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Antonia Alarcón
Francisco Benavente
Juan Hernández
Licenciatura en Ciencias,
con mención en Biología.
07/05/2018
Resumen
Se estudiaron los mecanismos naturales por los que animales pierden calor (termólisis) a
través de la convección, conducción, radiación y evaporación, realizando diferentes
experimentos. Utilizamos un catatermómetro de alcohol (como animal modelo), calentándolo
por sobre la temperatura de 37°C y midiendo el tiempo que tardó en enfriarse hasta los 34°C.
Al recopilar los datos y resultados obtenidos, se realizó un análisis estadístico, para comparar
la aislación térmica en distintas situaciones, y así establecer semejanzas y diferencias entre
los mecanismos, a fin de poder establecer cuál de ellos podría ser más eficiente en la
fisiología.
Introducción
Los animales se encuentran en constante interacción con el medio en el que habitan, es por
ello que las adaptaciones fisiológicas que éstos presenten serán de vital importancia, ya que
de ello dependerá su supervivencia y reproducción. Entre las distintas interacciones que
existen entre un animal y el ambiente, encontramos la ganancia y pérdida de calor. Por
ejemplo, si el ambiente se encuentra a una temperatura menor que la del organismo, la
tendencia de éste será perder calor. En el caso de los animales homeotermos (que mantienen
su temperatura constante), causará una serie de mecanismos por los que se evitará la pérdida
de calor y aumentará la producción de éste, a fin de evitar daños en sus sistemas o la muerte
(Fisiología animal aplicada, Armando Álvarez Díaz, 2009). La termólisis son los diferentes
mecanismos por los que un animal pierde calor, y entre ellos encontramos:
Conducción: Se produce por el contacto directo entre dos cuerpos a diferentes temperaturas
y siempre ocurre desde aquel que posee mayor temperatura al que posee menor
Convección: Se produce por la transmisión de calor entre fluidos (como aire o agua) debido
al movimientos neto de éstos, en los que que al ocurrir la transferencia de calor, el fluido de
“desplaza” dando paso a zonas con mayor temperatura, generando un flujo de transmisión
constante (hasta alcanzar el equilibrio).
Evaporación: Se produce por el cambio de estado líquido a gaseoso del agua. El agua
requiere grandes cantidades de energía para poder pasar al estado gaseoso, por lo que es
un mecanismo muy eficiente de termólisis.
Radiación: Se produce entre dos cuerpos que no se encuentran en contacto. Se da por
medio de la transmisión de ondas electromagnéticas (como por ejemplo, la radiación solar)
(Animal Physiology Adaptation and environment; Knut Schmidt-Nielsen)
Los objetivos de cada uno de los siguientes procedimientos es comparar los mecanismos de
termólisis, y con ello establecer a su vez la aislación térmica que se presenta.
Métodos y materiales
Medimos el tiempo de enfriamiento del catatermómetro cubierto con tres cilindros: uno
pulimentado, uno blanco y uno negro, para luego compararlos.
Repetimos el experimento 1, pero esta vez el bulbo no fue secado antes de la toma del tiempo.
Al multiplicar este valor por la capacidad calórica del catatermómetro usado, obtendremos la
pérdida total de calor (H).
El valor de Q dividido por la superficie del catatermómetro, determina la densidad del flujo
calórico (Qs).
La diferencia térmica entre la temperatura del instrumento y la del ambiente, dividido por la
densidad del flujo calórico, entrega la aislación térmica (I).
Para realizar el análisis de datos grupales, reuniremos los resultados de las aislaciones
térmicas obtenidas y calcularemos el promedio y la desviación estándar para poder graficar
y así facilitar su estudio.
Además, para realizar las comparaciones entre los promedios de los grupos, se realizó un
test de Tukey, con el cual se establecen similitudes entre los grupos de experimentos y su
correspondiente conclusión.
