs. 63%, 38% vs. 20%, 67%
vs. 45% y 93% vs. 81%, respectivamente. Si com-
2–CdA (clarbidina) paramos los resultados entre FR y FCR, a pesar
Los estudios con clarbidina producen resultados del mayor número de RC para FCR, en el aun cor-
comparables a los obtenidos con fludarabina en to seguimiento, no se observan diferencias en so-
tratamiento de primera línea. El número de estu- brevida libre de progresión y SG.
dios es menor y el peso de la evidencia es mucho Sólo el 33% de los pacientes en el estudio del
mayor para fludarabina, por lo que no se puede re- MDACC, pertenecieron a estadios avanzados B y
comendar clarbidina como sustituto de fludarabi- C de Binet, siendo la mayoría pacientes en etapas
na en el tratamiento de primera línea en pacien- más tempranas, sin clara definición de riesgo. La
tes no tratados. población en este estudio fue joven para los pro-
medios de esta enfermedad (58 años) lo que pudo
Anticuerpos monoclonales incidir en las respuestas.
Otro procedimiento que intenta aumentar el núme- Los trabajos del MDACC muestran que la qui-
ro de respuestas ha sido agregar a los regímenes mioinmunoterpia, tiene considerable actividad clí-
basados en fludarabina, antiCD20. El rituximab nica con alta tasa de respuestas hematológicas y
modula las proteínas anti apoptóticas responsa- moleculares en LLC. Aunque no se han alcanzado
bles de la resistencia a fludarabina. Fludarabina, a los tratamientos curativos, al parecer los tratamien-
su vez, disminuye la expresión de las proteínas de tos más agresivos prolongan las curvas de sobre-
superficie CD55 y CD59, responsables de la resis- vida. Los hallazgos de los estudios del MDACC y
tencia al complemento, sensibilizando la citotoxici- del CALGB provienen de estudios fase II, no com-
dad mediada por complemento del rituximab. Ten- parativos.
drían por lo tanto, actividad sinérgica. Actualmente se lleva a cabo un estudio fase III
En estudio fase II, el grupo del MDACC, en 224 aleatorizado del grupo alemán, que compara FC
pacientes sin tratamiento previo, recibieron FCR, vs. FCR. El Intergroup Study examina en fase II di-
obtuvieron RC en el 70%, RNP en 15% y RP en ferentes regímenes de combinación: FCR, FR, FR
15%, con una respuesta global de 95%. Por ci- seguido de mantenimiento con rituximab, FR se-
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
tometría de flujo (de dos colores) se observó res- guido por consolidación con alemtuzumab o con
puesta molecular, sin evidencia de ERM, en el flavopiridol. Además, diferencia pacientes con el
71% de 145 pacientes en RC evaluados (menos gen IgVH mutado y no mutado.
de 1% de células CD5–CD19 fue considerado ne-
gativo). Los pacientes con ERM negativo tuvieron Ac Monoclonales en monoterapia
menos recaídas que los que tuvieron entre 1–4,5% Rituximab
o más de 5% (3,6%, 20% y 43% respectivamen- Requiere mayores dosis, aumento de la frecuencia
te), demostrando que el obtener respuestas mo- de administración o de la duración del tratamiento
leculares se correlaciona con mejor sobrevida. para obtener respuestas comparables a otros lin-
Los que obtuvieron RNP y RP tuvieron similar ta- fomas indolentes.
sa de recaída.53
El CALGB realizó un estudio fase II en que Alemtuzumab
randomizó 104 pacientes a recibir FR en esque- Actúa contra los antígenos de membrana de los lin-
58
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA LINFOIDE CRÓNICA
59
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA LINFOIDE CRÓNICA
60
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA LINFOIDE CRÓNICA
61
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA LINFOIDE CRÓNICA
tados con fludarabina, se vuelven en la evolución adenopatías > de 5 cm. Alemtuzumab puede ser
refractarios a la misma. La definición de refracta- eficaz en pacientes con mutaciones del gen p53
riedad a fludarabina consiste en no respuesta ini- refractarios a los análogos purínicos.94,95
cial o respuesta con recaída o progresión dentro
de los 6 meses de completado el tratamiento con Para una mejor la tolerancia al alemtuzu-
fludarabina. mab y para disminuir los riesgos infeccio-
La combinación FC logra respuestas en sos, se recomienda administrar el alemtu-
38% de pacientes refractarios a fludarabina so- zumab por vía subcutánea (Anexo 1).
la.86 Un 20% son refractarios a fludarabina al inicio
del tratamiento con sobrevidas menores a 1 año. En combinación con fludarabina puede ha-
No se ha confirmado la actividad de un análogo ber respuestas en pacientes refractarios a ambos
purínico cuando ocurre refractariedad a otro aná- agentes usados en forma separada.96 El primer re-
logo.87 porte fue en 36 pacientes multitratados, edad me-
dia de 61,6 años, en que 8 presentaban AHAI o
ALTAS DOSIS DE METIL PREDNISOLONA PTA. Se inició alemtuzumab a 30 mg día i.v. (lle-
Existen pocos estudios publicados sobre su efica- gando en forma escalonada) y fludarabina 30 mg/
cia. En un estudio piloto, a dosis de 1 g/m2 x 5 m2 por 3 días, cada 28 días por 6 ciclos. La res-
días cada mes, en 25 pacientes, la respuesta puesta global fue de 85%, con 29% de RC y 56%
global fue de 77%, incluidos 5 de 10 pacientes de RP. En 34 pacientes evaluados no se detectó
con pérdida o mutación del gen p53. Resulta espe- ERM en 44%. Complicaciones infecciosas ocurrie-
cialmente útil en pacientes con masas gangliona- ron en 5 pacientes. Se ha observado mielosupre-
res en combinación con alemtuzumab, sobre todo, sión prolongada en algunos pacientes.
si existe disfunción del gen p53. No se debe usar La combinación fludara/alemtuzumab (FLU-
en pacientes con ulcera gastro duodenal en acti- CAM) es factible, segura, bien tolerada y con im-
vidad y con precaución en diabéticos o insuficien- portante número de respuestas. Las mayores res-
cia cardíaca. puestas se observan en SP y MO. Actualmente, el
estudio CAM 314 trial del MDACC compara fluda-
ANTICUERPOS MONOCLONALES rabina sola vs. fludara/alemtuzumab.
Alemtuzumab
En cinco estudios aleatorizados en 341 pacientes Rituximab
refractarios a fludarabina que recibieron alem- Como monoterapia en pacientes previamente tra-
tuzumab, las respuestas globales fueron de tados tiene pobre respuesta, aun utilizado en do-
39%, con 9,4% de RC y 30% de RP. La sobrevi- sis más altas que las habituales. Cuando se usa
da fue más prolongada que en controles históricos en combinación con fludarabina y ciclofosfamida,
refractarios a fludarabina. Estudios fase II mues- se obtienen buenos resultados. En el estudio del
tran respuestas globales de 33 a 70%, tasas de MDACC, de Wierda y col.97, en que se trataron 177
RC de 0 a 50%, siendo la duración de las respues- pacientes resistentes (15 % habían recibido alqui-
tas de por lo menos 12 meses. lantes solo, 59 % habían sido sensibles a regíme-
Alemtuzumab es un agente activo en pacien- nes que contenían fludarabina y 26% eran resis-
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
tes en recaída o refractarios. Osterbog et al.88 (N tentes a fludarabina). Se obtuvieron 24% de res-
29, RG 42%, RC 4%, duración media 12 meses), puestas completas (7% en los resistentes a fluda-
Rawstron et al.89 (N 17, RG 70%, RC 50%), Stil- rabina) y 74% de respuestas globales. La SLP y la
genbauer et al.90 (N 11, RG 55%, RC 18%), McCu- SG fueron mejores ante repuestas por lo menos
ne et al.91 (N 17, RG 46%, RC 31%), Rai et al.92 (N parciales, bajos niveles de beta 2 microglobulina,
24, RG 33%, RC 0%, duración media 15,4 meses), ausencia de cariotipos de alto riesgo o presencia
Ferrajoli et al.93 (N 60, RG 35%, RC 13%, duración aislada de 13q–. Si bien el agregado de rituximab
media 18 meses). a fludarabina o FC mejora los resultados, tiene li-
En un estudio del MDACC, Keating et al., en mitado control a largo plazo en los pacientes resis-
92 pacientes resistentes a fludarabina, fueron pre- tentes a fludarabina o con cariotipo de alto riesgo.
dictores de buena respuesta los bajos niveles de La SLE y la SG fue de 6% y 58% en aquellos que
beta 2 microglobulina, plaquetas > 50 x 109 /L recayeron en un período menor de 6 meses de ha-
y adenopatías < de 3 cm, no ocurriendo RC con ber recibido fludarabina vs. 33% y 77% en los que
62
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA LINFOIDE CRÓNICA
recayeron en un período mayor a 6 meses. En es- mal pronóstico, sin adenopatías bulky
te grupo además, 43% presentaron mutación o de- (Grado B de recomendación, Nivel 2b de
leción del gen p53. Evidencia, NCI.). En pacientes con ade-
La quimioinmunoterapia puede alcanzar res- nopatías bulky se recomienda una citorre-
puestas en pacientes en que la quimioterapia o in- ducción previa con PQT: CVP, CHOP. Al-
munoterapia solas, no la obtienen. tas dosis de metil prednisolona más alem-
tuzumab es un tratamiento muy eficaz en
RECOMENDACIONES EN este marco.
SEGUNDA LÍNEA DE TRATAMIENTO Y 4.2. Alemtuzumab + fludarabina con o sin
SUCESIVOS ciclofosfamida.
Depende siempre del objetivo terapéutico. 4.3. Rituximab + fludarabina, con o sin ciclo-
1. En tratamiento paliativo en pacientes año- fosfamida (Grado B de recomendación, Ni-
sos . vel 2b de Evidencia, NCI).
1.1. Recaída luego de respuesta a dosis 4.4. Alemtuzumab como tratamiento de
convencionales de clorambucil: nuevo mantenimiento. (De acuerdo a casos par-
curso del mismo (Grado B de recomenda- ticulares).
ción: Nivel II b de Evidencia, NCI) 5. Trasplante.
1.2 Pacientes refractarios a clorambucil: 5.1. Trasplante autólogo TPHSP, en pacien-
Fludarabina v.o. tes menores de 60 años con respuestas
Fludarabina – Ciclofosfamida v.o. completas o muy buenas respuestas par-
En los que no pueden recibir fludarabina: ciales. Si las respuestas completas son
CVP y CHOP (Grado B de recomenda- moleculares se recomienda la criopreser-
ción: Nivel II b de Evidencia, NCI). vación de células progenitoras hemopoyé-
2. Enfermedad progresiva después del año ticas y la consolidación con autotrasplan-
de terminada la administración de fludara- te.
bina: 5.2. Trasplante alogénico en pacientes jóve-
2.1. Fludarabina (Grado B de recomendación: nes, con buen performance–status, con
Nivel II b de Evidencia, NCI). enfermedad de mal pronóstico, antes del
2.2. Fludarabina/ciclofosfamida. desarrollo de quimiorresistencia y en re-
2.3. Fludarabina/ciclofosfamida/rituximab. fractarios.
3. Enfermedad progresiva antes del año de 5.3. TPH alogénico semiablativo. Se preferi-
terminada la administración de fludarabi- rá al TPH alogénico convencional.
na: – Regímenes condicionantes dependerán
3.1. Fludarabina/ciclofosfamida (Grado B de cada Centro; se recomiendan aquellos
de recomendación: Nivel II b de Evidencia, basados en fludarabina (± rituximab).
NCI). – Inmunomanipulación post trasplante:
3.2. Fludarabina/ciclofosfamida/rituximab. el uso de rituximab disminuye la incidencia
3.3. Alemtuzumab como tratamiento de de GVHD y potencia el efecto inmunológi-
consolidación en pacientes en que se ob- co GVL 98 (en fase de investigación).
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
63
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA LINFOIDE CRÓNICA
64
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA LINFOIDE CRÓNICA
comunes, según protocolo de infecciones del cen- progresivo, masas abdominales, compromiso ex-
tro, tan pronto sean obtenidos los cultivos. tranodal, fiebre y pérdida de peso, duplicación de
los niveles de LDH.120–122
CITOPENIAS AUTOINMUNES La mayoría de los casos corresponden a lin-
La anemia hemolítica autoinmune (AHAI) por Ac fomas difusos a grandes células, aunque hasta en
calientes ocurre en 4–40%, el PTA en 1–2% y la un 10–15% se presentan células Reed–Sternberg
aplasia pura de serie roja en menos de 1%.114 Es- like. Los linfomas surgen de la transformación de la
tas complicaciones ocurren más frecuentemente clona leucémica, o son clonalmente no relaciona-
en el curso de la enfermedad y en especial en es- dos. Ha sido detectado el virus de Epstein–Barr en
tadios avanzados. las cèlulas Reed–Sternberg like, en pacientes tra-
La incidencia de AHAI en pacientes tratados tados con análogos purínicos.
con fludarabina de inicio es del 2% y alcanza más No puede ser recomendado ningún tratamien-
de 20% en pacientes con pesados tratamientos to estándar para la transformación linfomatosa en
previos115. la LLC, siendo la mayoría de los reportes de tra-
El tratamiento de la AHAI por Ac calientes y el tamiento de pobres resultados (Grado C de reco-
PTA se efectúa según las guías de tratamiento de mendación: Nivel 1b de Evidencia, NCI). Así, se
las formas idiopáticas de estas afecciones (Grado han usado regímenes similares al CHOP o incluso
C de recomendacion: Nivel IV de Evidencia, NCI). ABVD en aquellas formas con células R–S like.120–
Las citopenias autoinmunes siguiendo a aná- 123
FR
TRANSFORMACIÓN LINFOMATOSA Rituximab 375 mg/m2 i.v. día 1.
(SÍNDROME DE RICHTER)120–122 Fludarabina 25 mg/m2 i.v. durante 5 días.
La incidencia de linfoma no Hodgkin es de 5 a
10%, ya sea en forma concurrente con el diagnós- FCR
tico de la LLC, o más frecuentemente en la evo- Rituximab 375 mg/m2 i.v. día 1
lución. El pronóstico es muy malo, con sobrevida Fludarabina 25 mg/m2 i.v. días 1–3
media inferior a 1 año, aunque un 20% puede vivir Ciclofosfamida 250 mg/m2 i.v. días 1–3.
más de 5 años con PQT agresiva.
Se deberá tener en cuenta este diagnóstico Alemtuzumab i.v. ascenso programado en la pri-
ante la presencia de: adenopatías de crecimiento mera semana (3, 10 y 30 mg i.v.) con premedica-
65
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA LINFOIDE CRÓNICA
66
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA LINFOIDE CRÓNICA
nal status, and loss or mutation of the p53 gene are indepen- kemia.French Cooperative Group on Chronic Lymphocytic
dent prognostic factors. Blood. 2002; 100: 1177–1184. Leukemia. N. Engl. J Med. 1998; 338: 1506–1514.
18. Di Raimondo F, Giustolisi R, Lerner S, Cacciola E, O’Brien S, 33. CLL Trialists’ Collaborative Group Chemotheraputic Optio-
Kantarjian H, Keating MJ. Retrospective study of the prognos- ns in Chronic Lymphocytic Leukemia: a Meta–analysis of the
tic role of serum thymidine kinase level in CLL patients with Randomized Trials. CLL Trialists’ Collaborative Group. J.of
activedisease treated with fludarabine. Ann. Oncol. 2001; 12: National Cancer Inst. 1999; 91: 861–868.
621–625. 34. Robak T, Blonski JZ, Kasznicki M, Blasinska–Morawiec M,
19. Knauf WU, Ehlers B, Mohr B, Thiel E, Langenmayer I, Hallek Krykowski E, Dmoszynska A, Mrugala–Spiewak H, Skotnic-
M, Emmerich B, Adorf D, Nerl C, Zwingers T. Prognostic im- ki AB, Nowak W, Konopka L, Ceglarek B, Maj S, Dwilewicz–
pact of the serum levels of soluble CD23 in B–cell chronic lym- Trojaczek J, Hellmann A, Urasinski I, Zdziarska B, Kotlarek–
phocytic leukemia. Blood. 1997; 89: 4241–4242. Haus S, Potoczek S, Grieb P. Cladribine with prednisone
20. Schwarzmeier JD, Shehata M, Hilgarth M, Marschitz I, Louda versus chlorambucil with prednisone as first– line therapy in
N, Hubmann R, Greil R. The role of soluble CD23 in distinguis- chronic lymphocytic leukemia: report of a prospective, rando-
hing stable and progressive forms of B–chronic lymphocytic mized, multicenter trial. Blood. 2000; 96: 2723–2729.
leukemia. Leuk.Lymphoma. 2002; 43: 549–554. 35. Han T, Ezdinli EZ, Shimaoka K, Desai DV. Chlorambucil vs.
21. Hallek M, Langenmayer I, Nerl C, Knauf W, Dietzfelbinger H, combined chlorambucilcorticosteroid therapy in chronic lym-
Adorf D, Ostwald M, Busch R, Kuhn–Hallek I, Thiel E, Emme- phocytic leukemia. Cancer. 1973; 31: 502–508.
rich B. Elevated serum thymidine kinase levels identify a 36. Catovsky D, Richards S, Fooks J, Hamblin T. CLL trials in the
subgroup at high risk of disease progression in early, nons- United Kingdom. The Medical Research Council CLL Trials
moldering chronic lymphocytic leukemia. Blood. 1999; 93: 1,2,3. Leuk. Lymphoma. 1991; suppl. 105–107.
1732–1737. 37. French Cooperative Group on Chronic Lymphocytic Leukae-
22. Dohner H, Fischer K, Bentz M, Hansen K, Benner A, Cabot G, mia A randomized clinical trial of chlorambucil versus COP in
Diehl D, Schlenk R, Coy J, Stilgenbauer S. p53 gene deletion stage A chronic lymphocytic leukaemia. French Cooperative
predicts for poor survival and non–response to therapy with Group on Chronic Lymphocytic Leukaemia. Blood. 1990; 75:
purine analogs in chronic B–cell leukemias. Blood. 1995; 85: 1422–1425.
