Ut 2 - Preparación Del Terreno

Ciclo Formativo: MP: “Producción de plantas
“Técnico en Jardinería y Floristería” y tepes en vivero” Curso 18/19
UT 2_PREPARACIÓN DEL TERRENO

Índice
1. INTRODUCCIÓN
2. EL SUELO: CONCEPTOS GENERALES
3. EL SUELO COMO MEDIO VIVO
4. PRINCIPALES CARATERÍSTICAS DEL SUELO
5. CARACTERÍSTICAS DESEABLES
6. ANÁLISIS DE SUELO. TOMA DE MUESTRAS
7. CONSERVACIÓN Y MEJORA DEL SUELO
8. PREPARACIÓN DEL SUELO PARA EL CULTIVO
9. MAQUINARIA PARA LA PREPARACIÓN DEL TERRENO
ROCÍO ÁGUEDA GARCÍA MALLA 1

1. INTRODUCCIÓN
Desde el punto de vista del cultivo, la calidad del suelo es un factor importante, salvo si
empleamos sustratos. Debe carecer de pedregosidad y salinidad. Es deseable que drene bien y
que tenga una buena aireación. Se debe conocer los cultivos previos, así como los tratamientos
efectuados; para evitar, por una parte, posibles problemas de agotamiento del suelo y toxicidad,
y por otra, problemas de hongos en el suelo. En la actualidad son pocos los viveros que realizan
el cultivo de las plantas en suelo, lo normal es efectuarlo en contenedor y con sustratos
especiales, tal como veremos en la Unidad de Trabajo 3 y 4.
2. EL SUELO: CONCEPTOS GENERALES

Las plantas tienen la facultad de formar materia orgánica a partir del agua (H2O), que las
raíces absorben del suelo, y del anhídrido carbónico (CO2) del aire. Esta función, denominada
función clorofílica, la realizan con ayuda de la luz solar, y en ella interviene el pigmento
denominado clorofila, que es el responsable del color verde las hojas y otros órganos vegetales.
La materia orgánica constituye la mayor parte de los tejidos vegetales. Esta materia
orgánica se compone de tres elementos químicos: carbono, nitrógeno e hidrógeno.
Pero además de la materia orgánica, los tejidos vegetales contienen otros elementos
químicos. Estos elementos químicos se encuentran en el suelo, de donde la planta los toma por
medio de sus raíces, después de que dichos elementos se hayan disuelto en el agua del suelo.
El carbono, el oxígeno y el hidrógeno son suministrados por el aire y el agua. Los demás
elementos han de ser suministrados por el suelo.
Dentro de los elementos suministrados por el suelo se acostumbra a hacer la siguiente
clasificación: Macroelementos (primarios y secundarios) y microelementos u oligoelementos.
1. Macroelementos: Elementos primarios. Las plantas necesitan tomar grandes

cantidades de estos elementos. Son los siguientes: nitrógeno, fósforo y potasio. En la mayor
parte de los cultivos, las necesidades de las plantas son mayores que las existencias, por lo que
es preciso hacer un aporte más o menos continuado. Constituyen la base del abonado.
2. Macroelementos: Elementos secundarios. Las plantas consumen grandes

cantidades de estos elementos, pero esto no debe preocupar demasiado al agricultor, porque
los suelos, en general, tienen cantidades suficientes y no es preciso hacer aportaciones, salvo en
casos especiales. Son los siguientes: calcio, magnesio, azufre.

3. Microelementos. Son necesarios a las plantas, pero en cantidades muy

pequeñas. En general, no es preciso hacer aportación de estos elementos salvo en casos
especiales. Son los siguientes: hierro, manganeso, cinc, cobre, molibdeno, boro, cloro, etc.
Los suelos contienen, en mayor o menor proporción, los elementos nutritivos que las
plantas necesitan. El contenido de cada uno de estos elementos se divide en dos partes:
1. Parte asimilable, esto es, que las plantas pueden tomar directamente.
2. Parte no asimilable, que no puede ser tomada hasta que se transforme en

asimilable.
El laboreo, la población microbiana del suelo y la acción de los agentes atmosféricos

