Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Guerrero Mc Manus, Siobhan. «Reseña del libro: Derecho a la identidad de género de niñas, niños y adolescentes. Tribu-
nal Superior de Justicia y Consejo de la Judicatura de la Ciudad de México. México: 2016.»
Interdisciplina 5, n° 11 (enero–abril 2017): 167-172.
INTERdisciplina Volumen 5 | número 11 | enero–abril 2017
cialización del caso para el trámite de la No sorprenderá, por tanto, que investi-
nueva identidad (Regueiro 2016). gadoras como Claudia Castañeda (2015) se-
Esto, a manera de ejemplo, contrasta fuer- ñalen justamente el problema de una visión
temente con la situación enfrentada por una desarrollista (developmentalist) de la identi-
niña transgénero mexicana que, con tan solo 8 dad de género en la cual se asume que sólo
años, solicitó una nueva acta de nacimiento en en la edad adulta se puede conocer a cabali-
la cual se reflejara su Identidad de género y que dad la identidad de género que tenemos.
requirió llevar el caso al Tribunal Superior de Castañeda añade que esta visión desarrollis-
Justicia del Distrito Federal en el cual, final- ta no asume únicamente la incompetencia
2
mente, obtuvo un resultado favorable. epistémica del menor ante su propia identi-
Y es que, si las personas transgénero adul- dad de género sino que supone que esta úl-
tas enfrentamos numerosos retos, en el caso tima sólo termina de expresarse plenamente
de los menores de edad se conjugan facto- en la edad adulta y que, en momentos ante-
res que se suman a la ya de por sí poca com- riores de la vida, los roles de género o las
prensión existente sobre lo trans —como pautas de identificación exhibidos pueden
suele llamarse al espectro de identidades ser evanescentes o transitorias.
168 que engloban a las personas transexuales, De allí que ella señale la importancia de
transgénero y travestis—. Me refiero por su- reconocer la fluidez de la Identidad de gé-
RESEÑA
puesto al sesgo etarista, es decir, un sesgo nero a través de la vida y, por ende, la cen-
discriminatorio con base en la edad, que tralidad de generar espacios de exploración
suele suponer que los niños, las niñas y los del género que no requieran un presupues-
adolescentes son incapaces de pronunciarse to de inmovilidad y que, por tanto, permi-
sobre sus propios deseos y sentimientos y tan a las juventudes el habitar identidades
que todas sus decisiones deben ser comple- de género sin que ello implique un compro-
tamente tuteladas; en la situación que aquí miso de vida o una imposición terapéutica
discutimos, este sesgo suele traducirse en la no elegida y normalizadora.
creencia de que un menor no puede nunca Sea como fuere, admitamos que no es
estar seguro acerca de su identidad de géne- menor el reto que enfrentan los padres o tu-
ro o que ésta puede ser simplemente una tores de un niño o adolescente que les mani-
etapa que eventualmente superará —lo cual fiesta que su identidad de género no se co-
se traduce en términos prácticos en la inva- rresponde con la asignada. Ni tampoco es
lidación de su testimonio—. De allí que sue- menor el reto de aquellos padres o tutores
la requerirse no únicamente el consenti- que observan que sus hijos exhiben conduc-
miento de los padres sino la judicialización tas de inconformidad con el género asigna-
del proceso mismo y la elaboración de un do incluso si no verbalizan una identidad
peritaje por parte de sexólogos o psiquia- propiamente transgénero. Ambos casos im-
tras que avale el testimonio del menor. plican un reto para los padres, así como una
2 (http://www.informador.com.mx/mexico/2015/625616/6/nina-transgenero-recibira-nueva-
acta-de-nacimiento-en-el-df.htm). Consultada el 27 de marzo de 2017.
Volumen 5 | número 11 | enero–abril 2017 INTERdisciplina
serie de temores acerca del tipo de violen- ra de la infancia que traslada la agencia hacia
cias a las cuales se verán expuestos sus hi- peritos y expertos que buscan validar las vi-
jos —como el acoso escolar—, aunque cabe vencias del menor, dejando con ello de lado
señalar que hay un elemento fundamental la voz misma de aquellos menores. También
que los hace diferentes y que tendrá enor- cuestiona fuertemente esta tradición tutelar
mes consecuencias a la hora de trazar políti- que converge en ese mismo punto: el silen-
cas encaminadas a defender el interés del ciamiento de la voz de los menores.
menor, a saber, si este explícitamente testi- El libro está dividido en ocho capítulos.
monia el identificarse con un género distin- El primero de estos, escrito por la famosísi-
to al asignado al nacer. En el primer caso el ma antropóloga feminista mexicana Marta
testimonio implica la importancia de reco- Lamas, versa justamente sobre la identidad
nocer su voz, en el segundo, el proteger sin de género de las personas transexuales. La
patologizar, medicalizar o diagnosticar una doctora Lamas es una de las voces más auto-
conducta y sin obligar al menor a nada que rizadas en México en lo que a estudios de gé-
no exprese él o ella misma. nero se refiere y en los últimos años ha abor-
De allí que la publicación del libro De- dado justamente el tema de la transexualidad.
