Seminário Internacional Sobre Pecuária Na Amazônia. V.1 - Palestras

Seminário Internacional para o Desenvolvimento Sustentável da Pecuária na Amazônia
Produtividade com qualidade ambiental
5
VISION Y PROSPECCIÓN DE LA PECUARIA EN EL PERU
Ing. Zoot. Oscar Gutiérrez Vega 1
I. Introducción
En el Perú, la actividad pecuaria es un sector importante porque involucra al 48.2% de las
unidades agropecuarias y 4 500 000 habitantes, sin embargo políticas inadecuadas y falta
de incentivos no han permitido el crecimiento de esta actividad. Existe una distribución
ganadera desproporcional entre las regiones en cuanto al potencial de recursos para
desarrollar esta actividad, así como también los índices productivos son heterogéneos.
Actualmente, la nueva política está visualizando el uso de áreas en la selva con aptitud
ganadera, incorporando sistemas agro-silvo-pastoriles, recuperando áreas intervenidas sub
utilizadas, con sistemas de explotación semi intensiva a intensiva y mejoramiento genético
del ganado para lograr una explotación rentable sostenible y competitiva con calidad
ambiental.
II. Visión
El Perú cuenta con productores pecuarios organizados, logrando producir en condiciones
competitivas y sostenibles en un entorno democrático y de igualdad de oportunidades.
III. Análisis de la situación actual
De las 25 168 146 cabezas de ganado existentes en el Perú, 4 900 000 corresponde a
ganado vacuno, de esta población el 20% se encuentra en la costa, el 73% en la sierra y el
7 % en la selva; referente a la calidad, solamente el 1.78% es ganado mejorado, el resto
son animales criollos y cruzados con Brown swiss y Holstein.
En cuanto al tamaño del hato, el 30 % de hogares tienen menos de 5 cabezas, 47% entre 6
a 19 , el 14% entre 20 a 49 y el 9% tiene más de 50 cabezas.
Referente a los pastos, tenemos 17 315 908 ha de los cuales el 57.9 % están degradados
con una soportabilidad de 0.46 UV/ha/año.
La producción de leche es de 1 115 045 T frente a una demanda de 3 161 640 T . En lo
referente a los precios ,en establo es de 0.25 centavos de Dólar/ L.
La producción de carne en la costa no es una actividad especializada, se usan los toros y
vacas de saca, de razas lecheras y animales criollos adquiridos en la sierra para
someterlos a engorde y faenarlos. En la selva esta actividad incluye a toros y vacas de
saca que son faenados en los camales locales y una pequeña proporción son
transportados a la costa para este mismo fin.
IV. Análisis situacional en la amazonía.
La ganadería en la amazonía peruana esta caracterizada por una explotación extensiva y semi
intensiva orientado al doble propósito, leche y carne. El área potencial para pasturas es de 5 718
000 há . de los cuales el 492 000 ha está ocupado con pasturas, que representa el 8.6 %. En cuanto
a la sanidad, la zona está libre de fiebre aftosa y mal de la vaca loca el cual abre posibilidades de
mercado; sin embargo, algunos elementos negativos como abigeato, inadecuada infraestructura y
terrorismo frenan el desarrollo. Desde el punto de vista ambiental, la ganadería está contribuyendo
al efecto invernadero y a la biodiversidad, razón por la cual el estado peruano esta trabajando en
sistemas silvopastoriles.
___________
1
Director de la EEA El Porvenir – Instituto Nacional de Investigación Agraria (INIA) Jr. Martínez de
Compagñón Nº 1015 Tarapoto San Martín, Peru.
Correo: elporv@fenix.inia.gob.pe
6
La mayor población de ganado vacuno se encuentra en el Dpto de San martín con el 70%; la
producción de leche se realiza en sistemas semi intensivos con ganado mestizo Bos indicus x Bos
taurus con promedios de 1 097 L. Camp/año, con ternero a pie y ordeño manual y una producción
total regional de 9 869 T/año.; la producción de carne está considerado como sub producto de la
producción de leche (beneficio de toretes y hembras de descarte), el beneficio de vacunos en selva
es aproximadamente 47 184 cabezas anuales representando el 6.3 % de la saca nacional.
V. Propuesta de desarrollo
La propuesta de desarrollo ganadero en el trópico ha considerado los componentes
siguientes:
Recuperación y utilización de áreas intervenidas, Investigación y Transferencia de
Tecnología, Comercialización, Organización empresarial, Promoción, Tipo de ganado
especializado para el trópico, Sanidad, Crédito y financiamiento.
Como estrategia se ha tomado las líneas de acción siguientes:
Mejoramiento de la alimentación del ganado, Mejoramiento genético, Sanidad, Mejora del
manejo de la leche post ordeño, Implementación de centros de acopio de leche,
Fortalecimiento de organizaciones de productores, Creación del forum de la competitividad
lechera, Desarrollo y manejo de la cadena de frío
VI. Logros Esperados
1. Productores pecuarios organizados, fortalecidos, competitivos, rentables y sostenibles,
económica, social y ambientalmente; en un entorno democrático y de igualdad de
oportunidades.
2. Promover el desarrollo de los productores pecuarios organizados en cadenas
productivas, en el marco de la cuenca como unidad de gestión de los recursos
naturales para lograr el desarrollo ganadero en términos de sostenibilidad económica,
social y ambiental
3. Organización de productores fortalecidos integradas bajo los enfoque de manejo de
las cuencas y cadenas productivas.
4. Continuar fomentando la innovación tecnológica y capacitación vinculada a la gestión
empresarial del productor pecuario facilitando la asistencia técnica.
5. Cadenas de comercialización eficientes, mediante la implementación de los centros de
acopio de leche y planta lechera.
6. Programa de mejoramiento genético mediante postas de IA. manejado a través de los
productores organizados haciendo uso continuo de paquetes tecnológicos como la IA
y la TE mejorando la calidad genética y productiva de los vientres
7. Formación de la asociación de criadores F1 Girolando a nivel regional.
8. Incrementar la producción y consumo de le leche en función al crecimiento de la
demanda interna así como reducir gradualmente el volumen de las importaciones de
lácteos.
9. Elevar la productividad del ganado lechero a nivel nacional de 6.4 a 12 L
promedio/vaca/día
10. Promover la industrialización del sector lechero
11. Desarrollo de zonas con potencialidad ganadera de doble propósito como Junín,
Ayacucho, San Martín, Puno, Ancash, entre otros.
12. Mejorar la producción y productividad de las crianzas familiares elevando los niveles
de ingresos del poblador rural.
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VISION ACTUAL Y PERSPECTIVA DE LA GANADERIA BOVINA EN COLOMBIA
La ganaderia bovina colombiana ha mostrado en la última década un gran dinamismo en

términos de la producción de carne y leche. Así mismo la actividad ganadera se ha convertido
en una alternativa importante de producción en zonas con una amplia vocación y tradición
agrícola por dificultades tecnológicas y de mercado; al mismo tiempo la incorporación de
manera permanente del ordeño en los hatos de cría, ha tenido impactos positivos en la
generación de empleo rural.
La ganadería bovina colombiana reporto para el año 2001 una población de 24.8 millones de
cabezas siendo la tercera en Latinoamérica después de Brasil (172 millones) y Argentina (57
millones). La población ganadera del país se distribuye en 849.000 predios que ocupan 36.7
millones de hectáreas equivalentes al 57% de la superficie agropecuaria nacional.
De la población bovina en Colombia el 57,2% se destinan a la producción de carne, el 3,3%

para leche y el 39,5% para doble propósito. El 63% de la población ganadera está compuesta
por hembras y el restante 37% por machos. El 39% de las hembras se encuentran en edad
productiva y el 15,5% de los machos está en edad de sacrificio.
Las regiones con mayor participación ganadera son la región norte con el 28,4% y la oriental
con el 27,6%. Aunque en todos los departamentos del país se evidencia producción ganadera,
los Departamentos con mayor población son en su orden, Córdoba, Antioquia, Casanare,
Caquetá, Cesar, Santander, Meta y Cundinamarca que concentran más del 60% del total.
En el contexto internacional, según la FAO, Colombia es el noveno productor mundial de

ganado vacuno con una participación del 2,1% sobre el total que asciende a más de 1.351
millones de cabezas de ganado; es el primer productor entre los países de la Comunidad
Andina, participando con el 46% de la subregión, y en el contexto americano es el quinto
productor contribuyendo con el 6,1%.
La dinámica de la producción ganadera de Colombia es importante teniendo en cuenta que la

tasa anual de crecimiento en la década fue de 0,7%, cifra que supera a la tasa mundial (0,4%),
a la de los países del NAFTA y la UE-15 y es equivalente a la registrada por los países del
hemisferio americano. No obstante, y pese a su participación entre los países andinos, ha
cedido terreno ante el incremento notorio que registran los países socios cuyas tasas de
incremento anual se acerca al 2%.
En el año 2001 la ganadería bovina genero 5.486 millones de litros de leche y 707.000
toneladas de carne provenientes del sacrificio de 3’543.000 animales.
La producción de leche ha sido creciente y sostenida durante los últimos 15 años, pasando de
tres millones de litros (L) en 1986, a 5,5 millones de litros en el año 2001; por otro lado, la
producción de carne en la ultima decada ha crecido a una tasa anual de tan sólo el 1%,
pasando de 677.290 Tm en 1991 a 701.448 Tm en el 2001.
En general la ganadería bovina participa con cerca del 5% del Producto Interno Bruto (PIB)
Nacional, 27% del PIB Agropecuario y el 60% del PIB Pecuario. El valor de la producción
bovina para el año 2000 se calculo en tres veces el valor de la caficultura colombiana, fue 2.6
veces superior a la avicultura, superior a cualquier cultivo permanente y superior al conjunto de
los cultivos transitorios (Minagricultura, 2000).
______________
Resumen de conferencia presentada por Jorge Medrano Leal de CORPOICA en el Seminario
Internacional Para o Desenvolvimiento Sustentavel Da Pecuaria Na Amazonia en Porto Velho, Brasil
(Julio 15 a 18 de 2003)
8
La cadena cárnica reporta para el año 1999 una producción bruta de Col$3.08 billones
sumados cada uno de sus principales componentes, esto es el valor de la producción de los
bovinos, la matanza de ganado, la producción de cueros y pieles, la fabricación de preparados
de carne y la fabricación de derivados del cuero.
La producción primaria ascendió en ese año a Col$1.89 billones que representa el 62% del
total de los productos estudiados de esta Cadena; le sigue en importancia la preparación de
carne con un monto de Col$502.337 millones que representa el 17% del total; los derivados del
cuero con una producción bruta de Col$475.773 millones que representa el 15%; y la matanza
de ganado mayor y los cueros y pieles que en conjunto suman Col$184.851 millones que
representan sumados el 6% de la producción bruta total.
Por otro lado la cadena láctea reporta para el mismo año una producción bruta de Col$2.77
billones de los cuales $1.38 billones corresponden al sector primario.
Dentro de las principales cadenas agroproductivas, la cadena productiva bovina (la suma de
los eslabones primario y agroindustriales) fue la que la mas genero empleo en el año 1999, con
1’423.319 empleos, que equivalen al 38% del total del empleo constituido por las principales
cadenas agroproductivas, seguida por el café (11%), la panela (6,8%), cereales-avicultura-
porcicultura (6,7%) y la hortofrutícola (5,2%).
En sisntesis, la producción bovina en Colombia muestra una tendencia hacia el futuro de

consolidación con base en la absorción de tecnología y en la orientación y especialización de
regiones hacia mercados nacionales e internacionales definidos. Los esfuerzos de la
Federación de Ganaderos de Colombia (FEDEGAN) en el area de salud y comercialización, los
avances en seguridad de las principales regiones ganaderas y la apertura de mercados
internacionales hacia el futuro hacen prever un gran dinamismo del subsector bovino.
No obstante los avances tecnológicos alcanzados, subsisten problemas relevantes, para los
cuales la Ciencia y la Tecnología puede generar respuestas económicas y ambientales viables,
dentro de una visión integral de desarrollo de las diferentes cadenas agroalimentarias
regionales que soportan la producción de carne y leche.
Para la solución de los problemas tecnológicos se creo El Plan de Modernización Tecnológica

de la Ganadería Bovina Colombiana como resultado de la concertación entre los productores
ganaderos, a través de su Gremio cúpula- FEDEGAN y de gremios y productores regionales,
Gobierno Nacional, a través del Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, Departamento
Nacional de Planeación y COLCIENCIAS, y la Corporación Colombiana de Investigación
Agropecuaria - CORPOICA .
El Plan promueve cerrar la brecha tradicional entre investigación y adopción de tecnología.

Esto se pretende lograr mediante un mayor contacto y relación interactiva entre investigadores
y productores, por medio de la investigación y transferencia de tecnología en fincas y
empresas ganaderas seleccionadas en las microregiones donde se ejecuta el Plan de
Modernización y con la creación y operación de una red de servicios especializados de apoyo a
la producción, la cual se fundamenta en la infraestructura física y los recursos humanos
localizados en los diferentes centros de investigación de CORPOICA.
De manera global el Plan contribuye a la modernización tecnológica de la ganadería bovina

Colombiana como un instrumento que permite mejorar la competitividad de la producción
nacional de carne y leche en los mercados domésticos e internacionales, a través de
programas de investigación, transferencia y mercadeo de tecnología, orientados a generar
alternativas tecnológicas que permitan optimizar la producción, mejorar la calidad de los
productos, incrementar la rentabilidad, la sostenibilidad, y mejorar la eficiencia y la calidad de la
gestión, en los diferentes niveles de la cadena productiva.
9
LA GANADERIA EN VENEZUELA
Urbano Diannelis
En nuestro país, la ganadería esta conformada por diversos sistemas de producción, que van
desde los de subsistencia hasta los más intensivos, en una superficie potencial de 27.259.197
ha, que representa aproximadamente el 30 % de la superficie del territorio nacional, siendo las
ganaderías extensivas y semi intensivas las que ocupan mayores porcentajes con valores de
38.4 y 24.1%, respectivamente. El subsector agrícola animal participa con un 51% del total de
la producción agrícola, correspondiendo al sector leche el 14% y al de bovinos el 34%. En los
últimos 12 años la producción lechera ha sufrido un descenso del 3.5%, siendo el volumen
anual promedio de 1.450.000 miles de litros, con un consumo per capita de 84 L/año, el cual,
es inferior a lo recomendado por la FAO (120 L/persona). Esta variable muestra una tendencia
a la baja aun mayor que la producción, debido al incremento constante de la población. Ante el
estancamiento de la producción nacional, el déficit se cubre con importaciones de leche en
polvo y derivados, las cuales se incrementaron desde 22% a 59% durante el periodo de 1990 al
2001 (Gráfico 1). La población bovina fue de13.056.023 cabezas, según el Censo Agrícola
realizado en 1998. Actualmente se reportan 11.600.473 cabezas, lo que implicaría una
disminución del 16%, comprometiendo la producción de carne y leche en los próximos años.
En relación a la producción de carne, se observa una ligera tendencia al aumento, por el
incremento de los pesos de las canales estimulada por la política de precios. Durante los
últimos 20 años el consumo por persona disminuyó de 23 a 16 kg/año, siendo los aumentos
de la producción menores con respecto al constante aumento de la población (Gráfico 2). Es
importante señalar que el sector cárnico se autoabastece y que las importaciones y
exportaciones son esporádicas, dependiendo de las políticas gubernamentales. La actividad
ganadera tiene una gran importancia socioeconómica, ya que genera empleos directos a nivel
de la producción primaria, beneficio, industrialización y comercialización e indirectos por los
servicios tales como: alimento concentrado, suplementos minerales, fertilizantes y otros,
además es una fuente de alimento proteico básico para la población. Asimismo, contribuye con
el 2,5% del Producto Interno Bruto, siendo este aporte significativo, ya que la economía está
notoriamente influenciada por la actividad petrolera y minera. En cuanto al impacto ambiental,
la ganadería ha permitido conservar una cobertura permanente que protege los suelos y por
otra parte ha sido la actividad alternativa después de la deforestación de grandes áreas de
bosques y para el uso de las sabanas naturales. También el empleo indiscriminado de grandes
cantidades de fertilizantes, biocidas y el mal manejo del recurso agua genera un impacto
negativo sobre el medio ambiente. En Venezuela los sistemas de producción se
caracterizan por presentar una baja productividad por animal y por superficie, siendo la
ganadería doble propósito la que aporta el 40% de la leche y el 56% de la carne, con un
manejo bajo pastoreo de gramíneas tropicales, con poca dependencia de insumos externos y
uso de razas adaptadas al medio provenientes de los cruces de Bos Taurus y Bus Indicus.
Para mejorar la producción nacional y revertir los índices de consumo, se requiere de
estrategias integradas al circuito agroalimentario, que contemple mayor aporte tecnológico,
financiero, infraestructura, seguridad jurídica y física que permita elevar la productividad,
rentabilidad y competitividad de la actividad pecuaria.
Para lograr este reto, se requiere transferir tecnología para mejorar el manejo de las pasturas e
incrementar la carga animal, fomentar programas para el mejoramiento genético de las razas
adaptadas a las condiciones tropicales, compañas sanitarias para la erradicación de las
principales enfermedades en los rebaños, especialmente la fiebre aftosa, desplazar las
importaciones estimulando la producción nacional, mejorar los sistemas de otorgamiento de
créditos tanto del estado como de la banca privada, elevar los servicios sanitarios rural,
educación y vialidad y riego, capacitar a los productores con nuevas tecnológicas para que
sean competitivos y se integren al mundo de la globalización.
_________________________
1. Instituto Nacional de Investigaciones Agrícolas. Av. Urdaneta Edif. MAT 2do piso.
E-mail: durbano@inia.gov.ve
10
Para lograr este reto, se requiere transferir tecnología para mejorar el manejo de las pasturas e
incrementar la carga animal, fomentar programas para el mejoramiento genético de las razas
adaptadas a las condiciones tropicales, compañas sanitarias para la erradicación de las
principales enfermedades en los rebaños, especialmente la fiebre aftosa, desplazar las
importaciones estimulando la producción nacional, mejorar los sistemas de otorgamiento de
créditos tanto del estado como de la banca privada, elevar los servicios sanitarios rural,
educación y vialidad y riego, capacitar a los productores con nuevas tecnológicas para que
sean competitivos y se integren al mundo de la globalización.
Sin embargo, en la ganadería existen algunas fortalezas, tales como: disponibilidad de tierras
de uso agrícola, infraestructuras existentes en las unidades de producción y en la
comercialización de los productos lácteos y cárnicos, disponibilidad de profesionales, bajo
costo de la mano de obra y abundantes recursos hídricos. Los productores organizados junto
con el sector oficial deben hacer los planes para el desarrollo de la ganadería en cada región.
PRODUCCIÓN DE LECHE PRODUCCIÓN DE CARNE

PRODUCCIÓ PRODUCCIÓ
AÑO CONSUMO AÑO CONSUMO
N N
1990 1497246,0 109,2 1990 381.911 18,67
1991 1506730,0 103 1991 337.218 15,7
1992 1602840,0 106,7 1992 365.253 17,81
1993 1713440,0 79,8 1993 393.534 18,92
1994 1385720,0 84,2 1994 351.174 15,96
1995 1370932,0 79,6 1995 315.567 14,61
1996 1405205,0 88,7 1996 349.551 15,69
1997 1431072,0 87,9 1997 415.242 18,59
1998 1484877,0 82,1 1998 407.601 17,69
1999 1351851,0 81,9 1999 391.070 16,64
2000 1414605,0 2000 428.755 18,14
2001 1400000,0 84 2001 365.000 17,63
2002 1450000,0 2002 396.958 15,76
11
Grafico 1: Producciòn y Consumo Per capita de Leche
500.000 25,00
450.000
400.000 20,00
350.000
kg/per/año
300.000 15,00
TM
250.000
200.000 10,00
150.000
100.000 5,00
50.000
0 0,00
91
92
93
94
95
96
97
98
99
00
01
02
19
19
19
19
19
19
19
19
19
20
20
20
Años
Producción de Carne (Ton.) Consumo Per Cáp. - Carne (Kg.Per.Año)
1800000,0 110
1600000,0 100
90
1400000,0
80
1200000,0 70
L/per/año
1000000,0 60
ML
800000,0 50
600000,0 40
30
400000,0
20
200000,0 10
,0 0
90
91
92
93
94
95
96
97
98
99
00
01
02
19
19
19
19
19
19
19
19
19
19
20
20
20
Años
PRODUCCIÓN CONSUMO
Grafico 2: Producciòn y Consumo Per capita de Carne
12
VISIÓN ACTUAL Y PROSPECTIVA DE LA GANADERÍA EN BOLIVIA

1
Wolfgang Rolon Roth
Introducción
Descripción en mapa de las cuencas hidrográficas de Bolivia.

Superficie de Cuenca Amazónica: 722.137 Km2.
Población de Cuenca Amazónica: 4’965.843 hab.
Densidad de población: 7 hab./Km2.
1. Producción, superficie, precios, análisis histórico y prospectivo.
Carne
Población Carne Población Porcentaje Área Precios Consumo
en $us/kg nal.
Carnes (No. (TM) C. C. Amazónica Km2 carne al prod. Kg/persona/
rojas Cabezas) Amazónica año
Bovinos 6,399,906 163,203 5,759,915 90% 250,000 1.08 18.0
Ovinos 8,038,933 14,190 2,411,680 30% - 1.00 0.5
Llamas 2,398,572 10,000 47,971 2% - 1.0 0.4
Alpacas 416,952 1,053 4,170 1% - 0.96 0.1
Porcinos 1,860,000 4,192 1,339,200 72% - 0.95 9.0
Carnes (aves y 105,387 - 95% - 0.95 y 1.5 14 y 1
blancas peces)
Fuentes: Instituto Nacional de Estadística 2003; Ministerio de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, 1999.
Consejo Nacional de Seguridad Alimentaria, 1999.
Evolución y tendencia de la producción de carne
Años Población nal. Población Producción Consumo Excedente

(No. Cabezas) C. Amazónica Carne ™ Carne ™ Carne ™
1993 5.011.599 4.510.439 132.194 128.000 4.194
1994 5.142.199 4.627.979 126.086 128.000 -1.914
1995 5.267.221 4.740.499 130.255 128.000 2.255
1996 5.423.278 4.880.950 135.882 136.000 -118
1997 5.569.371 5.012.434 139.603 136.000 3.603
1998 5.730.025 5.157.023 143.203 136.000 7.203
1999 5.898.940 5.309.046 147.250 144.000 3.250
2000 6.062.782 5.456.504 150.957 144.000 6.957
2001 6.226.343 5.603.709 155.253 144.000 11.253
2002 6.399.906 5.759.915 163.203 144.000 19.203
2003 6.572.703 5.915.433 167.609 144.000 23.609
2004 6.750.166 6.075.150 172.135 144.000 28.135
2005 6.932.421 6.239.179 176.783 152.000 24.783
2006 7.119.596 6.407.637 181.556 152.000 29.556
Fuentes: Instituto Nacional de Estadística 2003; Ministerio de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, 1999.
Consejo Nacional de Seguridad Alimentaria, 1999.
__________
1. Federación de Ganaderos de Beni y Pando – FEGABENI, Santa Cruz de la Sierra, Bolivia
13
Leche
Población nal.
Producción Producción en De Porcentaje Precios $us/lt Consumo nal.
C.
Nal. lt/año C. Amazónica ganado de leche Amazónica al productor lt/persona/año
250.000.000 212.500.000 320.000 cab. 85% 0,20 35,0
Fuente: Ministerio de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, 1999.
2. Importancia socioeconómica y ambiental.
Producto Interno Bruto nacional: 7.790 millones de dólares.

Aporte agropecuario al PIB nacional: 16,79 %. Segundo en importancia.
Población involucrada en agropecuaria: 80.000 familias.
Importancia ambiental:
En 43 % (107.000 Km2) de la superficie total (250.000 Km2) ganadería sin deforestación y en
reducida alteración de la biodiversidad.
Reconocimiento de territorios y de sus recursos naturales a los pueblos indígenas de la
Amazonía.
Superficie de áreas protegidas de 79.450 Km2. en la Amazonía.
3. Principales desafíos a nivel global para los próximos años.
Incremento de la productividad y competitividad (principales obstáculos: financiamiento,

seguridad jurídica, infraestructura e innovación tecnológica.
Institucionalización de entidades nacionales de supervisión y control.
Expansión de áreas libres de Fiebre Aftosa.
Producción de carne ecológica.
Aplicación de tecnologías de desarrollo sostenible a través de sistemas agroforestales y
manejo integral de cuencas.
Fortalecimiento de integración regional para ampliación de mercados.
4. Principales oportunidades de producción y comercio. Tendencias.
Incremento nacional e internacional (2 %) de demanda de carne bovina.

Destinos potenciales de carne boliviana a costos competitivos: Asia, Unión Europea,
países árabes, países de MERCOSUR y CAN.
Mercados para manufacturas de cuero.
5. Políticas nacionales de desarrollo económico, sostenible y social.
Proceso de cambios en producción y en comercialización de ganado y de carne por

desregulación de precios desde 1985 después de 30 años.
Plan General de Desarrollo Económico y Social (Planes de Desarrollo de Cuencas
Hidrográficas, de Ordenamiento Territorial y de Uso de Suelos).
Política Nacional de Desarrollo Agropecuario y Rural (Sistema Boliviano de Tecnología
Agropecuaria y Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria).
Planteamiento Nacional de Desarrollo Sostenible (Estrategia de Biodiversidad).
14
SERVIÇOS AMBIENTAIS E DESENVOLVIMENTO DA PECUÁRIA
Angelo Mansur Mendes

Vanda Gorete S. Rodrigues
1-Introdução
A reflexão do conceito de natureza é fundamental antes de discutir a relação entre

homem e recursos naturais. Casseti (1991) discutiu a definição de Smith e O’Keefe através da
teoria de Marx onde conclui que a história do homem é uma continuidade da história da
natureza. O aparecimento do homem no Pleistoceno, estimulou uma evolução das forças
produtivas que responde ao avanço na forma de apropriação e transformação da “primeira
natureza” (definida como aquela que precede a história humana), criando a “segunda
natureza”.
As leis que regulam o desenvolvimento da “segunda natureza” não são leis invariáveis e
universais, pois a história da humanidade está em curso e constantemente está se
desenvolvendo e transformando. Casseti (1991) denomina essas leis de transitórias da
sociedade que regulam a produção da natureza onde a natureza e o homem se integram e
interagem.
Entretanto, Cavalcanti (1996) proporciona através das leis da termodinâmica a
discussão da questão do desenvolvimento sustentável. Esse autor compara as situações de
1900 e 1995 onde a população quase quadriplicou (1,5 bilhões para 5,7 bilhões de habitantes)
e o sistema econômico dilatou-se quase 37 vezes, passando de 0,7 trilhões para 22 trilhões de
dólares. E considerando a natureza, ecossistema global finito o que se conclui o impacto
ocorrido e ainda deva estar ocorrendo como foi bem ilustrado com a publicação editada por
Turner II et al. (1990).
Através das reflexões de Georgescu-Roegen (1971) conclui que o processo econômico
como um prolongamento de fenômenos da biofísica. Utilizando a caracterização do processo
econômico como a realização de trabalho no sentido físico, pois é a transformação de bens e
serviços em outros bens e serviços. E a termodinâmica como propriedade da físico-química
dos processos naturais que estuda as transformações de energia.
A primeira lei da termodinâmica é conhecida como lei da conversação de energia onde
estabelece que a energia total existente é invariável, ou seja, a energia pode ser transformada
e nunca criada. Portanto a energia existente no Planeta é finita.
A segunda lei também denominada de entropia que foi chamada como lei suprema da
natureza por Einstein que pode ser resumida como uma complementação da primeira lei, pois
embora a energia seja constante, essa energia perde sua qualidade de forma continua e
inexorável. Assim à medida que organizamos um sistema, bagunçamos. a vizinhança, o que
tiver ao nosso redor. Por isso, a entropia é considerada como medidora de degradação
energética que indica a tendência que um determinado evento tende a passar de ordem para a
desordem. Por exemplo, para preparar essa palestra tivemos que nos organizar o sistema (a
palestra) causamos uma bagunça nas nossas vizinhanças como nossas mesas, estantes,
incomodando alguns dos nossos colegas entre outras.
Esse mesmo princípio pode ser aplicado quando procuramos desenvolver uma
atividade agropecuária numa região de floresta tropical como é o caso da floresta Amazônica.
A conversão da floresta em agrossistema promove a organização do sistema (agrossistema) e
prejudicando a vizinhança, ou seja, o meio ambiente.
O objetivo dessa palestra é discutir a importância da questão de economia ecológica
através dos serviços ambientais para a região Amazônia comparando esses serviços entre a
oferta da floresta e de pastagem. Essa discussão procura fornecer subsídio para responder a
pergunta formulada pela manchete do artigo do Dr. Waldo Espinoza, secretário executivo do
Procitrópicos/IICA- “ A pecuária na Amazônia Brasileira: Heroína ou vilã da sustentabilidade”.
Finalizando, a apresentação da proposta inovadora a qual associa os serviços ambientais com
o desenvolvimento, o Proambiente.
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2- Crescimento e Desenvolvimento Sustentável
A conceituação de crescimento e desenvolvimento tem provocado muita confusão o que

tem dado a falsa idéia de serem sinônimos. Por isso, a diferenciação dos seus significados
torna-se importante para entender à preocupação econômica, social e ambiental. Rocha e
Bacha (2000) definiram crescimento como o aumento em quantidade e desenvolvimento como
melhoria de qualidade de vida. Outros pesquisadores têm apresentados registrados essa
distinção, como Fearnside (1997) que caracterizou a presença de limite para conceituar
crescimento e desenvolvimento como crescimento sem fim, sem limite.
Associando esse conceito de crescimento e desenvolvimento com as duas alternativas
agrícolas para atender a demanda da crescente da população, pode-se relacionar o
crescimento com a incorporação de novas áreas para a produção agropecuária devido a
disponibilidade de outras áreas novas é finita ou seja, tem limite. Enquanto que o
desenvolvimento com o aumento da produtividade nas áreas já utilizadas.
Campanhola et al. (1996) destacaram que o aumento da produtividade é possível
através da adoção de novas tecnologias e da intensificação dos processos de produção
agrícola, o que proporciona o incremento no uso de insumos e máquinas. Esses processos
podem promover o aumento da entropia por isso o termo desenvolvimento é acompanhado de
outra palavra, sustentável onde procura atrelar ao desenvolvimento o conceito de
sustentabilidade. Assim, desenvolvimento sustentável é aquele que atende às necessidades
atuais da população sem limitar as possibilidades de consumo das gerações futuras (Rocha e
Bacha, 2000).
Stahel (1995) alerta que desenvolvimento sustentável deve incluir um conjunto de
multidimensional e multifacetado que compõe o desenvolvimento com seus aspectos políticos,
sociais, culturais e físicos, além dos materiais e econômicos. Considerando que a
sustentabilidade do todo só pode ser possível na sustentabilidade conjunta de suas partes.
A adoção desse conceito de desenvolvimento sustentável permite conciliar os objetivos
do desenvolvimento econômico, questões sociais e proteção ambiental. Esse modelo de
desenvolvimento recebeu maior destaque a partir da Eco-Rio em 1991, onde possibilitou
discussão entre os blocos de países ricos e de países pobres, pois não há como imaginar num
desenvolvimento que possa ser ambientalmente sustentável, se não contiver uma solução para
os graves desequilíbrios provocados.
O zoneamento sócio-econômico tem sido um pré-requisito para tornar compatível o
desenvolvimento sustentável diante das particularidades existentes nas diferentes regiões
brasileiras. Pois permite dividir o espaço geográfico em subáreas denominadas de zonas de
intervenção de acordo com suas similaridades e contrastes de seus atributos biofísicos ou
ecológicos (fauna, flora, solo, clima, relevo, geologia, hidrografia e etc) e sócio-econômicos.
Na Amazônia, Becker (1993) identificou três concepções de desenvolvimento
sustentável divergentes através da literatura. A primeira, o desenvolvimento sustentável é
baseado nos mecanismos que conservem o ambiente e incentivem a participação das
comunidades locais, especialmente dos pequenos produtores, por meio diversos programas de
utilização da terra. A segunda, esse tipo de desenvolvimento requer que os estoques de capital
natural (estrutura do solo, atmosfera, biomassa de plantas, animais entre outros que compõem
o ecossistema) permaneçam constantes, com o intuito de atender aos objetivos das gerações
futuras, não permitindo o uso dessa região para fins agrícolas.
A terceira, a última concepção é ecodesenvolvimento que sugere a utilização da
biomassa como geradora do desenvolvimento sustentável. O que se pretende é incentivar a
substituição parcial da floresta, sem queima por plantações racionais e a utilização racional de
parcela da floresta pelo procedimento local obter diversos produtos. Serrão (1995) apresenta
para essa concepção as possibilidades para o desenvolvimento da agricultura sustentável para
a Amazônia brasileira. Através dessa concepção será discutida, embora também apresentar
parte comum às demais concepções citadas.
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3- Serviços Ambientais
O termo serviço ambiental pode soar estranho, pois há uma associação entre a
natureza e o homem o que anteriormente, era considera incoerente. Entretanto, o avanço da
ciência permitiu entender o papel da natureza na vida da espécie humana e vice-versa. Esse
termo foi chamado por alguns pesquisadores como serviço do ecossitema e por outros como
serviço da floresta. A união dessas duas palavras, serviço e ambiente, expressa o nosso ganho
de consciência da função da natureza e o esforço que temos para entendê-la e conservá-la
para manter o equilíbrio no planeta.
O significado é conjunto de benéficos gerados por ecossistemas naturais ou cultivados
que, freqüentemente, não tem valor de mercado(Ambiente Brasil, 2003). Benefícios esses
imprescindíveis aos seres vivos, especialmente para a espécie humana como: biodiversidade
(recursos genéticos), regulação hídrica, manutenção das condições climáticas, matérias-
primas, recreação, qualidade do ar, entre outras.
Importante destacar que anteriormente os serviços ambientais foi denominado de
serviços da floresta que logo foi renomeado como serviço do ecossistema ou serviços
ecossistêmicos que por alguns estudiosos mantém esse nome. A alteração para serviço
ambiente foi a inclusão dos impactos positivos que o agrossistema pode oferecer.
Fearnside (1997) alerta que os serviços ambientais da floresta é superior as vendas de
mercadorias materiais oriundas da floresta conforme o enfoque que é dado ao
desenvolvimento sustentável. Indicando que os serviços ambientais. Portanto, indica que os
serviços ambientais tornam-se uma estratégia para o desenvolvimento sustentável da
Amazônia.
A importância dos serviços ambientais para a Amazônia tem sido destacada conforme
Fearnside (1997), e Portela e Rademacher (2001). Aproveitando os trabalhos desses autores
para discutir separadamente os três principais serviços ambientais que são: biodiversidade,
regulação climática e ciclo hidrológico.
3.1- Biodiversidade
A manutenção da biodiversidade tem importância local como global, seja devido à

existência de estoque de materiais vegetais e animais como também presença de compostos
químicos úteis de plantas e animais. Portanto a preservação da diversidade de espécies
permite proteção à geração futura. Por isso representa um dos serviços ambientais mais
difíceis de avaliar, pois não se pode estabelecer preço para a vida humana nem para
população atual e muito menos para a futura população. Essa relação entre a biodiversidade e
população pode ser mais observada mais direta como nas comunidades tradicionais como
população indígenas, quilombolas e etc.
Fearnside (1997) discute a importância da biodiversidade e proporciona uma frase que
nos obriga a refletir, “ biodiversidade não é substituível e nem permutável”. Reforça o slogan
utilizado em campanha de prevenção da fauna e flora, a “extinção é para sempre”. Embora
existe o reconhecimento do valor da diversidade, porém seu valor é pobremente quantificado.
A região tropical tem merecido destaque na literatura como apresenta Wilson (1991)
onde registra a pouca área de floresta tropical, 6% da superfície da Terra, entretanto detém
metade de todas as espécies existente no planeta. Considerando que a floresta Amazônia é a
maior área de floresta tropical, então permite concluir a importância que representa a
manutenção dos ecossistemas da Amazônia.
A maior causa da perda da biodiversidade na Amazônia é atribuída ao desmatamento,
a conversão de florestas em agrossistemas simples por apresentar poucas espécies. Nepstad
et al. (1999) apresenta um mapa de vegetação que informa a variabilidade existe na Amazônia
e ainda discute o “Arco do Desmatamento” que evidência a ação antrópica mais intensiva na
transição entre cerrado e floresta. Provavelmente, nessa região do Arco de Desmatamento
represente a maior densidade de espécies ameaçada de extinção. Especialmente
considerando as espécies considerada edêmica, ou seja, espécies que ocorrem somente numa
determinada área. Portela e Rademacher (2001) comentam a estimativa de perda de espécies
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devido ao desmatamento conforme a literatura existente que se 50% da Amazônia for

desmatada corresponderá perda na ordem de 33% das espécies existentes.
A valorização desse serviço ambiental tem levado apenas o valor de produto medicinal
conforme apontam Portela e Rademacher (2001). Entretanto, comparando os valores de
Cartwrigth (1985) e Costanza et al. (1997), observa-se que houve um aumento expressivo no
valor, passando de US$ 20 /ha/ano para US$ 41/ha/ano.
3.2- Mudança climática
O serviço ambiental mais discutido devido ao protocolo de Quioto que tem

proporcionado conflito não apenas entre os Países mais ricos e os mais pobres, mas entre si
também, pois mudança climática é um problema que atinge a todos. Embora a importância dos
Países Tropicais nesse serviço é indiscutível conforme evidência Machado (2002) através do
estoque global de carbono na vegetação e no solo a profundidade de 1 metro utilizando dados
de literatura. Indicando que o solo representa um importante compartimento para o sequestro
de carbono tanto em área de floresta como também em cerrados representando
respectivamente, 216 G t de carbono e 264 G t de carbono.
Considerando a importância dos solos tropicais e os dados apresentado por Moraes et
al. (1995) sobre os solos da Bacia Amazônica Brasileira obtidos através dos dados de carbono
orgânico e densidade aparente existentes nos levantamentos realizados pelo projeto
RADAMBRASIL. Esses autores estimaram o estoque de carbono de 47 Pg de carbono nos
solos a 1 metro de profundidade o que corresponde a 3% do estimado para os solos do mundo.
O fato importante desse trabalho de Moraes et al. (1995) além dessa estimativa é a
observação que 45% desse carbono estocado no solo da Bacia Amazônica é na camada de 0-
20 centímetros, o que significa o risco da vulnerabilidade de perda de carbono com o uso
desse solo, pois coloca em risco de perda quase a metade do estoque de carbono.
Entretanto, Rodrigues et al. (2000) estudaram o estoque de carbono do solo em
diferentes sistemas de uso da terra em Rondônia e registraram aumento de carbono orgânico
em sistemas pastoris, em pastagem manejada como pastagem tradicionais. Cerri et al. (1999)
alertam sobre a diversidade dos aspectos biofísicos o que dificulta a estimativa do estoque de
carbono nos solos da Amazônia Brasileira. Essa dificuldade pode ser ilustrada com os dados
apresentados por Costa et al. (1998) indicando que houve uma redução no estoque de carbono
em pastagem com mais de 4 anos ao contrário observado por Rodrigues (2000) em pastagem
de 8 anos. Além dessa divergência sobre o impacto da pastagem podendo ser positivo com
aumento da estocagem de carbono como também negativo com a redução da estocagem de
carbono, Koutika et al. (2000) acrescentam a alteração da qualidade da matéria orgânica, ou
seja, embora possa aumentar o sequestro de carbono pode não significar em melhoria na
qualidade da matéria orgânica do solo onde outros fatores como as condições climáticas e
propriedades dos solos podem influenciar tanto no impacto em ser positivo como negativo
como também na qualidade da matéria orgânica.
A diversidade de solo é ilustrada através do mapa apresentado por Lepsch (2002) onde
os latossolos e argissolos são as classes de solos mais comuns na Bacia Amazônica e esses
solos conforme os dados de Moraes et al. (1995) apresentam os valores mais altos de
estocagem de carbono. Essas situação associadas com as condições climáticas que permitem
a alta produção de fitomassa, a região tropical representa um dos mais importante estratégia
para o sequestro de carbono, a redução de gás carbono na atmosfera que é considerado um
dos principais gases do efeito estufa.
A avaliação do serviço ambiental na regulação climática conforme apresenta Portela e
Rademacher (2001) é na capacidade de estocagem de carbono. Considerando os valores
obtidos pelo trabalho de Constanza et al. (2001) o serviço ambiental da floresta (referência) foi
de US$ 223.00 /ha/ano enquanto que a pastagem foi US$ 11.00 /ha/ano. Portela e
Rademacher (2001) aplicaram nos dados existentes na Amazônia Brasileira o modelo de uso
através de programação na linguagem STELLA onde permite similar num período de 100 anos,
a ocorrência de 47% de área desmatada resultará numa perda de 42% da sua capacidade de
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estocar carbono. Essa modelagem é importante para descrever a dinâmica e exibir os

processos que degradação dos serviços ambientais no tempo.
3.3- Ciclo hidrológico
O efeito dominó que inicia com a retirada da cobertura vegetal geralmente, finaliza no
ciclo hidrológico seja na redução na disponibilidade de água como na própria qualidade da
água. O serviço ambiental desse tipo deve ser considerado através da apresentação do ciclo
da água que Lepsch (2002) identificando os processos ou operações de evaporação,
transpiração, precipitação e transporte superficial e subterrâneo.
Embora o nosso planeta, Terra seja considerado planeta água por dois terço da sua
superfície é formado por água. Existe um grande paradoxo que é a quantidade de água doce
superficial é de 0,01% onde a água salgada corresponde com 97,4%. Portanto, a importância
da Bacia Amazônica nesse tipo de serviço ambiental tem merecido destaque no mundo inteiro
como fonte de água doce.
A contribuição da evapotranspiração na formação de chuva varia de 56 % (Molion,
1975) e 48% (Marques et al., 1977) por isso a hidrologia e a vegetação estão relacionadas na
Bacia Amazônica. Portanto, perda na vegetação proporciona redução na evapotranspiração e
consequentemente redução na precipitação.
Outro aspecto importante para destacar esse serviço ambiental, é a erosão.
Considerando a intensidade da chuva na região Amazônica, onde a erodibilidade é alta
conforme mostra os dados de Fearnside (1989) e Lavelle (1987). O processo de erosão pode
ser dividido em três fase: desagregação, transporte e deposição. Por isso, é importante lembrar
que a erosão não significa apenas a degradação do solo, mas o assoreamento dos mananciais
hídricos. Então o mapa de suscetibilidade dos solos à erosão apresentado no Geo-Brasil
(2002) deve ser corrigido por não considerar o etapa de deposição.
A valorização dada a perda do solo tem sido considerado a perda de nutrientes,
entretanto a reposição desses não recuperar o solo. Portela e Rademacher (2001)
consideraram os valores desse serviço ambiental (redução da perda de solo) de US$ 245.00 e
US$ 61.00 para floresta e pastagem, respectivamente. Essas pesquisadoras utilizaram
programa de modelagem e obtiveram os seguintes dados de uso da terra da área total
desmatada: 5% de cultivos agrícolas; 2% de capoeira oriunda de cultivos agrícolas; 46% de
pastagem produtiva; 4% de pastagem degradada e 40% de capoeira oriunda de pastagem.
Nesse serviço ambiental fica evidente que a pecuária pode ser heroina, especialmente
consorciada com árvores, sistemas silvopastoris e respeitando as leis do códigos florestais,
pois possibilita menos impactos negativos na biodiversidade e ciclo hidrológico e ainda
impactos positivos no sequestro de carbono.
4- Proambiente
O Programa de Desenvolvimento Socioambiental da Produção Familiar Rural da

