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1107 2p s1quiatsou ap 6 [e Zz “SHY souang “vgn “eIBojooIsg ap peyNre4 YASOOWAW PP "FOODS ua ssuopeSiasaauy ap onmuonsug 1] *worseSsaau] ap eprUsol TAX reyBojoaisq uo [ouoisayozq vanapig A uploesasaauy ap [PuOI2vUIDIE osoiuoc []f ‘Aa1yoi[g ONY 40d opeurpso0d ‘ug!seaNpy & esFOIOOIS up uorseBusaauy v] 2 eypesfoUrg e| 9p souo!anquiu0D,, [PUO!EUSDIU oysoduig [9 ua epeljostesap ugtoisodxo ej 2p aseq 9 02x23 2383 “| ¥] Sowiqa>u09 OWLgD ap eaaDe seoI8oJoporeul O>1:=1 SauOIDES -apisuoo seungie seiuasaad paviuonut ‘oiusuresysoadsa sep uiseonpa { esBojooisd ua sauor>eSnasaaut sey ¥ sousvoia2e souresspod anb soy apsap -[e190s eyHojodomue ¥] ap ‘oypyp zolou ‘0 eaypafouna WorDessoaut | SoWapudya 9p -Uop apsap souiaitis sousat9 rensour ap gavsen jnbe “oprauas [er ug ‘sesaiuoay sns seuiqap aupiqrsod ‘opour unde ap ‘anb sare -t[d.osip soiquresiaqu! ap ozs9nys9 un sezt[eo9 9p PEpIsarau T] uuauodns ,orxa1 a1s9 1ex9u08 © ueaay| anb seroueisunozt> se] NOIOVLNASAYd o1esoy ap feuorDeN pepsssaAti ‘sony € sapeprueuingy ap perynaey Ue lal Sad fd 0}X9]U09 ap ugIOU eT Jesuad vIEg “uorseonpa ua vo8o;odosueoIos uOIDeSIsaAUy 4 HISTORIA Y VIDA COTDDIANA EN EDUCACION nocién de contexto en los proce rrollamos, De ahi que sed necesaroven pines gas wane as breve fees sees de nfo esl donde nos amos y orientamos las investigaciones en el ela antropologia y la educacion campo den En su conjunto, esta presentacié - esta presentacién conlleva la intencié ini al digo y al debate ene enfoques de aaa cin ali de ls perenencias disiplinares—y, simulténeamen. abr un espacio que nos permitaidentifcarvatost cos sic compenen yee aos de analisis de los brocesos sociocultural, Segin Eduardo Menénder (2010 Ta pologia carece de una teoria de la subjetivid em tmenteen muchas inestigatonersolemes oernaos con ot ent ‘ones solemos relerirnos con asi Guida» Iain de sujet, No bstante, hemos incusonad csssanet profuniacones eres ge nos eee lo que entendemos por subjetividad. De ahi que res eae ee jar abierta la preocu- pacién por relacionar determinada teorizacién sobre subjeti- vidad con el enfoque de im 6 la nocién de contexto. oe UN ENFOQUE ANTROPOLOGICO RELACIONAL ALGUNOS NUCLEOS IDENTIFICATORIOS: li te Is te i Me sagrada triada del siglo XIX de po- wn proceso independientes. Debemos inventar un nui ; 2. Se retoman alguna: Igunas ideas trabajadas en Achilli (2005). INVESTIGACION SOCIOANTROPOLOGICA 35 en y entre estos tres dmbitos supuestamente distintives (Wallerstein; 1998), Hemos comenzado este punto con un epigrafe que de algtin modo contradice Ia idea de identificar/delimitar un enfoque {que se recorte en 10 disciplinar. Es decir, planiearse criterios see eel campo antropologico que, como fal» también £65 ponden a esa “triada de siglo XIX" que fragments los proce pon rmanos y,a la vez, supuso una organizacion fragments see de las ciencias sociales. Podrfamos preguntarnos envoncts {por qué hablar o insistir en un enfogue dentro del campo de Ja antropologia sociocultural? parc eventa de tal interrogante puede abris distintas ineas de argumentacin que trascienden los objerivos de este TeX Sin embargo, solo diremos que nos ha resultado necesario de- a ean enfoque a fin de orientar tanto nuestras précticas deinvestigacion como de docencia universitaria en ese cE disciplinario. En tal sentido, el epfgrafe puede jugar, 2 ‘modo sec aporizonte que perturbelcensione esta necesidad. De he- ho, el mismo autor considera que criticar la fragmentacion coe ras ciencias sociales ain resulta “incompleta” porgue 1 ha logrado encontrar la forma de corregir el més feck y oe puta) Tegado de las ciencias sociales del sigho XIX: Ie divi- ca Gel andlisis social en tres areas, tres logicas, tres “nNe= fes"s el econémico, el politico y el sociocultural, Esta triada tee seuentra en medio del camino, obstaculizando nuestt® progreso intelectual. [..] No hay nadie ain que haya encon- eooeeiy manera de eliminarla del lenguaje y sus implicaclo- wes, algunas de las cuales son correctas pero la ‘mayorfa no. wT ver el mundo deba cambiar un poco mas antes de que los yal Yermicos pucdan teorizar