contribuyen a que la parte no asimilable se vaya transformando progresivamente en asimilable.
La fertilidad de un suelo depende del contenido de elementos fertilizantes y de la
rapidez con que las partes no asimilables se convierten en asimilables.
Las plantas toman del suelo los elementos minerales, por tanto, es necesario conocer su
composición, lo que permitirá ajustar un programa de fertilización.
Los análisis de suelos son diversos, así como las claves de interpretación. Los principales
parámetros que se analizan en un suelo son: materia orgánica, nitrógeno, fósforo, potasio,
calcio, magnesio, azufre, boro, molibdeno... Reseñaremos brevemente los elementos
principales (punto y UT 10), pues el tema será ampliamente tratado en el Módulo Transversal
de Fundamentos Agronómicos.
3. EL SUELO COMO MEDIO VIVO

En el suelo viven numerosos seres vivos: insectos, lombrices, microorganismos
bacterianos, criptogámicos (e incluso en cultivos al aire libre algunos animales superiores). En
general se admite que un gramo de suelo puede contener entre 50 y 200 millones de
microorganismos, microorganismos que al morir pueden aportar entre 3-6 Tm/ha de peso, que
al descomponerse libera del orden de un 6'5% de nitrógeno.
Las lombrices tienen un papel muy beneficioso, pues mejoran la estructura del suelo,
otros organismos son perjudiciales.

Desde el punto de vista de la fertilidad del suelo nos interesan las bacterias, éstas
pueden ser aerobias (se desarrollan en presencia de oxígeno) y anaerobias (se desarrollan en
ausencia de oxígeno), las primeras suelen ser beneficiosas (intervienen en procesos oxidativos,
como el de la materia orgánica) y las segundas dañinas (intervienen en procesos reductores).
Especial importancia merece los microorganismos que fijan el nitrógeno atmosférico en
el suelo y que viven en simbiosis con algunos árboles. Así, el aliso (Alnus glutinosa), la casaurina,
el árbol del Paraíso y todas las leguminosas (como la robinia) forman nudosidades en sus raíces,
con la facultad de fijar el nitrógeno atmosférico, asociadas a las cepas de Rhizobium , los
azotobacter (bacterias aerobias), los Clostridium (bacterias anaerobias), las algas azules, los
actinomicetos y otros.
En producción de plantas son de gran importancia las micorrizas. La micorriza es una
agrupación simbiótica por la cual el micelio del hongo absorbe agua y principios minerales del
suelo y los proporciona a la planta. La interacción entre simbiontes es poco conocida y siempre
favorable a la planta superior.
Finalmente, una pequeña referencia a los microorganismos perjudiciales: hongos del
suelo, nematodos e insectos perjudiciales, en cultivos intensivos (y la producción de plantas lo
es), es frecuente recurrir a la desinfección de los suelos.
4. PRINCIPALES CARACTERÍSTICAS DEL SUELO

a. TEXTURA
Se llama textura de un suelo a la proporción o porcentaje de arena, limo y
arcilla que forman su parte mineral. Atendiendo a la textura, los suelos
serán arenosos, francos o arcillosos.
b. ESTRUCTURA
Se llama estructura a la forma en que las partículas individuales del suelo se
unen para formar unidades de más tamaño, llamados agregados del suelo,
de carácter más persistente. Los agregados, al unirse, forman terrones,
indeseables para el cultivo. Puede ser amorfa, organizada o destruida.
Además, se relaciona con el complejo arcillo-húmico.
c. POROSIDAD
La porosidad es el espacio de suelo ocupado por los poros, que es una
medida del volumen de suelo que retiene agua y aire.