recho a la identidad de género de niñas, ni- En su ensayo, Lamas no sólo introduce a los 169
ños y adolescentes por parte del Tribunal lectores a una serie de conceptos que serán
RESEÑA
Superior de Justicia y Consejo de la Judica- fundamentales, como la distinción sexo/gé-
tura de la Ciudad de México represente un nero, la noción misma de identidad de géne-
hito en la política pública de este país hacia ro y sus bases psíquicas, entre otros. sino a
los menores trans. Este libro surge justa- la noción misma de transexualidad como una
mente de un seminario que organizaron las variación normal, no patológica y propia de
doctoras Eva Alcántara (uam–x) y Hortensia la diversidad sexogenérica humana en la cual
Moreno (cieg–unam), en octubre de 2015 y los sujetos simplemente se identifican psí-
que versó precisamente sobre la infancia quicamente con un género que no se corres-
trans desde una perspectiva basada en los ponde con el asignado al nacer sobre la lógi-
derechos humanos de los menores y no en ca del sexo biológico.
discursos terapéuticos interventivos. Lamas señala, asimismo, que los meno-
Lo novedoso del libro no es solamente res con lo que se ha venido a llamar incon-
el tema, de por sí pertinente, sino el aborda- formidad infantil de género no necesaria-
je del mismo. El eje central de la obra consis- mente crecerán para volverse adultos trans
te en poner por delante la idea de que el de- y que, de hecho, es un porcentaje menor el
recho a la identidad de género de los que sí lo hace. De ello, sin embargo, no se
menores es el marco bajo el cual debe llevar- sigue que debamos imponer prácticas nor-
se a cabo la discusión en torno a qué tipo de malizadoras o invalidar dichas experiencias
respuesta y apoyo se le darán a aquellos me- como transitorias. Al contrario, ya sea que
nores que explícitamente expresen una iden- los menores crezcan para asumir una iden-
tidad distinta a la asignada al nacer. Es decir, tidad trans o que no lo hagan, lo mejor en
el libro rompe con la tradición medicalizado- ambos casos es un proceso de acompaña-
INTERdisciplina Volumen 5 | número 11 | enero–abril 2017
miento amoroso y que le dé espacio al niño tes cinematográficos que incluyen a meno-
o niña para explorar los linderos del género. res trans, en especial las películas Ma vie en
Ahora bien, en aquellos casos de ado- rose y Tomboy. En estas obras vemos cómo
lescentes que sistemática y persistente- irrumpe en la cultura de masas el tema de la
mente se identifican con un género que no infancia trans por medio de relatos en los
es el asignado, Lamas defiende el derecho cuales se humanizan a estos menores y se
de los menores a acceder a hormonas que nos permite ver los retos que enfrentan en
retarden la pubertad ya que el efecto de es- la cotidianidad, retos que van desde el nom-
tas es reversible y no genera mayores pro- bre, la ropa, la forma de ser leídos o leídas
blemas en la vida del menor y puede, por el por los demás y, desde luego, la presión por
contrario, evitarle una adolescencia en la parte de los padres para que se alineen a las
cual vea su cuerpo desarrollarse hacia una normas de género imperantes. La importan-
corporalidad que no es la deseada. cia que tiene el cine, como podemos imagi-
El capítulo que le sigue, escrito por Su- narnos, es que moviliza estos relatos de tal
sana Sosenski, ofrece un análisis histórico suerte que hace visibles a las diversas in-
acerca de cómo hemos ido construyendo la fancias trans que quizás antes, bajo el pre-
170 niñez. No únicamente señala la relativa no- supuesto de la inocencia infantil —siempre
vedad de la adolescencia sino que pone el desexualizada—, habría conducido a conce-
RESEÑA
RESEÑA
rescatada. Y también en ambos casos, es im- una identidad de género cis,3 es decir, basa-
portante respetar la privacidad del menor y da en el sexo biológico. Para ello, la autora
no generar procesos de etiquetamiento, ofrece una serie de directrices que preten-
como el diagnóstico de una enfermedad den fomentar el ejercicio integral de los de-
mental, que puedan servir de base para pro- rechos humanos de estos menores y que
cesos discriminatorios futuros. esté orientado no sólo al presente sino a los
A estos textos, le siguen tres más escri- retos futuros, teniendo siempre en cuenta el
tos por María Vallarta, Analía Castañer y propio testimonio de estos menores.
Luis Alberto Muñoz López, respectivamen- En el caso del escrito de Muñoz López,
te, y que versan sobre el ámbito jurídico. El nos encontramos con un texto que reconoce
primero de estos muestra la existencia del que, de facto, en México el derecho a la
sesgo etarista —ya mencionado— en la le- identidad de género por parte de los meno-
gislación mexicana e internacional al hacer res no se consigue por medio de los mismos
ver que los procesos de cambio de identi- procedimientos que en los casos de los
dad están diseñados pensando fundamen- adultos. Y es que, a diferencia de los adul-
talmente en adultos. Sin embargo, esto ge- tos, en donde el trámite se lleva a cabo, al
nera una paradoja ya que tanto a nivel menos en la Ciudad de México, en una sede