Deshonestidad Académica: las problemática y sus vertientes

Este escrito tiene como objetivo comprender el plagio, las problemática y sus vertientes.

Primero se ofrece una definición general del concepto y como es acogida por algunos escritores.

Luego, expondré dos puntos de vista, un debate que ha surgido en los últimos años: el plagio,

problema moral o legal. También se explicará cómo las leyes están diseñadas para tratar

incidentes de plagio en Estados Unidos y en Puerto Rico, como en la Universidad. Por último se

incluye los métodos actuales utilizados para evitar la deshonestidad académica y algunos

programas de detección de plagio disponibles, que nos pueden ayudar a escribir trabajos

responsables.

Deshonestidad Académica

Por lo general, según la Real Academia Española, el plagio se define como la acción de

«copiar en lo sustancial obras ajenas, dándolas como propias». En el mundo de la Academia, el

plagio rápidamente se ha convertido en una gran preocupación para los docentes de todo el

mundo, ya que cada vez más, los trabajos presentados por los estudiantes está siendo plagiado.

Con acceso ilimitado, el internet se ha convertido en la fuente principal de plagio, desde donde la

mayoría de los estudiantes mediante el “copy & paste” copian su trabajo, sin dar crédito al autor

original ni son correctamente citados. ¿Pero cómo surgió esta práctica? Algunos autores y

autoras alegan que el origen del concepto fue en las artes, donde constantemente se le alentaba a

los estudiantes a copiar lo más fielmente posible el trabajo de sus profesores y profesoras (Kock,

N., Davison, R., 2003), entiendo que esto se deba a la creencia de alcanzar la perfección

imitando a otros. Como resultado, la academia se ha dedicado por años a matar la creatividad del

estudiantado por medio de la práctica de la imitación.

 La Academia ha apoyado ciegamente la práctica de matar la originalidad y la creatividad

estudiantes en sus trabajos, y de privarlos de una perspectiva personal sobre aspectos

humanísticos e intelectuales. Hoy se nos hace evidente que la práctica, se salió de las manos de

los académicos y académicas, con la llegada del internet, las computadoras y los celulares

inteligentes. Cruzó la línea de aprendizaje a lo inmoral e ilegal y se deben tomar medidas legales

para impedir que tenga lugar dentro de las instituciones académicas en el mundo. Es importante

recalcar que el plagio no se limita a la práctica de “copy & paste” de los escritos. El uso de la

idea, enfoque o metodología de alguien, como propia, también se considera entre los actos de

plagio.

Las leyes, de los Estados Unidos y de Puerto Rico, contra el plagio permiten a las

autoridades y administraciones de escuelas y colegios iniciar castigos, por medio de comités

disciplinarios internos, que van desde la suspensión hasta la expulsión y la revocación de títulos.

De igual forma, se establece un registro permanente en los archivos académicos del plagio

cometido, lo que conduce a la pérdida de credibilidad general y la integridad del individuo. Sin

embargo, hay algunas instituciones en las que se consideran que el plagio académico no es

necesariamente un delito legal, sino un acto inmoral o una mala conducta.

Como ejemplo local, en la Universidad se establece que el estudiante no deberá incurrir

en plagio. Todos los trabajos deben ser originales y de su autoría, además tiene que dar crédito a

todas las referencias utilizadas por medio del formato APA (American Psychology Association).

Cometer un acto de plagio en los cursos equivale a una falta ética. El/la estudiante que incurra

en la práctica de deshonestidad académica, obtendrá automáticamente una calificación de F en el

curso y depende de la gravedad del plagio, será llevará ante el comité de ética del Recinto en

donde se cometió la falta de la Universidad para discusión del caso.

 Sin embargo, si bien hay muchas herramientas de detección de plagio disponibles para

verificar el texto prestado, todavía no hay forma de detectar si las ideas han sido copiadas

(Clarke, R., 2006). Donde Internet ha facilitado el plagio del trabajo, también ha facilitado la

detección del plagio a medida que se desarrollan más y más “softwares” que comparan el trabajo

de uno palabra por palabra con textos populares y artículos /libros/ revistas, etc., en el internet.

La detección de plagio se puede a través de las bases de datos “online” que realizan un excelente

trabajo de detección de plagio: www.turitin.com, www.scanmyessay.com, y

www.plagiarismdetect.com.

Considero la deshonestidad académica como un fraude y ocasionalmente como un acto

de vagancia. Me siento muy en contra de la idea, aunque es importante mencionar que entiendo

el por qué algunos recurren a la práctica. La presión que es ejercida sobre los estudiantes por

parte de la Academia, hoy en día para producir trabajos robustos y de calidad. Sin embargo,

mediante la práctica he logrado entender que hacer referencia a un trabajo y otorgar los créditos

apropiados no consume mucho tiempo; de hecho, hace que los trabajos sean mucho más

profesional y sólidos.

Referencias:

Clark, R. (2006). Plagiarism by academics: More complex than it seems. Journal of the

Association for Information Systems,7(2), 91-121.

 N. K., & R. D. (2003). Dealing with Plagiarism in the Information Systems Research

Community: A Look at Factors That Drive Plagiarism and Ways to Address Them. MIS

Quarterly,27(4), 511-532.

Plagiar [Def. 1]. (n.d.). En Real Academia Española.