d. DENSIDAD
Se mide en kg/m3 o g/cm3, da idea del peso del sustrato o suelo. Si es muy
alta pesa mucho y si es muy baja no sujeta las raíces.
e. CIC
Cantidad máxima total de cationes que un determinado peso de suelo es
capaz de retener. Se determina por la cantidad y tipo de arcilla y por la
cantidad de humus. Indica cómo un suelo es capaz de liberar nutrientes
absorbibles por la planta.
f. MATERIA ORGÁNICA
La materia orgánica aparece en el suelo natural a consecuencia de la
actividad de los seres vivos. Está constituida por mezcla de
microorganismos y residuos de vegetales y animales superiores más o
menos descompuestos que se encuentran en el suelo o se le incorporan. La
materia orgánica fresca se transforma en compuestos estables de colores
oscuros gracias a la intervención de microorganismos que la descomponen,
por medio de diversos procesos químicos y biológicos. Estos procesos se
conocen como humificación y a los compuestos resultantes se les
denomina humus, que es materia orgánica altamente transformada.
Después de la humificación la materia orgánica sigue degradándose en un
proceso de mineralización, es decir, los compuestos orgánicos se
transforman en compuestos inorgánicos, sales minerales o nutrientes con
el paso del tiempo. El humus se transforma muy lentamente en el suelo.
g. pH
Es la reacción del suelo que describe la acidez o alcalinidad de un suelo. Los
agricultores suelen encontrarse con suelos con valores de pH oscilantes
entre 5,5 a 9,5.
h. FERTILIDAD
Se define fertilidad a la cualidad que permite a un suelo proporcionar
nutrientes en cantidad y proporción suficientes para el crecimiento
adecuado de las plantas.

Aumenta la fertilidad Disminuye la fertilidad

Alto contenido arcilla Alto contenido arena
Alto contenido humus Pérdida de materia orgánica
Buena estructura Compactación
Suelo caliente Suelo frío
Suelo profundo Suelo poco profundo
Suelo húmedo Suelo seco o mojado
Buen drenaje Exceso de riego o drenaje
Fertilización Erosión
Microbios deseables Plagas perjudiciales para la raíz
Cerca del pH neutro pH demasiado ácido o alcalino
5. CARATERÍSTICAS DESEABLES
Las características deseables de los suelos para los cultivos a raíz desnuda son:
– Suelo suelto
• Raíz crece bien
• Raíz no se rompe en el arranque
• Rechazar los excesivamente pesados
– Suelo fértil
• Crecimiento correcto
– Suelo franco o franco – arenoso
• Rechazar los excesivamente arcillosos o arenosos
– Suelo ligeramente ácido
• Rechazar los calizos
– Suelo estéril
• Sin hongos fitopatógenos ni malas hierbas
– PROFUNDIDAD: 25 a 40 cm
– TEXTURA: FRANCA, FRANCA-ARENOSA, 15 % LIMO, 15 % ARCILLA
– ESTRUCTURA: SIN PARTÍCULAS DE DIÁMETRO MAYOR A 2 MM
– MATERIA ORGÁNICA 2,5 a 5 %
– pH 5,5 – 6,5
– SALINIDAD ≤ 2 mmhos/cm
– PRESENCIA DE MICORRIZAS
– BAJA CALIZA ACTIVA

6. ANÁLISIS DEL SUELO. TOMA DE MUESTRAS
Los métodos para detectar deficiencias de nutrientes en las plantas son tres:
A. La inspección visual de las cosechas: ofrece un resultado tardío (una vez se ha
producido el trastorno) y poco fiable (ya que no puede saberse con seguridad a qué se deben
los síntomas detectados).
B. Los análisis foliares: miden los niveles de nutrientes sólo en los tejidos de la
planta, pudiendo poner al descubierto problemas no detectados en los análisis de suelo. Es útil
cuando la planta permanece mucho tiempo en el vivero, pero no cuando el periodo es anual o
inferior.
C. Los análisis de suelos: miden los niveles de nutrientes del suelo, así como otras
características de este, es útil para planificar el abonado, hacer las mejoras necesarias, etc. En la
realización de los análisis del suelo hay tres fases: 1-muestreo del suelo, donde se toman
muestras del suelo; 2- envío a un centro de análisis del suelo, donde se realiza una prueba, y 3-
se concluye con una recomendación de plan de fertilización.
Los análisis de suelo se estudian ampliamente en el módulo transversal de Fundamentos
Agronómicos. El procedimiento de toma demuestras se explica en el cuadernillo de prácticas.
Generalidades sobre la toma de muestras: Para la mayoría de los cultivos, la recolección
de muestras se suele hacer cada 2 ó 3 años. Además, se realizará un análisis antes de poner un
cultivo que ocupe más de una estación (ej. césped, árboles, forrajes perennes). En cultivos
anuales puede realizarse un análisis del suelo al principio de la estación para permitir al
productor suministrar el nutriente necesario antes de la siembra. Esto ocurre con los cultivos
intensivos como las frutas y hortalizas, que se benefician de un muestreo anual. Para los cultivos
de invernadero se realizan análisis más a menudo, se debe realizar el análisis antes de sembrar
o plantar.

