CENTRO ARQUIDIOCESANO DE FORMACION CRISTIANA.

“Evangelii Gaudium”

TEOLOGIA FUNDAMENTAL

Filosofía de la Religión

Magda Myriam Rozo Gutiérrez

Mag. Luis Antonio Martínez Bossa.

Acacias, septiembre 14 de 2019

 ENSAYO
EL OBJETO DE LA FILOSOFIA DE LA RELIGION PARA EL MUNDO ACTUAL Y
SU RELACIÓN CON LA TEOLOGIA FUNDAMENTAL

Se dice que el objeto de la filosofía de la religión son los fenómenos religiosos. Esto es lo que ha
tratado de captar la fenomenología de la religión en sus múltiples manifestaciones. Su
consideración nos lleva a las creencias y a los comportamientos de los seres humanos religiosos.
En cuanto a las creencias sobresalen los mitos y los dogmas, en cuanto a los comportamientos
sobresalen los ritos y las normas morales que surgen de la religión, en forma de iglesia. En
cuanto a las creencias, por supuesto que la principal es la creencia en Dios.
El desarrollo de una Filosofía de la Religión a partir de la búsqueda de un camino común de
análisis debe ser considerada como una reflexión crítica, sin duda abierta y rigurosa, para la
discusión, sentido en el cual es necesario mantener su estructura en forma puramente no
confesional en relación a los temas relacionados propiamente con la religión y por tanto es
menester comprometer el uso de la razón como búsqueda de respuesta que le den coherencia y
significado a la discusión. Por otra parte se puede señalar que los pensadores de este campo
reducen el discurso religioso al ámbito de un discurso moral, pues resulta muy difícil que los
hombres religiosos renuncien a la pretensión de la verdad de sus enunciados. Todas las religiones
con mayor o menor racionalidad, intentan ofrecer una explicación sobre el mundo del mismo
modo que otras explicaciones no religiosas; cada religión posee su particular código de
racionalidad.
Su relación con la Teología Fundamental es su gran preocupación por la búsqueda de la verdad,
de dar una respuesta bien definida a todas esas inquietudes del hombre sin llegar a confundirlo
más. La Teología fundamental Se preocupa en aclarar la verdad de la revelación cristiana, busca
la articulación de la "fe sobrenatural" y "la razón natural. Se puede llegar a una cierta
comprensión de la fe, en definitiva, la racionalidad de la fe.
Además, se centra en darle credibilidad de la Revelación cristiana tal como la propone la Iglesia
católica. Es decir que no se trata de hacer planteamientos vagos sobre lo que puede ser la
teología, sino que parte de lo que nos ha sido Revelado en esencia por Dios, en la que la Iglesia
es la transmisora fiel de dicha Revelación y además centra su atención en el sentido y vigencia
actual del creer en Jesucristo vivido en la iglesia, con la enseñanza de la Sagrada Escritura, de la
tradición viva en la Iglesia y en el magisterio auténtico, pero con esto también invita a la
profundización de la revelación con miras al conocimiento de la verdad de Dios.
Se busca que el hombre de hoy pueda entender que tiene la capacidad de conocer a Dios y que el
cristiano del nuevo milenio tiene que prepararse en la dinámica de dar respuestas concretas de su
fe pues así lo exige el mundo de hoy y por tanto la Iglesia tiene que estar a la vanguardia de la
misma.
 REALIDAD DE LA TEOLOGIA
FUNDAMENTAL
El ser humano actual se desenvuelve en un
ambiente caracterizado por un alto grado
de secularización “sacar lo religioso de los
actos de fe”, “el bien por el placer y el
bienestar en todos los ámbitos” y laicidad
“defensa y ejercicio de la separación entre
las sociedades civil y religiosa”.
La comprensión de la fe se ve como algo
opcional y quizás no necesaria para la
vivencia del día a día, sin embargo, es hoy
cuando ello es esencialmente necesario, en
un ambiente de ideologías pluralistas es
donde el positivismo exige que todo se
pruebe y se demuestre y es aquí donde la
teología fundamental pretende dar
respuesta al ¿Por qué creer?
No se trata de solo saber en qué se cree
sino ante todo porque se cree, y es ahí
donde nosotros como verdaderos cristianos
que somos, debemos estar preparados y
convencidos de que lo que creo es
verdadero, es real y estoy dispuesto a
defenderlo con argumentos propios
revelados por Dios en la Sagrada
Escrituras, como lo dice también la carta
magna “estad siempre dispuestos a dar
razón de la esperanza a quien os pida de
ella”. Esto es lo que pretende responder la
disciplina de la Teología Fundamental y en
donde su objeto principal es la Revelación,
seguida por la respuesta del hombre a la fe,
nace de la apologética clásica, pero
profundiza en el estudio aun mayor de los
llamados signos de la revelación; sin
adaptar una postura netamente defensiva.
Por medio de la credibilidad, la Revelación
no muestra que se trata de una realidad
diferente de la razón y sin embargo existe
para ser acogida por el hombre. La teología
fundamental da respuestas a las exigencias
del hombre al sentido existencial de su
vida.
FILOSOFIA DE LA RELIGION
la religión se funda en el reconocimiento
de valores y se valida por la fe de
experiencia religiosa personal. La religión
pues se basa en la experiencia y en el
pensamiento religioso. La teología, la
filosofía de la religión, es un intento
honesto de interpretar esa experiencia.
Estas creencias interpretativas pueden ser
justas o erróneas o una mezcla de verdad y
error.
Todo hombre busca por naturaleza saber y
el amor por la sabiduría, está como una
semilla en todo hombre y en todos los
hombres, pero requiere una serie de
condiciones para que germine: la
admiración, situaciones límites, etc. La
religión en cambio es una faceta
humana aún más originaria, pues si bien,
existen hombres que rechazan un
fundamento trascendente concreto, todos
requieren de algún fundamento para la
existencia.
Nadie escapa de aquellas preguntas más
fundamentales ante la muerte, el dolor,
ante el amor y la felicidad. Con todo, la
experiencia la filosófica profundiza la
experiencia religiosa, la hace más humana
al radicalizar las preguntas, la clarifica con
conceptos, la hace disponible para el
diálogo.
El conocimiento de Dios puede ser natural
o revelado, o incluso conjuntar ambas
cosas. Es natural el que sólo usa de la
razón, y revelado el que se recibe por luz
sobrenatural. El natural puede alcanzar
mucho, pero alcanza mucho más el
revelado, pues este puede aumentar e
incluso corregir a aquél.