1580–1589. 38. Montserrat E, Alcala A, Parody R, Domingo A, Garcia–Con-
23. Byrd JC, Smith L, Hackbarth ML, Flinn IW, Young D, Proffitt de J, Bueno,J, Ferran C, Sanz MA, Giralt M, Rubio D. Treat-
JH, Heerema NA. Interphase cytogenetic abnormalities in ment of chronic lymphocytic leukemia in advanced stages. A
chronic lymphocytic leukemia may predict response to rituxi- randomized trial comparing chlorambucil plus prednisone ver-
mab. Cancer Res. 2003; 63: 36–38. sus cyclophosphamide, vincristine, and prednisone. Cancer,
24. Rawstron AC, Kennedy B, Evans PA, Davies FE, Richards SJ, 1985; 56: 2369–2375.
Haynes AP, Russell NH, Hale G, Morgan GJ, Jack AS, Hillmen 39. Raphael B, Andersen JW, Silber R, Oken M, Moore D, Bennett
P. Quantitation of minimal disease levels in chronic lymphocy- J. Comparison of chlorambucil and prednisone versus cyclo-
tic leukemia using a sensitive flow cytometric assay improves phosphamide, vicristine and prednisone as an initial treatment
the prediction of outcome and can be used to optimize thera- for chronic lymphocytic leukaemia: a long term follow up of
py. Blood. 2001; 98: 29–35. an Eastern Cooperative Oncology Group randomised clinical
25. Pfitzner T, Reiser M, Barth S, Borchmann P, Schulz H, trial. J Clin. Oncol. 1991; 9: 770–776.
Schinkothe T, Oberhauser F, Wessels J, Tur M, Diehl V, En- 40. Jaksic B, Brugiatelli M. High dose continuous chlorambucil
gert A. Quantitative molecular monitoring of residual tumor vs intermittent chlorambucil plus prednisone for treatment of
cells in chronic lymphocytic leukemia. Ann.Hematol. 2002; B–CLL––IGCI CLL–01 trial. Nouv Rev Fr Hematol. 1998; 30:
81: 258–266. 437–442.
26. Cheson BD, Bennett JM, Grever M, Kay N, Keating MJ, 41. Jaksic B, Brugiatelli M, Krc I, Losonczi H, Holowiecki J, Pla-
O’Brien S, Rai KR. National Cancer Institute–sponsored Wor- ninc–Peraica A, Kusec R, Morabito F, Iacopino P, Lutz D. High
king Group guidelines for chronic lymphocytic leukemia: revi- dose chlorambucil versus Binet’s modified cyclophosphami-
sed guidelines for diagnosis and treatment. Blood. 1996; 87: de, doxorubicin, vincristine, and prednisone regimen in the
4990–4997. treatment of patients with advanced B–cell chronic lympho-
27. Esteve J, Villamor N, Colomer D, Montserrat E. Different cli- cytic leukemia. Results of an international multicenter rando-
nical value of minimal residual disease after autologous and mized trial. International Society for Chemo–Immunotherapy,
allogenic stem cell transplantation for chronic lymphocytic leu- Vienna. Cancer. 1997; 79: 2107–2114.
kemia. Blood. 2002; 99: 1873–1874. 42. Keating MJ, O’Brien S, Lerner S, Koller C, Beran M, Rober-
28. Dreger P, Ritgen M, Böttcher S, Schmitz N, Kneba M. The tson LE, Freireich EJ, Estey E, Kantarjian H. Long–term fo-
prognostic impact of minimal residual disease assessment af- llow–up of patients with chronic lymphocytic leukemia (CLL)
ter stem cell transplantation for chronic lymphocytic leukemia: receiving fludarabine regimens as initial therapy. Blood. 1998;
is achievement of molecular remission worthwhile? Leukemia. 92: 1165–1171.
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
2005; 19: 1135–1138. 43. O’Brien S, Kantarjian H, Beran M, Smith T, Koller C, Estey
29. Mattson J, Uzunel M, Remberger M, et al. Minimal residual di- E, Robertson LE, Lerner S, Keating M. Results of fludarabine
sease is common after allogeneic stem cell transplantation in and prednisone therapy in 264 patients with chronic lympho-
patients with B cell chronic lymphocytic leukemia and may be cytic leukemia with multivariate analysis–derived prognos-
controlled by graft–versus–host disease. Leukemia. 2000; 14, tic model for response to treatment. Blood. 1993; 82: 1695–
247–254. 1700.
30. Esteve J, Villamor N, Colomer D, et al. Stem cell transplanta- 44. Boogaerts MA, Van Hoof A, Catovsky D, Kovacs M, Monti-
tion for chronic lymphocytic leukemia: different outcome af- llo M, Zinzani PL, Binet JL, Feremans W, Marcus R, Bosch F,
ter autologous and allogeneic transplantation and correla- Verhoef G, Klein M. Activity of oral fludarabine phosphate in
tion with minimal residual disease status. Leukemia. 2001; 15, previously treated chronic lymphocytic leukemia. J Clin.Oncol.
445–451. 2001; 19: 4252–4258.
31. Esteve J, Villamor N, Colomer D and Montserrat E. Different 45. Johnson S, Smith AG, Loffler H, Osby E, Juliusson G, Emmeri-
clinical value of minimal residual disease after autologous and ch B, Wyld P, Hiddemann W. Multicentre prospective randomi-
allogeneic stem cell transplantation for chronic lymphocytic sed trial of fludarabine versus cyclophosphamide, doxirubicin,
leukemia. Blood. 2002; 99(5): 1873–4. and prednisilone (CAP) for the treatment of advanced–sta-
32. Dighiero G, Maloum K, Desablens B, Cazin B, Navarro M, Le- ge chronic lymphocytic leukaemia. The French Cooperative
blay R, Leporrier M, Jaubert J, Lepeu G, Dreyfus B, Binet JL, Group on CLL. Lancet. 1996; 347: 1432–1438.
Travade P. Chlorambucil in indolent chronic lymphocytic leu-
67
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA LINFOIDE CRÓNICA
46. Leporrier M, Chevret S, Cazin B, Boudjerra N, Feugier P, Des- 59. Khouri IF, Keating MJ, Vriesendorp HM et al. Autologous and
ablens B, Rapp MJ, Jaubert J, Autrand C, Divine M, Dreyfus allogeneic bone marrow transplantation for chronic lymphocy-
B, Maloum K, Travade P, Dighiero G, Binet JL, Chastang C. tic leukemia: preliminary results. J Clin Oncol 1994;12:748–
Randomized comparison of fludarabine, CAP, and ChOP in 58.
938 previously untreated stage B and C chronic lymphocytic 60. Khouri I, Keating MJ, Champlin RE. Hematopoietic stem ce-
leukemia patients. Blood. 2001; 98: 2319–2325. ll transplantation for chronic lymphocytic leukemia. Curr Opin
47. Rai KR, Peterson BL, Appelbaum FR, Kolitz J, Elias L, She- Hematol 1998; 5: 454–9.
pherd L, Hines J, Threatte GA, Larson RA, Cheson BD, Schi- 61. Pavletic ZS, Bierman PJ, Vose JM, et al. High incidence of
ffer CA. Fludarabine compared with chlorambucil as prima- relapse after autologous stem–cell transplantation for B–ce-
ry therapy for chronic lymphocytic leukemia. N. Engl. J Med, ll chronic lymphocytic leukemia or small lymphocytic lympho-
2000; 343: 1750–1757. ma. Ann Oncol 1998: 9:1023–1026,
48. Keating MJ, Flinn I, Jain V, Binet JL, Hillmen P, Byrd J, Albitar 62. Dreger P, Van Biezen A, Brand R, et al. Prognostic factors
M, Brettman L, Santabarbara P, Wacker B, Rai KR. Therapeu- for survival after autologous stem cell transplantation for chro-
tic role of alemtuzumab (Campath–1H) in patients who have nic lymphocytic leukemia (CLL): The EBMT experience. Blood
failed fludarabine: results of a large international study. Blood. 2000; 96: 482a (abstr 2071).
2002; 99: 3554–3561. 63. Montserrat E, Esteve J, Schmitz N et al. Autologous stem ce-
49. Morrison VA, Rai KR, Peterson BL, Kolitz JE, Elias L , Ap- ll transplantation for CLL, : analysis of the impact on overall
pelbaum FR, Hines JD, Shepherd L, Larson RA, Schiffer CA. survival in 107 patients from the International Project for CLL/
Therapy–related myeloid leukemias are observed in patients Transplants. Blood. 1999; 92 (Suppl,1): 397a.
with chronic lymphocytic leukemia after treatment with fluda- 64. Dreger P, von Neuhoff N, Sonnen R et al. Feasibility and affi-
rabine and chlorambucil: results of an intergroup study, can- cacity of early autologous stem cells tansplantation for poo–
cer and leukemia group B 9011. J Clin.Oncol. 2002; 20: 3878– risk CLL. Blood. 2000; 96: 483a.
3884. 65. Milligan DW, Fernandes S, Dasgupta A, Matutes E et al. Re-
50. Jaksic B, Brugiatelli M, Suciu S. Fludarabine versus high–do- sults of the MRC pilot study show autografting for younger pa-
se continuous chlorambucil in untreated patients with B–CLL: tients with chronic lymphocytic leukemia is safe and achieves
results of CLL1 EORTC randomized trial. Hematol. Cell. 2000 a high percentaje of molecular responses. Blood. 2005; 105:
; 42. 397–404.
51. Eichhorst BF, Bush R, Hopfinger G et al. Fludarabine plus 66. Michallet M, Thiebaut A, Dreger P et al. Peripheral Blood stem
cyclophosfamide (FC) induces higher remission rates and lon- cell (PBSC) mobilization and transplantation after fludarabi-
ger progression free survival (PFS) than fludarabine (F) alo- ne therapy in chronic lymphocytic leukaemia (CLL): a report
ne in first line therapy of advanced chronic lymphocytic leuke- of the European Blood and Marrow Transplantation (EBMT)
mia (CLL): Results of a phase III study (CLL4 protocol) of the CLL subcommittee on behalf of the EBMT Chronic Leukae-
Grman CLL Study Group (GCLLGS). Blood. 2003; 102: 72a mias Working Party (CLWP). British Journal of Haematology.
(abstr 243). 108; 595–601.
52. Flinn IW, Kumm E, Grever MR, et al. Fludarabine and cyclo- 67. Lysak D, Koza V et al. Mobilization of peripheral blood stem
phosfammide produces a higher complete response rate and cell in CLL patients after front–line fludarabine treatment. Ann
more durable remission than fludarabine in patients with pre- Hematol. 2005 Jul; 84(7): 456–61.
viously untreated CLL: Intergroup Trial E2997. Blood 2004 : 68. Ritgen M, Lange A, Stilgenbauer S, Dohner H, Bretscher C,
104:139a, (abstr 475). Bosse H, Stuhr A, Kneba,M, Dreger P. Unmutated immunog-
53. Keating MJ, O’Brien S, Abitar M, et al. Early results of a che- lobulin variable heavy–chain gene status remains an adverse
mo immunotherapy regimen of fludarabine, cyclophosfamide, prognostic factor after autologous stem cell transplantation for
and rituximab as initial therapy for chronic lymphocytic leuke- chronic lymphocytic leukemia. Blood. 2003; 101: 2049–2053.
mia. J Clin Oncol 2005: 23: 4079–4088,. 69. Stilgenbauer S, Neuhoff N, Bullinger L, Krober A, Lichter P,
54. Byrd JC, Peterson BL, Morrison VA, Park K, Jacobson R, Dreger P, Dohner H. Deletion 11q23 identifies B–CLL patients
Hoke E, Vardiman JW, Rai K, Schiffer CA, Larson RA. Ran- at high risk for molecular disease persistance after high dose
domized phase 2 study of fludarabine with concurrent versus therapy and autografting. (Abst.). Blood. 2000; 96: 715a.
sequential treatment with rituximab in symptomatic, untrea- 70. Michallet M, Brand R, Dreger P et al. Allogeneic hematopoie-
ted patients with B–cell chronic lymphocytic leukemia: resul- tic stem cell transplantation (HSCT) for chronic lymphocytic
ts from Cancer and Leukemia Group B 9712 (CALGB 9712). leukemia (CLL): results and prognostic factors for survival af-
Blood. 2003; 101: 6–14. ter transplantation. Analysis from EBMT registry. Blood. 2000;
55. Byrd JC, Rai K, Peterson BL et al. Addition of rituximab to flu- 96 (Suppl. 1): 205a.
darabine may prolong progression–free survival and overall 71. Horowitz MM, Montserrat E, Soboconski K et al. Hematopoie-
survival in patients with previously untreated chronic lympho- tic stem cell transplantation (SCT) for chronic lymphocytic leu-
cytic leukemia: an updated retrospective comparative analy- kemia (CLL). Blood. 2000; 96 (Suppl. 1): 522a.
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
sis of CALGB 9712 and CALGB 9011. Blood. 2005; 105 (1): 72. Doney KC, Chauncey T, Appelbaum FR, Seattle Bone Ma-
49–53. rrow Transplant Team. Allogeneic related donor hematopoie-
56. Lundin J, Kimby E, Bjorkholm M, Broliden PA, Celsing F, Hjal- tic stem cell transplantation for treatment of chronic lympho-
mar V, Mollgard L, Rebello P, Hale G, Waldmann H, Mellste- cytic leukemia. Bone Marrow Transplant. 2002; 29: 817823.
dt H, Osterborg A. Phase II trial of subcutaneous anti–CD52 73. Khouri I, Keating MJ, Saliba R et al. Long–term follow–up of
monoclonal antibody alemtuzumab (Campath–1H) as first–li- patients with chronic lymphocytic leukemia treated with allo-
ne treatment for patients with B– cell chronic lymphocytic leu- geneic hematopoietic transplantation. Cytotherapy. 2002; 4:
kemia (B–CLL). Blood. 2002; 100: 768–773. 217–221.
57. Dreger P, Stilgenbauer S, Benner A, et al. The prognostic im- 74. Khouri I, Keating MJ, Saliba R et al. Long–term follow–up of
pact of autologous stem cell transplantation in patients with patients with chronic lymphocytic leukemia treated with allo-
chronic lympho–cytic leukemia: A risk–matched analysis ba- geneic hematopoietic transplantation. Cytotherapy. 2002; 4:
sed on the VH gene mutational status. Blood. 2004; 103: 217–221.
2850–2858. 75. Pavletic ZS, Arrowsmith ER, Bierman PJ et al. Outcome of
58. Rabinowe SN, Soiffer RJ, Gribben JG et al. Autologous and allogeneic stem cell transplantation for B cell chronic lympho-
allogeneic bone marrow transplantation for poor progno- cytic leukemia. Bone Marrow Transplant. 2000; 25: 717–722.
sis patients with B–cell chronic lymphocytic leukemia. Blood 76. Dreger P, Ritgen M et al. The prognostic impact of minimal re-
1993; 82: 1366–1376. sidual disease assessment after stem cell transplantation for
68
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA LINFOIDE CRÓNICA
chronic lymphocytic leukemia: is achievement of molecular re- fractory chronic lymphocytic leukemia and prolymphocytic
mission worthwhile? Leukemia. 2005; 19: 1135–1138. leukemia. Leuk Lymphoma. 2002; 43(5): 1007–11.
77. Moreno C, Colomer D, Villamor N et al. Allogeneic, but not au- 92. Rai K, Coutre S, Rizzeri D et al. Efficacy and Safety of Alem-
tologous, stem–cell transplantation overcomes the negative tuzumab (Campath–1H) in Refractory B–CLL Patients treated
impact of unmutated VH genes in patients with CLL. Blood. on a Compassionate basis. (Abstract) Blood, 2001; 98: 365a.
2003; 102: 152a. 93. Ferrajoli A, O’Brien SM, Cortes JE, Giles FJ, Thomas DA, Fa-
78. Moreno C, Villamo N, Colomer D et al. Allogeneic Stem–Cell derl S, Kurzrock R, Lerner S, Kontoyiannis DP, Keating MJ.
Transplantation May Overcome the Adverse Prognosis of Un- Phase II study of alemtuzumab in chronic lymphoproliferative
mutated VH Gene in Patients With Chronic Lymphocytic Leu- disorders. Cancer. 2003; 15 (98): 773–8.
kemia. J Clin Oncol. 2005; 23:3433–3438. 94. Stilgenbauer S, Dohner H. Campath–1H–induced comple-
79. Issa Khouri, Michael Keating, Martin Körbling et al. Trans- te remission of chronic lymphocytic leukemia despite p53 ge-
plant–Lite: Induction of Graft–Versus–Malignancy Using Flu- ne mutation and resistance to chemotherapy. N. Engl. J Med,
darabine–based NonablativeChemotherapy and Allogeneic 2002; 347: 452–453.
Blood Progenitor–Cell Transplantation as Treatment for Lym- 95. Lozanski G, Heerema NA, Flinn IW, et al. Alemtuzumab is an
phoid Malignancies. Journal of Clinical Oncology. 1998; Vol effective therapy for chronic lymphocytic leukemia with p53
16 (8): 2817–2824 mutations and deletions. Blood. 2004; 103: 3278–81.
80. Schetelig J, Thiede C, Bornhauser M et al. Evidence of a 96. Kennedy B, Rawstron A, Carter C, Ryan M, Speed K., Lucas
graft–versus leukemia effect in chronic Lymphocytic leukemia G, Hillmen P. Campath–1H and fludarabine in combination
after reduced–intensity conditioning and allogeneic stem–ce- are highly active in refractory chronic lymphocytic leukemia.
ll transplantation: the Cooperative German Transplant Study Blood. 2002; 99: 2245–2247.
Group. Journal of Clinical Oncology. 2003; 21: 2747–2753. 97. Wierda W, O’Brien S, Wen S, et al. Chemoimmunotherapy
81. P Dreger, R brand, J Hansz et al.Review. Treatment–rela- with fludarabine, cyclophosfamide and rituximab for relap-
ted mortality and graft–versus–leukemia activity after alloge- sed and refractory chronic lymphocytic leukemia. J Clin On-
neic stem cell transplantation for chronic lymphocytic leuke- col. 2005; 23: 4070–4078,
mia using intensity–reduced conditioning. Leukemia. 2003; 98. Montillo M, Tedeschi A, Cafro AM, Rossi V, D’Avanzo G, Pun-
17: 841–848. golino E, Cairoli R, Oreste P, Veronese S, Brando B, Morra E.
82. Issa Khouri, Ming–Sheng Lee, Rima M. Saliba et al. Nonabla- Sequential Subcutaneous Administration of CAMPATH–1H as
tive allogeneic stem cell transplantation for chronic lymphocy- Treatment of Minimal Residual Disease in CLL Patients Res-
tic leukemia: Impact of rituximab on immunomodulation and ponding to Fludarabine (FAMP). (Abstract).Blood, 2002: 100,
survival. Experimental hematology 2004; 32: 28–35. 805a.