Amazônia (Proambiente), uma proposta das FETAG’s da Amazônia e tem como objetivo:
apoiar a implantação e o desenvolvimento de sistemas de produção sustentáveis compostos
de atividades agropecuárias, agroflorestais, extrativistas de manejo florestal e de pesca
artesanal que sejam capazes de produzir serviços ambientais, melhorar a qualidade de vida e
dar sustentação econômica às famílias envolvidas.
Os serviços ambientais que contempla esse programa são: redução de desmatamento;
absorção de carbono atmosférico (sequestro de carbono); recuperação das funções
hidrológicas dos ecossistemas; conservação e preservação da biodiversidade; conservação de
solo e redução da inflamabilidade da pastagem (risco de fogo).
O produtor rural receberá o recurso para a sua produção através Banco Operador, e
conforma suas condições sociais terá que pagar ao Banco todo o montante financiado ,
descontar 20% ou descontar 40% do financiamento.
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As fontes para esse fundo ambiental são divididas em fixas (Ministério do Meio
Ambiente e Banco Nacional do Desenvolvimento Social e Econômico) e complementares
(Agencia Nacional de Água, entre outras).
Essa proposta é inovadora porque incluir os serviços ambientais e sociais associados a
sistema produtivo, conforme apresenta Ferraz (2003).
5- Referência Bibliográfica
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21
CARACTERÍSTICAS DA CADEIA PECUÁRIA BOVINA DE CORTE

Esther Guimarães Cardoso1
Embora a carne suína seja a mais consumida no mundo, seguido pela bovina, a
produção desta última se dá na maioria dos países e, no Brasil, há fazendas de criação em
todos os estados. Desta forma a discussão sobre a cadeia de produção da carne bovina não
pode deixar de levar em conta o contexto nacional e mundial.
O rebanho bovino brasileiro tem cerca de 170 milhões de cabeças, numa relação de 1:1
para com a população humana, o que caracteriza o país como, pelo menos, auto-suficiente no
abastecimento de carne bovina. Oitenta por cento destes animais pertencem a rebanhos
especializados para o corte. Anualmente são produzidas 7 milhões de toneladas de equivalente
carcaça, sendo esta a segunda produção mundial. O Brasil é o terceiro maior exportador (atrás
apenas da Austrália e EUA) de carne, vendendo para cerca de 108 países. As exportações
ultrapassam 500 mil toneladas de equivalente carcaça/ano (há 94 frigoríficos autorizados à
exportação), gerando divisas da ordem de 800 milhões de dólares.
No Brasil a pecuária bovina ocupa cerca de 180 milhões de hectares de pastagem, com
1,8 milhões de propriedades rurais, envolvendo 7 milhões de trabalhadores rurais . Anualmente
são abatidos 30 milhões de bovinos e o couro produzido, trabalhado em 560 curtumes. A
pecuária bovina de corte produz matéria prima para 4.150 indústrias de calçados, envolve 100
indústrias de armazenagem, 700 indústrias de carne e derivados e 55.000 estabelecimentos no
comércio varejista de carnes. A matéria prima boi movimenta mais de US$ 30 bilhões por ano.
Para a produção de bovinos o Brasil dispõe de tecnologia avançada e em contínuo
desenvolvimento, adequadas a realidade do país. Reflexo disso é o aumento que vem sendo
observado na taxa de abate de novilhos, com a conseqüente diminuição do abate de bois
erados. Com isso, nos últimos dez anos a taxa de desfrute do rebanho passou de 18 a 21 por
cento.
A carne bovina é a mais consumida no Brasil, seguido de perto pela carne de aves. O
brasileiro aprecia especialmente a carne bovina. Seu consumo é da ordem de
37kg/habitante/ano, perfazendo 92% do total produzido. Tem-se então que o grande mercado
da carne bovina é o interno e que deste mercado depende a sustentabilidade da pecuária de
corte nacional. Entretanto, a demanda interna é limitada pela renda da maioria da população e
assim esta também compõe um dos importantes fatores para o crescimento da atividade no
país. Sempre que há um aumento na renda real do trabalhador, há, a médio prazo, um relativo
aumento no consumo de carne bovina, especialmente de traseiro.
Fazendo, como exemplo, o comparativo entre o preço do quilo de carne bovina na
França (o contra filé a US$ 15,50 e o músculo a US$ 5,86) e no Brasil (a US$ 4,43 e US$ 1,90,
respectivamente) e o número de horas de trabalho necessárias para adquiri-los, tendo por base
o salário mínimo dos dois países, tem-se que, no caso do contrafilé, são preciso 10 horas de
trabalho para o brasileiro adquiri-lo contra cerca de duas horas e meia do trabalhador francês.
Para adquirir um quilo de músculo, o brasileiro precisa de quatro horas de trabalho contra
menos de uma hora de um trabalhador francês. Isto também leva a que o preço de alimentos
alternativos à carne bovina tenha importância na demanda nacional pelo produto. Para 2010,
supondo uma baixa taxa de crescimento do PIB no período (2%), é estimado um consumo da
ordem de 40 kg de carne bovina/habitante/ano. (INSTITUTO EUVALDO LODI, 2000). Com
relação ao mercado externo as perspectivas são promissoras, pois o custo de produção da
carne brasileira é mais baixo comparativamente a outros países produtores ou exportadores e
estimativas projetam para 2010 um crescimento de 40% nas exportações brasileiras, tendo
como base o ano de 1999.
______________
1. Engª.-Agrª., M.Sc., CREA Nº 42670/D-Visto 672/MS, EMBRAPA- Gado de Corte, Caixa Postal 154,
CEP 79002-970 Campo Grande, MS. E-mail: ecardoso@cnpgc.embrapa.br
22
Particularmente na Amazônia brasileira, a pecuária enfrenta desafios, quer

tecnológicos/sanitários, quer de imagem. O primeiro desafio é o controle da febre aftosa nos
estados do Circuito Pecuário Norte. Rondônia, integrante deste circuito, acaba de vencê-lo e
este mês recebeu o certificado de zona livre de febre aftosa com vacinação. Mato Grosso e
Tocantins (parte), pertencentes ao Circuito Pecuário Centro Oeste, já tem declaração de livres
de aftosa com vacinação. Acre, Amazonas, Amapá, Roraima e a maior parte do Pará ainda não
atingiram este estágio. Esta é uma das razões para o menor preço pago pela arroba do boi
gordo na região norte, comparativamente ao centro sul do país. Outra razão é a localização
das plantas frigoríficas e a distância destas dos centros de produção de crescimento recente
como é o caso da Amazônia. Ambas as situações tendem a ser passageiras e a Amazônia
poderá vir a ser o grande pólo brasileiro de produção bovina num futuro próximo.
Ainda outros pontos merecem atenção: a imagem que a sociedade guarda do passado,
ligando o desflorestamento indiscriminado na região e sua ligação ao comércio irregular de
madeira e à instalação de fazendas de pecuária. Hoje a pecuária amazônica está crescendo
com base na intensificação dos sistemas de produção, não podendo mais ser responsabilizada
pelos danos à conservação da mata amazônica. Contudo, a introdução da cultura da soja na
Amazônia, com o alto retorno/ha que oferece pode ser um retrocesso nessa nova imagem se
deslocar a pecuária de suas áreas de produção para novos espaços na floresta.
O clima favorece a Amazônia, comparativamente às outras áreas de criação de bovinos
do Brasil: sem estação seca, ou com um período seco muito menor, e alta insolação, leva
vantagem na disponibilidade de pastagens e na possibilidade de fornecimento regular de bois
para abate, criados exclusivamente pasto, com alto apelo mercadológico.
Na Amazônia, assim como no resto do Brasil, a cadeia produtiva da carne, precisa
ainda, e caminha para isso, fornecer animais para abate com regularidade, manter um padrão
de cortes e apresentação dos produtos, criar e diversificar produtos à base de carne bovina,
valorizar as exigências do consumidor final por informação e segurança alimentar, identificar
nichos de mercado e atender às exigências de rastreamento e certificação do mercado
europeu (e assim consolidar-se como exportador). Nesta linha, já foi publicado pela Embrapa
Gado de Corte o documento “Boas Práticas de Produção de Bovinos de Corte” e, junto ao
Ministério da Agricultura da Pecuária e do Abastecimento, cadastradas várias empresas
certificadoras para atendimento ao Sistema Brasileiro de Identificação e Certificação de Origem
Bovina e Bubalina, SISBOV.
Bibliografia citada
INSTITUTO EUVALDO LODI. Núcleo Central, CONFEDERAÇÃO NACIONAL DA AGRICULTURA,

SEBRAE NACIONAL; Estudo sobre a eficiência econômica e competitiva da cadeia agroindustrial da
pecuária de corte no Brasil. Brasília, 2000. 398 p.
23
A PECUÁRIA E O COMÉRCIO REGIONAL E INTERNACIONAL:

BARREIRAS NÃO ALFANDEGÁRIAS
Josélio de Andrade Moura1
A intensificação do comércio internacional, motivado por sistemas de comunicação,

incluindo a internet, cada vez mais eficazes, navios maiores e mais velozes encurtando o
tempo nas rotas, aviões mais modernos diminuindo distâncias, torna o mundo cada vez menor,
aproximando as pessoas e mercados. Com a criação da Organização Mundial do Comércio –
OMC e a introdução da China no mercado internacional, o comércio mundial duplicou de
tamanho e novos desafios e oportunidades surgiram.
A criação da OMC estabeleceu novas regras para o intercâmbio de produtos e serviços.
Na área animal e seus produtos derivados, subprodutos e resíduos de valor econômico, foram
reafirmados os princípios emanados da OIE – Organização Internacional de Epizootias e do
Codex Alimentarius, como instrumentos de referências para os relacionamentos entre os
países.
I. ÂMBITO DA SANIDADE ANIMAL
A Sanidade Animal, em tempos pretéritos, estava reduzida a um simples item do

sistema produtivo. Às vezes era considerada como um fator impeditivo na melhoria dos índices
de produtividade.
Na realidade a Sanidade Animal influi grandemente nas questões ambientais, de
segurança, saúde pública, turismo, competitividade, comércio, economia e política.
A história recente está cheia de exemplos, como os casos da dioxina na Bélgica, onde o
Primeiro Ministro e o Ministro da Agricultura foram obrigados à renuncia; o caso da BSE no
Reino Unido em que o Partido Conservador de John Mayor perdeu a maioria no Parlamento e
ele o Cargo de Primeiro Ministro e o Grummer o cargo de Ministro da Agricultura. Também na
Inglaterra o turismo sofreu perdas de 120 milhões de Libras por semana em função dos
episódios de febre aftosa, cujo sacrifício e cremação dos animais afetados e de contato
ocasionou danos relevantes ao equilíbrio ecológico nas áreas de foco.
A sanidade animal, se não estabelecidas regras claras, pode servir como barreira a
disputas comerciais outras, dentre elas a tão conhecida questão dos aviões (Bombardier x
Embraer) sobejamente divulgada pela mídia.
REFLEXOS NO COMÉRCIO INTERNACIONAL
A produção mundial de carnes, que em 1950 era de 44 milhões de toneladas, passou

para 217 no final do século, expandindo 2 vezes mais do que a taxa de crescimento
populacional. A previsão é que a produção mundial chegue a 270 milhões de toneladas até o
ano de 2050. A produção de leite tem crescido em igual proporção. No caso brasileiro, a
produção de leite na década de 70 era de 6 bilhões de litros, saltando para quase 20 bilhões no
ano 2000.
Quanto a produção mundial de carnes, houve uma significativa mudança no padrão
produtivo. Muito embora a produção de carne bovina tenha saltado de 19 para 51 milhões de
toneladas entre os anos de 1950 e 2000; a carne suína tirou-lhe o primeiro lugar saltando de 16
para 88 milhões de toneladas, seguida pela carne de aves, que passou de 4 milhões de
toneladas (4º lugar) para 62 milhões de toneladas. A previsão é que a produção mundial de
carne de aves atinja o 1º lugar no ano de 2050.
______________
1. Coordenador de Sanidade Agropecuária do Instituto Interamericano de Cooperação para a Agricultura,
Presidente do Comitê Brasileiro da Associação Mundial de Veterinária, Diretor da Sociedade Brasileira
de Medicina Veterinária e membro da Academia Baiana de Medicina Veterinária. Foi Secretário Nacional
de Defesa Agropecuária, Assessor de Ministro de Estado da Agricultura e Vice -Presidente da
Associação Mundial de Veterinária.
24
A Austrália, tradicional competidor do mercado mundial, teve um decréscimo de 5% na

produção. A Rússia teve um decréscimo de 9% na sua produção. Os últimos episódios de
febre aftosa ocorridos na Argentina e no Uruguai excluíram esses países, temporariamente, do
mercado internacional. Tais fatos poderiam beneficiar o Brasil se existisse um eficiente sistema
de marketing.
O MERCOSUL Ampliado tem uma população bovina em torno de 250 milhões de
cabeças, constituindo-se assim no maior rebanho comercial. Os Estados Unidos da América e
a Austrália, no entanto, detém cada um 15% do mercado exterior de carnes, o que coloca o
Brasil em terceiro lugar com 7,9% das exportações. A Argentina está em 7º lugar com 5,0% do
mercado. Um esforço maior e conjunto dos países do MERCOSUL pode melhorar a
participação do bloco no mercado internacional.
II. SANIDADE ANIMAL NO MUNDO
Como uma enfermidade que atinge uma região pode causar danos ao comércio
internacional?
O caso da BSE – Encefalopatia Espongiforme Bovina, enfermidade considerada
tipicamente Européia, com significativa incidência apenas na Inglaterra, espalhou-se pela
Europa e acaba de atingir, com 4 casos, o Japão. Causou um grande prejuízo a inúmeros
países, chegando a provocar, em muitos deles, sensível diminuição no consumo de carne
bovina.
Pesquisa realizada nos Estados Unidos indica que 80% dos americanos deixariam de
comer carne em caso de aparecimento da BSE em seu território.
A questão da Febre Aftosa na Ásia e Europa requer um estudo à parte. Essa epidemia
foi causada pelo vírus “O” Panasia que apareceu no início dos anos 90, inicialmente na Índia,
propagando-se por diversos países do Continente Asiático, atingindo a Coréia e o Japão, este
livre de Febre Aftosa há mais de 90 anos. O vírus “O” propagou-se pela Ásia Menor,
alcançando a Turquia e, em seguida, Reino Unido, França e Holanda.
No Reino Unido a Febre Aftosa apresentou uma virulência bem maior do que o surto de
1967, ocorrendo mais de 300 focos por semana no pico da enfermidade, atingindo 1897
propriedades com casos confirmados. Foram sacrificados mais de 3 milhões e seiscentos
animais de 9.949 propriedades. Estima-se um prejuízo superior a US$ 9 bilhões.
A França fez a rastreabilidade dos animais importados, identificando apenas um foco,
imediatamente silenciado por sacrifício sanitário dos enfermos e animais de contato, vigilância
ativa e quarentena. Fato semelhante ocorreu na Holanda, que identificou 20 focos em
pequenas propriedades contíguas, procedendo a vacinação focal e perifocal, sacrificando em
seguida todos animais afetados e vacinados. Esses dois países voltaram ao status de livre de
Febre Aftosa sem vacinação.
No MERCOSUL Ampliado, a Febre Aftosa reapareceu na Argentina, cujo fenômeno
epidemiológico requer estudos aprofundados. Alcançou o Uruguai por Soriano, afetando a
partir daí todos os Departamentos do País. Foram detectados um total de 2.050 focos,
silenciados no final de agosto de 2001, após a prática de vacinação e revacinação, vigilância
epidemiológica ativa, controle do trânsito de animais etc.
O referido surto atingiu o Estado do Rio Grande do Sul – Brasil, que estava livre de
Febre Aftosa e não mais se praticava vacinação. O rebanho gaúcho voltou à vacinação
sistemática e os focos controlados.
25
VISÃO ATUAL E PROSPECTIVA DA PECUÁRIA NO BRASIL: AMAZÔNIA-TERRA FIRME
Judson Ferreira Valentim1

Francisco Carlos da Rocha Gomes1
A Amazônia Legal, com uma área total de 5,09 milhões de km2, representa 59,8% da
área do Brasil. A população regional é de 21 milhões de habitantes (12% da população do
País), com 81% vivendo em áreas urbanas. Com uma área de 3,37 milhões de km2 de florestas
e extensos ecossistemas de cerrados e várzeas, esta região possui grande potencial para
contribuir de forma significativa para o crescimento econômico do país. A melhoria da renda e
da qualidade de vida dos brasileiros das gerações presentes e futuras dependerá do uso
sustentável do potencial desta região. Além disso, os recursos naturais da Amazônia Legal
terão importância crescente no bem-estar da população mundial.
Por sua importância ambiental, econômica e social, a Amazônia Legal tem sido foco de
intensos debates nas últimas três décadas. As discussões têm por base a negociação de
interesses entre diferentes segmentos de usuários e beneficiários no nível local (produtores,
grupos comunitários, municípios, estados), regional (países que possuem partes da Amazônia
em seus territórios) e global.
As discussões sobre a Amazônia têm focado as seguintes questões: 1) Quais devem
ser as estratégias de desenvolvimento da região, ou seja, o que, onde, como e quanto fazer?;
2) Quais as políticas de desenvolvimento a serem implementadas?; 3) Quais serão os custos
ambientais, sociais e econômicos nos diferentes cenários de desenvolvimento? Quem serão os
beneficiários e quem arcará com os custos ambientais, econômicos e sociais do processo de
desenvolvimento da região?
A Amazônia Legal tem uma população de aproximadamente 21 milhões de habitantes
(12% da população do País). A agropecuária ocupa cerca de 3,5 milhões de pessoas na região
e 40% desta mão-de-obra está envolvida em atividades de produção animal. Nas últimas três
décadas, o processo de desenvolvimento econômico regional resultou em melhoria significativa
na qualidade de vida da população. O Índice de Desenvolvimento Humano (IDH) no Acre,
Rondônia e Brasil passou, respectivamente, de 0,376, 0,474 e 0,494 em 1970 para 0,754,
0,820 e 0,83 em 1996. Embora a distribuição de renda tenha melhorado nos estados da região
(com exceção do Maranhão) entre 1991 e 2000, a concentração da renda ainda é muito
elevada, com Coeficiente de Gini variando entre 0,56 e 0,61.
Porém, os benefícios econômicos e sociais vêm sendo obtidos, principalmente, às
custas da exploração dos recursos naturais vegetais e minerais da região. Isto significa que a
manutenção deste processo de desenvolvimento, a médio e longo prazo, pode comprometer
capacidade de obtenção de renda e de manutenção da qualidade de vida das gerações
futuras.
Neste contexto, a pecuária ocupa lugar de destaque. O processo de desenvolvimento
regional resultou na conversão de 63 milhões de hectares de áreas de vegetação nativa para
uso agropecuário até 2003 e cerca de 77% (48,5 milhões de hectares) são ocupados com
pastagens e 51 milhões de cabeças de gado (2001), representado 29% da área total e 29% do
rebanho do País. A região é responsável por 29% da carne e 9% do leite de bovinos
produzidos no Brasil.
A pecuária na Amazônia Legal, mesmo recebendo preços da arroba 15% a 20%
menores do que aqueles pagos em São Paulo, apresenta rentabilidade até 113% superior.
Além disto, a criação de gado é considerada uma caderneta de poupança pelos pequenos
agricultores. Como conseqüência, vem ocorrendo um processo acelerado de pecuarização nos
projetos de colonização e em áreas de reservas extrativistas.
_________
1. Eng. Agr., Ph.D., pesquisador da Embrapa Acre. BR-364, Km 14, Caixa Postal 321, 69908-970. Rio Branco, Acre.
E-mail:judson@cpafac.embrapa.br
26
Estima-se que cerca de 40% da área de pastagens cultivadas (19,4 milhões de

hectares) na Amazônia Legal sejam produtivas (menos de 15% de solo descoberto ou ocupado
com plantas invasoras). Os 60% das áreas de pastagens restantes (29,1 milhões de hectares)
apresentam algum grau de degradação. Uma porção significativa dos cerca de 23% das áreas
desmatadas que foram plantadas com culturas anuais ou perenes estão degradadas ou
abandonadas com capoeiras.
Apesar de ser uma atividade rentável, a pecuária enfrenta grandes desafios na região,
entre os quais se destacam: 1) degradação das pastagens, devido à má formação, ao manejo
inadequado, à falta de adaptação das espécies forrageiras e ao ataque de pragas e doenças;
2) falta de capacitação técnica e gerencial dos produtores; 3) deficiência na assistência técnica;
3) insuficiência e inadequação das linhas de crédito existentes; 4) insegurança dos produtores
em relação aos seus investimentos devido à instabilidade das políticas ambientais (reserva
legal, licenciamento ambiental das propriedades e passivo ambiental), econômicas (taxas de
juros) e sociais (reforma agrária).
Entretanto, a Amazônia Legal apresenta grandes oportunidades para o desenvolvimento
de sistemas sustentáveis de pecuária bovina, especificamente: 1) o estoque de tecnologias
existente possibilita vencer os desafios e viabilizar uma atividade rentável e competitiva, com
inserção no mercado nacional e internacional; 2) a possibilidade de produção de carne e leite
totalmente a pasto; 3) o potencial de acessar o mercado de carbono para viabilizar a
recuperação das áreas de pastagens degradadas e a vegetação nas nascentes e ao longo dos
rios por meio da implantação de ecossistemas de pastagens arborizados.
A perspectiva de crescimento da demanda mundial de carne, de redução das barreiras
tarifárias no Mercado Comum Europeu e nos Estados Unidos, a crescente inserção dos
produtos da pecuária brasileira nesses mercados e os investimentos na melhoria da infra-
estrutura (rodovias, hidrovias, hidrelétricas, gasodutos) tendem a aumentar as pressões para a
ocupação das áreas de pastagens já consolidadas pela agricultura intensiva. Isto resultará no
avanço da pecuária sobre novas áreas de florestas.
Mantidas as tendências dos últimos cinco anos, a área desmatada na Amazônia Legal
poderá passar de 12,4% em 2003 para 21,53% em 2020. No mesmo período, o rebanho
bovino alcançará 175,1 milhões de cabeças, em uma área de 145,8 milhões de hectares de
pastagens. Este cenário resultará na conversão de 94,7 milhões de hectares adicionais de
vegetação nativa. Contudo, cenários contemplando a utilização moderada a intensiva de
tecnologias já disponíveis podem contribuir para reduzir o desmatamento para,
respectivamente, 36,5 e 19,0 milhões de hectares de vegetação nativa até 2020. Esses
cenários possibilitariam evitar a conversão de, respectivamente, 58,2 a 75,7 milhões de
hectares de vegetação nativa no referido período. As tecnologias para tornar concretizar estes
cenários já estão sendo utilizadas por parcela de pequenos, médios e grandes produtores em
seus sistemas de produção pecuários na Amazônia Legal.
Estes cenários ressaltam a necessidade de priorizar os investimentos públicos, para
gerar uma base adequada de conhecimentos e informações sobre o potencial e as limitações
dos recursos naturais e socioeconômicos da Amazônia Legal. Entre as prioridades visando o
planejamento e a gestão integrada dos recursos naturais destacam-se: 1) a realização do
zoneamento ecológico-econômico dos estados, com metodologia padronizada, em escala de
1:250.000 e de 1:100.000 nas áreas com maior pressão antrópica; 2) levantamento do uso
atual do solo nos 63 milhões de hectares de áreas desmatadas, identificando as áreas de
pastagens (produtivas, em degradação e degradadas), áreas agrícolas com culturas anuais,
perenes e degradadas ou abandonadas com capoeiras.
Estas informações são essenciais para no processo de negociação entre o poder
público (municipal, estadual federal) e os diferentes segmentos da sociedade de um pacto
sobre o uso dos recursos naturais, definindo zonas destinadas a : 1) produção agrícola e
pecuária sustentável; 2) produção florestal (produtos madeireiros e não madeireiros)
sustentável; 3) populações indígenas e extrativistas; 4) preservação ambiental.
De acordo com o uso previsto para os recursos naturais em cada zona, será possível ao
setor público, em conjunto com a sociedade, definir as políticas adequadas de infra-estrutura,
educação, saúde, ciência e tecnologia, assistência técnica e extensão rural e crédito.
27
Este processo permitirá ao setor público e privado avançar, com maior estabilidade e
segurança, rumo ao objetivo de promover o desenvolvimento sustentável, conciliando a
necessidade de crescimento econômico e de melhoria da qualidade de vida da população com
a conservação dos recursos naturais da Amazônia Legal.
28
EVOLUÇÃO DA PECUÁRIA DE LEITE NA REGIÃO NORTE 1990/2001: INDICADORES

GERAIS
Matheus Bressan1
Apresentação
Neste resumo encontram-se reunidas informações sobre a evolução da produção de

leite na Região Norte, entre 1990 e 2001. É parte de palestra proferida sobre o tema
Características do beneficiamento e comercialização na pecuária de corte e de leite da
Amazônia2, no Seminário Internacional para o Desenvolvimento Sustentável da Pecuária ma
Amazônia: Produtividade com Qualidade Ambiental, organizado pelo Procitrópicos, IICA e
Embrapa, em julho de 2003.
Evolução da produção de leite na Região Norte: 1990-2001
A produção de leite da Região Norte é a que mais tem aumentado no País, nos últimos
anos, conforme ilustrado na Figura 1. No período de 1990 a 2001, esta taxa foi de 41,6% para
o Brasil como um todo, pouco mais de 10% para a Região Nordeste, quase 24% para a
Sudeste, 59% para a Sul e 91% para a Centro-Oeste. No entanto, foi de 122,7% para a Região
Norte.
230%
225%
220%
215%
210%
205%
200%
195%
190%
185%
180%
175%
170%
Mil litros
165%
160%
155%
150%
145%
140%
135%
130%
125%
120%
115%
110%
105%
100%
95%
90%
85%
80%
1990 1991 1992 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001
Brasil Norte Nordeste Sudeste Sul Centro-Oeste
Figura 1. Taxas de evolução do volume de produção de leite por regiões

e para o Brasil, 1990/2001- (1990 = 100).
Fonte: Leite em números, Embrapa Gado de Leite – 2003.
(http://www.cnpgl.embrapa.br)
1
Pesquisador da Embrapa Gado de Leite (mbressan@cnpgl.embrapa.br).
2
Cópia da palestra completa, na forma de slides, foi disponibilizada pelos organizadores em CD-Rom.
29
Em termos absolutos, a produção da Região Norte eqüivalia a 6% do volume de leite

produzido no Brasil em 2001, representando um diferencial de 2,2 pontos percentuais a mais,
em relação a 1990. É, contudo, ainda, a região de menor volume de produção, como ilustrado,
graficamente, na Figura 2.
21.000.000
20.000.000
19.000.000
18.000.000
17.000.000
16.000.000
15.000.000
14.000.000
9.000.000
8.500.000
mil litros
8.000.000
7.500.000
7.000.000
6.500.000
6.000.000
5.500.000
5.000.000
4.500.000
4.000.000
3.500.000
3.000.000
2.500.000
2.000.000
1.500.000
1.000.000
500.000
0
1990 1991 1992 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001
Brasil Norte Nordeste Sudeste Sul Centro-Oeste
Figura 2. Evolução da produção de leite no Brasil e regiões, 1990/2001, em mil litros.

Fonte: Leite em números, Embrapa Gado de Leite – 2003
(http://www.cnpgl.embrapa.br).
A participação dos Estados da Região Norte na produção nacional, em 2001, em
relação a outros Estados das demais regiões, encontra-se na Tabela 1. Rondônia ocupava a
8ª. posição e o Pará, a 9ª. Estes dois Estados detinham, juntos, 75,6 % do volume total de leite
produzido na região.
Tabela 1. Produção de leite na Região Norte, comparados com outros Estados do Brasil, 2001.
Produção de Produção de Diferença

Posição em % do Total
Estado Leite/1990 Leite/2001 entre 1990 e
2001 (2001)
(milhares litros) (milhares litros) 2001 (%)
Minas Gerais 4.290.799 5.981.223 1 39,4 29,16
Goiás 1.071.966 2.321.740 2 116,1 11,32
Rio G. do Sul 1.451.797 2.222.054 3 53,1 10,83
Paraná 1.160.048 1.889.627 4 62,9 9,21
São Paulo 1.960.780 1.783.017 5 -9,1 8,69
Santa Catarina 650.409 1.076.084 6 65,4 5,25
Bahia 743.774 739.099 7 -0,6 3,60
Rondônia 158.474 475.596 8 200,1 2,32
Pará 231.497 459.165 9 98,3 2,24
Tocantins 105.510 166.020 17 57,4 0,81
Acre 21.430 85.773 22 300,2 0,42
Amazonas 36.617 37.704 24 3,0 0,18
Amapá 1.685 3.307 27 96,3 0,02
Fonte: Leite em números, Embrapa Gado de Leite - 2003 (http://www.cnpgl.embrapa.br).
30
Estes dados sinalizam porque investimentos em pecuária de leite têm sido maiores nesses
dois Estados, aproveitando a produção extensiva a pasto, em geral de rebanhos de dupla
aptidão (carne e leite). Neles programas de organizações públicas têm sido formulados para
criar alternativas para produtores familiares, elevar os patamares de produtividade e agregar
valor por meio de incentivos à industrialização de lácteos na própria região (geração de
empregos, renda, interiorização do processo de desenvolvimento).
A cadeia produtiva do leite na região tem, portanto, assumido papel de destaque como
alternativa econômica e social, demandando que sejam desenvolvidas, além de outras de
natureza infra-estrutural, ações suportadas por projetos cooperativos de P&D e TT que
envolvam a iniciativa privada e o setor público, preferencialmente com trabalhos em rede e
articulados em torno de macroproblemas regionais.
Certamente, questões relacionadas com a exploração sustentável da atividade leiteira, a
oferta de matéria-prima de qualidade físico-química e sanitária, e sua industrialização merecem
atenção especial dos estudiosos de soluções para o setor leiteiro, das lideranças dos
produtores e industriais, da assistência técnica e dos órgãos financiadores, além dos
distribuidores de produtos lácteos e das autoridades de Governo.
31
PREVENÇÃO E CONTROLE DE DOENÇAS NA PECUÁRIA DE CARNE E LEITE NA

AMAZÔNIA
Renato Andreotti1
A produção de bovinos é o resultado do acúmulo de energia no sistema biológico,

denominado sistema solo-planta-animal, que envolve a geração de nutrientes a partir do solo,
estabelece-se nas plantas e serve de substrato para a utilização dos animais. Através da lógica
desse ambiente, sofre ameaça de outros sistemas biológicos na disputa pelo estoque de
“energia” acumulada.
A base das condições de produção desse sistema, em que a busca da produtividade se
estabelece pela sua sustentabilidade é o bem-estar animal. Visando a redução dos riscos
desse sistema, este trabalho tem como objetivo a apresentação de planejamento sanitário para
produção de gado de corte e de leite.
As condições oferecidas pelo sistema de produção em função de solo, clima etc. são
fatores importantes para a avaliação dos riscos potenciais. Nesse sentido, o produtor precisa
definir em que segmento da produção ele pretende atuar em função das opções de mercado e
das características do ambiente. Definir os índices zootécnicos esperados e a sua relação com
as condições de produção também é importante na avaliação da análise de risco de doenças e
na definição do manejo dos animais.
Considerando-se as características da região amazônica e as peculiaridades regionais,
o planejamento do manejo sanitário para a produção de bovinos depende de assistência
técnica adequada e da existência de laboratórios de apoio diagnóstico.
A pesquisa também pode dar suporte às ações estratégicas tanto com estudos
epidemiológicos regionais quanto com o desenvolvimento de novas tecnologias de diagnóstico
e controle.
A educação sanitária dos trabalhadores rurais é outro ponto que deve ser levado em
consideração para o desenvolvimento de práticas preventivas adequadas evitando o
aparecimento de doenças nos animais.
Todo sistema de produção animal apresenta pontos frágeis com relação à sanidade.
Abaixo, são apresentados os principais aspectos de fragilidade e as propostas de prevenção.
Controle das doenças da reprodução
Sazonalidade da oferta de pastagem, seleção de matrizes e reprodutores e estado

sanitário do rebanho são fatores que influenciam o índice de natalidade.
O planejamento sanitário aqui apresentado aborda inicialmente os cuidados com as
doenças da reprodução na estação de monta. Deve-se iniciar 60 dias antes, a prevenção das
doenças infecciosas de origem bacteriana, virótica e parasitárias que podem afetar o sistema
reprodutivo, tanto dos machos como das fêmeas, impedindo a fecundação, causando abortos e
produzindo bezerros com porte inferior à média.
As causas de problemas reprodutivos de origem infecciosa mais freqüentes são: a) de
origem bacteriana: Leptospirose, Brucelose; Campilobacteriose; b) provocadas por protozoário:
Tricomonose e Neosporose c) provocadas por vírus: IBR e BVD. Plantas tóxicas também
podem ser causa de aborto, além de produtos químicos manejados nas pastagens, causas
hereditárias, ambientais e nutricionais.
____________
1. Méd. Vet., Ds., CRMV-MS No 0510, Pesquisador III, Embrapa Gado de Corte. Rodovia BR 262, Km 4,
Caixa Postal 154, CEP 79002-970. Campo Grande,MS
32
A mastite, problema importante em gado de leite, apresenta-se de forma clínica ou

subclínica, sendo que a segunda apresenta maior incidência. O diagnóstico da mastite
subclínica deve ser realizado pelo Califórnia Mastitis Test ou similar. O controle é realizado por
meio de medidas higiênicas e teste de sensibilidade antimicrobiana para tratamento dos
animais positivos. O treinamento das pessoas que realizam a ordenha é fundamental para o
sucesso do controle da mastite.
Controle das doenças de bezerros
O manejo sanitário de bezerros assume uma função estratégica no sistema de

produção por ser a categoria mais susceptível às doenças. Especial atenção deve ser dada ao
colostro, por conferir imunidade passiva, e à cura do umbigo, prevenindo miíases e infecções
do umbigo.
A diarréia é um sinal clínico freqüente e uma das principais causas de morte em
bezerros a partir das primeiras semanas de vida, podendo estar relacionada a diversos tipos de
agentes infecciosos como bactérias (E. coli, Salmonela, Clostrídium perfringens); vírus
(Rotavirus, Coronavírus, BVD, IBR) e protozoários como a Eiméria.
O leite oferecido aos bezerros deve receber cuidados para que o alimento do recém-
nascido não o contamine com agentes patogênicos. Em situações de diarréia, a reposição de
água e eletrólitos é importante para prevenir a desidratação e a acidose metabólica, principais
causas de morte de bezerros com diarréia.
Em função de situações de risco de doenças infecciosas nos rebanhos, a serem
avaliadas, vacinas podem ser aplicadas nas vacas antes do parto e nos bezerros.
O controle dos vermes em bezerros recém-nascidos, principalmente de leite, tem o
objetivo de eliminar vermes adquiridos, via placentária ou via colostro, além de prevenir outras
parasitoses, que comprometam a saúde do bezerro.
Doenças infecciosas
Algumas doenças infecciosas podem ser controladas por meio de vacina. No caso da
febre aftosa, deve-se seguir, rigorosamente, a orientação do órgão de defesa sanitária do
estado. A vacinação contra carbúnculo sintomático (manqueira) deve ser realizada juntamente
com a de outros clostrídios que causam as doenças musculares e, para as enterotoxemias
deve-se fazer o controle com vacina polivalente.
A situação clássica do Botulismo, intoxicação produzida por toxinas do Clostridium
botulinum tipo C e D, a campo, está relacionada com a ingestão de ossos ou água
contaminada pelos bovinos. O controle deve ser feito através de vacinação com toxóide
bivalente tipo C e D. Em áreas onde a raiva é endêmica, os animais devem ser vacinados
anualmente.
Controle de endo e ecto parasitos
O controle dos vermes gastrintestinais deve ser realizado a partir do desmame até os
dois anos e meio de vida em gado de corte e, estrategicamente, nos meses de maio, julho e
setembro. Introduzir o besouro africano Ontophagus gazella (rola bosta) na propriedade
contribui para o controle das verminoses, da mosca-dos-chifres e também para a incorporação
de matéria orgânica no solo.
A mosca-dos-chifres pode ser controlada com tratamento químico na estação chuvosa,
quando o número de moscas começa a incomodar os animais. O tratamento da mosca-dos-
chifres também vai auxiliar no controle do berne e bicheiras mas, deve-se proceder, sempre
que possível, à limpeza de currais e esterqueiras, e roçadas de pastagens. O controle do
carrapato nos bovinos pode ser realizado estrategicamente com tratamento químico a partir de
setembro, repetindo o tratamento mais três vezes com intervalos de 21 dias.
33
O berne (Dermatobia hominis) e as bicheiras causadas pela mosca dos estábulos,