7. CONSERVACIÓN Y MEJORA DEL SUELO

Los diferentes métodos existentes para mejorar o disminuir los aspectos negativos del
suelo son: El laboreo, las enmiendas, la fertilización, la desinfección del suelo, el cultivo en
envase y la bacterización y micorrización controladas.
En la actividad viverística se ha impuesto el cultivo en envase o contenedor como
garantía para obtener planta de calidad, por lo que en las siguientes Unidad de Trabajo 3 y 4
vamos a prestar especial atención al contenedor y al sustrato.
La conservación del suelo implica mantener su fertilidad, evitar su degradación y
procurar atenuar su pérdida por erosión. En atención al tipo de “recurso” utilizado (la
vegetación, el movimiento de tierras o el manejo del suelo) las medidas de conservación quedan
clasificadas en:
Prácticas vegetativas:
✓ Abonos verdes (incorporando hojas y otros restos vegetales al suelo)
✓ Rotación de cultivos
✓ Cultivos en fajas
✓ Malhojo (paja o material vegetal muerto) y cultivos de cobertera
Prácticas mecánicas:
 Zanjas desviadoras
 Canales de desagüe
 Resaltes alternados
 Zanja de prado
 Cultivos a nivel y franjas de hierba
 Surcos y caballones
 Terrazas: Las labores de aterrazamiento en una ladera dejan en el 10% el riesgo
de erosión y las de abancalamiento impiden la erosión en el bancal.
Prácticas agronómicas. Manejo del suelo
 Selección de los cultivos
 Manejo del laboreo
 Adición de enmiendas y fertilizantes
Prácticas para casos especiales:
 Estabilización de laderas, cursos de agua, cárcavas y caminos
 Control de la erosión eólica
 Recuperación de suelos salinos y sódicos.

8. PREPARACIÓN DEL SUELO PARA EL CULTIVO
Antes de la siembra se aconseja realizar las siguientes labores preparatorias del terreno:
• Eliminación de piedras, tocones y raíces de árboles y malas hierbas preexistentes. Se
suele realizar en primavera o a comienzos del verano.
• Nivelación del terreno. Se dará al terreno una ligera pendiente para facilitar el drenaje
del suelo.
• Labores de drenaje del suelo. Se realizará en aquellas zonas en las que el terreno queda
anegado. El drenaje se conseguirá cavando el terreno y añadiendo un perfil de arena gruesa en
suelos pesados; también con tuberías de drenaje, etc.
• Cavado del suelo. La cava consiste en remover el suelo hasta unos 20 cm de
profundidad, o menos si el suelo tiene menor profundidad. Según el tipo de suelo se añadirá
arena o turba.
• Desmenuzado de los terrones. Su objetivo es proporcionar un lecho de siembra
uniforme del césped, libre de agujeros y de prominencias.
• Consolidación del suelo. Con ello se consigue una capa de suelo de cultivo de 3-5 cm y
más (según especie a propagar)
• Barbecho (opcional) Su objetivo es acabar con las semillas latentes de las malas hierbas
que podrían germinar y causar problemas en el futuro césped. El procedimiento tradicional
consiste en dejar el terreno sin cultivar todo el verano, cavándolo y rastrillándolo cada mes. Se
eliminarán las malas hierbas que vayan surgiendo.
Los objetivos básicos de la preparación del terreno son:
1. Aumentar la profundidad útil del perfil, disgregando capas profundas de manera que
las raíces puedan explorar una mayor profundidad del terreno.
2. Aumentar la capacidad de retención de agua del perfil, a través del aumento de la
profundidad.
3. Aumentar la velocidad de infiltración de agua en el perfil mediante un mullido que
posibilite anular la escorrentía y, por tanto, la erosión provocada por el agua (arrastre del suelo).
4. Facilitar la penetración de las raíces de las plantas introducidas, y así hacerlas menos
vulnerables a sequías y falta de nutrientes en las capas superficiales del suelo.
5. Reducir la competencia del matorral/malas hierbas tras la plantación.
6. Drenar el suelo (suelos encharcados) o construir elevaciones donde colocar las plantas
en terrenos muy húmedos/salinos/muy básicos.

