El asentamiento informal de miles de familias en zonas vulnerables ante lluvias e

inundaciones en la región Piura, solo ha demostrado la falta capacidad, planificación

e improvisación del gobierno central y local para implementar y ejecutar verdaderas
políticas de Desarrollo Urbano que garanticen un modelo de ciudad habitable y
sustentable ante los fenómenos sociales y pluviales.

Hoy las recientes lluvias han puesto al descubierto que Piura no está prepara para
soportar otro fenómeno pluvial, pese a la tan anunciada reconstrucción del gobierno
central que a la fecha según medios periodísticos y la contraloría de la República
avanza a paso lento con obras paralizadas, abandonadas y en algunos casos sin
iniciar, debido a que solo se habría ejecutado el 31% del monto transferido para
reconstruir las zonas afectadas, así lo anuncio en reiteradas oportunidades el Dr
Lucho López Vilela en las diferentes comisiones y sesiones del Congreso de la
Republica.

A casi tres años del fenómeno del niño costero las lluvias ya están cobrando vidas
humanas, aislando a los pueblos y evidenciando la pésima calidad de las obras
donde las vías asfaltadas recientemente lucen inundadas y en algunos casos con
forados,