Stomoxys calcitrans, são importantes pois provocam aos danos ao couro e infecções
secundárias, além da diminuição da produção de leite e carne.
Controle de doenças relacionadas com suplementação alimentar
O manejo da suplementação alimentar estratégica oferece alguns riscos por atrair

roedores podendo contaminar os animais com leptospira ou mesmo toxina botulínica. O
controle de roedores e outros animais, que possivelmente tenham acesso à ração, deve ser
rigoroso e o uso de vacinas específicas pode ser uma ferramenta auxiliar nesses casos.
Complicações potenciais provenientes de falhas no manejo da suplementação podem
acarretar outros problemas:
• timpanismo provocado pela ingestão de substâncias que contenham alto teor de
saponinas ou excesso de grãos;
• acidose pelo rápido crescimento e multiplicação de bactérias que produzem
ácido lático decorrente do consumo excessivo de alimentos ricos em carboidratos como os
grãos ou alimentos contaminados;
• laminite também proveniente do excesso de alimentos energéticos causando o
clássico andar em pinça;
• e intoxicação por uréia, quando os animais recebem um excesso de uréia
causando salivação abundante, andar cambaleante podendo evoluir até a morte.
O planejamento sanitário deve ser enfatizado como um fator importante e
particular para cada processo produtivo de bovinos onde o investimento precisa ser
protegido com práticas visando garantir um retorno seguro.
A rastreabilidade que está sendo implantada vai avançar no controle sanitário em
função da organização das informações geradas no sistema de produção oferecendo
condições gerenciais mais modernas e eficientes.
Abaixo está sendo apresentada uma proposta geral de controle sanitário para
bovinos de corte e que pode servir de base para a discussão e construção de medidas
sanitárias preventivas para a região amazônica considerando a sua realidade.
==========================================
34
Cronograma sanitário e reprodutivo em bovinos de corte
Atividades
Mês
Observações
J A S O N J F M A M J
• Machos para
Exame reprodução
andrológico
• • • Vacas com condições
Estação de corporais de moderada
monta a boa
• Eliminar fêmeas vazias
Diag. de
gestação
Vacinar no 8º mês de
Vacinar contra • • • gestação
paratifo em
vacas prenhas
• Selecionar por idade e
Descartes desempenho
Cortar e desinfetar o
Mamada do • • • umbigo com iodo a 10%,
colostro, corte e mamada do colostro até
cura do umbigo 6h de vida
Vacinar entre 15 e 20
Vacinar contra • • • dias de idade
paratifo em
bezerros
• • • Aos 6-7 meses de
Desmama idade. Marcar os
bezerros
Fêmeas dos 3 aos 8
Vacinar contra • meses. Marcar com “V”
brucelose no lado esquerdo ca
cara
1ª dose: 4-6 meses
Vacinar contra 2ª
•
1ª
• 2ª dose: 6 meses após a
carbúnculo 1ª dose
sintomático
1ª dose: 4º meses de
• idade
Vacinar contra 2ª dose: 40 dias após a
botulismo 1ª dose repetir
anualmente
35
Cronograma sanitário e reprodutivo em bovinos de corte
Atividades
Mês
Observações
A partir do 4º mês de idade.
Vacinar • Repetir anualmente em
contra raiva áreas endêmicas
Seguir campanha do órgão
Vacinar • • • de defesa sanitária do
contra febre estado
aftosa
Bezerros da desmama aos
Vermifugaçã • • • 30 meses de idade
o estratégica
1º tratamento no início das
Carrapato • chuvas repetir 3 vezes com
intervalo de 21 dias
Mesmo produto utilizado no
Berne • • • tratamento do carrapato e
mosca-dos-chifres
Introduzir besouro rola
Mosca-dos- • bosta. Usar inseticida
chifres quando os animais
estiverem incomodados.
Descartar touros positivos.
Campilobact • Vacinar fêmeas em idade
eriose de reprodução
Descartar touros positivos
Tricomonose •
Vacinar todos os animais
Leptospirose • conforme sorotipo
prevalente na região
Vacinar vacas 60 dias antes
IBR e BVD • da monta
Vacinar vacas no 8º mês de
Diarréia a • • • gestação e revacinar 3
rotavírus e semanas após
coronavírus
36
Programa de controle sanitário na estação de monta
Atividades
Mês
Observações
S O N D J M A M J J A
Exame e controle de
Preparação M M M doenças
• Descarte de machos e
Brucelose fêmeas positivos
• Descarte de machos e
Tricomonose descanso das fêmeas
• Descarte dos machos e

Campilobact vacinar as fêmeas
eriose
• Vacinar as fêmeas em risco
Leptospirose após identificar os sorotipos
envolvidos
• Vacinar as fêmeas quando
IBR houver abortos
• Vacas em julho ou agosto

Verminose
M = estação de monta.
37
Preparação dos animais do nascer ao desmame
Atividades Mês Observações
Pasto maternidade
Preparação N N N D D D
• • • • • • Vacinar vacas e
Diarréias bezerros contra os
agentes envolvidos nos
surtos
• • • Assim que nascer
Cura do umbigo
• • • Até 24 horas após

Colostro nascer
• • • Vacinar as fêmeas
Brucelose entre 3 a 8 meses de
idade
• • • Revacinar um mês
Clostridioses após a 1ª dose e
anualmente
• • • De acordo com a
Febre Aftosa defesa sanitária animal
do estado
• Vacinar aos 4 meses e
Raiva animal anualmente em áreas
de risco
• • • • • Revacinar 1 mês após
Botulismo a 1ª dose e antes do
confinamento
N= nascimento; D= desmama
Planejamento do controle de endo e ecto parasitos
Atividades Mês Observações

J F M A M J A S O N D
Dosificar do desmame aos
Verminose • • • 2 ½ anos de idade
Besouro africano incorpora

Mosca-dos- • • • • • matéria orgânica e
chifres controla vermes e mosca-
dos-chifres
Tratar mais 3 vezes após
Carrapato • • • • setembro com intervalo de
21 dias ou quando
incomodar
Associar com os outros
Berne • • • • ectoparasitos
38
Referências
ANDREOTTI, R. Neosporose: um possível problema reprodutivo para o rebanho bovino. A Hora

Veterinária, Porto Alegre, v. 21, n. 122, p. 65-67, 2001.
ANDREOTTI, R., GOMES, A., PIRES, P. P., RIVERA, F. E. B. Planejamento sanitário de gado de corte.
1ed. Campo Grande/MS: Embrapa-CNPGC, (EMBRAPA-CNPGC. Documentos 72). p.31. 1998,
ANDREOTTI, R., SCHENCK, M. A. M. Manejo sanitário de bezerros de corte. CNPGC Divulga Nº/95.
Campo Grande: EMBRAPA/CNPGC, 1995 2p.
GRISI, L. MASSARD, C.L.; MOYA BORJA, G.E.; PEREIRA, J.B. Impacto econômico das principais
ectoparasitoses em bovinos no Brasil. A Hora Veterinária, 125. 8-10. 2002.
VEIGA, V.M.O. Diagnóstico da mastite bovina. Juiz de Fora: EMBRAPA- CNPGL-ADT, 1998. 24p.
Circular Técnica, 51.
SENA OLIVEIRA, M.C.; OLIVEIRA, G.P. Cuidados com o bezerro recém-nascido em rebanhos leiteiros.
São Carlos. EMBRAPA-CPPSE. 31p. Circular técnica 09. 1996.
HONER, M.R.; GOMES, A. O manejo integrado de mosca dos chifres, berne e carrapato em gado de
corte. Campo Grande. EMBRAPA-CNPGC. 60p. Circular técnica 22. 1992.
39
CERTIFICAÇÃO AMBIENTAL E DESENVOLVIMENTO DA PECUÁRIA
Rodiney de Arruda Mauro1

Marta Pereira da Silva2
Sergio Raposo de Medeiros3
A degradação das pastagens é um dos maiores problemas ambientais e da pecuária do

Brasil na atualidade. Estima-se que 80% dos 50 a 60 milhões de hectares de pastagens
cultivadas do Brasil Central, que respondem por 55% da produção de carne nacional,
encontram-se em algum estádio de degradação. Esta situação compromete a sustentabilidade
da pecuária. Considerando apenas a fase de recria e engorda, a produção animal em
pastagem degradada pode ser seis vezes inferior ao de uma recuperada ou em bom estado.
O conceito de sustentabilidade vem sendo muito discutido nos últimos 20 anos. A
Comissão Mundial sobre Ambiente e Desenvolvimento de 1987, define desenvolvimento
sustentável como aquele que satisfaz as necessidades do presente sem comprometer a
habilidade de gerações futuras de satisfazer suas próprias necessidades. Conforme a Lei
Agrícola dos EUA o conceito de sustentabilidade na agropecuária considera que agricultura
sustentável é um sistema integrado de práticas com vegetais e animais adaptados às
condições específicas da cada estabelecimento e que atenda simultaneamente e no longo
prazo cinco requisitos: responder às necessidades humanas em alimentos e fibra; melhoria da
qualidade ambiental e dos recursos naturais dos quais depende a economia agropecuária;
utilização eficiente dos recursos não renováveis e dos recursos internos ou próprios do
estabelecimento, e sempre que cabível integrando ciclos e controles biológicos naturais;
viabilidade econômica; e melhoria da qualidade de vida dos agricultores e da sociedade em
seu conjunto. Hoje, a expressão "sustentável" é um apêndice obrigatório das palavras
desenvolvimento e agricultura.
O Brasil provavelmente se tornará o maior exportador mundial de carne. Existem
grandes oportunidades para o mercado do “Boi Verde”, termo originado na Argentina para
diferenciar seus produtos nos mercados internacionais, criado predominantemente a pasto.
Este é equivalente ao nosso “Boi Tradicional” que corresponde a cerca de 90% do rebanho
nacional. Esta é uma ótima oportunidade para o Brasil, pois além da maior competitividade
devido ao menor custo de produção, o mercado incorporou o conceito de ser esta uma carne
mais saudável do que aquela produzida por meios mais intensivos. Todavia, tiramos pouco
proveito disso.
O “Boi Tradicional”, ou “Boi Verde”, difere do “Boi Orgânico” em termos de exigências
diversas. O boi tradicional pode ter uma certificação, dependendo do interesse do produtor. O
segundo, necessariamente, tem que possuir a certificação. Esta deve estar de acordo com as
normas “orgânicas” de produção, ou seja, baseadas nas leis vigentes no país, assim como nas
normas adicionais da certificadora. Existe uma gama bastante ampla de restrições, como o uso
de fertilizantes industriais e rações com alimentos produzidos de forma não orgânica, alem de
outras exigências que transcendem a mera produção agropecuária.
O mercado para “Boi Orgânico” é restrito, pois ele é mais caro por unidade de carne
produzida em função da menor produtividade. É bastante improvável que a produção orgânica
possa substituir a convencional. Seria, inclusive, indesejável, visto que o seu maior valor de
mercado é o que tem atraído os produtores. Uma carne a maior custo de mercado reduziria o
acesso da população a este importante alimento.
A carne produzida com boas práticas de manejo e que respeitem o ambiente, também é
um alimento saudável. Inclusive as carnes produzidas em sistemas mais intensivos, como
confinamentos. Neste sentido, a manutenção de recursos naturais, a renovação destes e a
recuperação ambiental e social são os grandes desafios do produtor na busca do equilíbrio
entre os fatores de produção, extração de recursos e manutenção do ambiente natural.
__________
1. Biólogo, PhD. Embrapa Gado de Corte, Rodovia BR 262 Km 4, Caixa Postal 154, CEP 79002-970,
Campo Grande, MS, e-mail: rodiney@cnpgc.embrapa.br
2. Zootecnista, PhD, Embrapa Gado de Corte, e-mail: martha@cnpgc.embrapa.br
3. Eng. Agrôn., PhD, Embrapa Gado de Corte, e-mail: sergio@cnpgc.embrapa.br
40
Em um mundo globalizado e altamente competitivo, o isolamento pode ser um erro fatal,

e ao jogarmos não levando em conta as regras impostas pelo mercado internacional estamos
fadados a derrota. Ao longo do tempo, o consumidor tem se tornando mais exigente. Há uma
crescente preocupação com a qualidade dos alimentos. Em quem confiar? O credenciamento
por certificados surgiu como resposta a esta crise de credibilidade, como fator chave da
garantia da conformidade dos produtos, processos e gestão ambiental.
Todos os certificados emitidos no Brasil são controlados pelo Inmetro (Instituto Nacional
de Metrologia, Normalização e Qualidade Industrial), responsável por fiscalizar as empresas
certificadoras atuantes no território nacional e também por realizar auditorias testemunhas por
área de competência, entre as quais aquelas que emitem certificação na área de gestão
ambiental.
As empresas credenciadas no Inmetro autorizadas a emitir certificações na área de
Sistemas de Gestão Ambiental, que estão na Base de Dados de Empresas Certificadas ISO
14001, são 16. Se levarmos em conta as que possuem escritórios no Brasil e no exterior esse
número aumenta para 22. No Brasil, no que se refere aos orgânicos, atuam 19 entidades que
certificam (concedem selos) ou organizam a produção e a venda de alimentos orgânicos sem
certificá-los.
As vantagens de Credenciamento são muitas. Para as Organizações
fornece um processo de avaliação único, transparente e reproduzível com o qual evita a
utilização de recursos próprios, elimina o custo da reavaliação e reforça a coerência e
confiança do público nos serviços prestados. Para os Usuários possibilita a tomada de
decisões acertadas. Para os Avaliadores e/ou Auditores é um marco diferencial proporcionando
aos mesmos a possibilidade de prestar um serviço reconhecido internacionalmente, e para os
Consumidores Finais é um fator inspirador de confiança no provedor ao garantir que o produto
foi avaliado por um organismo independente e competente.
41
MUDANÇAS NA PRODUÇÃO DE LEITE NO BRASIL
Sebastião Teixeira Gomes

Universidade Federal de Viçosa, Minas Gerais
1. Introdução
De todas as cadeias produtivas da agropecuária brasileira, a do leite foi uma das que
experimentaram as maiores transformações nos últimos anos. Além dos fatores comuns a
outras cadeias produtivas, tais como maior abertura comercial e maior estabilidades dos preços
da economia brasileira, no caso particular do leite, merece citação a desregulamentação do
mercado. Em razão da forte e perversa influência do estado no mercado de lácteos, leia-se
tabelamento do preço, muitos produtores, de grande potencial, foram afugentados da atividade.
Foi a partir do início dos anos noventa que as principais transformações ganharam mais
expressão.
Atualmente, a cadeia produtiva do leite enfrenta novos desafios, que são a participação
no mercado internacional, como exportadora, e também a contribuição para a segurança
alimentar doméstica. O exame das mudanças recentes que aconteceram na cadeia láctea
sinaliza amplas possibilidades de sucesso nos novos desafios.
A seguir, são apresentadas as principais mudanças que aconteceram e continuam
acontecendo na cadeia produtiva do leite, com ênfase no segmento da produção. O
aprofundamento de tais mudanças, o que tudo indica que irá acontecer, viabilizará taxas
expressivas de crescimento da produção nos próximos anos. O país tem amplas possibilidade
de transformar-se em grande exportador de lácteos, sem prejuízo do abastecimento interno,
mesmo considerando-se a necessidade de aumentos expressivos no consumo doméstico.
2. Mudanças na geografia da produção

Nos últimos anos aconteceram mudanças expressivas na geografia da produção de
leite do país. As regiões Norte, Sul e Centro-Oeste, aumentaram suas participações na
produção nacional, enquanto as regiões Nordeste e Sudeste reduziram suas participações na
produção do país, segundo dados da Tabela 1.
A região Sudeste, cuja produção cresceu, relativamente, menos que a nacional, no
período de 1991 a 2001, continua sendo a que mais produz leite, visto que responde por
41,80% da produção brasileira, seguida das regiões Sul, 25,29%, e Centro-Oeste, 15,83%.
No nível estadual, em 2001, Minas Gerais manteve a liderança, visto que foi
responsável por 29,16% da produção nacional, seguindo de Goiás, 11,32%; Rio Grande do
Sul, 10,83%; Paraná, 9,21%; e São Paulo, 8,69%. Vale registrar que, em 1991, São Paulo era
o segundo estado maior produtor de leite, perdendo apenas para Minas Gerais. Atualmente,
ocupa o quinto lugar na lista dos maiores produtores de leite.
A queda da importância relativa do Estado de São Paulo na produção nacional de leite
é decorrente da queda do lucro dessa atividade, em razão da redução do preço do leite e do
aumento do custo de produção.
A redução do preço recebido pelo produtor de leite naquele Estado, pode ser explicada
pela maior abertura comercial, pela estabilidade da economia e pelo crescimento do leite longa
vida, que ocupa espaço do leite tipo B. O maior preço da embalagem do longa vida, em
comparação com a embalagem do pasteurizado, atrelado ao baixo poder de compra do
consumidor, empurra para baixo o preço recebido pelo produtor de leite.
42
Tabela 1. Produção de leite no Brasil, segundo as regiões fisiográficas e unidades da federação

Variação
1991 2001
Especificação (%)
Mil Litros % Mil Litros % 1991/2001
BRASIL 15.079.174 100,00 20.509.956 100,00 36,02
Norte 684.349 4,54 1.236.608 6,03 80,70
Nordeste 2.174.496 14,42 2.266.112 11,05 4,21
Sudeste 6.990.636 46,36 8.573.152 41,80 22,64
Sul 3.389.353 22,48 5.187.765 25,29 53,06
Centro-Oeste 1.840.340 12,20 3.246.319 15,83 76,40
Rondônia 251.987 1,67 475.596 2,32 88,74
Acre 22.294 0,15 85.773 0,42 284,74
Amazonas 38.652 0,26 37.704 0,18 - 2,45
Roraíma 13.327 0,09 9.043 0,04 - 32,15
Pará 244.568 1,62 459.165 2,24 87,75
Amapá 1.981 0,01 3.307 0,02 66,94
Tocantins 111.540 0,74 166.020 0,81 48,84
Maranhão 134.398 0,89 155.452 0,76 15,67
Piauí 58.732 0,39 77.628 0,38 32,17
Ceará 299.231 1,98 328.127 1,60 9,66
Rio Grande do Norte 108.938 0,72 143.074 0,70 31,34
Paraíba 155.555 1,03 105.547 0,51 - 32,15
Pernambuco 316.554 2,10 360.266 1,76 13,81
Alagoas 208.375 1,38 244.046 1,19 17,12
Sergipe 97.586 0,65 112.873 0,55 15,67
Bahia 795.127 5,27 739.099 3,60 - 7,05
Minas Gerais 4.319.218 28,64 5.981.223 29,16 38,48
Espírito Santo 300.344 1,99 362.236 1,77 20,61
Rio de Janeiro 391.307 2,60 446.676 2,18 14,15
São Paulo 1.979.767 13,13 1.783.017 8,69 - 9,94
Paraná 1.240.178 8,22 1.889.627 9,21 52,37
Santa Catarina 661.035 4,38 1.076.084 5,25 62,79
Rio Grande do Sul 1.488.140 9,87 2.222.054 10,83 49,32
Mato Grosso do Sul 420.693 2,79 445.179 2,17 5,82
Mato Grosso 239.127 1,59 442.803 2,16 85,17
Goiás 1.166.181 7,73 2.321.740 11,32 99,09
Distrito Federal 14.339 0,10 36.597 0,18 155,23
Fonte: IBGE-Pesquisa Pecuária
Municipal.
Do lado dos custos, a possibilidade de uso alternativo dos fatores de produção em

atividades como cana-de-açúcar, laranja e reflorestamento contribui, naturalmente, para elevar
o custo de produção de leite no estado de São Paulo.
Entre os estados que têm significativa participação na produção nacional, Goiás
destaca-se, visto que passou 7,73% da produção do país, em 1991, para 11,32%, em 2001.
Nesse período, a produção goiana cresceu 99%, enquanto a brasileira, 36%.
A partir de meados da década de noventa, regiões não tradicionais na produção de leite
começaram a experimentar expressivas taxas de crescimento; são as novas fronteiras do leite.
Entre essas regiões, merecem destaque os estados de Rondônia, Pará e Mato Grosso. As
condições climáticas prevalecentes nesses estados, muito calor e umidade, favorecem o
desenvolvimento das forrageiras, com amplas possibilidades para o sistema de produção à
base de pasto.
Predomina nesses estados, na produção de leite, a mão-de-obra familiar, que contribui
para reduzir custos de produção, em razão do baixo custo de oportunidade.
43
Segundo o “Diagnóstico do agronegócio do leite e seus derivados do Estado de

Rondônia” elaborado pelo SEBRAE-RO, em 2002, 63% dos produtores estavam no estrato até
50 litros/dia e respondiram por 21% da produção daquele estado, no outro extremo, 8% dos
produtores estavam no estrato de mais de 200 litros/dia e respondiam por 44% da produção
(Tabela 2).
No período 2001/2002, enquanto o preço recebido pelo produtor de leite de Minas
Gerais era de R$ 0,37/litro, o de Rondônia era de apenas R$ 0,21/litro. Mesmo com preço de
R$ 0,21/litro, as margens unitárias foram expressivas, em razão dos baixos custos de
produção, segundo dados da Tabela 3. Isto significa que, mesmo distantes dos principais
centros de consumo, as novas fronteiras têm elevado poder de competição.
A atratividade da produção de leite pode ser também examinada por meio das margens
e do lucro anuais, conforme Tabela 4. Especialmente nos estratos de maior produção, os
resultados obtidos são interessantes e ajudam a explicar as elevadas taxas de crescimento da
produção de leite no estado de Rondônia.
Tabela 2. Distribuição do número de produtores e da produção de leite em Rondônia. Dados

de 2001/2002
Estratos de produção (litros/dia)
Especificação Unidade
Até 50 > 50 a 100 > 100 a 200 > 200
No. de produtores % 63,16 20,18 8,77 7,89
Produção % 21,67 18,62 15,47 44,24
Fonte: Pesquisa de campo.
Tabela 3. Preço e custos de produção de leite em Rondônia. Dados de 2001/2002
Até 50 > 50 a 100 > 100 a 200 > 200
Preço do leite R$/L 0,2033 0,2100 0,2267 0,2367
Custo operacional efetivo R$/L 0,0712 0,0836 0,0880 0,0918
Custo operacional total R$/L 0,2124 0,1894 0,1611 0,1525
Custo total R$/L 0,2999 0,2743 0,2290 0,2044
Tabela 4. Margem bruta, margem líquida e lucro da atividade leiteira em Rondônia. Dados de
2001/2002
Até 50 > 50 a 100 > 100 a 200 > 200
Margem bruta1) R$/ano 2.482,30 6.112,73 12.207,62 31.070,41
2)
Margem líquida R$/ano -35,09 1.407,28 6.540,98 17.376,82
Lucro3) R$/ano -1.595,46 -2.353,38 1.201,04 5.668,02
1) Renda bruta – custo operacional efetivo.
2) Renda bruta – custo operacional total.
3) Renda bruta – custo total.
44
3. Mudanças na estrutura da produção

Nos últimos anos, a produção média aumentou significativamente. Dados dos quinze
maiores laticínios do país indicam as seguintes captações médias, em litros/dia: em 2000, 135
litros; em 2001, 153 litros; e, em 2002, 172 litros. O crescimento da produção média é
decorrente do aumento da participação dos grandes produtores na produção total. Tomando
como exemplo a Itambé, os produtores de mais de 500 litros/dia, em 1990, respondiam por
apenas 10,40% da captação e, em 2000, por 59,51%, segundo dados da Tabela 5. O mesmo
fenômeno de concentração da produção verificado na Itambé aconteceu em praticamente
todos os laticínios brasileiros, o que amplia a polarização da produção, em que muitos
pequenos produtores produzem pouco e poucos grandes produtores produzem muito. Com o
aumento da produção, o produtor recompõe o ganho total, mesmo numa situação de queda
dos ganhos por litro.
Tabela 5. Distribuição do número de produtores e da produção de leite da Itambé

Até 50 litros/dia > 500 litros/dia
1990 2000 1990 2000
No. de produtores % 61,80 22,33 1,00 10,40
Produção % 20,80 2,02 10,40 59,51
Fonte: Itambé.
4. Mudanças nas fontes de crescimento

Nas últimas três décadas, mudou o padrão de crescimento da produção de leite no
Brasil. Nos anos 70, esse crescimento foi explicado pelo aumento do número de vacas; nos
anos 80, pelas participações dos aumentos da produtividade e do número de vacas
ordenhadas na explicação dos crescimentos da produção, as quais foram praticamente iguais.
Entretanto, nos anos 90, o crescimento da produção de leite foi decorrente do aumento da
produtividade, segundo dados da Tabela 6.
O significativo crescimento da produtividade, nos anos 90 (5,4% ao ano), refletiu as
mudanças estruturais verificadas nos sistemas de produção, que respondiam pela maior parte
da produção nacional. Maior abertura comercial, desregulamentação do mercado de leite e
queda da inflação foram os argumentos que mais contribuíram para as mudanças estruturais
verificadas. Aliado a essas variáveis macroeconômicas, não se pode deixar de reconhecer o
importante papel da pesquisa agrícola, cujas inovações tecnológicas permitiram aumentos de
produtividade.
Tabela 6. Taxas anuais de crescimento da produção de leite, da produção/vaca ordenhada e

do número de vacas ordenhadas, no Brasil
Produção/Vaca Número de vacas
Período Produção
ordenhada ordenhadas
1970 a 1979 4,9 -1,4 6,3
1980 a 1989 2,6 1,2 1,4
1990 a 1999 3,4 5,4 -2,0
Fonte: Dados básicos do IBGE.
A maior participação da produtividade, como fonte de crescimento da produção, indica o

crescimento de sistemas especializados na produção de leite, os quais têm maior elasticidade
de oferta. Segundo pesquisa desenvolvida por Daniel Pacífico Homem de Souza, em 2000, na
Universidade Federal de Viçosa (tese de mestrado), os sistemas de gado zebu têm 0,430 de
elasticidade de oferta; os de gado mestiço, 0,653; e os de gado holandês, 1,471.
45
O crescimento da produtividade, verificado na década de noventa, ajudou a compensar,

pelo menos em parte, a queda nos termos de troca daqueles produtores que obtiveram
conhecimento e recursos financeiros para adotarem tecnologias que possibilitassem os ganhos
de produtividade.
5. Mudanças nos termos de troca e flexibilidade dos sistemas de produção
O preço recebido pelo produtor de leite, nos últimos anos, além de ter reduzido
significativamente, variou muito durante o ano, sendo menor no período das águas e maior no
da seca (Gráfico 1). A flutuação do preço do leite, durante o ano, tem as seguintes causas
principais: 1) Menor custo de produção no período das águas, em razão da prevalência de
sistemas de produção no pasto, com pouco uso de ração no verão; 2) Maior produção de leite
no período das águas; embora a diferença entre as produções de verão e de inverno tenha
reduzido, ela ainda existe. 3) Por falta de informações corretas sobre a cadeia produtiva do
leite sobre o mercado (existem muitas especulações), prevalece uma memória safrista, que
facilita a prática de menor preço no verão; 4) Finalmente, a última causa, porém não menos
importante, diz respeito às imperfeições do mercado, dada a existência de poucos
compradores e muitos, mas desorganizados, fornecedores. Essa estrutura de mercado
possibilita ampliar os efeitos das três causas anteriores. Como exemplo, vale registrar que, nos
últimos anos, a variação percentual do preço do leite foi muito maior que a da produção.
Por outro lado, o preço da ração comercial não variou, sistematicamente, durante o
ano, ainda que o preço da matéria-prima tenha apresentado variações nos períodos de safra e
entressafra (Gráfico 2). Tal comportamento é típico de estruturas industriais ologopolizadas
(poucas indústrias), que não repassam, imediatamente, para o preço final da ração as
variações de preço da matéria-prima.
A relação entre preço recebido pelo produtor de leite e preço da ração (concentrado)
para vacas em lactação variou, significativamente, durante o ano, sendo menor no período das
águas e maior no da seca (Gráfico 3). Tal comportamento reflete o que aconteceu com o preço
do leite, que também foi menor no verão e maior no inverno. Nos últimos oito anos, o poder de
compra de 100 litros de leite, tipo C, foi, em média, 2,4 sacos de ração, nas águas, e 3,2 sacos,
na seca, ou seja, a ração foi relativamente mais cara nas águas que na seca. Diante da
realidade dos preços relativos, os sistemas de produção que utilizam as mesmas quantidades
de ração durante todo o ano são mais difíceis de serem administrados no período das águas.
O comportamento da relação preço do leite/preço da ração ajuda a explicar a
preferência por sistemas de produção flexíveis, com menor custo no verão e maior no inverno.
Tais sistemas privilegiam, no verão, pastagens de boa qualidade em substituição à parte do
concentrado. Para que isso aconteça, a adubação do pasto e a rotação de pastagens são
práticas indispensáveis. Dados médios, obtidos de produtores-referência, indicam 3 litros de
leite/kg de ração no inverno e 5 litros de leite/kg de ração no verão.
A flexibilização do sistema de produção altera o paradima tecnológico que recomenda
ao produtor investir apenas na alimentação do rebanho no período de inverno, dando pouca ou
nenhuma importância à alimentação no verão. Nesse novo modelo, há necessidade de
administrar a alimentação do gado tanto na seca quanto nas águas, considerando-se os
aspectos produtivos e financeiros. O balanço financeiro da empresa produtora de leite deve ter
o ano como período de análise.
O ajustamento do sistema de produção ao comportamento do mercado (leia-se preço
do leite) não pode ser considerado como um retrocesso do sistema de produção, já que o
conceito deste é amplo, incluindo aspectos de tecnologia de produção e financeiros. Nesse
contexto, os indicadores de resultado do sistema de produção, além da produtividade dos
fatores (litros/vaca, litros/hectare, litros/dia-homem e outros desta natureza) devem também
considerar outros indicadores, como custo/litro, taxa de retorno do capital e capacidade de
resposta aos estímulos do mercado.
Existem diversos exemplos de produtores que conseguem flexibilizar o custo sem
retrocesso do sistema de produção. Tais produtores possuem vacas com grau de sangue que
46
variam de 3/4 HZ a PC holandês, com média de 7/8 HZ, e que produzem de 3.500 a 4.500
litros/lactação. Portanto, não é correto afirmar que a flexibilização de custo só acontece em
rebanhos 1/2 HZ, com produção média de 5 litros/vaca/dia durante 240 dias. Se assim fosse
realmente, flexibilidade de custo significaria retrocesso do sistema de produção, o que não
ocorre, e as evidências estão aí para demonstrar o contrário.
Gráfico 1 – Preço Recebido pelo Produtor de Leite em Minas Gerais
Gráfico 1 - Preço do Leite em Minas Gerais
0,80
0,78
0,76
Preço de Leite C corrigido para
0,74
0,72
0,70
0,68
0,66
0,64
0,62
ABRIL/2003
0,60
0,58
0,56
0,54
0,52
0,50
0,48
0,46
0,44
0,42
0,40
0,38
0,36
0,34
0,32
0,30
1996 - 01
1996 - 04
1996 - 07
1997 - 10
1997 - 01
19 7 - 04
1997 - 07
1998 - 10
1998 - 01
1998 - 04
1998 - 07
1999 - 10
1999 - 01
1999 - 04
2099 - 07
2000 - 10
2000 - 01
2000 - 04
2000 - 07
20 1 - 10
2001 - 01
2001 - 04
2001 - 07
2002 - 10
2002 - 01
2002 - 04
2002 - 07
2003 - 10
03 01
4
-0
1996 -
0
19
Meses/Ano
47
Preço da Ração Corrigido para ABRIL/2003
Poder de compra de 100 L de leite
19
em sacos de ração 9
15,00
15,50
16,00
16,50
17,00
17,50
18,00
18,50
19,00
19,50
20,00
20,50
21,00
21,50
22,00
22,50
23,00
23,50
24,00
24,50
19 6 - 25,00
9 01
19 6 -
1,50
1,70
1,90
2,10
2,30
2,50
2,70
2,90
3,10
3,30
3,50
3,70
3,90
19 9 04
19 6 -
1996 - 9 07
19 6 -
1996 - 01 9 10
19 7 -
1996 - 04 9 01
1996 - 07 19 7 -
9 04
1997 - 10 19 7 -
9 07
1997 - 01 19 7 -
9 10
1997 - 04 19 8 -
9 01
1997 - 07 19 8 -
1998 - 10 98 04
19 -
1998 - 01 9 07
19 8 -
1998 - 04 9 10
19 9 -
1998 - 07 9 01
19 9 -
1999 - 10 9 04
19 9 -
1999 - 01 9 07
20 9 -
1999 - 04 0 10
2099 - 07 20 0 -
0 01
MÊS/ANO
2000 - 10 20 0 -
0 04
2000 - 01 20 0 -
0 07
2000 - 04 20 0 -
0 10
2000 - 07 20 1 -
2001 - 10 0 01
20 1 -
2001 - 01 0 04
20 1 -
2001 - 04 0 07
Gráfico 2 – Preço de um saco (40 Kg) de ração para vaca leiteira
20 1 -
2001 - 07 0 10
20 2 -
2002 - 10 0 01
20 2 -
2002 - 01 0 04
20 2 -
2002 - 04 0 07
2002 - 07 20 2 -
0 10
2003 - 10 20 3 -
03 01
Gráfico 3 – Preço de 100 litros de leite C / Preço de 1 saco de ração, em MG
03 0
-0
- 01 4
4
Gráfico 2 - Preço de um saco(40 Kg) de ração para vaca leiteira
Gráfico 1. Preço de 100 litros de leite C / Preço de 1 saco de ração, em MG
48
6. Sazonalidade da produção e variações do preço recebido pelo produtor
Nos últimos anos, a sazonalidade da produção de leite do Brasil reduziu

significativamente; já se foi o tempo em que eram comuns as expressões safristas e cotistas.
A redução da sazonalidade da produção reflete a aplicação mais rigorosa dos critérios
de pagamento de leite-cota e leite-excesso e também a evolução tecnológica dos produtores
que respondem pela maior parte da produção. No período de 1995 a 2003, o coeficiente de
variação (igual ao desvio-padrão dividido pela média, vezes cem) da produção de leite, no
Brasil, reduziu significativamente, passando de 10,28%, em 1995, para 5,74%, em 2003,
segundo dados da Tabela 7. Nesse período, o coeficiente de variação da produção reduziu, em
média, 6,48% ao ano, conforme Gráfico 4.
Tabela 7. Coeficientes de variação do preço do leite e da produção sob inspeção, no Brasil, no

período de 1995 a 2002
Coeficiente de variação Coeficiente de variação
Ano
do preço - % da produção - %
1995 11,75 10,28
1996 10,63 9,66
1997 10,83 9,62
1998 9,56 8,19
1999 8,33 6,39
2000 13,40 10,69
2001 13,91 7,25
2002 8,39 5,74
Fonte: FGV e IBGE.
O coeficiente de variação do preço recebido pelo produtor reduziu muito menos que o
da produção, no período examinado. Em média, a queda do coeficiente de variação do preço
foi de apenas 0,61% ao ano.
A maior redução do coeficiente de variação da produção, em relação ao do preço, pode
ser entendida como o não reconhecimento, por parte do mercado, do esforço do produtor em
reduzir a sazonalidade de produção, em razão das imperfeições do mercado.
Os resultados dos comportamentos do preço e da produção podem indicar
enfraquecimento na expectativa dos resultados da política de preço mínimo, sem opção de
compra, para o leite, a ser colocada em prática em breve. Mesmo que tal política venha
contribuir para enxugar o mercado, não significa que ela será capaz de estabilizar o preço do
leite, a permanecer as atuais estruturas do mercado.
49
Gráfico 4 – Coeficientes de variação do preço e da produção de leite
16
-0,0061x
14 y = 10,974e
2
R = 0,006
12
Coeficientes de Variação - %
10
8
Preço
6
Produção
y = 11,102e -0,0648x
4 Expon. (Preço) R2 = 0,4681
Expon. (Produção)
2
-
1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002
7. Área para o gado de leite, sistemas de produção de lucratividade
De modo geral a produção de leite, no Brasil, está concentrada em pequenas

propriedades, e até mesmo os produtores que conseguem maiores volumes de produção têm
propriedades relativamente pequenas. As áreas destinadas ao gado de leite ocupam a maior
parte da propriedade, em torno de 75% da área total. A combinação desses dois argumentos
resulta, naturalmente, em pequenas áreas para o gado. De acordo com o último Censo
Agropecuário, 65% do leite produzido no país é proveniente de estabelecimentos que possuem
até 100 hectares de pasto, e praticamente 80% da produção vêm de estabelecimentos com
menos de 200 hectares de pasto, segundo dados da Tabela 8.
Tabela 8. Produção de leite de vaca, segundo grupos de área de pastagem

Brasil MG GO SP
Grupos de área de pastagem (ha)
(%) (%) (%) (%)
Menos de 10 21,92 8,42 3,31 12,33
10 a menos de 20 10,05 8,70 5,49 11,63
20 a menos de 50 17,80 19,62 16,70 21,93
50 a menos de 100 15,21 19,19 18,91 18,78
100 a menos de 200 13,97 18,69 20,54 16,30
200 a menos de 500 13,04 17,15 20,60 12,31
500 a menos de 1000 4,83 5,44 8,30 5,04
1000 e mais 3,18 2,79 6,15 1,68
TOTAL 100,00 100,00 100,00 100,00
Fonte: IBGE - Censo Agropecuário 1995-96.
50
Áreas médias para o gado de leite em alguns estados: Minas Gerais, 94 hectares; Rio
de Janeiro, 65 hectares; e Rondônia, 48 hectares. Limitações de áreas impedem o crescimento
da produção num modelo extensivo, o que significa que há necessidade de aumentar os atuais
níveis de produtividade. O ambiente econômico está recomendando flexibilizar o sistema de
produção, ajustando-o aos preços relativos e, ao mesmo tempo, aumentar, o volume de
produção, baseando-se no aumento da produtividade da terra, que é o fator limitante.
Outro aspecto da necessidade de aumentar a produtividade diz respeito à relação entre
tecnologia e lucratividade. Alguns afirmam que tecnologias que aumentam a produtividade
aumentam também o custo de produção e, por conseqüência, reduzem a lucratividade do
produtor. Outros, entretanto, defendem a tese de que o crescimento da lucratividade só poderá
acontecer com aumento da produtividade. Essa dúvida pode ser esclarecida a partir dos dados
das Tabelas 9 e 10, referentes a uma pesquisa de campo realizada recentemente no Estado do
Rio de Janeiro, onde foram entrevistados 485 produtores.
Segundo dados da Tabela 9, o custo variável médio aumentou com o aumento da
produtividade. Tal resultado dá razão àqueles que afirmaram que mais tecnologias causa
aumentos do custo por litro. Todavia, o custo total médio reduziu com o aumento da
produtividade. Agora, esse resultado dá razão àqueles que afirmaram que mais tecnologia
causa diminuição no custo por litro.
Tabela 9. Preços e custos de produção no Estado do Rio de Janeiro, segundo estratos de

produção por dia/vaca em lactação, em 2002
Produção/Vaca em lactação
Até 5 >5a8 > 8 a 12 > 12
Preço do leite R$/L 0,3701 0,3708 0,4031 0,3948
Custos variáveis R$/L 0,1435 0,2331 0,2401 0,2777
Custos fixos R$/L 0,2293 0,1353 0,1231 0,0826
Custo total R$/L 0,3728 0,3684 0,3632 0,3603
A redução do custo total médio é explicada pela significativa queda no custo fixo médio,
decorrente do aumento da produção. A seqüência é a seguinte: o aumento da produtividade
contribui para aumentar o volume de produção, que, por sua vez, contribui para reduzir o custo
fixo médio.
O elevado custo fixo médio dos estratos de baixa produtividade é explicado pela
subutilização da mão-de-obra familiar (mesmo considerando-se o baixo custo de oportunidade)
e pelo alto capital investido, em relação à produção. Em termos absolutos, o capital investido
pelo produtor de baixa produtividade é pequeno; todavia, em relação à sua pequena produção,
é alto.
Além dos resultados unitários, outros também interessantes são os totais, apresentados
na Tabela 10. Ao comparar o estrato até 5 com o de mais de 12 litros/vaca, verifica-se que a
margem bruta/litro diminuiu R$ 0,1095 (passou de R$ 0,2266 para R$ 0,1171). Entretanto, a
margem bruta/ano aumentou R$ 29.393,08 (passou de R$ 5.204,08 para R$ 34.597,16).
Em resumo, as limitações de área para o gado empurram o produtor para buscar maior
produtividade, caminho natural para aumentar a lucratividade. O aprofundamento dessas
tendências sinaliza que há amplas possibilidades de a cadeia produtiva do leite ter bom
desempenho em face aos desafios do mercado internacional e da segurança alimentar.
51
Tabela 10. Rendas, custos, margens e lucro da atividade leiteira no estado do Rio de Janeiro,
segundo estratos de produção, por dia/vaca em lactação, em 2002
Produção/Vaca em lactação
Até 5 >5a8 > 8 a 12 > 12
Renda bruta (RB) R$/ano 8.389,59 31.828,27 53.084,78 116.740,79
Custos variáveis (CV) R$/ano 3.185,51 19.772,68 31.413,83 82.143,63
Custos fixos (CF) R$/ano 5.088,01 11.473,87 16.101,28 24.438,34
Custo total (CT) R$/ano 8.273,52 31.246,55 47.515,11 106.581,97
Margem bruta (RB – CV) R$/ano 5.204,08 12.055,59 21.670,95 34.597,16
Lucro (RB – CT) R$/ano 116,07 581,72 5.569,67 10.158,82
8. Bibliografia consultada
FAERJ. Diagnóstico da cadeia produtiva do leite no Estado do Rio de Janeiro. Rio de Janeiro. FAERJ,
2003. 275 p.
GOMES, S.T. A economia do leite. Coronel Pacheco, MG. EMBRAPA – CNPGL, 1996. 205 p.
GOMES, S.T. Economia da produção do leite. Belo Horizonte, MG. Itambé, 2000. 130 p.
SEBRAE-MG/FAEMG. Diagnóstico da pecuária leiteira do Estado de Minas Gerais. Belo Horizonte, MG.
SEBRAE-MG, 1996. 312 p.
SEBRAE-RO. Diagnóstico do agronegócio do leite e seus derivados do Estado de Rondônia. Porto