83. Sorror ML, Maris MB, Sandmaier BM et al. Hematopoietic ce- 99. Moreton P, Kennedy B, Lucas G, et al. Eradication of minimal
ll Transplantation After Nonmyeloablative Conditioning for Ad- residual disease in B–cell chronic lymphocytic leukemia after
vanced Chronic Lymphocytic Leukemia. Journal of Clinical alemtuzumab therapy is associated with prolonged survival. J
Oncology. 2005; 23: 3819–3829. Clin Oncol 2005; 23 (13): 2971–9,.
84. Perez–Simon JA, Kottaridis PD, Martino R, Craddock C, Ca- 100. E Jabbour, MJ Keating, RE Champlin and IF Khouri. Mini Re-
ballero D, Chopra R, Garcia–Conde J, Milligan DW, Schey S, view. Stem cell transplantations for chronic lymphocytic leuke-
Urbano–Ispizua A, Parker A, Leon A, Yong K, Sureda A, Hun- mia: should not more patients get a transplant? Bone Marrow
ter A, Sierra J, Goldstone AH, Linch DC, San Miguel JF, Mac- Transplantation. 2004; 34: 289–297.
kinnon S. Nonmyeloablative transplantation with or without 101. Christensen BE, Hansen MM, Videbaek A. Splenectomy in
alemtuzumab: comparison between 2 prospective studies in chronic lymphocytic leukaemia. Scand. J Haematol. 1977; 18:
patients with lymphoproliferative disorders. Blood. 2002; 100: 279–287.
3121–3127. 102. Cusack JC Jr, Seymour JF, Lerner S, Keating MJ, Pollock RE.
85. NICE Institute for Clinical Excellence. Guidance on the use Role of splenectomy in chronic lymphocytic leukemia. J Am.
of fludarabine for B–cell lymphocytic leukaemia.Technology Coll. Surg. 1997; 185: 237–243.
Appraisal Guidance. 2001; 29. 103. Delpero JR, Houvenaeghel G, Gastaut JA, Orsoni P, Blache
86. O’Brien S, Kantarjian H, Beran M, Koller C, Talpaz M, Lerner JL, Guerinel G, Carcassonne Y. Splenectomy for hypersple-
S, Keating MJ. Fludarabine and granulocyte colony–stimula- nism in chronic lymphocytic leukaemia and malignant non–
ting factor (G–CSF) in patients with chronic lymphocytic leu- Hodgkin’slymphoma. Br. J Surg. 1990, 77, 443–449.
kemia. Leukemia. 1997; 11: 1631–1635. 104. Neal TF Jr., Tefferi A, Witzig TE, Su J, Phyliky RL, Nagor-
87. Mavromatis B, Cheson BD. Monoclonal antibody therapy ney DM. Splenectomy in advanced chronic lymphocytic leu-
of chronic lymphocytic leukemia. J Clin Oncol. 2003; 21(9): kemia: a single institution experience with 50 patients. Am.J
1874–81. Med. 1992; 93: 435–440.
88. Osterborg A, Dyer MJ, Bunjes D, Pangalis GA, Bastion Y, Ca- 105. Pegourie B, Sotto JJ, Hollard D, Michallet M, Sotto MF. Sple-
tovsky D, Mellstedt H. Phase II multicenter study of human nectomy during chronic lymphocytic leukemia. Cancer. 1987;
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
69
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA LINFOIDE CRÓNICA
patients with low–grade B–cell tumors. Blood. 1989; 73: 366– 117. Ghazal H. Successful treatment of pure red cell aplasia with ri-
368. tuximab in patients with chronic lymphocytic leukemia. Blood.
110. Chapel H, Dicato M, Gamm H, Brennan V, Ries F, Bunch C, 2002; 99: 1092–1094.
Lee M. Immunoglobulin replacement in patients with chronic 118. Gupta NK, Kavuru S, Patel D, Janson D, Driscoll N, Ahmed
lymphocytic leukaemia: a comparison of two dose regimes. S. Rituximab–based chemotherapy for steroid–refractory au-
Br. J Haematol. 1994; 88: 209–212. toimmune hemolytic anemia of chronic lymphocytic leukemia.
111. Jurlander J, Geisler CH, Hansen MM. Treatment of hypoga- Leukemia. 2002; 10: 2092–2095.
mmaglobulinaemia in chronic lymphocytic leukaemia by low– 119. Hegde UP, Wyndham HW, White T, Cheson BD. Rituximab
dose intravenous gammaglobulin. Eur. J Haematol. 1994; 53, treatment of refractory fludarabine associated immune throm-
114–118. bocytopenia in chronic lymphocytic leukemia. Blood. 2002;
112. Weeks JC, Tierney MR, Weinstein MC. Cost effectiveness of 100: 2260–2262.
prophylactic intravenous immune globulin in chronic lympho- 120. Dabaja BS, O’Brien SM, Kantarjian HM, Cortes JE, Thomas
cytic leukemia. N. Engl. J Med. 1991; 325, 81–86. DA, Albitar M, Schlette ES, Faderl S, Sarris A, Keating MJ,
113. Sinisalo M, Aittoniemi J, Oivanen P, Kayhty H, Olander RM, Giles FJ. Fractionated cyclophosphamide, vincristine, lipo-
Vilpo J. Response to vaccination against different types of an- somal daunorubicin (daunoXome), and dexamethasone (hy-
tigens in patients with chronic lymphocytic leukaemia. Br. J perCVXD) regimen in Richter’s syndrome. Leuk. Lymphoma,
Haematol. 2001; 114: 107–110. 2001; 42: 329–337.
114. Hamblin T. Autoimmune Disease and Its Management in 121. Giles FJ, O’Brien SM, Keating MJ. Chronic lymphocytic leuke-
Chronic Lymphocytic Leukemia. 2001, pp. 435–458. mia in (Richter’s) transformation.Semin.Oncol. 1998; 25: 117–
115. Myint H, Copplestone JA, Orchard J, Craig V, Curtis D, Pren- 125.
tice AG, Hamon MD, Oscier DG, Hamblin TJ. Fludarabine–re- 122. Cabanillas F, Keating MJ. Richter’s syndrome: a report on 39
lated autoimmune haemolytic anaemia in patients with chronic patients. J Clin. Oncol. 1993; 11: 1985–1989.
lymphocytic leukaemia. Br. J Haematol. 1995; 91: 341–344. 123. Tsimberidou AM, Keating MJ. Richter syndrome: biology, in-
116. Mauro FR, Foa R, Cerretti R, Giannarelli D, Coluzzi S, Mande- cidence, and therapeutic strategies. Cancer. 2005; 103 (2):
lli F & Girelli G. Autoimmune hemolytic anemia in chronic lym- 216–28.
phocytic leukemia: clinical, therapeutic, and prognostic featu-
res. Blood. 2000; 95: 2786–2792.
Para los niveles de evidencia se siguieron los criterios del Instituto Nacional del Cáncer, US National Ins-
titute of Health (NCI) y del National Comprehensive Cancer Network (NCCN).
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
70
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA LINFOIDE CRÓNICA
Participantes
Dra. Acosta Giselle, Prof. de Anatomía Patológica. Dra. Jordan Ximena, Clínica Hematológica. Dra. Kescherman
Araujo Edith. Dra. Arbes Patricia, Residente Anatomía Francis, Asistente Clínica Médica A. Dra. Kollar Patricia,
Patológica. Dr. Baubeta Alberto, Hematólogo FEMI. Dra. Ex Asistente de Clínica Hematológica, Servicio Hematología
Bengochea Milka, Prof. Agda. Banco de Órganos. Dra. Hospital Maciel. Dra. Lens Daniela, Hematóloga, Prof. Adj.
Beñarán Beatriz, Hematóloga Ex Prof, Adj. Medicina y Dpto. Básico de Medicina. Dra. Lipschutz Judith. Dra.
Asistente de Hematología, CRAMI. Dr. Bodega Enrique, Ex Lizarralde Adelina, Hematóloga CAMS Soriano, AMEDRIN
Prof. Adj. Clínica Hematológica Director Serv. Hematología Fray Bentos, FEMI. Dra. Magariños Alicia, Ex Asistente
Hospital Maciel. Dra. Bruzzone Margarita, Clínica Médica de Clínica Hematológica, Servicio Hematología Hospital
C. Dra. Canesa Cecilia, Prof. Adj. Laboratorio Patología Maciel. Dr. Marchetti Nicolás, Hematólogo Maldonado.
Clínica. Dra. Carnelli Alicia, Oncóloga COMEPA, Hospital Dra. Martínez Claudia, Clínica Hematológica, Casa de
Escuela del Litoral Paysandú FEMI. Dra. Cardeza Adriana, Galicia. Dra. Moirano Claudia, Hematóloga Hospital
Ex Asistente de Clínica Hematológica. Hematóloga Asoc. Rivera. Dra. Monteserin Noela, Clínica Hematológica.
Española. Dra. Cardozo Alicia, Hospital de Artigas. Dra. Dra. Moro Isabel, Clínica Hematológica. Dra. Motta
Carrizo Cecilia, Ex Asistente de Clínica Hematológica, Gabriela, CH Pereira Rossell, MUCAM. Dra. Murieda
Prof. Adj. Clínica Médica Hosp. Maciel. Dra. Chevalier Berta, Hematóloga INDO. Dr. Muxi Pablo, Prof. Agdo.
Silvana, Clínica Hematológica. Dra. Costa Virginia, Ex Clínica Hematológica, Hospital Británico, Presidente de la
Asistente de Clínica Hematológica Prof. Adj. Clínica Médica Sociedad de Hematología del Uruguay. Dra. Nese Martha,
2 Hospital Pasteur, Hospital Militar. Dr. Cuña Algenor, Prof. Clínica Hematológica, Directora de la Cátedra de
FEMI. Dra. Damiano Sandra, Hematóloga INDO. Dr. Dau Hematología. Dr. Noble Marcelo, Hospital de Florida, FEMI.
Carlos, Hematólogo del INDO. Dr. De Bellis Roberto, Dra. Novoa María de los Ángeles, Hematóloga Hospital
Prof. Clínica Hematológica, Director Serv. Hematología Militar, Asociación Española. Dr. Otto Pritsch, Prof. Adj.
Hospital Britanico. Dra. De Gálvez Gabriela, Asistente, Dpto. Bioquimica Facultad de Medicina. Dra. Parodi Mónica,
Clínica Hematológica. Dr. Desiervo Andrés, Clínica Clínica Hematológica, SMI, CUDAM. Dra. Pierri Silvia, Prof.
Hematológica. Dra. Díaz Lilián, Prof. Agda. Clínica Adj. Clínica Hematológica, Hospital Británico. Dra. Piriz
Hematológica. Dr. Dighiero Guillermo, Director Instituto Beatriz, Hematóloga Hospital Lavalleja–FEMI. Robinsón
Pasteur de Montevideo y Unidad Inmuno-Hematología Ma Isabel, Residente Anatomía Patológica. Dr. Pomoli
e Inmunopatología Instituto Pasteur de Francia. Dra. Di Santiago, Hematólogo Hospital Militar, Serv. Hematología
Matteo Carina, Prof. Adj. Anatomía Patológica. Dra. Hospital Maciel. Dra. Prado Ana Inés, Hospital Maciel. Dra.
Estévez Ana Laura, Hematóloga Hospital de San José, Quiñones Silvia. Dra. Rettig Karen, Clínica Hematológica.
AMSJ, FEMI. Dr. Gabus Raúl, Hematólogo Servicio Dra. Riera Myriam. Dra. Riva Eloisa, Clínica Hematológica.
Hematología Hospital Maciel, Hosp. Evangélico. Dra. Ana Dra. Rivoir Elaine, Laboratorio Patología Clínica. Dra.
Galán, Ex Asistente de Clínica Hematológica Servicio Rocca Alejandra, Clínica Hematológica. Dra. Rodriguez
Hematología HHFA. Dr. Galeano Sebastián, Hematólogo Rossana, Laboratorio Patología Clínica. Dra. Rojo Ana
Servicio Hematología Hospital Maciel. Dra. García Ana Luz, Hematóloga Hospital Policial. Dra. Santamarina
María, Ex Prof. Adj. Clínica Hematológica Prof. Agdo. Cinthya. Dr. Sclavi Jorge, Hospital de Rivera. Dr. Sempol
Laboratorio de Patología Clínica Hospital Pereira Rossell, Fernando, Laboratorio Clínico. Dra. Sevrini Inés, Ex
CASMU. Dra. González Marianela, Hematóloga Hospital Asistente de Clínica Hematológica, Prof. Adj. Clínica Médica
de Salto. Dra. Gossio Elvira, Hematóloga Casa de Galicia, A. Dra. Sierra Cecilia, Laboratorio Patología Clínica. Dra.
CUDAM, CAMEDUR, Durazno FEMI. Dr. Giordano Hugo, Stevenazzi Mariana, Asistente Clínica Hematológica. Dra.
Esp. en Laboratorio Clínico Asoc. Española. Dr. Goncalves Sundberg Florencia, CH Pereira Rossell, CRAMI. Dra.
Luis, Oncólogo Artigas FEMI. Dra. Gualco Gabriela, Esp Tejeira Natalia, Clínica Hematológica. Dra. Testa Graciela,
Anatomía Patológica. Dra. Guillermo Cecilia, Ex Prof. Adj. Hematóloga Hospital Salto-FEMI. Dra. Tiscornia Adriana,
Clínica Hematológica, Hematóloga CITMO. Dra. Iglesias Bco. Org. Dra. Topolansky Laura, Asistente Clínica
Teresa, Lab. Central Hospital de Clínicas. Dr. Isaurralde Hematológica, CITMO. Dra. Touriño Cristina, Hematóloga
Hugo, Ex Asistente de Clínica Hematológica, Prof. Adj. Prof. Adj. Dpto. Básico de Medicina. Dra. Uriarte Rosario,
Dpto. Emergencia Hospital de Clínicas, CITMO. Dra. Licenciada en Ciencias Soc. Española. Dr. Vázquez
Alberto, Serv. Hematología Hospital Maciel.
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
71
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA AGUDA
Consenso Nacional de
Leucemia Aguda
LEUCEMIA MIELOBLÁSTICA AGUDA blastos es similar a los casos con 30% o más blas-
(LMA) tos en la médula ósea.8
La evolución del sistema de clasificación en la
INTRODUCCIÓN LMA desde la basada en la morfología a la basa-
La leucemia mieloblástica aguda (LMA), es una da en la citogenética/molecular, refleja el recono-
hemopatía clonal caracterizada por una alteración cimiento de la importancia de los subtipos biológi-
en la proliferación y diferenciación de los mielo- cos específicos.9
blastos.1 La división en subtipos de las LMA se rea-
liza desde el punto de vista citomorfológico y cito-
químico con la clasificación FAB. 2 PRONÓSTICO DE LA LMA
La clasificación de la Organización Mundial de La citogenética es uno de los factores pronósti-
la Salud (OMS) incorpora e interrelaciona morfolo- cos más importantes en la LMA. El 55% a 60%
gía, citogenética, genética molecular y marcado- de las LMA de novo presenta alteraciones citoge-
res inmunológicos en un intento por construir una néticas. Se han determinado tres grupos de ries-
clasificación aplicable universalmente y válida pa- go de acuerdo a los hallazgos previo a la poliqui-
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
ra el pronóstico.3 mioterapia.9–12
Una de las diferencias de las clasificaciones Grupo de riesgo favorable: Este grupo tiene una
de la OMS y FAB es el porcentaje de blastos re- posibilidad de recaída estimada en 25% y
queridos para el diagnóstico de LMA, la OMS con- una posibilidad de sobrevida global (SG) a 4
sidera necesario > 20% en sangre o médula ósea. años del 70%. Las aberraciones de este gru-
Se eliminó la «anemia refractaria con exceso de po son: t(8;21)(q22;q22); inv16(p13q22);
blastos en transformación» (AREB–t) de la clasi- t(16;16)(p13;q22); t(15;17)(q22;q12–21).
ficación FAB de los síndromes mielodisplásicos Grupo de riesgo intermedio: con riesgo de recaí-
(SMD), definida por 20% a 29% de blastos en mé- da del 50% y de SG a 4 años de 40–50%.
dula ósea. Se incluye la AREB–t en la categoría Las aberraciones en este grupo son: –Y, +8;
de LMA con «displasia multilinaje» o «derivada de +11, +13, +21, del 9(q), del 11(q), del 20(q),
SMD».4–7 Varios estudios indican que el patrón de t(9;11)(p22;q23), cariotipo normal.
supervivencia para los casos con 20% a 29% de Grupo de alto riesgo: el riesgo de recaída en es-
73
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA AGUDA
74
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA AGUDA
ciones cromosómicas en las cuales el gen RARα ción al fármaco mutagénico. El riesgo de aparición
está fusionado con otros genes t(11;17)(q23;q21), depende de la dosis acumulativa del fármaco y de
t(5;17)(q32;q12) y t(11;17)(q13;q21). La LPA es es- la edad del paciente. En más de 90% de los casos,
pecíficamente sensible al tratamiento con ácido se han observado anomalías citogenéticas que in-
transretinoico (ATRA), que actúa como fármaco di- volucran los cromosomas 5 , 7 y anomalías cromo-
ferenciador. La combinación de ATRA con quimio- sómicas complejas. Suelen ser refractarias al tra-
terapia permite alcanzar altas tasas de remisiones tamiento y la supervivencia mediana es de aproxi-
completas. madamente 7 a 8 meses.
75
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA AGUDA
La mayoría de los pacientes son adultos. La deter- nocítica aguda se relacionan con anomalías del
minación del fenotipo revela blastos que expresan 11q23 que involucran al gen MLL Cerca del 30%
al menos dos antígenos mielomonocíticos (CD13, de los casos de leucemia monocítica y 7% en la
CD33, CD117) y MPO. El CD34 suele ser positi- leucemia monoblástica aguda presentan la muta-
vo. Si bien no se ha identificado ninguna anomalía ción del FLT3. La t(8;16) (p11;p13) relacionada con
cromosómica específica, la mutación del gen FLT3 la leucemia monocítica aguda, con hemofagocito-
se ha relacionado con leucocitosis elevada, un alto sis y mala respuesta a la quimioterapia, fusiona el
porcentaje de células blásticas en la médula ósea gen MOZ (8p11) con el gen CBP (16p13).
y pronóstico desfavorable.
