En diferentes partes del mundo se asombraban por la abundancia del
aminoácido glutamato en la naturaleza, preguntándose el porqué de este privilegio. Ha pasado ya más de un siglo desde el descubrimiento del glutamato por el Dr. Ritthausen y la ciencia ha demostrado al mundo las importantes funciones que cumple este aminoácido en nuestro organismo, así como también sus bondades en la nutrición humana. Como aminoácido más abundante en la naturaleza, forma parte de las proteínas corporales, siendo además sustrato en la síntesis de otros aminoácidos no esenciales. Además es un precursor de otro aminoácido no esencial, glutamina, de importancia en el transporte de nitrógeno y necesario en diferentes procesos metabólicos.
Nuestro organismo está dominado por el cerebro, órgano de vital importancia, el
cual controla todo mecanismo existente en nuestro cuerpo. La comunicación que fluye a través de todo el sistema nervioso, sucede por la acción de neurotransmisores. Estos neurotransmisores son sustancias químicas que mantienen comunicadas a las neuronas y dentro de éstos, glutamato es uno de los neurotransmisores excitatorios más activos del sistema nervioso. El glutamato es sintetizado por nuestro mismo cerebro y contribuye así al aprendizaje y la memoria, a través de mecanismos de regulación de la eficacia sináptica.