Velho, RO. SEBRAE, 2002. 209 p.
SOUZA, D.P.H de. Análise da estrutura de custo e preço de sobrevivência dos principais sistemas de
produção de leite. Viçosa-MG: UFV, 2000. 85 p. (Tese Mestrado em Economia Rural).
52
FORMAÇÃO E MANEJO DO REBANHO NA AMAZÔNIA
José Ferreira Teixeira Neto1

José de Brito Lourenço Júnior2
Miguel Simão Neto3
Norton Amador da Costa4
A primeira introdução de bovinos na Amazônia ocorreu em 1644, procedentes das ilhas

de Cabo Verde. Criados inicialmente nos quintais das casas suburbanas de Belém foram
transferidos, posteriormente, para a ilha de Marajó, em 1680. Em 1803, já existiam em Marajó,
226 fazendas com um rebanho de aproximadamente 500 mil cabeças. Depois, ocorreu à
expansão para as várzeas do rio Amazonas, sempre aproveitando a exuberante oferta de
pastagens nativas.
Desde o final do século retrasado foram feitas diversas tentativas de introduzir raças
européias puras na Amazônia as quais, evidentemente, tiveram dificuldades na adaptação ao
ecossistema tropical úmido. O mesmo não aconteceu com o búfalo que, a partir da primeira
importação em 1895, encontrou condições ambientais extremamente favoráveis para
crescimento rápido do rebanho, nas pastagens de áreas inundáveis da Amazônia.
Na primeira metade do século passado, com a introdução das raças zebuínas, seguida de um
eficiente trabalho de seleção, chegou-se a um rebanho adequado e sem concorrente, para
produzir competitivamente, carne de alta qualidade, baseada principalmente em pastagens
tropicais. Restam ainda os cruzamentos industriais, entre raças zebuínas ou com raças
européias especializadas para produção de carne e leite.
A partir de 1960, a pecuária foi expandida em pastagens cultivadas de terra firme, em
decorrência da decisão política de ocupar, desenvolver economicamente e integrar a Amazônia
ao restante do país. O modelo de ocupar a região pela “pata do boi” foi escolhido por
apresentar a característica de ocupar grandes áreas com custo relativamente baixo. Para
implementá-lo, foram abertas as rodovias de integração nacional e criados incentivos fiscais e
creditícios.
Como ferramenta de ocupação da Amazônia, a atividade pecuária foi eficaz, e hoje
mais de 20 milhões de brasileiros habitam a região, que já não é um imenso vazio. As críticas
ao modelo, pelos erros cometidos no passado, principalmente em função do desconhecimento
da região e, também, pela falta de planejamento na implantação dos projetos, são merecidas
apenas parcialmente e foram longe demais ao pretender afirmar que a região não tem vocação
para a pecuária.
Apesar de todas as restrições legais e creditícias, a partir de 1995, com a nova
realidade econômica mundial e do Plano Real, a pecuária da Amazônia continua a crescer em
taxas somente possíveis para ecossistemas com elevada vocação para a atividade. Enquanto
nas demais regiões do país o rebanho diminui ou não ultrapassa crescimento de 3% entre
1990 e 1995, o da Região Norte cresceu 29% no mesmo período. Mais surpreendente, ainda, é
o crescimento da pecuária de corte e leite, na agricultura familiar, justificado pela segurança,
liquidez e agregação de valor a terra, via formação de pastagem. Evidentemente, os pequenos
produtores não estariam investindo recursos próprios em uma atividade antieconômica, uma
vez que os subsídios para essa atividade praticamente inexistem hoje em dia. Entretanto, ainda
existem limitações para se atingir o potencial produtivo do rebanho amazônico tais como:
genéticas (falta de adoção de um programa de melhoramento em muitos criatórios),
nutricionais (melhoramento e manejo das pastagens e suplementação enérgica, protéica e
mineral), sanidade e conforto animal.
____________
1. Eng. Agrôn., MSc em Forragicultura, Embrapa Amazônia Oriental. teixeira@cpatu.embrapa.br
2. Eng. Agrôn., DSc em Biologia Ambiental, Embrapa Amazônia Oriental. lourenco@cpatu.embrapa.br
3. Eng. Agrôn., PhD em Forragicultura, EmbrapaAmazônia Oriental. simao@cpatu.embrapa.br.
4. Médico Veterinário, Embrapa Amazônia Oriental.norton@cpatu.embrapa.br.
53
Somente utilizando a tecnologia disponível será possível aproveitar o elevado potencial

produtivo das pastagens e do rebanho, intensificando a pecuária e, quando conveniente
integrando-a com culturas perenes ou de ciclo curto. A utilização de sistemas agrossilvipastoris
ou silvipastoris, com espécies arbóreas de alto valor comercial, é uma alternativa atraente,
pela diversificação de culturas e da renda e pela valorização da propriedade. Hoje, o Município
de Paragominas tem uma política agrícola definida que inclui criar o rebanho existente em 50%
da área utilizada, via intensificação da pecuária. Os restantes 50% seriam utilizados para
outras culturas como grãos, pimenta-do-reino, fruticultura reflorestamento, etc. Dessa forma
seria contida a derrubada de novas áreas de floresta nativa.
Na sociedade atual o produtor rural tem que monitorar os cenários presentes e futuros,
para detectar ameaças e oportunidades para o seu agronegócio. Somente assim poderá
transformar ameaças em oportunidades, a exemplo da rastreabilidade de seu rebanho. Além
disso, tem que estar unido e organizado para defender os interesses do seu segmento.
Pressões ambientalistas, insegurança no campo, redução das atividades da pesquisa
agropecuária, o mercado e a desorganização da cadeia produtiva são algumas ameaças
prementes que devem ser enfrentadas.
Gestão empresarial associada uso de tecnologia, introdução de sistema de custo de
produção, redução da idade de abate e abertura de novos nichos de mercado são alguma
oportunidades que não devem ser desperdiçadas.
Da administração das ameaças e oportunidades pode-se construir dois cenários para a
pecuária da Amazônia. O primeiro, sombrio, se prevalecerem os interesses nem sempre
confessáveis das correntes contrárias à atividade, que são as mesmas que tentam obstruir
todas as iniciativas que visem o desenvolvimento da região. O segundo, promissor,
aproveitando toda a potencialidade da Amazônia e de seu rebanho para a produção
sustentável de proteína animal, do ponto de vista biológico, econômico, social e ambiental.
Deve-se ter sempre em mente que a qualidade de vida do ser humano deve ser a meta
principal de qualquer estratégia de desenvolvimento, com a menor alteração possível ao
ambiente.
A pecuária está, sem dúvida, entre as maiores vocação da Amazônia, que tem
condições extremamente competitivas para produzir o “boi verde” e o “boi orgânico” com a
segurança alimentar que a sociedade moderna deseja e continuará demandando mais
intensivamente no futuro.
54
VISÃO ATUAL E PROSPECTIVA DA PECUÁRIA NA AMAZÔNIA: VÁRZEAS
Newton de Lucena Costa1
1. Introdução
Os rios da Amazônia estão sujeitos a um período de enchentes, durante o qual a água

transborda dos seus leitos e invade as áreas marginais, inundando-as em diferentes graus de
intensidade. A maioria dos rios traz em suas águas consideráveis quantidades de sedimentos e
no transcorrer das enchentes esses detritos minerais e orgânicos se depositam sobre as
margens, proporcionando grande fertilidade e valor para a produção intensiva de alimentos
(Lima, 1986).
O processo de sedimentação se repete em todas as inundações e o incremento de
fertilidade resultante de novas colmatagens permite a exploração agrícola dessas áreas, anos
consecutivos, sem que haja declínio da produtividade que comprometa os resultados
econômicos das culturas agrícolas. As primeiras tentativas de utilização agrícola das várzeas
da Amazônia brasileira remotam ao início do século XVIII e foram realizadas pelos padres
jesuítas, carmelitas e fransciscanos, nas fazendas estabelecidas no estuário amazônico (Lima,
1986).
As várzeas litorâneas são aquelas formadas no baixo curso dos rios que desaguam
diretamente no Oceano Atlântico, tendo as suas nascentes próximas ou distantes da orla
marítima. Estão localizadas na costa amapaense, nordeste do Pará e noroeste do Maranhão.
Dentre os rios em que ocorre esse tipo de várzea destacam-se o Araguari, Flechal, Calçõene,
Cassiporé, Oiapoque e Uaçá, no Amapá; o Pericumã, Turiaçu e Maracassumé, no Maranhão e
Marapanim no Pará (Lima, 1986).
2. Pastagens Nativas
As pastagens nativas têm desempenhado um papel extremamente importante na região

Amazônica. Até início da década de 60, antes do advento das rodovias de integração da
Amazônia, a pecuária de corte na região era baseada quase que exclisivamente na exploração
extensiva das pastagens nativas. Com a abertura das rodovias de integração, que propiciaram
a expansão da pecuária em áreas de floresta, as pressões sobre as pastagens nativas foram
reduzidas. No entanto, a utilização mais intensiva dos ecossistemas de pastagens nativas
poderá contribuir para a diminuição da pressão da pecuária nas áreas de floresta da região
(Serrão, 1986).
Considerando-se o aspecto hidrológico, as pastagens nativas da região Amazônica foram
classificadas como pastagens nativas de áreas inundáveis – que incluem as áreas de
pastagens sujeitas a inundações permanentes ou periódicas, como as áreas de pastagens das
várzeas do baixo e médio Amazonas e os campos da ilha do marajó – e as pastagens nativas
de terra firme, que incluem as pastagens nativas de savanas tipo cerrado (Serrão e Simão
Neto, 1975; Serrão e Falesi, 1977).
2.1 Pastagens Nativas de Savanas Mal Drenadas
Representam um ecossistema intermediário entre as pastagens nativas de savanas bem

drenadas e as de solos aluviais. Geralmente está associado com um ecossistema semelhante
ás pastagens nativas de solos aluviais na sua parte mais baixa. Os gradientes 1 e 2
correspondem á savana mal drenada propriamente dita e o gradiente 3 á vegetação herbácea
semelhante às pastagens de solos aluviais (Figura 1)(Serrão, 1986). Na estaçao chuvosa
1. Eng. Agr., M.Sc., Embrapa Amapá, Caixa Postal 10, CEP 68906-970, Macapá, Amapá
55
(fevereiro/julho) o gradiente 1 (mata ciliar + teso) é o mais importante para a alimentação do

rebanho. Na estação seca (agosto/janeiro) os gradientes 2 (faixa de transição) e o 3 (campos
baixos + lago) também são pastejados por bovinos. Os bubalinos podem utilizar praticamente
todo o ecossistema por todo o ano (Serrão, 1986).
Figura 1. Corte transversal de um ecossistema de savanas mal drenadas típico, como ocorre
na parte oriental da ilha do Marajó, Pará. Adaptado de Organização dos Estados Americanos
(1974).
O clima, segundo a classificação de Köppen, é do tipo Ami, tropical chuvoso, com

precipitação anual média de 2.500 mm, temperatura média de 27ºC e umidade relativa do ar
em torno de 85% (Teixeira Neto et al., 1991). O período de máxima precipitação vai de janeiro
a junho e o de mínima de setembro a novembro. No período de fevereiro a março ocorre cerca
de 50% da precipitação anual.
Os solos predominantes são os Inceptissolos (lateritas hidromórficas e solos
hidromórficos gleisados), Entissolos (solos podzólicos hidromórficos e areias quartzosas) e os
Oxissolos (latossolos). Exceto os solos de aluvião, os demais são ácidos e de baixa fertilidade
natural (Tabela 1).
Tabela 1. Características físicas e químicas dos principais solos do ecossistema de pastagens

de savanas mal drenadas da ilha do Marajó.
Solos Argila total Mat. pH Ca + Al K P
Org. Mg
-----------g/kg------------ --mmol/kg---- ---mg/kg----
Oxissolo
Latossolo Amarelo (textura média) 140 22,4 4,7 3,2 20,3 16 2,0
Entissolo
Areia Quartzosa Distrófica 80 19,6 4,9 2,0 14,2 23 1,4
Inceptissolo
Laterita Hidromórfica 100 17,2 4,3 1,2 20,8 23 1,6
Laterita Hidromórfica (fase arenosa) 0 14,6 4,8 1,6 10,0 12 2,3
Laterita Hidromórfica (fase baixa) 40 22,5 4,3 3,2 18,2 19 5,7
Laterita Hidromórfica (fase húmica) 300 61,2 4,9 3,0 30,9 19 1,6
Glei Pouco Húmico 670 23,3 4,2 103,2 101,9 59 1,1
Aluvial 190 1,62 4,9 13,4 6,2 70 47,0
Fonte: Organização... (1974); Silva (1994); Camarão & Souza Filho (1999)
56
As gramíneas constituem o principal componente do estrato herbáceo. No gradiente 1,

parte mais alta da pastagem, as gramíneas que predominam são Axonopus affinis, A.
compressus, Andropogon leucostachyus, Trachypogon plumosus, T. vestitus, Eragrostis
reptans e Eleusina indica, enquanto que as leguminosas mais frequentes são Cassia diphylla,
Desmodium barbatum, Centrosema brasilianum, Stylosanthes spp., Aeschynomene spp.,
Macroptilium spp. e Zornia spp.. No gradiente 2, áreas com três a seis meses de alagamento,
as gramíneas que se destacam são A. affinis, A. purpusii, A. compressus, Paspalum
vaginatum, P. conjugatum, P. densum, P. fasciculatum, P. plicatulum, Panicum laxum, P.
aquaticum, P. nervosum e Setaria geniculata, sendo a ocorrência de leguminosas rara e de
pouca importância. No gradiente 3, áreas permanentemente alagadas, as gramíneas
predominantes são Eriochloa punctata, Echinochloa polystachia, Hymenachene amplexicaulis,
H. donacifolia, Leersia hexandra, Luziola spruceana, Oryza alta, O. perennis, Panicum
zizenoides, Paspalum repens e P. fasciculatum.
As gramíneas são, na sua maioria, típicas dos ecossistemas de vegetação tipo savana
e, consequentemente, intrinsecamente de baixo potencial de produtividade e baixo valor
nutritivo. Sua produtividade primária no gradiente 1- que geralmente é mai produtivo que o
gradiente 2 – dificilmente ultrapassa 6 t de matéria seca/ha/ano (Teixeira Neto e Serrão, 1984),
sendo que a capacidade de suporte dos gradientes 1 e 2 varia de 3 a 5 ha/UA (Embrapa,
1980). Ademais, os extremos de cheias e secas são também fatores que limitam a
produtividade das pastagens. No primeiro caso, e principalmente na parte central da ilha do
Marajó, imensas áreas de pastagens ficam submersas, forçando os rebanhos a se
concentraram nas áreas mais altas ou tesos (gradiente 1), reduzindo consideravelmente a
disponibilidade de forragem. No segundo caso, dependendo da extensão e intensidade do
período seco, o crescimento das plantas forrageiras é muito reduzido e o valor nutritivo desce a
níveis muito baixos, ficando disponível ao rebanho as pastagens do gradiente 3, nem sempre
acessível aos bovinos (Serrão, 1986).
A exploração de gado na ilha do Marajó é basicamente para corte e as pastagens
nativas representam a principal fonte de alimentação para os rebanhos. Nessas condições a
produtividade é baixa – 24 kg de peso vivo/ha/ano. Os bovinos são abatidos aos 50 meses,
pesando 347 kg. Os búfalos, por apresentarem melhor adaptação ao ecossistema, atingem o
peso de abate de 402 kg aos 30 meses de idade (Arima e Uhl, 1996; Camarão e Souza Filho,
1999). No entanto, é possível o melhoramento das pastagens nativas com manejo adequado,
que permita aumentar a taxa de lotação para 1 animal/ha, sem reduzir os ganhos de
peso/animal. A introdução de B. humidicola e leguminosas em faixas não mostrou resultados
compensadores como a substituição total da pastagem nativa pela gramínea (Tabela 2).
Tabela 2. Ganhos de peso de bovinos em pastagens nativas e melhoradas da ilha do Marajó.
Pastagem Taxa de lotação Ganho de Ganho de

(animal/ha) peso/animal peso/ha (kg)
Nativa 0,5 0,300 55
1,0 0,315 115
B. humdicola (BH) 1,4 0,384 196
2,7 0,359 354
½ nativa + ½ BH + leguminosas + adubação 1,0 0,290 106
1,9 0,323 224
Leguminosas = Pueraria phaseoloides, Centrosema pubescens, Stylosanthes guianensis
Adubação = 50 kg de P2O5/há
Fonte: Teixeira Neto e Serrão, (1984); Teixeira Neto e Veiga (1987)
As pastagens nativas da ilha do Marajó, durante os últimos 300 anos, têm sido
exploradas, notadamente, com o gado de corte, em sistemas de manejo ultra-extensivo.
Atualmente, estima-se o rebanho em cerca de 562 mil bovinos e 550 mil bubalinos, além de
100 mil eqüinos. A capacidade de suporte das pastagens foi estimada em 4,5 ha/animal. O
sistema de criação é o de cria-recria e engorda. Apenas uma vez ao ano, na época seca, os
animais são separados, contados e marcados. Poucos são os produtores que fornecem sal
57
mineral e vacinam o rebanho. Predomina na região a criação de bovinos mestiços da raça

Nelore e bubalinos, principalmente da raça Mediterrâneo. A natalidade para bovinos oscila
entre 55 e 65% e para bubalinos entre 75 e 85% (Azevedo et al. 1998a,b). Os índices de
mortalidade de animais de um ano e de um a dois anos de idade são de 12 e 8% e a idade à
primeira cria de quatro anos (Embrater, 1982). Trabalhos realizados por Guimarães e
Nascimento (1971) e Nascimento et al. (1993) constataram que a inclusão de fonte de fósforo
(farinha de ossos ou fosfato bicálcico) na suplementação mineral implicou em acréscimos de 38
e 44%, respectivamente para a taxa de natalidade e os ganhos de peso de bovinos.
2.2 Pastagens Nativas de Solos Aluviais
O ecossistema é formado, principalmente, nas áreas de várzeas que ocorrem, via de

regra, em associação com as águas barrentas e turvas do rio Amazonas e de tributários seus
que carregam partículas orgânicas e minerais em suspensão que são depositadas anualmente
por ocasião da vazante dos rios (colmatagem), fazendo com que os solos sejam considerados
de alta fertilidade quando comparados com os de terra firme. As pastagens nativas dos solos
aluviais de várzeas, estimadas em 25 milhões de hectares, têm representado papel
fundamental na exploração de bovino e bubalinos da Amazõnia (Serrão, 1986). Ocorrem em
locais submetidos aos climas Aw e Am. Os valores médios de temperatura oscilam entre 24 e
28ºC. A precipitação varia entre 1.500 e 3.500mm/ano, ocorrendo um superávit no período de
janeiro a junho e um déficit de agosto a dezembro (Camarão e Souza Filho, 1999).
Os solos predominantes são os hidromórficos, notadamente os Inceptissolos, predominando os
Glei Húmico e Glei Pouco Húmico, os quais apresentam alta fertilidade natural (Tabela 3).
Tabela 3. Características químicas de solos aluviais de várzeas típicas da Amazônia.

Locais pH Ca + Mg Al K P
mmol/kg mg/kg
Monte Alegre, Pará (Baixo Amazonas) 5,4 6,0 2 230 51
Marajó, Pará (Estuário do Amazonas) 4,9 7,4 -- 168 18
Amapá, AP (Estuário do Amazonas) 5,7 8,2 8 147 68
Barreirinha, Amazonas (Médio Amazonas) 5,1 6,1 8 75 42
Fonte: Serrão (1986)
O estrato herbáceo é o segmento mais importante de um ecossistema de várzea, sendo

as gramíneas o componenente mais importante, destacando-se as seguintes espécies, sob o
ponto de vista de alimentação animal: Echinochloa polystachia, Hymenachene amplexicaulis,
Leersia hexandra, Luziola spruceana, Paspalum fasciculatum, Oryza alta, O. grandiglumis, O.
perennis, Paspalum repens, Panicum zizanoides, Panicum elephantipes, Ericochloa punctata e
Paratheria prostrata (Serrão e Simão Neto, 1975; Serrão e Falesi, 1977). Dentre as
leguminosas, as espécis que ocorrem com certa frequência são: Mimosa sp., Teramnus
volubilis, Cassia sp., Rhinchosia minima, Galactia sp., Vigna vexillata, Clitoria amazonum,
Sesbania exasperata, Macroptilium sp., Aeschynomene sensitiva e A. rudis.
As gramíneas de solos aluviais quando estabelecidas em diferentes solos inundáveis
apresentaram produções de forragem variando de 3,7 a 18,1 t/ha/ano de matéria seca. Essa
variação ocorre devido as condições específicas de clima, nível de fertilidade dos solos,
espécies forrageiras e tempo de inundação da área (Nascimento et al. 1987, 1988). As
pastagens de solos de várzeas podem produzir mais de 20 t de MS/ha/ano, principalmente no
período seco do ano (Serrão, 1986). Pastagens de P. fasciculatum produziram 180 t/ha de
matéria verde, o que correspondeu a 45 t de Ms/ha (Junk, 1986). As gramíneas O. perennis, H.
amplexicaulis e P. repens podem fornecer até 10 t de MS/ha, enquanto que L. spruceana
produz de 5 a 8 t de MS/ha, as quais são bem superiores àquelas reportadas para gramíneas
de terra firme – 660 a 1.614 kg/ha (Teixeira Neto e Serrão, 1984, Camarão et al., 1996). O teor
médio de proteína bruta em 160 amostras de gramíneas nativas de áreas inundáveis do médio
Amazonas foi de 10,3%. As gramíneas P. fasciculatum, P. repens, H. amplexicaulis, E.
polystachya, Oryza sp., e L. hexandra apresentaram, respectivamente, 6,7; 12,6; 10,8, 8,2 e
58
12,4% de proteína bruta (Camarão et al., 1998). A digestibilidade in vitro da matéria seca
(DIVMS) oscilou de 22,9 a 69,9%. E. polystachya (51,7%) e H. amplexicaulis (51,9%) foram as
que apresentaram os maiores coeficientes de DIVMS e P. fasciculatum (36,3%) o menor valor.
Os teores médios de P (1,9 g/kg), Ca (3,1 g/kg), Mg (2,1 g/kg) e K (22,5 g/kg) são suficientes
para atender as necessidades mínimas de bovinos de corte.
As gramíneas nativas de solos aluviais apreentam um grande potencial produtivo e
qualitativo, o que reflete na obtenção de bons índices de desempenho zootécnico de bubalinos
(Tabela 4). Em pastagens nativas de várzeas, Sardinha e Marques (1993) observaram ganhos
de peso em diversas categorias animais variando de 0,376 a 0,792 kg/animal/dia. Os ganhos
de peso obtidos pelos búfalos das raças Mediterrâneo, Murrah, Jafarabadi e Carabao foram,
respectivamente, 0,632; 0541; 0,454 e 0,419 kg/animal/dia. Os animais Murrah e Mediterrâneo
foram manejados em pstagens onde predominavam gramíneas de melhor valor nutritivo, como
E. polystachya, H. amplexicaulis, L. hexandra, Oryza sp. e P. repens, as quais apresentaram
maior disponibilidade de forragem.
Tabela 4. Produção de carne de bubalinos machos em pastagens nativas de solos aluviais de

várzeas. Monte Alegre, Pará.
Raças Ganho de peso diário (kg) Peso aos dois anos (kg)
Mestiços Murrah x Mediterâneo 0,572 453

Mediterrâneo 0,493 394
Baio 0,416 336
Jafarabadi 0,416 341
Carabao 0,417 349
Fonte: Moreira et al. (1984)
Os bubalinos não têm sido muito utilizados para a produção comercial de leite no Brasil,
principalmente por ser uma exploração desenvolvida, na maioria das vezes, em áreas de terras
inundáveis, as quais são de difícil acesso aos centros consumidores e caracterizam-se pelo
uso de um sistema de criação extensivo (Camarão e Souza Filho, 1999). Moura Carvalho et al.
(1980) relataram para pastagens nativas de solos aluviais do médio Amazonas, em fêmeas
bubalinas do tipo Baio, uma produção de 1.024 kg e leite, em 253 dias, com uma média diária
de 4,05 kg e um teor de gordura de 8,32%, evidenciando o alto potencial de bubalinos para a
pridução satisfatória de leite em pastagens aluviais.
2.3 Campos Inundáveis do Amapá
As formações pioneiras compreendem áreas sedimentares de formação recente,

ocupando uma faixa litorânea desde a fos do rio Oiapoque até o estuário do rio Amazonas.
Abrange uma superfície de 17.445 km2, equivalente a 12,44% do Amapá, sendo representada
por duas sub-regiões: mangues e campos inundáveis. Os solos da região são principalmente
os Hidromórficos Gleyzados e em pequena escala as Lateritas Hidromórficas (Brasil, 1979). Os
Gleyzados desenvolveram-se sobre sedimentos recentes, com textura de franco-argilo-siltoso e
argilo-siltoso, mal drenados, de boa fertilidade e moderada acidez. As Lateritas são formadas
por sedimentos terciários e quartenários, ocorrendo nos tesos e em áreas baixas inundáveis.
Possuem fertilidade natural baixa, elevada acidez e drenagem imperfeita (Peres et al., 1974).
As pastagens dos campos do Amapá são de excelente qualidade, destacando-se a
ocorrência de Leersia hexandra, Hymenachne donacifolia, H. amplexiscaulis, Echinochloa
polystachia e Oryza perennis. Em locas com influência marítima observa-se a ocorrência da
grama-preta (Ericochloa sp.)(Black, 1950; Dantas et al., 1983). Nas partes baixas, em locais
sempre alagados, a vegetação tm maior porte e é composta por aninga (Montrichardia
arborescens), tiriricão (Scleria sp.), buriti (Mauritia flexuosa) e piri (Cyperus giganteus)(Leite et
al., 1974).
59
Os criadores adotam um sistema ultra-extensivo deixando os animais sujeitos às

variações estacionais das pastagens nativas. As propriedades não apresentam cercas
divisórias e piquetes, não havendo controle da taxa de lotação e manejo das pastagens. A
criação de bovinos caracteriza-se por um sistema migratório. Durante a estação chuvosa, os
animais permanecem nas pastagens nativas dos cerrados, quando ocorre uma significativa
perda de peso dos animais, devido à baixa capacidade nutricional das pastagens. No início do
período seco, os campos inundáveis começam a secar dando lugar a extensas áreas de
pastagens nativas de bom valor nutritivo, para onde os bovinos são transferidos. Nestas
pastagens, os animais apresentam rápida recuperação obtendo ótimos índices de ganho de
peso. Os bubalinos utilizam principalmente as pastagens da região dos lagos. No período das
enchentes os tesos são utilizados como refúgio pelos rebanhos. Os búfalos vêm obtendo
melhores índices zootécnicos, devido a sua melhor adaptação ao pastejo em áreas alagadas,
consumindo durante o ano todo, pastagens de boa qualidade nutricional. A falta de um manejo
adequado tem contribuído para o aumento da ocorrência de plantas invasoras, notadamente o
algodão-bravo (Ipomoea fistulosa), a salsa (Ipomoea asarifolia) e dos mururés (Eichornia spp.),
as quais predominam em áreas intensamente pastejadas, geralmente próximo aos currais
(Mochiutti e Meirelles, 1994).
As práticas de manejo restringem-se a transferência dos animais de uma região para
outra; proteção contra animais selvagens e marcação. A mineralização não é utilizada e os
poucos casos restringem-se ao sal comum. A estação de monta e o piquete maternidade não
são utilizados e a desmama é natural. Entre os bovinos há uma tendência natural de aumento
de pariçoes no período de agosto a outubro, enquanto que para os bubalinos a concentração
dos nascimentos ocorre de agosto a novembro. A vermifugação é realizada em algumas
propriedades, no máximo duas vezes ao ano, principalmente nos animais jovens. Há uma
grande incidência de verminose gastrintestinal e pulmonar, notadamente em animais jovens. A
dispersão da brucelose é facilitada pela grande quantidade de água acumulada e
promiscuidade dos animais, que transitam livremente de uma fazenda para outra. Os bubalinos
têm apresentado maior resistência à aftosa, com sisntomas mais brandos, além de
recuperação mais rápida (Alves et al., 1992).
A bacia leiteira do Amapá é inexpressiva, sendo o Estado dependente quase que
totalmente da importação de leite em pó para o abastecimento local. Atualmente, a produção
diária é um pouco superior aos 8 mil litros, o que proporciona uma produção anual de 3.062
milhões de litros (Bressan et al., 2002). A produção média diária por produtor é inferior aos 20
litros. O rebanho é formado por animais mestiços Girolandos, sendo a consagüinidade comum
na maioria das proriedades. A produção média é de 3,0 litros/vaca/dia.
Conclusões
As pastagens nativas de savanas mal drenadas e de solos aluviais devem continuar

desempenhando um papel relevante no desenvolvimento da pecuária da Amazônia. Apesar de
serem ecossistemas frágeis, ecologicamente são mais estáveis, desde que submetidos a
práticas de manejo adequadas. O estabelecimento de uma pecuária mais competitiva na região
exigirá a adoção de um conjunto de medidas que viabilizem a exploração pecuária, tanto em
bases agronômicas quanto econômicas. A seleção de germoplasma forrageiro mais produtivo e
adaptado às condições ecológicas da região; a utilização de práticas de manejo de solo
(correção e adubação); a integração entre as pastagens nativas e cultivadas e o manejo
reprodutivo e sanitário dos rebanhos são práticas que podem contribuir de forma significativa
para o aumento da competitividade da pecuária, conciliando produtividade animal com
sustentabilidade econômica, social e ambiental
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62
FORMAÇÃO E MANEJO DE PASTAGENS NA AMAZÔNIA BRASILEIRA
1. Introdução
As pastagens representam a principal e mais barata fonte de alimentos para os

ruminantes, mas nem sempre são manejadas de forma adequada, muitas vezes devido à falta
de conhecimento das suas condições fisiológicas de crescimento e composição nutricional.
Manejar uma pastagem de forma adequada significa produzir alimentos em grandes
quantidades além de procurar o máximo valor nutritivo da forragem. A produção de matéria
seca afeta significativamente a capacidade de suporte das pastagens (número de animais por
área), e está influenciada pela fertilidade do solo, manejo e condições climáticas, enquanto que
o valor nutritivo afeta a produção por animal (kg de carne/animal, produção de leite/vaca etc.) e
depende principalmente da digestibilidade e do consumo de forragem, que são afetadas
principalmente pela idade da planta. Associando-se a capacidade de suporte e a produção por
animal, temos a produção por área de pastagem, que via de regra é o principal fator que
determina a eficiência no manejo de pastagens.
No manejo de pastagens o principal objetivo é assegurar a produtividade animal, a
longo prazo, mantendo sua estabilidade e persistência. Para que se possa alcançar alta
produção animal em pastagens, três condições básicas devem ser atendidas: a) alta
produtividade de forragem com bom valor nutritivo, se possível, com distribuição estacional
concomitante com a curva anual dos requerimentos nutricionais dos animais; b) propiciar aos
animais elevado consumo voluntário, e c) a eficiência de conversão alimentar dos animais deve
ser alta. Dentre os fatores de manejo que mais afetam a utilização das pastagens, destacam-se
a carga animal e o sistema de pastejo.
A carga animal ou intensidade de pastejo influi na utilização da forragem produzida,
estabelecendo uma forte interação com a disponibilidade de forragem como consequência do
crescimento das plantas, da defoliação e do consumo pelos animais. Já, o sistema de pastejo
está relacionado com os períodos de ocupação e descanso da pastagem e tem por finalidade
básica manter uma alta produção de forragem com bom valor nutritivo, durante a maior parte
do ano, de modo a maximizar a produção por animal e/ou por área.
O manejo de pastagens pode ser caracterizado como o controle das relações do
sistema solo-planta-animal visando maior produção e melhor utilização e persistência das
pastagens. Em termos práticos, um animal em pastejo representa a forma mais simples do
sistema solo-planta-animal. O solo é a base do sistema e atua como fonte de nutrientes para a
pastagem. A planta é a fonte de nutrientes para o animal e atua como modificador das
condições físicas e químicas do solo. O animal atua como modificador das condições do solo e
da planta.
Um manejo satisfatório é aquele em que: 1. controla-se a pressão de pastejo, que pode
ser expressa em termos de carga animal (número de animais por unidade de área), da
forragem disponível por animal ou da altura da pastagem após um período de utilização
(pastejo rotativo) ou em utilização (pastejo contínuo) (Tabela 1); 2. controlam-se os períodos de
ocupação e descanso, constatando a perfeita recuperação da pastagem.
Os descansos periódicos da pastagem dependem do sistema de pastejo adotado,
podendo ser contínuo e rotativo. O contínuo é caracterizado pela permanência dos animais na
pastagem durante toda a estação de pastejo. Apresenta reduzido investimento em instalações
e equipamentos; maior seletividade dos animais na coleta de forragem e distribuição irregular
do pastejo, fezes e urina. No pastejo rotativo as áreas são subdivididas em dois ou mais
piquetes, proporcionando descansos periódicos às plantas forrageiras, cuja duração depende
do número de divisões e extensão do período de ocupação de cada piquete. Caracteriza-se por
63
maior investimento em instalações e equipamentos; menor seletividade animal; manejo mais

sofisticado e distribuição mais regular do pastejo, fezes e urina.
Tabela 1. Alturas mínimas (cm) indicadoras da pressão de pastejo considerada ótima para
algumas plantas forrageiras.
Espécies Pastejo contínuo Pastejo rotativo
Panicum maximum (colonião) 40-50 30-40

Brachiaria humidicola (quicuio-da-Amazônia) 15-20 10-15
Setaria sphacelata 30-40 25-30
B. brizantha cv. Marandu 30-40 25-30
B. decumbens 25-30 20-25
Andropogon gayanus cv. Planaltina 30-40 25-30
Pennisetum purpureum (capim-elefante) --- 70-90
Echinochloa pyramidalis (canarana) 30-40 20-25
Paspalum plicatulum 20-25 15-20
Paspalum atratum cv. Pojuca 25-30 20-25
A divisão das pastagens é uma prática de grande importância tanto para o manejo do
rebanho quanto das pastagens. O número de divisões varia de acordo com as categorias
animais existentes no rebanho e no sistema de pastejo adotado (contínuo, alternado ou
rotativo). O tamanho das divisões depende de cada rebanho (número de animais por categoria
animal) e da capacidade de suporte das pastagens. A distribuição e a forma das divisões
devem ser compatíveis com a disponibilidade das aguadas naturais da propriedade, sempre
visando a economia de cercas.
No manejo de uma pastagem deve-se procurar: a) manter a população e a produtividade
das espécies forrageiras existentes na pastagem, visando a utilização uniforme durante o ano;
b) adequar o máximo rendimento e a qualidade da forragem produzida, com base no pastejo
controlado, visando à produção econômica por animal e por área; c) suprir as exigências
nutricionais segundo as diferentes categorias de animal e ciclo de produção; e, d) manejar
adequadamente o complexo solo - planta - animal para produção econômica, tanto para o
produtor como para o consumidor, de produtos de origem animal.
Dentre os fatores relacionados ao manejo de pastagem, os mais sujeitos a intervenção direta
do homem são:
a) a produção e a qualidade da forragem produzida na pastagem;
b) o consumo animal;
c) sistema de pastejo adotado;
d) equilíbrio da composição botânica da pastagem; e
e) correção e fertilização do solo na formação e manutenção da pastagem.
O corte ou pastejo de uma planta forrageira acarreta uma série de alterações em sua
morfologia e fisiologia, sendo as principais:
* diminuição na absorção de água e, consequentemente de nutrientes;

* paralisação temporária no crescimento de raízes; e
* menor eficiência fotossintética.
Com base nestas alterações foram postulados os princípios básicos do manejo de pastagens,
considerando os aspectos morfológicos e fisiológicos das plantas forrageiras.
Quanto ao habito de crescimento as plantas forrageiras são agrupadas em dois grupos:
as cespitosas de crescimento ereto, formando touceiras; e as estoloníferas/rizomatosas de
crescimento rasteiro ou prostrado. As primeiras por exporem mais facilmente os seus
meristemas apicais à decapitação, necessariamente devem ser manejadas sob pastejo menos
intenso (manter resíduos de maior porte), e ou sob pastejo rotativo; enquanto que as de
64
crescimento rasteiro toleram pastejo mais intenso, pois seus meristemas apicais ficam menos
expostos a decapitação pelos animais. Já que os meristemas apicais (gemas apicais), são os
tecidos responsáveis pela produção das novas folhas, alongamento dos caules e
inflorescências, determinantes na intensidade de rebrota logo após o corte ou pastejo.
As gemas axilares e basilares, também são tecidos que promovem a rebrota das
plantas, sendo a presença das axilares fator determinante no manejo do pastejo em espécies
forrageiras de crescimento cespitoso, como o capim-elefante. Quanto aos aspectos fisiológicos,
o índice de área foliar (IAF) e as reservas orgânicas são os mais importantes. O IAF representa
a ralação entre a área de folhas e a superfície de solo coberta por elas (m2 de folha/m2 de
solo). Expressa o potencial de rendimento de forragem, relacionado com a utilização da
energia solar, através da fotossíntese. Com o aumento da interceptação, ocorre
simultaneamente incrementos no rendimento de forragem, até ser atingido um platô, quando as
folhas mais velhas entram em senescência e são sombreadas pelas mias novas, acarretando
na diminuição da eficiência fotossintética com menores taxas de crescimento. O IAF ótimo de
uma forrageira é aquele associado com altos rendimentos bem distribuídos ao longo da
estação de crescimento, normalmente se dá quando as folhas interceptam cerca de 90% da
energia radiante incidente. As leguminosas por apresentarem as folhas na posição horizontal,
são capazes de interceptarem mais luz por unidade de área foliar do que as gramíneas, com
folhas semi - eretas.
O IAF remanescente, ou seja, a quantidade de tecido fotossinteticamente ativo que
permanece na planta após o pastejo ou corte, é de fundamental importância no manejo de uma
pastagem. Quando este deixar a planta em situação de equilíbrio entre a fotossíntese
(absorção de CO2) a respiração (liberação de CO2), a rebrota subsequente, se dará às
expensas do produto da fotossíntese de IAF remanescente, no entanto deve-se considerar que
a eficiência fotossintética diminui à medida que as folhas vão ficando mais velhas. Pôr outro
lado, se as forrageiras forem manejadas sob desfolha intensa o crescimento do sistema
radicular e o acumulo de carboidratos de reservas, serão prejudicados.
As reservas orgânicas são substâncias orgânicas (açucares, sacarose, amido e
frutosanas) armazenadas pelas plantas forrageiras, em certos períodos, nos órgãos mais
permanentes (raízes, base dos caules, estolões, rizomas etc.), para serem utilizadas, em
momento oportuno (rebrota após pastejo, períodos críticos, dormência), como fonte de energia
ou como percursores de tecido estrutural. Após o pastejo ou corte que reduza drasticamente a
área foliar, observa-se uma queda acentuada na concentração de carboidratos de reservas, já
que com a interrupção do processo de fotossíntese, estes são utilizados como fonte de energia
para a respiração e constituição de novos tecidos (rebrota). Com o progressivo
restabelecimento da área foliar, com aumento da capacidade fotossintética da planta, o
acumulo de carboidratos de reserva será crescente, enquanto o processo de fotossíntese se
equivaler ou superar o de respiração.
Diante do exposto, pode-se inferir que tanto o super como o subpastejo são prejudiciais
à pastagem. Enquanto que no superpastejo, as desfolhações intensas e freqüentes eliminam
drasticamente a área foliar e consequentemente esgotam as reservas orgânicas das plantas,
além de exporem os pontos de crescimento a decapitação, redundando em menor produção de
forragem (vigor de rebrota) e persistência das plantas forrageiras. Já no subpastejo, se dá o
acumulo de tecidos com baixa capacidade fotossintética e senescente, resultando em menor
área foliar ativa, com diminuição das reservas orgânicas, além de produzir forragem de baixo
valor nutritivo.
No Acre, observou-se que a elevação da taxa de lotação (0,5; 1,0 e 1,5 animais/ha), em
pastagens de Panicum maximum cv. Colonião, refletiu em reduções lineares na disponibilidade
de forragem e ganhos de peso/animal, contudo implicou nos maiores ganhos/ha. Da mesma
forma, avaliando-se a produtividade animal de quatro gramíneas forrageiras tropicais
(Brachiaria decumbens, P. maximum cvs. Colonião e Guiné, Hyparrhenia rufa), verificou-se um
efeito linear e negativo da taxa de lotação (0,8; 1,2; 1,6 e 2,0 UA/ha) sobre o ganho de
peso/animal. Apesar das excelentes condições climáticas ocorridas quando da condução do
experimento, além da adubação química efetuada (300 kg/ha de superfosfato simples e 200
65
kg/ha de cloreto de potássio), a utilização de cargas de 1,6 ou 2,0 UA/ha foram consideradas
muito altas para a região.
A utilização de praticas adequadas no manejo de pastagens de alta produção e uma
necessidade para se evitar a degradação. O pastejo rotativo pode se constituir num sistema
adequado para se atingir tal objetivo e proporcionar aumentos significativos na produtividade
animal, embora as vantagens do sistema rotativo sobre o continuo sejam contestadas.
Entretanto, reconhece-se que no caso de espécies cespitosas, que apresentam rápida
elevação dos meristemas apicais, a adoção do pastejo rotativo, facilita o manejo destas
pastagens. Não obstante, considera-se viável que à longo prazo, faz-se necessário a adoção
de algum sistema de pastejo intermitente, principalmente quando se utilizam taxas de lotação
relativamente altas, de modo a favorecer a persistência da pastagem e assegurar uma
produção animal mais estável.
Em Rondônia, em pastagens de Setaria sphacelata cv. Kazungula, avaliadas durante
dois anos, verificou-se que independentemente da taxa de lotação, o pastejo rotativo (14 dias
de ocupação e 52 dias de descanso) resultou na obtenção de ganhos/ha significativamente
superiores aos registrados com o pastejo continuo (255; 257 e 260 vs. 123; 91 e 74 kg/ha,
respectivamente para cargas de 1,0; 1,5 e 2,0 UA/ha). Ademais, a disponibilidade de forragem
com o pastejo rotativo foi o dobro daquela observada com o pastejo continuo. Da mesma
forma, em pastagens de H. rufa, durante um período de avaliação de três anos, verificaram que
o pastejo rotativo, independentemente da carga animal (3,0 ou 3,6 an/ha), forneceu maiores
ganhos de peso por animal e por área, além de forragem mais rica em proteína bruta, fósforo e
cálcio, em comparação com o pastejo contínuo. No entanto, não foram detectados efeitos
significativos, entre sistemas de pastejo (contínuo ou rotativo), na produtividade animal de
bovinos de corte pastejando Digitaria setivalva, manejados sob diferentes taxas de lotação (4,0;
5,3 e 6,7 an/ha). Contudo, a disponibilidade final de forragem, após um período de quatro anos,
foi maior com a utilização do pastejo rotativo (2,3 t/ha de matéria seca) em relação ao continuo
(1,2 t/ha de matéria seca). Em Rondônia, para pastagens de P. maximum cv. Tanzânia,
submetidas a pastejo rotativo (7 dias de ocupação por 21 dias de descanso), considerando-se
a disponibilidade, distribuição e a qualidade da forragem, recomendou-se a utilização de cargas
animal de 2,0 e 1,0 UA/ha, respectivamente para os períodos chuvoso e seco. Já, para
pastagens de Paspalum atratum cv. Pojuca, devido a suas elevadas taxas de crescimento, as
cargas animal sugeridas foram 3,0 e 2,0 UA/ha, respectivamente para os períodos chuvoso e
seco.
2. Germoplasma forrageiro
Em Rondônia, as pastagens cultivadas representam a principal fonte econômica para a

alimentação dos rebanhos. A baixa disponibilidade e valor nutritivo da forragem durante o
período seco é um dos fatores limitantes à produção animal, implicando em um baixo
desempenho zootécnico, causando a perda de peso ou a redução drástica na produção de
leite. A diversificação de espécies forrageiras nas pastagens não aumenta os custos de
produção, apenas proporciona maior racionalização no processo de produção de forragem.
Ademais, os riscos de ocorrência de pragas e doenças que podem atacar uma espécie são
diluídos ou até eliminados. A exploração do potencial de produção das diferentes espécies e de
suas características agronômicas específicas, elimina a necessidade de adoção do fogo como
prática de manejo das pastagens cultivadas.
A seleção de plantas forrageiras adaptadas às diversas condições edafoclimáticas da
região é a alternativa mais viável para a melhoria da alimentação dos rebanhos, principalmente
durante o período de estiagem, proporcionando incrementos significativos na produção de
carne e leite, além de aumentar a capacidade de suporte das pastagens. Dentre as plantas
forrageiras introduzidas e avaliadas, nos últimos vinte anos, as que se destacaram como as
mais promissoras, por apresentarem altas produções de forragem, persistência,
competitividade com as plantas invasoras, tolerância a pragas e doenças foram:
66
⇒ Solos de média a alta fertilidade:
Gramíneas: Andropogon gayanus cv. Planaltina, Brachiaria brizantha cv. Marandu, B.