Leucemias eritroides agudas (FAB M6a y
LMA con maduración (FAB M2) M6b)
La LMA con maduración está caracterizada por Los dos subtipos de las leucemias eritroides agu-
≥ 20% de mieloblastos en sangre o médula ósea, das, la eritroleucemia y la leucemia eritroide pura,
mas de 10% de granulocitos en diferentes etapas se caracterizan por una población eritroide predo-
de maduración y < 20% de monocitos. Representa minante y en el caso de la eritroleucemia, por la
30% a 45% de los casos de LMA. Si bien aparece presencia de un componente mieloide significati-
en todos los grupos de edades, 20% de los pacien- vo. La eritroleucemia (M6a) predomina en los adul-
tes tienen < 25 años y 40% ≥ 60 años. Los blastos tos, representa el 5% a 6% de las LMA. La leu-
suelen expresar uno o más antígenos de asocia- cemia eritroide pura (M6b) es infrecuente y puede
ción mieloides (CD13, CD33 y CD15). Un tercio de presentarse en todas las edades. La eritroleuce-
los casos se relacionan con la t(8;21)(q22:q22) , el mia se presenta de novo o evoluciona de un SMD.
pronóstico en estos casos es favorable. Se ha ob- La determinación del fenotipo inmune en la eritro-
servado que el pronóstico es malo para los casos leucemia revela eritroblastos que reaccionan con
con t(6;9)(q23:q34). anticuerpos a la glicoforina A y hemoglobina A y
mieloblastos que expresan una variedad de antíge-
Leucemia mielomonocítica aguda (FAB nos de asociación mieloide (CD13, CD33, CD117,
M4) c–kit y MPO). En la leucemia eritroide aguda la ex-
La leucemia mielomonocítica aguda (LMMA) com- presión de glicoforina A y hemoglobina A se ob-
prende 15% a 25% de LMA. Se manifiesta común- serva en las formas diferenciadas. El diagnóstico
mente en individuos de mayor edad. Presenta mar- diferencial en la eritroleucemia es con la AREB y
cadores de diferenciación monocítica (CD14, CD4, la LMA con displasia multilinaje Si los precursores
CD11b, CD11c, CD64 y CD36) y lisozima. La ma- eritroides son ≥ 50% y el componente blástico, no
yoría de los casos de LMMA presentan anomalías eritroide, es ≥ 20%, el diagnóstico es eritroleuce-
citogenéticas no específicas. Algunos casos tie- mia, mientras que si el componente blástico no eri-
nen una anomalía genética en 11q23. troide es menor a 20% se diagnostica AREB. El
diagnóstico diferencial para la leucemia eritroide
Leucemia monoblástica aguda y pura comprende anemia megaloblástica por defi-
leucemia monocítica aguda (FAB M5a y ciencia de B12 o de folato. No se describen anoma-
M5b) lías cromosómicas específicas, son comunes los
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
76
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA AGUDA
t(1;22). Las lesiones líticas son frecuentes en ni- loides CD13 y CD33, los marcadores hematopoyé-
ños. Se relaciona con tumores de células germina- ticos tempranos CD34 y HLA–DR de clase II. No
les mediastínicas en los varones jóvenes. Expre- se ha identificado anomalía cromosómica sistemá-
san glicoproteínas plaquetarias: CD41 (glicoproteí- tica.
na IIb/IIIa) y CD61 (glicoproteína IIIa). Los marca-
dores mieloides CD13 y CD33 pueden ser positi- Panmielosis aguda con mielofibrosis
vos, CD36 es típicamente positivo. Los blastos son La panmielosis aguda con mielofibrosis es una
negativos para el anticuerpo anti MPO y otros mar- proliferación aguda relacionada con la fibrosis de
cadores de la diferenciación mieloide. En las biop- la médula ósea, es muy inusual y se puede presen-
sias de la médula ósea, los megacariocitos y los tar en todas las edades. Ocurre de novo o después
megacarioblastos pueden reaccionar positivamen- del tratamiento con fármacos alquilantes o con ra-
te a anticuerpos para el factor VIII. diación.
No se observan anomalías cromosómicas úni- Los blastos expresan uno o más antígenos de
cas en los adultos. En los niños, especialmente en asociación mieloide (CD13, CD33,CD117 y MPO).
los lactantes, se le relaciona con t(1:22)(p13;q13).62 Algunas células expresan antígenos eritroides o
El pronóstico para este tipo de leucemia aguda es megacariocíticos. El principal diagnóstico diferen-
desfavorable. cial comprende leucemia megacarioblástica agu-
da, leucemias agudas con fibrosis, tumor metastá-
Leucemia mieloide aguda/trastorno sico con una reacción plasmocelular y mielofibro-
mieloproliferativo transitorio en el sis idiopática crónica. No presenta anomalías cro-
síndrome de Down mosómicas específicas, responde mal a la quimio-
Las personas con síndrome de Down (trisomía 21) terapia y tiene una supervivencia breve.
tienen una predisposición a la leucemia aguda,
principalmente mieloide, de tipo megacarioblásti- Sarcoma mieloide
co. En los casos en que la leucemia entra en re- El sarcoma mieloide, sarcoma granulocítico o clo-
misión espontánea, el proceso se conoce como roma, es una masa tumoral de mieloblastos o célu-
trastorno mieloproliferativo transitorio o leucemia las mieloides inmaduras, en un sitio extramedular;
transitoria. Las características clínicas compren- se ve en 2% a 8% de los pacientes con LMA. Afec-
den presentación en el período neonatal (10% de ta estructuras óseas subperiósticas, ganglios linfá-
los recién nacidos con síndrome de Down), leuco- ticos, piel, mediastino, intestino delgado y el espa-
citosis marcada, porcentaje de blastos en la san- cio epidural; se manifesta de novo o concomitante
gre mayor a 30% a 50% y compromiso extrame- con la LMA o un trastorno mieloproliferativo. La de-
dular. El fenotipo inmune es similar a los de otros terminación del fenotipo inmune con anticuerpos
casos de leucemia megacarioblástica aguda infan- a la MPO, las lisozimas y el cloroacetato es esen-
til. Además de la trisomía 21, algunos casos pre- cial en el diagnóstico. Los mieloblastos en los sar-
sentan otras anomalías clonales, en especial tri- comas granulocíticos expresan antígenos de aso-
somía 8. La remisión espontánea ocurre dentro de ciación mieloide (CD13, CD33, CD117 y MPO). Los
uno a tres meses en los casos transitorios. La re- monoblastos en los sarcomas monoblásticos ex-
cidiva seguida por una segunda remisión espontá- presan los antígenos de la leucemia monoblástica
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
nea o enfermedad persistente es posible. El resul- aguda (CD14, CD116 y CD11c) y por lo general, re-
tado del tratamiento en los pacientes pediátricos accionan con anticuerpos a la lisozima y al CD68.
con síndrome de Down y enfermedad persistente No hay descritas anomalías cromosómicas
podría ser mejor que el de los pacientes pediátri- únicas. La presencia del sarcoma mieloide en los
cos con leucemia aguda sin la trisomía 21. pacientes con LMA con t(8;21) se relaciona con
una tasa de remisión completa más baja y de me-
Leucemia basofílica aguda nor duración.
La leucemia basofílica aguda, es relativamente in- Los sarcomas mieloides en los SMD o sín-
usual, representado menos del 1% de los casos dromes mieloproliferativos (SMP) equivalen una
de LMA. Puede manifestarse con compromiso cu- transformación blástica. Si bien la presentación
táneo, organomegalia, lesiones líticas óseas oca- inicial del cloroma parece ser aislada, es una ma-
sionales y síntomas secundarios a la hiperhistami- nifestación parcial de una enfermedad sistémica y
nemia. Los blastos expresan los marcadores mie- debe tratarse con quimioterapia intensiva.
77
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA AGUDA
78
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA AGUDA
79
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA AGUDA
80
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA AGUDA
En los pacientes con riesgo muy alto de Citarabina 150 mg/m2/ 8 h i.v., días 1–5.
hemorragia > 70 años, hiperleucocitosis > ATRA, 45 mg/m2/d v.o. días 1–15.
10 x 10 9 /L, o creatinina anormal > 1.4 mg/
dL o > 140 μmol/L se transfundirán plaque- Tratamiento post-consolidación/
tas para mantener una cifra superior a 50 mantenimiento
x 10 9 /L. El tratamiento post-consolidación depen-
No se recomienda el uso de heparina ni derá de los resultados del análisis por PCR
antifibrinolíticos como profilaxis. del reordenamiento del gen PML/RAR, por
Control con mielograma a las 5 o 6 sema- ello es imprescindible que, tras la recupe-
nas de inicio de la inducción. Si está en RC ración del tercer ciclo de consolidación a
pasa a tratamiento de consolidación, si no todos los pacientes se les realice dicho
está en RC se plantea trasplante alogéni- análisis.
co relacionado o no (alo-TPH).
81
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA AGUDA
82
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA AGUDA
ANEXO 1
Resultados de TPH en LMA y sus indicaciones eventuales «Congreso de la American Society of Hemato-
logy, 2004.52 Se debe valorar el riesgo citogenético y la situación de cada LMA y adecuar la indicación de
TPH a las características del paciente.
Int– Reducida
TPH Autólogo Alogénico No Rrel
(Rel–No Rel)
Consolidación
1 RC
Riesgo citogenético
t(15–17) no no no no
SLE 60–80% SLE 65%
t(8;21)–inv 16 no no
MRT 4–8% MRT 18% = no
SLE 42–55% SLE 48–62%
Intermedio s/datos
MRT 4–6% MRT 16–20%
SLE 18–25% SLE 35–45% SLE 30–40%(5a) SLE 50%
Alto
MRT 4–8% MRT 18–20% MRT 30% (2a 1RC)
Salvataje
SLE 30% SLE 30% adulto
SLE40/50%
2RC SLE 60–80% SLE 40% SLE 40% niño
(2 años)
(t(15;17) MRT 40%
SLE 10–15% adulto SLE 10–30%
Recaída no SLE 20–30%
SLE 20% niño 2a
Resistencia no SLE 30–40% 3 a SLE 20–30% SLE 15–30% 1a
ANEXO 2. LMA M3
83
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA AGUDA
84
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA AGUDA
La incidencia de leucemias que expresan an- CD20. El fenotipo puede utilizarse en las LAL, pa-
tígenos asociados a más de una línea es 5%, de ra rastrear aquellos casos con alta probabilidad de
todas las LA. Es importante precisar la distinción ser portadores de una alteración genética concreta
entre LA Bilineal (donde coexisten dos poblacio- que defina una entidad nosológica diferente.
nes de blastos independientes: mieloides y linfoi-
des), de las LA Bifenotípicas (LAB; una sola po- Paneles de AcMo recomendados para estudio
blación de blastos que coexpresan antígenos aso- de LAL según el «Consenso Latinoamericano
ciados a líneas mieloide y linfoide). Para su correc- para inmunotipificación por citometría de flujo
to diagnóstico deben utilizarse triples y cuádruples en LAL», 2005
marcajes y tener en cuenta que son muy pocos los Se deben utilizar como mínimo, los siguientes mar-
antígenos realmente específicos de línea: CD79a, cajes:
cIgµ y CD19 para la línea B, CD3, TCRαβ y TCRγδ LAL T: CD2, CD7 y CD3 intrac. y para evaluar
y mieloperoxidasa (MPO) para la línea mieloide. estadio madurativo: TdTn, CD34, intensidad de
Existe así un sistema de puntuación propuesto por expresión del CD45.
EGIL para la correcta identificación de leucemias LAL B, CD19 y CD79a intrac, para asignar lina-
bifenotípica: je. Estadio madurativo con utilización de: HLA
DR, CD34 y TdT. Para subclasificarlas: CD10,
Puntos Línea B Línea T Línea Mieloide Ig superf. y cadena µ intrac.
CD3intra, Marcadores opcionales: CD20 y CD38.
2 CD79a cIgµ MPO
TCR αβ / γδ
CD19, CD2, CD5, CD13, CD33, Estudio de enfermedad mínima residual (EMR)
1
CD10, D20 CD8, D10 CD65 por citometría de flujo en LAL
Tdt, CD7, CD14, CD15, El monitoreo de EMR en LAL es útil para evaluar
0.5 Tdt, CD24
CD1a CD117, CD64 efectos del tratamiento así como para identificar
pacientes con distinto riesgo de recaída. Su me-
Cuando la puntuación es mayor de 2 para la todología se basa en la identificación de fenotipos
línea mieloide y para una de las líneas linfoides, aberrantes definidos por la expresión inapropiada
puede corresponder a LBF. de determinados antígenos (expresión de CD33++
en blastos B). Alteraciones de los patrones norma-
Correlación fenotipo–genotipo en LAL les de maduración hematopoyética al debut: asin-
Algunos subtipos de LAL se asociaban a alteracio- cronismos madurativos en la expresión antigénica
nes citogenéticas específicas reflejadas en la de- (coexpresión CD34 y CD20). Localización tisular
finición de nuevas entidades en la última clasifica- anómala (presencia en LCR de células B inmadu-
ción de la OMS.4 ras CD34+, CD10+.
• En la LAL pro–B son frecuentes traslocacio- Cuantificar la EMR en momentos evolutivos
nes que involucran el brazo largo del cr11q23 concretos de la enfermedad, como el post trata-
como la t (4;11). miento de inducción con remisión morfológica,
• En las LAL preB, la t(1;19). constituye un factor pronóstico independiente pa-
• En la LAL común, la hiperdiploidía y la t(9;22) ra predecir la sobrevida libre de enfermedad y la
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
85
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA AGUDA
dencia de complicación del SNC y sobrevida signi- que usan estrategias intensivas de agentes múlti-
ficativamente peor.7 Los pacientes con LAL cromo- ples sugieren que se puede lograr una sobrevida
soma Ph+, raramente se curan con quimioterapia. del 50% a 3 años en pacientes seleccionados.19, 20
Muchos pacientes que tienen el gen de fusión bcr– Otras drogas como ciclofosfamida (CFM) y ci-
abl, tienen una proteína de fusión p190 y no tienen tarabina se usan en ciertos protocolos. Hay varios
evidencia del cromosoma Ph por citogenética. estudios que avalan el uso de estas drogas (PE-
Otra anomalía cromosómicas de mal pronósti- THEMA, CALGB, MDACC, LALA) donde se obser-
co es la t(4;11), la cual se caracteriza por reorde- van remisiones completas de 80–85%, con sobre-
namientos del gen MLL.8 vida libre de leucemia (SLE) de 30–40%. 21–23 En un
La deleción del cromosoma 7 o trisomía 8 tie- estudio aleatorizado en Italia (GIMEMA) se com-
nen menos probabilidades de sobrevida a 5 años pararon dos grupos con 3 drogas con y sin CFM
que los pacientes con cariotipo normal. no mostrando diferencias en término de RC (81 vs.
La LAL L3 está asociada al desplazamiento 82%); sin embargo, en otros estudios no aleatori-
del protooncogen c–myc al locus del gen de inmu- zados se vieron altas RC (85–91%) en regímenes
noglobulinas t(2;8), t(8;14) y t(8;22). que incluían ciclofosfamida (CFM), sobre todo en
LAL–T. 24–26 La dexametasona tiene un alto poder
antileucémico, con altos niveles en el LCR: su uso
TRATAMIENTO extensivo puede determinar alto riesgo de sepsis y
ASPECTOS GENERALES de infecciones micóticas.
El tratamiento básico es la quimioterapia sistémica
con prevención del SNC. La duración promedio del PROFILAXIS DEL SNC
tratamiento varía entre 2,5 y 3 años. Los pacientes La profilaxis del SNC se realiza en base a dexame-
que sufren una recaída tienen corta expectativa de tasona (Dex), metotrexate (Mtx) y Ara–C. 27 La ten-
vida con la quimioterapia convencional, aun cuan- dencia actual de los tratamientos profilácticos es
do se logre una segunda remisión completa (RC). aumentar las drogas sistémicas y disminuir la irra-
Si hay donantes disponibles y el paciente es menor diación, por sus efectos secundarios. 28 Los esque-
de 55 años de edad, el trasplante alogénico de pro- mas de tratamiento más usados son los siguien-
genitores hematopoyéticos (alo–TPH) puede ser tes:
una opción.9–11 Las transfusiones con productos Quimioterapia intratecal, Dex, Mtx y/o Ara–C.
sanguíneos de un donante potencial deben evitar- Mtx y/o Ara–C en altas dosis sistémico.
se si fuera posible, si se considera el alo–TPH.12– En algunos casos, irradiación craneal.