Resultados
Cuero 2625
Polar 7058.8
Nido 79.88
Tierra 2004.09
Nido 3662.4
Barro 275
Pelo 3841.71
Chaleco 9175.37
Termo 4816.5
Huddling 4497.4
Tierra 1038.46
Discusión
Los resultados se explican, debido a la diferencia de conductividad del aire y el agua. El aire
al ser una mezcla de gases atmosféricos, es menos denso que el agua, lo que hace que sus
moléculas estén más separadas y esa distancia haga que el calor como radiación
electromagnética fluya más lento entre molécula y molécula. En cambio, el agua al ser un
medio líquido, tiene sus moléculas más juntas, entonces al haber un menor espacio entre las
moléculas, la transferencia del calor en forma de radiación electromagnética es más rápida,
el mejor ejemplo que pone en evidencia esto, son los mamíferos marinos y sus adaptaciones
fisiológicas para termoregular (Marine Mammals physiology, Michel castellini,
termorregulación, página 1167).
Es también importante a considerar el hecho de que al poner cilindros de distintos colores y
materiales, variaba la aislación térmica y la conductancia térmica, debido a que la masa de
aire que hay al interior del cilindro es menor que cuando no están, hay una menor cantidad
de moléculas de gas que pueden transferir el calor desde el catatermómetro al ambiente, esto
sumado a las paredes del cilindro que actúan como aislante térmicos no dejando salir todo el
calor, salvo por las aperturas naturales de el cilindro, que es por donde introducimos el
catatermómetro
Esto también se refleja en los tiempos de los casos que incluyen al aire como medio físico de
intercambio calórico con el catatermómetro, fueron mayores que cuando el medio físico era
el agua.
Ahora bien, la razón por la cual hay diferencias de aislación térmica, entre los 3 casos en los
que se incluye un cilindro al montaje experimental, es que el cilindro de la superficie interior
negra y de la superficie interior blanca no mostraron diferencias significativas en los distintos
grupos de trabajo, lo cual indica que el color de la superficie interna en este caso no son un
factor importante, lo que lleva a concluir que es el material de la superficie interna del cual
estaba recubierto el cilindro el factor principal, ya que en el caso del cilindro con la superficie
interna pulimentada, presenta una mayor aislación; esto quiere decir que el papel aluminio en
su interior, arrojó los mayores valores de aislación térmica, debido a que el aluminio es un
buen aislante térmico, (es utilizado para guardar el calor de los alimentos, la cual es una
aplicación práctica en la realidad de su aislación térmica).
La bolsa de plástico tiene una aislación térmica media debido a que es un polímero sintético
que no tiene función de mantención de la temperatura, aunque sus resultados son mayores
de otros mecanismos de aislación utilizados, al estar sus moléculas muy unidas, como por
ejemplo el nido o el barro.
Al comparar los experimentos con el test de Tukey, se establece que el agua y el agua forzada
no presentan variaciones en sus desviaciones estándar, por lo cual es posible concluir que,
independiente del movimiento de las partículas (convección), el agua presenta una gran
capacidad de termólisis, y por ende una baja aislación térmica.
También se observa que el experimento de aire y evaporación no presentan mayores
diferencias en sus variaciones, al igual que el cilindro blanco y negro; por lo que se concluye
que más que el movimiento de las partículas, la termólisis dependerá del medio, siendo la
aislación mínima en agua y evaporación, y siendo máxima en aire y el tipo de material, como
aluminio, por ejemplo (tabla en línea).
Bibliografía
Díaz, A. Á., Esteban, H. P., Hernández, T. D. L. C. M., Torres, J. Q., & Puzo, A. S. 2009.
Fisiología animal aplicada. Universidad de Antioquia.
Ruíz, G. 1987. Transferencia de calor, convección y gradiente altitudinal. Arch. Biol. Med.
Exp, 20, 85-88. [En Línea]
http://biologiachile.cl/biological_research/VOL20_1987/N1/BOZINOVIC_F_et_al.pdf
3/05/2018