humidicola, Cynodon nlenfuensis, Panicum maximum cvs. Tobiatã, Centenário, Tanzânia,
Sempre Verde, Massai, Vencedor, Makuêni, Paspalum guenoarum, P. coryphaeum, P. secans,
P. atratum cv. Pojuca, Setaria sphacelata cvs. Nandi e Kazungula, Tripsacum australe,
Axonopus scoparius, Pennisetum purpureum.
Leguminosas: Leucaena leucocephala, Centrosema acutifolium, C. brasilianum, C.

macrocarpum, Desmodium ovalifolium, Stylosanthes guianensis, S. capitata, Cajanus cajan,
Pueraria phaseoloides, Zornia latifolia, Acacia angustissima, Arachis pintoi
⇒ Solos de baixa fertilidade:

humidicola, Paspalum guenoarum, P. coryphaeum, P. secans, P. atratum cv. Pojuca,
Tripsacum australe, Axonopus scoparius.
Leguminosas: Centrosema acutifolium, C. brasilianum, C. macrocarpum, Desmodium

ovalifolium, Stylosanthes guianensis, S. capitata, Pueraria phaseoloides, Zornia latifolia, Acacia
angustissima.
⇒ Solos sob vegetação de cerrados

humidicola, B. dictioneura, Paspalum guenoarum, P. coryphaeum, P. secans, P. atratum cv.
Pojuca, Tripsacum australe, Axonopus scoparius, Melinis minutiflora.
Leguminosas: Centrosema acutifolium, C. brasilianum, C. macrocarpum, Desmodium

ovalifolium, Stylosanthes guianensis, S. capitata, S. macrocephala, S. viscosa, Acacia
angustissima.
3. Manejo de formação
A utilização intensa das pastagens logo após o seu estabelecimento pode comprometer
sua produtividade e diminuir sua vida útil. Se o plantio foi bem sucedido e ocorreu boa
emergência de plantas, aproximadamente 3 a 4 meses após, quando a espécie forrageira
atingir uma altura aproximada de 30-40 cm (plantas prostradas) e 60-100 cm (plantas
cespitosas), faz-se um pastejo inicial e rápido com uma carga animal de 4 a 5 UA/ha,
preferencialmente utilizando-se animais jovens, visando consolidar o sistema radicular e
estimular novas brotações, contribuindo também para maior cobertura do solo. Segue-se uma
limpeza das plantas invasoras, replantio das áreas descobertas e descanso das pastagens até
o completo estabelecimento. No entanto, recomenda-se não iniciar o pastejo durante a primeira
estação chuvosa. Quando se tem uma densidade de plantas muito baixa, é desejável deixar
que estas cresçam livremente para a produção de sementes e, então, dar-se-á um pastejo para
que os animais auxiliem na queda e distribuição das sementes em toda a área, favorecendo,
dessa forma, a ressemeadura natural na estação chuvosa seguinte.
4. Adubação fosfatada
Na região Amazônica, uma grande proporção de seus solos apresenta elevada acidez,
baixa disponibilidade de fósforo (P) e uma alta saturação de alumínio. Em alguns casos, a
capacidade de fixação de P é alta e sua absorção pelas plantas é baixa, tornando-se
necessário a aplicação de doses relativamente altas, de modo a satisfazer os requerimentos
nutricionais das plantas forrageiras. No processo tradicional de formação e utilização de
pastagens cultivadas da Amazônia, após a queima da floresta, grande quantidade de nutrientes
67
é adicionada ao solo através das cinzas, aumentando de forma significativa sua fertilidade e
praticamente neutralizando o alumínio trocável. Nutrientes como o cálcio e magnésio se
mantêm em níveis bastante elevados. O potássio pode permanecer, em níveis satisfatórios
para manter a produtividade das pastagens. A matéria orgânica e o nitrogênio permanecem em
níveis aceitáveis, apesar das periódicas queimadas. No entanto, os teores de P, com o
decorrer do tempo, declinam acentuadamente, até atingir níveis praticamente indetectáveis,
como se verifica em pastagens com mais de dez anos de utilização. A baixa disponibilidade
deste nutriente tem sido identificada como a principal causa para a instabilidade das pastagens
cultivadas na Amazônia. O alto requerimento de P pelas gramíneas e/ou leguminosas
cultivadas, associadas com perdas pela erosão, retirada pelos animais em pastejo e a
competição que as plantas invasoras exercem, implica na queda de produtividade e a
conseqüente degradação das pastagens.
O conteúdo total de P nos solos tropicais é bastante variável - desde 200 até 3.300
mg/kg. No entanto, os níveis de P disponível para o estabelecimento e crescimento das plantas
forrageiras são muito baixos (< 5 mg/kg, Bray II). Isto se deve ao fato de que a maior parte do P
presente no solo está na forma orgânica e em combinação com óxidos de fero e alumínio, os
quais apresentam baixa solubilidade, além de aumentarem consideravelmente a capacidade de
fixação do P, especialmente quando se utiliza fontes mais solúveis.
Trabalhos realizados em diversas localidades da Amazônia com o objetivo de avaliar o
efeito de macro e micronutrientes na produção de forragem de diversas gramíneas (Brachiaria
decumbens, B. humidicola, B. brizantha cv. Marandu, Panicum maximum cvs. Tanzânia,
Vencedor e Centenário, Pennisetum purpureum e Hyparrhenia rufa) e leguminosas forrageiras
(Stylosanthes guianensis, Centrosema pubescens, Arachis pintoi, Acacia angustissima,
Leucaena leucocephala e Desmodium ovalifolium). Para todas as espécies, o nutriente mais
limitante foi o P, cuja ausência na adubação completa proporcionou as maiores reduções no
rendimento de forragem e, consequentemente, na absorção de nutrientes. Os efeitos de
potássio, enxofre, cálcio e micronutrientes foram menos acentuados, embora em outros
estudos a aplicação de níveis mais altos de P (150 kg de P2O5/ha) implicaram no aparecimento
de sintomas de deficiência de potássio, sugerindo que, nesses casos, a adubação potássica
possa ser necessária.
As plantas forrageiras apresentam grandes variações quanto aos seus requerimentos
por P. Deste modo, o conhecimento dos níveis críticos internos (NCI) é muito importante,
visando o diagnóstico do estado nutricional ou o estabelecimento da necessidade de adubação
fosfatada, bem como a identificação daquelas espécies menos exigentes ou mais eficientes na
absorção de P. O NCI indica o teor de P no tecido vegetal abaixo do qual há probabilidade de
respostas significativas à adição do nutriente ao solo. Para as condições edáficas de Rondônia
foram determinados os NCI para as principais gramíneas e leguminosas forrageiras utilizadas
na formação de pastagens (Tabela 2). Em Rondônia, avaliando-se o efeito da adubação
fosfatada (0, 50 e 100 kg de P2O5/ha), em 10 gramíneas forrageiras, observou-se que A.
gayanus cv. Planaltina, P. maximum cv. Tobiatã e B. humidicola foram as que apresentaram
maior eficiência de absorção de P e, consequentemente, na produção de forragem.
A determinação dos níveis mais adequados da fertilização fosfatada, para o
estabelecimento e/ou manutenção de pastagens, tem sido objetivo de diversos experimentos
conduzidos na região Amazônica. Em geral, observa-se que a aplicação de pequenas
quantidades de P (25 a 35 kg de P2O5/ha) resultam, em pelo menos, no dobro da produção de
forragem em pastagens degradadas. Embora se verifiquem aumentos gradativos no
rendimento de forragem com a aplicação de doses maiores, pelo menos à curto prazo (um a
dois anos), não há necessidade de adição de quantidades superiores a 50 kg de P2O5/ha. No
Pará, observou-se que a aplicação de 75 kg de P2O5/ha incrementou a produção de forragem
de P. maximum em cerca de dez vezes, em relação à pastagem não fertilizada, valor este
semelhante ao obtido com o nível de 150 kg de P2O5/ha. Em Rondônia, para pastagens de B.
humidicola e A. gayanus cv. Planaltina, foram obtidos incrementos na produção de forragem de
92,4 e 46,9 %, respectivamente, com a aplicação de 50 kg de P2O5/ha. Em um Latossolo
Amarelo, textura média do Amapá, estimou-se em 98,8 kg de P2O5/ha a dose de máxima
eficiência técnica para pastagens de B. humidicola. Para o Amazonas e Rondônia, sugerem-se
68
como alternativa viável para a adubação de pastagens de P. maximum, B. decumbens e

Hyparrhenia rufa, respectivamente, 50 a 75 kg de P2O5/ha, a qual deve ser realizada após o
rebaixamento da vegetação existente, através da roçagem ou pela utilização de elevadas
pressões de pastejo. Para C. cajan, a aplicação de 50 kg de P2O5/ha resultou num incremento
de 38,3% na produção de forragem comestível, além de promover efeitos positivos em sua
qualidade, notadamente no conteúdo de nitrogênio e fósforo.
Tabela 2. Níveis críticos internos de fósforo de gramíneas e leguminosas forrageiras.
Espécies Nível Crítico Interno Dose de Fósforo Aplicada (mg/kg)

(%)
Gramíneas
A. gayanus cv. Planaltina 0,135 28,9

B. brizantha cv. Marandu 0,162 35,7
B. decumbens 0,137 26,1
B. humidicola 0,140 27,4
P. atratum BRA-009610 0,153 54,8
P. maximum cv. Centenário 0,178 81,2
Leguminosas
A. angustissima 0,169 63,8

A. pintoi cv. Amarillo 0,200 74,0
C. acutifolium CIAT-5277 0,158 71,6
C. cajan1 0,197 76,7
D. ovalifolium 0,169 67,3
P. phaseoloides 0,171 77,6
Na região Amazônica, o fósforo é o nutriente mais limitante para o estabelecimento,

manutenção e persistência das pastagens cultivadas, sendo, por conseguinte, um dos
principais fatores de instabilidade do sistema solo-planta-animal. Deste modo, a fertilização
fosfatada consiste numa prática indispensável à recuperação da capacidade produtiva das
pastagens. Em geral, aplicações periódicas de pequenas quantidades de fósforo (25 a 50 kg de
P2O5/ha), no mínimo a cada dois anos, resulta, em pelo menos, o dobro da produção de
forragem, com reflexos altamente positivos e significativos na capacidade de suporte e,
consequentemente no desempenho animal. No entanto, a adoção de práticas de manejo que
envolva a utilização de germoplasma forrageiro com baixo requerimento de nutrientes e com
alta capacidade de competição com as plantas invasoras e sistemas e pressões de pastejo
compatíveis com a manutenção do equilíbrio do ecossistema, podem ser considerados como a
chave para assegurar a produtividade das pastagens cultivadas por longos períodos de tempo,
nas áreas de floresta do trópico úmido brasileiro.
5. Utilização de Fosfatos Naturais
No processo tradicional de formação e utilização de pastagens cultivadas na região

Amazônica, após a queima da floresta, grande quantidade de nutrientes são adicionados ao
solo através das cinzas, aumentando consideravelmente sua fertilidade e, consequentemente a
produtividade das pastagens cultivadas. Contudo, com o decorrer do tempo observa-se uma
gradual redução nos rendimentos de forragem, com reflexos altamente significativos e
negativos nos índices de desempenho zootécnico dos rebanhos. A baixa disponibilidade deste
nutriente tem sido identificada como a principal causa para a instabilidade das pastagens
cultivadas na Amazônia. O alto requerimento de fósforo (P) pelas gramíneas e leguminosas
cultivadas, associadas com perdas pela erosão, retirada pelos animais sob pastejo e a
competição que as plantas invasoras exercem, resulta na queda de produtividade e a
69
conseqüente degradação das pastagens. Em geral, para produzir 10 toneladas de matéria

seca, uma pastagem extrai cerca de 400 kg/ha de N, P2O5/ha e K2O/ha. Apesar da reciclagem
destes nutrientes através dos excrementos animais (fezes e urina) e resíduos vegetais, a
exportação é elevada, requerendo adições de fertilizantes para a manutenção de níveis
compatíveis com as exigências nutricionais das plantas forrageiras.
Na região Amazônica, predominam solos ácidos, com baixo conteúdo de P disponível e
elevada saturação por alumínio e, consequentemente, apresentam alta capacidade de fixação
de P, implicando em menores taxas de absorção pelas plantas forrageiras. Logo, a utilização
de fosfatos de rocha, como fonte de P, surge como uma alternativa tecnicamente viável,
considerando-se que sua eficiência agronômica, notadamente as taxas de dissolução, são
estimuladas pela acidez do solo. Ademais, geralmente, estes apresentam menor custo
unitário e maior efeito residual. Recomenda-se o uso combinado de fontes de P com alta e
baixa solubilidade. Deste modo, a fonte mais solúvel forneceria, no curto prazo, o P
necessário para o rápido crescimento inicial, período crítico de competição com as plantas
invasoras. A fonte menos solúvel (fosfato de rocha) liberaria o P paulatinamente, possibilitando
maior persistência da pastagem.
A eficiência agronômica dos fosfatos naturais depende, principalmente de suas
características físicas e químicas e, sobretudo, da sua solubilidade. Todos os fosfatos naturais
brasileiros são apatíticos, ou sejam, há uma predominância de fosfatos de cálcio. O teor de
P2O5/ha total dos concentrados fosfáticos varia de 23 a 40%, contudo, a solubilidade medida
por extratores tradicionais é muito baixa, quando comparada com a dos superfosfatos,
termofosfatos e mesmo com a de alguns fosfatos naturais estrangeiros. Para que o P seja
liberado da apatita torna-se necessário a reação entre o fosfato aplicado e o solo. A liberação
de P é proporcional à intensidade dessa reação e, por isso, é conveniente proporcionar o
máximo de contacto entre as partículas do fosfato natural e o solo. Deste modo, assumem
grande importância o grau de moagem do fosfato, o modo de aplicação e a sua incorporação
ao solo. Para fontes de baixa solubilidade recomenda-se a aplicação sob a forma de pó, o qual
deve ser incorporado para se obter o máximo contacto com as partículas do solo.
A eficiência da utilização de fosfatos naturais está diretamente relacionada à
capacidade da planta em absorver P do solo e utilizá-lo mais eficientemente em seu
metabolismo. Em geral, a resposta das diversas espécies forrageiras depende da sua
velocidade de crescimento, da sua exigência em P e da sua capacidade em desenvolver seu
sistema radicular, principalmente em condições adversas do solo. A resposta diferenciada à
fertilização fosfatada determina o manejo mais adequado para cada planta forrageira. Em
condições de elevada acidez, Panicum maximum cv. Makueni tem baixo desenvolvimento,
mesmo em níveis elevados de P. Já, Andropogon gayanus cv. Planaltina apresenta excelente
adaptação aos solos ácidos, apesar de responder significativamente à calagem. Deste modo,
P. maximum é uma espécie mais exigente em nutrientes, sendo recomendada para solos com
baixa acidez e bem supridos em P. Potencialmente, uma fonte de P de baixa solubilidade não
seria eficiente para esta espécie, ocorrendo o inverso quanto ao A. gayanus.
Em Rondônia, para pastagens de P. maximum, o uso tanto do superfosfato triplo como
do superfosfato simples, aplicados isoladamente ou combinados entre si, e/ou em combinação
com fosfato de rocha parcialmente acidulado, mostraram-se eficazes no aumento da
produtividade de forragem da pastagem, ficando a escolha das fontes na dependência de seus
custos. A relação 1:1, entre a fonte mais e menos solúvel, mostrou-se mais efetiva em
comparação com 1:2 e 2:1. A utilização do hiperfosfato não mostrou grande eficiência, mesmo
sendo superior ao tratamento testemunha. Para pastagens de A. gayanus cv. Planaltina e B.
brizantha cv. Marandu, a aplicação de 200 kg/ha de P2O5, sob a forma de superfosfato triplo
ou termofosfato de Yoorin, resultou em maiores rendimentos de forragem e quantidades
absorvidas de P, enquanto que os para os fosfatos naturais de Patos de Minas e Olinda não se
observou efeito significativo de doses (100 ou 200 kg de P2O5/ha). O superfosfato triplo e o
termofosfato de Yoorin foram as fontes que apresentaram maiores índices de eficiência
agronômica, seguindo-se os fosfatos naturais de Olinda e Araxá, ficando o de Patos de Minas
com a menor eficiência agronômica. Para Acacia angustissima e Leucaena leucoocephala, a
utilização de 100 kg de P2O5/ha, sob a forma de fosfato natural de Araxá e Olinda
70
proporcionaram incrementos superiores a 100% no rendimento de matéria seca, número e

peso de nódulos.
A determinação dos níveis mais adequados de fosfatos naturais para a recuperação de
pastagens, tem sido objetivo de diversos experimentos conduzidos na região Amazônica. Em
geral, observa-se que a aplicação de pequenas quantidades de P (50 a 100 kg de P2O5/ha)
resultam, em pelo menos, o dobro da produção de forragem em pastagens degradadas.
Embora se verifiquem aumentos gradativos no rendimento de forragem com a aplicação de
doses maiores, pelo menos no curto prazo (um a dois anos), não há necessidade de adição de
quantidades superiores a 100 kg de P2O5/ha. Para pastagens degradadas de B. brizantha cv.
Marandu, a aplicação de 50 kg de P2O5/ha, sob a forma de fosfato natural parcialmente
acidulado, implicou num acréscimo de 43% no rendimento de forragem (Tabela 3).
Q Tabela 3. Rendimento de matéria seca de B. brizantha cv. Marandu e de plantas invasoras,

teores de proteína bruta (PB), cálcio (Ca), fósforo (P), potássio (K) e magnésio (Mg), em
função da aplicação de fontes e doses de fósforo. Porto Velho, Rondônia. 1995/97.
1
Fontes de Doses Matéria seca (kg/ha) PB Ca P K Mg
Fósforo Kg P2O5/ha Gramínea Invasoras % -------------------- g/kg --------------------
Testemunha 0 1303 d 847 a 8,64 a 3,75 a 1,47 a 13,3b 3,04 a
SFT 50 2374 b 356 b 9,39 a 3,93 a 1,81 a 16,5a 2,92 a
100 2650 a 333 b 8,53 a 3,90 a 1,49 a 14,5ab 2,27 b
SFS 50 2044 c 389 b 8,40 a 3,77 a 1,58 a 15,7ab 2,95 a
100 2318 b 321 b 8,47 a 3,97 a 1,46 a 15,4ab 2,92 a
FNPA 50 1863 c 285 b 8,46 a 3,95 a 1,54 a 15,8 a 2,86 a
100 1854 c 277 b 9,47 a 3,60 a 1,76 a 17,1 a 2,84 a
- Médias seguidas de mesma letra não diferem entre si (P > 0,05) pelo teste de Tukey
1 - Médias de seis cortes
A utilização de fosfatos naturais é uma prática tecnicamente viável para aumentar a

disponibilidade de forragem ou para recuperar a capacidade produtiva das pastagens
degradadas ou em vias de degradação. Em geral, aplicações periódicas de pequenas
quantidades de fósforo (50 a 100 kg de P2O5/ha), resulta, em pelo menos, o dobro da produção
de forragem em pastagens degradadas, com reflexos altamente positivos e significativos na
capacidade de suporte e, consequentemente, no desempenho animal. No entanto, a adoção de
práticas de manejo que envolva a utilização de germoplasma forrageiro com baixo
requerimento de nutrientes e com alta capacidade de competição com as plantas invasoras e
sistemas e pressões de pastejo compatíveis com a manutenção do equilíbrio do ecossistema,
podem ser considerados como a chave para assegurar a produtividade das pastagens
cultivadas por longos períodos de tempo, nas áreas de floresta da região amazônica.
6. Pastagens Consorciadas
Dentre os nutrientes essenciais o nitrogênio é um dos mais importantes afetando

notavelmente a produção e qualidade da forragem, pois é o principal componente das
proteínas, tanto vegetal quanto animal. O fornecimento de nitrogênio às pastagens pode ser
feito através de adubos químicos ou via biológica utilizando-se leguminosas forrageiras.
As leguminosas desempenham papel relevante na produção animal, pois apresentam,
em relação às gramíneas, maior conteúdo protéico, maior digestibilidade, maior tolerância à
seca e menor declínio de sua qualidade à medida que a planta envelhece. Além disso, face sua
capacidade de fixar nitrogênio da atmosfera, enriquece o solo, tanto em minerais quanto em
matéria orgânica. Trabalhos conduzidos na Amazônia Ocidental constataram que as
quantidades de nitrogênio fixadas por leguminosas forrageiras tropicais (Pueraria phaseoloides,
Desmodium ovalifolium e Centrosema macrocarpum) foram superiores a 100 kg/ha/ano.
Na formação de pastagens consorciadas a escolha de espécies compatíveis entre si é
de grande importância, visando a persistência e, principalmente, compatibilidade entre os
componentes. Em geral, para que as leguminosas contribuam positivamente para o aumento
71
da produção de carne e leite, sua percentagem nas pastagens deve oscilar entre 20 e 40%.
Para as condições edafoclimáticas de Rondônia, trabalhos de pesquisa indicaram que as
consorciações mais promissoras foram:
- Andropogon gayanus cv. Planaltina com Desmodium ovalifolium, Pueraria phaseoloides,

Centrosema
macrocarpum e Stylosanthes capitata;
- Brachiaria humidicola (quicuio-da-Amazônia) com D. ovalifolium, Pueraria, Centrosema
brasilianum;
- Brachiaria brizantha cv. Marandu com Pueraria, Desmodium ovalifolium, Centrosema
acutifolium
- Panicum maximum com Pueraria, Centrosema macrocarpum e Desmodium ovalifolium
O método de plantio pode ser à lanço, em linhas ou em covas. Um fator muito

importante é a densidade de semeadura da leguminosa. Em geral, 1 a 2 kg/ha de sementes já
é o suficiente para assegurar um ótimo estabelecimento da leguminosa e evitar sua dominância
na pastagem.
No manejo de pastagens consorciadas deve-se controlar os períodos de pastejo e a
carga animal. Sempre que possível, utilizar pastejo rotativo. A utilização de altas cargas animal
e períodos longos de pastejo favorecerão a participação da leguminosa, em detrimento da
gramínea.
Desde que as espécies sejam compatíveis e estejam sendo bem manejadas, os
rendimentos de forragem poderão ser incrementados em até 80% e os reflexos na produção
animal serão muito grandes, aumentando consideravelmente os ganhos de peso dos animais
e, principalmente a produção de leite, em até 100%.
7. Recuperação de Pastagens com Leguminosas Forrageiras
As alternativas tecnológicas desenvolvidas para a recuperação de pastagens degradadas

contemplam, em sua grande maioria, correção e adubação do solo, associadas à sua
movimentação, com implementos agrícolas para a remoção de possíveis camadas
compactadas de solo. Outra alternativa consiste na introdução de leguminosas, a qual além de
incrementar a produção e qualidade da forragem produzida, por sua capacidade de fixação de
nitrogênio, reduz a perda de peso doa animais durante o período seco. No entanto, a
permanência da leguminosa na pastagem depende da exclusão da queima, uma vez que um
dos efeitos deletérios do fogo é a destruição das leguminosas.
O preparo do solo através da aração e gradagem constitui sempre o melhor processo
para o estabelecimento de leguminosas em pastagens degradadas. O fator mais importante é o
controle do vigor da vegetação. O controle de sua agressividade dará maior chance de
sobrevivência às plântulas recém-estabelecidas, reduzindo a competição por água, luz e
nutrientes. O superpastejo antes ou após a semeadura da leguminosa tem sido utilizado como
alternativa eficaz para reduzir a agressividade da cobertura existente. Quando o pastejo é
realizado após o plantio pode ajudar a enterrar as sementes através do pisoteio e movimentar
o solo, criando microrelevos que auxiliarão no estabelecimento, principalmente pelo aumento
da superfície de contacto entre a semente e o solo. Em pastagens de capim-gordura (Melinis
minutiflora), utilizando-se o superpastejo para reduzir a competição da vegetação, o plantio em
sulcos foi o método mais eficiente para a introdução de Macroptilium atropurpureum cv. Siratro,
Desmodium intortum e Centrosema pubescens.
A aração foi o método mais eficiente para a introdução de Calopogonium mucunoides
em pastagens degradadas de Brachiaria decumbens, a qual propdocionou a melhor relação
gramínea-leguminosa. Um ótimo estabelecimento de Pueraria phaseoloides e Desmodium
ovalifolium, respectivamente, em pastagens de B. decumbens, foi obtido com a utilização da
aração mais a gradagem em toda a área. No entanto, o preparo do solo em faixas pode ser
uma alternativa a ser utilizada, visando reduzir os custos da recuperação. Sugere-se faixas de
72
2,5 leguminosa como a melhor alternativa para a introdução de P. phaseoloides em pastagens

degradadas de B. decumbens.
Em solos de baixa fertilidade natural, a utilização exclusiva de métodos físicos pode ser
insuficiente para a recuperação da pastagem. Neste caso, torna-se indispensável assegurar
um adequado suprimento, notadamente daqueles nutrientes limitantes à produção de forragem.
Em Rondônia, pastagens de B. humidicola, recuperadas com a introdução de leguminosas (P.
phaseoloides, Stylosanthes guianensis e C. pubescens) apresentaram maiores rendimentos de
forragem com a aplicação de até 75 kg de P2O5/ha. O sucesso no estabelecimento de
leguminosas em pastagens degradadas pode estar diretamente correlacionado com sua
densidade de semeadura. A utilização de 20 sementes viáveis/m2 foi suficiente para o
estabelecimento de M. atropurpureum cv. Siratro em pastagens de B. humidicola, sem qualquer
interferência mecânica. Para pastagens degradadas de B. decumbens, independentemente da
densidade de semeadura de S. guianensis cv. Mineirão (0,5; 1,0 e 2,0 kg/ha), a utilização da
grade aradora + grade niveladora, seguida da passagem de rolo compactador foi o método que
permitiu o melhor estabelecimento da leguminosa. Em Rondônia, a introdução de D.
ovalifolium, independentemente da adubação fosfatada, mostrou-se uma prática tecnicamente
viável para a recuperação de pastagens de B. brizantha cv. Marandu. Os rendimentos de MS
da gramínea e da leguminosa foram significativamente incrementados pela adubação
fosfatada, ocorrendo o inverso em relação às plantas invasoras. Considerando-se a
disponibilidade total de forragem e a composição botânica da pastagem, o plantio com matraca
e a roçagem, associadas à aplicação de fósforo, foram os métodos mais eficientes para a
introdução da leguminosa em pastagens degradadas de B. brizantha cv. Marandu (Tabela 4).
Tabela 4. Disponibilidade de matéria seca de pastagens degradadas de B. brizantha cv.

Marandu, submetidas a diferentes métodos de introdução de D. ovalifolium, em
função da adubação fosfatada.
Métodos de Fósforo Gramínea Leguminosa Gram. + Leg. Plantas Invasoras

Introdução kg P2O5/ha --------------------------------------------- t/ha -------------------------------------------
Testemunha 0 3,01 de --- 3,01 g 2,29 c (43,2)

50 6,86 a --- 6,86 e 2,70 bc (28,3)
Roçagem 0 3,62 de 2,51 e (32,8) 6,13 e 1,51 de (19,7)
50 6,04 bc 4,08 cd (35,4) 10,12 bc 1,39 e (12,1)
Aração(A) 0 3,65 de 3,78 cd (42,7) 7,43 de 1,43 de (16,1)
50 5,80 bc 6,90 a (49,6) 12,70 a 1,20 e (8,7)
Gradagem(G) 0 3,18 e 4,13 cd (44,3) 7,31 de 2,01 cd (21,6)
50 6,06 bc 4,89 bc (39,8) 10,93 ab 1,35 e (11,0)
A+G 0 2,77 e 5,60 b (47,5) 8,37 cde 3,42 a (29,0)
50 3,56 de 4,03 cd (36,9) 7,59 de 3,33 ab (30,5)
Matraca 0 4,82 cd 2,19 e (26,9) 7,01 e 1,14 e (14,0)
50 6,47 b 3,10 de (28,0) 9,57 bc 1,46 de (13,2)
- Médias seguidas de mesma letra não diferem entre si (P > 0,05) pelo teste de Tukey
* Percentual em relação à disponibilidade total de matéria seca
O desempenho animal, em pastagens recuperadas com a introdução de leguminosas,

geralmente, está diretamente correlacionado com o estabelecimento e a sua participação na
composição botânica da forragem em oferta. A introdução de M. atropurupureum e Neonotonia
wightii, em pastagens de P. maximum, em vias de degradação, permitiu elevar a capacidade de
suporte de 0,35 UA/ha para 0,81 e 1,1 UA/ha, respectivamente para o primeiro e segundo ano
de utilização. Em pastagens de B. decumbens degradadas, a introdução de Centrosema
macrocarpum CIAT-5713 e de C. acutifolium CIAT-5568, resultou em ganhos de 830 kg/ha/ano
e 607 g/animal/dia, comparativamente a 550 kg/ha/ano e 451 g/animal/dia obtido na pastagem
não recuperada. No Pará, o estabelecimento de P. phaseoloides, C. pubescens e S. guianensis
em pastagens degradadas de Panicum maximum proporcionou incrementos de 16 e 63%,
respectivamente para os ganhos de peso vivo/animal/ano e hectare/ano. Utilizando-se as
mesmas leguminosas, em Rondônia, os acréscimos foram de 46 e 40% nos ganhos de peso
73
vivo/ha/ano, respectivamente para pastagens degradadas de Hyparrhenia rufa e B. humidicola.

No Acre, constatou-se a viabilidade da recuperação de pastagens de P. maximum através da
introdução de leguminosas, associadas à fertilização fosfatada (50 kg de P2O5/ha),
independentemente da carga animal utilizada, a qual resultou em incremento de 69% no ganho
de peso/área (150 vs. 253 kg/ha/ano).
A recuperação de pastagens degradadas pode ser tecnicamente viável através da
introdução de leguminosas forrageiras. Para tanto, torna-se imprescindível a adoção de
práticas de manejo adequadas que assegurem um satisfatório estabelecimento, produtividade
e persistência das espécies introduzidas (métodos de plantio, rebaixamento da vegetação com
cultivo mecânico e/ou químico, densidade de semeadura, fertilização fosfatada etc.). Contudo,
a utilização de germoplasma forrageiro com baixos requerimentos em nutrientes, paralelamente
com sistemas e pressões de pastejo compatíveis com a manutenção do equilíbrio do
ecossistema, devem ser considerados como a chave para assegurar a produtividade das
pastagens e dos rebanhos, por períodos de tempo relativamente longos, nas áreas sob floresta
do trópico úmido brasileiro.
8. Renovação de Pastagens Via Culturas Anuais
A utilização de culturas anuais como o milho, milheto, arroz e soja, implantadas em

pastagens degradadas e dentro das recomendações técnicas específicas, tem possibilitado o
restabelecimento da capacidade produtiva das pastagens e a produção de grãos durante um
ou mais ciclos de cultivo.
A recuperação das pastagens é de grande importância, pois com a sua intensificação
pode-se reduzir a expansão em áreas de florestas, propiciando benefícios de ordem ecológica
(preservação da floresta), econômica (custo de formação de pastagem maior que o de
recuperação) e social (necessidade de mão-de-obra). Pesquisas realizadas na Embrapa
Amazônia Oriental apontam alguns aspectos a serem considerados para o êxito da exploração
de pastagens em solos ácidos de baixa fertilidade nos trópicos úmidos, tais como: 1)
adaptabilidade das gramíneas e leguminosas forrageiras às condições prevalecentes (edáficas-
bióticas-climáticas); 2) eficiente capacidade de fixação de nitrogênio e reciclagem de
nutrientes; 3) alta capacidade de estabelecimento e persistência de pastagem com gramíneas
e leguminosas e, 4) intensificação da produção mediante a aplicação de tecnologias de baixo
custo. Sendo o estabelecimento ou reforma de pastagens via associação com culturas anuais
uma das alternativas viáveis para tanto.
O uso de culturas anuais na formação e/ou renovação de pastagens é uma pratica
recomendada para diminuir os custos, pois se aproveitam o preparo do solo e a adubação
exigidas pela cultura associada. Na escolha da cultura a ser associada deve-se considerar o
seu hábito de crescimento, ciclo, além do método de plantio (densidade e época de
semeadura, espaçamento e arranjo espacial), os quais devem ser compatíveis com os da
planta forrageira, visando minimizar a competitividade entre ambas.
Para pastagens de Brachiaria decumbens estabelecidas em associação com a cultura
de arroz (IAC-47), cujas sementes foram misturadas e plantadas em sulcos, no espaçamento
de 0,5 m entre linhas, constatou-se que a produtividade do arroz oscilou entre 1.000 e 1.350
kg/ha, não sendo afetada pelos níveis de adubação fosfatada (0 a 300 kg de P2O5/ha) e nem
pelas diferentes densidades de semeadura da forrageira. Os melhores estabelecimentos foram
obtidos nas densidades de 1,66; 2,33; 3,00 kg/ha, com populações médias de 15, 19 e 25
plantas da gramínea/m2, respectivamente.
No Pará, pastagens degradadas de capim-colonião, estabelecida em solo tipo Latossolo
Amarelo (Oxisolo), foram renovadas utilizando-se diferentes métodos de plantio simultâneo de
gramineas (A. gayanus cv. Planaltina, P. maximum e B. humidicola) consorciadas com
leguminosas (Centrosema pubescens e Calopogonium mucunoides) em associação com milho
(BR-5102) e arroz (IAC-47). A produção de grãos de milho foi de 2798 kg/ha e a de arroz 254
kg/ha, quando plantado na densidade de 20 kg/ha com espaçamento entre as linhas de 1,0 m,
sendo as forrageiras cultivadas na mesma linha ou no espaço entre linhas. Os rendimentos de
forragem de A. gayanus (1766 kg/ha) e de P. maximum (1446 kg/ha) superaram os do B.
74
humidicola (322 kg/ha). Quanto ao método de plantio, as gramíneas forrageiras tiveram melhor
desempenho quando cultivadas em linhas espaçadas de 1,0 m da cultura associada recebendo
adubação na linha. As produções das leguminosas foram afetadas pela espécie de gramínea e
pelo método de plantio, sendo os maiores rendimentos obtidos quando em consórcio com A.
gayanus (632 kg de MS/ha) e plantadas na mesma linha da cultura percursora, com
espaçamento de 2,0 m e as gramíneas estabelecidas em linhas distantes a 1,0 m destas. Os
resultados obtidos demonstraram ser o milho a melhor cultura para associação, principalmente
com o A. gayanus.
Em pastagens consorciadas de B. decumbens com leguminosas, os rendimentos de
arroz foram de 3,5 t/ha, enquanto que as forrageiras produziram 560, 113 e 174 kg de MS/ha
para a gramínea, Centrosema acutifolium e Stylosanthes capitata, respectivamente, sendo a
participação das plantas invasoras de apenas 175 kg de MS/ha. No Amapá, foram avaliados
diferentes sistemas de formação de pastagens em associação com a cultura de arroz. As
gramíneas introduzidas foram o A. gayanus e a B. humidicola, consorciadas ou não com o
guandu (Cajanus cajan) e D. ovalifolium, tendo como cultura precursora o arroz IAC-47, as
quais foram semeadas simultaneamente em sulcos. A produtividade do arroz decresceu com o
decorrer do tempo, passando de 869 kg/ha de grãos com casca no primeiro ano para 64 kg/ha
no terceiro. A associação do arroz com A. gayanus produziu 915 kg/ha de grãos, enquanto que
com B. humidicola o rendimento foi de 783 kg/ha; durante o 2º e 3º anos os rendimentos do
arroz associado com B. humidicola foram o dobro dos obtidos com A. gayanus. O rendimento
de forragem das gramíneas foi de 2,1; 4,4; 3,2 t de MS/ha, respectivamente para o primeiro,
segundo e terceiro anos, sendo a produção total de A. gayanus (7,7 t de MS/ha) superior a de
B. humidicola (5,9 t de MS/ha). Quando as gramíneas foram implantadas no 1º ano de cultivo,
houve uma redução de custos na ordem de 26% para B. humidicola e de 31% para A. gayanus,
comprovando a viabilidade bioeconômica da formação de pastagens com a cultura de arroz no
primeiro ano de exploração de solos sob vegetação de cerrado no Amapá.
Em Rondônia, para o arroz de sequeiro cv. Progresso semeado em associação com
gramíneas tropicais, os rendimentos de arroz em casca foram de 2.166; 1.870 e 1.305 kg/ha,
respectivamente para os consórcios com B. brizantha cv. Marandu, B. humidicola e P. atratum
cv. Pojuca, comparativamente a 2.578 kg/ha quando plantado em monocultura,
independentemente do método de plantio (linhas ou à lanço).
A renovação de pastagens em associação com culturas comerciais é uma alternativa
viável sob os aspectos agronômicos, econômicos e ecológicos, desde que sejam adotadas
práticas de manejo que envolvam a utilização de germoplasma forrageiro com baixo
requerimento de nutrientes e com alta capacidade de competição com as plantas invasoras e
sistemas e pressões de pastejo compatíveis com a manutenção do equilíbrio do ecossistema.
9. Diferimento de Pastagens
A conservação do excesso de forragem produzida durante o período chuvoso, sob a