14
La terapia empírica antimicrobiana de amplio es-
pectro es una necesidad en pacientes febriles neu- TRATAMIENTO POST–REMISIÓN
tropénicos.15 Instrucciones cuidadosas de higiene Comprende: quimioterapia relativamente inten-
personal, cuidado dental y reconocimiento de sig- sa a corto plazo (consolidación) seguida de te-
nos precoces de infección son esenciales. La ad- rapia a largo plazo en dosis más bajas (manteni-
ministración de antibióticos orales profilácticos es miento) o trasplante de progenitores hematopoyé-
apropiada en pacientes con granulocitopenia se- ticos (TPH).
vera prolongada, < 100 por mm3 en 2 semanas.16,17 La consolidación se realiza en base a al-
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
En estos pacientes los cultivos de vigilancia en se- tas dosis de Ara C (HDAC) o altas dosis de Mtx
rie pueden ser útiles para detectar la presencia o (HDM), para vencer la resistencia a las drogas y
la adquisición de organismos resistentes. El uso obtener niveles terapéuticos de las mismas en el
de factores de crecimiento durante la terapia de in- LCR. Con quimioterapia agresiva post–remisión en
ducción parece disminuir el tiempo para la recons- LAL de los adultos se logra una tasa de sobrevida
titución hematopoyética.18 libre de enfermedad (SLE) a largo plazo de aproxi-
madamente 40%. En las últimas series, se encon-
TRATAMIENTO DE INDUCCIÓN (Anexo1) traron especialmente buenos pronósticos para pa-
El tratamiento de inducción incluye la combinación cientes con LAL de células T, con SLE de 50% a
de vincristina, prednisona y antraciclínicos, con o 70%. Se demostraron tasas pobres de curación en
sin asparaginasa, la tasa de remisión completa es pacientes con LALA Ph+, LAL B L3 y LAL B con
de un 60% a 80% en los adultos. Un 35% a 40% de t(4;11). (Protocolos recomendados Anexo 1).
los pacientes, sobreviven 2 años, algunos estudios Regímenes agresivos con ciclofosfami-
86
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA AGUDA
da similares a los usados en linfomas no Hodgkin y/o nuevos agentes quimioterápicos o biológicos.37
agresivos han mostrado una mejoría en los resul- Se podrían considerar dosis bajas de radioterapia
tados para pacientes con LAL L3. 29 Hoelzer y co- paliativa en pacientes con recurrencia sintomática
laboradores encontraron una marcada mejoría en en el sistema nervioso central.
supervivencia, de cero sobrevivientes en un estu-
dio de 1981 que usó terapia pediátrica estándar, LAL PRO–B (early pre B, pre pre B).
a una tasa de supervivencia de 50% en dos prue- Inmunofenotipo: CD19+, CD22+, CD24+, CD79a+,
bas subsecuentes que usaron quimioterapia para CD10–. Un 30% expresan la t(4;11) ALL1/AF4. Tie-
LNH.9 Los pacientes con morfología L1 o L2 no se ne un comportamiento clínico agresivo, con hiper-
beneficiaron con este régimen leucocitosis, organomegalia, compromiso del SNC
Trasplante de progenitores hematopoyéti- y pobre pronóstico. Su prevalencia es alta en lac-
cos (TPH) con tratamiento condicionante en ba- tantes (60–70%), sobre todo menores de 12 me-
se a quimioterapia o quimiorradioterapia ablativa ses y menor en niños y adultos (5 y 10% respec-
de médula ósea, con rescate alogénico de célu- tivamente). Los pacientes con LAL pro–B son de
las madres (alo–TPH) o con rescate autólogo (au- muy alto riesgo, independiente de que tengan la
to–TPH).30 t(4;11) y por lo tanto son considerados para TPH
El alo–TPH tiene menor porcentaje de recaí- en 1ra RC.38
das que el TPH singénico o autólogo. Se debe al
efecto inmunológico del injerto contra leucemia LAL Ph+. La incidencia es de 20–25%, aumentan-
(GVL), similar a la enfermedad de injerto contra do hasta 40% en adultos mayores de 50 años.39 Se
huésped (GVHD). La SLE en pacientes sometidos encuentra en LAL B y excepcionalmente en LAL T.
a alo–TPH como terapia primaria post–remisión Los resultados del tratamiento con quimioterapia
está afectada, por el aumento de la morbimortali- son inferiores a la de los de pacientes de riesgo es-
dad ocasionada por la GVHD, enfermedad veno– tándar.40 La RC se observan en 50–80% de casos,
oclusiva del hígado y la neumonitis intersticial. No con una mediana de duración de 9 a 16 meses.
hubo ventaja con alo–TPH para los pacientes con Menos del 4% tienen remisiones moleculares lue-
LAL de riesgo estándar.31,32 Hubo beneficio signi- go de tratamientos intensivos. Se ha administrado
ficativo de sobrevida con alo–TPH para pacientes imatinib en LAL Ph+, 60% de los pacientes presen-
con LAL de alto riesgo (CD10–; LAL B con un re- taron disminución de blastos en sangre periférica,
cuento de leucocitos > 30,000; LAL Ph+). pero solamente 19% presentaron RC, con res-
El alo–TPH como terapia primaria post–remi- puestas cortas (sobrevida 4,9 meses) por la apa-
sión está limitado por la necesidad de un donan- rición de resistencia al Imatinib. Debe tenerse en
te HLA idéntico (DIR) y la edad del paciente33,34 la cuenta que el imatinib no cruza la barrera hema-
mortalidad es mayor en pacientes de 50 a 60 años to–encefálica y estos pacientes tienen gran predis-
(20%–40%). El alo–TPH con donante compatible posición al compromiso del SNC Se ha propuesto
no relacionado (DINR) por su alta morbimortali- usar imatinib precozmente y/o en combinación con
dad, es reservado para pacientes jóvenes, en se- quimioterapia. Se observó que no aparecía resis-
gunda remisión o posteriores. tencia cuando se empleaba como tratamiento de
primera línea, más que como terapia de salvata-
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
87
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA AGUDA
plante no se ha demostrado que traduzcan bajos LALA 87, fue el primero en demostrar las venta-
niveles de recaída post TPH.43 Se han visto meno- jas de un alo–TPH, en pacientes portadores de
res recaídas post TPH en los pacientes que reci- LAL de alto riesgo. Comparó la eficacia del alo–
bieron PQT + imatinib vs. PQT sola previo al tras- TPH vs. poliquimioterapia de mantenimiento o au-
plante. Existe poca experiencia con imatinib luego to–TPH en aquellos pacientes que no tenían un do-
de recaída post alo–TPH, la presencia de EMR+ nante HLA idéntico.
post TPH indica alta probabilidad de recaída. El grupo incluyó pacientes con LAL en RC me-
nores de 40 años. Cuando se consideraron pacien-
LAL EN EL ADULTO MAYOR tes de alto riesgo, con cromosoma Ph(+), recuen-
Su prevalencia es baja, oscilando entre 16–31%. to leucocitario mayor de 30.000/mm3, más de 4 se-
Generalmente es leucemia de novo y no secunda- manas de tratamiento para lograr la remisión, edad
ria. La frecuencia de LAL pre–B y común es al- mayor de 35 años, o LAL nula o indiferenciada, se
ta, en cambio LAL–T es muy baja. La presencia observó que con alo–TPH, la sobrevida total y libre
de LAL Ph+ es más alta, dado que se incrementa de enfermedad era mayor. En pacientes portado-
con la edad. Tiene peor pronóstico que en pacien- res de LAL con riesgo estándar no se observaron
tes jóvenes en cuanto a la respuesta al tratamien- ventajas con el alo–TPH.47 La sobrevida global de
to dado las alteraciones citogenéticas desfavora- pacientes que recibieron poliquimioterapia o tras-
bles, performance status disminuido y enfermeda- plante autólogo fue similar.
des comórbidas. Todo esto lleva a alta mortalidad
durante el tratamiento de inducción, con pobre res- Se recomienda: trasplante alogénico de
puesta y corta sobrevida.44 médula ósea en pacientes de alto riesgo.
se acompaña de una marcada morbimortalidad.46 nían un factor de mal pronóstico, se realizó alo–
La posibilidad de recaída es la limitante más impor- TPH con DIR o DINR o mismatched.48 Los facto-
tante para la realización de un auto–TPH. res de mal pronóstico eran: recuento leucocitario
superior a 25.000 mm3, cariotipo anormal, enfer-
TRASPLANTE ALOGÉNICO DE CÉLULAS medad extramedular o lapso mayor de 4 semanas
PROGENITORAS HEMATOPOYÉTICAS (ALO– para lograr la remisión. La sobrevida de pacientes
TPH) menores de 20 años trasplantados en primera re-
El alo–TPH, con progenitores hematopoyéticos misión, fue superior a la de los pacientes mayo-
periféricos (PHSP) o de médula ósea (PHMO), es res de 20 años (61% vs. 43%). La sobrevida ac-
el que tiene incidencia más baja de recaída leucé- tuarial a 10 años fue diferente según el trasplan-
mica pero asocia una mortalidad vinculada al tras- te hubiese sido realizado en 1ra, 2da remisión, o en
plante de entre 20–30%. etapa más avanzada: 53%, 38%, 20%, respecti-
El estudio multicéntrico, prospectivo, francés, vamente. La probabilidad de recaída fue diferente
88
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA AGUDA
según el paciente se hubiese trasplantado en 1era nó con el estadio de la enfermedad al momento del
RC, 2da RC, o con enfermedad avanzada: 24%, trasplante. El riesgo de recaída era 9 veces mayor
54%, 72%. La presencia de alteraciones citogené- en pacientes trasplantados en recaída que en pri-
ticas de mal pronóstico como ser cromosoma Ph+, mera remisión, la sobrevida y la frecuencia de re-
t(4;11) o t(1;19), en pacientes trasplantados en 1era caída fue similar, entre los pacientes Ph+ y los que
o 2da RC, no se acompañó de diferencia en la so- tenían citogenética normal .
brevida global o frecuencia de recaída, respecto a Se estudió en pacientes portadores de LAL,
pacientes que tenían un cariotipo normal. Esto su- con DIR y trasplantados en 1ra RC, si el intervalo
geriría que los pacientes con alteraciones ci- de tiempo entre la obtención de la RC y la realiza-
togenéticas de mal pronóstico deberían tras- ción del trasplante constituía un factor pronóstico.
plantarse lo antes posible, luego de lograr la Se observó que tres factores influían en la evolu-
remisión completa. Con el alo–TPH se pueden ción de esos pacientes: edad, lapso para lograr la
lograr sobrevidas prolongadas aún con cariotipo RC y la relación de sexo entre donante y receptor,
de mal pronóstico, si el trasplante se realiza pre- siendo la combinación con efecto más deletéreo
cozmente. El desarrollo de enfermedad injerto vs. donante femenino con receptor masculino. Tenien-
huésped crónica (GVHDc) disminuiría la frecuen- do en cuenta estos factores se identificaron tres
cia de recaídas.49,50 Pacientes que no desarrolla- grupos de riesgo. El grupo 1 de buen pronóstico,
ban GVHDc tenían una probabilidad de sobrevivir incluyó pacientes menores de 35 años, que logra-
a 10 años de 27% respecto a pacientes que de- ron la RC sólo con una serie de quimioterapia, y
sarrollaban una GVHDc limitada (56%), o extensa con una relación donante receptor diferente a do-
(46%). Con el desarrollo de GVHD aguda se ob- nante femenino, receptor masculino. El grupo 2 de
servó un efecto similar. Se debería a un efecto in- pronóstico intermedio tenía un factor adverso y el
munológico injerto vs. leucemia (GVL) aunque en grupo 3 de mal pronóstico, tenía 2 o 3 factores ad-
menor grado que el observado en la leucemia agu- versos. En estos grupos, la SLE a 3 años fue 56%,
da mieloblástica. Sin embargo, en estos pacientes 48% y 29%, respectivamente. La sobrevida global
no se obtuvo respuesta con la infusión de linfoci- fue: 65%, 53% y 29%, respectivamente. Por ello,
tos del donante (ILD) en pacientes en recaída. Una paciente con 0 o 1 factor adverso son candi-
hipótesis puede ser que la GVHD actúa previnien- datos a un trasplante precoz si tienen donan-
do la recaída leucémica, cuando la masa tumoral te HLA idéntico. 54
es baja. La ILD en la LAL no cumpliría el mismo rol El inmunofenotipo es otro factor pronóstico de
que en otras patologías como la LMC. importancia, asociándose el de estirpe T con un
Algunos estudios valoraron SLE en pacientes mejor pronóstico que el B. El trasplante con un DIR
con LAL en primera RC, según recibieran alo–TPH es lo ideal por la menor incidencia de GVHD o re-
o quimioterapia.51 Los mejores resultados con alo– chazo del injerto. El trasplante con DINR, ha de-
TPH se obtuvieron en pacientes en primera RC, mostrado resultados promisorios, en pacientes en
con donante compatible, menores de 55 años. 1ra RC, con factores de mal pronóstico y sin donan-
En estudios realizados en pacientes que te- te idéntico compatible.
nían por lo menos un factor de riesgo luego de tra- En adultos jóvenes portadores de LAL con al-
tamiento poliquimioterápico y que habían recibi- teraciones citogenéticas de mal pronóstico, sin
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
do un alo–TPH, se analizó los factores asociados DIR, en los que se realizó un alo–TPH de DNR
con una SLE prolongada.52–54 Los factores de al- en 1ra, o más RC, o refractarios al tratamiento, la
to riesgo de recaída fueron: la presencia de cro- SLE a 2 años en los pacientes trasplantados en
mosoma Philadelphia u otras alteraciones citoge- 1ra RC fue de 40%, similar a los resultados obteni-
néticas, presencia de enfermedad extramedular y dos con DIR.35 La incidencia de recaídas fue simi-
recuento leucocitario mayor de 30.000 mm3. Los lar o incluso menor que la observada con DIR, pro-
factores asociados a un buen pronóstico fueron: bablemente por el desarrollo del fenómeno GVL.
la edad, cuanto más joven mejor, y estar en prime- En pacientes trasplantados en recaída o en remi-
ra remisión al momento del trasplante. La sobrevi- sión más tardía la SLE fue significativamente me-
da actuarial a 5 años fue: 43% para los pacientes nor, probablemente vinculada a las complicacio-
en 1era RC, 24% para los pacientes en 2da o más tar- nes relacionadas con el trasplante. El lapso com-
día remisión y 9% para los pacientes trasplantados prendido entre el diagnóstico y el trasplante cons-
en recaída. El riesgo de recaída sólo se correlacio- tituyó un factor pronóstico importante en la mor-
89
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA AGUDA
recaídas.56 El agregado del tratamiento de mante- LAL en 2da RC, que recibieron auto–TPH mostra-
nimiento, se acompañaría de una baja frecuencia ron una SLE a 5 años de 25% y una frecuencia de
de recaídas (31%) y una mejoría en la SLE (53%) recaída de 63%. Estos resultados son inferiores a
a 5 años. Se proponen la administración de meto- los obtenidos en pacientes en 1ra RC, pero supe-
trexate y 6–mercaptopurina por vía oral durante 2 riores a los obtenidos con quimioterapia sola co-
años luego del trasplante o un tratamiento en ba- mo tratamiento de la recaída.56,57 Estos resulta-
se a 6–mercaptopurina 80 mg/m2/día, metotrexa- dos parecen demostrar que el auto–TPH pue-
te 20 mg/m2/semanal y vincristina 1,4 mg/m2 men- de ser una opción válida en pacientes que no
sual asociado a prednisona 40 mg/m2 por una se- tienen donante.
mana, durante 2 años.56,57 En uno de estos estu-
dios se incluyeron 65 pacientes con LAL, algunos Recomendación: Auto–TPH en pacien-
de los cuales asociaban factores adversos: edad tes que no tienen DIR o DINR (según,
mayor de 30 años, cariotipo adverso, lapso para edad, terreno) luego de lograr la RC.
90
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA AGUDA
91
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA AGUDA
ANEXO 1
PLANES DE TRATAMIENTO RECOMENDADOS EN LAL
BFM SEGÚN RIESGO
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
92
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA AGUDA
93
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA AGUDA
94
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA AGUDA
95
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA AGUDA
on Outcome in AML: Analysis of 1612 Patients entered into the tion of transplantation as initial therapy or following induction
MRC AML–10 trial. Blood, 1998; 92, 2322–33. chemotherapy. Blood 1997; 89 (7): 2578–85.
11. Slovak M, et al. Karyotipic analysis predicts outcome of prere- 28. Huang ME, Ye YC, Chen SR, et al. Use of all–trans retinoic
mission and posremission therapy in adult acute myeloid leu- acid in the treatment of acute promyelocytic leukemia. Blood
kemia: a Southwest Oncology Group/Eastern Cooperative 1988; 72 (2): 567–72.
Oncology Group study. Blood, 2000; 96: 4075–83. 29. Castaigne S, Chomienne C, Daniel MT, et al. All–trans retinoic
12. Byrd JC et al. Pretreatment cytogenetica abnormalities and acid as a differentiation therapy for acute promyelocytic leuke-
predictive of induction success cumulative incidence of relap- mia. I. Clinical results. Blood 1990; 76 (9): 1704–9.
se, and overall survival in adult patients with de novo acute 30. Warrell RP Jr, Frankel SR, Miller WH Jr, et al. Differentiation
myeloid leukemia: results from Cancer and Leukemia Group therapy of acute promyelocytic leukemia with tretinoin (all–
B(CALGB 8461). Blood, 2002; 100: 325–36. trans–retinoic acid). N Engl J Med 1991; 324 (20): 1385–93.
13. Leucemia mieloide aguda en adultos (PDQ ®): Tratamiento: 31. Chen ZX, Xue YQ, Zhang R, et al. A clinical and experimen-
National Cáncer Institute, 2005. tal study on all–trans retinoic acid–treated acute promyelocy-
14. Wiernik PH, Banks PL, Case DC Jr, et al. Cytarabine plus ida- tic leukemia patients. Blood 1991: 78 (6): 1413–9.
rubicin or daunorubicin as induction and consolidation thera- 32. Muindi J, Frankel SR, Miller WH Jr, et al. Continuous treatment
py for previously untreated adult patients with acute myeloid with all–trans retinoic acid causes a progressive reduction in
leukemia. Blood 1992; 79 (2): 313–9. plasma drug concentrations: implications for relapse and reti-
96
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA AGUDA
noid «resistance» in patients with acute promyelocytic leuke- 51. Bow EJ, Mandell LA, Louie TJ, et al. Quinolone–based anti-
mia. Blood 1992; 79 (2): 299–303. bacterial chemoprophylaxis in neutropenic patients: effect of
33. Gallagher RE, Li YP, Rao S, et al. Characterization of acute augmented gram–positive activity on infectious morbidity. Na-
promyelocytic leukemia cases with PML–RAR alpha break/ tionalCancer Institute of Canada Clinical Trials Group. Ann In-
fusion sites in PML exon 6: identification of a subgroup with tern Med 1996; 125 (3): 183–90.
decreased in vitro responsiveness to all–trans retinoic acid. 52. Stone R, O’Donnell MR, Sekeres MA. Acute Myeloid Leu-
Blood 1995; 86 (4): 1540–7. kemia. American Society of Hematology, Educational Book
34. Fenaux P, Le Deley MC, Castaigne S, et al. Effect of all trans- 2004; 98–117.
retinoic acid in newly diagnosed acute promyelocytic leuke-
mia. Results of a multicenter randomized trial. European APL Bibliografía LAL
91 Group. Blood 1993; 82 (11): 3241–9. 1. Brearley RL, Johnson SA, Lister TA. Acute lymphoblastic leu-
35. Tallman MS, Andersen J, Schiffer CA, et al. Phase III rando- kaemia in adults: clinicopathological correlations with the
mized study of all–trans retinoic acid (ATRA) vs daunorubi- French–American–British (FAB) co–operative group classifi-
cin (D) and cytosine arabinoside (A) as induction therapy and cation. European Journal of Cancer 1979; 15(6): 909–914.
ATRA vs observation as maintenance therapy for patients with 2. Sobol RE, Royston I, LeBien TW, et al. Adult acute lympho-
previously untreated acute promyelocytic leukemia (APL). blastic leukemia phenotypes defined by monoclonal antibo-
[Abstract] Blood 1995; 86(488): 125a. dies. Blood 1985;65(3): 730–735.