esta triada de manera mas ‘itil (Wallerstein, 1998). Sin embargo, advertir sobre este “legado de las ciencies wel siglo XIX”, tiene el sentido de instaurar un mi 36 HISTORIA ¥ VIDA COTIDIANA EN EDUCACION cleo contradictorio ceo sntradicorio que, aun cuando esse dif de romper, sarc una permanente tensn, Es dest acta a modo de se: aininos que, aunque duros de tamsitag! es import marcarlos como orientadores jonalidad de las Imacarlos como orientadores de cet drecionlidd dels ursionts que realzamos en las prctca de investigacin. “ag sl sentido, mantenendo esa tension de rasfondo, con sideramos que es neesario constr alguna opin eéric ietodolsgica en el campo socioantropelogico que n0 solo °. sie organiza las pactias de fvestignciony docenca en esa discplina sino, también, pemitapotencisdilogos ier tual acerea de las articulaciones de diferentes escalas c tuales. Se trata, en cierto sentido, de expres ~aungue implica émica con algunas tendencias tesri- mente una compleja polémica con alg teat aa jue circulan, Fundamentalmente con aquellas que des-h forisan los procesos socioculturales y/o superponen distintos sspectos sin jerarquizacion alguna, Tambien, con concepcio- tee que reducen las problematicas centrando solo en las di mensiones simbdlicas/subjetivas sin sus anclajes historicos 0, 40 HISTORIA Y VIDA COTIDIANA EN EDUCACION con otras perspectivas, que las simplifican en correlaciones lineales. Desde estas preocupaciones tedricas metodolégicas planteo |a posibilidad de inteligibilidad de las configuraciones cotidia- nas, destacando aspectos vinculados al contexto estructural enfocado como tendencia hegeménica.* En tal sentido, planteo hipotéticamente que determinadas tendencias hegeménicas de una época se configuran a modo de logicas que van adquitiendo particulares continuidades se- atin las escalas y niveles que van conectando. Para ejempli ficar, tomaremos investigaciones desarrolladas en la década de 1990 en la ciudad de Rosario (provincia de Santa Fe, Ar- gentina). En ellas, planteabamos que la tendencia hegeménica de esa época conlleva las marcas de lo que puede entenderse como una “l6gica neoliberal”, en sentido amplio, Al mismo tiempo, decfamos que esta logica puede ser caracterizada por la generacion de procesos de fragmentacién sociocultural, Es decir, procesos que implican fracturas o atomizaciones en las relaciones sociales. Procesos que, por las mismas condiciones y limites de la época, tienden a la ruptura de lazos colectivos, dificultando la generacién de relaciones solidarias en distintas escalas contextuales. Por lo tanto, estamos pensando en procesos de fragmenta- cién que se manifiestan en los diversos contextos ~segiin sus niveles 0 escalas— y que van adquitiendo particulares conti- nuidades en cada uno de ellos, Por ende, también a nivel de las configuraciones cotidianas, foco de las investigaciones, En otros trabajos (Achilli, 2000, 2010) hemos tratado de mostr: la conexidn de diferentes escalas desde esa determinada logica de época. En tal sentido, fuimos analizando las caracteristi 4. La nocién de hegemonia con la que nos guiamos es tributaria del pensamiento de Raymond Williams (1980), a INVESTIGACION SOCIOANTROPOLOGICA rocesos de fragmentaci6n sociocultural cenerales que hacen a las politicas neo- i riculares que asumieron iudad de Rosario hasta tos a nivel de la cotidia- cas que asumian los p desde las escalas mas saueh Tiberales, pasando por los modos pa en los procesos sociourbanos de la escribir la singular continuidad de ae a centrar la atencion en una lca deo hea nico quedan fuera de este andiss tes practiesyrelaco- : fan entenderse como paste de procesos di es Sheeaslos?