forma de feno ou silagem, embora constitua solução tecnicamente viável, é uma prática ainda
inexpressiva no Estado. Logo, a utilização do diferimento, feno-em-pé ou reserva de pastos
durante a estação chuvosa surge como alternativa para corrigir a defasagem da produção de
forragem durante o ano. O diferimento consiste em suspender a utilização da pastagem
durante parte de seu período vegetativo, de modo a favorecer o acúmulo de forragem para
utilização durante a época seca. A sua utilização deve ser bem planejada para que a área
diferida não se constitua em um foco de incêndio. O uso de aceiros e a localização de áreas
distanciadas das divisas da propriedade são imprescindíveis. Ademais, o uso do diferimento
facilita a adoção de outras tecnologias, tais como o banco-de-proteína, a mistura múltipla e a
suplementação à campo com uréia pecuária, associada ou não com a cana-de-açúcar.
O período de diferimento está diretamente relacionado com a fertilidade do solo. Em solos de
baixa fertilidade pode ser necessário o diferimento da pastagem por períodos de tempo mais
longos, porém, com a utilização de adubações, o período pode ser reduzido, em função das
taxas de crescimento da planta forrageira. O diferimento requer a associação da área vedada
com uma outra exploração de forma mais intensiva e com uma espécie forrageira de alto
75
potencial produtivo onde a maioria dos animais estarão concentrados. Isso permitirá que a
pastagem diferida acumule matéria seca, na ausência dos animais. A extensão da área a ser
diferida e da explorada intensivamente devem ser calculadas em função das necessidades
nutricionais dos animais, nos períodos chuvoso e seco, e do potencial de crescimento das
plantas forrageiras utilizadas. Como o feno-em-pé é planejado para utilização durante o
período seco, seu consumo elimina a necessidade do uso das queimadas.
Um dos requisitos para a utilização do feno-em-pé é a existência de grande volume de
matéria seca acumulada na pastagem, embora com menor valor nutritivo, em função do
período de crescimento que as plantas forrageiras foram submetidas. Para as condições
edafoclimáticas de Rondônia, utilizando-se o diferimento em abril, as gramíneas mais
promissoras, em termos de produção de matéria seca, foram B. humidicola, A. gayanus cv.
Planaltina, P. maximum cv. Tobiatã, P. guenoarum FCAP-43 e B. brizantha cv. Marandu. A
utilização das pastagens em junho, mesmo fornecendo os maiores teores de proteína bruta,
mostrou-se inviável devido aos baixos rendimentos de forragem. Visando conciliar os
rendimentos de matéria seca com a obtenção de forragem com razoável teor de proteína bruta,
as épocas de utilização mais propícias foram julho, agosto e setembro.
A forma mais recomendada para a prática do diferimento é o seu escalonamento, um
terço em fevereiro, para utilização nos primeiros meses de seca, e dois terços em março, para
uso no período restante de seca. Com este procedimento, a qualidade do material acumulado
pode ser sensivelmente melhorada. Para B. brizantha cv. Marandu, cultivada num Latossolo
Amarelo, textura argilosa, o diferimento em abril com utilizações em junho e julho proporcionou
forragem com maiores teores de proteína bruta, contudo os maiores rendimentos de proteína
bruta foram obtidos com o diferimento em fevereiro e utilizações em agosto e setembro. Os
maiores coeficientes de digestibilidade in vitro da matéria seca foram obtidos com o diferimento
em março ou abril e utilização em junho. A partir dos resultados obtidos, recomenda-se o
seguinte esquema: diferimento em fevereiro para utilização em junho e julho e, diferimento em
abril para utilização em agosto e setembro. Já, para A. gayanus cv. Planaltina, quando o
diferimento for realizado em março, as pastagens devem ser utilizadas em junho ou julho,
enquanto que para o diferimento em abril, as épocas de utilização mais adequadas são agosto
e setembro. Em pastagens de P. maximum cv. Tobiatã, com utilizações em junho e julho, o
diferimento em fevereiro proporcionou os maiores rendimentos de matéria seca verde (MSV).
Já, com utilizações em agosto e setembro, o diferimento em março foi o mais produtivo.
Independentemente das épocas de diferimento, observaram-se reduções significativas dos
teores de proteína bruta e coeficientes de digestibilidade in vitro da MSV.
Outra alternativa para a sub-utilização da pastagem consiste no ajuste da carga animal
de forma que, no início do período seco, haja um excedente compatível com as necessidades
dos animais, naquele período. Isto pode ser realizado quando as pastagens estão submetidas
a pastejo contínuo, no entanto, quando utiliza-se o pastejo rotativo torna-se mais fácil o
ajustamento da carga animal ou da pressão de pastejo. Recomenda-se diferir parte da
pastagem em época apropriada, no período de crescimento, para se obter, no início do período
seco, cerca de 4 toneladas/hectare de matéria seca. Um bom critério é deixar as folhas da
pastagem a uma altura de 60 a 80 cm, pois alturas superiores podem implicar em desperdício,
face à maior proporção de talos, os quais apresentam altos teores de fibras indigestíveis.
10. Bancos-de-Proteína
A suplementação alimentar, durante o período seco, torna-se indispensável visando

amenizar o déficit nutricional dos rebanhos e reduzir os efeitos da estacionalidade da produção
de forragem durante o ano. A utilização de leguminosas forrageiras surge como a alternativa
mais viável para assegurar um bom padrão alimentar dos animais, notadamente durante o
período seco, já que estas, em relação às gramíneas, apresentam alto conteúdo protéico,
melhor digestibilidade e maior resistência ao período seco. Além disso, face à capacidade de
fixação do nitrogênio da atmosfera, incorporam quantidades consideráveis deste nutriente,
contribuindo para a melhoria da fertilidade do solo. As leguminosas podem ser utilizadas para a
produção de feno, farinha para aves e suínos, como cultura restauradora da fertilidade do solo,
76
consorciadas com gramíneas ou plantadas em piquetes exclusivos denominados de bancos-

de-proteína.
O banco-de-proteína é um sistema integrado, em que uma parte da área de pastagem
nativa ou cultivada é destinada ao plantio de leguminosas forrageiras de alto valor nutritivo. O
acesso dos animais ao banco-de-proteína pode ser livre, ou limitado a alguns dias por semana,
ou horas por dia, ao longo do ano, ou em determinadas épocas. A utilização estratégica do
banco-de-proteína tem por finalidade corrigir a deficiência em proteína e minerais e fornecer
forragem de melhor qualidade aos animais. Como complemento de pastagens cultivadas, é
uma prática que pode substituir, com vantagem, a utilização das queimadas, como forma de
melhorar o valor nutritivo das pastagens durante o período seco.
Na escolha de uma leguminosa para a formação de bancos-de-proteína deve-se
considerar sua produtividade de forragem, composição química, palatabilidade, competitividade
com as plantas invasoras, persistência, além da tolerância a pragas e doenças. Para as
condições edafoclimáticas de Rondônia, as espécies recomendadas são amendoim-forrageiro
(Arachis pintoi), acacia (Acacia angustissima), guandu (Cajanus cajan), leucena (Leucaena
leucocephala), pueraria (Pueraria phaseoloides), desmodio (Desmodium ovalifolium),
centrosema (Centrosema macrocarpum), stylosantes (Stylosanthes guianensis) e calopogônio
(Calopogonium mucunoides).
O preparo do solo através da aração e gradagem constitui o melhor recurso para o
estabelecimento das leguminosas, além de facilitar as práticas de manutenção e manejo. No
entanto, pode-se realizar o plantio em áreas não destocadas após a queima da vegetação. Os
métodos de plantio podem ser à lanço, em linhas ou em covas, manual ou mecanicamente. A
profundidade de semeadura deve ser de 2 a 5 cm, pois, em geral, as leguminosas forrageiras
apresentam sementes pequenas.
A área a ser plantada depende da categoria e do número de animais a serem
suplementados, de suas exigências nutritivas e da disponibilidade e qualidade da forragem das
pastagens. Normalmente, o banco-de-proteínas deve representar de 10 a 15% da área da
pastagem cultivada com gramíneas. Recomenda-se sua utilização com vacas em lactação ou
animais destinados a engorda. Em média, um hectare tem condições de alimentar
satisfatoriamente 15 a 20 e de 10 a 15 animais adultos, respectivamente durante os períodos
chuvoso e seco.
O período de pastejo deve ser de uma a duas horas/dia, durante a época chuvosa,
preferencialmente após a ordenha matinal. Gradualmente, à medida que o organismo dos
animais se adapta ao elevado teor protéico da leguminosa, o período de pastejo pode ser
aumentado para duas a quatro horas/dia, principalmente durante o período seco, quando as
pastagens apresentam baixa disponibilidade e qualidade de forragem. Períodos superiores a
quatro horas/dia podem ocasionar distúrbios metabólicos (timpanismo ou empazinamento),
notadamente durante a estação chuvosa, em função dos altos teores de proteína da
leguminosa. Dois a três meses antes do final do período chuvoso, recomenda-se deixar a
leguminosa em descanso para que acumule forragem para utilização durante a época seca, a
qual deve estar em torno de duas a três t/ha de matéria seca. Quando os animais têm livre
acesso e o pastejo não é controlado, deve-se ajustar a carga animal, de modo que a forragem
produzida seja bem distribuída durante o período de suplementação. Neste caso, o pastejo
poderia ser realizado em dias alternados ou três vezes/semana.
11. Capineiras
A baixa disponibilidade de forragem, durante o período seco, afeta seriamente o

desempenho animal, implicando em perda de peso, declínio acentuado da produção de leite,
diminuição da fertilidade e em enfraquecimento geral do rebanho. A suplementação alimentar,
durante o período de estiagem, torna-se indispensável, visando amenizar o déficit nutricional
do rebanho. A utilização de capineiras surge como uma das alternativas para assegurar um
melhor padrão alimentar dos rebanhos durante a época de escassez de forragem. O capim-
elefante (Pennisetum purpureum), devido ao fácil cultivo, elevada produção de matéria seca,
77
bom valor nutritivo, resistência a pragas e doenças, além da boa palatabilidade, tem sido a
forrageira mais utilizada para a formação de capineiras na Amazônia Ocidental.
⇒ Formação da capineira
A capineira deve ser localizada em terreno plano ou pouco inclinado, bem drenado e
próximo ao local de distribuição do capim aos animais. A área deve ser destocada, arada e
gradeada para facilitar o desenvolvimento da planta e as atividades de manutenção e
utilização. Em geral, um hectare de capineira, bem manejada, pode fornecer forragem para
alimentar 10 a 12 vacas durante o ano.
Nos solos ácidos a calagem deve ser realizada pelo menos 60 dias antes do plantio,
aplicando 1,5 a 3,0 t/ha de calcário dolomítico (PRNT = 100%). No plantio recomenda-se a
aplicação de 80 kg de P2O5/ha. A adubação orgânica poderá ser feita utilizando-se 10 a 30 t/ha
de esterco bovino, no sulco de plantio, o que equivale a cerca de 50 a 70 carroças de
esterco/ha. Após cada corte deve-se aplicar 5 t/ha de esterco e, anualmente 50 kg de P2O5/ha.
Caso a análise química do solo apresente valores baixos de potássio (< 45 ppm), sugere-se
aplicar 60 kg de K2O, sendo metade no plantio e metade após o segundo corte.
O plantio deve ser realizado no início do período chuvoso. As mudas devem ser retiradas
de plantas com 3 a 12 meses de idade. Deve-se aparar as plantas e retirar as folhas para que
ocorra uma melhor brotação. A quantidade de mudas necessárias para o plantio varia de
acordo com o espaçamento. No sistema de duas estacas/cova, no espaçamento de 1,0 m
entre sulcos e 0,8 m entre covas, necessita-se cerca de 25.000 estacas de 2 a 3 nós/ha. As
mudas devem ser colocadas horizontalmente em sulcos com 10 a 15 cm de profundidade. Em
média, um hectare fornece mudas para o plantio de 10 ha de capineira. As cultivares
recomendadas são Cameroon, Mineiro e Pioneiro.
⇒ Manejo
A freqüência entre cortes afeta marcadamente a produção de forragem, valor nutritivo,

potencial de rebrota e persistência (vida útil da capineira). O primeiro corte após o plantio deve
ser realizado quando as plantas estiverem bem entouceiradas, o que ocorre cerca de 90 dias
após o plantio. Os cortes devem ser realizados a intervalos de 45 a 60 dias, ou quando as
plantas atingirem de 1,5 a 2,0 m de altura.
A altura de corte em relação ao solo depende do nível de fertilidade e umidade do solo.
Quando as condições para as brotações basilares forem satisfatórias (solo bem adubado ou de
alta fertilidade natural), o corte pode ser feito rente ao solo; caso contrário, deve ser efetuado
entre 20 a 30 cm acima do solo. Os melhores resultados são obtidos com cortes feito com
terçado, foice ou enxada. Cortes mecanizados podem prejudicar a longevidade da capineira.
Nas condições edafoclimáticas de Rondônia, os rendimentos de forragem do capim-elefante
variam entre 6 a 10 t/ha/corte de matéria seca.
Para facilitar o manejo a capineira deve ser dividida em talhões. Cada talhão deve ser
totalmente utilizado numa semana e deve descansar por um período entre 45 e 60 dias até o
próximo corte. Quanto menor o período de descanso maior será o valor nutritivo e menor a
produção de forragem. Se um talhão não for completamente utilizado em uma semana, o seu
resto deve ser colhido e o material fornecido a outros animais ou distribuídos na área como
cobertura morta, visando não comprometer o bom manejo da capineira. Por exemplo: para um
rebanho leiteiro de 25 vacas seria necessário 2,5 ha de capineira, a qual poderia ser dividida
em oito talhões principais mais dois de reserva para situações críticas. Deste modo, utilizando-
se um talhão a cada sete dias, o período de descanso entre cortes, num mesmo talhão, seria
de 49 dias. Neste caso, os talhões poderiam ter uma área de 2.500 m2 (50 x 50 m).
Apesar da capineira fornecer altas produções de forragem durante o período seco, seu
maior rendimento ocorre durante o período chuvoso, quando normalmente as pastagens
apresentam alta disponibilidade de forragem. No entanto, se na época chuvosa a capineira não
for manejada, a gramínea ficará passado e com baixo valor nutritivo (muita fibra e pouca
proteína). Logo, quando for utilizado durante o período de estiagem não proporcionará efeitos
78
positivos na produtividade animal. A utilização da capineira deve ser suspensa no final do

período chuvoso (março-abril), visando o acúmulo de forragem de boa qualidade para
utilização durante o período seco.
12. Degradação de Pastagens
A pecuária tem sido uma atividade pioneira na ocupação de áreas de fronteira e, nos
últimos 30 anos vem sendo incrementada na região Amazônica, transformando segmentos
significativos da floresta em pastagens, como consequência da abertura de novas estradas que
propiciam condições favoráveis para a ocupação humana na região. No processo tradicional de
formação e utilização de pastagens cultivadas na região Amazônica, após a queima da floresta,
grande quantidade de nutrientes são adicionados ao solo através das cinzas, aumentando
consideravelmente sua fertilidade, elevando o pH em pelo menos uma unidade e praticamente
neutralizando o alumínio trocável. Nutrientes como o cálcio e magnésio permanecem em níveis
satisfatórios. Em conseqüência, a saturação por bases dificilmente é inferior a 50%. O potássio
permanece mais ou menos estável, em níveis adequados para manter a produtividade das
pastagens. A matéria orgânica e o nitrogênio permanecem em níveis aceitáveis, apesar das
periódicas queimadas. No entanto, os teores de fósforo (P), a partir do quarto a quinto ano do
estabelecimento das pastagens, declinam acentuadamente, até atingir níveis praticamente
indetectáveis, como se verifica em pastagens com mais de dez anos de utilização. A baixa
disponibilidade deste nutriente tem sido identificada como a principal causa para a instabilidade
das pastagens cultivadas na Amazônia. O alto requerimento de P pelas gramíneas cultivadas,
associadas com perdas pela erosão, retirada pelos animais sob pastejo e a competição que as
plantas invasoras exercem, resulta na queda de produtividade e a conseqüente degradação
das pastagens.
Nos primeiros anos após a formação da pastagem, normalmente, obtém-se bons níveis
de produtividade animal, sendo comum uma capacidade de suporte de até 1,5 UA/ha/ano
(Unidade Animal igual a 450 kg de peso vivo). Este comportamento é decorrente do incremento
da fertilidade do solo pela incorporação dos nutrientes contidos nas cinzas proveniente da
biomassa incinerada. Tal situação perdura durante por três a cinco anos após o
estabelecimento da pastagem. A partir daí, há um decréscimo na produtividade de forragem e
incremento na comunidade de plantas invasoras, como consequência da incapacidade da
planta forrageira em suprir bons rendimentos em baixos níveis de fertilidade do solo. Este
processo de degradação pode culminar com a inviabilidade bioeconômica da pastagem. Deste
modo, torna-se imprescindível a recuperação e intensificação da utilização das pastagens
cultivadas, com vistas a reduzir a expansão destas em novas áreas de floresta, além de
proporcionar benefícios de ordem ecológica (preservação da floresta), econômica (custo de
formação de pastagem maior que o de recuperação) e social (necessidade de mão-de-obra).
O declínio gradual de produtividade das pastagens com o decorrer dos anos está
diretamente relacionado com a fertilidade e as características físicas do solo (consistência,
taxas de infiltração, porosidade, textura, densidade etc.). Contudo, outros fatores também
contribuem para este processo, tais como deficiências em seu estabelecimento (sementes de
baixa qualidade, mal preparo do solo etc.) e a utilização de práticas de manejo inadequadas.
Em geral, a utilização das pastagens cultivadas tem sido realizada sob condições de altas
pressões de pastejo, associadas ao pastejo contínuo ou períodos mínimos de descanso, as
quais não são compatíveis com a manutenção do equilíbrio do complexo solo-planta-animal
que permita uma produtividade satisfatória da pastagem a longo prazo.
As práticas mais utilizadas para deter o declínio de produtividade das pastagens tem se
restringido ao controle de plantas invasoras, através de métodos manuais, químicos ou físicos,
isolados ou integrados. Estes são, geralmente, associados com queimas periódicas e seguidos
de um período de descanso variável, com a finalidade de reduzir a competição da comunidade
de plantas invasoras e favorecer um melhor desenvolvimento da planta forrageira. Entretanto,
na maioria dos casos, mesmo um descanso prolongado das pastagens não tem proporcionado
o efeito desejado, tornando-se os processos de limpeza cada vez mais freqüentes e menos
eficientes, pois, geralmente, não é suficiente para que as gramineas e/ou leguminosas
79
forrageiras recuperem seu vigor. Como as plantas invasoras são, na maioria, nativas e
perfeitamente adaptadas às condições edafoclimáticas da região e, dificilmente são
consumidas pelos animais, tendem a predominar no ecossistema.
Dentre as causas que tem levado as pastagens cultivadas à degradação, o
esgotamento da fertilidade do solo, as alterações em suas propriedades físicas (consistência,
taxas de infiltração, porosidade, densidade etc.) e o manejo inadequado são os mais comuns.
As pastagens são consideradas em degradação quando a produção de forragem é insuficiente
para manter um determinado número de animais por um certo período de tempo. Entretanto,
quando a produção de matéria seca diminui sensivelmente, a ponto de ser notada através da
redução da carga animal, a planta forrageira já reduziu drasticamente o sistema radicular, o
perfilhamento e a expansão de novas folhas e os níveis de reservas de carbohidratos nas
raízes e base dos colmos. Para plantas de Panicum maximum var. trichoglume uma redução
de 8% na produção de matéria seca implicava no decréscimo de 3,8 vezes do sistema
radicular; de 4,0 vezes no nível de carbohidratos de reservas e de 1,7 vezes nas taxas de
produção de novas folhas. Desse modo, o sucesso na recuperação de pastagens degradadas
depende da eficiência com que se reestabelece o sistema radicular, o perfilhamento e os
demais mecanismos que a planta utiliza para prolongar sua persistência.
A degradação da pastagem é um processo evolutivo da perda de vigor, de
produtividade, de capacidade de recuperação natural das pastagens para sustentar os níveis
de produção e qualidade exigida pelos animais, assim como, o de superar os efeitos nocivos
de pragas, doenças e plantas invasoras, culminando com a degradação avançada dos
recursos naturais, em razão de manejos inadequados. O processo ocorre com a redução na
produção de forragem e no seu valor nutritivo, mesmo em épocas favoráveis ao crescimento ou
quando há uma diminuição considerável na produtividade potencial para as condições
ecológicas e bióticas a que a pastagem está submetida. Outros sinais que podem ser
detectados no início do processo são a diminuição da cobertura do solo, redução no número de
plantas novas (provenientes da ressemeadura natural), presença de plantas invasoras e
cupins.
As causas mais importantes da degradação das pastagens são: 1. utilização de plantas
forrageiras inadequadas á região; 2. má formação inicial causada pela ausência ou mau uso de
práticas de conservação do solo; preparo do solo; correção da acidez e/ou adubação;
sistemas e métodos de plantio; manejo animal inadequado na fase de formação da pastagem;
3. manejo e práticas culturais (uso de fogo como rotina; métodos, épocas e excesso de
roçagens; ausência ou uso inadequado de adubação de manutenção); 4. ocorrência de pragas,
doenças e plantas invasoras; 5. manejo animal (excesso de lotação; sistemas inadequados de
pastejo; ausência ou aplicação incorreta de práticas de conservação do solo após
superpastejo.
O manejo da pastagem tem por objetivo obter equilíbrio entre o rendimento e a
qualidade da forragem produzida e a manutenção da composição botânica desejada para a
pastagem, concomitantemente com a produção ótima por animal e por área. Assim, o
conhecimento das inter-relações dos componentes envolvidos é de vital importância no
controle e na manipulação dos sistemas de pastejo, pois a inobservância desses princípios
podem conduzir a erros na adoção de práticas de manejo de pastagens e fracassos na
condução de sistemas de produção duradouros e produtivos.
No manejo das pastagens, deve-se sempre evitar o superpastejo (número excessivo de
animais por área). Quando possível, fazer a divisão das pastagens e utilizar o pastejo rotativo.
No caso da adoção do pastejo contínuo, dar pelo menos um a dois meses de descanso nas
pastagens durante o ano. Outra prática de grande importância consiste na diversificação das
espécies na pastagem. Devido a grande variação existente entre as plantas forrageiras quanto
aos requerimentos nutricionais, produção estacional de forragem, valor nutritivo, tolerância às
pragas e doenças, além da produção durante o período de estiagem, com este procedimento
haverá um melhor aproveitamento das potencialidades de cada espécie. Quanto ao uso de
leguminosas, sugere-se dus maneiras: consorciadas diretamente com as gramíneas ou a
formação de bancos-de-proteína, que consiste no plantio isolado da leguminosa. Como estas
80
sentem menos os efeitos da estiagem, tem-se durante o período de seca alimento de excelente
qualidade e em quantidades satisfatórias.
13. Biologia e Controle das Cigarrinha-das-Pastagens
A cigarrinha-das-pastagens é a principal praga das pastagens, podendo acarretar

acentuado decréscimo na disponibilidade e valor nutritivo da forragem e até implicar na
degradação da pastagem. São insetos sugadores, essencialmente graminícolas. Na fase
adulta, os insetos sugam a seiva das folhas e inoculam toxinas, causando intoxicação
sistêmica nas plantas (fitotoxemia), que interrompe o fluxo da seiva e o processo vegetativo,
cujos sintomas iniciais são estrias longitudinais amareladas que aumentam para o ápice da
folha e posteriormente secam, podendo, no caso de ataque intenso, ocorrer o amarelecimento
e secamento total da pastagem. As ninfas sugam continuamente a seiva das raízes ou coleto,
produzindo uma espuma branca típica, semelhante à saliva, a qual serve como proteção para
os raios solares e de certos predadores. Nesta fase, ocorre um desequilíbrio hídrico e o
esgotamento dos carbohidratos de reserva utilizados no processo de crescimento das plantas.
Dentre as gramíneas forrageiras introduzidas e avaliadas em Rondônia, as que se mostraram
resistentes às cigarrinhas-das-pastagens foram A. gayanus cv. Planaltina, B. brizantha cv.
Marandu, Tripsacum australe, Axonopus scoparius, Paspalum atratum cv. Pojuca, P.
guenoarum FCAP-43 e P. secans FCAP-12.
A ocorrência das cigarrinhas-das-pastagens e seu comportamento estão diretamente
relacionados com as condições climáticas, principalmente, elevada precipitação, umidade
relativa do ar e temperatura. Quando estas são favoráveis, os ovos eclodem cerca de 22 dias
após a postura, passando pela fase de ninfa até atingirem o estágio adulto, completando o ciclo
biológico entre 67 e 69 dias, conforme a espécie. Caso contrário, os ovos entram em
quiescência, mantendo-se viáveis durante vários dias no solo, a espera de condições
climáticas favoráveis. As espécies detectadas na região foram Deois incompleta, Deois
flavopicta e Zulia entreriana, com predominância para a primeira, as quais atacam várias
gramíneas (Brachiaria decumbens, B. ruziziensis, B. humidicola e Panicum maximum).
Recentemente, foram detectados surtos da espécie Mahanarva fimbriolata em cultivos
simultâneos de milho, arroz e P. maximum cv. Tanzânia, havendo vários relatos de produtores
e técnicos de ataque à B. brizantha cv. Marandu. A população de cigarrinhas-das-pastagens
durante a estação chuvosa alcança níveis muito altos, podendo-se encontrar até 100 ninfas/m2.
Em condições de campo, são parcialmente controladas por vários inimigos naturais, entre eles
o mais importante é o fungo Metarrhizium anisopliae que parasita as ninfas e os adultos. No
entanto, a efetividade do fungo depende dos fatores ambientais, principalmente a temperatura
e a umidade relativa do ar. Também tem sido observado larvas da mosca Salpingogaster nigra
penetrando a massa espumosa para se alimentarem das ninfas. Recomenda-se as seguintes
práticas para o controle das cigarrinhas-das-pastagens:
- manter, no mínimo, 30% das pastagens formadas com espécies resistentes à praga
- evitar a utilização de superpastejo, obedecendo a altura de pastejo recomendada para cada
espécie
- reduzir a carga animal nas pastagens de gramíneas susceptíveis, durante o pico
populacional das cigarrinhas (novembro a março), deslocando a maior parte do rebanho
para as pastagens com gramíneas resistentes
- após abril, utilizar as pastagens com gramíneas susceptíveis, deixando as de gramíneas
resistentes em descanso, visando acumular forragem para utilização durante o período de
estiagem
Pastagens diversificadas e bem manejadas reduzem acentuadamente o risco representado

pelas cigarrinhas-das-pastagens, bem como pelos demais insetos-pragas, assegurando níveis
adequados de produtividade, sem a necessidade de uso do fogo contra essas pragas.
81
14. Sistemas silvipastoris
Na Amazônia Ocidental, atualmente, estima-se que cerca de 12 milhões de hectares de

floresta estão ocupados com pastagens cultivadas. Desta área, quase 50% já apresenta
pastagens em diferentes estágio de degradação, o que torna necessário a derrubada de novas
áreas para a manutenção dos rebanhos, resultando numa pecuária itinerante. O processo de
degradação se manifesta pela queda gradual e constante de produtividade das forrageiras
devido a vários fatores, notadamente baixa adaptabilidade das espécies, baixa fertilidade dos
solos, manejo deficiente das pastagens e altas pressões bióticas, o que culmina com a
dominância total da área por plantas invasoras, mais adaptadas às condições ecológicas
prevalescentes, tornando as medidas de manutenção, como limpeza e queima das pastagens,
cada vez mais inócuas. Considerando-se os dados mais recentes sobre desmatamentos para a
formação de pastagens na Amazônia Legal, estima-se a derrubada anual em quase um milhão
de hectares para a manutenção do mesmo rebanho atualmente explorado.
Deste modo, sistemas alternativos que levem em consideração as peculiaridades dos
recursos naturais da região e que sejam técnica e economicamente viáveis, devem ser
concebidos e testados de modo a tornar a atividade agropecuária mais produtiva, sustentável e
menos danosa ecologicamente. Logo, os sistemas silvipastoris, uma modalidade componente
dos sistemas agroflorestais (SAF's), surge como opção para conter os impactos ecológicos
decorrentes da derrubada de florestas para a formação de pastagens. Os sistemas silvipastoris
são sistemas agropecuários diversificados e multiestratificados, nos quais as pastagens são
estabelecidas associadas com culturas florestais, frutíferas ou plantas industriais.
A Amazônia Ocidental apresenta ótimas condições para o desenvolvimento de SAF's,
em função das grandes áreas plantadas com culturas frutíferas, florestais e industriais. A
participação dos pequenos produtores, na atividade pecuária estadual é bastante significativa e
a utilização de pastagens associadas com culturas pode favorecer a oferta da disponibilidade
de proteína de origem animal, aumentando a renda dos produtores, diminuindo os custos com
limpeza das culturas, impedindo a abertura de novas áreas. Atualmente, em Rondônia, cerca
de 80.000 ha estão plantados com espécies frutíferas (cupuaçu, cacau, coqueiro), industriais
(seringueira, pupunha, açai) e essências florestais (castanha-do-Brasil, eucaliptus, mogno,
cerejeira, pará-pará, tento, bandarra etc.). Independentemente do nível tecnológico adotado
pelos produtores, algumas práticas culturais, tais como, controle de invasoras, cobertura morta,
prevenção de pragas e doenças e fertilização, devem ser utilizadas, o que, em algumas
situações podem se constituir em fatores limitantes à manutenção do cultivo, seja por razões
de ordem técnica e/ou econômica. Nestas áreas, potencialmente, podem ser implantados
sistemas silvipastoris, através do estabelecimento de pastagens associadas as culturas,
visando a criação de ruminantes (ovinos, caprinos, bovinos, bubalinos). Deste modo, além da
geração de dividendos adicionais (produção de carne, leite, venda de animais e subprodutos
etc.) os custos de manutenção das culturas seriam significativamente reduzidos.
Os sistemas silvipastoris, são sistemas agropecuários diversificados e multiestratificados,
nos quais os arbóreos são explorados em associação planejada com cultivos agrícolas ou
pastagem, de maneira simultânea ou seqüencialmente. Os sistemas silvipastoris que somente
associam árvores com pastagem, obviamente, têm também um componente animal, como
regra ruminantes de médio ou pequeno porte, principalmente bovinos e ovinos.
As principais vantagens dos sistemas silvipastoris são as de melhorar o aproveitamento dos
solos; controlar as ervas invasoras; reduzir os riscos de incêndio; produzir lenha, postes e
madeira. Ademais, os pequenos produtores podem produzir alimentos de origem animal sem
sacrificar áreas para cultivos. No sistema silvipastoril componente arbóreo constitui importante
fator de estabilização do solo, por conferir proteção contra ação direta das chuva, do sol e da
erosão pluvial e eólica. Além disso, a árvores podem modificar o microclima, permitindo melhor
ciclagem de nutrientes por processo naturais, por meio da matéria orgânica originada pelas
plantas mortas e excrementos dos animais. Esse efeito de proteção do solo pelas árvores pode
refletir no aumento da palatabilidade das pastagens, além de produzir benefícios econômicos
e ecológicos.
82
O sistema silvipastoril com gramineas (P. maximum, B. brizantha e B. humidicola) e

árvores (tatatajuba, paricá e eucalipto) vem sendo adotado em várias fazendas do Pará, com
pastagens em elevado estado degradação. Neste sistema o ganho de peso dos bovinos tem
sido satisfatório, muitas vezes superando aos obtidos em pastagens simples. Durante um
período de 18 meses, acompanhou-se o desempenho de bovinos em pastagem de P.
maximum sob plantios de cajueiros em comparação com pastagem não sombreada. Ao final do
experimento observaram que o sombreamento reduziu significativamente a produtividade da
pastagem, o que implicou em um menor ganho de peso dos animais. Avaliando-se o
desempenho de bovinos em pastagem de P. maximum em áreas povoadas por Eucaliptus
urophilla e obtiveram-se ganhos médios diários de 250 g, em função da baixa disponibilidade
de forragem. Durante a estação seca do trópico úmido brasileiro, os ganhos de peso
satisfatórios em ovinos deslanados mantidos em Pueraria phasoeloides + gramíneas nativas
sob plantio de diversos clones de seringueira (Hevea brasilensis).
A carga animal também é um fator importante a ser levado em consideração nestes
sistemas. Em uma floresta de coníferas, pastejada durante quatro anos, com 36 a 68
animais/ha, estes ocasionaram perdas de até 31% das árvores. No Pará, o desempenho de
bubalinos em pastejo contínuo sob cargas baixa, média e alta; em áreas com e sem
sombreamento, foram avaliados, não sendo encontraradas diferenças significativas entre os
tratamentos. Sugere-se que o cálculo da carga animal seja o mais adequado possível, para
que seja evitado o superpastejo. A maioria dos sistema silvipastoris praticados na Amazônia
indicam que o superpastejo compromete a persistência das forrageiras, permitindo o aumento
de plantas invasoras não palatáveis.
A densidade do povoamento florestal, no sistemas silvipastoris, é responsável pela
maior ou menor produção de forragens e, consequentemente, pela pressão de pastejo a ser
exercida na área. A produtividade das pastagens neste sistemas dependem da quantidade de
árvores por hectare, da altura, arquitetura e fenologia de cada espécie. As árvores utilizadas
num sistema silvipastoril devem ser, preferencialmente, de copas que permitam a passagem de
luz para o crescimento das forrageiras. As pastagens tropicais do tipo metabólico C4, alcançam
sua produção máxima com altos níveis de luminosidade.
A influencia das árvores sobre a produção das pastagens, considerando a interceptação
da radiação solar, poderá reduzir a sua capacidade produtiva. No entanto, quando o
componente arbóreo não é muito denso, permitindo que a radiação solar penetre pela copa até
o solo, as gramíneas existentes sob esse dossel mantêm por mais tempo seus níveis de
proteína e maior digestibilidade do que aquelas que estão fora da influência dessa cobertura
vegetal.
Nos sistemas silvipastoris, os bovinos tem propensão a danificarem as árvores,
principalmente danificando a copa, roçando a cabeça contra o tronco ou comendo a casca.
Também os animais aprendem a baixar a copa das árvores jovens para alimentarem-se. O
pastejo contínuo de bovinos em área de floresta, provoca acentuado desnudamento do solo e
destrói as raízes superficiais, responsáveis pela absorção dos nutrientes, prejudicando o
desenvolvimento das árvores. Em estudos realizados com Pinus sp., verificou-se que, para
evitar danos árvores, o gado bovino não deve ser colocado antes que as plantas tenham três
anos de idade ou 4 m de altura, no entanto ovelhas podem ser introduzidas mais cedo, ou seja,
com árvores com 2 m de altura. O pastejo rotativo de bovinos em plantios de Eucaliptus saligna
associados a forrageiras (Lolium multiflorum e Trifolium vesiculosum) não afetou a
sobrevivência das mudas a partir dos 2 metros de altura, e que os danos causados não
superaram 4,4%. Num sistema silvipastoril com Eucaliptus globulus realizado em áreas
destinadas ao pastoreio com ovelhas, as quais não danificaram as árvores, ajudando, ao
contrário no controle das plantas invasoras e diminuindo a competição por água e nutrientes,
bem como os riscos de incêndio na estação seca. Posteriormente, conforme as árvores vão
crescendo, introduz-se nestas áreas o gado bovino.
As espécies arbóreas para combinação com pastagens e bovídeos devem possuir as
seguintes características: não ser tóxica e que não produza efeitos alelopáticos sobre a
pastagem; terem silvicultura conhecida; serem adequadas às condições ecológicas e
ambientais; de crescimento rápido, e preferencialmente, perinófilas; sejam resistentes a
83
ventos; possam propiciar alimento para os animais; tenham capacidade de rebrote e de

fixação de nitrogênio.
84
SISTEMAS INTEGRADOS DE PRODUÇÃO AGRICULTURA PECUÁRIA
Claudio Ramalho Townsend1

João Paulo Guimarães Soares1
INTRODUÇÃO
Os últimos dez anos têm sido decisivos para a economia brasileira, em especial, para a
agropecuária. Nesse período parte expressiva do setor se distanciou da prática extrativista que
por muitos anos caracterizou a atividade e tem sido um exemplo de capacidade de ajustes e
adaptação à realidade do mercado atual que penaliza os setores não competitivos e
ineficientes. Essa busca por produtividade iniciada a partir de 1970, todavia, foi responsável
pelo desenvolvimento de estratégias que estabeleceram um modelo de desenvolvimento rural
extremamente agressivo ao ambiente e, por conseqüência, ao homem e, que por estes fatos,
começa a ser questionado sob vários aspectos.
Entretanto, estes processos vêm contribuindo para o crescimento do Brasil como
importante fornecedor de produtos advindos da pecuária bovina para o mercado internacional,
além de nos últimos anos apresentar também aumento de consumo de carnes, leite e
derivados, o que coloca a atividade frente a um momento ímpar de sua história.
Uma das características que faz com que essa atividade no Brasil seja altamente
competitiva, é o fato do país apresentar grandes áreas de pastagens e o maior rebanho
comercial do mundo, em 2001 com efetivo de 165.700 milhões de cabeças (BRASIL, 2003 -
Figura 01), das quais cerca de 13 % concentram-se nos Estados da Região Norte, distribuídas
conforme Tabela 1.
Rebanho Total de Bovinos/ Total Cattle Heard

Rebaño Total de Bovinos
170000
165.700
Em 1 000 Cabeças
165000
160000
155000
154.200
153.000
150000
145000
1992 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001
Período
FIGURA 1. Evolução do rebanho bovino brasileiro no período de 1992 a 2001.
_______
1. Zootec., M.Sc., Embrapa Rondônia, caixa Postal 406, CEP 78900-970, Porto Velho, Rondônia
85
Tabela 1. Distribuição do rebanho bovino brasileiro segundo Regiões e estados da Região

Norte-2001
Efetivo Bovino em 2001
Regiões do Brasil
n° de cabeças %
NORTE 20.579.873 12,71
Pará 7.186.731 34,92

Tocantins 5.666.832 27,53
Rondônia 5.082.849 24,69
Acre 1.121.776 5,45
Amazonas 955.904 4,64
Roraima 490.046 2,38
Amapá 75.735 0,36
CENTRO OESTE 55.118.577 34,05
SUDESTE 35.029.036 21,64
SUL 25.724.963 15,90
NORDESTE 25.379.897 15,70
BRASIL 161.832.345 100,00
Principais Estados n° de cabeças %
Mato Grosso do Sul 21.942.671 13,55

Minas Gerais 19.357.652 11,96
Goiás 16.566.878 10,23
Mato Grosso 16.522.682 10,20
Rio Grande do Sul 13.262.061 8,19
FONTE: BRASIL, 2003.
Nesse contexto, as pastagens assumem dois aspectos fundamentais:
• Viabilizam a competitividade brasileira;

• Atendimento da grande demanda mundial por alimento produzido de forma natural, com
respeito ao ambiente e aos animais.
Nessa ótica, é essencial que o "boi verde" ou o "boi ecológico" sejam entendidos como
produtos oriundos de sistemas de produção que, além da não agressão ao ambiente, estes
animais são alimentados exclusivamente com alimentos de origem vegetal como pode ser
visualizado na Figura 2. Outra opção com tendência de crescimento de demanda é a produção
do denominado "boi orgânico". Esse último, além de pasto, pode receber até suplementação
protéica energética, respeitando-se um percentual de 10% da matéria seca total consumida
pelo animal. Os suplementos também não podem ser transgênicos (BRASIL/MAPA, 2002).
Esta carne produzida e comercializada, por conseguinte tem grande vantagem, pois por ser
produto advindo de animais criados em sistema de pastejo agrega valor ao produto que será
enviado para o mercado externo. Principalmente a carne produzida na região Norte, pois
muitas vezes o elevado preço de insumos e frete encarece a produção, sendo tendência
natural a produção do boi verde e/ou orgânico.
86
Semi-confinamento
Confinamento 4,8%
4,9%
Pastagem
90,3%
Fonte: FNP, 2000.
Figura 2. Origem de produção da carne brasileira
Por estes aspectos, não se pode negar a importância da pecuária para a economia,
uma vez que se constitui na principal atividade do setor agropecuário. Na verdade tem se
constituído numa das atividades responsáveis pelo avanço da fronteira agrícola. Situação
decorrente da intensificação do fluxo migratório, observado, principalmente, ao longo da
década de 70, o que provocou grandes mudanças na base produtiva da Amazônia.
O crescimento na produção de leite também é um ponto a ser destacado. O Brasil
segundo a FAO é o país com maior previsão de crescimento no setor, com um incremento de
9,5 bilhões de litros, refletindo uma taxa de crescimento anual de 3,6% ao ano. Pelas previsões
feitas, o Brasil atingirá a produção de 29.129 bilhões de litros em 2010. Segundo as mesmas
previsões o país estará consumindo 30.961 bilhões de litros em 2010, um incremento de 9,2
bilhões de litros com taxa de crescimento anual de 3,3% (Carvalho, 2002). Neste contexto
dentre os estados da região Norte, Rondônia, por exemplo, teve um crescimento extraordinário
aumentando 33% desde 1996, correspondentes à taxa anual de crescimento de 7,41%. Neste
mesmo período, a produção de leite do Brasil obteve um aumento de 7%, à taxa anual de
crescimento de 1,65% (Diagnóstico da cadeia leiteira, 2002).
Por outro lado, hoje o Brasil vislumbra uma produção estimada para safra 2002/2003 de
112,4 milhões de toneladas de grãos, cultivada em 42,3 milhões de hectares, ou seja,
crescimento na ordem de 70% na produção em apenas 10 anos. O agronegócio passou a valer
R$ 424,4 bilhões de reais, representando 29% do PIB do país. Pela primeira vez na história a
safra de soja, por exemplo, superou as expectativas sendo de 50 milhões toneladas. Só no
estado de Rondônia apresentou para esta cultura a maior produtividade do país que foi em
torno de 3200 kg/ha.
Além disso, vale ressaltar que no agronegócio nacional a produção primária responde
por 30%; o segmento de insumos, por mais 10%; os segmentos de indústria de beneficiamento
e de distribuição ficam com a maior parcela, de 60%. Segundo a Confederação Nacional da
Agricultura, o setor emprega 24% da população economicamente ativa e responde por 33%
das vendas externas do País, mantendo superávit na balança comercial.
Neste contexto, as integrações tecnológica, comercial e social proporcionadas pela
integração lavoura pecuária, têm nos mostrado uma nova agricultura, permitindo maior
versatilidade de produção e pluralidade de atividades, garantindo maior estabilidade na
87
produção, seja pela preservação do solo, da água do ar e da biodiversidade, seja pela

diminuição do grande risco agrícola, além de uma maior agilização das operações, com
inúmeros benefícios para toda a sociedade.
PASTAGENS CULTIVADAS NA AMAZÔNIA BRASILEIRA
As pastagens constituem o principal tipo de uso da terra na Amazônia brasileira e são

sistemas complexos formados pelos componentes solo-planta-animal, os quais estão sujeitos à
modificações antrópicas através do seu manejo. Estima-se que o Brasil conta com cerca de 90
milhões de hectares de pastagens cultivadas (IBGE, 1995). Dados publicados pelo INPE
(1998) mostram que a área desflorestada na Amazônia legal brasileira já ultrapassa 500.000
km2. Deste total, estima-se que cerca de 70% são usados em algum período com pastagens,
dos quais 45% foram convertidos diretamente (FEARNSIDE, 1996). Só em Rondônia, a área
desmatada até o ano de 1996 foi estimada em 48,8 x 103 km2 (INPE, 1998), correspondendo à
cerca de 21% da área total do Estado.
A derrubada da floresta seguida da queima tem constituído o processo usual de preparo
da área para formação de pastagens. Com a introdução de gramíneas dos gêneros "Panicum,
Brachiaria, Hyparrhenia, Andropogon, Setaria e Pennisetum", e com menos freqüência
leguminosas dos gêneros "Pueraria, Centrosema, Desmodium, Leucaena, e Stylosanthes".
Sendo a Brachiaria brizantha cv. Marandu (braquiarão) a gramínea que tem sido bastante
difundida nos últimos anos, por apresentar alta produtividade e adaptação às condições
edafoclimáticas e bióticas da região (COSTA et al.,1996). Os impactos globais mais
importantes deste processo, estão relacionados com a emissão de gases causadores do efeito
estufa por ocasião da queima da biomassa, sobretudo CO2, perdas da biodiversidade e efeitos
da fumaça (FEARNSIDE, 1997; UHL & KAUFFMAN, 1990). Contudo, as modificações recaem,
principalmente, sobre um dos componentes do sistema, o solo, em função da nova cobertura
vegetal e da presença do animal em pastejo (HYNES & WILLIAMS, 1993).
Na sua maioria, as pastagens formadas em área de floresta seguem em maior ou menor
escala, os padrões produtivos descritos por SERRÃO & HOMMA (1982), após o
estabelecimento da pastagem, via de regra, esta apresenta bons níveis de produtividade,
podendo atingir capacidade de suporte de ate 1,5 UA/ha (Unidade Animal-450 kg PV), em
decorrência do incremento na fertilidade do solo pela incorporação das cinzas provenientes da
queima da exuberante biomassa da floresta, situação que perdura durante os 3 a 5 primeiros
anos. Paulatinamente há decréscimo na produtividade e incremento na comunidade de plantas
invasoras, em decorrência da incapacidade da gramínea forrageira sustentar bons rendimentos
em níveis baixos de fertilidade, sendo fósforo (P) o elemento mais limitante. TOWNSEND et al.
(2001) trabalhando com pastagens de Brachiaria brizantha cv. Marandu, em avançado estádio
de degradação, observou que a limitação por N e K também passam a exercer papel
importante neste processo, culminando com a inviabilidade bioeconômica da pastagem. Como
ilustra a Figura 3.
Dito processo de degradação é acelerado pela alta incidência de pragas e doenças, bem
como, pelo manejo inadequado do sistema solo-pastagem-animal, imposto pelo homem
(COSTA et al., 1998). Estima-se que aproximadamente 40% da área estabelecida com
pastagens na Amazônia Legal encontram-se em diferentes estágios de degradação, que para
SERRÃO & HOMMA (1993), representam mais de 10 milhões de hectares com níveis de
infestação de invasoras acima de 70%, caracterizando um elevado grau de degradação. Fato
que também se dá em outras regiões tropicais.
88
Figura 3 . Cronoseqüência de pastagens cultivadas na Amazônia.