9. MAQUINARIA PARA LA PREPARACIÓN DEL TERRENO

Según la profundidad de trabajo las labores se pueden clasificar en:
Primarias, cuyo objetivo es el acondicionamiento del suelo a gran profundidad,
preparándolo para su exploración por las raíces. Se les puede llamar también profundas,
llegando a una profundidad entorno a los 40-50 cm o más y son particularmente necesarias
cuando se trata de suelos excesivamente compactos.
Secundarias, también llamadas labores superficiales, complementan la acción de las
operaciones primarias, afinando el terreno superficialmente, clasificando adecuadamente los
agregados del suelo y creando un lecho adaptado al cultivo. Se consigue la eliminación de malas
hierbas y el mantenimiento de la humedad, la aireación y el mullimiento del suelo para siembras
o plantaciones, etc.
Binas, también denominadas complementarias, son usadas para mantener el suelo libre
de malas hierbas, enterrar abonos, evitar la evaporación y mejorar la infiltración.
Aperos para labores primarias
Subsolador: Se usan para desfondes, despedregado, destoconado (rompiendo raíces) A
diferencia de los arados, el subsolador mueve la tierra, pero no la voltea, dejándola quebrantada
a gran profundidad. Se puede utilizar, incluso, en terrenos que por su dureza no permitan el
empleo de arados. Rompen la suela de labor.
Vertedera (arado de): Se usa para invertir la capa arable y pulverizarla, enterrando los
restos orgánicos y parásitos, dejando la tierra suelta y descompactada. Estos arados realizan
labores de medias a profundas de 30-40 cm de profundidad. Durante su trabajo van cortando
un prisma de tierra por elemento, lo hacen ascender resbalando por la vertedera y, finalmente,
lo voltean. Es decir, voltean la tierra, invirtiendo las capas del suelo. Forman suela de labor.
Grada de disco (arado de): Se utiliza para voltear la tierra, dejando debajo la que se
encontraba encima y viceversa, igual que hace el arado de vertedera. Cuando en el terreno se
encuentran raíces y piedras grandes se usa la grada de discos, que se desengancha sola rodando
sobre el obstáculo; en cambio, cuando el terreno tiene cantos rodados, penetra más el arado de
vertedera.
Aperos para labores secundarias
Fresadora (también llamados rotocultivador, rotocultor y rotovator): consisten en unas
cuchillas giratorias accionadas por la toma de fuerza del tractor, que consiguen desmenuzar,
airear y mezclar la capa más superficial del suelo. Está formado esencialmente por un eje de
azadillas, movido desde la tdf tractor. Realiza una labor de hasta 25 cm de profundidad.

Aperos para binas

Cultivadores, chísel y gradas: Ambos son aperos que se utilizan para realizar labores
superficiales, tales como la eliminación de malas hierbas, romper la costra del suelo, el alisado
y mullido de la parte alta de las labores profundas y medias, repasar cortafuegos, etc.
Maquinaria autopropulsada
Motocultores: Son pequeñas máquinas de laboreo, dotadas de medios de tracción
propios y propulsadas por motor de uno o dos cilindros, refrigerados por aire (no tienen radiador
de agua)
Motozadas: La motoazada es una pequeña máquina de aspecto parecido al motocultor,
pero mucho más simple en su mecánica y prestaciones. Su motor no suele superar los 8HP de
potencia.