36. Fenaux P, Chastang C, Chevret S, et al. A randomized compa- 3. Foon KA, Billing RJ, Terasaki PI, et al. Immunologic classifica-
rison of all transretinoic acid (ATRA) followed by chemothe- tion of acute lymphoblastic leukemia implications for normal
rapy and ATRA plus chemotherapy and the role of maintenan- lymphoid differentiation. Blood 1980;56(6): 1120–1126.
ce therapy in newly diagnosed acute promyelocytic leukemia. 4. Chromosomal abnormalities and their clinical significance
The European APL Group. Blood 1999; 94 (4): 1192–200. in acute lymphoblastic leukemia. Third International Works-
37. Sanz MA, Lo Coco F, Martín G, et al. Definition of relapse hop on Chromosomes in Leukemia. Cancer Research 1983;
risk and role of nonanthracycline drugs for consolidation in pa- 43(2): 868–873.
tients with acute promyelocytic leukemia: a joint study of the 5. Gaynor J, Chapman D, Little C, et al. A cause–specific hazard
PETHEMA and GIMEMA cooperative groups. Blood 2000;96 rate analysis of prognostic factors among 199 adults with acu-
(4): 1247–53. te lymphoblastic leukemia: the Memorial Hospital experien-
38. Lo Coco F, Diverio D, Pandolfi PP, et al. Molecular evaluation ce since 1969. Journal of Clinical Oncology 1988;6(6):1014–
of residual disease as a predictor of relapse in acute promye- 1030.
locytic leukaemia. Lancet 1992; 340 (8833): 1437–8. 6. Hoelzer D, Thiel E, Loffler H, et al. Prognostic factors in a mul-
39. Head D, Kopecky KJ, Weick J, et al.: Effect of aggressive dau- ticenter study for treatment of acute lymphoblastic leukemia
nomycin therapy on survival in acute promyelocytic leukemia. in adults. Blood 1988;71(1): 123–131.
Blood 1995;86 (5): 1717–28. 7. Kantarjian HM, Smith T, Estey E, et al. Prognostic signifi-
40. Stone RM, Mayer RJ: The unique aspects of acute promyelo- cance of elevated serum beta2–microglobulin levels in adult
cytic leukemia. J Clin Oncol 1990; 8 (11): 1913–21. acute lymphocytic leukemia. American Journal of Medicine
41. Frankel SR, Eardley A, Lauwers G, et al. The “retinoic acid 1992;93(6): 599–604.
syndrome” in acute promyelocytic leukemia. Ann Intern Med 8. Wetzler M, Dodge RK, Mrozek K, et al. Prospective karyoty-
1992; 117 (4): 292–296. pe analysis in adult acute lymphoblastic leukemia: the Can-
42. Slichter SJ: Controversies in platelet transfusion therapy. An- cer and Leukemia Group B experience. Blood 1999;93(11):
nu Rev Med 1980;31: 509–540. 3983–3993.
43. Murphy MF, Metcalfe P, Thomas H, et al. Use of leucocyte– 9. Hoelzer D, Ludwig WD, Thiel E, et al. Improved outcome in
poorblood components and HLA–matched–platelet donors adult B–cell acute lymphoblastic leukemia. Blood 87(2): 495–
to prevent HLA alloimmunization. Br J Haematol 1986; 62(3): 508, 1996.
529–534. 10. Zhang MJ, Hoelzer D, Horowitz MM, et al. Long–term follow–
44. Hughes WT, Armstrong D, Bodey GP, et al. From the Infectio- up of adults with acute lymphoblastic leukemia in first remis-
us Diseases Society of America. Guidelines for the use of an- sion treated with chemotherapy or bone marrow transplanta-
timicrobial agents in neutropenic patients with unexplained fe- tion. Annals of Internal Medicine 1995;123(6): 428–431.
ver. J Infect Dis 1990; 161 (3): 381–396. 11. Larson RA, Dodge RK, Burns CP, et al. A five–drug remission
45. Rubin M, Hathorn JW, Pizzo PA: Controversies in the mana- induction regimen with intensive consolidation for adults with
gement of febrile neutropenic cancer patients. Cancer Invest acute lymphoblastic leukemia: Cancer and Leukemia Group B
1988; 6 (2): 167–184. study 8811. Blood 1995;85(8): 2025–2037.
46. Armstrong D: Symposium on infectious complications of neo- 12. Murphy MF, Metcalfe P, Thomas H, et al. Use of leucocyte–
plastic disease (Part II). Protected environments are dis- poor blood components and HLA–matched–platelet donors to
comforting and expensive and do not offer meaningful protec- prevent HLA alloimmunization. British Journal of Haematolo-
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
97
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA AGUDA
17. Armstrong D. Protected environments are discomforting and mia in first complete remission. Journal of Clinical Oncology
expensive and do not offer meaningful protection. American 1988;6(2): 227–231.
Journal of Medicine 1984; 76(4): 685–689. 34. Fiere D, Lepage E, Sebban C, et al.: Adult acute lymphoblas-
18. Thomas X, Boiron JM, Huguet F, Reman O, Sutton L, Turlure tic leukemia: a multicentric randomized trial testing bone ma-
P, Garban F, Gardin C,Espinouse D, Boulat O, Lheritier V, Fie- rrow transplantation as postremission therapy. Journal of Cli-
re D. Efficacy of granulocyte and granulocyte–macrophage nical Oncology 1993;11(10): 1990–2001.
colony–stimulating factors in the induction treatment of adult 35. J Cornelissen, M Carston, C Kollman, R King, A Dekker, B
acute lymphoblastic leukemia: a multicenter randomized stu- Löwenger, and C Anasetti. Unrelated marrow transplantation
dy. Groupe d’Etude et de Traitement de la Leucemie Aigue for adult patients with poor– risk acute lymphoblastic leuke-
Lymphoblastique de l’Adulte (GET–LALA Group). Hematol J.; mia: strong graft–versus–leukemia effect and risk factors de-
2004; 5(5): 384–94. termining outcome. Blood 2001; 15. Vol 97, nº 6.
19. Linker CA, Levitt LJ, O’Donnell M, et al. Treatment of adult 36. Biggs JC, Horowitz MM, Gale RP, et al. Bone marrow trans-
acute lymphoblastic leukemia with intensive cyclical chemo- plants may cure patients with acute leukemia never achie-
therapy: a follow–up report. Blood 1991; 78(11): 2814–2822. ving remission with chemotherapy. Blood 1992; 80(4): 1090–
20. Dieter Hoelzer and Nicola Gökbuget. New treatment options 1093,.
in adult ALL. The Hematology Journal. 8th Congress of the Eu- 37. Phase I study of BMS–214662, a farnesyl transferase inhibitor
ropean Hematology Association. June, 2003. in patients with acute leukemias and high–risk myelodysplas-
21. Jacobs AD, Gale RP. Recent advances in the biology and tic syndromes. J Clin Oncol. 2005; 20 23(12): 2805–12.
treatment of acute lymphoblastic leukemia in adults. New En- 38. N–C Gorin, M Labopin, E Polge, C Cordonnier, JP Jouet, M
gland Journal of Medicine 1984; 311(19): 1219–1231. Michallet, D Blaise, J Reiffers, B Rio, N Milpied, and F Fras-
22. Wiernik PH, Cassileth PA, Leong T, Hoagland HC, Bennett sonion behalf of the Acute Leukaemia Working Party of the
JM, Paietta E, Oken MM A randomized trial of induction the- European Cooperative Group for Blood and Marrow Trans-
rapy (daunorubicin, vincristine, prednisone versus daunorubi- plantation. Risk assessment in adult acute lymphoblastic leu-
cin, vincristine, prednisone, cytarabine and 6–thioguanine) in kaemia before early haematopoietic stem cell transplantation
adult acute lymphoblastic leukemia with long–term follow–up: with a geno–identical donor: an easy clinical prognostic score
an Eastern Cooperative Oncology Group Study (E3486). Eas- to identify patients who benefit most from allogeneic haema-
tern Cooperative Oncology Group Study. OLM Cancer Cen- topoietic stem cell transplantation. Leukemia 2003;17, 1596–
ter New York Medical College. Leuk Lymphoma. 2003; 44(9): 1599.
1515–21 39. Secker–Walker LM, Cooke HM, Browett PJ, et al. Variable Phi-
23. Radford JE, Burns CP, Jones MP, et al. Adult acute lympho- ladelphia breakpoints and potential lineage restriction of bcr
blastic leukemia: results of the Iowa HOP–L protocol. Journal rearrangement in acute lymphoblastic leukemia. Blood 1988;
of Clinical Oncology 1989; 7(1): 58–66. 72(2): 784–791.
24. Dekker AW, van’t Veer MB, Sizoo W, et al. Intensive postre- 40. Dombret H, Gubert J, Boiron JM, Rigal Huguet F, Blaise D,
mission chemotherapy without maintenance therapy in adults Thomas X, Delannoy A, Buzyn A, Bilhou Nabera C, Cayuela
with acute lymphoblastic leukemia. Journal of Clinical Oncolo- JM, Fenaux P, Bourhis JH, Fegueux N, Charrin C, Boucheix
gy 1997;15(2): 476–482. C, Lheritier V, Esperou H, Mac Intyre E, Vernant JP, Fiere D.
25. Finiewicz KJ, Larson RA. Dose–intensive therapy for adult Outcome of treatment in adults with Philadelphia chromoso-
acute lymphoblastic leukemia. Seminars in Oncology 26(1): me– positive acute lymphoblastic leucemia. Results of the
6–20, 1999. prospective multicenter LALA–94 trial. Blood. 2002; 100(7):
26. Lee EJ, Petroni GR, Schiffer CA, et al. Brief–duration high–in- 2537–66.
tensity chemotherapy for patients with small noncleaved–ce- 41. Morgensztern D, Rosado MF, Raez LE, Santos ES, Cassileth
ll lymphoma or FAB L3 acute lymphocytic leukemia: results of PA Combination of imatinib and cytarabine for the treatment
Cancer and Leukemia Group B study 9251. Journal of Clinical of Philadelphia chromosome positive acute lymphoblastic leu-
Oncology 2001; 19(20): 4014–4022. kemia. Leuk Lymphoma 2005; 46(2): 297–298.
27. Kantarjian HM, Walters RS, Smith TL, et al. Identification of 42. Towatari M, Yanada M, Usui N, Takeuchi J, Sugiura I,
risk groups for development of central nervous system leu- Takeuchi M, Yagasaki F,Kawai Y, Miyawaki S, Ohtake S, Jin-
kemia in adults with acute lymphocytic leukemia. Blood 1988; nai I, Matsuo K, Naoe T, Ohno R Combination of intensive
72(5): 1784–1789. chemotherapy and imatinib can rapidly induce high–quality
28. Gray JR, Wallner KE. Reversal of cranial nerve dysfunction complete remission for a majority of patients with newly diag-
with radiation therapy in adults with lymphoma and leukemia. nosed BCR–ABL–positive acute lymphoblastic leukemia. Ja-
International Journal of Radiation Oncology, Biology, Physics pan Adult Leukemia Study Group. Nagoya University Gradua-
1990;19(2): 439–444. te School of Medicine, 65 Tsurumai–cho, Showa–ku, Nagoya,
29. Kantarjian H, Thomas D, O’Brien S, Cortes J, Giles F, Jeha Aichi 466–8550, Japan.
S, Bueso–Ramos CE,Pierce S, Shan J, Koller C, Beran M, 43. Pane F, Cimino G, Izzo B, Camera A, Vitale A, Quintarelli C,
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
Keating M, Freireich EJ. Department of Leukemia, The Uni- Picardi M, SpecchiaG, Mancini M, Cuneo A, Mecucci C, Marti-
versity of Texas M.D.ACC Long–term follow–up results of hy- nelli G, Saglio G, Rotoli B, Mandelli F, Salvatore F, Foa R. Sig-
perfractionated cyclophosphamide, vincristine, doxorubicin, nificant reduction of the hybrid BCR/ABL transcripts after in-
and dexamethasone (Hyper–CVAD), a dose–intensive re- duction and consolidation therapy is a powerful predictor of
gimen, in adult acute lymphocytic leukemia. USA. Cancer. treatment response in adult Philadelphia–positive acute lym-
2004;15;101(12):2788–801. phoblastic leukemia. GIMEMA group. Leukemia. 2005; 19(4):
30. Bortin MM, Horowitz MM, Gale RP, et al. Changing trends in 628–35.
allogeneic bone marrow transplantation for leukemia in the 44. Robak T, Szmigielska–Kaplon A, Wrzesien–Kus A, Wierz-
1980s. JAMA: Journal of the American Medical Association bowska A, Skotnicki AB, Piatkowska–Jakubas B, Kuliczkows-
1992;268(5): 607–612. ki K, Mazur G, Zdunczyk A, Stella–Holowiecka B,Holowiecki
31. Barrett AJ, Horowitz MM, Gale RP, et al. Marrow transplanta- J, Dwilewicz–Trojaczek J, Madry K, Dmoszynska A, Cioch M.
tion for acute lymphoblastic leukemia: factors affecting relap- Acute lymphoblastic leukemia in elderly: the Polish Adult Leu-
se and survival. Blood 1989;74(2): 862–871. kemia Group (PALG)experience Department of Hematology,
32. Dinsmore R, Kirkpatrick D, Flomenberg N, et al. Allogeneic Medical University of Lodz, Copernicus Memorial Hospital,
bone marrow transplantation for patients with acute lympho- Pabianicka Lodz, Poland. Ann Hematol. 2004;83(4):225–31.
blastic leukemia. Blood 1983; 62(2): 381–388. 45. Horowitz MM, Messerer D, Hoelzer D, Gale RP, Neiss A, At-
33. Vernant JP, Marit G, Maraninchi D, et al. Allogeneic bone ma- kinson K, Barrett AJ, Buchner T, Freund M, Heil G, et al. Che-
rrow transplantation in adults with acute lymphoblastic leuke- motherapy compared with bone marrow transplantation for
98
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA AGUDA
adults with acute lymphoblastic leukemia in first remission. 52. Herzig RH, Barrett AJ, Gluckman E, et al. Bone–marrow
Ann Intern Med. 1991;115(1):13–8. transplantation in high–risk acute lymphoblastic leukaemia in
46. Appelbaum F. Hematopoietic Cell Transplantation For Acute first and second remission. Lancet 1987;1(8536): 786–789,.
Lymphoblastic Leukemia. American Society of Hematology. 53. Thomas ED, Sanders JE, Flournoy N, et al. Marrow transplan-
Education Program Book, December, 2002. tation for patients with acute lymphoblastic leukemia: a long–
47. Sebban C, Lepage E, Vernant JP, Gluckman E, Attal M, Rei- term follow–up. Blood 1983;62(5): 1139–1141.
ffers J, Sutton L, Racadot E, Michallet M, Maraninchi D et al. 54. Doney K, Hagglund H, Leisenring W, Chauncey T, Appelbaum
Allogeneic bone marrow transplantation in adult acute lym- FR, Storb R. Predictive factors for outcome of allogeneic he-
phoblastic leukemia in first complete remission: a compara- matopoietic cell transplantation for adult acute lymphoblastic
tive study. French Group of Therapy of Adult Acute Lympho- leukemia. Biol Blood Marrow Transplant. Jul; 9(7): 472–81.
blastic Leukemia. J Clin Oncol. 1994;12(12): 2580–7. 2003
48. Gupta V, Yi QL, Brandwein J, Minden MD, Schuh AC, Wells 55. Sallan SE, Niemeyer CM, Billett AL, et al. Autologous bone
RA, Chun K, Kamel –Reid S, Tsang R, Daly A, Kiss T, Lipton marrow transplantation for acute lymphoblastic leukemia. Jo-
JH, Messner HA. The role of allogeneic bone marrow trans- urnal of Clinical Oncology 1989;7(11): 1594–1601,.
plantation in adult patients below the age of 55 years with acu- 56. R Powles, B Sirohi, J Treleaven, S Kulkarniand, D Tait, S Sing-
te lymphoblastic leukemia in first complete remission: a do- hal and J Mehta. The role of posttransplantation maintenance
nor vs no donor comparison. Bone Marrow Transplant. 2004; chemotherapy in improving the outcome of autotransplanta-
33(4): 397–404. tion in adulte acute lymphoblastic leukemia. Blood, 2002; 100,
49. Panagiotis Zikos, María Teresa Van Lint, Tommaso Lampare- N 5.
lli, Francesca Gualndi, Domenico Occhini, Stefania Bregante, 57. J Mehta, R Powles, B Sirohi, J Treleaven, S Kulkarniand, S
Gianni Berisso, Nicola Mordini, Massimo Incagliato, Giusy Fu- Singhal. High– dose Melphalan and autotransplantation follo-
gazza, Mari Sessarego, Andrea Bacigalupo. Allogeneic he- wed by post transplant maintenance chemotherapy for acute
mopoietic stem cell transplantation for patients with high risk lymphoblastic leukemia in first remission. Bone Marrow Trans-
acute lymphoblastic leukemia: favorable impact of chronic plantation 2004;33, 1107–1114.
graft–versus–host disease on survival and relapse. Haema- 58. Granena A, Castellsaghe X, Badell I, Ferra C, Ortega J, Bru-
tologica 1998; 83: 896– 903. net S, Punti C, Sureda A, Picon M, Valls A, Rutllant M, García
50. Corvo R, Paoli G, Barra S, et al. Total body irradiation co- J. Autologous bone marrow transplantation for high risk acu-
rrelates with chronic graft versus host disease and affects te lymphoblastic leukemia: clinical relevance of ex vivo bone
prognosis of patients with acute lymphoblastic leukemia re- marrow purging with monoclonal antibodies and complement.
ceiving an HLA identical allogeneic bone marrow transplant. Bone Marrow Transplantation. 1999; 24(6): 621–7.
International Journal of Radiation Oncology, Biology, Physics 59. Granena–Batista A, Ferra Coll C. Autologous ítem cell trans-
1999.;43(3): 497–503, plantation and purging in adult lymphoblastic leukaemia. Best
51. Oh H, Gale RP, Zhang MJ, Passweg JR, Ino T, Murakami H, Pract Res Clin Haematol. 2002; 15(4): 675–93.
Ohno R, Rowlings PA, Sobocinski KA, Tanimoto M, Tomona- 60. R Martino, S Giralt, MD Caballero, S Mackinnon, P Corradi-
ga M, Weisdorf DJ, Horowitz MM. Chemotherapy vs HLA– ni, F Fernández–Avilés, J San Miguel, J Sierra. Allogeneic
identical sibling bone marrow trnasplants for adult with acute hemtopoietic ítem cell transplantation with reduced–intensi-
lymphoblastic leucemia in first remission. Bone Marrow Trans- ty conditioning in acute lymphoblastic leukemia: a feasibility
plant. 1998; 22(3): 253–7.. study. Haematologica/Journal of Hematology 2003; 88(05).
Para los niveles de evidencia se siguieron los criterios del Instituto Nacional del Cáncer, US National
Institute of Health (NCI) y del National Comprehensive Cancer Network (NCCN).
99
CONSENSO NACIONAL DE LEUCEMIA AGUDA
Participantes
Dra. Acosta Giselle, Prof. de Anatomía Patológica. Dra. Ximena, Clínica Hematológica. Dra. Kescherman Francis,
Araujo Edith, Clínica Hematológica. Dra. Arbes Patricia, Asistente Clínica Médica A. Dra. Kollar Patricia, Ex
Residente Anatomía Patológica. Dr. Baubeta Alberto, Asistente de Clínica Hematológica, Servicio Hematología
Hematólogo FEMI. Dra. Qim. Farm. Benaderet Irene Hospital Maciel. Dra. Lens Daniela, Hematóloga, Prof. Adj.