SERRÃO & HOMMA (1982)
Segundo KITAMURA (1994), a recuperação e intensificação do uso de pastagens

cultivadas, devem ser preconizada a fim de se reduzir a expansão em áreas de florestas,
propiciando benefícios de ordem ecológica (preservação da floresta), econômica (custo de
formação de pastagem maior que o de recuperação) e social (necessidade de mão-de-obra).
As estratégias utilizadas para a reabilitação da capacidade produtiva das pastagens
buscam interromper o processo de degradação, combatendo-se as causas a ele associadas.
Na prática, os termos: recuperação, reforma e renovação de pastagens são usados
erroneamente como sinônimos. Contudo, é necessário esclarecer que tecnicamente eles
possuem significados diferentes. Entende-se por recuperação a aplicação de práticas culturais
e/ou agronômicas, visando o restabelecimento da cobertura do solo e do vigor das plantas
forrageiras na pastagem, ex: adubações de manutenção, vedação de piquetes, controle de
invasoras e sobre-semeadura da espécie existente. Por reforma entende-se a realização de
um novo estabelecimento da pastagem, com a mesma espécie e, geralmente, com a entrada
de máquinas, ex: escarificação do solo, ressemeadura, correção da acidez do solo, etc. Por
último a renovação consiste na utilização da área degradada para a formação de uma nova
pastagem com outra espécie forrageira, geralmente mais produtiva, com a adoção de práticas
mais eficientes de melhoria das condições edáficas, como a aplicação de calcário, adubo no
estabelecimento e manutenção, assim como uso mais racional da pastagem (DIAS-
FILHO,2003).
Segundo DIAS FILHO (2003), os métodos de recuperação contemplam o uso de calcário,
fertilizantes. Já a reforma utiliza-se também implementos (arados, grades leves ou pesadas,
subsoladores), controle de invasoras, introdução de leguminosas. O uso de cultivos anuais já se
caracteriza como um processo mais utilizado para renovação de pastagens. A abrangência das
medidas adotadas irá depender do grau de distúrbio do sistema solo-planta-animal, de modo que
as causas podem ser controladas independentemente ou associadas. As tecnologias geradas ou
adaptadas na Região Amazônica, voltadas à recuperação/renovação direta de pastagens
degradadas demonstram a viabilidade agronômica e zootécnica de tais práticas, no entanto, as
principias limitações de adoção recaem nos altos custos de implantação (Tabelas 17 e 18) e
retorno de médio/longo prazo advindo da atividade pecuária.
89
Se a degradação das pastagens compromete a sustentabilidade da pecuária, não só na

Amazônia, como em outras regiões. Da mesma forma a monocultura, associada a práticas
inadequadas de manejo, têm comprometido a atividade agrícola, pela frustração de safras,
além de pré-dispor a degradação dos recursos naturais (solo e água). Neste sentido, ZIMMER
et al. (1999) apontam os principais fatores relacionadas à essa atividade, tais como: a
ocorrência de plantas invasoras, pragas e enfermidades, que têm aumentado drasticamente.
Na cultura da soja são exemplos o percevejo castanho, cancro da haste, nematóide das
galhas, nematóide do cisto. O preparo contínuo do solo com grade aradora, prática bastante
generalizada entre os agricultores do Cerrado brasileiro, compromete as características físicas
e químicas do solo, causando a pulverização da camada superficial, e compactação (“pé de
grade”), diminuindo a capacidade de infiltração e retenção da água no solo, deixando a cultura
susceptível a períodos prolongados de estiagem, redundando no processo de erosão do solo e
assoreamento das bacias hidrográficas.
Diante deste contexto, a exploração racional das atividades agrícola e pecuária em uma
mesma propriedade, ou seja, sistema integrado de agricultura pecuária, surge como excelente
alternativa de reabilitação de áreas degradas, tornando-as produtivas e sustentáveis nos
aspectos socioeconômicos e ambientais. WHITE et al., 1978 na Austrália; ROSELLO, 1992 no
Uruguai; HOFFMAN, 2002 na Nigéria; e DEHIM et al. 1987; VILELA et al. 1999; MACEDO,
2001; ZIMMER et al. 1999; KLUTHCOUSKI et al.1991 e KLUTHCOUSKI et al. 2000 no Brasil,
aonde, esse sistema vem sendo adotado, e tem demonstrado inúmeras vantagens com relação
aos modelos pecuários e agrícolas praticados isoladamente. Na Amazônia Legal brasileira,
salvo algumas circunstâncias em que a recuperação/renovação de pastagens se dá pelo
cultivo consorciado com lavouras (arroz e milho) e forrageiras, a adoção de sistemas de
integração mais permanentes, ainda é pouco explorado.
Dado as vastas áreas já antropogeinizadas que se encontram em diferentes graus de
deteorização, associada a pressões econômicas, sociais e ambientais que recaem sobre os
modelos vigentes de exploração agropecuária na Região Amazônica, entre outros sistemas, os
de integração lavoura pecuária, podem exercer importante papel na recuperação de áreas
degradadas com vistas a exploração sustentável dos recursos esgotáveis (solo e água). No
entanto, a fragilidade dos ecossistemas predominantes na região, requer uma certa cautela na
adoção em ampla escala e ensejam pesquisas no sentido de mensurar seus impactos
agronômicos, zootécnicos, socioeconômicos e ambientais.
SISTEMAS INTEGRADOS DE PRODUÇÃO AGRICULTURA PECUÁRIA
Dependendo, entre outros fatores, das condições edafoclimáticas, dos sistemas de

produção, dos fatores socioeconômicos e dos mercados de produtos e insumos vigentes em
uma dada localidade, a integração da agricultura e pecuária em uma propriedade, ocorre das
mais variadas formas. Indo desde o plantio temporário de lavouras e pastagens, até modelos
mais complexos e permanentes, que envolvem diferentes culturas voltadas a produção de
alimento (arroz, milho, soja e feijão), de fibra (algodão), de volumoso para alimentação animal
(milho e sorgo para silagem), de “palhada” em sistemas de plantio direto (milheto) e de
pastagens temporárias ou permanentes, sob diferentes combinações no tempo e no espaço,
que se bem conduzidos, representam benefícios agroeconômicos para ambas atividades.
Nestes sistemas, conforme VILELA et al. (1999) e MAGNOBOSCO et al. (2002), as principais
vantagens da agricultura em relação à pecuária são:
• Retorno parcial ou total mais rápido do capital investido;
• Produção de forragem em quantidade e qualidade, pela recuperação/renovação das

pastagens permanentes, ou anuais como aveia, milheto e sorgo, usadas
estrategicamente no período seco;
90
• Recuperação da produtividade das pastagens, pela melhoria da fertilidade do solo,

advinda da adubação residual após as lavouras;
• Economia na implantação de pastagens permanentes;
• Facilita a troca de espécies forrageiras no processo de reforma de pastagens; e
• Os resíduos e subprodutos da agricultura podem vir a compor a dieta do rebanho;
Enquanto que as principais vantagens da pecuária em relação à agricultura são:
• Melhoria das características físicas e biológicas do solo sob pastagem, principalmente

pelo acúmulo de MO e retenção de água;
• Favorece a rotação de culturas;
• Cobertura do solo pela pastagem (palhada) em plantio direto;
• Favorece a reciclagem de nutrientes; e
• Redução de limitações biológicas, tais com a ocorrência pragas, doenças e plantas

invasoras.
Como um todo a integração agricultura pecuária, quando comparada aos sistemas

convencionais de exploração agropecuária, representa:
• Aumento na produção de produtos agrícolas (grãos, fibras) e pecuários (carne, leite);
• Redução nos custos de produção (defensivos e fertilizantes);
• Maior estabilidade econômica e financeira, dada a diversificação da produção;
• Aumento na eficiência de utilização da terra, máquinas, equipamentos e mão-de-obra,

com otimização do uso por maior período de tempo no ano;
• Melhoria na fertilidade do solo;
• Conservação dos recursos naturais (água, solo) e da biodiversidade; e
• Geração alimentos, renda e emprego.
Como em qualquer exploração agropecuária, o planejamento prévio das atividades, com

adequado levantamento dos recursos disponíveis na propriedade (solo, pastagens, animais,
disponibilidade e qualidade da mão-de-obra, máquinas e equipamentos, entre outros), são
necessários para o êxito da integração lavora pecuária. YOKOYAMA, et al. (1998) constataram
que as principais limitações de adoção do “Sistema Barreirão” eram o elevado custo de
aplicação, o risco de frustração de safra e principalmente a falta de máquinas e equipamentos
necessários para o plantio e colheita das lavouras. Conforme MACEDO (2001), dada à
complexidade das atividades envolvidas na condução de um sistema integrado agricultura
pecuária, para sua adoção, devem ser observados alguns pré-requisitos básicos, tais como:
• Máquinas e equipamentos agrícolas mais diversificados;
• Infra-estrutura de estradas e armazenamento;
91
• Mão-de-obra qualificada e assistência técnica;
• Domínio da tecnologia de lavouras anuais e pecuária;
• Conhecimento mais apurado do mercado agropecuário; e
• Recursos financeiros para os investimentos.
Os elevados investimentos necessários à aquisição de máquinas e equipamentos

agrícolas, normalmente, tornam proibitiva a integração da pecuária a agricultura, já os de
compra de animais inviabilizam o inverso. A parceria e/ou arrendamento de terra, máquinas,
equipamentos e animais entre pecuaristas e agricultores, quando bem implementadas, tem
viabilizado com sucesso a integração (KICHEL & MIRANDA, 2001).
RESULTADOS DE PESQUISAS DESENVOLVIDAS EM OUTRAS REGIÕES
A integração lavoura pecuária há muito tempo vem sendo adotada com êxito por
produtores da Região Sul do Brasil, onde as condições climáticas, permitem cultivar espécies
forrageiras de ciclo anual, como aveia (Avena strigosa, A. sativa e A. byzantina), azevém
(Lolium multiflorum), cevada (Hordeum vulgare), entre outras, em sucessão as culturas de
milho, soja e arroz, em sistemas de plantio direto (na palha) ou convencional (DEHIM et al.,
1987). Ação conjunta entre a Secretaria da Agricultura e do Abastecimento, EMATER, e
Fundação Instituto Agronômico do Paraná (IAPAR) vem avaliando e difundindo diferentes
tecnologias a serem empregadas na recuperação e reforma de pastagens daquele Estado
(EMATER-PR, 1991). Dentre as várias tecnologias propostas, destaca-se o plantio de culturas
anuais em seqüência com o da(s) forrageira(s), conforme as condições edafoclimáticas de
cada região. As culturas de base recomendadas são a do milho, sorgo, feijão, algodão, e
mandioca.
A formação de pastagens em associação com culturas, há décadas é empregada no
bioma Cerrado brasileiro, notadamente a partir dos anos 70, quando a introdução de
gramíneas do gênero Brachiaria se intensificou, através do cultivo simultâneo ou em sucessão
com arroz de sequeiro, conhecida como cultura “amansadoura” ou “desbravadora”, devido a
sua capacidade de se adaptar as condições de solos ácidos e de baixa fertilidade
predominantes na região (ZIMMER et al. 1994 e ZIMMER et al. 1999).
Procurando avaliar a viabilidade da formação de pastagens de Brachiaria decumbens em
associação com a cultura de arroz (IAC-47) em diferentes localidades do estado de Mato
Grosso, a Embrapa Cerrados (1979) testou seis densidades de semeadura da forrageira (de
zero a três kg/ha) e três níveis de adubação fosfatada (de zero a 300 kg de P2O5/ha), alem da
aplicação de 100 kg/ha de K2O e 4,5 t/ha de calcário. A adubação de manutenção da cultura de
arroz foi de 200 kg/ha da formula 8-32-24 e 49 kg/ha de FTE BR-12. A mistura das sementes
de arroz e forrageira foi plantada em sulcos, no espaçamento de 50 cm entre linhas. Através
dos resultados obtidos constatou-se que a produtividade do arroz, que oscilou entre 1.000 e
1.350 kg/ha, não foi afetada pelos níveis de adubação fosfatada e nem pelas diferentes
densidades de semeadura da forrageira, sendo os melhores estabelecimentos obtidos nas
densidades de 1,66; 2,33; 3,00 kg/ha, e populações médias de 15, 19 e 25 plantas/m2,
respectivamente.
Na região da Zona da Mata-MG/Brasil, ALVIM et al. (1989) avaliaram diferentes métodos
de estabelecimento de Brachiaria decumbens em associação a cultura do milho. O preparo do
solo constitui-se de aração e gradagem por implementos de tração animal, sendo mantidos
cordões de contenção com a vegetação original, acompanhando a curva de nível do terreno.
Para adubação foram aplicados 400 kg/ha da formula 4-14-8 distribuídos nas covas ou a lanço,
conforme método de plantio, 40 kg/ha de N (sulfato de amônia) em cobertura aos 60 dias após
o estabelecimento da cultura. Foram testadas duas épocas de semeadura da forrageira em
relação ao do milho (na mesma data e 21 dias apos), com diferentes métodos de plantio, milho
plantado em covas no espaçamento de 1 m colocando-se 5 sementes/cova, enquanto que a
92
semeadura da Braquiaria a densidade de 10 kg/ha (com VC de 30%), se deu através dos

seguintes métodos de plantio: em covas comuns as do milho ou separadas, no espaçamento
0,5 m; a lanço com ou sem incorporação das sementes ao solo. Pelos resultados obtidos foi
constatado que a cultura do milho não foi afetada pela época e método de plantio da forrageira,
sendo observado, em media, 27782 plantas/ha, 30979 espigas/ha com produtividade de 4093
kg. O estabelecimento da Braquiaria foi favorecido pelo método do plantio em covas separadas
das do milho, obtendo-se 26 plantas/m2 (60 dias após o plantio), e rendimento de MS de 1261
kg/ha, com as plantas invasoras representando 41% da biomassa produzida. Enquanto que o
plantio efetuado 21 dias após ao do milho interferiu negativamente no estabelecimento (4
plantas/m2 e 424 kg de MS/ha, em media) e no centro de invasoras (87% da biomassa
produzida).
A Embrapa Cerrados em parceria com o Centro Internacional de Agricultura Tropical
(CIAT) e com apoio de outras instituições têm desenvolvido pesquisas em sistemas integrados,
envolvendo culturas anuais e pastagens em rotação, adaptados as condições socioeconômicas
e ambientais do bioma Cerrado brasileiro, com objetivo de minimizar o processo de degradação
de recursos não renováveis e recuperar ou intensificar de forma sustentável, os sistemas de
produção agropecuária. Os experimentos visam avaliar a eficiência agronômica e quantificar no
tempo, os efeitos destes sistemas nas propriedades físicas e químicas do solo (VILELA et al.
1999; AYARZA et al., 1999). Os sistemas concebidos, vão desde o bioma Cerrado, ao plantio
contínuo de culturas anuais (soja e milho em sucessão), pastagens contínuas de gramínea (A.
gayanus cv. Planaltina) ou consorciada (A. gayanus cv. Planaltina + leguminosas com
predominância do S. guianensis cv. Mineirão), passando pela rotação culturas
anuais/pastagem consorciada ou vice-versa, com ciclos de cultivos de quatro anos. Conciliados
a níveis baixos e altos de calagem e adubação do solo, em função dos componentes cultura ou
pastagem, além de dois tipos de preparo de solo, grade aradora/niveladora e preparo dinâmico,
definidos de acordo com as condições físicas do solo. Os pastos são manejados rotativamente
com ciclos de pastejo de 28 dias. Durante os três primeiros anos agrícolas as propriedades
físicas e químicas do solo, bem como a produção das lavouras não forma afetadas pelos
métodos de preparo do solo, mas sim pelos níveis de fertilização. As áreas de cultivos com
lavouras, submetidas à adubação freqüente, aumentaram as frações de P inorgânico e
orgânico, em relação às pastagens e ao cerrado, não diferindo quanto ao P residual. A
diferença na produção de grãos, entre o alto e baixo nível de fertilização, foram próximos a
1000 e 1500 kg/ha para a soja e milho. A partir da quarta safra, no sistema em cultivo contínuo,
sob preparo de solo dinâmico através de arado de aiveca, propiciou incrementos de 12 % na
produtividade de soja, dada a diminuição da competição exercida por plantas invasoras, que
em certas condições afetaram os rendimento de grãos em até 47%, notadamente nos cultivos
permanentes, com preparo com grade aradora/niveladora. O estoque de C orgânico na
camada de 0 a 10 do solo, foi incrementado nas áreas de pastagens puras ou consorciadas
(cerca de 28 mg/g de solo) e reduzidos nas de lavoura contínua (cerca de 24 mg/g de solo),
com relação ao Cerrado. As pastagens têm apresentado excelente desempenho, com ganhos
médios de bezerras azebuadas durante 132 dias, de 427 kg de PV/ha, equivalente a 1181
kg/ha/ano, com os pastos consorciados propiciando ganhos 2,6 vezes maiores que as
pastagens puras permanentes. Estes resultados demonstram que os sistemas de integração
lavoura pecuária, além de aumentarem a produtividade, reduzem os riscos de degradação
ambiental, quando comparados aos sistemas tradicionais de exploração agropecuária.
Com os mesmos propósitos a Embrapa Gado de Corte, em Campo Grande-MS/Brasil,
vem pesquisando diversos sistemas de integração lavoura pecuária (MACEDO, 2001 E
MACEDO, 2000), com vistas a recuperar/renovar pastagens degradadas de B. decumbens, por
meio de diferentes tratamentos que vão desde a recuperação direta através da melhoria das
condições químicas e físicas do solo; renovação com a introdução de B. brizantha cv. Marandu
ou P. maximum cv. Tanzânia; lavouras contínuas de soja ou em sucessão com milheto; e a
rotação pastagem/lavoura em ciclos de 4 em 4 anos ou de 3 e 1 anos. Decorridos sete anos de
avaliações, a produtividade média da soja tem sido 2380 kg/ha, oscilando entre 1525 a 3005
kg/ha, decorrente das variações climáticas ao longo do tempo, não havendo diferenças entre
os sistemas. O milho plantado simultaneamente com a B. brizantha, tem produzido cerca de
93
3300 kg de grãos/ha, sendo uma excelente alternativa para reduzir os custos de reforma de
pastagens. Os pastos recuperados têm produzido cerca de 4 a 5 vezes mais que os
degradados (75 x 19 @ de carne/ha/ano). Durante três anos, a produção de carne das
pastagens em sistemas contínuo, não se diferenciaram, a partir do quarto ano os pastos
adubados e consorciados com leguminosas (Stylosanthes guianensis e Calopogonium
mucunoides) passaram a se destacar, com produções superiores a 1 @ de carne/ha/ano. As
pastagens de B. brizantha e P. maximum estabelecidas em sucessão às lavouras, propiciaram
ganhos médios de 739 e 706 kg de PV/ha, respectivamente, sendo notado decréscimo na
produção com o decorrer do tempo, quando não recebem adubação de manutenção, já que a
disponibilidade de P no solo passa a ser limitante. Com relação a este nutriente, as lavouras
permanentes têm incrementado seus teores na camada arável do solo, passando de 3 para 16
mg/dm3, os pastos com adubação de manutenção tem se mantido com 3,5 mg/dm3, enquanto
que nos sem adubação caiu para 2 mg/dm3. As propriedades físicas do solo têm sido
melhoradas pela introdução das gramíneas.
Em um estudo de caso de uma propriedade localizada em Uberlândia-MG/Brasil, onde a
pratica a integração lavoura pecuária vem sendo aplicada a mais de dez anos, VILELA et al.
(1999) constataram os benefícios de tal sistema de produção agropecuária. O principal sistema
de rotação consiste do plantio de soja durante dois anos e no terceiro, se introduz a pastagem
(B. brizantha cv. Marandu ou P. maximum cvs. Tanzânia, Vencedor, Centenário). A evolução
do uso do solo, lotação e produção animal, no decorrer do tempo de implantação mostram o
potencial da integração (Tabela 2). Além do mais, as propriedades físicas do solo foram
sensivelmente melhoradas.
Tabela 2. Evolução do rebanho, capacidade de suporte, área de pastagens e lavouras em um

sistema integrado de lavoura pecuária. Uberlândia-MG/Brasil
Animais Uso da Terra
Ano Efetivo Lotação Pastagem(2) após
Lavoura
n° Animais/ha Cerrado Lavoura
(1)
% da área total
1983 1094 1,1 100 0 0
1988 821 1,9 58 29 13
1992 1150 2,3 0 41 56
1996 1200 3,2 0 36 64
(1): Área total de 1014 ha;
(2): Com a melhorai da fertilidade do solo ouve substituição da B. decumbens por B. brizantha ou P.
maximum;
Fonte: adaptado de VILELA et al. (1999).
O sistema arroz-pastos, desenvolvido pelo CIAT (1990) descrito por SANZ et al. (1999),
visa estabelecer pastagens melhoradas, tendo o arroz de sequeiro como cultura de base, no
ecossistema de savanas colombianas. Onde o arroz entra como cultura pioneira para o
estabelecimento de pastagens; bem como pastagens "velhas" a fim de melhorá-las pela
introdução de leguminosas. Em condições experimentais, a colheita de arroz atingiu
rendimentos de ate 3500 kg/ha quando cultivado em pastagem consorciado (Brachiaria
decumbens + Pueraria phaseoloides), superior ao obtido do plantio em pastagem de B.
decumbens que recebiam 80 de N kg/ha. O arroz como cultura pioneira teve efeito altamente
significativo na recuperação de pastagem degradada de B. decumbens, para tanto, foi
semeado em sulcos (espaçamento de 34 cm) na densidade de 80 kg/ha, enquanto que as
forrageiras a lanço, nas densidades de 3, 4 e 3 kg/ha para B. decumbens, Centrosema
acutifolium e Stylosantes capitata, respectivamente. A adubação empregada (em kg/ha) foi de:
80 de N em três aplicações; 50 de P; 100 de K em três aplicações; 5 de Zn e 300 de calcário
dolomítico. A cultura de arroz rendeu, em media, 3522 kg/ha, enquanto que as forrageiras
produziram 560, 113 e 174 kg de MS/ha para B. decumbens, C. acutifolium e S. capitada,
respectivamente, com a participação de invasoras estando próxima a 175 kg de MS/ha.
Considerando os resultados de ensaios conduzidos nas condições de propriedades, a
produção de grãos não tem sido afetada pela associação com as pastagens, mantendo-se
94
próxima a 2000 kg/ha, com os pastos consorciados rendendo cerca de 1000 kg de MS/ha, a
incidência de plantas invasoras (600 kg de MS/ha), um problema bastante freqüente em áreas
de pastagens, estiveram sempre associadas aos cultivos (Tabela 3).
Tabela 3. Produção de arroz e biomassa de pastagens, em cultivos consorciados nas Savanas

Colombianas
Produção Pastagem
Tratamento Arroz Gramínea Leguminosa Invasoras
t/ha t de MS/ha
Arroz (A)(1) 2,23 a - - 0,65 a

A + B. decumbens/C. acutifolium 2,0 a 1,22 a 021 b 0,67 a
A + A. gayanus/S. capitata 1,96 a 1,77 a 0,44 a 0,43 a
(1) Arroz CT 6196-33-11-1-3 semeado no espaçamento 30 cm e densidade de 60 kg/ha;
Adubação (em kg/ha): 80 N, 50 P2O5, 100 K2O e 5 Zn, 300 calcário.
Fonte: adaptado de SANZ et al. (1999).
O “Sistema Barreirão” tecnologia gerada pela Embrapa Arroz e Feijão, a partir de 1983,
associa cultivos anuías com forrageiras, vem sendo apregoado (KLUTHCOUSKI et al.1991;
OLIVEIRA et al. 1994; SILVA et al., s.d.) como alternativa de renovação/recuperação de
pastagens degradadas na região dos Cerrados brasileiros, pois reúne varias vantagens, tais
como: agronômica pela melhoria das condições produtivas do solo, pela recuperação e
aumento da capacidade de retenção e armazenamento de água no solo, diminuição do
processo erosivo, aprofundamento dos sistemas radiculares, formação e estabelecimento de
pastagens de maior produtividade e mais estáveis no decorrer dos anos; econômicas através
da cobertura parcial ou total dos custos de renovação de pastagens com a produção da cultura
comercial; sociais com maior oferta de alimentos e de empregos; e ecológicas pela reabilitação
de áreas degradadas no processo produtivo e diminuição do desmatamento de novas áreas.
KLUTHCOUSKI et al (1991) descrevem detalhadamente a estratégia a ser empregada no
“Sistema Barreirão” em consórcio arroz-pastagem, enquanto que SILVA et al. (s.d.) em
consórcio milho-pastagem. Com a cultura do arroz, vem se obtendo rendimentos de 3000 kg/ha
com cultivares de ciclo médio, 2000 kg/ha com as de ciclo curto; enquanto que com a do milho
cerca de 4000 kg/ha. As pastagens de Brachiaria ssp. que antes do processo de
renovação/recuperação, apresentavam capacidade de suporte de 0,5 UA/ha, passaram a
manter de 2 até 5 UA/ha, após a renovação.
Durante o processo de validação do “Sistema Barreirão” experimentos envolvendo
aspectos relacionadas a calagem, preparo do solo, adubação, tratamentos de sementes,
semeadura, comportamento do crescimento das espécies, foram desenvolvidos a fim de
aprimorar ainda mais a tecnologia, tornando-a ainda mais eficiente (OLIVEIRA et al., 1996;
KLTHCOUSKI et al. , 1999)
No tocante a correção da acidez do solo, os resultados indicam, como era de se esperar,
que as culturas de milho, sorgo e milheto são mais exigentes em Ca, Mg e acidez fraca, com
relação à do arroz, pois prontamente respondem a doses crescentes de calcário, o mesmo
ocorrendo com a Brachiari brizantha cv. Marandu (Tabela 4).
O emprego do gesso (sulfato de cálcio) parece não ter influenciado asproduçôes do milho e da
gramínea, mas as misturas de calcário e gesso, nas proporções entre 40 e 60 %, tenderão ás
miores produção (Tabela 5 ), havendo maior percolação do Ca amedida que se incrementou a
participação do gesso. O que pode ser explicado pelo fato de que o “Sistema Barreirão”
preconiza o preparo profundo do solo, propiciando incorporação adequada dos corretivos, o
que não se observa quando se utiliza o plantio direto, com a aplicação de gesso representando
fator importante na correção da acidez das camadas subsuperficiais do solo. A microcalgem,
através da aplicação de calcário finamente moído(“filler”), no sulco de plantio da cultura,
incrementou em mais de 1000 kg a produção de milho e em 17 t a de forragem, quando
comparada a calagem convencional, demonstrando a sua viabilidade no “Sistema Barreirão”, já
95
que normalmente, o tempo e as condições de umidade do solo, não são adequadas pra que a
calagem convencional atue efetivamente na correção do solo.
Tabela 4. Produção das lavouras de arroz e milho estabelecidas no “Sistema Barreirão” em

consórcio com Brachiari brizantha cv. Marandu, submetidas a doses crescentes de calgem.
Piracanjuba-GO/Brasil
Níveis de calagem(1) Produção
(t/ha) Grãos (kg/ha) forragem (MV t/ha)(3)
(2)
Arroz
0 2618 29
3 3460 38
6 2390 42
Milho(4)
0 2743 17
3 3280 25
(1): LVA - pH 5,8; Ca+Mg= 1,8 a 2,0 meq/100g; P= 0,8 a 0,9 ppm; K= 1,20 a 1,37ppm; MO 1,9 a 2,0 %;
(2):Arroz cv. Guarani;
(3): corte 60 dias após a colheita das lavouras;
(4): Milho hibrido BR-201.
Fonte: adaptado de OLIVEIRA et al. (1996) e KLTHCOUSKI et al. (1999).
O preparo de solo no “Sistema Barreirão” visa a sua descompactação, controle de

plantas invasoras e a incorporação dos resíduos orgânicos e corretivos. A incorporação
superficial é feita na profundidade de 10 a 15 cm, ainda no período seco, cerca de 15 a 30 dias
antes do plantio, que propicia condições adequadas para o controle da vegetação pré-existente
e decomposição de seus resíduos. A aração profunda da camada de 0 a 40 cm, resulta na
descompactação do sol, além de incorporar os resíduos orgânicos e corretivos a uma maior
profundidade, bem como eficiente controle das invasoras. A operação será realizada quando a
umidade do solo encontra-se na sua capacidade de campo, os resultados obtidos demonstram
que o arado de aiveca, é mais eficiente, com relação ao de disco, e este a grade aradora
(Tabela 6), com isto, o desenvolvimento das raízes da cultura e da gramínea em camadas mais
profundas, a infiltração e retenção de água no solo, são favorecidos, mantendo a produção
mais estável ao longo dos anos.
Tabela 5. Misturas de calcário e gesso, visando definir níveis adequadas à cultura do milho
estabelecida pelo “Sistema Barreirão” em consórcio com Brachiari brizantha cv. Marandu.
Piracanjuba-GO/Brasil
Mistura Produção
calcário(1) : gesso(2) Grãos (kg/ha) forragem (MV t/ha)(3)
100 : 00 3797 a 17
80 : 20 3550 a 13
60 : 40 4300 a 15
40 : 60 4217 a 15
80 : 20 4093 a 14
00 : 100 3493 a 13
00 : 00 1490 b 14
LVA com pH 5,7; Ca+Mg= 0,7 meq/100g; P= 0,7 ppm; K= 1,03 ppm; MO 1,9 %;
(1): Correpondente a 3,0 t/ha;
(2): Correpondente a 5,8 t/ha;
(3): corte 60 dias após a colheita das lavouras;
(4): Milho hibrido BR-201.
96
Tabela 6. Métodos e implementos de preparo do solo avaliados no “Sistema Barreirão” em

consórcio de arroz com Brachiari brizantha cv. Marandu. Piracanjuba-GO/Brasil
Preparo do Solo Produção(4)
(1)
Arroz (kg/ha) forragem (MV t/ha)(5)
Aração direta (A) 1950 b 20
Pré-incorporação + A 2461 a 23
Implemento(2)
Grade aradora 1439 b 17
Arado de disco(3) 2610 a -
Arado de aiveca 2628 a 23

LVA com pH 5,7; Ca+Mg= 0,7 meq/100g; P= 0,7 ppm; K= 1,03 ppm; MO 1,9 %; corrigido e adubado;
(1): Arroz cv. Guarani;
(2): Após a pré-icorporação ;
(3): Arado de disco de 26” e 32 “;
(4): Produção de arroz média de três safras;
(5): corte 60 dias após a colheita
No estabelecimento do “Sistema Barreirão” especial atenção deve ser dada à

adubação, podendo-se considerar as mesmas recomendações das culturas em cultivo
convencional, mas quanto à pastagem, o decréscimo em sua produtividade, com o decorrer do
tempo, indicam que ajustes na adubação, devem ser implementados. A adubação nitrogenada
no plantio, melhora a relação C/N, reduzindo os efeitos prejudiciais do processo de
fermentação da MO, além de propiciar maior vigor inicial às plantas. Nos solos predominantes
no Cerrado brasileiro, a inclusão de termofosfasto a fontes de fósforo solúveis, é recomendada
por OLIVEIRA et al. (1998), quando se consorcia uma cultura perene, como pastagem, e anual,
pois haverá disponibilidade continua deste nutriente, favorecendo as duas culturas, embora as
anuais respondam melhor as fontes solúveis, mantendo-se a relação de 40 : 60, entre o
termofosfato e a fonte solúveis, levando em consideração a ralação de custo de aquisição.
Os impactos socioeconômicos do “Sistema Barreirão” foram determinados por
YOKOYAMA et al. (1998), para tanto 214 produtores distribuídos em 34 municípios de cinco
Estados que abrangem o bioma Cerrado brasileiros, foram entrevistados. Cerca de 30 % (61)
adotaram a tecnologia, tendo sido recuperados em média 72 ha por propriedade. Dos
adotantes 62 % conheceram a tecnologia em dias de campo, revelando a importância desta
metodologia no processo de difusão de tecnologia. A grande maioria é representada por
pequenos e médios produtores, envolvidos em maior ou menor grau com a atividade leiteira,
que dependem da atividade agropecuária, motivo pelo qual reinvestem na propriedade. A
produtividade das lavouras de arroz e milho foram superiores a 1800 e 3600 kg/ha,
respectivamente, apenas 15 % tiveram frustração de safras, principalmente em função de
razões fitossanitárias. As pastagens resultantes do “Sistema Barreirão”, formadas em sua
grande maioria pela B. brizantha, foram consideradas de boa a ótima qualidade em 94% dos
casos. Os principais entraves de adoção do sistema eram decorrentes da inexistência ou
insuficiência de máquinas e implementos nas propriedades, e ao elevado custo de
implantação, no entanto a receita advinda da comercialização de grãos, normalmente, cobriam
os custos operacionais do “Sistema Barreirão”.
O plantio direto da soja em pastagens, com destaque a gramíneas do gênero
Brachiaria, é uma excelente alternativa de integração agricultura pecuária, desde que alguns
aspectos sejam observados, conforme relatam KICHEL et al. (1996) e BROCH (2000). Parte-se
da premissa de que a pastagem esteja em vias de degradação e não o solo, entretanto nos
Cerrados brasileiros e na Amazônia, predominam solos ácidos e de baixa fertilidade, o que tem
restringido a adoção deste sistema, mas com a correção pela aplicação em cobertura de
calcário/gesso e adubação adequada e equilibrada nos sulcos de plantio, pode-se restabelecer
97
a fertilidade do solo. Em áreas de primeiro plantio de soja, a fixação biológica (Bradyrhizobium

japonicum) do N irá limitar a produção, para minimizar o problema, deve-se usar de 4 a 5 doses
do inoculante/50 kg de sementes. Solos com impedimento físico, pelo menos seis meses antes
do plantio da soja, a adequação do solo (eliminando cupins, arbustos, tocos, vossorocas, etc)
deve ser providenciada através do preparo com grade pesada. Cerca de sete dias antes do
plantio, a procedesse a dessecação gramínea, pela aplicação de herbicidas específicos, para
potencializar a ação sistêmica destes, o pasto será rebaixada (pastejo ou roço) a 20 cm de
altura, com o herbicida sendo aplicado quando estiverem em pleno desenvolvimento
vegetativo. Conforme o crescimento da pastagem e incidência de invasoras, haverá
necessidade ou não do controle em pós-emergência; o uso de dessecantes, por ocasião da
colheita, facilita esta atividade.
O tempo de permanência da lavoura em área de pastagem, depende da realidade e
objetivo de cada produtor, bem como da relação de preços práticos pelo mercado. Em condições
normais, são colhidos cerca de 2700 kg de soja/ha, além de uma pastagem restabelecida. No
entanto, mesmo em condições de solo de boa fertilidade, com o decorrer do tempo, tem-se
observado decréscimos significativos na produtividade destas, na ordem de 40% ao ano, com os
ganhos de peso passando de 25 @ para 4 @ de carne/ha/ano, do primeiro para o quarto ano de
utilização, o que evidencia a importância da reposição de nutrientes, notadamente o N, a fim de
manter a produtividade da pastagem. KCHEL e MIRANDA (2001) descrevem detalhadamente os
procedimentos a serem adotados no plantio da soja sob pastagem.
Segundo KLUTHCOUSKI et al. (2000) por não alterar o cronograma de atividades
agropecuárias da propriedade e não exigir máquinas e equipamentos especiais, são algumas
das vantagens do “Sistema Santa Fé” em relação a outras formas de integração lavoura
pecuária. Nos últimos anos esta tecnologia vem sendo difundida para as condições
edafoclimáticas dos Cerrados brasileiros. O sistema oportuniza a produção consorciada de
culturas de grãos, tais como milho, sorgo, milheto, arroz e soja, com forrageiras tropicais,
notadamente as do gênero Brachiaria, sob plantio direto ou convencional, desde que o solo
tenha sido devidamente corrigido e fertilizado, condição essencial para que a cultura anual
atinja um rápido e vigoroso crescimento inicial, e assim possa competir com a forrageira, sem
prejudicar significativamente a produção de grãos. O consórcio é estabelecido anualmente com
a gramínea podendo ser semeada concomitantemente com a cultura, ou 10 a 20 dias após a
emergência desta. Os procedimentos e cuidados no estabelecimento do “Sistema Santa Fé”
são descritos pelos mesmos autores. Quando bem conduzido tem propiciado excelentes
colheitas das lavouras, além de uma pastagem em condições de ser utilizada sob pastejo
direto, silagem e fenação, principalmente no período seco, ou mesmo como cobertura em
plantio direto.
Trabalhos conduzidos no bioma Cerrado por KLUTHCOUSKI et al. (2000), têm
demonstrado a eficiência do “Sistema Santa Fé”. As lavouras de milho e sorgo, voltadas para
produção de grãos ou silagem, não tiveram seus rendimentos afetados pelo consórcio com
Brachiaria brizantha cv. Marandu, havendo incremento na produção de volumoso, enquanto
que as de arroz de terras altas e soja, tiveram quedas em cerca de 17 e 16% na produção de
grãos, quando comparadas aos seus cultivos solteiros (Tabela 7).
O decréscimo na produção de arroz, pode ter sido em função da cultivar utilizada ter
sido a recomendada para solos ácidos de baixa fertilidade (Cerrado recém-aberto), a qual não
respondeu devidamente aos níveis aplicados na correção do solo, o que favoreceu o
crescimento da gramínea, além do severo ataque de brusone (Pyricularia orizae/grisea).
Quanto à soja, as cultivares de porte alto e de ciclo precoce, sofreram menor competição com
relação à forrageira, mas de qualquer forma, o controle do crescimento desta pela aplicação de
subdoses de herbicidas, ou o seu plantio em pós-emergência à soja, devem ser utilizados para
minimizar a competição interespecífica, além da necessidade de dessecação no momento da
colheita, a fim de facilitar este processo. O milho e o sorgo voltados para produção de silagem
foram as culturas que exerceram a maior competição sobre a B. brizantha cv. Marandu,
reduzindo significativamente sua produção de forragem (Tabela 8). Dentre as culturas voltadas
a produção de grãos, o sorgo foi a que mais afetou o rendimento forrageiro da gramínea.
98
Tabela 7. Produtividade de lavouras implantadas sob palntio convencional ou no “Sistema

Santa Fé” consorciadas com Brachiari brizantha cv. Marandu nas condições de Cerrados
melhorados do Brasil
Sistema de Plantio Oscilação de B em
Cultura Convencional (A) “Santa Fé” (B) relação ao A
................kg/ha.............. %
Grãos 6616 6598 -1

Milho
Silagem (MV1) 48367 48467 +2
Grãos 3687 3581 +3
Sorgo
Silagem (MV) 32333 32867 +2
Arroz 2020 1681 -17

Soja 3014 2546 -16
(1): MV: matéria verde.