Tabla resumen aperos

Accionamiento
Profundidad de los elementos
de la labor de trabajo Apero Esquema del apero
Subsolador
Muy profunda
Subsuelo Fijos
40 - 60 cm
Descompactador
Vertedera
Fijos
Discos
(arados)
Profunda
Capa arable
20 35 cm
Cincel o chísel
Accionados por
Cavadora
la tdf

Accionamiento
Profundidad de los elementos
de la labor de trabajo Apero Esquema del apero
Fijos Cultivador
Vibrocultivador
Rastra de púas
Labor superficial
Grada de discos
5 a 15 cm
Rastra de
Giratorios
estrellas
rotativas
Rodillo

Rotocultor
Giratorios
Labor superficial
Fresadora
5 a 15 cm
Rotocultor de
formones
Accionados por
la tdf
Grada rotativa
Grada de púas
oscilante

Maquinaria para el movimiento de tierras

EXCAVADORA: Máquina autopropulsada sobre ruedas o cadenas con una
superestructura capaz de efectuar una rotación de 360º, que excava, carga, eleva, gira y
descarga materiales por la acción de una cuchara fijada a un conjunto de pluma y balancín, sin
que el chasis o la estructura portante se desplace
RETROEXCAVADORA: La retroexcavadora es una máquina en la cual la pluma baja y
sube en cada operación; la cuchara, unida a ella, excava tirando hacia el carretón, es decir hacia
atrás, en vez de empujar hacia delante, como lo hace la excavadora normal. Es mejor para
trabajar por debajo del plano donde se aploma.
BULLDOZER: Máquina para movimiento de tierra con una gran potencia y robustez en
su estructura, diseñado especialmente para el trabajo de corte (excavando) y al mismo tiempo
empujando con la hoja (transporte)
MOTONIVELADORA: Su cometido es nivelar y refinar terrenos, ya sea en llano o taludes.
MOTOTRAÍLLA: Las moto-traíllas cortan y cargan rápidamente, tienen altas velocidades
de desplazamiento, extienden en la misma operación y eventualmente compactan por peso
propio durante la operación.
RODILLOS: Son equipos de compactación de suelo.
En Moodle tienes este apartado ampliado, como tema independiente, no va a examen.

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Ciclo Formativo: MP: “Producción de plantas

“Técnico en Jardinería y Floristería” y tepes en vivero” Curso 18/19

UT 2_PREPARACIÓN DEL TERRENO

ROCÍO ÁGUEDA GARCÍA MALLA 1

2. EL SUELO: CONCEPTOS GENERALES

1. Macroelementos: Elementos primarios. Las plantas necesitan tomar grandes

2. Macroelementos: Elementos secundarios. Las plantas consumen grandes

ROCÍO ÁGUEDA GARCÍA MALLA 2

3. Microelementos. Son necesarios a las plantas, pero en cantidades muy

2. Parte no asimilable, que no puede ser tomada hasta que se transforme en

El laboreo, la población microbiana del suelo y la acción de los agentes atmosféricos

3. EL SUELO COMO MEDIO VIVO

ROCÍO ÁGUEDA GARCÍA MALLA 3

4. PRINCIPALES CARACTERÍSTICAS DEL SUELO

ROCÍO ÁGUEDA GARCÍA MALLA 4

capaz de retener. Se determina por la cantidad y tipo de arcilla y por la

cantidad de humus. Indica cómo un suelo es capaz de liberar nutrientes

absorbibles por la planta.

ROCÍO ÁGUEDA GARCÍA MALLA 5

Aumenta la fertilidad Disminuye la fertilidad

ROCÍO ÁGUEDA GARCÍA MALLA 6

6. ANÁLISIS DEL SUELO. TOMA DE MUESTRAS

ROCÍO ÁGUEDA GARCÍA MALLA 7

7. CONSERVACIÓN Y MEJORA DEL SUELO

ROCÍO ÁGUEDA GARCÍA MALLA 8

8. PREPARACIÓN DEL SUELO PARA EL CULTIVO

ROCÍO ÁGUEDA GARCÍA MALLA 9

9. MAQUINARIA PARA LA PREPARACIÓN DEL TERRENO

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Aperos para binas

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Tabla resumen aperos

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ROCÍO ÁGUEDA GARCÍA MALLA 13

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Maquinaria para el movimiento de tierras

ROCÍO ÁGUEDA GARCÍA MALLA 15

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