- los que mostracemos. Deals parca inte de este ta lo aquellos aspec- mite de est trabajo ya qual considerar slo aquellos aspecy ve marean una tendencia estructural, quedan nevtraliza- dos otros cuyo contenido consideramos importante también ‘denticary desribir. No obsant, este limite se justifies si pretendemos presentarlo como contextualizacién de la hete- Fogeneidad de procesos snalizados en su confguracionesc- Tie ee ee a inscriben esos diferentes procesos: Oy nimento terieo metodooxico ofundas que las transfor- Teurales van anclando en iariamente constrayen los una época en la que se dicho de otro modo, resulta un pot entender ciertas conexiones pr maciones politicas, econdmicas, cul las practicas y significaciones que d sujetos. SOLAR EN CONTEXTO: A COTIDIANEIDAD ESCOLA\ xT¢ CONSIDERACIONES TEORICO METODOLOGICAS : GENERALES a2 HISTORIA Y VIDA COTIDIANA EN EDUCACION en sus procesos activ te ro también en su ives y formativos rocesos de transfor 1380 » de transformacién (Williams, 1980) : Lo conereto es co to es concreto por ser una conjuncién de mail ples determinaciones, ples , 0 sea, unidad de la diversidad (Marx, apt tmesplaneado los procesos de frgmentacs tral aso un ase cere cone acme es pact. Los consderamos a mode de una lgica rotund de as sendencia estructural, abiendo un camming explcs tivo de ls procesosenfocados a escala dels conf cat nes coins. Es oa palabras, mo de context proceso ial de a co-constrccidn (Rockwel 1996) de ls maps intracconesy relaiones dels icin eae au, al mismo tempo, se impregnan de disintosenramados Se trata de analizar | aS itt de analiza los process de fymontaci cull vel des onion condana sin deco cinta nterasiones contextual, Pata expire ioe Yor clariad esta perspectvaconideramos que pu ular exlaecedor precisa: como jeg et “ialectca contexte on el anliss de os procsos de fagmentacion« voltae gee ee ‘ociocultural que 1, EItPtincbi, y para evitarconfasones, co i sma nai de content ue como ya ios, set learse desde tito puesto trios. au entendezemos como contesio™ deerminada configura temporoespacial gus resorts odlintamon os fines proceso dein, vestigacén socoedaatio gue noe intra Configuacion ceptuda conta por am conuno de pcs i fads cesos que, a su vez, estan por le hulls de oes escalas peepee errs de esta idea mtamos. des ta idea general, intentamos destacar varias INVESTIGACION SOCIOANTROPOLOGICA 43 Jégicas que hacen al tratamiento de ‘cuestiones te6ricas metodo! figuraciones escolares en las que S° |a cotidianeidad de las con} desenvuelven los proceses bajo estudio. sin primer lugar, plantear la diferenciacin de distintos nipoles o escalas contextuales.* Es decir, diferentes configura: Homes temporoespaciales que remiten a distintos dmbitos con- Siderados segiin Ia escala en que se producen determinados procesos. Por ejemplo, para nuestro trabalo diferenciaremos Bigunos de los contextos que interactiian en la configuracion atetos procesos de fragmentacién socioculturales que 0 inte- de los Pr izar, Por tn lado, el nivel de nuestro foco de andlisis: Ul de los contextos cotidianos de esos procesos. Nivel confi- tgurado a escala de la copresencia de Tos suicios involucrados. sara de una especifica coconstruccion relacional entre Ja vida escolar y la vid: ‘a de un modo par urbana en la que se eXPFes ticular determinada generalidad estructural. Por otro Jado, el nivel de los contextos Jociourbanos desde el que nos interes ave car Ia escala de la ciudad y sus particulates seBme™e, ciones socioculturales. En especial J, el de los contextos que se cenfiguran en fa elacién entee Ia pobreza urbane ¥ los movi- oblacionales. Por Gltimo, tun nivel vinculado més al y estructural, que podriamos englo- s politicas neoliberales para mientos P contexto sociohistorico thar como el de los contextos de la: hacer referencia al conjunto de transformaciones de & han Ho generando hegeménicamente en Jos times af escala ye saternacional. En sintesis, aqui diferenciamos tres aac sgntextuales. El contexto de [a escala cotidiana (ese Tuc familir/urbano); et que denominamos contexte <7 bran para referimnos a la escala de la ciudad ¥ finalmente, i que alude a una eseala mas amplia “nacional/internacio- nacional y sha resultado un importante aporte fa (en Left (1986) 5, Para la nocién de nivel no: . consideraciones de Rolando Gare “4 HISTORIA Y VIDA COTIDIANA EN EDUCACION nal- con el que pretendemos marcar las politicas neolibera- les, Ahora bien, estos diferentes niveles contextuales suponen analiticamente, como lo plantea Rolando Garcia (1986), dina- micas diferentes y sujetos diferentes. Ello