Fonte: adaptado de KLUTHCOUSKI et al. (2000).
Tabela 8. Produção de forragem da Brachiaria brizantha cv. Marandu, por ocasião da colheita
das culturas anuais, sob plantio no “Sistema Santa Fé”, nas condições de Cerrados
melhorados do Brasil
Cultura acompanhante
Milho Sorgo Arroz Soja
Local
grãos silagem Grãos silagem grãos grãos
..........................................t de MV/ha......................................
I 28,3 8,0 3,6 2,0 - 18,4
II 20,9 4,8 2,2 4,5 14,5 11,4
III 15,3 5,6 16,5 5,5 12,8 12,5
IV 16,7 - 3,1 3,7 - 35,1

Média 20,3 6,1 6,4 4,0 13,7 19,4
I : Santa Helena do Goiás-GO/Brasil;
II : Luziânia-GO/Brasil;
III: Mimosa-BA/Brasil;
IV: Campo Novo dos Parecis-MT/Brasil;
Fonte: adaptado de KLUTHCOUSKI et al. (2000).
Dependendo das condições edafoclimáticas do local de avaliação, a rebrota da B.

brizantha c.v. Marandu, após a colheita das lavouras no “Sistema Santa Fé”, apresentou um
acúmulo de MV que oscilou entre 350 a 940 kg/ha/dia. Considerando que uma UA (Unidade
Animal de 450 kg de peso vivo) consome 2% de seu peso/dia em matéria seca (MS). o que
representa 9 kg de MS/dia, e que em média a gramínea apresentava 18% de MS,
KLUTHCOUSKI et al. (2000) estimaram a capacidade de suporte das pastagens, considerando
um período de 120 dias em sistema de confinamento (Tabela 9). Dentre os diferentes
consórcios, o milho para silagem e B. brizantha cv. Marandu, recebendo 30 kg/ha de N em
cobertura, produziu aos 57 dias de rebrota pós-colheita, volumoso suficiente para manter em
confinamento 11,1 UA/ha.
99
Tabela 9. Produção de forrarragem e estimativa da capacidade de suporte das pastagens de

Brachiari brizantha cv. Marandu, após a colheita das culturas anuais, implantadas pelo
“Sistema Santa Fé”, nas condições de Cerrados melhorados do Brasil
Produção de Forragem Estimativa da
Dias
capacidade de
Cultura após a MV(1) MS(2)
suporte(3)
colheita
................t/ha.............. UA/ha
Grãos 22 47,2 8,5 7,9
Milho
Silagem (4) 57 66,7 12,0 11,1
Grãos 42 28,8 5,2 4,8
Sorgo
Silagem 50 22,2 4,0 3,7
(1): MV: matéria verde;
(2): MS: matéria seca;
(3): Considerando que uma UA (unidade animal de 450 kg de PV) consuma 9,0 kg de MS/dia (2% do PV), em
confinamento durante 120 dias;
(4): 30 kg/ha de N em cobertura.
Fonte: KLUTHCOUSKI et al. (2000).
A importância do componente animal, no exito da exploração dos sistemas de

integração lavoura pecuária, é destacada por MAGNOBOSCO et al. (2000) MAGNOBOSCO et
al. (2002), visto que o potencial genético e as condições de manejo do rebanho, são decisivos
na utilização da maior oferta de forragem de qualidade advinda das pastagens melhoradas
nestes sistemas. Nas condições do Cerrados brasileiros os índices de lotação, ganhos por
animal e por área nas pastagens melhoradas têm sido cerca de 40 % superiores aos obtidos
com a pecuária convencional. Quanto a genética dos animais, novilhos Nelore produtos de
touros provados com difernça esperada na progênie (DEP) aos 450 dias de idade, superior a
10 kg, atingem ganhos de 696 g/dia, enquanto que os de touros não provados, os ganhos são
de 500 g/dia, diferença de quase 200 g. Com base nas informações obtidas nos sistemas de
integração agricultura-pecuária e na pecuária convencional, que vêem sendo desenvolvidos
nos Cerrados, MAGNOBOSCO et. al. (2001) comparam alguns índices zootécnicos entre os
sistemas (Tabela 10).
Tabela 10. Comparativo de desempenho zootecnico entre os sistemas de integração

agricultura-pecuária e o de pecuária convencional praticados nos Cerrados brasileiros,
conforme MAGNOBOSCO et al. (2001).
Sistema
Indice Zootecnico
Convencional Integração agricultura-pecuária
Lotação média (UA(1)/ha)
Seca < 0,5 1,2
Águas 1,0 2,5
Anual 0,8 2,0
Ganho de peso
g/animal/dia
Seca -200 260
Águas 500 812
Kg/ha/ano 75 209
100
RESULTADOS DE PESQUISAS DESENVOLVIDAS NA REGIÃO AMAZÔNICA
SERRÃO & DIAS FILHO (1991) consideram que a prática de formação de pastagens via
consorciação com culturas anuías é pouco freqüente entre os produtores dos Trópicos Úmidos da
Amazônia. Quando se dá, o plantio é feito manualmente, semeando-se a gramínea simultaneamente
com a cultura, arroz e milho são as mais usuais, a produção de grãos oscila muito e geralmente são
baixas, entre 400 a 900 kg/ha para o milho e de 400 e 800 kg/ha com o arroz. Vários fatores
contribuem para tanto, entre os quais destacam-se: as extensas áreas de pastagem a serem
formadas, que demandariam uma grade quantidade de mão-de-obra na condução das lavouras; em
locais de difícil acesso, há dificuldades de armazenamento e transporte das produções e insumos;
competição das espécies semeadas. Já a recuperação/renovação de pastagens pela consorciação
com culturas anuais, é mais freqüente na região, visto que os produtores buscam minimizar os
custos; há disponibilidade de crédito para custeio das lavouras, nos últimos anos houve incremento
na demanda por alimentos. Os métodos de plantio são bastante variáveis, conforme a disponibilidade
de recursos, máquinas e equipamentos por parte dos produtores, indo desde o plantio/colheita
manual à mecanizada. Embora os resultados de pesquisas apontem para viabilidade agronômica e
econômica de tais sistemas, na prática as colheitas não têm ultrapassado a 1500 kg/ha, uma vez que
os produtores, na maioria pecuaristas, consideram as lavouras secundárias na atividade
agropecuária, a correção e fertilização do solo visam mais às gramíneas do que as culturas. A
integração lavoura pecuária tem grande potencial social, econômico e ambiental na Amazônia
brasileira, haja vista a extensa área de pastagens degradadas, que necessitam ser reabilitas visando
a produção sustentável.
Na região Amazônica são poucas as pesquisas que envolvem o tema integração agricultura-
pecuária, a maior parte destes trabalhos versam sobre a recuperação/renovação de pastagens
degradas via associação com culturas anuías (milho e arroz), com ênfase a aspectos agronômicos, já
que estes sistemas são pouco adotados pelos produtores, o que não diminui a importância de se
pesquisar tais sistemas, haja vista a necessidade de se recuperar vastas áreas de pastagens
degradadas na região.
A renovação/recuperação de pastagens degradadas em associação com culturas anuais,
nas condições edafoclimáticas de Paragominas-PA (Latossolo amarelo, textura argilosa,
distrófico e clima de transição entre Ami e Awi), foi avaliada por VEIGA (1986) e VEIGA &
SERRÃO (1987), para tanto o milho (BR 5102) e arroz (IAC-47) foram associados com as
gramíneas P. maximum (colonião), B. humidicola (quicuio-da-amazônia) e A. gayanus
(andropógon), além da leguminosa Centrosema pubescens (centrosema), plantados nos
mesmos sulcos com espaçamento de 1,00 m e em sulcos intercalados com espaçamento de
0,50 m ou 1,00 m, com fertilização de 45, 60, 60 e 2 kg/ha de N, P, K e Zn, respectivamente. O
milho atingiu produtividade superior a 2500 kg, enquanto que o arroz não rendeu mais de 390
kg (Tabela 11), dada a competitividade exercida pelas forrageiras e plantas invasoras, bem
como ao ataque de insetos sugadores. Os plantios mais adensados redundaram em maiores
produções de grãos, não sendo constado efeito das gramíneas acompanhantes. O P.
maximum e A. gayanus apresentaram excelente estabelecimento e compatibilidade com a
leguminosa, notadamente quando semeados nos mesmos sulcos das culturas ou em sulcos
intercalados com adubação; o que não foi constatado com a B. humidicola. Quanto à
viabilidade econômica dos sistemas, a associação do milho com P. maximum e A. gayanus
plantados nos mesmos sulcos ou intercalados a 0,50 m, foram os mais viáveis na
renovação/recuperação da pastagem.
101
Tabela 11. Cultivo simultâneo de arroz ou milho com forrageiras tropicais, visando a
renovação/recuperação de pastagens degradas em Paragomias-PA-Brasil
MÉTODO DE PLANTIO
CULTURA/GRAMÍNEA Média
A B C
.........................grãos (kg/ha).............................
Milho 2972 3586 1837 2798 a
Arroz 230 383 149 254 b
Média 1601 a 1984 a 993 b
..............................MS (kg/ha)................................
P. maximum 2342 (15) 531 (38) 1464 (44) 1446 a
B. humidicola 224 (93) 332 (39) 411 (54) 322 b
A. gayanus 1747 (31) 1809 (17) 1741 (45) 1766 a
Média a 1438 (31) b 891 (24) ab 1205 (49)

A: cultura + gramínea + leguminosa + adubo nos mesmo sulco – espaçamento 1,00 m;
B: cultura + ½ adubo / gramínea + leguminosa ½ adubo – espaçamento 0,50 m;
C: cultura + ½ adubo / gramínea + leguminosa ½ adubo – espaçamento 1,00 m;
N° entre parênteses: % de participação da leguminosa;
Adubação (em kg/ha): 45 N, 60 P2O5, 60 K2O e 2 Zn.
Fonte: adaptado de VEIGA (1986) e VEIGA & SERRÃO (1987).
Nas condições ecológicas de campos cerrados do Amapá, onde predominam solos tipo
Latossolo amarelo, textura franco-argiloso-arenoso, distrófico e clima Ami-tropical, segundo
Köppem, SOUZA FILHO et al. (1992) comprovaram a viabilidade bioeconômica da
formação/renovação de pastagens de A. gayanus (andropógon) e B. humidicola (quicuio-da-
amazônia) em associação com a cultura do arroz (IAC-47). Quando as gramíneas foram
cultivadas no primeiro ano de lavoura o andropógon propício maiores rendimentos de arroz que
o quicuio-da-amazônia, ocorrendo o inverso nos cultivos de segundo e terceiro anos (Tabela
12). A introdução da leguminosa (D. ovalifolium), independentemente da gramínea
acompanhante, reduziu a produção de grãos. com o decorrer de tempo o rendimento da
lavoura foi decrescente (961, 134 e 45 kg de arroz/ha) dado a ocorrência de pragas e doenças
bem como a redução nos níveis de adubação. As gramíneas consorciadas com arroz
mantiveram sua produção de MS, com destaque ao andropógon, com maiores rendimentos e
compatibilidade com as leguminosas. Considerando a relação custo/benefício de implantação
dos sistemas de integração com o método convencional de formação/reforma de pastagem, o
estabelecimento das gramíneas já no primeiro ano de plantio do arroz, resultou em vantagem
econômica, enquanto que nos de mais anos não.
Na Amazônia peruana, VELA et al. (1996) avaliaram diferentes sistemas de plantio e épocas
de controle de plantas invasoras no estabelecimento de pastagens (B. dictyoneura CIAT 6133 / S.
guianensis cv. Pucallpa) associadas ao arroz (“Chancanco”) nas condições ecológicas de Pucallpa-
Perú. As lavouras de arroz produziram em média 1420 kg/ha (Tabela 13), não sendo influenciadas
pelos tipos de cultivo (arroz em cultivo estreme ou associado com as forrageiras); método de plantio
(em sulcos ou a lanço); e épocas de controle de plantas invasoras (herbicida em pré e pós-
emergência ou capina convencional), enquanto que as pastagens produziram em média 380 kg de
MS/ha, com o controle de invasoras pela capina redundou nas menores produções de forragem,
quando comparado ao controle com herbicida, métodos de cultivos e plantio. A participação de
plantas invasoras foi expressiva, com média de 71 %, o cultivo simultâneo do arroz com a pastagem
em sulcos com controle pela aplicação de herbicida, apresentaram a menor participação destas. A
102
comercialização do arroz, independentemente dos sistemas de plantio, cobriu 76% dos custos de
estabelecimento, propiciando uma pastagem melhorada. Resultados que demonstram a viabilidade
agronômica e econômica da integração da lavoura de arroz com pastagens, no processo de
recuperação/renovação destas.
Tabela 12. Desempenho agronômico e econômico de diferentes sistemas de integração da

lavoura de arroz e forrageiras nos campos cerrados do Amapá-Brasil
PRODUÇÃO Custo relativo

ANO/SEQÜÊNCA DE CULTURA
ARROZ MS ao sistema
convencional
I II III kg/ha t/há
(%)
Arroz (A) A A + Bh 1477 3,1 + 59

A A + Bh Bh 881 3,9 +25
A + B.humidicola (Bh) Bh Bh 783 2,7 - 25
A + Bh + D. ovalifolium (L) Bh + L Bh + L 639 2,7 (13) -
Arroz (A) A A + Ag 1665 5,5 + 51

A A + Ag Ag 1219 6,0 + 13
A + A. gayanus (Ag) Ag Ag 915 3,9 - 32
A + Bh + D. ovalifolium (L) Ag + L Ag + L 738 2,7 (38) -
Arroz IAC 47na densidade de semeadura de 50 kg/ha a lanço;

N° entre parênteses: % de participação da leguminosa;
Adubação no I ano (em kg/ha): 50 N, 50 P2O5, 60 K2O e 10 Zn, no II e III ½ do I.
Fonte: adaptado de SOUZA FILHO et al. (1992).
Tabela 13. Sistemas de plantio e épocas de controle de plantas invasoras no estabelecimento

de pastagens associadas com arroz em Pucallpa, Peru.
Produção Participação de
Tratamentos Arroz Forragem plantas invasoras
kg/ha kg de MS/ha %
Tipo de cultivo
Arroz (A) 1500 a - 80 b
B. dictyoneura/S. guianensis - 400 a 89 c
A + B. dictyoneura/S. guianensis 1350 a 360 a 43 a
Método de plantio
En sulcos 1190 a 360 a 62 a
A lanço 1660 a 400 a 79 b
Controle de Invasoras
Pré-emergente 1290 a 420 a 71 a
Herbicida
Pós-emergente 1430 a 480 a 63 a
Capina (convencional) 1570 a 250 b 79 b
Média 1430 380 71

Arroz “Chancanco”; B. dictyoneura CIAT 6133; S. guianensis cv. Pucallpa;
Invasoras de mais freqëntes: Pteridium aquillinum e Baccharis floribunda
Herbicidas: pré-emerg. 2 cloro-2’6’-dietil-N pós-emerg. sal amina do ac. 2,4-D
Adubação (em kg/ha): 75 N, 30 P2O5 e 50 K2O.
Fonte: Adaptado de VELA et al. (1996).
No mesmo ecossistema, CHOY-SÁNCHEZ & VELA (1996) conduziram experimento no qual

analisaram o efeito do preparo do solo (aração + gradagem ou gradagem); níveis de fertilização
103
nitrogenada (50 ou 100 kg/ha na forma de uréia em duas aplicações); e quatro variedades de arroz
em plantio simultâneo com B. dictyoneura CIAT 6133/S. guianensis cv. Pucallpa, visando a
recuperação/renovação de pastagens degradadas. Como observa-se na Tabela 14 , a produção de
arroz e forragem (703 kg de MS/ha) mantiveram-se inalteradas em função dos tratamentos. As
variedades de arroz Chancabanco, Ucayali, Palmero e Carolino aguja atingindo rendimentos médios
de 888, 828, 818 e 773 kg/ha, respectivamente, que representam cerca de 52% da colheita sob
condições favoráveis em cultivo solteiro, o que também foi constatado com as forrageiras, mas não
havendo comprometimento do estabelecimento da pastagem, já que com 140 dias após o plantio, as
forrageiras representavam 42 % da composição botânica, e as plantas invasoras 35 %.
Considerando os custos/benefícios dos sistemas de cultivo, a maior taxa de retorno (65%) foi
constatada com a variedade Palmero cultivada simultaneamente com as forrageiras, após gradagem
do solo e fertilização nitrogenada em cobertura de 50 kg/ha, e a menor (27 %) com a mesma
variedade, preparo de solo, mas com adubação de 100 kg de N/ha, a taxa média de retorno dos
sistemas foi de 43 %.
Tabela 14. Efeito de métodos de preparo do solo, fertilização nitrogenada e variedades de

arroz em plantio simultâneo com B. dictyoneura/S. guianensis na renovação de pastagens
degradadas em Pucallpa, Peru.
Produção Composição botânica (1)
Tratamentos Arroz Forragem Forrageiras Invasoras
kg/ha kg de MS/ha ..........%.........
Preparo do solo
Aração + gradagem(2) 855 707 45 28
Gradagem(3) 799 699 39 42
Variedades de arroz(4)
Chancabanco 888 803 53 41
Ucayali 828 710 43 20
Palmero 818 657 41 37
Carolino aguja 773 641 32 40
Nitrogênio(5)
50 851 709 43 39
kg/ha
100 803 697 41 30
Média 827 703 42 35
(1): 140 dias após o plantio;
(2): Arado de disco (20 cm de prof.) + duas passadas de grade semi-pesada;
(3): Duas passadas de grade semi-pesada;
(4): Semeadura a lanço: arroz kg/ha-forrageiras 4 kg/ha;
(5): Na forma de uréia ½ 30 e ½ 60 dias após o plantio;
Adubação (em kg/ha): 22 P2O5 e 41 K2O.
Fonte: Adaptado de CHOY-SÁNCHEZ & VELA (1996).
Durante três anos agrícolas em Porto Velho-RO/Brasil, onde predominam solos tipo Latossolo
Amarelo distrófico, textura argilosa, e clima Aw, segundo Köppen, TOWNSEND et al. (1999) e
TOWNSEND et al. (2000) comprovaram a viabilidade agronômica da renovação/recuperação de
pastagens degradas via plantio simultâneo do arroz (cv. Progresso) ou milho (v. BR-106) com as
gramíneas B. brizantha cv. Marandu, B. humidicola (quicuio-da-amazônia) e P. atratum cv. Pojuca,
quando cultivadas nas mesmas linhas ou nas entrelinhas das culturas. O preparo do solo constou de
uma gradagem seguida de aração e gradagem, a calagem visou elevar a saturação por bases a 30
% (arroz) e 50 % (milho), com adubação no sulco de 20, 90, 60 e 18 kg/ha de N, P2O5, K2O e FTE-
BR12, respectivamente, além de 20 kg/ha de N distribuídos em cobertura. As lavouras de arroz foram
semeadas no espaçamento 30 x 30 cm e as de milho 100 x 20 cm, enquanto que a taxa de
semeadura das gramíneas foi de 3,0 kg de SPV/ha. Nos cultivos consorciados com arroz e milho a B.
brizantha obteve os maiores rendimentos forrageiros, seguidos do P. atratum e da B. humidicola
104
(Tabelas 15 e 16), estas duas gramíneas sofreram maior concorrência das culturas do que a B.
brizantha, quando se comparam suas produções em cultivo solteiro. Embora o rendimento de grãos
tenham sido relativamente baixos, 1499 kg/ha nas lavouras de milho e 1158 kg/ha nas de arroz, não
foi constatado efeito das gramíneas acompanhante na produtividade de milho, já com a do arroz
houve redução de 23%, notadamente nos consórcios com B. brizantha, quando comparada ao cultivo
estreme.
Tabela 15. Rendimentos de matéria seca e de grão em cultivos consorciados de gramíneas

tropicais com arroz de sequeiro. Porto Velho-RO/Brasil
Gramíneas em cultivos Rendimento
Gramíneas
consorciados de
arroz(1) em
Em cultivos métodos de plantio
Gramíneas(2) casca
Estreme Linha Entrelinha
....................kg de MS/ha...................... kg/ha
B. brizantha cv.Marandu A 2491 ab A 2940 a A 2277 b B 853
P. atratum cv. Pojuca AB 2315 a B 1666 b B 1569 b A 1247
B. humidicola B 1771 a C 864 b C 741 b A 1374
Médias seguidas de letras diferentes, minúsculas nas linhas e maiúsculas nas colunas, diferem entre si (Tukey, P
5%);
(1): Arroz cv. Progresso espaçamento 30 x 30 cm;
(2): Taxa de semeadura das gramíneas 3,0 kg/ha de SPV;
Adubação (em kg/ha): 40 N, 90 P2O5, 60 K2O e 18 FTE-BR12.
Fonte: TOWNSEND et al. (1999).
TABELA 16. Rendimentos de grãos e de matéria seca em cultivos consorciados de gramíneas

tropicais com milho. Porto Velho-RO/Brasil.
Gramíneas em cultivos
Produção Gramíneas
consorciados com milho
Gramíneas(1) de milho(2) em cultivos Métodos de plantio
Estreme Linha Entrelinha
kg/ha ...............................kg de MS/há.......................
B. brizantha cv. Marandu A 1410 A 2248 a A 2007 a A 1963 a
P. atratum cv. Pojuca A 1413 AB 2072 a B 1347 b B 947 b
B. humidicola A 1673 B 1525 a C 490 b B 391 b
Médias seguidas de letras diferentes, minúsculas nas linhas e maiúsculas nas colunas, diferem entre si (Tukey,
5%);
(1): Taxa de semeadura das gramíneas 3,0 kg/ha de SPV;
(2): Milho BR-106 espaçamento 100 x 20 cm;
Adubação (em kg/ha): 40 N, 90 P2O5, 60 K2O e 18 FTE-BR12.
Fonte: TOWNSEND et al. (2000).
ASPECTOS ECONÔMICOS A SEREM CONSIDERADOS
Com base no comparativo de custos benefícios correntes de diferentes tecnologias de

recuperação /renovação de pastagens, proposto por OLIVEIRA et al. (1996). Fez-se a
adaptação de tecnologias e coeficientes técnicos de insumos e produtos as condições vigentes
de Rondônia, Brasil, servindo como indicativo na tomada de decisões a regiões da Amazônia
105
onde já se praticam a agricultura e pecuária (Tabela 17). Vale salientar que as tecnologias
propostas consideram o plantio consorciado das lavouras com pastagens, visando apenas
recuperação/renovação destas sem considerar a possibilidade de cultivos em sucessão no
espaço e no tempo, além do mais não são quantificados os resultados econômicos da
atividade pecuária, após a recuperação/renovação dos pastos.
Dentre as tecnologias de recuperação/renovação direta, os custos operacionais
oscilaram entre 44,80 a 435,3 US$/ha (Tabela17) equivalendo a cerca de 4,9 a 47,3 @ de
carne ou 697,4 a 6775,5 L de leite, (Tabela 18), quando são utilizadas a baixa e alta tecnologia
respectivamente. É de se esperar que os sistemas de baixa e baixa/média tecnologia, não
produzam boas pastagens e consequentemente sua produtividade e longevidade também
serão baixas. Valores que na grande maioria dos casos, inviabiliza a sua produção, dado o
nível de descapitalização dos produtores, além das linhas de financiamento serem escassas e
de difíceis acesso ou proibitivas. Mas quando comparados aos custos de abertura e formação
de novas áreas de pastagens (cerca de US$ 660,00) são mais atrativas economicamente e
principalmente, nos aspectos sociais e ambientais, ademais se deve considerar as questões de
ordem legal que restringem a utilização da área da propriedade agrícola em 20 %.
Outro fator na integração lavoura pecuária estão relacionados às áreas de 1º ciclo de
pastagem, pois a incidência de raízes e toras em decomposição oneram ainda mais os custos
dada a necessidade de sistematização de atividades na área como desenraizar, enleirar etc.
Na recuperação/renovação de pastagens em consórcio com as lavouras de arroz, milho,
sorgo e soja os custos de implantação dos sistemas foram 386,7; 493,7; 457,6 e 507,1 US$/ha,
respectivamente. As receitas das lavouras, advindas da comercialização de grãos, não
cobriram os custos, com taxas de retorno (receita/custo) na ordem de 40% com arroz e milho,
30% com o sorgo e de 50% com a soja. Para cobrir os custos finais (custo total/receita) seriam
necessários 26, 33, 36 e 29 @ de carne/ha ou 3681; 4676; 5149 e 4151 L de leite /ha nas
integrações com arroz, milho, sorgo e soja respectivamente.
Estes valores refletem por um lado, os baixos preços praticados com relação aos
produtos da agropecuária, e por outro, os elevados preços com relação aos insumos
necessários para implantação dos sistemas. As grandes distâncias com relação ao mercado
consumidor e fornecedor de insumos, e consequentemente o aviltamento dos valores de frete
tem sido um dos principais fatores que contribuem para este panorama.
Entretanto a abertura dos principais corredores de escoamento de produtos como
madeira/amazonas; Cuiabá/Santarém e outros serão os principais facilitadores de transporte
de produtos, flexibilizando a comercialização e expandindo as fronteiras para escoamento das
safras, assim como a facilidade de aquisição de insumos e serviços.
106
Tabela 17. Comparativo custo de tecnologias de recuperação/renovação de pastagens
PREÇO RECUPERAÇÃO DE PASTAGENS-SISTEMAS DIRETOS RECUPERAÇÃO DE PASTAGENS-SISTEMAS CONSORCIADOS
INSUMOS/SEVIÇOS UD UD BAIXA MÉDIA/BAIXA MÉDIA ALTA ARROZ MILHO SORGO SOJA
US$ Qua/ha US$ Qua/ha US$ Qua/ha US$ Qua/ha US$ Qua/ha US$ Qua/ha US$ Qua/ha US$ Qua/ha US$
Calcário dolomítico T 9,37 1,00 9,37 1,50 14,05 2,00 18,74 1,50 14,05 3,00 28,11 3,00 28,11 4,00 37,47
Fosfato natural T 234,21 0,50 117,10
Termofosfato T 167,29 0,80 133,83
Fostato parcialmente acidulado T 250,94 0,50 125,47
Superfosfato simples T 250,94 0,20 50,19 0,20 50,19
Cloreto de potássio T 384,77 0,05 19,24 0,08 30,78
Formulado 4-30-16 T 378,08 0,30 113,42 0,35 132,33 0,35 132,33 0,45 170,14
Sulfato de amônio T 267,67 0,10 26,77 0,10 26,77 0,10 26,77 0,30 80,30 0,20 53,53
Sulfato de zinco T 816,39 0,02 16,33 0,02 16,33 0,02 16,33
FTE BR-12 T 669,17 0,03 20,08 0,03 20,08 0,03 20,08 0,03 20,08 0,03 20,08
Carbofuran/Thiodicarb L 5,02 0,90 4,52 0,40 2,01 0,30 1,51
Inoculante Dose 1,17 3,00 3,51
Inseticida L 16,73 0,70 11,71
Herbicida L 21,85 1,50 32,77
Fungicida L 8,36 0,25 2,09
B. brizantha Kg 1,51 10,00 15,06 10,00 15,06 10,00 15,06 10,00 15,06 5,00 7,53 5,00 7,53 5,00 7,53 5,00 7,53
Leguminosa (P. phaseoloides) Kg 5,02 3,00 15,06
Sementes culturas kg 0,40/1,17/1,00/0,43 60,00 24,09 20,00 23,42 16,00 16,06 65,00 28,27
Espalh.fosfato/semente forrageira H/M 16,73 0,50 8,36 0,50 8,36 0,50 8,36 0,50 8,36
Frete calcário (dist. 100km) T 13,38 13,38 20,08 26,77 20,08 40,15 40,15 53,53
Espalhamento de calcário H/M 16,73 0,50 8,36 0,50 8,36 0,50 8,36 0,50 8,36 0,50 8,36 0,50 8,36 1,00 16,73
Gradagem aradora (18 discos) H/M 16,73 1,20 20,08 1,20 20,08 1,20 20,08 1,20 20,08 1,20 20,08 1,20 20,08 1,20 20,08 1,20 20,08
Aração disco (3 discos) H/M 16,73 2,00 33,46
Aração aiveca (3 conchas) H/M 16,73 2,30 38,48 2,30 38,48 2,30 38,48 2,30 38,48 2,30 38,48
Nivel./desterroamento (36 discos) H/M 16,73 0,60 10,04 0,60 10,04 0,60 10,04 0,60 10,04 0,60 10,04 0,60 10,04
Plantio H/M 16,73 1,00 16,73 1,00 16,73 1,00 16,73 1,00 16,73
Aplicação de herbicida H/M
Aplicação de inseticidas H/M
Cobertura N/K H/M 16,73 0,80 13,38 0,80 13,38 0,80 13,38
Controle de formigas D/H 4,02 0,10 0,40 0,10 0,40 0,10 0,40 0,10 0,40
Tratamento de sementes D/H 4,02 0,10 0,40 0,10 0,40 0,10 0,40 0,50 2,01
Colheita/transporte/secagem H/M 16,73 1,00 16,73 1,00 16,73 1,00 16,73 1,00 16,73
Mão-de-obra colheita D/H 4,02 1,00 4,02 1,00 4,02 1,00 4,02 1,00 4,02
Administração (3% de custo) U/D 1,30 5,75 10,53 12,68 11,26 14,37 13,33 14,77
TOTAL US$/ha 44,80 197,47 361,68 435,26 386,73 493,22 457,55 507,08
107
Seminário Internacional para o Desenvolvimento da Pecuária na Amazônia
Tabela 18. Comparativo custo/benefício de tecnologias de recuperação/renovação de

pastagens
Tecnologias de Recuperação/Renovação de Pastagens

Sistemas Diretos Sistemas Consorciados
................................................. US$/ha
INSUMOS E SERVIÇOS
...........................................
Média
Baixa Média Alta Arroz Milho Sorgo Soja
baixa
Corretivos e fertilizantes 0,0 126,5 235,7 280,4 195,2 279,1 251,9 227,7
Sementes 15,1 15,1 15,1 30,1 31,6 30,9 23,6 85,9
Preparo do solo/plantio 28,4 50,2 100,4 112,1 113,8 133,8 133,8 155,6
Tratos
1,3 5,8 10,5 12,7 46,2 49,3 48,3 37,9
culturais/administração
TOTAL (US$/ha) 44,8 197,5 361,7 435,3 386,7 493,2 457,6 507,1
Retorno venda de grãos - - - - 150,3 192,8 126,8 240,4
Taxa de retorno(1) - - - - 0,4 0,4 0,3 0,5
@ de carne p/cobrir custos 4,9 21,5 39,3 47,3 25,7 32,6 35,9 29,0
L de leite p/ cobrir os custos 697,4 3073,9 5630,1 6775,5 3680,5 4676,5 5148,9 4151,1
TOTAL (R$/ha) 133,9 590,2 1081,0 1300,9 1155,9 1474,1 1367,5 1515,5
1,00 R$ = 2,99 US$ cotação média no período de 01/04/2003 a 30/06/2003;
Preços médios de insumos e serviços praticados na microregião de Cacoal-RO no segundo trimestre de 2003
(Informações Trimestrais Sobre Atividades Agropecuárias-BASA);
Preços médios pagos ao produtor no período 1998 a 2002 em Rondônia - EMATER/RO;
ARROZ: produtividade de 33,25 scs./ha (sc. 60 kg), preço de mercado 4,50 US$/sc.60 kg;
MILHO: produtividade de 61,50 scs./ha (sc. 60 kg), preço de mercado 3,12 US$/sc.60 kg;
SORGO: produtividade de 58,30 scs./ha (sc. 60 kg), preço de mercado 2,17 US$/sc.60 kg;
SOJA: produtividade de 42,42 scs./ha (sc.60 kg), preço de mercado 5,65 US$/sc.;
@ do boi preço de mercado 9,17 US$/@;
L do leite preço de mercado 0,064 US$/L;
(1) Valor coberto pelo lucro líquido obtido com os grãos;
Não são considerados os incrementos na produção de carne e leite após a recuperação/reforma;
Benefícios sociais e ambientais.
CONSIDERAÇÕES FINAIS
As tecnologias relacionadas à integração lavoura pecuária estão disponíveis para serem

utilizadas na Amazônia, permitindo maior versatilidade de produção e pluralidade de atividades,
garantindo maior estabilidade da produção e principalmente retorno mais rápido do capital
investido.
A utilização de um processo que compreende práticas agropecuárias que de forma
racional favorece a preservação do solo, da água, do ar e da biodiversidade, diminuindo o grande
risco agrícola e auxiliando as condições socioeconômicas da região devem ser valorizados.
Entretanto seu uso pode ser questionado principalmente em relação aos custos /benefícios de
utilização, além da disponibilidade de mão-de-obra qualificada para executá-lo, para que depois
de implantado, consiga a sinergia de ações para o aumento da produção em escala.
Será necessário a disponibilização de incentivos para a melhoria dos corredores de
escoamento de produtos, como principais facilitadores de transporte de insumos e produtos,
flexibilizando a comercialização e expandindo as fronteiras para escoamento das safras.
A preservação da biodiversidade amazônica e imperativa. Para tanto, o zoneamento
ecológico-econômico (ZEE) deve ser executado definindo as áreas aptas à exploração
intensificada e sustentável da agropecuária, restringindo o avanço indiscriminado sobre novas
áreas de floresta.
Novas linhas de crédito devem ser abertas para planos estratégicos de desenvolvimento
agropecuário, além de fomento a pesquisa para medir os impactos socioeconômicos e ambientais
destas atividades.
108
Dentre as alternativas possíveis de serem adotadas, a integração lavoura pecuária tem

papel importante. Sugere-se no entanto, que além dos cultivos e explorações pecuárias, a
introdução nesses sistemas de um componente arbóreo, formando modelos agrossilvipastoris,
venham a ser avaliados na busca de uma melhor adequação as condições do ecossistema
amazônico.
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Grafico 1: Producciòn y Consumo Per capita de Leche

Producción de Carne (Ton.) Consumo Per Cáp. - Carne (Kg.Per.Año)

Grafico 2: Producciòn y Consumo Per capita de Carne

VISIÓN ACTUAL Y PROSPECTIVA DE LA GANADERÍA EN BOLIVIA

Descripción en mapa de las cuencas hidrográficas de Bolivia.

1. Producción, superficie, precios, análisis histórico y prospectivo.

Evolución y tendencia de la producción de carne

Años Población nal. Población Producción Consumo Excedente

2. Importancia socioeconómica y ambiental.

Producto Interno Bruto nacional: 7.790 millones de dólares.

3. Principales desafíos a nivel global para los próximos años.

Incremento de la productividad y competitividad (principales obstáculos: financiamiento,

4. Principales oportunidades de producción y comercio. Tendencias.

Incremento nacional e internacional (2 %) de demanda de carne bovina.

5. Políticas nacionales de desarrollo económico, sostenible y social.

Proceso de cambios en producción y en comercialización de ganado y de carne por

SERVIÇOS AMBIENTAIS E DESENVOLVIMENTO DA PECUÁRIA

Angelo Mansur Mendes

A reflexão do conceito de natureza é fundamental antes de discutir a relação entre

2- Crescimento e Desenvolvimento Sustentável

A conceituação de crescimento e desenvolvimento tem provocado muita confusão o que

A manutenção da biodiversidade tem importância local como global, seja devido à

devido ao desmatamento conforme a literatura existente que se 50% da Amazônia for

3.2- Mudança climática

O serviço ambiental mais discutido devido ao protocolo de Quioto que tem

estocar carbono. Essa modelagem é importante para descrever a dinâmica e exibir os

3.3- Ciclo hidrológico

O Programa de Desenvolvimento Socioambiental da Produção Familiar Rural da

AMBIENTE BRASIL. Glossário. www. Ambientebrasil.com.br/glossário. Acessado em 23/06/2003.

CARACTERÍSTICAS DA CADEIA PECUÁRIA BOVINA DE CORTE

Particularmente na Amazônia brasileira, a pecuária enfrenta desafios, quer

INSTITUTO EUVALDO LODI. Núcleo Central, CONFEDERAÇÃO NACIONAL DA AGRICULTURA,

A PECUÁRIA E O COMÉRCIO REGIONAL E INTERNACIONAL:

Josélio de Andrade Moura1

A intensificação do comércio internacional, motivado por sistemas de comunicação,

I. ÂMBITO DA SANIDADE ANIMAL

A Sanidade Animal, em tempos pretéritos, estava reduzida a um simples item do

REFLEXOS NO COMÉRCIO INTERNACIONAL

A produção mundial de carnes, que em 1950 era de 44 milhões de toneladas, passou

A Austrália, tradicional competidor do mercado mundial, teve um decréscimo de 5% na

II. SANIDADE ANIMAL NO MUNDO

VISÃO ATUAL E PROSPECTIVA DA PECUÁRIA NO BRASIL: AMAZÔNIA-TERRA FIRME

Judson Ferreira Valentim1

Estima-se que cerca de 40% da área de pastagens cultivadas (19,4 milhões de

EVOLUÇÃO DA PECUÁRIA DE LEITE NA REGIÃO NORTE 1990/2001: INDICADORES

Neste resumo encontram-se reunidas informações sobre a evolução da produção de

Evolução da produção de leite na Região Norte: 1990-2001

Brasil Norte Nordeste Sudeste Sul Centro-Oeste

Figura 1. Taxas de evolução do volume de produção de leite por regiões