Asoc. Española. Dra. Bengochea Milka, Prof. Agda. Dpto. Básico de Medicina. Dra. Lipschutz Judith, Clínica
Banco de Órganos. Dra. Beñarán Beatriz, Hematóloga Ex Hematológica. Dra. Lizarralde Adelina, Hematóloga CAMS
Prof, Adj. Medicina y Asistente de Hematología, CRAMI. Soriano, AMEDRIN, Fray Bentos, FEMI. Dra. Magariños
Dr. Bodega Enrique, Ex Prof. Adj. Clínica Hematológica Alicia, Ex Asistente de Clínica Hematológica, Servicio
Director Serv. Hematología Hospital Maciel. Dra. Bonomi Hematología Hospital Maciel. Dr. Marchetti Nicolás,
Rossana. Hematóloga. Citogenetista Asoc. Española. Dra. Hematólogo Maldonado. Dra. Martínez Claudia, Clínica
Bruzzone Margarita, Clínica Médica C. Dr. Camacho Luis, Hematológica, Casa de Galicia. Dra. Moirano Claudia,
Clínica Médica C. Dra. Caneiro Ada, Hematóloga. Hospital Hematóloga Hospital Rivera. Dra. Monteserin Noela, Clínica
Británico. Dra. Canesa Cecilia, Asist. Laboratorio Patología Hematológica. Dra. Moro Isabel, Clínica Hematológica. Dra.
Clínica. Dra. Carnelli Alicia, Oncóloga COMEPA, Hospital Motta Gabriela, Laboratorio de Pat. Clinica Hosp.Pereira
Escuela del Litoral Paysandú FEMI. Dra. Cardeza Adriana, Rossell, MUCAM. Dra. Murieda Berta, Hematóloga INDO.
Ex Asistente de Clínica Hematológica Hematóloga Asoc. Dr. Muxi Pablo, Prof. Agdo. Clínica Hematológica, Hospital
Española. Dra. Cardozo Alicia, Hospital de Artigas. Dr. Británico, Presidente de la Sociedad de Hematología del
Cardozo Jorge. Dra. Castro Marcela, Lab. de Patología Uruguay. Dra. Nese Martha, Prof. Clínica Hematológica,
Clínica. Dra. Carrizo Cecilia, Ex Asistente de Clínica Directora de la Cátedra de Hematología. Dr. Noble
Hematológica, Prof. Adj. Clínica Médica Hosp. Maciel. Marcelo, Hospital de Florida, FEMI. Dra. Novoa María
Dra. Costa Virginia, Ex Asistente de Clínica Hematológica de los Ángeles, Hematóloga Hospital Militar, Asociación
Prof. Adj. Clínica Médica 2 Hospital Pasteur, Hospital Española. Dra. Palermo Cristina, Hematóloga COMEPA–
Militar. Dr. Cuña Algenor, FEMI. Dra. Chevalier Silvana, FEMI. Dra. Parodi Mónica, Clínica Hematológica, SMI,
Clínica Hematológica. Dra. Damiano Sandra, Hematóloga CUDAM. Dra. Perdomo Susana, Hemoterapeuta. Dir. Serv.
INDO. Dr. Dau Carlos, Hematólogo del INDO. Dr. De Hemoterapia IMPASA. Dra. Quim. Far. Piana Ana María,
Bellis Roberto, Prof. Clínica Hematológica, Director Serv. Lab. Patología Clínica Hospital Militar. Dr. Pieri Daniel, Ex
Hematología Hospital Británico. Dra. De Galvez Gabriela, Prof. Adj. Clínica Hematológica. Dra. Pierri Silvia, Prof. Adj.
Asistente, Clínica Hematológica. Dr. Desiervo Andrés, Clínica Hematológica, Hospital Británico. Dra. Piriz Beatriz,
Clínica Hematológica. Dra. Díaz Andrea, Ex Asistente de Hematóloga Hospital Lavalleja–FEMI. Dra. Robinsón
Clínica Hematológica. Dra. Díaz Lilian, Prof. Agdo. Clínica Ma Isabel, Residente Anatomía Patológica. Dr. Pomoli
Hematológica. Dra. Di Matteo Carina, Prof. Adj. Anatomía Santiago, Hematólogo Hospital Militar, Serv. Hematología
Patológica. Dra. Estévez Ana Laura, Hematóloga Hospital Maciel. Dra. Prado Ana Inés, Hospital Maciel. Dra.
Hospital de San José, AMSJ, FEMI. Dr. Ferrando Martin, Quiñones Silvia. Dra. Rettig Karen, Clínica Hematológica.
Hematólogo Serv. Hematología Hosp. Maciel. Dra. Flores Dra. Riera Myriam, Clínica Médica C. Dra Riva Eloisa Clínica
Karina, Residente Lab. de Patología Clínica. Dr. Gabus Hematológica. Dra. Rivoir Elaine. Laboratorio Patología
Raúl, Hematólogo, Servicio Hematología Hospital Maciel, Clínica. Dra. Rocca Alejandra, Clínica Hematológica.
Hosp. Evangélico. Dra. Ana Galán, Ex Asistente de Dra. Rodríguez Rossana, Laboratorio Patología Clínica.
Clínica Hematológica Servicio Hematología HHFA. Dr. Dra. Rojo Ana Luz, Hematóloga Hospital Policial. Dra.
Galeano Sebastián, Hematólogo, Servicio Hematología Santamarina Cinthya, Clínica Hematológica. Dr. Sclavi
Hospital Maciel. Dra. García Ana María, Ex Prof. Adj. Jorge, Hospital de Rivera. Dr. Sempol Fernando,
Clínica Hematológica, Prof. Agdo. Laboratorio de Patología Laboratorio Patología Clínica. Dra. Sevrini Inés, Ex
Clínica Hospital Pereira Rossell, CASMU. Dra. González Asistente de Clínica Hematológica, Prof. Adj. Clínica Medica
Marianela, Hematóloga Hospital de Salto. Dra. Gossio A. Dra. Sierra Cecilia, Laboratorio Patología Clínica. Dra.
Elvira, Hematóloga Casa de Galicia, CUDAM, CAMEDUR, Stevenazzi Mariana, Asistente Clínica Hematológica. Dra.
Durazno FEMI. Dr. Giordano Hugo, Esp. en Laboratorio Sundberg Florencia, CH Pereira Rossell, CRAMI. Dra.
Clínico Asoc. Española. Dr. Goncalves Luis, Oncólogo Tejeira Natalia, Clínica Hematológica. Dra. Testa Graciela,
Artigas FEMI. Dra. Gualco Gabriela, Esp. Anatomía Hematóloga Hospital Salto–FEMI. Dra. Tiscornia Adriana,
Patológica. Dra. Guillermo Cecilia, Ex Prof. Adj. Clínica Bco. Órg. Dra. Topolansky Laura, Asistente Clínica
Hematológica, Hematóloga CITMO. Dra. Iglesias Teresa, Hematológica, CITMO. Dra. Touriño Cristina, Hematóloga
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
Lab. Central Hospital de Clínicas. Dr. Isaurralde Hugo, Prof. Adj. Dpto. Básico de Medicina. Dra. Uriarte Rosario,
Ex Asistente de Clínica Hematológica, Prof. Adj. Dpto. Licenciada en Ciencias Soc. Española. Dr. Vázquez
Emergencia Hospital de Clínicas, CITMO. Dra. Jordan Alberto, Serv. Hematología Hospital Maciel.
100
CONSENSO NACIONAL PAUTAS DE REPOSICIÓN DE SANGRE DESPLASMATIZADA Y CONCENTRADOS DE PLAQUETAS
Consenso Nacional de
Pautas de reposición de sangre
desplasmatizada y concentrados de
plaquetas
Cátedra de Hematología, Departamento Clínico de Medicina.
Cátedra y Departamento de Medicina Transfusional
COORDINADORA GENERAL Prof. Dra. Martha Nese
101
CONSENSO NACIONAL PAUTAS DE REPOSICIÓN DE SANGRE DESPLASMATIZADA Y CONCENTRADOS DE PLAQUETAS
102
CONSENSO NACIONAL PAUTAS DE REPOSICIÓN DE SANGRE DESPLASMATIZADA Y CONCENTRADOS DE PLAQUETAS
Figura 1.
consistente en un aumento de la captación del mi- El síntoma más frecuente de los enfermos con
neral por los macrófagos y menor cesión a la mé- cáncer es la astenia, que puede deberse (en el mo-
dula eritropoyética. Este cuadro puede confirmar- mento del diagnóstico) al descenso de la cifra de
se por la presencia en la circulación de una proteí- hemoglobina y posteriormente, al efecto del trata-
na, la lactoferrina, liberada en exceso hacia el plas- miento con quimioterapia o radioterapia. La fatiga y
ma debido al elevado recambio de los granulocitos la astenia crónicas son síntomas característicos de
inducido por la inflamación o la neoplasia. la anemia que influyen en el bienestar físico y psi-
La anemia suele ser discreta, normo–hipocró- cológico y en la actividad y capacidad de relación.
mica, y va acompañada de hiposideremia. La de- Otro síntoma característico es el deterioro de
terminación del nivel de ferritina en la sangre facili- la función cognitiva provocado por la disminución
ta el diagnóstico diferencial (hiperferritinemia en la de la oxigenación cerebral, como consecuencia
anemia de las enfermedades inflamatorias cróni- de la menor producción de eritrocitos. Este esta-
cas; hipoferritinemia en las anemias ferropénicas). do se manifiesta sobre todo por la incapacidad pa-
La administración de hierro no resulta eficaz en es- ra la concentración que deja en el paciente un sen-
te tipo de anemia. Se ha observado que estos pa- timiento de frustración y que genera ansiedad y de-
cientes tienen una producción insuficiente de EPO presión (alteración del estado de bienestar psico-
en relación con el nivel de su anemia, con ausen- físico).
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
cia de correlación lineal entre la EPO circulante y Distintos estudios han demostrado que cuando
la hemoglobinemia. Por tanto, el tratamiento de los pacientes con cáncer desarrollan anemia, res-
elección es la eritropoyetina (r–Hu–EPO). ponden peor al tratamiento de radioterapia, en es-
En los pacientes con cáncer son frecuentes pecial cuando las cifras de hemoglobina son muy
los estados anémicos crónicos, en especial en los bajas, y que ello repercute negativamente en el
que tienen neoplasias hematológicas en estadios pronóstico de su enfermedad neoplásica.
avanzados y en los tratados con quimioterapia in- En la mayor parte de estos estudios no fue po-
tensiva. sible establecer si la agravación se debía al esta-
Los síntomas de la anemia tales como la aste- dio avanzado de la neoplasia, a la anemia propia-
nia, los mareos, la falta de apetito, la incapacidad mente dicha o a la imposibilidad de administrar los
para concentrarse, la disnea y los problemas car- tratamientos previstos.
diovasculares influyen negativamente en todos los Más recientemente se han efectuado estudios
parámetros de la calidad de vida. para establecer la influencia de la anemia sobre la
103
CONSENSO NACIONAL PAUTAS DE REPOSICIÓN DE SANGRE DESPLASMATIZADA Y CONCENTRADOS DE PLAQUETAS
Figura 2.
Relación de Hb y producción de O2 en normovolemia e hipovolemia
Tabla 2.
Indicaciones sangre desplasmatizada – hemorragia aguda
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
104
CONSENSO NACIONAL PAUTAS DE REPOSICIÓN DE SANGRE DESPLASMATIZADA Y CONCENTRADOS DE PLAQUETAS
105
CONSENSO NACIONAL PAUTAS DE REPOSICIÓN DE SANGRE DESPLASMATIZADA Y CONCENTRADOS DE PLAQUETAS
PAUTAS PARA LA TRANSFUSIÓN fatal rara, aun en pacientes con deterioro de la fun-
DE PLAQUETAS EN PACIENTES CON ción medular, o que han recibido tratamientos qui-
CÁNCER mioterápicos intensos.
Es importante destacar que no todos los pa-
PRODUCTOS PLAQUETARIOS cientes plaquetopénicos se benefician de las trans-
Pueden obtenerse por dos métodos: fusiones, raramente es necesaria en pacientes con
– Concentrados plaquetarios obtenidos a par- plaquetopenias autoinmunes, en las inmunes indu-
tir de sangre completa de múltiples donantes cidas por fármacos y está relativamente contrain-
(plaquetas de banco). dicada en pacientes portadores de PTT por el ries-
– Concentrados plaquetarios de donante único go trombótico.
CPDU, obtenidos por aféresis.
Estudios comparativos demostraron que los Cifra de plaquetas umbral para la
incrementos postransfusionales en el conteo pla- transfusión profiláctica en la leucemia
quetario, así como el beneficio hemostático son si- aguda
milares con ambos preparados. Por lo tanto en si- Se sugiere un umbral de plaquetas de 10.000/mm3
tuaciones habituales pueden ser usados indistin- para reducir el riesgo de hemorragia en pacientes
tamente. Ambas deben ser utilizadas en un plazo adultos en tratamiento por leucemia aguda. Diver-
de hasta 5 días. (Hay que tener en cuenta que, se sos estudios han demostrado que no hay diferen-
pierde 20% de actividad por día). cias significativas entre usar como umbral un re-
Las plaquetas de banco son menos costosas cuento plaquetario de 10.000/mm3 o de 20.000/
pero tiene un riesgo potenciado de inmunización, mm3. En situaciones particulares puede ser nece-
reacciones adversas y enfermedades transmisi- saria la transfusión con conteos mas elevados. Es
bles. Cuando se requieren transfusiones en pa- el caso de los recién nacidos, pacientes con fiebre
cientes candidatos a trasplante de progenitores elevada, hiperleucocitosis, o rápida caída de las ci-
hematopoyéticos se prefieren las de donante único fras plaquetarias. También puede ser necesaria la
seleccionado, por los riesgos señalados. Lo mismo reposición precoz, cuando se asocian alteraciones
se plantea en pacientes con afecciones potencial- en la coagulación (como en la LAM3), cuando exis-
mente curables que requieren reposiciones repe- ten elementos sugestivos de hemorragia en cur-
tidas. Cuando se requieren transfusiones con pla- so, en pacientes sometidos a procedimientos inva-
quetas histocompatibles también se prefieren las sivos o si no se dispone de transfusiones en caso
de donante único seleccionado. de emergencia. La decisión de transfundir a un pa-
ciente debe basarse en su contexto clínico además
USO PROFILÁCTICO VERSUS USO de en el conteo plaquetario.
TERAPÉUTICO EN LAS TRANSFUSIONES
PLAQUETARIAS TRASPLANTE DE PROGENITORES
Se recomienda el uso profiláctico en pacientes con HEMATOPOYÉTICOS (TPH)
deterioro de la función medular para reducir el ries- Se recomienda seguir los mismos criterios que pa-
go de hemorragia cuando el recuento plaquetario ra la transfusión de plaquetas en la leucemia agu-
cae por debajo de un determinado umbral predefi- da. Con el uso de stem cells periféricas se disminu-
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
nido. Este umbral varía de acuerdo al diagnóstico, ye el tiempo de aplasia post infusión, la trombocito-
la situación clínica del paciente y la terapéutica a penia y por lo tanto, el riesgo de hemorragia.
instituir. El umbral utilizado por distintos grupos es
de 10.000/mm3 a 20.000/mm3, no encontrándose PACIENTES CON TROMBOCITOPENIA
diferencias significativas entre ambos grupos. CRÓNICA ESTABLE Y SEVERA
Se evidenció que el riesgo de sangrado está Los pacientes que presentan trombocitopenia se-
muy incrementado con cifras plaquetarias inferio- vera y sostenida, muchas veces portadores de sín-
res a 5000/mm3. Si bien no hay estudios aleato- dromes mielo displásicos (SMD) o aplasia medu-
rios controlados actuales, el uso de plaquetas, en lar, pueden tolerar muy bien bajos conteos plaque-
las situaciones previamente descriptas como profi- tarios con escaso o nulo sangrado por periodos
laxis de hemorragia se ha vuelto práctica habitual. muy prolongados. No existen estudios randomiza-
Con esto se han reducido las muertes por sangra- dos y controlados, pero basándose en la experien-
do, siendo actualmente la muerte por hemorragia cia clínica se sugiere hacer un seguimiento de es-
106
CONSENSO NACIONAL PAUTAS DE REPOSICIÓN DE SANGRE DESPLASMATIZADA Y CONCENTRADOS DE PLAQUETAS
tos pacientes absteniéndose de transfundirlos, re- ras con cifras plaquetarias mayores o iguales a
servando las mismas para cuando presenten epi- 50.000/mm3. Cuando no se cuenta con la cifra re-
sodios de hemorragia o cuando se les realice un querida de plaquetas se pueden realizar transfu-
tratamiento activo. siones previas al procedimiento realizando siem-
pre un hemograma de control postransfusional pa-
TRANSFUSIÓN PROFILÁCTICA DE ra corroborar que se alcanzó la cifra de plaquetas
PLAQUETAS EN PACIENTES CON TUMORES que se considera segura para dicho procedimien-
SÓLIDOS to. Es importante que la transfusión se realice en
El riesgo de sangrado está vinculado a la realiza- el momento pertinente previo al procedimiento ya
ción de tratamientos quimioterápicos agresivos que transcurrido un determinado plazo las plaque-
que provocan trombocitopenia y se vincula al con- tas podrían no estar en el nivel requerido.
teo plaquetario. En términos generales el umbral Es importante destacar que estas cifras se-
sugerido de plaquetas es de 10.000/mm3. En los rían seguras siempre y cuando no coexista una
pacientes portadores de tumores de vejiga que re- alteración de la coagulación que potenciaría el
ciben tratamiento agresivo o en aquellos portado- riesgo de sangrado.
res de tumores donde se comprobó la presencia
de necrosis, se sugiere transfundir con cifras pla- PREVENCIÓN DE ALO INMUNIZACIÓN CON
quetarias de 20.000/mm3, sabiendo que en estos ANTÍGENOS RHD
casos el riesgo de sangrado es mayor a nivel lo- La prevención de la alo inmunización RhD por con-
cal. taminación con GR de los concentrados plaqueta-
rios, se realiza a través del uso exclusivo de pla-
PROCEDIMIENTOS QUIRÚRGICOS quetas de donantes RhD negativos o por medio de
O INVASIVOS EN PACIENTES la inmunoprofilaxis antiD, que debe ser considera-
TROMBOCITOPÉNICOS da en mujeres en edad reproductiva y en niños,
Basado en consensos y en una vasta experiencia fundamentalmente en niñas RhD negativas.
clínica se plantea que un recuento plaquetario de
50.000/mm3 seria suficiente para someter al pa- PREVENCIÓN DE LA ALO INMUNIZACIÓN
ciente a procesos invasivos mayores con un mar- USANDO PRODUCTOS SANGUÍNEOS
gen de seguridad, cuando no existen alteraciones LEUCORREDUCIDOS
en la coagulación. Algunos procedimientos como La incidencia de la refractariedad a las trans-
la BMO puede llevarse a cabo con cifras plaqueta- fusiones plaquetarias mediada por alo anticuerpos
rias menores a 20.000/mm3. puede ser disminuida en pacientes con LMA en
Para cirugía mayor se requieren cifras plaque- tratamiento de inducción a través de la filtración de
tarias mayores o iguales a 50.000/mm3. GB en los volúmenes y concentrados de glóbulos
Para PL se sugieren cifras mayores o iguales rojos y plaquetas respectivamente. Esto permite la
a 20.000/mm3. leucoreducción que disminuye el riesgo de alo in-
Para la biopsia hepática no hay consenso, munización. En otros tipos de leucemias y en otros
pero se demostró que no había un riesgo mayor tipos de cáncer también podría descender la tasa
de sangrado con plaquetopenia moderada (entre de alo inmunización, si bien no hay datos que lo
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
107
CONSENSO NACIONAL PAUTAS DE REPOSICIÓN DE SANGRE DESPLASMATIZADA Y CONCENTRADOS DE PLAQUETAS
productos sanguíneos es de rutina hoy en día, y paciente está alo inmunizado, confirmando el diag-
aliviaría la necesidad de filtrar en el momento de nóstico por la detección de anticuerpos, porque se-
la transfusión. rá manejado de distinta manera que las otras cau-
sas de refractariedad.
