tiene tres hijos ya casados, llega a consulta junto con su esposo. Refiere que hace ya 7 años ella empezó con un miedo intenso a las ratas, pero de un año para acá empezó a crecer más y más ese miedo. No puede ver ni siquiera una imagen de un ratón sin dejar de sentir la ansiedad que esto le causa. Pero todo esto comenzó cuando era niña, cuando iba a ponerse sus botas de lluvia y una rata salió de una de las botas, desde ese momento ella mantuvo en su mente que las ratas podían esconderse en donde sea. El terapeuta dio su diagnóstico que fue Zoofobia específica a los ratones y empezó con la terapia de exposición.