significa diferenciar en cada escala el desarrollo de procesos con determinada par- ticularidad. Sin embargo, no implica autonomizacién o aisla: miento sino una interrelacién o un entrecruzamiento de los niveles o escalas contextuales. b) Una segunda aclaracién, y, tal como se deduce de lo an- terior, con la nocién de “contexto” no estamos suponiendo un mero contorno “externo” a las relaciones y procesos cotidia- nos. Mas bien, estamos pensando relacionalmente la interac- ccién entre los distintos niveles contextuales que, mutuamente, se van configurando y configuran las condiciones y limites de los procesos y relaciones que nos interesan. ©) De ahi que esta nocién de contexto, aun cuando la “de- limitemos” desde un tiempo y un espacio especifico, carece de limites precisos. Queremos decir que, no obstante estas “deli- mitaciones” para comprender determinados niveles de proce- sos y relaciones, esos tiempos y esos espacios se constituyen en una relacién con otros tiempos y espacios que pertenecen a diferentes escalas de mayor o menor generalidad estructu- ral. A su vez, supone que, en los diferentes niveles o escalas de procesos, se identifiquen diferentes dimensiones 0 campos te6rico empiricos que “componen” una problematica a estu- dias. Ahora bien, no habré que confundir los diferentes ri veles contextuales -vinculados a diferentes escalas~ con los niveles de abstraccién en la construccién de conocimientos. Como dice Elsie Rockwell (2005) “dentro de cualquier escala es posible utilizar categorias de mayor o de menor nivel de abstraccién para seialar la continuidad y discontinuidad de los fendmenos”, 4) Por lo tanto, esta idea de contexto pone de relieve el anilisis de diversas relaciones contextuales en consideracién 3 5 INVESTIGACION SOCIOANTROPOLOGICA 4 s dimensiones de los procesos y de las Soe flee, De ahi que consideremos que jad de los procesos mayor inteligibilid: f es -onocimiento de las interrelaciones stextos. Ja configuracion cotidiana de ai considerar las hue- Jjeterminados procesos 0 practicas implica cons! = lashu gee lore! “espacios”/situaciones que s€ van las de distints tempos y wea ih uacones que san tio en el presente. Por lo tanto, ose ala eee one difundidas acerca de lo cotidiar a ~ « sido : 10 espaci¢ micro” de los fenémenos del present c Se aceanea ie cora , ona de nexos concre- Mis bien, se la considera como una z " oa sega ntre diferentes escalas y dimensiones que, aoa fes.co sales directas, intenta mostrar las cond y a vuales se configuran los cotidianos a esas distintas escalas especificas de cada uno di es posible alcanzar una 1 es pos ; cotidianos a través del muutuas entre esos diferentes cor ¢) En tal sentido, hablar de Jas como cat limites al interior de las ¢ particulares. on punto de v Resumiendo, podriamos decir que, desde un wa de it eorico metodol6gico general, estas referencias sobre Cotes vvualizacion indican una preocupacion por él cor oy aaa is de campos concretos intersectados ¢ interrelacionadhs jue los trascienden. Una preoeupacion ae ha las disciplinas sociales y que conser eal lejidad. Es decir, repensar Hs n cuenta di- andlisis de ca por procesos que marcado largamenti jo reinstalar en su com mos Necesa ree nexos relacionales teniendo en. cuent ae hhan realizado acerca de los limites snes dualistas (Williams, 1980) mbién aquellas que roralizan vado unidimensionalmente las pro- Ja constru versas advertencias que se gue implican ya sea concepcio ¥ dicotomizadoras como ast ta homogeneizando o reducie blematicas bajo estudio. HISTORIA ¥ VIDA COTIDIANA EN EDUCACION REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS chilli Elena (2000): “Contexto y cotidianeidad escolar fragmenta da", en Cuadernos de Antropologia Social, Buenos Aites, Inst tato de Ciencias Antropolégicas, Facultad de Filosofia y Letras, uBA, Achill, Elena (2005): Investigar en antropologia social. Los desa- fios de transmit un oficio, Rosario, Laborde Editor Achilli, Elena (2010): Esewela, familia y desigualdad social. Una antropologia en tiempos neoliberales, Rosario, Laborde Editor. 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