DIAGNÓSTICO DE REFRACTARIEDAD A LA
TRANSFUSIÓN PLAQUETARIA MANEJO DE LA REFRACTARIEDAD A LA
Se sugiere obtener el conteo plaquetario postrans- TRANSFUSIÓN DE PLAQUETAS
fusional siempre que sea posible. De no haber- Los pacientes con refractariedad a la transfusión
se alcanzado el conteo plaquetario requerido pa- plaquetaria por alo inmunización, son de mejor ma-
ra una situación clínica determinada, seria necesa- nejo cuando se les administran plaquetas de do-
rio realizar otras transfusiones hasta poder obte- nantes que son HLA–A y HLA–B seleccionados.
ner una cifra adecuada. Los pacientes pueden te- Los centros de hemoterapia tienen que tener acce-
ner un muy escaso incremento del conteo con una so a listas de estos donantes.
única transfusión y tener excelente incremento de Para los pacientes cuyo HLA no pueda ser de-
las cifras con transfusiones subsiguientes. Por lo terminado, o que tengan tipos de HLA poco fre-
tanto él diagnostico de refractariedad a la transfu- cuentes para los que no se pueda encontrar do-
sión plaquetaria no puede establecerse hasta que nantes adecuados o que no respondan a las pla-
al menos dos transfusiones ABO compatibles al- quetas HLA compatibles, se pueden identificar do-
macenadas por menos de 72 horas resulten en un nantes con plaquetas histocompatibles por técni-
muy escaso incremento. Este incremento se esta- cas de compatibilidad cruzada.
blece como satisfactorio si es mayor o igual a 2000 En muchos pacientes ambas técnicas son
plaquetas por unidad transfundida. La causa mas complementarias. No hay evidencia de que los pa-
frecuente de la refractariedad es la alo inmuniza- cientes alo inmunizados se beneficien de transfu-
ción, pero existen otras causas como la destruc- siones plaquetarias profilácticas no compatibles,
ción plaquetaria por inmunidad mediada por fár- las cuales no producen incremento en el recuen-
macos, hiperesplenismo, CID aguda, shock, y he- to plaquetario. Se recomienda en estos pacientes
morragia masiva. Es importante determinar si el que sólo sean repuestos frente a hemorragias.
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
108
CONSENSO NACIONAL PAUTAS DE REPOSICIÓN DE SANGRE DESPLASMATIZADA Y CONCENTRADOS DE PLAQUETAS
4. Enfermedades reemergentes. Entran den- sica con un vpp de 56%, y la detección de antíge-
tro de este grupo enfermedades anteriormente no de superficie con un vpp de 50%, infección por
conocidas y controladas o tratadas eficazmen- sífilis (actual o pasada) con vpp de 36%, infección
te y cuya frecuencia y/o mortalidad se encuen- por VIH con 34%, serología para hepatitis C con
tra en la actualidad en constante aumento (ej.: sólo 16% de vvp.
TBC).
ENFERMEDAD DE CHAGAS TRANSFUSIONAL
INTERVENCIONES DESDE LA MEDICINA La enfermedad de Chagas tiene muy diferente sig-
TRANSFUSIONAL nificado en Uruguay que en el resto América: en al-
El tamizaje serológico presenta limitaciones en gunas regiones del continente, el 50% de la pobla-
tanto su sensibilidad no es absoluta y por tanto no ción está infectada y constituye la principal causa
puede brindar seguridad total. Además los donan- de muerte cardiovascular en menores de 50 años.
tes no presentan un patrón único, por tanto es ab- En Uruguay la vía vectorial ha sido interrumpida,
109
CONSENSO NACIONAL PAUTAS DE REPOSICIÓN DE SANGRE DESPLASMATIZADA Y CONCENTRADOS DE PLAQUETAS
ves pueden asociar meningoencefalitis y/o miocar- Como marcador reactivo para hepatitis B pue-
diopatía aguda. de corresponder a:
La paraclinica suele mostrar: neutropenia con Falso positivo.
linfomonocitosis y eosinofilia. Reactivo verdadero.
En el año 2005 se informaron casos de infec- Si se acompaña de anticuerpos para Hb-
ción adquirida por vía digestiva en turistas que sAg no ofrece dudas. Si no se acompaña
consumieron jugo de caña en balnearios del sur ni de Anti HbsAg ni de HbsAg, puede co-
de Brasil, motivando una revisión del interrogato- rresponder a infección temprana con caí-
rio a los donantes que hubieran viajado, su exclu- da de antígeno de superficie sin que ha-
sión ante posible período ventana y la recomenda- lla aparecido aún los niveles detectables
ción de realizar estudios por xenodiagnóstico y es- de anticuerpos anti antigeno de superficie;
tudios serológicos que implicarán la detección de o de una infección evolucionada a la cu-
IgM para enfermedad de Chagas. ración con caída de los demás marcado-
110
CONSENSO NACIONAL PAUTAS DE REPOSICIÓN DE SANGRE DESPLASMATIZADA Y CONCENTRADOS DE PLAQUETAS
111
CONSENSO NACIONAL PAUTAS DE REPOSICIÓN DE SANGRE DESPLASMATIZADA Y CONCENTRADOS DE PLAQUETAS
10. Hume HA, Popovsky MA, Benson K, et al. Hypotensive reac- 13. Murphy MF, Wallington TB, Kelsey P, et al. Guidelines for
tions: A previously uncharacterized complication of platelet the clinicaluse of red cell transfusions. Brit J Haematol 2001;
transfusion? Transfusion 1996; 36:904–909. 113:24–31.
11. Lozano M, Narváez J, Faúndez A, et al. Recuento de plaque- 14. O’Connell B, Lee EJ, SchifferCA. The value of 10–minute
tas y volumen plaquetario medio en la población española. post–transfusion platelet count. Transfusion 1988; 28:66–67.
Med Clin (Barc)1998; 110:774–777 15. Williamson LM. British Committee for Standards in Haema-
12. Mintz PD, ed. Transfusion Therapy: clinical principles and tology Blood Transfusion Task Force: guidelines on gamma
practice. AABB Press, Bethesda. 1999. irradiation of blood components for the prevention of transfu-
sion–associated graft vs. host disease. Transfus Med 1996; 6:
261–271.
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
112
CONSENSO NACIONAL PAUTAS DE REPOSICIÓN DE SANGRE DESPLASMATIZADA Y CONCENTRADOS DE PLAQUETAS
113
CONSENSO NACIONAL PAUTAS DE REPOSICIÓN DE SANGRE DESPLASMATIZADA Y CONCENTRADOS DE PLAQUETAS
Esquema 1.
T. sangria. Ivy; APTT– tiempo de tromboplastina parcial activado: agreg.ristocetina– agregacion ristocetina concentracio-
nes decrecientes tomando 1,5–0,5, (1) factor v.Willebrand. (2) cofactor ristocetina, (3) factor VIII
114
CONSENSO NACIONAL PAUTAS DE REPOSICIÓN DE SANGRE DESPLASMATIZADA Y CONCENTRADOS DE PLAQUETAS
Tabla 1.
Clasificación de la enfermedad de von Willebrand (subtipos).
Subtipo Manifestaciones clínicas Patrón diagnóstico Frecuencia
Sangrado leve/moderado vWF:Ag ↓ 80 de casos
Responde a DDAVP vW:Rco: ↓
Tipo 1
FVIII:C ↓ (20–50%) 30/ 1000
PM = normal
Sangrado leve/mode-
rado, generalmente po- Variable grado de: 10–15% de casos
bre respuesta a DDAVP
vWF:Ag ↓
Tipo 2A
vWF:Rco: ↓↓
FVIII:C ↓↓
PM: multímeros grandes
e intermedios ausentes
Sangrado leve/modera-
Variable grado de: < de 5 EvW
do DDAVP “contraindicado”
vWF:Ag ↓
VWF:Rco: ↓↓
Tipo 2B
FVIII:C ↓↓ ↓↓
RIPA ↑(binding GPIb)
Trombocitopenia
PM: pérdida grandes mults.
Sangrado variable
vWF:Ag ↓ Raro
DDAVP resp. parcial
Tipo 2M vWF:Rco: ↓
FVIII:C ↓
PM:grandes e interm s/p
Variable vWF:Ag ↓/N Poco común
VWF:actividad ↓/N
Tipo 2N FVIII:C ↓↓↓
PM: Normal
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
Binding FVIII/vWF ↓↓
Sangrado severo vWF:Ag ↓↓↓ 1–5x106
Tipo 3 VWF:actividad ↓↓↓
FVIII:C ↓↓↓ (no detectable)
vWF:Ag: von Willebrand antigénico, vWF:RCo: von Willebrand cofactor de ristocetina , FVIII:C: factor VIII coagulante, PM:
patrón multimérico, RIPA: agregación plaquetaria inducida por Ristocetina, (modificado de D. Ginsburg, 1999).
con aumentos de la actividad biológica del factor que en el tipo 1 de EvW este efecto es paralelo a
VIII y FvW superiores a las observadas en hemo- los niveles de FvW funcionante, el tiempo de san-
fílicos. Adicionalmente en estos pacientes se co- gría no se acorta significativamente en los pacien-
rrobora normalización del tiempo de sangría. Aun- tes con tipo 3 y tipo 2 de la enfermedad. En teo-
115
CONSENSO NACIONAL PAUTAS DE REPOSICIÓN DE SANGRE DESPLASMATIZADA Y CONCENTRADOS DE PLAQUETAS
Tabla 2.
Dosis recomendadas de desmopresina. Respuesta en pacientes con hemofilia A y enfermedad de
von Willebrand.
Intravenosa o subcutánea: 0,3 μg / kg
Dosis única
Intranasal: 300 μg
Aumento medio del factor
3 – 5 veces (rango: 1,5–20 veces)
sobre la línea de base
30–60 min luego de inyección intravenosa
Tiempo para acceder a niveles máximos
90–120 min luego de inyección s.c. o i.n.
5–8 horas para factor VIII
Vida media plasmática
8–10 horas para factor vW
Intervalo de administración Dosis única, cada 12 o 24 horas
116
CONSENSO NACIONAL PAUTAS DE REPOSICIÓN DE SANGRE DESPLASMATIZADA Y CONCENTRADOS DE PLAQUETAS
117
CONSENSO NACIONAL PAUTAS DE REPOSICIÓN DE SANGRE DESPLASMATIZADA Y CONCENTRADOS DE PLAQUETAS
Participan
Prof. Arago Antonio, Prof. de Medicina Transfusional. Tec. Francis, Asistente Clínica Médica A. Dra. Kollar Patricia,
Transf. Aguerre Fabiana. Quim. Farm. Benaderet Irene. Servicio Hematología Hospital Maciel. Dra. Lagos Graciela,
Dra. Beñarán Beatriz, Ex Prof. Adj. Medicina y Asistente Prof. Agdo. Medicina Nuclear. Dra. Lens Daniela, Prof. Adj.
de Hematología, CRAMI. Tec. Transf. Bentancor Gabriela. Dpto. Básico de Medicina. Dr. Lima Edgar, Prof. Adj. de
Dr. Ramón Bronzetti. Dr. Bodega Enrique, Director Medicina Transfusional. Dra. Lizarralde Adelina, CAMS
Servicio Hematología Hospital Maciel. Dra. Bonomi Soriano, AMEDRIN Fray Bentos, FEMI. Dr. López Jorge,
Rossana, Asoc. Española. Dr. Borelli Gabriel, Asistente Asistente Medicina Transfusional. Dr. Lorenzelli Amilcar,
Clínica Hematológica, Serv. Hematología Hospital Maciel. FEMI. Dra. Magariños Alicia, Presidente Soc. Hematología
Dra. Bruzone Margarita, Clínica Médica C. Tec. Transf. del Uruguay, Serv. Hematología Hospital Maciel, CASMU,
Caldas Carmen. Dr. Camacho Luis, Clínica Médica C. Casa de Galicia. Dr. Marchetti Nicolás, Maldonado. Dra.
Dra. Caneiro Ada, Hospital Británico. Dra. Canessa Cecilia, Martínez Claudia, Clínica Hematológica, Casa de Galicia.
Asistente Lab. Central Hospital de Clínicas. Dra. Carnelli Dr. Martínez Lem, Director Serv. Hematología Hospital
Alicia, COMEPA, Hospital Escuela del Litoral Paysandú Militar, Asoc. Española. Tec. Transf. Marton Beatriz. Dra.
FEMI. Dra. Cecilia Carrizo, Prof. Adj. Clínica Médica Hosp. Mira Virginia. Dra. Moirano Claudia, Hospital Rivera. Dra.
Maciel. Dra. Costa Virginia, Prof. Adj. Clínica Médica 2 Monteserin Noela, Clínica Hematológica. Dra. Moro Isabel,
Hospital Pasteur, Hospital Militar. Dra. Chevalier Silvana, Clínica Hematológica. Dra. Motta Gabriela, CH Pereira
Clínica Hematológica. Dra. Dalto Claudia, Hemoterapia. Rossell, MUCAM. Dra. Murieda Berta, INDO. Dr. Muxi
Dau Carlos, INDO. Dr. De Bellis Roberto, Prof. de Pablo, Hospital Británico, SEM. Dra. Nese Martha, Prof.
Hematología, Hospital Británico. Dra. de Galvez Gabriela, de Hematología, Directora de la Cátedra de Hematología.
Asistente, Clínica Hematológica. Tec. Transf. De los Santos Dra. Nieto Verónica, BPS, IMPASA. Dr. Noble Marcelo,
Adriana. Dra. Delucchi Verónica. Tec. Transf. De Mello Hospital de Florida, FEMI. Dra. Novoa María de los
Gladys. Dr. Desiervo Andrés, Clínica Hematológica. Dra. Ángeles, Hospital Militar, Asociación Española. Dr. Novoa
Díaz Andrea, Ex Asistente Clínica Hematológica, CITMO. Ernesto, Hospital Policial, FEMI. Dra. Parodi Mónica,
Dra. Díaz Lilián, Prof. Adj. Clínica Hematológica, CITMO, Clínica Hematológica, SMI, CUDAM. Dra. Pereyra Silvia.
CASMU. Dr. Dilandro Jorge, Hospital Británico, CASMU. Dra. Pierri Silvia, Prof. Adj. Clínica Hematológica, Hospital
Dra. Estévez Ana Laura, Hospital de San José, AMSJ, Británico. Dra. Píriz Beatriz, Hospital Lavalleja–FEMI.
FEMI. Dr. Estévez Francisco, Prof. Agdo. Cátedra de Dr. Pomoli Santiago, Hospital Militar, Serv. Hematología
Farmacología. Dr. França Wilson, Hemoterapeuta Hospital Hospital Maciel. Dra. Raffo Claudia. Dra. Rettig Karen,
Maciel. Dra. Fiamene Silvana, Clínica Hematológica. Dra. Clínica Hematológica. Dr. Riani Venancio. Dra. Ríos
Flores Karina. Dr. Gabus Raúl, Servicio Hematología Sandra. Dra. Rivas Gabriela, Clínica Hematológica. Dra.
Hospital Maciel, Hosp. Evangélico. Dr. Gai Regis. Dr. Rocca Alejandra, Clínica Hematológica. Dr. Rodríguez
Galeano Sebastián, Servicio Hematología Hospital Ismael, Prof. Agdo. de Medicina Transfusional. Dra. Rojo
Maciel. Dra. García Ana María, Prof. Agdo. Laboratorio Ana Luz, Hospital Policial. Dra. San Martín Rosario, Lab.
de Patología Clínica Hospital Pereira Rossell CASMU. Central Hospital de Clínicas. Dr. Sclavi Jorge, Hospital de
Dra. Gruosso Vittina. Dra. González Marianela, Hospital Rivera. Dra. Sevrini Inés, Prof. Adj. Clínica Médica A. Dra.
de Salto. Dra. Gossio Elvira, Casa de Galicia, CUDAM, Stevenazzi Mariana, Asistente Clínica Hematológica. Dra.
CAMEDUR, Durazno FEMI. Dr. Insagaray Juan, Prof. Sundberg Florencia, CH Pereira Rossell, CRAMI. Dra.
Adj.de Medicina Transfusional. Dra. Iglesias Teresa, Lab. Tejeira Natalia, Clínica Hematológica. Dra. Testa Graciela,
Central Hospital de Clínicas. Dr. Isaurralde Hugo, Ex Prof. Hospital Salto–FEMI. Dra. Topolansky Laura, Asistente
Adj. Dpto. Emergencia Hospital de Clínicas, CITMO. Dra. Clínica Hematológica, CITMO. Dra. Touriño Cristina, Prof.
Jordan Ximena, Clínica Hematológica. Dra. Kescherman Adj. Dpto. Básico de Medicina. Dr. Vázquez Alberto, Serv.
Hematología Hospital Maciel.
CONSENSOS DE HEMATOLOGÍA | 2005 | Cátedra de Hematología
118